En un pequeño pueblo, junto a un rió, una casa junto con un jardín. Solo hay una luz prendida en toda la casa adentro de la habitación se encuentran Draco Malfoy, un chico de 15 años, rubio, de pelo largo. A su lado acostada en la cama, viendo la tele, está Hermione Granger, también de 15 años, pelo largo café, muy guapa. Están viendo la película de E.T.
-¡Oh, me encanta esta película-dijo Hermione al terminar la película-¿Ganó un oscar, no?-pregunta.
-Fue Gandhi-dice Draco y se para y saca la película-. Se lo robaron a Spielberg-mientras ponía la televisión en un canal-no había superado el complejo de Peter Pan.
-¡¿Ganó Gandhi! ¿Le dan un oscar a una película que no hay quien vea entera?
-Así es...
En la televisión una mujer esta dando las noticias. No debe pasar de los treinta y tantos años.
-Nuevo peinado...-dice Hermione.
-Sí, le gustan los cardados.
-Debe de pesar-dice Hermione levantándose, yendo hacia la ventana-¿Cómo se pone de pie?-poniéndose los zapatos.
-¿A dónde vas?-pregunta Draco.
-A casa.
-Duerme aquí.
-No puedo-dice decididamente Hermione.
-Siempre duermes aquí.
-Esta noche no.
-¿Por qué no?-la continua interrogando Draco.
-No me parece una buena idea seguir quedándome a dormir, ¿entiendes?
-¡No, no lo entiendo!-dice Draco levantándose de la cama-hoy es sábado, y duermes aquí desde los 7 años...
-Las cosas cambian, Draco, evoluciona.
-Pero, ¿de qué estás hablando?-dice Draco volviéndose a sentar en la cama.
-Dormir juntos estaba bien cuando éramos niños, pero hemos cumplido los 15...
-Sí...
-Empezamos el Instituto...
-¡Sí...!-sigue diciendo Draco sin comprender a donde quiere llegar Hermione.
-¡¡Yo tengo pechos!-termina por decir Hermione, desesperada de que Draco no comprenda nada.
-¡¿Qué!-dice Draco riendo.
-¡¡Y tú tienes genitales!
-Siempre los he tenido...-dice Draco un poco avergonzado.
-Y tienes más cosas...
-¡¿Y tú que sabes!-dijo Draco sonriendo.
-Los he sentido.-dijo Hermione dando media vuelta hacia la ventana- Tengo que irme...
-Oye, no salgas corriendo, ¡vamos, explícate, Hermione!
-Creo que nuestras hormonas-dijo Hermione volviéndose de nuevo-pueden alterar esta relación, y prefiero limitar los riesgos.
-¿Tus hormonas no estarán empezando a sentir algo por mí, no?-dijo Draco levantándose y yendo hacia ella.
-¿¡Algo? ¡¡Qué fuerte! ¡No, no siento algo por ti, Draco! Hace mucho que te conozco. Te he visto moquear, eructar, rascarte el culo, vomitar...-dice Hermione poniendo una cara irónica-No puedo sentir algo por ti...
-¿Pues cuál es el problema?
-Hay que adaptarse al cambio, o el tema hombre-mujer acabará interponiéndose.
-¿Qué es esto: "Cuando Harry vivía en los 80"? ¡No seas absurda!-dice Draco y se tumba en la cama-nosotros superamos esa tontería...
-¿Cómo la superamos?
-Yéndonos a dormir... Estoy cansado.
-Niegas los hechos.
-No, los pruebo. Pruebo que podemos seguir siendo amigos a pesar de tus teorías de desarrollo sexual.
-No creo que funcione, Draco-dice Hermione sin estar convencida aún.
-No te me pongas femenina, Hermione...
-Ahhhh... femenina-dice Hermione mientras se abalanza sobre él, a la cama, y empieza a hacerle cosquillas por todo el cuerpo. -Vas a ver...
Comienzan a forcejear, riendo, hasta que Hermione empieza a quejarse porque Draco la está ganando. Al final, Draco consigue reducirla, sujetándola de las muñecas
-Au, au, au... Vale, me rindo. Me rindo...-dice Hermione el final.
-Somos amigos. Por mucho vello que nos salga en el cuerpo. ¿Hecho?
-Hecho.
-Y no volveremos a hablar de esto, ¿hecho?
-De acuerdo.
-Genial...-dice Draco metiéndose en la cama.
-Genial...-dice Hermione haciendo lo mismo, los dos se acomodan.
-Buenas noches-dice Draco.
-Buenas noches-le responde.
Draco se queda mirando a Hermione, que está de espaldas a él. Después, mira al techo.
-¿Por qué tenías que sacar el tema?-dice finalmente Draco.
Afuera de la casa de Draco. Hermione está sentada en una hamaca, al borde del muelle. Nos vamos acercando a ella, cuando de pronto, se abalanza sobre ella un "monstruo" marino que se la lleva al agua
-¡¡¡¡¡AAAAAAHHHH!-grita Hermione.
-¡¡No, no!-dice Draco sujetando una cámara de vídeo con una cinta-¡Corte, corten... corten! Harry, tenías que contar hasta tres antes de salir del agua, ¡¡vamos!
El monstruo marino, amigo de Draco y Hermione, es Harry. Es otro adolescente de 15 años, alto y moreno. Éste intenta salir del agua, pero Hermione le empuja de nuevo y sale ella primero.
-¡¡Estoy harta!-dice Hermione.
-Harry, vamos, Hermione, venga...-intenta animarlos Draco.
-Pero, ¿qué ha fallado?-dice Harry quitándose la máscara.
-Si sales antes de que se fije el plano, no da nada de miedo...
-Has vuelto a hacerlo-dice Hermione a Harry, cuando ambos ya habían salido del agua-¡me has tocado el culo!
-Pero si no tienes, ¡anda allá...!-dice Harry.
-Vamos muy atrasados, nos quedan dos semanas, no llegaré a tiempo al festival...-dice Draco...
-No pienso hacer de víctima...-dice Hermione harta.
-Chicos, cooperación, por favor...-dice Draco cansado, sus dos amigos siempre había discutido por una u otra cosa se la pasaban peleando. Desde que eran unos niños cuando se conocieron hace como 10 años...
-¡Eh, la culpa es de Meryl Streep, yo hago lo que puedo...-dice Harry justificándose.
-¡Ya se ve!-dice Hermione.
Un taxi para cerca de donde están el grupo. Draco está mirando, y al segundo Harry también. Del coche sale una chica rubia, un poco baja, pero de muy buen ver.
-Vaya, vaya, ¡cerradme la boca!-dice Harry embobado con la chica, mientras camina hacia la chica.
Hermione se queda mirando extrañada, tanto a Harry como a Draco, que ha ido detrás de Draco, ambos en busca de la nueva muchachita. Vemos que la chica de cabello negro muy hermosa, también camina hacia ellos. Ve a Draco y Harry y sonríe.
-Hola-dice la chica nueva.
-Hola, soy Harry-se estrechan las manos-es un placer...
-Hola-vuelve a decir la chica nueva.
-Hola, yo soy Draco.
-Tú eres Draco, Draco, sí, claro, ya nos conocemos. Soy Cho.
-¡Aahh...! La nieta de Nueva York, claro...-dice Draco acordándose de ella.
-Así es...-dice Cho.
-Vaya... Estás... diferente...
-La pubertad...-dice en voz baja Hermione que ha estado contemplando la escena alucinada, entre Draco y Harry-Hola, yo soy Hermione, vivo río abajo, y no nos conocemos...
-Hola.
-...de nada-dice irónicamente Hermione.
-¿Has venido de visita?-pregunta Draco.
-Emm, sí, mi abuelo tenía la aorta bloqueada, y se la han cambiado por un tubo de plástico. Mis padres me han hecho venir para ayudar un poco.
Hermione mira a Draco, como extrañada por la reacción de su amigo ante esa nueva chica.
-¿Vas a ir al Instituto?-pregunta Draco.
-Sí, estaré en secundaria...
-Genial, como nosotros...-dice Harry emocionado.
-¿Sí? Bien...
Hermione sonríe un segundo, pero después de pone seria, mirando a Cho.
-Mi abuela me está esperando, tengo que irme, pero... me alegro de haberos conocido y... nos vemos en clase...-Cho comienza a alejarse.
-Si no es antes, sí...-dice Draco. Harry mira a Draco y ríe.
-"Si no es anteeesss"...-dice Hermione imitando a Draco.
-¿Está bien, eh?-le dice Harry a Draco.
-No está mal-contesta Draco.
Vemos a Cho volviéndose para mirar hacia Draco. Después, vemos a Draco con una sonrisa de oreja a oreja
Draco y Harry van caminando hacia la casa.
-¿Crees que será virgen? ¿Te la vas a tirar?-interroga Harry a Draco.
-Acabo de conocerla...
-¡Y has perdido el tiempo! Un hombre de verdad ya estaría en ello, no sé si me entiendes.
-Tacto. Busca en el diccionario.
Entran en casa de Draco. Se oyen ruidos extraños. Ambos van hacia el salón y se encuentran a los padres de Draco, Lucius y Narccisa, besándose apasionadamente encima de la mesa.
-Ohhh, Dios, ¡¡mamá!-dice Draco apenado, mientras Harry solo sonríe.
-¡Ah, hola, hijo!-le dice su padre a Draco.
Narccisa se da media vuelta, para ver a Draco, pero la mesa se acaba y se da de bruces contra el suelo.
-Tu madre y yo estábamos...
-...discutiendo si realmente necesitamos...
-...una mesa de café nueva. Hola Harry-dice el padre de Draco.
-Hola Sr. Malfoy, Sra. Malfoy...
-Hola, Harry-dice la madre de Draco y luego voltea a ver a su hijo y le dice-No te pongas colorado, podría ser peor...
-Señora Malfoy, me encanta su nuevo peinado...
-Mm... gracias, Harry.
-Pero, ¿tú no trabajabas hoy?-le pregunta su padre a Draco.
-Se nos ha hecho tarde...-explica Draco.
-Yo ya tengo que irme...-dice la madre de Draco levantándose y luego le dice a su esposo-Bueno, Mister pedazo de carne, te veré luego-y se besan y Draco se pone frenético.
-¡¡Mamá, mamá!-grita Draco, y Harry de nuevo sonríe.
Hermione en una barquita, remando. Se aproxima a un muelle, y sube a él, dejando atado el bote. Ha llegado a su casa. Va hacia ella. De la casa sale un hombre negro, se trata de Oscar, el novio de su hermana Dennis.
-La víctima que estaba buscando...-le dice Oscar trae una cuchara con algún tipo de comida.
-No, Oscar, otra vez no...-le suplica Hermione
-De esta me tengo que examinar, venga, pruébalo-Oscar le da una cucharada de lo que ha cocinado a Hermione.
-Orgásmico...-responde Hermione después de probar la comida-¿Dónde está Dennis?
Dennis sale de la casa. Está embarazada.
-Si quieres ponerte mis cosas, perfecto. Ahora no me sirven de mucho. Pero eso significa que debes ponerlas donde estaban, ¿entendido?-le dice mientras le muestra un lápiz labial
-Entendido.
-Con este bombo no puedo mirar debajo de tu cama...
-No entres en mi habitación, ¿entendido?-le dice Hermione a su hermana.
Hermione entra en la casa. Dennis habla con Oscar.
-Un día le doy una torta, lo juro...-dice Dennis a su novio.
-Prueba esto-le ofrece una cucharada de la cazuela.
-Mm... Orgásmico-dice Dennis.
Oscar le da un beso a Dennis y entra en casa
En un Videoclub donde trabajan Draco y Harry. Draco está ayudando a alguien.
-Gracias-dice Draco cuando el cliente se va.
-Si tu padre es Mister Pedazo de Carne, ¿tú eres Pedazo de Carne Junior o Pedazo de Carne II?-bromea Harry con Draco por lo que vieron esa tarde.
-Tendrán que dragar el río para encontrar tu cuerpo...-lo amenaza Draco.
En ese momento entra una chica rubia, de pelo rizado, y voz repelente, está con ellos. Se llama Nellie.
-¿Forrest Gump va en la sección de comedia o en la de drama?-pregunta Nellie al parecer ella también trabaja ahí.
-¿Cuántas veces vas a preguntármelo?-dice Harry algo cansado.
-En la sección de drama...-responde Draco.
-Gracias, Draco-se da media vuelta.
-¿Dónde tendrá el cerebro?-Harry le dice en voz baja a Draco.
-Disculpa, ¿qué acabas de decir?-dice Nellie volviéndose-¿Ese comentario desdeñoso y negativo estaba inspirado en mí? Porque, si es así, y corrígeme si me equivoco, quiero recordarte quién eres...
-Lo sé, el dueño de esto es tu padre...-dice Harry.
-Nooo... Me refiero más bien al gran universo rotatorio de la vida...
-Ja-ja-ja. ¿Y quién soy, Nellie?
-No eres nadie. De eso se trata. No estás, ni siquiera existes. Porque si existieras, tal vez debería devolverte los patéticos insultos que rumias entre dientes. Y, sin embargo, es un alivio saber que eres vapor-dice Nellie haciendo gestos con las manos-Fuffffff... fuuuffffff... Inexistente, NADA.
Una mujer de unos treinta y tantos años, rondando los 40, entra en el videoclub. Es alta, delgada, y lleva una minifalda. Harry se queda embobado mirándola. Su nombre es Yolanda.
-Dios mío, al loro. Está que se rompe-dice Harry embobado con la mujer.
-¡Un poco de respeto, es la madre de alguien!-le reprende Draco.
-Pues sé de buena tinta que las madres tienen una vida sexual excelente...-dice Harry, Draco solo sonríe y Yolanda llega hasta ellos.
-Buenas tardes, ¿puedo ayudarte?-dice Draco.
-Sí, claro. Es la primera vez que vengo, y quiero alquilar un vídeo.
-Excelente, rellena esto y enséñanos una tarjeta de crédito-dice Harry entregándole unos papales, Yolanda los toma y comienza a llenarlos.-¿Eres nueva en el pueblo? Porque no te he visto antes por aquí...
-Sí, lo soy. Me llamo Yolanda. ¿Y tú?
-Harry. Encantado-tendiéndole la mano.
-Bueno, ahí tienes, Harry-dándole al papel.
-Vale, gracias-dice Harry cogiendo el papel-quizá podría ayudarte a encontrar algún vídeo ahora...
-Tal vez... Me apetece algo romántico.
-Tenemos las novedades en es...-empieza a decir Harry pero Yolanda lo interrumpe.
-¡Oh, no! Prefiero los clásicos, son mejores...
-Ahh... Los clásicos están en...-dice Harry embobado.
-¿Dónde tienes El Graduado?
Draco asoma la cabeza, sonriendo.
-¿El Graduado?... Esa es en la que...-empieza a decir Harry.
-La mujer madura, Bancroft, seduce al jovencito Dustin Hoffman...
-Ah... La buscaré-dice Harry más abobado aún. Pero en eso sale Draco.
-Precisamente, aquí está...-dice.
-Gracias.
-¿Necesitas alguna otra cosa?-pregunta Draco.
-Ahhh... No, eso es todo. Dime, ¿cuánto es?-pregunta Yolanda.
-Págala al devolverla. No olvides tú tarjeta...-dice Draco.
-Sí, aquí está-dice Harry extendiendo la tarjeta.
-Espero que te guste-dice Draco.
-Seguro-dice Yolanda volviéndose-ah, ha sido un placer, Harry...
-Sí-Harry se queda mirando a Yolanda irse, y Draco contempla la cara de alelado de Harry.
-Límpiate la baba-le dice Draco a Harry.
-Estaba ligando conmigo-le dice Harry.
-Se estaba QUEDANDO contigo...
-¡¡No! Se ve que le gusto...
-¡Le gusta Dustin Hoffman!-le dice Draco mientras se va a la trastienda.
-Yo...
Draco corriendo hacia su casa, con unas cintas de vídeo. Ve a Cho sentada en el muelle, y va hacia ella. Se sienta a su lado.
-Hola. ¿Qué tal está tu abuelo?-le pregunta.
-Sigue respirando. Ya es algo. Aunque mi abuela sí que es el desafío. Tiene la manía de rezar todo el rato, y resulta extraño, yo paso de la religión... ¿Qué tienes aquí, a ver?-le pregunta al ver las películas que lleva en la mano-"La Criatura de la Laguna Negra", "Humanoides del Pantano Profundo"...
-Las estudio. Estoy haciendo una película-le explica Draco.
-¿En serio?
-Sí.
-Tan joven, y tan ambicioso.
-Tengo 15. Spielberg empezó a hacer películas a los 13.
-¿Por qué lo haces? ¿Qué te atrae del cine?-pregunta Cho.
-Rechazo la realidad.
-Ah, claro.
-¿Quieres ver mi estudio?-le ofrece Draco a Cho.
Los dos entran a la habitación de Draco. La puerta se abre y entran él y Draco.
-Emmm... Deja que lo adivine-dijo Cho viendo la habitación decorada con carteles de películas-¿Fan se Spielberg?
-Digamos que, simplemente, le idolatro, sí.
-Muy revelador.
-Su carrera está reflejada en las paredes, todo está dispuesto en orden descendente de recaudación. Ahí van los grandes éxitos: Parque Jurásico, E.T., Tiburón y la serie de Indiana Jones. Y en la pared de aclamadas por la crítica, tengo La Lista de Schindler y El Color Púrpura... Ah, y también , por cuestión de humildad-dice Draco y abre las puertas del armario-tengo puestas las demás: 1941 y Always, en lugar discreto pero accesible...
-¿Te suena de algo la distorsión obsesiva de la realidad?-le pregunta Cho riendo.
-Voy más allá. Yo creo que todas las respuestas de la vida están reflejadas en alguna película de Spielberg. Es una teoría en la que trabajo. Cuando tengo un problema, veo la película adecuada de Spielberg, y llega la solución.
-¿Has considerado pedir ayuda médica?-le pregunta Cho a Draco y los dos ríen.
-Ingeniosa. Eso nos gusta aquí.
Hermione va hacia la casa de Draco. Sube la escalera, y se detiene un poco al oír la voz de Draco hablando con alguien.
-Te veo como una heroína, espontánea pero compleja, que resuelve la situación...-decía Draco a Cho.
-Ah, qué halagador...
-La asociación de críticos de Boston tiene un programa para cineastas jóvenes. Hay mucha competencia, dentro de dos meses termina el plazo.
En eso Cho oye una voz que viene de afueras. Es su abuela, que la llama.
-¡¡CHO!
-Ohhh...
Vemos a la abuela de Cho, desde su casa, esperando en el porche. Después, vemos a Hermione, todavía de pie sobre la escalera, ya arriba, que se reclina un poco hacia delante para que Cho no la vea, ya que Cho se ha asomado a la ventana lateral de la casa.
-Tengo que irme, o entrará en erupción.
-Te veré en clase.
-Adiós-se despide Cho.
-Adiós.
Cho sale de la habitación, por lo que Hermione entra por la ventana como si no se hubiera enterado de nada.
-¡Hermione, ¿dónde estabas? Ven, siéntate, mira esto.
Hermione, que está un poco seria, se sienta en la cama junto a Draco, el cual pone la televisión. En ella, sale su madre junto con un hombre, presentando los informativos.
-7725982. Vamos a verlo, Bob...
-¿Crees que mi madre se acuesta con ése?
-¿A qué viene eso?-pregunta Hermione extrañada.
-Mira-dice Draco mientras rebina la cinta.
-982. Vamos a verlo, Bob.
-Pasa algo con las bes, demasiado suaves-dice Draco luego imitando a su madre-"Vamos a verlo, Bbbooobbb..."
-Tú alucinas-dice Hermione que se ha acomodado en la cama, con los brazos cruzados-¿cómo va a acostarse con ese? Tu padre es un espécimen masculino perfecto.
-No sé, me da que están liados...
-Sólo buscas conflictos. Para ti todo es un guión en potencia. Acepta que tu vida es perfecta, Draco. Es una realidad.
Draco rebobina de nuevo la cinta.
-Vamos a verlo, Bob...
-La limpieza continúa...-dice Bob.
Draco rebobina.
-982. Vamos a verlo, Bob...
Draco rebobina.
En la casa de Cho. Ella entra en la habitación de su abuelo, el cual está en coma, tumbado en la cama. Se sienta en una silla.
-Buenos días, abuelo-dice Cho mientras mira la cicatriz que él tiene en el pecho, la toca. Su abuela entra.
-¿Qué haces?-le pregunta su abuela.
-Ah... Estaba dándole los buenos días.
-Ya puedes desayunar.
-Me alegro de haber venido, abuela.
-Date prisa, o llegarás tarde el primer día.
Las dos están en la cocina. Y hay un par de huevos para que Cho desayune.
-Normalmente no tomo nada por la mañana, abuela. Te agradezco la molestia y eso, pero no me entra nada hasta medio día. Con un café tengo suficiente.
Pero su abuela le pone el plato de huevos de todas maneras.
-Bien, lo recordaré en un futuro-dice.
-Cuéntame algo de Draco, el vecino de al lado. Está diferente. Le recordaba más bajo y compacto.
-Aléjate de él, ese chico trae problemas-es lo único que le dice su abuela.
-Como todos. ¿Y qué pasa con la chica que vive junto al río? Mm, Hermione, creo que se llama.
-La chica que vive junto al río ha estado colándose por la ventana del dormitorio del vecino durante los últimos 10 años. Nunca van a la Iglesia, se podría decir que son elementos indeseables-dice la abuela mientras se pone a rezar.
-Ah... Bueno.
-Bendice la mesa-le dice su abuela a Cho.
-No déjalo, hazlo tú.
-Preferiría que lo hicieras tú.
-Gracias, abuela, pero no-dice Cho.
-¿No quieres dar las gracias al Señor esta mañana?
-Oye, abuela, no quiero entrar en esto. Acabo de llegar y soy propensa a las jaquecas. Pero no estoy muy interesada en la iglesia, la Biblia y la costumbre de rezar.
-¿Cómo dices?
-Que no practico ninguna religión, abuela. Soy atea-dice Cho mientras la cara de su abuela cambia por completo.
Instituto de Oxford. Cho está metiendo y sacando cosas de su taquilla. Llega Nellie.
-Hola, soy Nellie.
-¿Nellie? ¿Como la de La Casa de...?
-Lo sé, lo sé. La Casa de La Pradera era para mis padres una serie de culto. Pero no preconcibas tus ideas, no me parezco en nada a ella.
-Yo soy Cho...
-...de Nueva York, ya lo sé. ¿Cómo está tu abuelo? Me tiene en vilo, seguimos rogando por él en la iglesia, ¿te va la fiesta?
-¿Cómo dices?
-La fi-es-ta.
-¿Me preguntas si me gusta divertirme o si me van la bebida y la drogas?-le pregunta Cho.
-Eso es subjetivo...
-Ohh... Me gusta reírme, pero sin drogas...
-Ja... Deberías ser tú la que se llamara Nellie. Hasta luego.
Cho se queda un poco cómo "¿Eh?". Pero en eso Draco aparece.
-¡Eh! ¿Qué tal todo?
-Creo que necesito un cigarrillo...
-¿Fumas?-pregunta Draco.
-Lo he dejado, pero estoy algo tensa.
-Lo disimulas muy bien.
-La negación es mi especialidad-le explica Cho a Draco.
-El primer día todos estamos tensos. Tranquila.
-Bien.
-¿Qué tal tu horario? El mío es un horror. ¿A quién tienes ahora?
-Emmm... A Brinson, Biología.
-Yo voy ahí también.
-¿En serio?-dice Cho contenta.
Harry, en su clase, haciendo el ganso con un libro encima de la cabeza. En eso entra Yolanda a la clase. Es su profesora. Harry se queda a cuadros.
-¡Yolanda!
-Hola Harry. ¿Por qué no me llamas Señorita Honda durante las horas de clase?
-Pues claro...-dice Harry mientras se sienta en su silla, y se muerde el labio inferior, mirando a Yolanda.
Cho entrando a clase de Biología. Hermione la ve entrar, y se pone la mano en la cabeza, y se escurre por la silla con la intención de que Cho no la vea. Pero no surte efecto. Cho se acerca.
-¡Eh, hola... Veo que tenemos una clase juntas...
-Aquí estamos...-Hermione sonríe, pero al segundo vuelve la cabeza y pone una cara de enfado, rabia y resignación...
Draco entrando en una clase. En ella está el profesor de la clase de Cine viendo una película. Draco va avanzando.
-Psicosis...-dice Draco.
-¿Conoces la película?-pregunta el profesor.
-Anthony Perkins y Janet Leigh, Universal, 1960. ¿Sabía usted que Hitchcock sorprendió a Janet Leigh con agua helada para que sus gritos fueran más convincentes?
-¿Quién eres?-pregunta el profesor sorprendido.
-Draco Malfoy.
-¿Y vas a estar en mi laboratorio de cine?
-Bueno, por eso estoy aquí. Parece que ha habido una confusión con mi horario. No me han admitido en su clase de cine.
-Será porque estás en primero...
-¿Qué pasa, eso es malo?
-Es una clase muy popular, hay una lista de espera. Y los cursos superiores tienen prioridad.
-Qué estupidez...-dice Draco.
-¿Disculpa?
-¿Quién ha impuesto eso?
-Yo.
-Ah-dice Draco apenado.
-¿Por qué tanto empeño?
-Pasión, señor. Pasión pura y enloquecida. Mi vida es el cine-le explica Draco.
-Ah, entiendo.
-Lo siento, creo que no he hecho una buena entrada. Quiero ser director de cine, es la ambición de mi vida, siempre lo ha sido. ¿Cuántos alumnos tiene en su clase que puedan decir lo mismo? Esto es un pueblo, aquí no hay muchas oportunidades para mí. Usted tiene el poder. Invalide esa regla absurda que niega a los alumnos su educación.
-Eres muy convincente, Draco Malfoy. Pero la clase ya está completa. Ojalá pudiera hacer excepciones, pero sería injusto y problemático. Siento decirte que mi respuesta final es no...
-Pero...
-¡NO, y punto. No cambiaré de idea.
Mientras tanto en otra clase Cho y Hermione están saliendo de ella.
-¡Eh, Hermione, Hermione! ¿Puedo hacerte una pregunta personal?
-Claro.
-¿Tú y Draco son algo?
-No, sólo somos amigos-responde Hermione.
-Espero ser tu amiga, también. Hoy mi abuela me ha prevenido contra ti, dice que sólo traes problemas.
-No es por nada, pero tu abuela está pirada...
-¿Por qué te tiene manía?
-Puedes elegir. Está mi padre, el infame convicto, o mi hermana, embarazada de su novio negro, o...
-¿Tu padre está en la cárcel?-pregunta Cho impresionada.
-Por tráfico de marihuana en cantidad superior a 100 kilos-le dice Hermione sonriente.
-Vaya. ¿Y dónde está tu madre?
-La apareció un cáncer y calló en seguida...-le dice Hermione ya no tan sonriente.
-Ah... ¿Vives con tu hermana?
-Y con el novio negro-dice Hermione pero se detiene-Le gustas...
-¿Al novio negro?-pregunta Cho sorprendida.
-A Draco-le dice Hermione muy seria, como amenazante-no le hagas daño...
Hermione sigue caminando, Cho se queda ahí.
Yolanda comiendo en su mesa en el salón de clases, en eso Harry entra en el salón de clases.
-Yolanda...-dice Harry pero se da cuenta de que no debería llamarla así, por eso se corrigió-Señorita Honda, jeje... ¿Qué tal El Graduado?
-Tal y como la recordaba...
-¿Hoy también quiere algo romántico?-le pregunta Harry.
-¿Por qué? ¿Tienes alguna sugerencia?-le responde Yolanda con otra pregunta.
-¿Ha... Ha visto ya Verano del 42?
-Refréscame la memoria...
-Bueno, va de una mujer muy hermosa que seduce a un jovencito al fin de la adolescencia-le explica Harry.
-Es de mis favoritas...
-Puedo reservársela, si quiere...
-Resulta que esta noche voy a ver la nueva película del Rialto. Tiene buenas críticas...-dice Yolanda, el Rialto es el único cine que hay en el pueblo.
-¿A sí?
-Sí.
-Bueno...-dice Harry mienta camina hacia atrás y los alumnos empiezan a entrar a clases-a lo mejor me paso a verla-al seguir yendo hacia atrás, Harry choca con un chavo que entraba a clases.
-¡Eh, cuidado!
Harry y Draco van por los pasillos platicando de lo sucedido en el día de hoy.
-Amigo, la mujer del videoclub es mi profesora de literatura-le explica Harry a Draco-tú y yo vamos a ir al cine esta noche para acosar a un miembro del cuerpo docente.
-Negativo-le responde Draco.
-¿Qué? Por fin tengo la oportunidad de perder la virginidad en un sentido totalmente mítico.
-Harry, vete a casa y masturbate. No va a ocurrir con tu profesora.
-No esta noche, amigo, ese no es plan... Quiero ir familiarizándola con mi sonrisa, mi mirada, mis vellos rasgos.
-¡Ni se te ocurra hacer eso!-dice Draco.
-Está demostrado que un alto porcentaje de maduritas se siente atraído por chicos que salen de la pubertad, les hace sentirse jóvenes-dice Harry haciendo cara de saber mucho pero al ver que Draco no le creía nada dice-. Lo leí en Cosmopolitan.
-¿Y qué haces tú leyendo el Cosmopolitan?-pregunta Draco extrañado.
-Oye, tengo tres hermanas con disfunciones menstruales. Cosmo es mi salvación...
-¿Y para qué me necesitas?
-¡Como apoyo moral, amigo, ten buen rollo! Puedes invitar a Miss Nueva York-al decir esto, los dos miran al frente y ven a un chavo hablando con Cho.-A menos que alguien se te haya adelantado... Vamos, hombre, lánzate, ponte en tu sitio, habla con ella. Eres tú quien debería leer Cosmo, reforzaría tu apreciación femenina... Venga...-le dice Harry a Draco mientras le dan un empujoncito par que este de decida.
-¡¡Draco! Hola, ¿cómo te va?-dice Cho alegre de verlo.
-Bien. Veo que ya conoces a Cliff...-le dice Draco mientras comienzan a caminar juntos.
-Sí, es buena onda...
-Sí... Es quarterback de día y travesti esquizofrénico de noche...-bromea Draco.
-¿De verdad?-pregunta Cho riendo.
-Es lo que llaman complejo de Tori Spelling. Su debilidad es la lencería. Yo te he avisado...
-¿Y cómo corre con tacones, mm?-pregunto Cho siguiéndole el juego a Draco.
-Oye, Harry ha organizado una salida al cine esta noche, nada especial, sólo unos amigos. ¿Te apetece venir?-le pregunta Draco y Cho sonríe.
Hermione va caminando por el muelle en eso Draco aparece, montando en bicicleta.
-¡Eh, Hermione! Hazme un favor...-le dice Draco a Hermione bajando de su bicicleta.
-Oh oh...-dice Harry preocupada de lo que le iba a pedir.
-Tengo una medio cita con Cho esta noche, vamos al cine con Harry. Ven con nosotros...
-Prefiero ir a un accidente aéreo...-dice Hermione sarcásticamente.
-Quedará muy raro si vamos dos chavos con Cho, te necesitamos...
-¿Para que parezca una doble cita?
-Sí, pero no. Harry tiene una misión pasional.
-¿Te ha dado un aneurisma? Ni hablar.
-No es una cita, cita. Sólo quiero que Cho se sienta cómoda.
-Mira, qué considerado...-dice Hermione.
-Anda, por favor... Porfa, porfa, porfa, porfa... Hermione... Porfa...-sigue diciendo Draco para poder convencerla.
-Mmm... Está bien...-termino por decir Hermione.
-Uyyy, gracias, gracias, eres la mejor-le dijo Draco abrazándola-. Sé que te preocupa nuestra relación, pero no va a cambiar nada. Podemos hablarlo todo.
Draco se sube a su bicicleta y se va mientras Hermione se queda pensativa.
En la casa de Cho... esta estaba pidiendo permiso para ir al cine...
-¿A dónde vas exactamente?-interrogaba su abuela a Cho.
-Bueno, Draco tiene una pistola, y vamos a atracar unas licorerías y hacernos unos tatuajes...-respondió jugando Cho
-¿Por qué tienes que hablar así, hija?
-Sólo intento establecer contigo una relación basada en el humor... Soy inofensiva, ya lo verás...
-Pero vuelve antes de las 10-le dijo su abuela.
-Mmm... Eso es sencillo. Te agradezco la concesión, creí que ibas a encadenarme a una silla o algo así.
-No digas eso, si te apetece ir al cine, hazlo, pásalo bien, claro que tendrás que acompañarme a la iglesia el domingo...
-Ahhh, había una contrapartida. Abuela, esa batalla no la vas a ganar-le explico Cho haciendo cara de indignación.
-Me temo que debo insistir.
-Soy firme en mis creencias, respétalas.
-Sé lo que pasó en Nueva York, ir a la iglesia te haría bien...
-¡Déjame decidirlo a mí! No creo que la iglesia sea el camino. Pero te prometo que mantendré una actitud abierta y que respetaré tus creencias mientras esté aquí.
-La decisión está tomada, harás lo que te diga, estás bajo mi tutela.
-Oye,-dijo Cho riendo-estoy intentando controlar mi naturaleza contestataria. Haremos una cosa, iré a la iglesia cuando tú digas "pene".
-Deja de hablar así-le dijo su abuela alterada.
-Sólo es una palabra, abuela. Clínica y técnica, "pene". –dijo Cho y luego haciendo una pausa continuo-Sabes que te quiero mucho, pero debes relajarte. Hasta luego.
Lucius en su casa, trabajando en la maqueta del restaurante que tiene en mente.
-Bueno, ya me voy-le avista Draco a su padre.
-¿Qué te parece? He pensado que las camareras deberían ir de submarinistas-le pregunta Lucius a su hijo sobre la maqueta.
-Es poco práctico. Creo que este asunto del restaurante acuático se te está yendo de las manos.
-Ah, aparta. Ya habla tu madre. Verla trabajar es de lo más estimulante.
-Me largo.
-Diviértete. Y póntelo-le da como una advertencia su padre a Draco.
-El tema del condón es prematuro...
-Nunca está de más.
-¿Pero qué les pasa a todos con el sexo? Nadie habla de otra cosa... Sexo, sexo, sexo... Pero, ¿qué tiene de especial?
-El sexo es una parte muy importante de los seres humanos...-le explica Lucius a su hijo.
-¿Por eso os lo hacen en la mesita de café? Si el sexo es tan importante, ¿por qué Spielberg no tiene una escena de sexo en ninguna de sus películas, mm? Lo mantiene donde debe estar, como debería ocurrir en la vida real-dice Draco en ese momento alguien toca a la puerta. -Volveré temprano.
En la casa de Hermione. Oscar está leyendo una revista (Bon Appetit), tumbado en el sofá. Dennis está pintando una maqueta de una casa, y Hermione sale.
-¡Eh, eh, un momento...-dice Dennis y la agarra del brazo.
-¡Llego tarde!-le dijo Hermione a su hermana. Pero Dennis no le hace caso y se saca del bolsillo un pintalabios.
-Tu actitud no tiene sentido-le dice Dennis mientras le pinta los labios a Hermione, mientras ella la mira con cara extrañada. -Frótate los labios así...-Dennis se frota los labios, y Hermione la imita-guárdate esto, y cada hora, más o menos, te retiras y vas a retocarte un poco-le ofrece el lápiz de labios y Hermione lo coge. -¿Entendido?-Hermione sonríe.
Draco, Cho, Hermione y Harry van caminando por una calle.
-¿Y piensas quedarte todo el curso aquí?-le pregunta Draco a Cho.
-Bueno, eso depende de mi abuela, en realidad. Y también de mis padres-dice Cho mientras Hermione los mira, de brazos cruzados.-Hermione, me encanta ese lápiz de labios, ¿qué color es?-dice Cho tratando de se amable.
-Rojo bruja. A mí tu color de pelo, ¿qué marca es?-dice Hermione enojada mientras Draco ríe tímidamente.
-Disculpa a Hermione, nació en un ESTABLO-se disculpa Draco.
-No, tranquilo. Hermione sólo me doy reflejos...
-Ahh... Y ¿qué, Cho? ¿Eres virgen?-sigue diciendo Hermione para atacar a Cho.
-¡Qué madura!-le dice Draco a Hermione.
-Es que Draco es virgen, y con dos vírgenes la primera experiencia puede ser un desastre, ¿no?-le dice Hermione a Cho, mientras Draco se cambia de lado al de Hermione y le dice.
-Te voy a matar...
-Sólo quería ayudar, no sé, ir al grano...-dice Hermione.
-No, déjala, Draco. Sí, soy virgen. ¿Y tú, Hermione, eres virgen?-le pregunta ahora Cho no se iba a quedar atrás.
-Oh, por dios, ¡claro que no! Me desfloró un camionero...
-¿¿Qué pasa contigo?-le dice Draco a Hermione enojado. Hermione le mira insinuante, sin decir nada. Draco se une a Cho y Harry, que están comprando las entradas. Hermione también se une, después.
En el interior del Rialto. El grupo entra y se sienta en una fila. Primero Harry, después Hermione, luego Cho y finalmente Draco. Harry ve a Yolanda llegar y coger asiento.
-Vuelvo en seguida-les dice a sus amigos.
Harry se levanta y se va. La película comienza. Hermione mira a Draco. Draco mira a Cho. Cho no mira a nadie, sólo a la pantalla. Draco acerca su mano a la de Cho, pero al final se arrepiente y retrocede. Hermione se da cuenta de este detalle. Observa la escena extrañada. La mano de Draco vuelve a la carga, toca un poco a la de Cho. Hermione observa muy atenta y preocupada. Cuando por fin la mano de Draco se abalanza a la de Cho, Hermione reacciona súbitamente.
-Oye, Cho, ¿a ti te gustan grandes?-le pregunta Hermione a Cho.
-Emm, ¿qué, disculpa?
-¿Hasta qué punto te interesa el tamaño?
-¡Hermione!-dice Draco.
-Bueno, no sé, como soy virgen, supongo que no lo he pensado, ¿qué prefieres tú, Hermione?-le dice Cho a Hermione.
-Yo prefiero una...-comienza Hermione pero Draco la interrumpe.
-¡Vente conmigo afuera! ¡¡Ahora!-le dice Draco a Hermione amarrándola del brazo y llevándola para afuera.
-¿Qué haces, Draco?
-¡¡Te voy a estrangular, yo te estrangulo!
-¿Ves qué dedos más largos tiene?-dice Hermione mientras los dos dejan la sala de cine.
Mientras tanto Harry llega a donde está Yolanda.
-Hola, Yolanda...
-Hola, Harry, ¿qué estás haciendo aquí?
-He venido a ver la película, con unos amigos...
-¡Ah, ya...! Me alegro...
-Pero puedo quedarme contigo. ¿Una galleta?-ofrece una galleta.
-No, pero...
-Ah, por cierto, Verano del 42 está reservada a tu nombre-le dice Harry.
-Harry, creo que no lo entiendes...
-¡¡No, no, de nada, de nada! Incluso podría pasarme a verla contigo, tal vez tú...-pero en eso un hombre llega con un vaso de palomitas.
-Harry, ¿no quieres volver con tus amigos?-le dice Yolanda a Harry.
-¿Quién es este tipo?
-Un amigo...
Pero una persona que había detrás se reclino hacia ellos.
-¡¡¡EH! Silencio.
-Lo siento...-dijo Yolanda.
-Yolanda, ¿te está molestando?-dijo el hombre que estaba acompañando a Yolanda.
-No, Benji-dijo Yolanda.
-¿Benji? La señorita Honda me ha invitado...-dijo Harry.
-¡No exactamente!-dijo Yolanda y luego le dijo a Harry-Harry, tienes que entender que sólo fui a alquilar una película...
-Voy a acompañarte a tu butaca...-dijo Benji.
Benji coge a Harry del brazo, éste se levanta rápidamente de la butaca, quitándose la mano de Benji de encima. Pero las palomitas que tenía Benji acaban por encima del hombre que antes se había quejado, que reacciona pegándole un puñetazo a Harry.
Mientras tanto Draco y Hermione a grito limpio en el hall del teatro.
-¡¿Te has vuelto loca, cuál es tu problema!-le dice Draco enojado.
-¡¡¡Mi problema es que desde que apareció Doña Reflejos no me has dirigido ni una palabra...!
-¡¡Chorradas! Eso son chorradas y lo sabes...
-¡¡Lo que sé es que tienes toda la sangre en la entrepierna, y ahora pasas de los demás olímpicamente.
-¡¡Me gusta Cho, ¿te enteras! Demándame, creía que eras mi amiga, ¿por qué no lo entiendes?
-¡¡Sí! Yo lo entiendo todo, me estoy hartando de entenderlo... Es lo único que hago-dice Hermione mientras se da la vuelta y pretende irse.
-¡Hermione!
-Se ve que nada te afecta, Draco. Vives tan apartado de la realidad que no ves más allá de tus narices.
-Pero, ¿de qué estás hablando?
-¡De tu vida! Es un maldito cuento de hadas y ni te enteras. Sólo buscas conflictos para ese guión que estás escribiendo. Deja de vivir películas. Crece un poco-y Hermione se va.
Ahora en el jardín de casa de Cho. Draco y ella llegan, después de haber terminado de ver la película.
-Te acompaño hasta la puerta-se ofrece Draco.
-¡Oh, no! Mi abuela estará esperando con un rodillo..
-Ah, claro.
-Sí...
-Ya-dice Draco llegando hasta la valla.- Bueno...
-Bueno...-repite Cho.
-Ha sido una noche repulsiva.
-Aha-dice Cho, mientras Draco se reclina para besarla, pero elle en el último momento retira la cara.- Mira, todo esto, todo ha sido culpa mía. Ya sé que no soy la más poderosa del universo, pero me siento totalmente responsable de lo ocurrido...
-No, yo... metí la pata, lo fastidié, yo debería llevar una L aquí-dice Draco haciendo el signo de perdedor -loser- con los dedos, en la frente.
-¡¡No, no, no, eso no es cierto, Draco. Eres muy dulce, y avispado. Tienes un gran sentido del humor. Eres muy divertido, pero sin ponerte pesado. La verdad es que tienes... mucho talento. Y eres de tez clara, eso me gusta...-ambos ríen.
-Gracias...-le dice Draco
-No, gracias a ti. Las cosas no me fueron lo que se dice muy bien en Nueva York, y no sé, ahora tengo un poco de miedo. Pero gracias-dice Cho mientras la luces del porche se encienden y la abuela sale a él. -Oh, tengo que irme. Pero... gracias por todo, Draco...
-Oh, p-p-pero...
-Voy a imaginar que nos hemos besado, ¿vale?-dice Cho mientras va hacia su casa, Draco sonríe, y se vuelve de nuevo para mirar a Cho.
Harry va caminando por el muelle y Yolanda está cerca.
-Pero, ¿qué hace aquí?-se dice Harry a si mismo, mientras camina hacia ella.
-¡Harry, ¿estás bien!
-Sobreviviré...
-Espera, ¿podemos hablar un rato?-pregunta Yolanda.
-¿De qué?
Yolanda intenta tocar la herida ocasionada por el puñetazo, pero Harry le agarra de la muñeca y le baja la mano
-¿De El Graduado o de Verano del 42? ¿De cuál quieres charlar?-continua hablando Harry.
-Quiero aclarar de una vez este malentendido.
-Lo entiendo todo perfectamente bien, SEÑORITA Honda.
-De verdad que lo siento...-se disculpa Yolanda
-Eres una mentirosa, ¿no crees? ¿Cómo puedes decir que fuiste sólo a alquilar una cinta?
-Porque eso es lo que hice...
-¡¡Y una mierda! Lo cierto es que eres una mujer para caerse de espaldas que se siente algo insegura porque se acercan los 40. Y cuando un crío joven y viril como yo flirtea contigo, te gusta. Y lo acentúas, fantaseas sobre cómo sería pasar un rato con un joven que está a punto de ser un hombre. Porque eso te ayuda a sentirse más atractiva. El proceso hacia la vejez se hace así más soportable, ¿no? Pues que sepas que te lo has perdido, soy el mejor sexo que no tendrás jamás.
-Te equivocas en algo, Harry. No eres ningún crío...
Yolanda lleva sus manos a los hombros de Harry, y le da un beso apasionado. El "beso" continúa más apasionadamente, hasta que Yolanda se aparta.
-Oh, Dios, perdona... ¡¡Oh, Diossss!-es lo único que alcanza a decir Yolanda antes de salir corriendo. Harry se queda con una sonrisa en la boca.
-Nos vemos en clase, señorita Honda...
En la habitación de Draco. Él entra, enciende la tele, coge algunas cosas que había encima de la mesa y abre el armario para meterlas. Hermione está dentro de él...
-¡Hola! ¿Qué estás haciendo ahí?
-Charlar con tu ropa...-bromea Hermione mientras va hacia la cama y se deja caer sobre ella.
-¿Qué ha pasado esta noche, Hermione?-le pregunta Draco.
-Se me ha ido la olla.
-¿Qué está ocurriendo entre nosotros?
-No tengo ni idea...
-Sé que tengo una vida increíblemente perfecta, y que no le doy importancia...
-Sí, eso es...
-Siento haberme portado como un macho insensible, creía que lo había superado. No quiero perderte, Cho. Nuestra amistad es lo único que me importa-dice Draco mientras se sienta en una silla-Cuando te vi con los labios pintados, pensé que estabas preciosa... Bueno, no dije nada, pero lo pensé.
-¿Sí?-dice Hermione extrañada y con una sonrisita, a la vez.
-Pero eso fue todo, Hermione. No fue nada más que eso...
-Cuando te vi intentar coger la mano a Cho, bueno... No es que esperara que me dieras la mano, pero, no quería que se la dieras a ella.
-¿Y qué pasa con lo nuestro? ¡¡Es todo tan complicado...!
-Estamos creciendo, eso es lo que pasa. Hasta Spielberg superó el complejo de Peter Pan...-dice Hermione mientras se levanta y se dispone a irse.
-¿A dónde vas?-pregunta Draco.
-Ya no puedo quedarme a dormir. No podemos seguir hablando como hablábamos antes, no podemos decirnos ciertas cosas...
-No, eso no es cierto, ¡puedo contarte lo que quieras!
-¿Sí? ¿Con qué frecuencia te la masturbas?
-¿Qué?
-Ya me has oído... ¿Cuántas veces a la semana?
Hermione se queda esperando. Draco mira para otro lado, incómodo. Intenta decir algo pero no puede. Hermione baja la vista, parece que va a llorar. Un silencio mucho más que incómodo. Draco levanta la vista hacia ella, y...
-Buenas noches-le dice Draco.
-Nos vemos, Draco-dice Hermione levantando la visa, dándose media vuelta y saliendo por la venta.
-Nos vemos, Hermione.
Hermione sale por la ventana y baja la escalera. Draco se queda en su habitación, todavía sentado en la silla, y hace gestos de no estar de acuerdo con lo que ha hecho. Se levanta de la silla y se pasa las manos por el pelo. Hermione ya está en el jardín, mira hacia la ventana del cuarto de Draco, está muy seria, con los brazos cruzados. Draco está en su habitación, se da unos cuantos cabezazos contra la puerta del armario. Hermione corre por el muelle hacia la barca. Está llorando. Draco se sienta de nuevo en la silla. Hermione ha llegado a la barca y comienza a desatar el cabo. Sigue llorando. Vemos un primer plano de su cara. De pronto...
-¡¡¡Hermione!-le grita Draco desde la venta, y Hermione mira.-¡¡Casi siempre por las mañanas con el show de Katie Couric!
Hermione mira, sin entender lo que quiere decir. Después se da cuenta, y comienza a reír. Draco también. Sigue riendo mientras comienza a empujar la barca. Hermione comienza a remar y oye ruidos cerca. Es la madre de Draco bajándose de un coche conducido por un hombre. Es Bob, el otro presentador que trabaja con ella. Narccisa le da un beso a Bob, que es más que un beso. Hermione se queda perpleja. Mira hacia la ventana de Draco, para ver si éste se ha enterado, pero la ventana está vacía...
