"Guardián Eterno: la leyenda del pasado"
Por: Sekhmet Malfoy
Encantadora
de Dragones
Miembro de la Orden Severusiana
Miembro de la Orden
Siriusiana
Miembro de la Orden Draconiana
Miembro de la
Legión de Lupinas
Miembro de la Orden de Potter
Miembro
de la Orden de las Mortifagas
http/ después del desastroso comienzo del verano, las cosas parecen mejorar para Harry... pero ahora tendrá que enfrentar un nuevo desafió si quiere proteger a las personas que quiere, y con ello al mundo mágico...
Capitulo 1
Levanto la vista... ahí se encontraba su "familia"... si es que se le puede llamar familia a unas personas que solo te llaman fenómeno y te golpean sin razón aparente... su tío aun era sostenido por un hombre que no parecía musculoso y aun así era capaz de soportar sin esfuerzo alguno a su tío... su tía yacía en el piso sin vida... y su primo estaba a uno palmos suyos... asustado, tan asustado como él o quizá mas... ¿quién era ese hombre? Se preguntaba mientras lo observaba... no era humano y eso era un hecho comprobado... lo había visto moverse a velocidad sobrehumana para después abalanzarse sobre su tía y posteriormente sobre su tío para alimentarse con su sangre era obvio... ¡¡era un vampiro!...
Pensó las clases de Defensa Contra las Artes Oscuras (DCAO) haciendo un esfuerzo por recordar la forma de defenderse de él... pero sin su varita eso seria prácticamente imposible... su tío la había guardado junto con su baúl y su escoba al comenzar el verano y aun teniéndola a la mano no lograría recordar algún hechizo para ahuyentar al vampiro... ¿un enfrentamiento cuerpo a cuerpo?... no, descarto de inmediato la posibilidad, el hombre... no el vampiro, no solo tenia agilidad, sino también una gran fuerza que haría le imposible defenderse, a pesar de haber crecido bastante durante el curso anterior en el colegio, además de haber aumentado su musculatura gracias a los entrenamientos de quiditch no seria capaz de enfrentarlo y lo sabia... estaba mortalmente conciente de que no tenia posibilidad alguna de defenderse...
Vio a la criatura soltar el cuerpo inerte de su tío y girarse para mirar a su primo, el cual temblaba incontrolablemente, antes de que posara sus ojos en él, sintió un escalofrió cuando sus irises verde esmeralda se cruzaron con unos castaño oscuros que parecían atravesar no solo su mirada sino su alma, entonces se movió hasta alcanzar al chico regordete junto a él... lo tomo del cuello y lo levanto ante la mirada aterrorizada del chico moreno, acerco su cabeza hacia el cuello recién descubierto y mostrando un par de afilados colmillos los clavo en el lugar indicado provocando que un ligero rastro de sangre resbalara entre los pliegues de la camisa azul pálido del chico...
Harry seguía sin apartar la vista de la escena, temeroso de que al darle la espalda e intentar escapar lo acorralara completamente...
- "¡¡¡Diablos! ¿cómo salgo de aquí, cuando no necesito ayuda se la pasan sobreprotegiéndome y ahora que los necesito no se aparecen..." – pensó irremediablemente el chico justo en el momento en que el ser dejaba caer el cuerpo de su primo al piso, provocando un fuerte y hueco golpe - ¡¡¡genial, por lo menos tendré una muerte menos dolorosa que si me enfrentara a Voldemort – murmuro antes de sentir a la criatura sobre él.
Noto como si algo le hubiera rasgado la piel de su cuello con un movimiento muy rápido antes de sentir un liquido caliente resbalar por su cuello, además de una lengua tratando de evitar desperdiciar el vital liquido...
La sensación de estar flotando comenzó a invadirlo, trato de alejarse del ser que lo aprisionaba en un estrecho abrazo, pero los fuertes brazos no cedieron ni un centímetro, su cuerpo respondía cada vez menos y comenzaba a penetrarlo un deseo de dormir muy profundo... justo cuando sus ojos comenzaba a cerrarse noto como algo, o mejor dicho, alguien alejaba al vampiro de su cuerpo y se dejo caer sobre la cerámica que adornaba el piso de la habitación, trato de mantenerse conciente para conocer a su salvador pero el cansancio lo venció, antes de sumirse en su tan ansiado letargo pudo observar un par de pupilas amatista mirarlo con... ¿preocupación?...
- ¿saben algo del chico? – pregunto preocupado un hombre barbado detrás del escritorio de la habitación.
- Nada... parece como si se lo hubiera tragado la tierra – contesto otro, que mostraba diversas marcas y cicatrices en el cuerpo, además de que uno de sus ojos giraba de forma extraña.
- Moody tiene razón, solo encontramos a sus tíos y a su primo en la casa... no se veía por ningún lado – corroboró una chica con el cabello de un color rosa pálido
- además las cenizas cerca del cuerpo de su primo así como las marcas que los cuerpo presentan nos hacen pensar que fueron atacados por vampiros, o por lo menos uno de ellos – menciono un hombre moreno, que por las vestimentas que portaba debía ser un auror.
- ¿son las únicas pruebas que encontraron Kinsgley? – pregunto el anciano director al auror, quien solo asintió, antes de volverse hacia un hombre pálido y de ojos extremadamente negros - Severus, ¿tienes noticias?
- No Albus, quien tú sabes ni siquiera esta al tanto de la desaparición del chico – respondió el aludido.
- y debemos encontrarlo antes de que lo haga, se dividirán en grupos de búsqueda para no llamar la atención – dijo nuevamente el anciano – Severus, no necesito decirte que me mantengas informado de cualquier cosa que ocurra durante las reuniones con Voldemort – el profesor de pociones asintió ignorando el estremecimiento del resto del grupo ante la mención del mago mas temido en la ultimas décadas.
Un rayo de sol que se filtraba por un extremo de las grandes cortinas que cubrían los ventanales de la habitación le despertó al darle justo en los ojos, aun estaba muy cansado y aturdido, no recordaba muy bien lo ocurrido hace algunas horas... se acomodo en la cama, un momento... ¿desde cuando su habitación tenia grandes ventanales y una cama tan cómoda?... se enderezo rápidamente provocando un ligero mareo... ¿dónde se encontraba, obviamente no era Privet Drive, ¿quién lo había llevado hasta allí?
De pronto su mente se aclaro, recordó todo lo ocurrido antes de caer inconciente, sus tíos... Dudley... el vampiro... la sangre escurriendo por su cuello, su vida escapando de su cuerpo... un estremecimiento lo recorrió desde los pies hasta la cabeza... llevo instintivamente su mano a su cuello... nada... no había nada... ¿había estado teniendo pesadillas?... no... eso no explicaría donde se encontraba.
Se levanto de la cama y miro evaluadoramente la recamara, la cama era de dos plazas con doseles de color azul tan oscuro que parecían negras, las cuales hacían juego con el juego de sabanas de la elegante cama, tenia dos mesas de noche, cada una con una fina lámpara en ellas, miro a sus espaldas y observo dos puertas, se dirigió a la primera y al abrirla se quedo sin habla al descubrir un hermoso cuarto de baño, los acabados eran tan finos que el baño de los prefectos palidecía a su lado, dejo su excursión en el baño para dirigirse a la otra puerta, en cuanto la abrió se sorprendió al encontrar ropa de todos los tipos y gustos que podría haber imaginado, desde ropa muggle hasta las mas finas túnicas que jamás había visto, "seguro ni Malfoy ah visto algo así", pensó para si, toda parecía ser de su talla... después de recuperarse del shock por la ropa notó una mesa cerca del centro de la habitación junto a un cómodo sillón que hacia juego con el resto del lugar, se acerco y pudo notar que había una nota en ella.
- ¿de quien será? – preguntó para si mismo mientras trataba de recordar... – recuerdo haber visto unos ojos violeta antes de caer y perder la conciencia, después de que me atacó el vampiro, supongo que será de esa persona - extendió la nota para comenzar a leerla, lo recibió una letra que parecía escrita con gran delicadeza y con una escritura muy bien cuidada para su gusto.
"Pequeño:
Puedes pasear a tu gusto por toda la casa, hay ropa que puedes usar en el armario estoy seguro que te quedara bien, en la cocina podrás encontrar a Yansie (mi elfina) ella te preparara algo para desayunar y si se lo pides te mostrara toda la casa.
No te podré ver o mejor dicho conocer hasta esta noche, pero espero que te sientas como en tu casa, si quieres leer el estudio esta en el primer piso se que encontraras muy interesante mi colección de libros y si lo que te apetece es diversión muggle, la televisión esta en la sala que se encuentra en el segundo piso.
Espero volver temprano para atenderte pequeño...
Sire..."
- ¿Sire? ¿será la persona que me ayudo?... bueno si me esta permitiendo quedarme y explorar su casa de seguro lo es... – se dijo pensativamente después devolver a leer la nota – creo que veré que me pongo...
Se ducho antes de vestirse con un par de jeans color negro que le quedaban como guante y una camiseta verde oscuro que hacia resaltar sus ojos, junto con una túnica abierta de color negra, que hacia juego con los pantalones, después se dirigió hacia la planta baja buscando la cocina...
Después de dar un par de vueltas en el primer piso sin haber encontrado la cocina se pregunto en voz alta
- ¿dónde diablos esta la cocina, y me perdí un par de... – no tuvo tiempo de terminar la frase pues fue cortado al oír un plop a sus espaldas y girarse para encontrar a un elfo domestico mirándolo. Aun sorprendido le hablo – tu debes ser Yansie, ¿cierto?
La elfina se inclino asintiendo.
- así es joven señor... si me permite le escoltare al comedor, el amo dejo instrucciones para que se le atendiera... si me acompaña, es por aquí...
El joven siguió a la elfina hasta una pasillo por el que antes no había pasado, esta abrió una gran puerta de madera finamente tallada que parecía representar una gran batalla, la contemplo por unos instantes antes de continuar su camino hacia el comedor, donde la elfina se encargo de complacer a su estomago con deliciosos platillos.
Tal y como la nota encontrada en la habitación decía, Harry decidió pedirle a la elfina que le mostrara la casa.
Su vista se deleito visitando los enorme jardines adornados por esplendidas fuentes, la sala de música que contaba con hermosos instrumentos, la sala de juegos que tenia variedad de cosas, desde muñecos de felpa hasta videojuegos, si le elfina no le hubiese asegurado que en toda la casa, o mejor dicho mansión no habitaba ningún niño desde hacia siglos habría pensado que en cualquier momento se cruzaría con uno.
La elfina le mostró la biblioteca donde Harry decidió que se quedaría un rato, era tan grande que superaba con creces la biblioteca del colegio, comenzó a revisar los títulos de los libros, algunos parecían tan antiguos que supuso que si los tomara de manera descuidada terminarían hechos jirones entre sus dedos, había otros que se veían en mejores condiciones, no solo había libros mágicos, también descubrió diversos títulos que parecían de origen muggle y se pregunto una vez mas que clase de mago era quien lo había recogido, por que era seguro que un mago lo había acogido en su casa, las túnicas en sus habitaciones, la elfina domestica encargada de la mansión, los títulos sobre pociones, artes oscuras, y transformaciones en el estudio, así como el juego de snap explosivo y el ajedrez magico lo delataban.
Pasó todo el día en ese lugar, ni siquiera se dio cuenta cuando el cielo se oscureció en los grandes ventanales de la biblioteca, había encontrado un libro sobre artes oscuras que le pareció muy interesante.
- Vaya, no se por que todos dicen que las artes oscuras solo son usadas por magos tenebrosos, lo único que entiendo es que son muy poderosas y dependiendo de la forma en que son usadas - dijo pensativamente.
- Cierto, los magos piensan de esa forma por que no se dan cuenta que no existe la magia blanca o la magia negra – dijo una voz profunda a sus espaldas, haciéndolo sobresaltarse y girarse intempestivamente, el hombre sonrió tratando de disculparse –, lo lamento no quise interrumpir tus meditaciones.
- No se disculpe, no hay ningún problema, después de todo es su casa – respondió mucho mas calmado tomando confianza al observar al joven frente a el.
El joven era mucho mas alto que él, de cabello negro muy oscuro, que le llegaba hasta la cadera, atado a la mitad de la espalda, tenia puesta ropa muggle muy elegante, como la que había encontrado en su armario, pero lo que mas le llamo la atención fueron sus ojos, de un violeta muy intenso, parecían dos amatistas brillando, reflejaban una gran calidez y dulzura que le hicieron sentir que podía confiar plenamente en él.
- Veo que seguiste mi consejo, - dijo señalando el lugar y sonriendo nuevamente –, sabia que te agradaría...
Harry le sonrió de vuelta.
- Es hermosa, bueno en realidad toda la casa es bellísima.
- Yansie me informo que estabas aquí, creí correcto presentarme primero, pero podemos conversar en el comedor para que cenes...
- ¿cenar? – preguntó sorprendido, solo entonces decidió mirar por la ventana, dándose cuenta de cuan tarde era – "pero por supuesto, la nota dijo que vendría por la noche, se me paso el tiempo volando"
- Si, supongo que tendrás hambre – sonrió nuevamente al notar que el chico se sobresaltaba otra vez al haberse perdido en sus pensamientos por un momento
- Si, lo siento, es solo que no me había dado cuenta de la hora – respondió ligeramente sonrojado por su despiste.
- Vamos, te mostrare el camino, aunque estoy seguro de que ya lo conoces
- Si, Yansie fue muy amable y me mostró toda la casa.
Era extraño, después de haber pasado los últimos días del curso en el colegio no le agradaba estar en compañía humana, pero ahora se sentía muy tranquilo y a gusto hablando con un completo desconocido.
Llegaron al comedor donde ya estaba servida la cena, fue entonces que el dueño de la casa retomo la conversación.
- Aun no me eh presentado, - extendiendo su mano hacia Harry le dijo –. Mi nombre es Sire Pierce, pero puedes llamarme Sire, es mucho mas cómodo.
Harry tomo su mano contestando el saludo y dijo:
- Mucho gusto, mi nombre es Harry Potter, - entonces soltó su mano y regreso a su posición anterior – me... me gustaría agradecerle su hospitalidad, fue muy amable al ayudarme y recibirme en su casa.
Sire sonrió calidamente y le contesto.
-No te preocupes es para mi un placer recibirte aquí, y... – haciendo una pequeña pausa dijo señalando su frente – además me imagine quien eras...
Harry se movió ligeramente inquieto en la silla.
- Oh, lo lamento, no quise incomodarte, aunque deberíamos hablar sobre lo que paso en otro lugar, si no te molesta claro, seguramente tendrás algunas preguntas que hacerme... – comento a lo que el joven oji-verde solo asintió.
Terminaron la cena, aunque a Harry le pareció que su anfitrión no comió, pero no quiso ser descortés y se guardo sus comentarios, lo siguió hacia el estudio, donde se sentaron uno frente al otro en un par de sillones muy cómodos.
- Por que no comienzas tú, te será más cómodo.
- Si, - y con un poco de timidez hizo la primera pregunta que tenia atravesada en la mente desde que se levanto – ¿cómo... cómo fue que me encontró, nadie nos escucho gritar durante el tiempo que duro el ataque...
- Tengo muy buen oído, aunque a decir verdad fue el olor a sangre lo que me llamo... – hizo una pausa al observar el desconcierto en la cara del joven y prosiguió, si el chico iba a quedarse a su cuidado debía saber la verdad – verás Harry yo no soy un mago, ni siquiera un muggle... – ante tal afirmación Harry se puso pálido
– ¿quién o qué eres? – pregunto lívido, no sabiendo si realmente quería saber la respuesta... seguro que no le agradaría.
-soy un vampiro...
TBC...
