"Guardián Eterno: la leyenda del pasado"
Por: Sekhmet Malfoy
Encantadora
de Dragones
Miembro de la Orden Severusiana
Miembro de la Orden
Siriusiana
Miembro de la Orden Draconiana
Miembro de la
Legión de Lupinas
Miembro de la Orden de Potter
Miembro
de la Orden de las Mortifagas
http/ después del desastroso comienzo del verano, las cosas parecen mejorar para Harry... pero ahora tendrá que enfrentar un nuevo desafió si quiere proteger a las personas que quiere, y con ello al mundo mágico...
Capitulo 8
Ahí, en el marco de la puerta se encontraba un contrariado Harry Potter que observaba como su padrino y su amo... digo profesor se lanzaban miradas fulminantes, mientras un sorprendido hombre de ojos aceituna que lo acompañaba trataba de comprender la situación.
- Será una larga noche... – sentenció Sire justo cuando ambos hombres de cabello negro se preparaban para iniciar una pelea verbal... y quien sabe tal vez algo mas que simples insultos…
Harry se adelanto unos cuantos pasos para quedar entre los hombres que discutían acaloradamente sin ser notado...
- ¿cómo te atreves a venir aquí Snivellus? – pregunto con aire ofendido el animago tomando una posición que indicaba que saltaría sobre él en cualquier momento.
- ¡¡Eso es algo que no le importa a un prófugo! – respondió a su vez el ex mortifago preparado para evitar los golpes.
Estaban por iniciar su pelea cuando sintieron una poderosa aura envolviéndolos que los dejo inmóviles segundos después.
- ¡¡YA BASTA! ¿ACASO NINGUNO DE LOS DOS ES CAPAZ DE DEJAR UN MOMENTO DE LADO ESA ANTIPATIA CONTRA EL OTRO? – la voz del joven se dejo escuchar como acero, dura y fría, sorprendiendo a todos los presentes que observaban la escena, algunos divertidos, como en el caso de Sire y Seth que encontraban bastante cómica la escena, no todos los días tienes la oportunidad de ver a un adolescente poner en su lugar a un par de hombres adultos... y otros preocupados y asustados, como Remus, Sirius y Snape, suspiro para que después su voz se suavizara ligeramente – Realmente no lo entiendo, ¿realmente no pueden dejar de lado toda esa animosidad que tienen desde el colegio?
- Harry no es mi culpa, Sniv no tiene nada que hacer aqu... – Sirius fue cortado nuevamente por el chico.
- Él esta aquí porque yo lo traje, y cuenta con el permiso de Sire para quedarse, que por si no lo has notado es el dueño de la casa, - viendo como su padrino se preparaba para debatir el punto hizo un ademán para indicar que se mantuviera en silencio – hablaremos mas tarde sobre eso - se giro para enfrentar a su profesor –, lamento todo esto profesor, quizás no fue tan buena idea traerlo aquí...
- Quizá no fue lo mas prudente, pero lo hizo señor Potter... y se lo agradezco... me salvo la vida arriesgando la suya - dijo ante la confundida mirada de sus ex compañeros del colegio –, sin embargo debo hacerle notar que estar en esta posición es realmente incomodo, así que le agradecería que quitara el hechizo por mi...
Pudieron escuchar ligeras risas provenientes de los dos inmortales presentes, algo que no le causo ninguna gracia a los hombres petrificados, por increíble que pareciera estaban de acuerdo en algo y eso era algo que nunca de los nuncas admitirían... con un ligero movimiento de muñeca el chico los libero tratando de ocultar una sonrisa.
- Ya que están nuevamente tranquilos creo que deberíamos explicar la presencia de ambos aquí – intervino Sire ante el silencio que se había instalado en la habitación.
- Me uno a la propuesta, realmente me gustaría saberlo... "esto se esta poniendo interesante... jijijijijijiji" – corroboro Seth sonriendo mientras tomaba asiento entre Sire y Severus, y siendo imitado por el resto.
- Estoy de acuerdo, me gustaría mucho saber que hace el labrador aquí si se suponía que estaba tras el velo... nadie ha salido de ahí hasta ahora – aprobó el hombre de ojos negros, el que no le cayera bien el animago no quería decir que se quedaría con la duda.
Por un lado Harry y Remus rodaron los ojos ante el apelativo canino que uso Snape para referirse al animago, Sirius quiso saltarle encima para callarlo, pero fue retenido por una severa mirada de su ahijado y el par de vampiros... aunque estos hacían todo lo posible por no tirarse en el piso a reír. Esa seria una linda noche de conversaciones, una linda y larga noche... (bueno tomando en cuenta de que todo mundo se sabe el cuento no me meteré en detalles... Ev: admítelo te da flojera explicarlos... ¬¬ de acuerdo no quiero explicarlo, pero tomando en cuenta que están leyendo esto es que siguen la historia y saben que ah pasado... Ev: debo admitir que tienes razón... aunque no me agrade)
Dos horas después todo mundo se había enterado de la historia... claro dejando de lado la preocupación personal del chico por su profesor, el que a Snape no le interesaba del todo que hacia el animago ahí y que realmente a Sirius no le interesaba en lo mas mínimo Snape, aun así todos se sorprendieron por los progresos del chico, si bien los mortales no conocían completamente lo referente a sus entrenamientos, excepto aquellos en los que participaban, como lucha cuerpo a cuerpo y con armas, se sorprendieron, en especial el profesor de pociones, el realmente se acababa de enterar, y no pudo resistirse a preguntar...
- ¿Seria posible conversar con aquellos que le enseñan pociones, seria muy interesante conocer sus puntos de vista.
- Tendría que consultarlo directamente con ellos, pero podría haber alguna posibilidad – le respondió Seth, el cual se preparaba para salir en ese momento.
- Agradecería que lo hiciera – admitió el hombre a lo cual el otro asintió.
En el otro lado de la habitación se encontraba cierto animago murmurando cosas ininteligibles que cualquier persona decente nunca repetiría mientras su pareja trataba de hacerlo entrar el razón.
- Pady, vamos, no puedes estar así toda la noche, en especial con Harry, - lo miro intensamente a los ojos – sabes que hizo lo que considero mejor... para ambos.
- Lo se pero...
- ¿Pero? – lo animo a continuar
- Jamás imagine que se pondría de parte de Sniv – dijo finalmente haciendo un gracioso puchero
- Vamos, no te pongas así... – y comenzó a tratar de convencerlo...
Mientras esto ocurría Sire trataba de hablar con Harry, quien no separaba su mirada de cierto personaje de cabello y ojos negros.
- ¿Cómo fue todo? – interrogo el vampiro
- Bien, aunque estoy agotado – suspiro el chico separando la vista de su profesor para fijarla en su interlocutor… – estoy realmente muerto...
- Pues para ser un muerto te ves sumamente bien – respondió riendo el otro y lanzándole una mirada apreciativa que no paso desapercibida para un par de morenos presentes y un vampiro que no podía encontrar más divertida la situación.
- "vaya, vaya... quien lo diría, un padrino protector y... un profesor celoso..." – sonrió al darse cuenta que el otro vampiro también se había dado cuenta – "¿Qué se supone que tramas?" – le pregunto alzando una ceja graciosamente.
- "¿Hacer? ¿qué te hace pensar que lo hago propósito?" – dijo sin responderle.
- "¿Además de esa mirada que tienes y que sin duda se parece a la del 'dúo del terror'?" – dijo Seth refiriéndose a Laurent y a Beckett quienes se habían ganado dicho titulo durante una salida en la cual se había visto envuelto el concilio completo en grandes enredos, bromas y situaciones realmente embarazosas que dicho de paso a nadie le agradaba recordar...
- "Bien, no te lo niego, pero no es el momento" – dijo terminando su platica mental al notar como su pupilo comenzaba a dormitar en medio del comedor sin haber sido notado antes – Vaya, mira como lo dejaste – señalo al joven mago llamando la atención de todos, Sirius y Remus no pudieron evitar sonreír ante la escena, se veía realmente dulce de esa forma, Seth, no pudo ocultar una sonrisa de culpabilidad, tal vez, y solo tal vez se había excedido, él mejor que nadie conocía los resultados de llevar a cabo eso entrenamientos, y Snape sonrió imperceptiblemente mirando con ternura a Harry, una sonrisa que desapareció de la misma forma en que apareció, rápidamente y sin ser vista… o eso pensó él porque dos vampiros presentes trataban de ocultar una ligera sonrisa...
- Será mejor llevarlo a su habitación – sugirió Rem.
- Lo llevare, ustedes también deben descansar – dijo Sire guiñando en dirección de la pareja, quienes se sonrojaron mientas afirmaban –, profesor, acompáñeme para indicarle su habitación – tomo a Harry entre sus brazos yse giro hacia Snape quien afirmo con un asentimiento, aunque este podía notar un sentimiento de malestar al observar como el vampiro sostenía al chico, un sentimiento que no lograba identificar pero no era nada agradable... en especial para alguien que había pasado la mayor parte de su vida tratando de ignorar todo lo referente a sentimientos.
Sire le condujo a la misma habitación en la cual había despertado… ¿acaso esa seria la habitación que le seria asignada? Su duda quedo respondida con la acción del inmortal frente a él.
- Permítame un momento- le indico al hombre que le seguía, con un movimiento de muñeca la puerta de la alcoba se abrió y el hombre moreno pudo apreciar nuevamente el lugar… era realmente hermoso...
El vampiro se adentró en ella llevando consigo el cuerpo del joven durmiente, y el profesor se detuvo en la puerta justo cuando el chico era colocado de manera suave entre las mullidas almohadas y las calidas mantas… ¿la habitación pertenecía al chico?... entonces, ¿Por qué el había despertado allí? ¿Cuál había sido la razón?... estaba tan sumido en sus pensamientos que no se dio cuenta de que el vampiro se encontraba nuevamente junto a él hasta que este le hablo…
- Vamos, le mostrare su habitación – le guió hacia la puerta que se encontraba justo frente a la de su joven pupilo (¿casualidad?… ¿ustedes que creen?... Ev: yo creo que no… de por si Sire se trae algo…) –, espero que se encuentre cómodo en esta, fue dispuesta especialmente para usted – dijo con una sonrisa enigmática (Ev: claro que había sido preparada para él... ¿ya había dicho que se trae algo?... ¬¬U Si ya lo hiciste ahora cállate y deja continuar la historia)
El hombre realmente sentía curiosidad por las respuestas a sus anteriores preguntas, pero él era Severus Snape y no se tragaría su orgullo para satisfacer su curiosidad... aunque se estuviera muriendo por saberlo, no señor, él era un Slytherin y no se rebajaría a algo como eso. Claro que no contaba con que su anfitrión fuese mas perceptivo de lo que esperaba...
- Espero que no haya tenido problemas esta mañana cuando despertó... nos tomamos la libertad de dejarle justo en la habitación de enfrente, la de Harry - dudo por un momento en seguir, pero lo hizo, después de todo tenia que comenzar su plan de alguna forma... –, bueno… es que con el susto que nos dio a media noche cuando lo trajo pensé que lo mejor seria que se quedara acompañado por alguien, así que le deje en la habitación del cachorro, de esa manera ya no tendríamos que moverlo y él también tendría la oportunidad de descansar y vigilarlo de ser necesario mientras yo atendía un asunto importante – dijoconvenientemente, después de todo no iba a decirle "Harry no quería separarse de usted así que me sugirió que lo dejara con él" y que el asunto importante que él debía atender no eran otro que revisar si aun quedaban reservas de esos chocolates que tanto le gustaban, no claro que no… aunque decir solo la parte de que Harry se interesaba en su seguridad le ayudaría a acelerar las cosas, pero no iba de acuerdo a sus planes así que lo dejo… y de acuerdo a lo que había observado en el comedor seria mejor continuar tan lento como ahora –, espero que tenga una buena noche profesor… - termino de hablar mientras sonreía en dirección del hombre de ojos negros.
Justo cuando se disponía a salir del lugar una voz le detuvo, aun estaba un poco aturdida pero sonaba bastante clara.
- Severus…
- ¿Perdón? – pregunto confundido Sire.
- Severus, ese es mi nombre no profesor…
- Lo recordare la próxima vez – le respondió con una sonrisa para salir definitivamente de ahí… -, claro que lo haré… - murmuro cuando se encontraba en el pasillo.
Ahora necesitaba conseguir a alguien que le ayudase con la siguiente etapa de su plan... pero quien era tan tonto... es decir tan acomedido como para ayudar sin hacer preguntas y soltar la lengua...
- ¿Por qué crees que Harry reaccionó así en el comedor? – pregunto un muy confundido animago a su pareja mientras lo abrazaba por la espalda en cuanto cruzaron la puerta de su habitación.
- No lo se, pero sus razones debe tener… - respondió acomodándose dentro del abrazo – pero… no… deberíamos… hablar de… eso… justo… ahora… - dijo girándose y comenzando a repartir pequeños besos por el rostro del animago quien lo estrecho aun mas a su cuerpo…
- cierto… creo que tenemos algo pendiente – dijo finalmente comenzando a responder a las insinuaciones de su pareja y conduciéndolo hacia la cama, donde lo deposito tranquilamente –, me parece que es hora de recuperar algo del tiempo perdido…
- mmmmm… me parece bien – ronroneo disfrutando de los nuevos besos que eran depositados en su cuello.
Varias horas después un exhausto pero feliz Remus dormía placidamente sobre le fuerte pecho de un igualmente cansado y complacido Sirius, mientras este lo acunaba como si temiera que fuese a escapar... por fin después de tanto tiempo volvían a estar juntos y esta vez no permitiría que los separasen... estaban juntos tal y como debía haber sido siempre, ambos lo sabían, eran uno... en corazón, cuerpo, y alma... almas gemelas destinadas a encontrarse una y otra vez a pesar del tiempo y los años de separación, primero gracias a un traidor y después gracias a un velo, al cual el animago siempre se refería como "el maldito velo del demonio" eran la prueba de ello, pero eso ya no importaba... era tiempo de recuperar el tiempo perdido, hacer florecer su amor nuevamente... recuperar sus vidas, ahora estaban juntos de nuevo y no dejarían que los alejaran nuevamente... ahora menos que nunca, ahora que eran una familia de nuevo (claro contando al cachorro) lucharían por ello y no se rendirían sin dar una buena pelea...
En otra alcoba, mas específicamente la del profesor de pociones se encontraba este sumido en sus pensamientos mientras observaba el amanecer... después de todo había permanecido conversando con los demás toda la noche...
- ¿Qué rayos me paso en el comedor, ¿qué fue esa sensación en mi pecho cuando Potter era admirado por Sire?... hace tanto que no me sentía así, de echo de ninguna otra manera, es extraño...
Se alejo de la ventana para sentarse al borde de la cama.
- Me parece que no obtendré respuestas a eso por ahora, no hasta que mi cabeza se aclare... – suspiro – y por otro lado esta el asunto de haberme quedado en la habitación de Potter, fue extraño, pero debo admitir que hace mucho que no descansaba tan bien, me sentía seguro y cómodo... protegido seria la palabra más adecuada... pero ¿por qué?... ¡Diablos!... estoy confundido... odio estar confundido...
Se recostó en la cama, después de todo necesitaba descansar, ya tenia mucho tiempo despierto y su cansancio era evidente, seguro tendría otro momento para aclarar sus pensamientos, así que trato de relajarse y dormir, seguro aun lo esperaban más sorpresas y que mejor que llegaran cuando el estuviera más repuesto...
El sol acababa de ocultarse cuando se despertó, no tenia la menor idea de cómo había llegado a su cuarto, pero eso no importaba de momento, debía darse prisa sus tutores no tardarían en llegar y no quería retrasarse, se levanto de prisa y se metió a la ducha para darse un regaderazo rápido, ya no le daba tiempo de tomar el baño de tina que tanto le gustaba, salio de ahí de la misma forma en que entro y se vistió lo mas cómodo posible antes de bajar al comedor.
En cuanto cruzo la puerta se dio cuenta de que no era el único que faltaba, casi todos estaban ahí, incluyendo a sus maestros, excepto su ex profesor y su padrino, una sonrisa se dibujo en su rostro al imaginarse que haría ese par. Y se cerco hasta llegar a la altura de una hermosa mujer pelirroja que lo observaba con ternura.
- ¡Hola Harry! – le dijo esta sonriendo en cuanto estuvieron frente a frente.
- Hola Zill. Me alegra verte, aunque no se si pensare lo mismo más tarde – respondió el joven depositando un beso en la mejilla de la mujer, antes de girarse y saludar al hombre vestido de negro y de mirada añil y serena junto a Zillah –. Auriel, me da gusto verte a ti también.
- Lo mismo digo, pero no es el momento para conversar, será mejor que te alimentes, pronto nos iremos...
La afirmación sorprendió tanto al único mortal adulto presente sin embargo el joven mago se mostró muy interesado en eso y comenzó a preguntar en cuanto estuvo sentado con un gran plato de comida en frente.
- ¿A dónde iremos?
- Eso no tiene importancia ahora, solo come... – convino Sire quien no tenia el mas mínimo interés en hablarlo frente al profesor de pociones.
- Esta bien... – suspiro derrotado Harry, sabia por experiencia que Sire podía ser muy cerrado cuando la situación lo ameritaba y esa parecía ser una de esas ocasiones, así que se movió y comenzó a conversar con Zillah mientras degustaba la cena.
En el otro extremo de la mesa Severus Snape no perdía detalle de la conversación de este par, no le agradaba la forma en que la mujer se comportaba con el chico, demasiado interesada en él para su gusto...
- "¡Diablos, no de nuevo, por qué me siento así otra vez, ¿acaso son celos? ¿estoy celoso de la atención que muestra Pott... no Potter, de Harry hacia los demás?... ¡maldición!... creo que si... esto no puede estar pasándome a mi..."
La cara de confusión del hombre no paso desapercibida a una mirada amatista que observaba sus reacciones desde que cierto joven de ojos verdes había entrado al lugar.
- "¿Quién lo diría? Parece que estas dándote cuenta de todo Severus, aunque eso arruina un poco mis planes, se suponía que no debería ser así, pero bueno ya no puedo hacer nada... y después de todo no necesitare ayuda extra ññU... "
Despertó sintiéndose calido, seguro, protegido, una sensación que hacia mucho no sentía, abrió perezosamente los ojos para distinguir una cabellera clara descansando sobre su torso y sonrió, ahora recordaba todo lo ocurrido hacia algunas horas... Remus, SU Remus estaba ahí, con él después de pasar una hermosa noche, algo agitada pero hermosa.
Beso la frente de su pareja, la cual en esos momentos comenzaba a despertar.
- Buenos días precioso – dijo mirando unas orbes doradas que lo observaban llenas de amor.
- Buenos días – contesto el otro acurrucándose aun mas cerca del moreno.
- ¿No crees que deberíamos levantarnos? – dijo el animago mientras comenzaba a repartir nuevos besos en las mejillas del licántropo.
- Nop... quiero quedarme así un rato más.
-¿Y el desayuno?
-¡Pady! ¿Ya viste la hora?
- Nop... ññU – admitió este girándose a ver el reloj que se encontraba cerca del armario – ¡¡Wow! Ya es tarde...
- Si, ya es hora de la cena, después de todo creo que si deberíamos levantarnos...
- ¿Y a donde llevaran a Harry? - pregunto algo contrariado Snape que se sentía un tanto desplazado ya que la pelirroja tenia la atención el joven moreno en esos momentos.
- Lo siento pero eso es algo que no es de su incumbencia - le respondió Zillah lanzándole una mirada molesta al hombre, ya había notado el interés de este en el chico, pero no pensaba dejarle el camino libre, Harry seria suyo y de nadie más.
- Esa no es manera de contestar Zillah – le advirtió Sire al notar la forma en que observaba al profesor –, me gustaría recordarte que estas en mi casa y por lo tanto respetaras a mis invitados – sentencio con una mirada dura y decidida, no permitiría que ella se inmiscuyera entre ambos magos.
- Bien, si así están las cosas con permiso – se retiro no sin antes obsequiarle una mirada furibunda a Snape, el cual respondió con otra igual.
- ¿Alguien seria tan amable de decirme que paso aquí?- pregunto un confundido Harry que realmente no tenia la mas mínima idea de que pasaba.
- Nada, cosas de Zillah – intervino Auriel que se había dado cuenta de todo, si bien no conocía el interés del hombre de ojos negros en Harry, si conocía el que mostraba Zillah, y por la forma de actuar de Sire este no estaba de acuerdo con ella, había conocido a la pelirroja por mucho tiempo y podía asegurar que Harry solo era un capricho para ella, así que trataría de ayudar a Sire para evitar que el joven saliera lastimado y si la única forma de lograrlo era alejándola de él, lo haría –, ya sabes que no le agradan mucho los mortales...
- Si pero esa no es la forma en que actúa normalmente.
- Debe haber estado molesta mucho antes, mejor olvídalo y prepárate para la clase.
- De acuerdo, pero ¿puede venir el profesor Snape? – dijo sorprendiendo a su profesor, pero el joven pensaba queahora que lo tenia cerca quería pasar un poco mas de tiempo con él, pronto comenzarían las clases y seguramente todo volvería a como era antes, así que aprovecharía la oportunidad.
- Creo que si, no será muy agradable pero no hay problema – acepto el vampiro un tanto confundido, ¿era su imaginación o Harry tenia interés en el hombre mayor?
Se levantaron de la mesa justo cuando los otros habitantes de la casa arribaban.
- Mira nada más... – observo un sonriente Sire - algo ocupada la madrugada, ¿cierto? – a lo cual los otros se sonrojaron visiblemente.
- No los molestes, ya estamos retrazados y será mejor darnos prisa – intervino Harry, aunque también sonreía con complicidad en dirección a su padrino.
- ¿se van? – pregunto Remus tratando de evitar que su sonrojo aumentara.
- Sip, tenemos una clase – respondió Auriel, haciéndose notar por los recién llegados.
- Hola Auriel, no te vimos – dijo Sirius al notarlo.
- Me di cuenta... pero eso no importa, nosotros debemos irnos y ustedes deben cenar, así que nos vemos más tarde.
Con esa palabras salio empujando a los dos magos, que ni siquiera pudieron despedirse, hacia otra parte de la casa dejando atrás a unos aun confundidos mortales acompañados por un vampiro muy divertido.
- Bien, por que no cenan mientras yo me retiro, comenzare a arreglar todo para la salida al colegio, aun necesito empacar algunas cosas y ustedes deberían hacer lo mismo después de cenar, partiremos temprano – menciono el vampiro saliendo del comedor.
- Si, lo haremos en cuanto terminemos la cena – dijo Remus, realmente debía arreglar algunas cosas, entre ellas los nuevos planes de estudio para el curso, la ultima vez que los había tomado para revisarlos les faltaban algunas partes, pero aun tenia un poco de tiempo para terminarlos. Por otro lado el animago pensaba un poco diferente.
- Aun no puedo creer que volveré a Hogwarts – aunque Sirius estaba emocionado por hacerlo, le preocupaba como reaccionaria el director a su regreso, y que decir con el resto de la orden, además estaba el asunto de que su ahijado no soportaba ni que le mencionaran al viejo, ahora no solo debía preocuparse por él si no por que su niño no asesinara al viejo en un pequeño arranque...
- Estoy cansado, ¿podemos descansar? – dijo Harry mientras se sentaba en el pasto y se recargaba en el tronco de un árbol cercano, y fue inmediatamente seguido de un también cansado Severus Snape, acababa de resucitar a un pequeño conejito, debía admitir que eso de la manipulación de la muerte no era nada sencillo, era más fácil concentrarse en quitar la vida que devolverla o evitarla, pero tomando en cuenta que su principal enemigo entrenaba a sus seguidores para utilizar maldiciones destinadas a exterminar la vida seria de gran ayuda poder intervenir en ello, retorcer la delgada línea para evitar la muerte de ser necesario...
- Bien, pero aun debes probar con algo mas grande – concedió el vampiro,si bien Auriel estaba satisfecho con los avances del chico, este aun necesitaba un poco más de practica, también debía admitir que la presencia del hombre moreno era de mucha ayuda, tomando en cuenta que si el chico debía trabajar con algún animal este tenía que estar moribundo o completamente muerto, y era útil que alguno de ellos tuviera el temple para lanzarle una buena maldición al bicho y quien mejor que un antiguo mortifago que no se tentaba el corazón para hacerlo, por que lo que era el joven no lo tenía para lastimar a los pobres animalitos, y Auriel no debía intervenir demasiado con los animales o resultaría contraproducente.
Los tres se sentaron observando los alrededores que se encontraban extremadamente tranquilos, era una suerte que Zillah hubiese decidido irse en cuanto supo que el mago adulto los acompañaría o en esos momentos no les dejaría trabajar, a ella le gustaba ser el centro de atención y de haberse quedado no les hubiese dejado concentrarse, además ya había terminado de instruir a Harry en sus clases y no hacia falta que se quedara, el chico debía admitir que eran interesantes pero muy aburridas, además se parecían a sus clases del colegio, solo que eran una mezcla entre Astronomía y Adivinación, ambas materias que no se de daban mucho y no le agradaban demasiado.
- Practicaras una vez mas y nos iremos – le indico el inmortal recibiendo un asentimiento por parte del joven quien se levanto inmediatamente, mientras mas pronto terminaran más pronto volverían a casa para terminar de arreglar su baúl.
Pronto encontraron a un ciervo y antes de que Harry pudiese oponerse a lastimar a un animal que le recordaba a su padre un rayo azul lo había golpeado cuando su profesor conjuro un "Death Light" sobre el. Ambos hombres pudieron observar el nerviosismo del chico cuando prácticamente se lanzo a ayudar al animal, y la desesperación con que trataba de auxiliarlo, pero ninguno entendía la razón...
- Vamos... despierta, levántate... – decía mientras sus manos permanecían fijas a la altura del corazón del animal y sus ojos trataban de contener las lagrimas que amenazaban en salir.
- Harry, vamos déjalo, ya no tiene remedio, esta fuera de tus capacidades, es demasiado grande – le sugirió Auriel viendo como los intentos de chico no daban resultado.
- Él tiene razón Harry – dijo Severus, notando como había llamado al joven por su nombre de pila, sin embargo este no se movió solo intentaba hacer volver al ciervo.
- Vamos, por favor... levántate – ya estaba cansado y sus ojos no le dejaba ver bien debido a las lagrimas que se desbordaban por ellos, pero no podía dejarlo, no cuando lo único que pensaba es que podía haber sido su padre, no podía dejarlo así, no cuando sabia que podía ayudar... sabia que tenia el poder para hacerlo.
Un momento después una luz blanca muy intensa rodeo al chico junto con el ciervo cegando a los dos adultos que solo alcanzaron a cubrir sus ojos, cuando todo volvió a normalidad pudieron ver como el animal salía corriendo alejándose lo mas rápido posible de ellos y a un Harry completamente exhausto que continuaba derramando lagrimas arrodillado en el suelo. A Snape se le partía el corazón al observarlo en ese estado y no pudo soportar más el verlo así, por lo que se acerco y arrodillándose junto a él lo tomo entre sus brazos. Este al sentir el cuerpo de su profesor no pudo mas que aferrarse a él tratando de contener las emociones que le abatían, los fuertes brazos que lo sostenían lo hacían sentirse protegido, y continuo llorando unos momentos mas ante la mirada entre preocupada y comprensiva de Auriel, por fin entendía la razón de Sire en oponerse a los acercamientos Zillah hacia Harry, lo entendió en el momento en que el hombre lo tomo entre sus brazos, podía ver los sentimientos existentes entre ambos con ese simple gesto, ahora más que antes le daría una mano a Sire con lo que fuera que estuviera tramando y se retiro alejándose de la pareja.
Pasaron unos minutos mas para que Harry se tranquilizara, pero se sentía tan bien en los brazos de su amor que no quería moverse, no quería que lo soltara no para darse cuenta de que al hombre no le interesaba...
Por otro lado Severus confirmaba sus sospechas, estaba interesado en el joven... no sabia cuando ni como había ocurrido, solo sabia que no quería alejarse de él, no ahora que lo había descubierto...
Ambos levantaron la mirada, cuando estas se cruzaron se quedaron prendados de los ojos del otro, negro confundiéndose en verde y verde confundiéndose con el negro...
TBC...
