Capitulo Quinto.
Amar al ángel-
Ya volví-Dijo Anna cargando el botiquín de primeros auxilios.
Me alegra porque aquí estoy desangrando a muerte-Dijo Hao con cierto sarcasmo.
Bueno no es mi culpa que tu estuvieras en el bosque.-Dijo Anna tranquilamente mientras se sentaba detrás de Hao para curarle la espalda.
Solo ayúdame ¿quieres?
No, no quiero. Pero no quiero ser responsable de tu muerte.
Con esto Anna tomó un trapo con agua tibia y se dispuso a limpiar la espalda del joven que se retorcía del dolor. Anna lo miraba sorprendida, se le hacía tonto el hecho de que un ángel caído se pusiera así solo por algo tan sencillo.
Para ti es fácil decirlo puesto que tú no estas herida.-Le había dicho Hao cuando ella le había comentado eso.
Para ser un hombre eres demasiado frágil.
¿Qué dices? Owww...
¿Lo ves?
Esto me ha pasado ya varías veces. Me sorprende que no me haya acostumbrado ya.
¿Quieres decir que esto ya te había pasado?
Algo así...solo que en diferentes circunstancias.
Opacho me había dicho algo sobre eso.
¿Qué mas te dijo?
Que habías sido condenado por proteger a alguien.
Creo que alguien hablo de mas, y alguien pregunto de mas.
Perdona. No tenía derecho, pero tenía que saber sobre ti...para poder ayudarte.
Anna luego empezó a ponerle las vendas alrededor del pecho. Hao solo observaba como las manos de la chica se movían hábilmente alrededor de su pecho.
Gracias-Dijo Hao cuando vio que Anna ya había terminado.-Creo que nunca te he agradecido todo lo que has hecho por mí.
Déjalo así.-Podía pretender, pero dentro Anna estaba conmovida, nunca nadie en seis años le había agradecido nada.
Será mejor que te vayas a dormir ya es tarde.
Si..bueno hasta mañana.
Anna entro a su habitación, no dejaba de pensar en el castaño, en lo que le había dicho, su vida había cambiado radicalmente, pero ella poco a poco empezaba a asimilar el cambio...lentamente...
Pasaron los minutos, luego las horas y pronto el tiempo que Hao había estado en Funbarí se había transformado en días, semanas y posteriormente en meses. Hao ya llevaba dos meses con Anna.
Para el joven Yoh Asakura esos dos meses se habían vuelto en dos meses de amargura y dolor. Le partía el corazón ver todos los días a su Anna abriendo la librería en compañía de ese joven. De Hao como se hacía llamar. Odiaba que en tan solo dos meses Hao pudiera hablar con Anna el doble de lo que él había hablado en toda su vida con ella.
Desde la cocina, podía ver como Anna y Hao se sentaban uno frente del otro y se ponían hablar largas horas, de vez en cuando, él la hacía reír.
Se veía tan bella sonriendo, pero siempre creyó que el causante de su alegría sería él y no Hao...
¿Cómo encontrar su corazón?
Por su parte Anna estaba encontrándose con emociones revueltas. Todo este tiempo en el que Hao había estado con ella se había ido rápido. Y poco a poco empezó a aceptar las verdades que el joven encerraba, además de aceptar que era un tanto guapo.
Hoy estaba vistiendo unos pantalones sueltos color kakhi, una playera blanca y una camisa verde encima de esa, mientras que su cabello estaba atado en una cola baja.
Anna se había enamorado de él. Ella ya lo había aceptado. Se enamoro de él, el día que lo curo, mas no lo acepto al principio, pues era fácil confundirse, el joven había llegado a cautivar su corazón de una manera un tanto impredecible y ella lo apreciaba de una manera tan sincera que era fácil confundirlo con el amor. De alguna forma el ángel desgraciado le había mostrado el mundo realista, cosa que ella admiraba de él, y al principio lo había odiado tanto que él ocupo todos sus pensamientos hasta que la idea se hizo tan acogedora en su mente que termino quedándose en la joven.
Al paso de los días se fue dando cuenta de ello. Primero argumentaba que era solo confianza...luego dijo que era amistad, pero conforme pasaban los días e iba aprendiendo mas de Hao y de su acompañante Opacho, Anna se dio cuenta que si estaba interesada por él y mucho.
¿Qué si alguna vez lo externo?
No.
Era algo imposible, en estos dos meses juntos Hao nunca dio razón o pista que le dijese a Anna que él también sentía lo mismo por ella. Anna había sufrido tanto que no quiso echarse un problema mas.
Pero ella de verdad lo amaba, y el hecho de que su amor no fuese correspondido le partía el alma, por fin pudo entender a la joven Tamao Tamamura que sufría todos los días en silencio por el tonto de Yoh Asakura. Anna se sintió mal en ese momento, Asakura no le correspondía a Tamao porque él la amaba a ella. Y ella no podía corresponderle porque estaba enamorada de Hao...
¿En que clase de triangulo-cuadrado amoroso se había envuelto?
Eso no importaba, Yoh podía conseguirse otro amor si así gustaba, Tamao también, pero ella, era otra historia, rara vez en su vida había sentido algo tan profundo por una persona. Como lo que sentía por el.
Ok, siguiente pregunta ¿Qué odias mas en el mundo?
Mas que odiar algo odio a alguien...supongo que por eso estoy aquí. Pero dime tu Anna ¿qué odias mas en este mundo?
Hoy Anna había tenido la fabulosa idea de hacer una conversación a base de preguntas-respuestas. Rara vez hacían eso, pero para Anna era una forma de conocer mejor a su interlocutor, claro que cuando propuso su no muy normal idea se sonrojo a mas no poder, razón por la cual Hao posiblemente hubiese aceptado tan rara propuesta primero empezaron con preguntas fáciles: color favorito, comida favorita, etcétera, pero poco a poco sus preguntas se fueron profundizando...aunque a simple vista no lo parezca
Odio la lluvia.
Creí que todo mundo amaba la lluvia.
Bueno pues yo no. Me trae malos recuerdos.
Si te hace sentir mejor. Yo también odio la lluvia.
¿Por qué deberías?-Dijo Anna no estando muy segura del motivo.
Bueno no me permite realizar uno que otro talento especial...
¿Cómo cual?
Como este-Dijo Hao mientras chasqueaba los dedos.
Al instante una pequeña llama apareció en la palma de la mano de Hao. Anna lo miraba sorprendida. Decidió tocar la flama para comprobar si era verdadera. La llama era cálida mas no quemaba. Hao volvió a chasquear los dedos y la llama desapareció...
Tú...tú puedes...
Controlar el fuego, si es cierto.
¿Cómo puedes hacer eso?
Un viejo talento de mi vida pasada.
Me hubieras sido de mucha ayuda hace seis años- El semblante de Anna se entristeció de un momento a otro.
¿No te gusta el fuego?
Solía gustarme, pero termine quemándome.
Pues te acabo de demostrar que no todo el fuego quema.
Supongo que tienes razón.-Dijo Anna un poco mas esperanzada mientras esperaba la siguiente pregunta.
¿A que le tienes miedo?
A que el pasado me alcance y yo no este lista para recibirlo...¿y tu?
Al infierno.
No entiendo porque...controlas el fuego serías muy feliz ahí.
Jajaja-Hao rió un poco, para luego ver a Anna a los ojos.-Se ve que tienes una visión muy errónea del infierno, el infierno no es con llamas y un tipo de rojo con cuernos. Es mas bien un lugar frío y solitario donde tus miedos te persiguen por toda la eternidad.
¿Has estado ahí?
Si...pero tuvieron compasión de mi. Pero lo arruine todo y termine en la tierra.
¿Estas vivo?
No...
¿Estas muerto?
No...digamos que soy algo que esta en medio.
¿Aun tienes la capacidad de amar? Anna se detuvo al darse cuenta del tipo de pregunta que había hecho Estúpida...ahora te descubrirá pensó.
Como Opacho te dijo, mi alma esta llena de rencor, por eso no creo tener ya la capacidad de amar. Por eso hagas lo que hagas no te enamores de mi.
Te lo juro que no.
Bien. De todas maneras no creo que alguien llegase a estar enamorada de mi.
Yo también lo creo.
Hao se levanto un momento y se dirigió a los estantes, mientras que Anna se quedaba en la barra de madera viendo el libro de ventas, de pronto vio dos pequeñas gotas correr la tinta de su libreta. Eran sus propias lagrimas.
¿Por qué sufría por Hao? Por un insensible que ya había estado en el infierno...¿por qué no se pudo haber enamorado de alguien bueno y cariñoso como Yoh¿Por qué tuvo que ser él¿Por qué él?
Anna vio como Hao se acercaba a ella, por lo que rápidamente seco sus lagrimas y fingió estar haciendo cuentas.
Hey tú admirador ya viene.
Anna alzo la mirada y vio a Yoh acercarse al edificio, suspiro de mal humor. Era lo que menos necesitaba.
Buenas tardes Anna, Hao- este ultimo nombre Yoh lo dijo con cierto aire despectivo.
Buenas tardes- dijo Hao mientras se alejaba nuevamente a los estantes.
¿Qué se te ofrece Asakura?-Pregunto Anna no mirándolo a los ojos.
Te invito a cenar hoy.-Dijo Yoh sonriendo.
¿Qué?-Anna miro sorprendida a Yoh. Esperaba que le dijera todo menos eso.
¿Qué dices?- Yoh la miraba ansioso.
Pues la verdad tengo mucho trabajo, alguien tiene que hacer se cargo de todo esto y..-Anna no era muy buena buscando excusas.
¿Vas a salir Anna?-Dijo Hao regresando de los estantes...
No pudiste haber sido mas oportuno Hao..aah! pensó Anna furiosamente mientras veía a Hao con fuego en los ojos.
Veras le estaba diciendo a Asakura que no saldré porque aquí tengo mucho trabajo.-Anna solo esperaba que Hao captara la indirecta que ella le estaba dando..pero al parecer fue lo contrario.
Ah pues por eso no te preocupes. Yo me puedo quedar en la librería si gustas.-Hao sonrió ampliamente al ver la mirada que Anna le lanzaba.
Entonces paso por ti a las 7:00 p.m Anna- Yoh se había ido, cuando Anna había intentado detenerlo, ni siquiera había escuchado a Anna aceptar, cosa que ella obviamente no hubiera hecho.
Los jóvenes se quedaron en silencio, Hao sonriendo mientras veía a Anna, Anna solo miraba la puerta...
Cinco...cuatro...tres..dos... Hao se preparo mentalmente para lo que venía...
Uno..
¿Por qué demonios hiciste eso?
¿Qué?
No te hagas el tonto conmigo Hao, sabes de lo que hablo!
Vamos, Anna, sal a divertirte, convive un rato con la gente, no seas como yo.
Hao...
El resto de la tarde paso relativamente tranquila. Anna se fue a las cinco de la tarde a su casa dispuesta a arreglarse (aunque vale la pena agregar que solo hizo porque Hao se lo pidió y aun así iba de mala gana) además de eso Hao le había pedido que llamará a Opacho para que fuese a acompañarlo mientras estaba en la librería cosa a la que Anna accedió y se fue no sin antes injuriar a Hao a mas no poder.
Veinte minutos después Opacho fue con Hao y los dos se pusieron a hablar sobre muchas cosas, sobre todo cosas del pasado, cosas que habían ocurrido hace mucho.
A las seis con cincuenta Anna se apareció en la librería donde había quedado de verse con Yoh. Vestía una falda negra que le llegaba a la rodilla ondulada hasta el final, también usaba una blusa vaporosa color azul pálido y zapatillas negras.
¿Qué tal Anna lista para tu cita?
Hao...vas a sufrir.
Pásatela bien.- Hao sonrió cosa que hizo enfadar mas a Anna.
Yoh llego corriendo a donde Anna estaba, luego se fueron los dos.
Hao los observo hasta que estuvieron lejos de vista...Opacho solo pudo decir..
¿Esta bien señor Hao?...
Hola a todos, antes que nada mil disculpas por haber tardado como una eternidad, pero he estado ocupada a mas no poder (y para mi capitulo tan chafa que traje)
Como pueden darse cuenta metí algo del fuego en la vida de Hao¿por qué? Porque según yo le da mas personalidad y puede que me sirva mas adelante para la historia.
En fin me alegra muchísimo volver a escribir, realmente no me fui por mucho (bueno puede que si) como extrañe escribí.
Ahora que volví me encuentro con la sorpresa de que cambiaron los ratings...yo me quede así como "Ah shin...¿qué pex con esto?" La verdad no me acostumbro nadita al nuevo rating y cada vez que lo veo siento que m hablan de pilas con eso de K+ siento que quiere decir pilas alcalinas o algo así...
En fin perdón por el breviario cultural, pero ando mas que confundida.
Raven Solitude