"Guardián Eterno: la leyenda del pasado"

Por: Sekhmet Malfoy

Encantadora de Dragones
Miembro de la Orden Severusiana
Miembro de la Orden Siriusiana
Miembro de la Orden Draconiana
Miembro de la Legión de Lupinas
Miembro de la Orden de Potter
Miembro de la Orden de las Mortifagas

http/ después del desastroso comienzo del verano, las cosas parecen mejorar para Harry... pero ahora tendrá que enfrentar un nuevo desafió si quiere proteger a las personas que quiere, y con ello al mundo mágico...

Capitulo 10

- ¿Lo vieron? – fueron las primeras palabras que surgieron de los labios de una chica castaña al llegar a la estación y encontrarse con una gran familia de pelirrojos en el anden.

- No – respondió uno de los pelirrojos -, Herm, nadie lo ah visto, ni siquiera los encargados del anden.

- Creí que estaría aquí – susurro esta preocupada, desde que lo habían visto en el caldero chorreante no había podido dejar de preguntarse por él, por su seguridad, al igual que el resto de la orden, en especial los Weasley.

- Seguro llegara después, lo mejor será subir al tren, esta por partir, vamos Hermione... – sugirió una chica pelirroja, ella también estaba preocupada por Harry, y tenia sus razones, había estado enamorada de él durante los últimos seis años y aun no perdía la esperanza de que él se fijara en ella. (Ev: no sabe que tiene la lucha perdida antes de comenzar... ¬¬U Ev... Tranquilo... Ev: lo siento ññU)

Tenían una hora de haber partido de la estación y aun no lo habían encontrado en el tren, tal vez no llegaría en el al colegio, escucharon la puerta abrirse y levantaron la mirada, segundos después la volvieron a bajar con disgusto, por un momento pensaron que era Harry, que por fin había decidido hacer las pases con ellos, que equivocados estaban.

- Pero miren que tenemos aquí, la comadreja, la sangre sucia y la pobretona, pero... ¿en donde dejaron a San Potter? – siseo con burla una voz conocida desde la puerta de su compartimiento – ¿acaso ya se canso de ustedes? - esa ultima frase calo hondo en las cabezas de los tres presentes, ¿cómo se atrevía, pero lo peor era que tenia algo de verdad...

- Piérdete Malfoy – contesto fríamente la prefecta de gryffindor.

- Ya la escuchaste hurón, lárgate – dijo Ron firmemente, Malfoy había dicho algo que le recordó que ahora ya no estaba su amigo, y eso le había dolido, pero no quería causar problemas antes de llegar al colegio, durante esas vacaciones había madurado y no le permitiría ver cuanto lo habían lastimado sus palabras, tampoco permitiría que molestara a su hermana y a Hermione, ambas estaban preocupadas por el moreno y el rubio frente a ellos no tenia por que estar ahí.

- Vaya, así que no están de humor, como hoy me siento benevolente me iré, solo para demostrar cuan amable puedo ser – salio de ahí con una sonrisa de triunfo la cual no había mostrado nunca, una sonrisa de verdadera satisfacción y se alejo de ahí solo, no quería que sus guardaespaldas le siguieran, aun no había revisado el ultimo vagón del tren y tenia curiosidad por verlo y eso era algo que no deseaba que sus amigotes vieran, un Malfoy muerto de curiosidad, no, eso seria vergonzoso...

Llego al final del tren, en esa área no se escuchaba ningún ruido, se acerco al pomo de la puerta y lo giro, esta cedió ante el leve impulso mostrando una habitación sombría, "¿qué rayos?" se dijo, ese no podía ser uno de los vagones del tren, estos nunca habían sido dispuestos de esa forma, estaba por adentrarse en el compartimiento cuando un gruñido lo hizo retroceder, ahí delante de él se encontraba el mas grande y amenazante animal que hubiese visto.

No pudo evitar pensar que ese era su fin, pero justo en ese momento una mano toco la enorme cabeza del animal y este volvió a echarse en el piso.

- Tranquilo Hocicos – escucho la delicada voz de la persona que había detenido al animal –, lamento que te asustara, no le agradan los extraños – se disculpo sin mostrar su rostro.

- No... no pasa nada – tartamudeo tratando de controlarse, de recuperar su fría postura.

- Él ni si quiera debería estar aquí, no se por que te disculpas – se escucho otra voz, pero esta no era como la otra, por el contrario era fría, mucho mas que la suya, ¿a quienes pertenecían?

- Vamos cachorro, no seas descortés – sonrió el otro –, seguro solo quería saludar.

- Pues entonces que te salude a ti, iré a buscar a Remus... – dijo el otro saliendo del compartimiento y mostrándose a Draco. Este pudo apreciar a un apuesto joven, que parecía ser de su edad, de hermosos ojos verdes y mirada fría, con una postura digna de un slytherin y vestido completamente de negro, el chico corrió la capucha de su capa antes de salir. El perro estaba a punto de seguirlo pero la voz del otro ocupante del compartimiento lo detuvo.

- Hocicos, quédate, no querrás asustar al resto de los estudiantes, ¿cierto? – le dijo al animal como si este pudiese entenderle, y pareció que así fue pues volvió a su lugar en el suelo – disculpa la actitud de Romer... – dijo recordando el nombre que le había dado al chico en su visita al callejón Diagon – él es muy reservado.

- No importa, fue mi culpa – por alguna extraña razón no le incomodaba mostrarse como era ante el hombre que ocupaba uno de los sillones del lugar, se sentía cómodo con él – no debí entrar así como así aquí.

- Aun así... déjame presentarme – se levanto para colocarse frente al joven –, soy Sire, Sire Pierce – dijo extendiendo su mano hacia él, ignorando el gruñido de protesta del perro ante su gesto tan amigable. Y entonces Draco pudo observarlo, era hermoso, su cabello negro cayendo a su espalada en una coleta baja, su piel tan pálida como la suya o quizás más, sus ojos violetas que le impedían apartar la mirada, tomo su mano sin pensarlo, completamente hechizado por su mirada y sus gestos.

- Draco, Draco Malfoy – se presento.

- Por que no te sientas, creo que sin Romer aquí me aburriré sin remedio – sonrió señalando el sillón frente a si, y el joven se sentó sin mostrar ningún signo de reserva. Minutos después ambos entablaban una agradable conversación ignorando los gruñidos que el perro a sus pies hacia.

- "¿por qué esto me pasa justo a mi?" – se lamento mentalmente el animal, ahora tenia que soportar la platica de Sire con un slytherin y que para terminar también era un Malfoy...

Atravesó el tren por completo en cuestión de minutos, quería alejarse del vagón donde Sire se había quedado con un slytherin y no era cualquier slythetin era Malfoy, Draco Malfoy, aquel ser que le había echo la vida imposible durante toda su estadía en el colegio.

Siguió caminando ignorando las miradas asustadas de los estudiantes que se cruzaban a su paso. Lo único que quería era llegar con Remus, un momento a quien engañaba, lo que quería era llegar y arrojarse a los brazos de su amado...

Llego al vagón en el que se encontraban los profesores y toco, enseguida recibió un "adelante" de parte del licántropo que compartía el lugar con Severus. Ingreso rápidamente, nunca le había gustado llamar la atención y en esos momentos era justo lo que hacia, pues todos los estudiantes que lo habían observado comenzaban a preguntarse que hacia un encapuchado en el vagón de los profesores, es mas no sabían ni siquiera que había profesores en el tren...

- Con permiso – dijo sacándose la capucha de la capa y colocándose rápidamente a un lado del profesor de pociones que lo miraba entre divertido e intrigado.

- ¿ocurre algo? – inquirió Remus – ¿no se suponía que estabas con Sire y Padfoot?

- Estaba, tú lo has dicho, resulta que se le ocurrió invitar a alguien que no es de mi agrado al compartimiento y decidí venir un momento, apuesto que Pady tampoco esta contento con la visita – sonrió ante la imagen de su padrino soportando a un Malfoy.

- Creo que iré a ver que no haga nada malo, por si acaso – diciendo eso salio del vagón dejando a Harry con Severus.

- ¿Y que visita? Claro si se puede saber - dijo este pasando su brazo por los hombros del joven para acercarlo más, movimiento que aprovechado por el chico que se acurruco mas cerca de él.

- Malfoy... – dijo como si esa fuera respuesta suficiente.

- ¿Malfoy? – dijo este arqueando una ceja –, se que nunca se han llevado bien, pero no crees que podrías darle una oportunidad, en el fondo no es un mal chico.

- ¿En el fondo de que? ¿el fondo de un pozo o del mar? – contesto un poco molesto el chico, ¿por qué defendía a Malfoy, no tenia derecho de hacerlo –, no lo puedo creer, siempre lo has defendido, pero creí que por un momento podrías ponerte en mi lugar, pero no... ¡maldición, soy un estupido! – se levanto bruscamente del lugar donde se encontraba alejándose de los brazos de Severus.

- Vamos pequeño, no te pongas así, ven aquí – dijo el hombre tranquilamente incitándolo a que tomara nuevamente su lugar junto a él.

El chico bufo aun molesto y declino la invitación sentándose en el lugar que anteriormente ocupaba el licántropo.

- ¿Por qué lo haces? – preguntó en cuanto estuvo sentado y ante la mirada confundida del hombre continuo - ¿por qué no puedes ponerte en mi lugar por un momento? Siempre has preferido a Malfoy sobre cualquier otro alumno, entiendo que sea un slytherin, pero eso es mucho, él me ha tratado como basura desde que lo conozco, no puedes venir y pedirme que olvide todo de un momento a otro... no puedo – termino mirándolo a los ojos, mostrando en ellos una mezcla de sentimientos encontrados, dolor, furia, decepción, tristeza, bajo su mirada lentamente para fijarla en el piso del compartimiento sin decir nada... para Severus esto termino por hacerlo ceder ante su dulce niño y no dudo en inclinarse hacia él para tomarlo por la barbilla y hacer que sus ojos se encontraran nuevamente antes de hablar.

- Lo lamento, no quise que sonara así, comprendo que no puedes dejar tanto odio y resentimiento de lado, pero él no es como crees – el chico intento alejarse nuevamente con la mirada baja ante esta declaración pero Severus no se lo permitió, lo sostuvo con un poco mas de fuerza hasta dejarlo sentado en su regazo, Harry no era débil y pudo haberse zafado del agarre en cualquier momento, pero no quería dejar de sentir el contacto, en el fondo le lastimaban sus palabras, pero esperaba que dijera algo que lograra sanar su corazón herido –, no es lo que crees – volvió a hacer que sus ojos se encontraran, aun podía ver el dolor que habían provocado sus palabras en el joven –. Draco es mi sobrino (realmente quería ponerlo como su ahijado, pero me llamo mas la atención así... Ev: suena interesante, ¿no?)

Harry se sorprendió por la revelación, ¿Malfoy sobrino de Snape? ¿qué clase de broma era esa? ¿de donde venía ese parentesco?... eran sus principales preguntas. La confusión se reflejo en su mirada, tenía los ojos abiertos y los labios ligeramente separados, realmente se veía gracioso y Severus no pudo evitar reír un poco a sus costillas.

- ¿Parece tan sorprendente? – pregunto recuperando un poco su compostura.

- Realmente si. Jamás imagine que fuesen parientes – respondió el chico sin salir completamente de su asombro.

- Apuesto que nadie lo hubiese imaginado, ¿cierto? – ante el asentimiento del chico continuo –, veras su padre es mi primo por que nuestras madres eran hermanas, lo que me convierte en tío de Draco – comenzó a hablar nuevamente el mago mientras rodeaba la cintura del joven acercándolo más hacia si permitiendo que este descansara sus manos en su pecho y su cabeza en su hombro.

- Pero no se parecen en nada – dijo el chico moviéndose ligeramente para acercarse aun mas al hombre tratando de encontrar una posición mas cómoda, se giro un poco de manera que su espalda quedase descansando en uno de los brazos de su amor y su cabeza quedara apoyada completamente en su hombro derecho colocando una sus manos en el fuerte torso del hombre.

- Eso es porque herede todos los rasgos de mi familia paterna y no materna, y lo de que le doy preferencia, es normal, nunca me ha gustado que Albus se ponga de parte del resto de las casas y se olvide completamente de la mía, y mientras pueda hacer algo para apoyar a mi casa lo haré, así tenga que dejar al resto de las casas de lado y hacer que me odien por ello, ¿comprendes? – termino mientras acariciaba una de la mejillas de Harry con su mano libre.

- Creo que si, aunque me cueste admitirlo ese viejo loco tiene sus preferencias muy arraigadas – dijo, pero no pudo evitar que un suspiro de satisfacción abandonara sus labios ante el toque ofrecido por el hombre que le sostenía.

- ¿Eso significa que ya no estas molesto? – pregunto nuevamente el hombre, no le gustaba ver la mirada molesta de Harry dirigida a él.

- Esto... – respondió el chico mientras se acercaba a los labios del hombre y lo besaba larga y tiernamente, después de romper el beso termino por responder a la pregunta – significa que ya no estoy molesto... – sonrió un poco colocando su frente en el pecho firme de Severus – dame tiempo... deja que me acostumbre a la idea de que Malf... Draco no es la persona que creo... después de todo, Sire y tu no pueden haberse puesto de acuerdo respecto a él antes de subir al tren...

- Cierto – corroboró este acariciando el cabello del joven entre sus brazos –, tienes todo el curso para hacerlo – sonrió un poco y trazo un camino de besos desde su frente hacia sus labios donde se detuvo por algunos minutos.

Harry no pudo oponerse, mejor dicho no quiso oponerse al gesto y termino correspondiéndolo, abrazando mas el cuerpo que le sostenía, entrelazando sus lenguas una y otra vez y disfrutando de la cercanía entre ambos, cuando el beso termino Severus decidió que era momento de hablar de otras cosas, sostuvo al chico nuevamente entre sus brazos para colocarlo en una posición distinta que le permitiera verlo a los ojos y rozo sus labios suavemente antes de volver a hablar.

- Bien, ahora olvidemos eso por un momento y dime, ¿qué piensas hacer al llegar al colegio?...

Escucho como le llamaban mientras atravesaba el corredor rumbo al final del tren, aunque no deseaba demorarse se detuvo para hablar con los jóvenes que le hablaban.

- Profesor... – comenzó una chica castaña - ¿Harry? ¿Harry esta en el tren?

- No lo hemos visto durante todo el recorrido... – intervino un joven pelirrojo al lado de la joven.

- Tampoco recibimos noticias suyas en todo el verano – sentencio una chica pelirroja que se encontraba a espaldas de los otros chicos.

Sonrió tristemente antes de contestar, no podía desafiar las decisiones de Harry, pero tampoco podía dejar así a los chicos, no era su estilo, quizás el de Severus, pero no el suyo.

- Él esta bien, ya conocen su opinión, lo escucharon en el caldero durante su visita, y si esta en el tren, pero no dejara que nadie lo vea hasta llegar al colegio, será mejor que no lo busquen.

- Pero... – comenzó nuevamente Hermione – necesitamos hablar con él... saber que se encuentra bien, conocer las razones que...

- Saber por que no hemos podido hablar con él durante todo este tiempo... – le interrumpió Ginny, ella tampoco no se daría por vencida tan pronto.

- ¿Por qué nuestras lechuzas no pudieron entregarle nuestras cartas? – dijo finalmente Ron, tratando de mantener la calma - ¿por qué no quiere hablar con nosotros? ¿qué esta pasando?

- Necesitamos saber – dijo Hermione en un susurro –, es nuestro amigo...

Sus palabras y preocupación lograron que su corazón diera un vuelvo dentro de su pecho, tenia la misma sensación que sintió cuando sus amigos descubrieron que era un licántropo en el colegio, pero no podía responder, eso solo le correspondía a Harry, solo él podía decidir contestar a esas preguntas.

- Lo siento chicos, pero incluso yo desconozco las respuestas, solo Harry puede responderles... cuando este listo.

Se alejo tristemente del pequeño grupo de jóvenes hacia el final del tren dejándolos aturdidos, ¿vería a Harry ahí, seguramente se encontraba en el lugar donde Remus se dirigía, pero no podían seguirlo para presionar al joven, ya habían visto su forma de reaccionar cuando no deseaba dar explicaciones y eso podría ser aun mas perjudicial para su amistad, así que esperarían un poco más.

Llevaban algún tiempo hablando, ninguno de los dos se había sentido tan cómodo con otras personas antes, ni el rubio entre sus padres o amistades durante todos los años pasados, ni el moreno entre todas las personas que había conocido a través de los siglos que llevaba caminando en la tierra, cierto con Harry podía pasar el tiempo de forma similar, pero nunca seria como en ese momento con el joven. Hablaron de todo y nada, Draco hablo del colegio, de sus aficiones, de sus compañeros… por que aclaro eran sus compañeros, hasta ahora no conocía a nadie a quien poder llamar 'amigo'. Por otro lado Sire le hablo de su vida, claro la más inmediata, que tenía acciones en un par de empresas, que aquí entre nos dejaban buenas ganancias, además de su afición por los aparatos muggles, la comida mexicana y otras cosas…

- "Eres especial pequeño... – sonrió dulcemente en su dirección mientras pensaba en lo apuesto que era el chico, tan tranquilo, dulce, e incluso sincero con sus palabras y gestos - ¡Dios, es sonrisa! ¡entregaría mi eternidad por ella! ¡por uno de tus gestos, una caricia... por un beso! pequeño... ¿qué me has hecho?"

Los pensamientos del joven frente a él no eran muy distintos... mirarse en los ojos de ese hombre le provocaba tanta paz, tanta seguridad que quería perderse en ellos y no encontrarse jamás.

- "¿Por qué me siento así con él? Es como si nos conociéramos desde siempre... como si hubiese vivido durante todo este tiempo para este momento" – suspiro inaudiblemente, o eso creyó él por que para el sensible oído del vampiro frente a si no parecía de esa manera.

- "¿En que piensas mi amor? Podría entrar a tu mente en este momento si no pensara que eso esta mal y que perdería la confianza que ahora hay entre nosotros, vendería mi alma por saber que soy yo quien ocupa tus pensamientos" – pensaban antes de ser sacado de sus mentes por el sonido de alguien pidiendo permiso para pasar –, adelante – concedió audiblemente la entrada a la persona fuera del compartimiento.

Segundos después un triste licántropo se adentraba en el compartimiento, en el momento en que cruzo la puerta el enorme perro que descansaba en el piso del lugar se levanto para acercarse a él y lamer su mano tratando de reconfortarlo.

- ¿Pasa algo Remus? – pregunto el vampiro ante la sorprendida mirada de su rubio acompañante que no se esperaba la presencia del licántropo ahí y mucho menos que este conociera a su nuevo amigo... el hombre lobo era sumamente apuesto y no lo quería cerca de Sire, estaba confundido por su propia reacción pero no podía evitarla... estaba celoso, sumamente celoso y su mirada lo reflejaba, algo que solo fue notado por un animago en el compartimiento.

- "Vaya, vaya, ¿quién hubiese pensado que un Malfoy podía ser tan posesivo y celoso con alguien que acaba de conocer, aunque podría jurar que por la forma en que han estado hablando antes ya se conocían, aunque eso totalmente imposible" – y sonrió mentalmente.

- Nada de que preocuparse – respondió Remus regalando algunas caricias al animal junto a él.

- ¿Por qué no nos acompañas? – le ofreció sonriendo tranquilizadoramente Sire ante la mirada contrariada de Draco –, apuesto que Romer te envió por alguna razón – comento al momento de aparecer un nuevo sillón similar al queocupaba en ese momento.

- De hecho no me envió, pero menciono algo sobre un perro – dirigió su mirada hacia el animal que aun estaba junto a él –, que podría saltar sobre tu invitado – termino mirando en dirección al rubio que hacia todo lo posible por no delatar sus sentimientos recurriendo a todas las enseñanzas dadas por su padre desde que tuvo uso de razón.

El joven se levanto del lugar que había ocupado durante todo el tiempo que permaneció en presencia del vampiro, en ese momento no se sentía bien en presencia de los hombres que conversaban frente a él, un malestar que fue notado nuevamente por el perro.

- Con permiso, aun estamos por llegar a Hogsmeade pero será mejor que cambie mis ropas – comenzó a caminar hacia la puerta, pero fue detenido por una mano que se poso en su hombro de manera suave y firme a la vez, por lo que se giro colocando nuevamente su mascara de frialdad, la cual había dejado de lado durante todo el tiempo que había conversado con Sire, y lo miro de manera indiferente provocando el desconcierto del vampiro.

- ¿Ocurre algo? – pregunto le preocupado por su forma de actuar.

- Nada – contesto este ocultando sus sentimientos -, ahora si me disculpan debo reunirme con mis compañeros – termino el chico liberándose del agarre del hombre mayor y saliendo rápidamente del compartimiento.

- ¿Es mi imaginación o él estaba molesto? – pregunto inocentemente Remus.

La única respuesta que recibió a su pregunta fue la risa del animago presente, que aprovechando la ausencia de Draco había tomado su forma humana y reía sentado en el lugar vació del joven, ante la mirada de los otros dos magos.

- Me parece que sabes algo que nosotros no – afirmo Sire levantando una cejaal animago -, ¿serias tan amable de iluminarnos?

Y nuevamente Sirius estallo en carcajadas...

- ¿Cómo se atreve? – murmuraba un joven molesto mientras recorría el camino al vagón de prefectos que se encontraba al frente del tren - ¡maldición, ¡el licántropo tenia que llegar a importunar con su presencia! ¡rayos! – realmente estaba furioso.

Paso empujando a un chico de tercer año que se atravesó en su camino y giro el pomo de una puerta entrando sin importarle si estaba ocupado el compartimiento, pero se arrepintió en el momento en que vio justo frente a si la escena mas insólita que se le podía haber ocurrido.

Se había equivocado de compartimiento y ahí, frente a él se encontraba su tío, Severus Snape, con el joven acompañante de Sire sentado en su regazo y besándose apasionadamente sin haber notado su presencia hasta que soltó la respiración que retenía por causa de la impresión.

El joven lo miro tan fríamente como lo había hecho cuando abandono el anterior compartimiento, y su tío lo miraba burlonamente al observar como el chico boqueaba sin sentido gracias a la sorpresa de haberlo visto de esa manera con su pareja.

- Parece que la mala suerte me persigue, ¿no lo crees Sev? – pregunto tranquilamente el joven de ojos verdes.

- Tal vez... solo desde el punto de vista que lo mires – sonrió el hombre – Draco ¿por qué no te sientas? – señalo al otro joven el lugar frente a él mientras ayudaba a su pareja a colocarse a su lado.

El rubio solo atino a asentir y sentarse tratando de recuperar un poco de aplomo. El otro joven suspiro pesadamente y se acomodo un poco el cabello que ocultaba sus ojos, movimiento que provoco que su cicatriz estuviera a la vista, ante esto el otro chico reacciono preguntando.

- ¿Potter? – miró perplejo a uno al otro - ¿cómo...

- … es posible? – termino por el Harry sonriendo despectivamente.

- Harry, por favor – pidió su pareja al notar como reaccionaba a la cercanía de su sobrino.

- Bien, solo asegúrate que este callado y no me moleste, sabes de lo que soy capaz – concedió este mirando en su dirección y ablandando un poco su mirada.

- Bien... – se giro para enfrentar al rubio – creo que tienes algunas preguntas, ¿cierto?

- No realmente – confeso este tratando de mostrarse mas tranquilo, cosa que se le hacia muy difícil –, lo que no entiendo es ¿Cómo estas con un gryffindor? ¡¡¡¡¡¡¡Y para colmo no es un gryffindor cualquiera es… es Potter! No voy a sentarme con un gry… y tu ni siquiera deberías estar hablando con él… - reclamo el rubio levantándose de su lugar - no hablaras enserio, ¿cierto?... – miro interrogativamente al profesor.

- Si con un gryffindor Malfoy… con uno que si no cierras la boca la cerrará por ti – amenazo Harry utilizando un tono frió en su voz nuevamente nuevamente.

El otro chico boqueo un poco ante el tono amenazante en la voz del otro mirando fijamente a su jefe de casa que no había movido un solo músculo ante los comentarios.

- no es enserio, ¿verdad? – tratando de saber si solo era una broma por parte de su tío.

- Lamento ser yo quien lo diga… - confirmo el maestro.

- No puede ser – se sentó de golpe en el lugar que ocupaba -, tu... él… ustedes... ¿están juntos, tiene que ser una pesadilla – murmuro colocando su rostro entre sus manos.

- Que sagaz... – se burlo Harry del tartamudeo de Draco, ganándose una mirada reprobatoria por parte del profesor y una muy molesta por parte del rubio - ¿qué? ¿me negaras lo obvio? – pregunto levantando los hombros y sonriendo un poco para sorpresa de los slytherin's.

- De acuerdo, antes de cualquier cosa, y esto va por ambos – los miro fijamente antes de continuar –, nada de peleas hasta que aclaremos esto...

Draco se sentó un tanto incomodo, aunque trato de que el gryffindor no lo notara.

- Bien veras Draco, Harry y yo – el chico noto el énfasis que el adulto utilizo al referirse a ambos y se dispuso a escuchar la historia... (Bien, como todos, y digo absolutamente todos ya saben como esta la cosa... Ev: deben imaginarse que le esta dando un informe no tan detallado sobre el verano y la relación que tienen ambos hombre... Sekh: así que no entraremos en detalles ññU)

Después de que el joven sly se recuperara del shock pasaron alrededor de una hora conversando sobre la relación existente entre Harry y Severus, también sobre Sire, aunque en ningún momento mencionaron que fuera un vampiro, sobre Lupin y aunque Harry no estuvo muy de acuerdo también sobre su padrino, debía admitir que el rubio no era como se había mostrado durante los últimos años, si no todo lo contrario, debía darle crédito al chico, era un gran actor, casi tan bueno como Sev.

- Bueno no me queda otra que alegrarme por ustedes, se ven felices – sentencio el sly –, no creo que sea necesario mencionar que ambos pueden contar conmigo para lo que se necesite.

- Ahora que lo mencionas – intervino Harry – tal vez necesite de tu ayuda esta noche... – dijo enigmáticamente llamando la atención de sus acompañantes.

- Pady será mejor que hables – gruño Remus en un intento de hacer que el animago diera cuentas de su risa, había pasado mucho tiempo de la partida del rubio slytherin y él aun continuaba riendo aunque ya no de manera descontrolada.

- Lo siento, pero eso... – hizo una pausa para darse importancia - es algo que no me corresponde a mi decir.

- ¿Y a quien le corresponde hacerlo? – pregunto esta vez Sire que ya se estaba cansando de las evasivas del moreno.

- ¿A quien más si no a Malfoy? – sonrió este restándole importancia -, ahora ustedes deberían estar preparándose para abandonar el tren, me parece que comienza a disminuir la velocidad – sugirió mientras volvía a su forma animaga y a los otros no les quedo otra opción que hacerle caso. Ya que Harry no se encontraba con ellos, Sire se encargo de sus cosas mientras Remus volvia al compartimiento de maestros.

En cuanto cruzo la puerta se sorprendió de encontrar a Draco conversando no solo con Severus sino con Harry amigablemente, pero en cuanto este descubrió su presencia frunció el ceño imperceptiblemente y se retiro del lugar para preparar su equipaje y descender del tren.

- Me parece que hay una persona a quien no le agradas – menciono el profesor de pociones al observar la forma de actuar del sly en presencia del licántropo.

- Eso creo, hizo lo mismo en cuanto entre al vagón de Sire, pero no creo que sea el momento de hablar sobre ello, ¿Harry te quedaras con nosotros hasta que desciendas del tren? – afirmo el aludido.

- Si, me imagino que Sire se encargara de mi equipaje, además no quiero encontrarme con más alumnos antes de entrar al comedor, tuve suficiente al cruzarme con varios en el pasillo – dijo recordando como actuaron estos en su presencia –, es mejor esperar un poco.

Cuando todos los alumnos bajaron el chico espero hasta que la mayoría de los alumnos abordaron los carruajes y se reunió con Sire que le indicaba el carruaje en el que se transportarían. Subieron a el en compañía de ambos profesores mientras el enorme perro le seguía a un lado del carruaje, ya que era demasiado grande para entrar en el.

Algunos minutos después se encontraban en las puertas del colegio y se separaron de los profesores, estos debían ingresar antes que ellos, Sire quería hacer una gran entrada por lo cual esperarían a que todos los alumnos estuvieran dentro, así que decidieron buscar alguna habitación antes de que el banquete de bienvenida comenzara. No tardaron mucho antes de encontrar unos aposentos que cubrieran sus necesidades, así que dejaron sus pertenencias en el lugar y volvieron hacia el gran comedor, seguramente la selección ya habría terminado y el banquete estaría por comenzar.

- Bienvenidos a todos – se escucho la voz del anciano director del colegio –, antes de comenzar la cena me gustaría que le dieran nuevamente la bienvenida al nuevo profesor de Defensa Contra las Artes Oscuras, Remus J. Lupin que acepto impartir la materia este año – se escucharon aplausos provenientes de las diferentes casas a excepción de la de slytherin que no estaban completamente de acuerdo con la llegada del nuevo profesor justo cuando el director iba a comenzar a hablar nuevamente las puertas del comedor se abrieron estruendosamente acallando los murmullos que había acerca de la presencia del hombre lobo en el cuerpo docente del colegio, entre las sombras surgieron las imponentes figuras de dos hombres acompañados por un enorme animal de pelaje tan negro como la noche misma, estos caminaron entre las principales mesas mostrando su porte altivo, autosuficiente y extremadamente frío, que provocaron instantáneamente la desconfianza del alumnado.

Los hombres se detuvieron frente a la mesa de profesores sin preocuparse en mostrar un atisbo de respeto para el director del colegio, cosa que provoco nuevos murmullos acerca de ellos, el hombre mayor hizo un movimiento de muñeca conjurando una mesa del tamaño suficiente para tres o cuatro personas junto con dos sillas de respaldo alto finamente trabajadas, que mostraba grabados rúnicos desconocidos incluso por la profesora de runas antiguas, coloco los muebles justo a un lado de la mesa alta del profesorado indicándole al joven tomar asiento en una ellas, ignorando los crecientes murmullos hizo lo propio tomando el lugar vació, una vez que ambos estuvieron cómodamente sentados el enorme perro se situó frente a la mesa en actitud protectora ante las miradas asombradas del director y la jefa de la casa Gryffindor, las complacidas del profesor de DCAO y el profesor de Pociones y las completamente aturdidas del resto de los profesores y alumnos que no comprendían absolutamente nada.

TBC...