Capítulo 3:

Mentiras piadosas.

Hacía una semana que Chandler había dejado el departamento y había tratado de contactarse con sus amigos para tratar de explicar lo que había hecho y para disculparse sinceramente por haber lastimado a Mónica. Pero nadie quería escucharlo ni saber de él.

Esa noche Mónica cenó con Joey, quien no quería que su amiga tuviera que enfrentar el hecho de sentarse a la mesa sola.

Joey- Mon... no quiero que te sientas peor.. pero creo que tenés que saber algo.. Chandler me llamó hoy... realmente quiere que lo escuchemos.

Mónica- oh..

Joey- no te preocupes... le corté...

Mónica- oh... Joey... no tenés que hacer eso por mí... lo que nos pasó no tiene que ver con vos. Podés ser su amigo si querés... no me voy a enojar si alguno de ustedes vuelve a hablarle.

Joey- tal vez con el tiempo volvamos a ser amigos... pero por ahora estoy de tu lado.

Mónica le agarró la mano como agradecimiento. Luego sonó el teléfono y al terminar la conversación Mónica se sentó en el sillón con lágrimas en los ojos y Joey se sentó junto a ella.

Joey- ¿quién era?...

Mónica- eran los de la agencia de adopción... una chica de Ohio vio el expediente y nos eligió a Chandler y a mí para darnos su bebé.

Joey- este.. ¿cómo?

Mónica- bueno... yo no tuve el coraje para avisar en la agencia que me separé... simplemente no pude hacerlo y ahora... finalmente nos eligieron.. (llorando) sólo que ya no estamos juntos y nunca voy a tener un bebé.

Joey- (abrasándola) no te preocupes... tal vez te permitan adoptar sola... muchas mujeres lo hacen.

Mónica- si... pero tendría que hacer los tramites de nuevo... sería un enorme paso hacía atrás y si sólo Dios sabe si alguien va a querer darle su bebé a una divorciada pronto... pueden pasar años... (rompiendo en lagrimas y abrasando a Joey) no puedo esperar tanto tiempo.

Joey- hey... ¿qué tal si Chandler aceptara ir y fingir que siguen casados?... te debe ese favor... después de lo que te hizo.

Mónica- no sé... sería tan raro... no podría soportarlo...

Joey- oh.. entonces no se me ocurre ninguna idea...

Mónica- en la agencia de allá nunca conocieron a Chandler en persona, y nuestra foto no aparece en el expediente... por la confidencialidad.

Joey- (confundido) ¿Qué estás pensando?

Mónica- yo podría ir con otro hombre y decir que es Chandler.

Mónica y Joey estaban en la sala de la agencia de adopciones de Ohio esperando a que venga la madre biológica, a quien habían ido a buscar.

Joey- no puedo creer que me hallas convencido de hacer esto...

Mónica- mil gracias por aceptar cariño... estas haciendo algo muy bueno.

Joey- ¿entonces porque siento que debería ir preso?

Mónica- Shh... alli vienen..

Un hombre de la agencia de adopción entró con una joven embarazada.

Hombre de la agencia- Mónica, Chandler, ella es Erika...

Mónica- hola , mucho gusto en conocerte.

Erika- Lo mismo digo...

Hombre- los voy a dejar a solas para que hablen.

Erika- entonces ustedes son Mónica y Chandler

Joey- (nervioso) si, si, si, si... Chandler... ese es mi nombre... ¿Podría ESTAR mas emocionado por la adopción? (Mónica le da un codazo)

Erika- es que yo sólo los conozco por el expediente, el cual es muy impresionante, pero creí mejor conocerlos en persona.

Mónica- si.. bueno... acá estamos Mónica y Chandler Bing.

Erika- estoy nerviosa.. ustedes son una pareja tan linda que me siento intimidada.

Mónica- bueno.. no es para sentirse así...

Erika- ¿Bromea? ¡Chandler es un doctor casado con una reverenda!

Joey- eso no...

Mónica- callate doctor.. dejala hablar..

En el cuarto del hotel Mónica entra muy emocionada, seguida de un preocupado Joey.

Mónica- ¡¡me va a dar el bebé! ¡voy a tener un bebé!

Joey- Mónica... no podés seguir con esto y firmar los papeles... obviamente la agencia los confundió a vos y Chandler con otra pareja.

Mónica- Dios actúa de formas misteriosas.

Joey- ¡Dejá de hacerte la pastora!.. ya es bastante malo que piensen que estas casada... pero este error... es demasiado.. No podemos seguir mintiendo.

Mónica- pero... Joey...

Joey- ¡Mónica! Esta mujer va a entregar a su hijo... al menos se merece saber la verdad sobre la persona que lo va a tener.

Mónica- lo sé... pero.. aunque yo no sea lo que ella cree... nadie va a querer a ese bebé tanto como yo.

Joey- (abrazandola) lo sé... pero.. si le decís la verdad tal vez te quiera por quien sos.

Luego de decir absolutamente toda la verdad, Erika salió muy enojada y Mónica quedó destrozada. Joey la siguió hasta el pasillo de la agencia y trató de razonar con Erika.

Joey- Erika... escuchame...

Erika- ¡no! No quiero hablar con ninguno de ustedes... ¿cómo pudieron hacer esto?.

Joey- quiero que sepas algo... tenés razón en enojarte... es decir... viniste acá creyendo que ibas a conocer a una reverenda casada con un doctor y te encontraste con una chef recién separada de un publicista gay.

Erika- exacto... y es por eso que me voy a ir.

Joey- (sujetándole suavemente el brazo) no creo que debas irte... (soltándola) no hasta que me escuches... porque vos no la conocés realmente a Mónica y con lo poco que sabés de ella es lógico que no quieras darle a tu bebé, pero si supieras todo lo que yo sé de ella te darías cuenta de que nunca vas a conocer a nadie con mejores condiciones para criar un hijo.

Erika- seguro... ¿para que voy a dale mi bebé a una verdadera pastora casada con un doctor si puedo entregárselo a una divorciada mentirosa?

Joey- no entendés... El hecho de que mintiera te demuestra lo mucho que quiere un bebé y yo te aseguro que ella es totalmente capaz de ser madre, a pesar de no tener un marido. ¿Viste como hay parejas que no tienen ni idea de lo que es la paternidad hasta que les llega el bebé? Bueno.. Mónica ya es una madre... sin tener él bebé. Por favor... al menos considerá el darle tu bebé a ella.

Erika- (emocionada) pero ¿cómo puedo estar segura de que va a poder sóla con toda la responsabilidad?

Joey- vas a tener que confiar en mi palabra... te prometo que esa mujer nunca va a estar sola... con o sin marido yo siempre voy a estar a un pasillo de distancia.

Mónica estaba muy nerviosa en la sala donde habían estado antes, pensando en que podía hacer ahora y, luego, lloró muy frustrada porque estaba segura de que nunca iban a darle un bebé. Pero Joey entro en la sala muy contento.

Joey- ¿Todavía querés a ese bebé? porque si te llegás a arrepentir con lo que me costó convencerla... ¡te mato!.

Mónica se abalanzo hacía el y le dio un abrazo enorme y muchos besos en ambas mejillas.

Mónica- ¡Dios te bendiga Joey Trivianni!

Continuará...