Epílogo
Recuerdo de un Amor Perdido
3…El Fin…
Los primeros rayos del sol entraban por la ventana de la recámara, lo que hizo que se moviera perezosamente sobre el colchón. No quería abrir los ojos, no entendía por que las cortinas estaban abiertas dando paso a la luz tan molesta en ese momento.
Por fin logró abrir los ojos al tiempo que una pequeña criatura saltaba sobre su cama.
-¿Qué día es hoy mami?- preguntó Ethan-Hoy es mi cumpleaños¿recuerdas? Hoy es 5 de agosto, mami, quiero conocer el pueblo mami quiero comer helado, y comprar muchas cosas mami¿si? Anda vamos, por favor…
-Ethan…
-Anda vamos, vamos, te prometo que no me pierdo, por favor, y vamos a jugar…
-Ethan…
-Y vamos al parque y comemos galletas y me compras muchos dulces y…
-¡Ethan! Tranquilo, deja de brincar, ven aquí- le decía Hermione ya sentada mientras observaba, como cada mañana, aquellos pequeños ojos grises que no la dejaban olvidar- Haremos lo que tu quieras.
Vivían en una pequeña casa en el mundo muggle pero solían ir al callejón Diagon donde pasaban largas horas.
Hermione trabajaba pero su horario era flexible y le permitía pasar tiempo con el pequeño y nunca le ocultó el hecho de que la magia formara parte de su vida, por lo que de igual forma salían cada vez que podían, como aquella mañana.
Sólo que él nunca le pidió visitar Hogsmeade… hasta ahora
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Hogsmeade solía tener mucha gente y aquel día no fue la excepción, todas las tiendas estaban llenas pero no fue impedimento para que Ethan condujera a Hermione entre tanta gente directamente a Honeydukes, de donde salieron con bolsas repletas de dulces.
Hacía aire y el cabello de Ethan se elevaba, cosa que él odiaba y que evitaba continuamente echándolo hacia atrás con cierta elegancia. Hermione lo notó de inmediato y reconoció aquella elegancia como la que conoció en Draco, eran diversos los rasgos que encontraba de él en su hijo y ciertamente no podía hacer nada para evitarlo.
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Draco se despertó aquella mañana con lo que parecía un extraño interés por visitar el pueblo, recordaba haber ido solo pocas veces desde hacia tres años pero aquel extraño interés lo hizo levantarse, ducharse y salir en esa dirección.
Vivía en la antigua mansión q heredó de sus padres y su modo de vestir no cambió en absoluto, su aristocracia y elegancia seguían presentes en él y en todo lo que hacía. Lo que no hizo aquella mañana fue peinarse sino que decidió llevar su cabello tal y como salió de la ducha, cosa de la cual se arrepintió puesto que se elevaba con el paso del aire.
Caminaba pueblo abajo, hacia el área de las tiendas, odiaba el viento y las multitudes, odiaba muchas cosas pero igual se odiaba a si mismo, así que ya todo le daba igual.
Comenzó a abrirse paso entre las personas, casi las empujaba pero poco le importaba.
No sabía que hacía ahí, seguía preguntándose por que diablos había ido, pero cierta punzada en su corazón se incrementaba cada vez que deseaba irse…
Tenía la sensación de que aquella parte de su ser que le faltaba estaría en aquel pueblo.
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Había gente en los establecimientos, en las calles, en las esquinas, a cualquier lado al que Hermione volteara veía una multitud…pero no a Ethan. Si tan solo no se hubiera soltado de su mano o no le hubiera quitado la vista de encima…tal vez el niño todavía estaría con ella y ella no tendría esa sensación que se apoderaba de ella cada vez que eso ocurría. Ethan solía soltarse y siempre lo encontraba unos metros más allá, pero ésta vez había recorrido un par de calles…y seguía sin él.
Desesperada intentó correr, comenzó a llamarlo casi a gritos, pero el niño no aparecía. La angustia se apoderó completamente de ella, miraba en todas direcciones sin una señal, algo que le indicara donde estaba y la magia no parecía servirle de nada en aquel momento…las lágrimas se acumulaban pero luchaba por no llorar.
Y como si fuera una visión a causa de las lágrimas lo divisó fuera de un local, estaba quieto, sereno, ocultando su miedo bajo un fino velo de orgullo mientras esperaba a que ella apareciera.
Caminó deprisa hacia él, sólo miraba a su hijo por lo que tropezó con alguien…
-Lo siento- dijo aquella persona, pero el simple hecho de escuchar aquella voz hizo que Hermione palideciera, se detuvo y lo miró…el porte, la estatura, el cuerpo…hasta que su mirada tropezó con unos penetrantes y profundos ojos grises que la inmovilizaron…
…Casi horrorizada comprobó que estaba frente a frente con Draco Malfoy…
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Sus piernas temblaron y por un momento amenazaron con dejarla caer pero lo que nunca dudó fue su mirada, volvió a tornarse dura y fría llena del dolor que había cargado los últimos tres años.
Desvió la mirada y trató de seguir su camino pero Draco la tomó del brazo. Cerró los ojos, no quería verlo, con sólo sentir su mano mil recuerdos pasaron frente a sus ojos, la cabeza comenzó a darle vueltas y no dejaba de temblar.
-Suéltame, tengo que irme- dijo ella casi entre dientes
-Hermione, por favor, necesitamos…
-Tú y yo no necesitamos nada, al menos no juntos
-…Hablar, que me escuches, quisiera verte de nuevo-continuó él
-Ya me has visto, y yo no quiero verte más, creí que lo habías entendido, después de todo…
-Mami- Ethan la jalaba de la blusa- mami, quiero irme ya, quien es él?
Draco lentamente soltó el brazo de Hermione ante su mirada dura pero suplicante.
-No…él no es…nadie…no es nadie-respondió ella casi en un susurro tomando a Ethan de la mano, tratando de evitar que Draco lo observara directamente
-Soy Nadie? Él…él es mi…-comenzó a decir Draco intentando observar los rasgos de aquel pequeño, especialmente sus ojos.
-No Draco él no es nada tuyo-contestó ella
-Y de quién es, entonces? Dime de quien es!
-Eso no te importa, nunca te importé yo¿por qué habría de importarte eso?-dijo ella tratando de dar fin a aquel encuentro, se dio la vuelta y comenzó a alejarse de Draco.
-Por favor Hermione, dime la verdad, necesito que hablemos, te…te extraño-dijo él al fin y casi logró que ella se detuviera pero no lo hizo y siguió caminando decidida a no mirar atrás con Ethan de la mano.
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Nada había cambiado, lo sabía. A pesar del profundo dolor y el reproche, pudo ver en sus ojos el amor que aún sentía pero…aquel niño…si tan solo lo hubiera visto bien, si hubiera observado sus ojos… estaba casi seguro de que era suyo pero en los últimos meses en el colegio Hermione no dio señales de algún cambio, y aquella poción fue para…
Una idea asaltó su mente…Diggory.
Sabía que fueron amigos y que tal vez continuaban viéndose, si aquel niño era de Diggory todo estaría perdido, todas sus ilusiones de volver, todo su amor, y nada habría valido la pena, definitivamente ella ya no le pertenecería.
Trató de quitarse esa idea pero no pudo, aquello era lo más probable y se odio aún más…seguía tan bella y la amaba con la misma intensidad…
…Supo que si no hablaba con ella se odiaría toda la vida…
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Hermione entró todavía un poco pálida a su casa, no podía creer lo que acababa de ocurrir.
El hecho de encontrarlo de nuevo, con sólo verlo, la herida se volvió a abrir, creyó estar sobreponiéndose a lo sucedido en el colegio pero ahora se daba cuenta de que nunca fue así.
Ahora más que nunca deseaba alejarse pero al mismo tiempo moriría por volver a verlo y decirle la verdad…sobre Ethan y lo mucho que aún le amaba.
Cerraba los ojos y veía su mirada, más clara que nunca, igual de dura, fría…y llena de amor.
No podía verlo de nuevo, se había prometido no caer de nuevo. Había sufrido demasiado como para tratar de olvidarlo todo pero lo mismo ocurría con su amor…lo amó tanto…
Pero no, no se acercaría a él por el bien de Ethan…y de ella, no deseaba que le hiciera lo mismo, no soportaría que la lastimara otra vez.
Aunque recordaba cada vez que él le dijo que la amaba, tenía miedo…
…Miedo de amarlo aún más…
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Se encontró con unos ojos grises en la oscuridad a escasos centímetros de los de ella, sentía su respiración, anhelaba su aliento y deseaba sentir su calor…
-Que haces? No deberías estar aquí- dijo Draco en un tono duro y frío tan solo amortiguado por el amor que sentía hacia esa chica.
-Tampoco deberías estar aquí y no tengo por que darte explicaciones pero no sólo tu guardas recuerdos en este lugar -contestó ella con un poco más de frialdad que la que empleó él- La mayor parte de lo que tengo de vida fue en estas instalaciones y muchos de los mejores y peores recuerdos que tengo los viví aquí…en esta mazmorra.
Se encontraban en la vieja mazmorra del colegio donde fuera por la razón que fuera ambos habían logrado entrar y donde al parecer nadie había vuelto a ir en los últimos tres años por que al entrar solo se iluminó con la tenue luz de una pequeña antorcha, por lo que apenas veían sombras.
-No sé por que nos encontramos pero ya que estamos aquí tenemos que hablar
-Ya te dije que no tengo nada que hablar contigo y de haber sabido que estarías aquí, no hubiera venido- dijo Hermione secamente sin apartarse de él y sin dejar de mirarlo a los ojos
-Se que mientes, aún si hubieras sabido que yo estaría aquí habrías venido, necesitabas venir y recordar al igual que yo, tratar de aclarar lo que sentiste cuando nos vimos esta tarde en el pueblo, se que sentiste algo Hermione, que fue lo mismo que yo sentí y por eso estás aquí
-Y que se supone que TU sentiste? Veo que el tiempo no te ha ayudado Draco, sigues siendo el mismo egoísta de siempre, sólo piensas en ti, en lo que tu sientes, en lo que a ti te parece y vuelves a pensar en ti¿no podrías por un momento pensar en que es lo que sienten los demás? Han sido tres años desde que nos vimos aquí la última vez y muchas cosas han cambiado
-Para mi no ha cambiado nada, te amo con la misma intensidad sino es que con más fuerza ahora que te he vuelto a ver, nunca he dejado de amarte y…
-Y para mí si han cambiado, ahora hay alguien más en mi vida
-Mientes…dijo él entre dientes
-Si no te fijaste aquel pequeño es mi hijo y lo amo a él más de lo que nunca he amado, a sus tres años me ha enseñado a amarlo cada día más
-Tres años? Si tiene tres años solo puede ser…
-Solo puede ser que? Qué importa? Para ti yo fui una cualquiera, así que puede ser de quien sea
-No…no lo fuiste, nunca fuiste eso para mí- dijo él duramente
-No puedo estar segura de eso, sólo tengo tus palabras y una enorme cantidad de acciones que demuestran lo contrario, has jurado amarme pero lo que escuche de ti y viví contigo fue mucho antes de aquel primer te amo que escuche salir de tus labios cuando yo ya estaba lo suficientemente lastimada como para creer lo que me dices- decía ella ahora luchando por no dejar que su mirada se ablandara y por no derramar una sola lágrima- Si tan sólo me hubieras amado desde el principio…
-Te amo desde siempre sólo que fui lo bastante idiota y me dejé llevar por el orgullo para no aceptarlo, déjame intentarlo de nuevo y demostrarte lo mucho que te amo…Hermione…déjame amarte una vez más
-No quiero Draco, no quiero y no puedo dejar lo que he ganado en estos años y regresar a lo mismo, no quiero amarte más…-ahora luchar contra aquellas lágrimas le era casi imposible y comenzó a sollozar
-No te pido nada Hermione…
-Yo tampoco lo hacía! Sólo quería que me amaras…-dijo ella sollozando aún más, al borde del llanto- Y no lo hiciste, siempre me rechazaste, no podían vernos juntos por "tu imagen", no puedes venir ahora y decirme todo esto, no puedo volver Draco, olvida todo…
-No Hermione no puedes hacerme esto, no puedes!
-Y tu si? Tu si podías rechazarme y lastimarme? Usarme cuando querías? Sólo quiero olvidarte Draco, quiero despertar un día y no pensar en ti… si tan sólo aquellos pequeños ojos no fueran grises… si no me miraran de la misma forma con la que tu lo haces…yo no estaría aquí, no estaría en este lugar luchando contra mí misma y contra ti…y podría olvidar…-dijo ella ahora llorando.
-Yo…yo no quería que sufrieras…-dijo él pensando-… Espera… Sólo los Malfoy tenemos ojos grises, Hermione, dijiste que no era…
-Pues si, lo dije y lo vuelvo a repetir, es sólo MI hijo aunque lleva tu sangre y jamás haría nada que pudiera lastimarlo
-Entonces no lo alejes de mí, ahora que se que es mío no lo alejes, déjame verlo y que sepa que soy su padre, déjame estar con él…
-No Draco, verte lo lastimaría, no soportaría que sufriera lo mismo que yo sufrí a tu lado
-Por favor entiende Hermione, TE AMO y me odio por haberte causado tanto dolor… si te hiriera de nuevo me moriría, no soporto verte sufrir, así como me moriría si te fueras, te amo y amo al pequeño desde que supe que lo tendrías solo que tenía miedo…
-¿TU¿Miedo? Entonces por que no me buscaste? Pase tres años esperando verte de nuevo y al ver que ese día no llegaba me resigne y decidí olvidar, olvidarte a ti, tus besos y todo lo que viví contigo, solo Ethan me recuerda cada día que pasamos juntos…por que no me buscaste si tanto dices que me amas!
-Lo intenté y no pude…estaba desesperado, no podía pensar en nada, sólo pensaba en ti, en nosotros…en que lo nuestro no ha terminado, nunca terminó…
Se acercó a ella y la besó. La beso con desesperación al tiempo que chocaban contra la pared y ella respondía al beso. Se besaron como nunca lo habían hecho, entregándose todo aquello que sentían. Fue un beso de sentimientos y resentimientos escondidos, pero igual de amor y pasión. Las manos de Draco no podían detenerse, necesitaba sentirla, mientras que las de ella solo se ocupaban de no soltarlo. No pensaban en nada. Se besaban con la desesperación de no haberse visto y de no haber sentido sus labios durante tres años. No respiraban, les bastaba con tener el aliento del otro. Comenzaba a faltarles el aire pero no les importó, sólo querían tenerse y sentirse cerca. Draco comenzó a desabrochar la blusa de Hermione…
-No…puedo…Draco…no- dijo ella casi sin aire separándose de él aunque sus labios casi se rozaban.
-Lo…siento…no debí…Hermione…te amo tanto…
-No…tengo que irme…debo irme- siguió ella casi en un susurro mientras volvía a buscar los labios de él y lo besaba de nuevo.
Volvieron a volar en un beso de pasión que los llevó a no sentir nada, a solo dejarse llevar por sus sentimientos, a seguir lo que el otro hacía…
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Una punzada en el estómago la hizo despertar, todavía recordaba aquella noche, se tocó los labios recordando el contacto con los labios de él, sabía que no debió haberlo besado…casi seis meses después no sabía nada de él…
Se reprochó, como todos los días, haberse dejado llevar. Y lo peor…le permitió entrar a su mente y conocer sus sentimientos.
Después de despedirse…desapareció.
Se sentía traicionada de nuevo, siempre le ocurría lo mismo y se reprochaba su debilidad, no podía ser que Draco Malfoy hubiera jugado a lo mismo dos veces y las dos veces ella no hizo nada para detenerlo.
Algo dentro de ella se derrumbaba cada mañana al despertar, estallaba el dolor y el enojo que intentó opacar durante tres años y que casi lograba ignorar…pero ahora todo volvía a ser como antes, no podía evitar repetirse lo tonta que había sido al dejarse guiar por aquel chico otra vez.
Volvía a sentirse débil y utilizada…él siempre hacía lo mismo… ¿cómo pudo pensar que esta vez sería diferente? Si ni siquiera pensaba cuando estaba con él, al sentir sus labios toda cordura desaparecía y no quedaba nada que ella pudiera decir para negarse…
La frialdad que había adquirido la perdió en tan solo unos minutos y no lograba recuperarla…menos aún si cada noche soñaba con él.
Odiaba sentirse de nuevo como la niña que fue en Hogwarts, y se estaba volviendo loca…eso hacía él…volverla loca.
Si Ethan no estuviera, ella estaría perdida.
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-Ethan, quiero que sepas que te amo mas que a nadie en este mundo- le dijo Hermione sollozando una mañana
-Mami, que tienes? Es por aquel hombre verdad?
-No mi amor, no es nada, solo quiero que lo sepas, aquel hombre no tiene nada que ver con nosotros y nunca lo hará
-Pero mami…¿él es papá?- preguntó el pequeño con un poco de temor, no a la respuesta, sino a la reacción de su madre, quien inmediatamente se puso seria y se levantó a hacer el desayuno, sin decir nada.
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-¿Hermione¿¿Eres tu pequeña?-escucho ella a través de la bocina del teléfono
-Si Jack, soy yo¿como estas?-contestó un tanto animada
-Yo muy bien linda, no dispongo de mucho tiempo, pero me preocupas, hace tiempo que no se de ti, y se que tienes algo
-No te preocupes por mi, estoy bien, solo lo usual…
-Malfoy…otra vez...mmm…me tengo que ir…nena, por favor no te preocupes, todo se solucionará ya lo verás…cuidate mucho y al pequeño¡¡un beso¡¡Te quiero!
Unas pocas palabras y menos de dos minutos, pero la voz de su mejor amigo la hacía sentirse mejor, no la aliviaba del todo pero la hacía saber que contaba con alguien…quería demasiado a Jack por ser la única persona que jamás la había traicionado y que sabía que nunca lo haría…
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Odiaba tener que ir al supermercado de noche pero tenía que aprovechar que Ethan se había dormido cuando ella se dio cuenta de que faltaba casi todo en la alacena.
Salió dispuesta a no tardarse mucho en regresar por si el pequeño despertaba.
Un embotellamiento la sorprendió de ida y al entrar al supermercado notó que estaba repleto de gente.
-"¿Que nadie puede hacer las compras de día o todos tenían que venir justo ahora?"- pensó para sí misma al estar formada en una de las cajas para pagar. En la cual para colmo, la persona que atendía era la más lenta que se había encontrado jamás.
-¿Encontró todo lo que buscaba?- preguntó la mujer aburrida cuando Hermione llegó frente a ella.
-Sí gracias…disculpe… ¿podría apurarse un poco más?-respondió ella malhumorada y casi le dieron ganas de sacar su varita y lanzarle un maleficio al ver que la mujer le dirigía una mirada de disgusto y seguía actuando con la misma tranquilidad.
De vuelta en el coche el tráfico volvía a ser insoportable a pesar de ser de noche, llevaba más de una hora fuera y le preocupaba que Ethan se asustara al no verla.
-Esto no puede estar pasando- se dijo a si misma cuando unas gotas comenzaron a caer en el parabrisas. Fue peor cuando se convirtió en una tormenta y ella casi no había avanzado nada en la larga avenida por la que iba.
Por fin consiguió pasar los carros que había amontonados y se encontró con que un camión y un coche habían chocado al querer pasarse una luz roja.
Cuando consiguió llegar a su casa estaba más que harta y tendría que bajarse con todas las bolsas bajo la lluvia.
-Tranquila, no podrías estar peor-se dijo para intentar calmarse un poco cuando al bajarse del carro una bolsa se desgarró por debajo y las latas que llevaba dentro rodaron por la banqueta- Cállate Hermione- se volvió a decir ella misma con peor humor.
Abrió la puerta de su casa, dejó las otras bolsas y regresó a la lluvia por las latas que estaban en el suelo que no eran muchas.
Atinó a recogerlas casi todas, solo faltaba una. Cuando se agacho por ella, una mano se le adelantó y la tomó para ofrecérsela.
Aquella mano era inconfundible, aún bajo la lluvia reconocía cada centímetro de su cuerpo.
Subió la mirada soltando una lágrima y lo vio de frente. Draco estaba ahí ansioso de ella pero sin saber que hacer, era consciente de que despareció 6 meses y temía el rechazo de nuevo.
Por su lado Hermione tampoco sabía que hacer, por un lado deseaba lanzarse a sus brazos y por el otro quería reclamarle, gritarle, irse…soltó las latas y se enderezó.
…No era necesario que te fueras así…
-¿Qué haces aquí?- preguntó ella secamente casi gritando por que la lluvia no los dejaba oírse- Creí que ya habías tenido suficiente, me engañaste de nuevo¿no crees que ya es suficiente?
-No te engañe Hermione, estoy aquí- dijo él intentando abrazarla pero ella lo rechazó.
-Es obvio que estás aquí¿pero después de cuanto tiempo? Fueron seis meses Draco, no puedes ir y venir a tu antojo¡¡YO si tengo sentimientos!
…Ni era necesario, que lloraras por mí…
-¡Yo también tengo sentimientos, créeme que si no los tuviera no estaría aquí, estoy aquí por mi hijo y por ti y no me voy a ir sin que me escuches!
-¿Para que te escucho¿Para que me hagas ilusiones y después te vayas otra vez? Y no vuelvas a llamar así a MI hijo, perdiste el derecho de ser su padre desde hace MUCHO tiempo- le reprochó Hermione- Estoy cansada Draco, no puedo seguir así, vete por favor, si me vas a dejar de nuevo mejor vete de una vez
-No Hermione, no me voy a ir, si vine hoy fue para quedarme…aunque tenga que esperarte aquí afuera, en la lluvia, no me iré si no te tengo.
-Quédate ahí si quieres, no pienso escuchar tus mentiras otra vez…adiós Draco- se dio la vuelta sin siquiera recoger las latas…
…Al momento de darse la vuelta sintió la mano de Draco que la jalaba por el brazo y con la misma fuerza la atraía hacia él y la besaba con deseo y amor, tan fuerte que le dolían los labios cuando logró separarse de él.
-¿Qué diablos crees que estás haciendo!- le reprochó ella empujándolo- ¡No tienes derecho a hacerme esto!... ¡No me toques!- continuó ella al ver que él se acercaba de nuevo.
…Ni el beso disfrazado, de ternura…Ni darle una esperanza a mi locura
Draco caminaba hacia ella e intentaba atraerla hacía él, la tomaba de la cara para besarla, mientras que Hermione lo empujaba y retrocedía
-¡No me toques¡Te Odio¡Vete, Vete!-seguía empujándolo pero en vez de que el se fuera se acercaba cada vez más.
…No era necesario, que me hicieras feliz…
Al ver que no conseguía alejarlo no pudo hacer más que darle una bofetada pero antes de que pudiera tocarlo él le sostuvo la mano, la atrajo hacia él y… la besó de nuevo.
Hermione quería resistirse pero algo dentro de ella no la dejaba hacer mas que responder a aquel beso que Draco le ofrecía con tanta desesperación.
Draco no pensaba, solo sentía y recordaba…No quería parar, no podía, estaba ahí por ella y no se iría sin conseguirlo. La amaba demasiado como para dejarla de nuevo, no la dejaría…no esta vez.
…Ni era necesario que tuvieras que huir…No era necesario, compartir tu amor…
-Draco…déjame ir…vete- susurró ella al separarse de él- por favor Draco…
-No puedes después de tres años seguir sintiendo tanto rencor…Hermione por favor…
…No era necesario este dolor…
-Si puedo, tuviste otra oportunidad hace seis meses pero…me dejaste de nuevo…estaba dispuesta a aceptar lo q sentía, a dejar de negar mi amor…y te fuiste otra vez. Tanto dolor no se olvida Draco, ni seis meses ni tres años pueden hacer que olvide todo tan fácilmente…Sólo tú podrías hacerlo y ya no se si puedo confiar en ti…
…No era necesario dejarme así…Con este silencio, no se a donde ir…
-No se si debo confiar en ti-continuó ella-siempre caigo en el mismo juego, en TU juego, y siempre soy yo quien termina sufriendo¿para que regresaste si te ibas a ir? No vuelvas a herirme, te lo suplico, vete y dejame al menos intentar olvidarte.
Las manos de Hermione temblaban, toda ella temblaba mientras las lágrimas corrían por sus mejillas.
No era necesario, hacerme sentir…El cielo, el suelo, en medio del fin…
-NO puedo Hermione…los amo…Te Amo…-la obligó a mirarla tomándola por la barbilla- Dejame demostrarte que lo que digo es cierto, soy un idiota por haber desaparecido otra vez sin decir nada pero no te abandoné, no podría hacerlo de nuevo…Déjame amarte…No puedo vivir sin ti...no puedo.
Se acercó lentamente, con la mirada fija en sus ojos…puso su mano en la mejilla de ella con lo cual ella cerró los ojos sintiendo el frío contacto de sus dedos…hasta sentir sus labios fríos por la lluvia, que se tornaron tibios al contacto con los de ella…se dejó llevar…no quería pensar, sólo dejarse guiar por el hombre al que amaba…entregaba todo el amor que tenía guardado y del cual no lograba huir…entregaba todo lo que tenía, como el primer día, el primer beso, la primera caricia…
…No era necesario, no era necesario…Tener que vivir muriendo por ti…
-Te Amo Hermione…sabes que siempre lo he hecho…
-No me hieras de nuevo por favor…
-No lo haré, no me lo perdonaría…estoy aquí contigo…déjame estar así siempre…por favor…
-No lo sé…Solo he sufrido por ti…solo he llorado por ti…solo he sentido todo eso por ti…pero…solo te he amado a ti…y sólo podré amarte a ti.
-Perdóname…quiero estar contigo Hermione
-Yo también quiero estar contigo Draco…
Se acercaron mutuamente y se besaron con todos los sentimientos…amor, deseo y con la esperanza de no perderse jamás…
…No era necesario, no era necesario…Tener que vivir muriendo por ti…
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Hola! Bueno, ya por fin, el último capítulo. Espero en serio que les haya gustado la historia en general, x fa dejen reviews. La canción es "No era necesario" de Reyli, ok?
Nos vemos pronto!
Besos
Danina