¡¡¡Konichiwa!!! a todos los que leen mi historia, antes que nada quiero darle las gracias a todos los que leen mi granito de arena en el mundo de los Fics y por supuesto también a aquellos que me dejan sus comentarios. Siento no haber actualizado antes pero como dicen por ahí, mas vale tarde que nunca...
Sin más que decir los dejo ¡¡¡Sayonara!!!
PD: los textos que sigan después de una barra como la de abajo pero con una carita en el centro es para indicar que la historia cambia de lugar y persona.
«««««««««««** ^_^*Licca Chan*^_^ **»»»»»»»»»»»
CAPITULO 2
[REENCUENTRO DESASTROSO]
Era un día igual que otro, el cielo, que estaba surcado de grandes nubes blancas que parecían algodones de azúcar, era de un color azul profundo, pero a la vez tan intenso que deleitaba e intimidaba al mas adiestrado pintor creándole un complejo de inferioridad e impidiéndole encontrar el matiz adecuado para poder igualarlo y plasmarlo en su lienzo.
Por su parte, el viento soplaba suavemente entre los elevados árboles, la suave grama y las hermosas flores campestres que se situaban en todo el lugar, meciéndolas de un lado a otro. No obstante, nada de eso le importaba a la chica de pelo negro que viajaba en su Moto Sport a gran velocidad, tratando de alejarse de aquel lugar.
«No puedo creerlo» pensaba ella furiosa «Como se atrevió ese estúpido a besarme, maldita sea»
Si la chica estaba furiosa, llevaba tres días furiosa, desde esa *fatídica noche* como ella la llamaba. No piensen mal, ella era una chica hermosa, le gustaban los chicos, claro que si, ¿a que chica de diecisiete años no?, pero lo que la ponía en ese estado era el hecho de que ese tipo, ese... ese pervertido la había visto desnuda, como si fuera un enfermo, eso era una violación a su intimidad, se sentía ultrajada, quebrantada, no sabia como describirlo realmente...
Sin embargo, podía vivir con eso, seguramente con el tiempo lo olvidaría y hasta se reiría de lo ocurrido, pero lo que si no iba a olvidar era la actitud de ese degenerado, ¡Tener la osadía de decir que todo era la culpa a ella! ¡Que cara dura! Al principio ella pensó en volver a su casa, pero trabajó demasiado para conseguir esas vacaciones y por un degenerado imbecil como ese no iba arruinar su vida, además ¿cuando había dejado que un infortunio le arruinara sus planes? ¡Nunca! Y no iba a empezar ahora.
La chica respiró profundo y contó hasta cien empezando desde atrás, en una situación normal, eso generalmente la tranquilizaba, pero esta no era una situación normal...
—Pondré un poco de música —susurro ella llevando su mano al radio de la moto,
Esta era una Sport con un motor de cuatro tiempos, cuatro cilindros en línea doble árbol de levas a la cabeza, cilindrada de 599 cc con potencia de 120 cv con un peso de 169 kg. era de color azul con negro, con todo lo necesario, no pudo resistirse cuando la vio, le costo una buena suma, pero tenia todo lo que necesitaba, radio, CD player... algo nunca visto en la línea de Motos... en pocas palabras la mejor y mas moderna Súper sport de su categoría.
La chica sintonizó una estación donde daban todo tipo de música desde las más suaves hasta las mas pesadas, para su suerte en ese momento pasaban una canción lenta. La suave melodía que llegaba hasta ella poco a poco fue relajándola, hasta tal grado que ella empezó a cantar animada la canción... se había olvidado por un momento de su furia y enojo.
«««««««««««««««««*** T_T ***»»»»»»»»»»»»»»»»»
«¡Maldita sea!, que demonios me pasa»
Un chico de pelo largo castaño y capa peleaba consigo mismo, centrado en sus pensamientos, no entendía porque su mente que siempre había estado centrada en su mas ferviente propósito, eliminar a los humanos y a los shamanes mas débiles de ese mundo para solo tener un mundo de shamanes fuertes, solo pensaba en esa chica que había visto en el lago hace tres noches, por algún motivo que el no podía deducir, la imagen de ese cuerpo escultural y sedoso y esos ojos grises no se iba de su mente, estaba como grabado en fuego, un fuego mas intenso que el que pudiera generar su espíritu del fuego...
«¡Maldita sea, mil veces maldita sea!» pensaba él
Tampoco podía olvidar esos labios carnosos que lo deleitaron, aunque fuera solo por unos minutos, pero el tiempo suficiente para darse cuenta que nunca podría olvidarlos, ¡demonios! quería seguir saboreándolos, degustar el dulce néctar que de ellos se desprendía, quería volver a tocar ese cuerpo, esos pechos... ¡Demonios, la quería ahora, para el y nadie mas! ¡Quería saciar su deseo por ella, encerrarse en un lugar donde solo estuvieran ellos dos y poder realizar todas las fantasías que ese cuerpo le hacia tener!
«¡Demonios!»
Por otro lado sus seguidores miraban entre confundidos y preocupados la actitud de su señor Hao, ya que ellos nunca lo habían visto así. Desde que había vuelto de su "baño" en el lago que no estaba muy lejano de su anterior campamento, el señor Hao había cambiado de actitud, al principio solo estaba un poco molesto, no obstante su mal humor fue agravándose al pasar de los días, prácticamente no se le podía hablar, era tanto así que ellos tenían miedo de acercársele, como ahora que tenia un profundo seño en la frente, señal de que no estaba pesando en cosas agradables. Hasta el pequeño Opacho estaba asustado de él, algo que nunca había pasado ya que él era muy unido al señor Hao.
—¿Se... señor Hao? —lo llamo el pequeño medio asustado
—!Que! —bramó el joven asustando al pequeño que se le llenaron los ojos de lagrimas
—Yo... yo... —no lograba articular palabra
—¿Que pasa? —rugió Hao deteniéndose y lanzándole una mirada helada a sus seguidores
Sus hombres lo vieron incrédulos, no podían creer que este era su señor Hao, no se comportaba de la misma manera... era tanto así que no había sonreído ni una vez desde hacia tres noches, ni siquiera se preocupada por su otra mitad Yoh Asakura, lo único que el hacia era sentarse frente al fuego y fijar su mirada en las llamas danzantes, inmerso en un mundo lejano y desconocido por ellos.
—Señor Hao... —lo llamo uno de los hombres temeroso —El tiempo esta cambiando, y... va a venir una tormenta, tenemos que refugiarnos...
—Esta bien —lo cortó este sin darle importancia al clima, que había cambiado de repente
Sin decir más el grupo se encaminó al poblado que estuviera más cercano para buscar un refugio donde pasar la tormentosa noche que les esperaban. No obstante, aunque caminaron por varias horas tratando de ganarle a la lluvia que pronto arrasaría con todo, no pudieron evitar que esta se desatara sobre sus cabezas, ya que estaban demasiado lejos de un poblado, tampoco podían usar sus posesiones ya que la visibilidad era prácticamente nula y si lo hacían podían caer por el precipicio por el cual caminaban. Además el señor Hao se los prohibió.
Hao caminaba delante de su gente, sin darse cuenta de que se iba separando cada vez mas y mas de ellos, sintiendo como la helada lluvia caía sobre él mojando su pelo, su ropa y por ultimo su cuerpo, enfriándolo hasta los huesos. Pero el moreno no le daba importancia a eso, ni al viento que lo arrastraba como obligándolo a retroceder, el aun pensaba en esa chica, mas bien no dejaba de pensar en ella.
El la deseaba, como nunca deseo a una mujer en todas sus vidas pasadas, como nunca deseo a la que fue su esposa en su segunda existencia, era un deseo tan intenso, que lo consumía por dentro, pidiéndole una satisfacción que no podía darle, ya que el objeto de ese deseo no estaba junto a él.
«Que demonios voy a hacer» se preguntaba frustrado «Necesito descargar este peso que llevo, necesito tenerla... para mi...»
El enojo por esos pensamientos unido a la fustracion sexual que el muchacho cargaba no le permitiron prestar atencion a lo que hacia ni por donde iba, es por eso que no pudo evitar lo que pronto sucederia...
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«¡Rayos! La visibilidad es prácticamente nula, no puedo ver nada a mas de tres pasos»
—Tenia que pasarme esto ahora —gruño la chica molesta —Me gusta el agua, mas bien me encanta, pero esto es ridículo
La tormenta caía sobre ella con una fuerza impresionante, nunca antes vista, mojándola desde su sedosa y negra cabellera hasta sus sencillas botas de cuero negras.
Tal era la brisa que soplaba y el agua que caía que para poder ver algo en esa oscuridad, provocada por el aterrorizante vendaval tuvo que dejarse su casco protector y cerrar la ventanilla para tener un mínimo de visibilidad.
No entendía que era lo que había pasado, en un momento estaba conduciendo placidamente su moto y oyendo música, es decir estaba disfrutando el viaje de manera sana y relajada, pero de repente el cielo se había oscurecido, las nubes que antes parecían blancos algodones se había puesto grisáceas y sin previo aviso sucedió...una serie de truenos se empezaron a escuchar en toda el área, seguidas por unos grandes y aterrorizantes rayos, luego, sin hacerse esperar, la lluvia arrasó empapándola por completo en segundos debido a la cantidad y a la fuerza con la que caía
Tratando de avanzar un poco mas, la chica acelero en la moto mientras giraba en una curva abierta sin saber que al otro extremo le esperaba algo soberanamente impactarte.
«Fantástico, estor en un país desconocido, en medio de la nada y con un torrencial encima» pensó la chica mientras trataba de avanzar lo mas posible en su moto «No creo que esto pueda empeorar, además que mas podría pasarme»
Al no poder ver que tenía en frente, la chica, que nunca se espero encontrar nada en ese lugar, acelero un poco mas cuando la carretera se volvió a poner recta, empero, a medida que llegaba a la otra curva una silueta se le apareció de repente atravesándosele en el camino
—¡Cuidado! —grita ella asustada tratando de esquivar la silueta que al parecer era de una persona
Sin embargo ninguno de los dos tuvo oportunidad de hacer nada ya que al tratar de frenar de golpe, la moto empezó a girar incontrolable, golpeando fuertemente a la persona que estaba frente a elle, enredándola y llevándosela consigo en el furioso remolino que estaban formando.
La chica trataba, sin resultado alguno, de volver a tomar el control de la Sport, pero debido a lo resbaladizo del suelo y al lodo que se estaba formando por la caída de tierra en el lugar eso le era prácticamente imposible. Tratando de ver donde era que estaban la chica hizo un esfuerzo por distinguir algo y lo que vio no le gusto nada
«!Ohhh Dios!» pensó ella cuando vio como se estaban precipitando peligrosamente y a gran velocidad hacia un precipicio que estaba a su izquierda «¡Nos vamos a matar!»
Tratando de salvar su pellejo y el de la otra persona que por lo que había podido darse cuenta estaba totalmente inconsciente, se inclinó hacia uno de los costados, tratando con todas sus fuerzas de ladear la moto para que cayera al suelo y así detuvieran los giros que estaba dando, pero la velocidad era tan grande que no le estaba dando resultados.
Negándose a morir la chica seguía tratando de inclinar la moto, pero ya era muy tarde, con dos giros más que esta dio, ella y su acompañante salieron despedidos por el acantilado cayendo a un vacío que parecía no tener fin...
«««««««««««««««««*** TOT ***»»»»»»»»»»»»»»»»»
No obstante, en la cima del acantilado una variedad de hombres y chicas caminaban forzadamente contra el viento tratando de encontrar un lugar donde refugiarse, ya se habían resignado a no encontrar un poblado así que su prioridad en este momento era conseguir una cueva o algo que los mantuviera lejos de la lluvia y el viento...
Los hombres de Hao buscaban incansables ese lugar anhelado en ese momento, sin darse cuenta que desde hacia mucho tiempo no veían a su líder. Pero a medida que los minutos pasaban y no conseguían nada las chicas, se percataron que el señor Hao no estaba por ninguna parte.
—¡Oye Opacho! —gritó una de ellas tratando de hacerse oír en ese lugar—¿No sabes donde esta el señor Hao?
En ese momento todos se percataron que desde hacia un buen rato no veían al shaman, sin decir media palabra todos empezaron a buscarlo preocupados por si le había sucedido algo, como había estado tan extraño últimamente... bueno... Sin embargo no obtuvieron resultados, lo único que consiguieron en esa búsqueda fue la tan antes anhelada cueva y, debido al clima que había afuera, que al parecer no cambiaria en toda la noche, los seguidores no tuvieron mas remedio que refugiarse, sin embargo algunos estaban preocupados por el señor Hao, pero a fin de cuentas el era Hao Asakura, el shaman mas poderoso...
«««««««««««««««««*** O-o ***»»»»»»»»»»»»»»»»»
El viento soplaba fuerte, parecía como si quisiera destruir todo lo que tenia a su paso, la lluvia por su parte caía incansable sobre los dos cuerpos inconscientes y empapados que estaban tendidos en el fondo del acantilado con sus ropas raídas y con heridas profundas de las cuales salía un espeso liquido rojo que se unía al agua que descendía de las oscuras nubes del amplio cielo nocturno y resbalaba al suelo recorriéndolo rápidamente, llevada por las corrientes originadas por los charcos que la lluvia formaba.
Poco a poco el cuerpo de la chica se movía casi imperceptiblemente, dando señales de vida, abriendo lentamente sus hermosos ojos grises la chica se levanto del duro suelo y miro a su alrededor tratando de ver , lo poco que alcanzaba a ver, donde estaba. Luego de un rato de recorrer parte del lugar donde estaban y de cerciorarse que podían salir de ese sitio y que no tenia heridas graves la chica se giro hacia el cuerpo que estaba su lado.
«Espero que no este muerto» pensó ella preocupada al ver el cuerpo que estaba su lado, acercándose lentamente, ya que su propio cuerpo le dolía horrores
Por su parte, la chica pudo darse cuenta que era un chico el que había caído con ella, él había caído de costado y su larga cabellera le cubría todo el rostro, sin embargo su cuerpo musculoso era inconfundible.
Cuando llego hasta el, la chica retiro suavemente los largos mechones color chocolate del muchacho tratando de ver en que estado de encontraba. A primera vista parecía no tener nada, sin embargo, ella tuvo que girarlo y tenderlo boca arriba para ver su tenia alguna contusión o algún hueso roto.
Pero... cuando el chico le mostró toda su cara...
—¡No puede ser!—exclama ella impactada —Si es... ¡EL PERVERTIDO!...
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[Notas de la autora]
Bueno amigos aquí los dejo...
Y díganme que les pareció ¿ehh?
Creo que les puse un encuentro demasiado violento a estos dos, pero recuerden que Hao es muy... como decirlo... ¿malo? Así que tuvo que ser así ***^_^***
Antes de despedirme me gustaría hacerles a todos unas preguntas
¿Qué creen que debería hacer ella?
a. Dejarlo tendido ahí solo que se muera de frío y le de una hipotermia
b. buscar un lugar para que pueda recuperarse
Y si eligen la segunda ***¬_¬*** en que lugar les gustaría que sucediera todo
a. En una cabaña, donde tendrán comodidad, comida, una cama caliente y otras cosas
b. En una cueva, con una fogata y demás
Yo estoy pensando en que ella se lo lleva a una cabaña, pero que dicen ustedes...
Bueno eso es todo por ahora, espero que me contesten pronto estas dos incógnitas para así poder actualizar.
Los leemos luego...
Bye bye
***◊_◊***Licca Chan...
