Entró por una de las habitaciones que le faltaban por revisar, que parecía una bodega. Cruzó toda la habitación y al fondo estaba un espejo, del cual colgaban numerosas telarañas.
-A este lugar si que le hace falta limpieza- Se recargó en una de las paredes y se dejó caer
-Ni que lo digas
-¡¿Quién anda ahí?!
-Ay, ni te asustes, el asustado debería de ser yo, después de todo me vas a echar de aquí ¿no?
-Revélate ¡Te lo ordeno!
-Ay, no seas bruto, no grites, que no estoy sordo – Una figura blanca se formó enfrente de Miroku
-¿Qué es lo que quieres?
-Yo sólo quiero platicar con alguien, pero el dueño de la casa es bien miedoso y cree que lo quiero fuera de este lugar
-¿Entonces que es lo que quieres? – Miraba a la figura atentamente mientras le apuntaba con su báculo
-Ya te lo dije, alguien con quien hablar… ¿Sabes? Mi muerte fue horrible, por eso estoy aquí, no es por gusto…
Miroku se quedó extrañado de l espíritu de la casa, era con ojos grandes y barba larga, pero de cabeza calva y sostenía un rosario en la mano derecha y su bastón con la izquierda. ¿Qué le iba a hacer? Después de todo era un anciano y sólo estaba buscando compañía.
-¿Porqué no me haces las cosas fáciles y te vas de este lugar sin que te haga daño?
-¿Entonces a dónde iré?
-Puedes venir conmigo…
-Bueno, ¿cómo te llamas?
-Miroku…
-Mucho gusto, yo soy Takashi… ¿A qué te dedicas?
-Soy un monje… hago exorcismos y esas cosas…
-Interesante… pero ¿Qué haces? ¿Dónde vives? ¿Tienes familia o eres solo?
-Son muchas preguntas
-¿Las vas a contestar o no? – Silencio – entonces adivinaré… eres un monje que no tiene familia y viaja solo por el mundo teniendo como casa cualquier lugar… - Otra vez silencio - ¿Tienes novia? … Entonces eres soltero y vagabundo… interesante
-Ya entiendo porqué quieren que te vallas de la casa…
-¿Crees que hablo mucho?… lo sabía
-¿Vienes o no?
-Claro… pero o tienes casa… entonces yo no voy, ¿qué caso tiene estar con alguien que no tiene casa?
Miroku lo vio con una cara de odio y con un solo movimiento se deshizo del espíritu parlanchín; todo hubiera sido de lo mas normal de no ser porque al hacerlo sintió que las piernas le flaqueaban y como si todos sus sentimientos se hubieran evaporado y un vacío en su mente se formó.
-¿Qué… dónde estoy?
-Hasta que despiertas Miroku… creí que nunca ibas a recuperarte
-Me duele todo ¿Qué pasó?… momento ¿Qué no te había eliminado ya?
-Como si fuera tan fácil deshacerse de alguien como yo
-No siento nada…
-Es porque no eres nada
-¿Qué? – Intentó levantarse, pero en ese momento no sintió sus piernas, sin embargo se movía, después volteó al suelo y se dio cuenta de que ahí estaba su cuerpo, sentado e inmóvil - ¿QUÉ ME HICISTE?
-Yo nada, pero cuando intentaste expulsarme se separó tu alma de tu cuerpo
-¿QUÉ?
-Está vivo tu cuerpo pero no tiene alma… eres o ese cuerpo que era tuyo es algo así como un muerto viviente
-¿QUÉ ESTÁS DICIENDO?
-De verdad que eres muy gritón ¿Eres así siempre?
-¿Cómo recupero mi cuerpo? – Mientras lo tomaba por el cuello en señal de amenaza
-No lo sé… eso te toca a ti… ¿Sabes? Eres muy débil
-¿Qué con eso? Yo no soy débil
-Es que fue tan fácil… dime, en vida ¿Tenías planes?
-No hables así… voy a recuperar mi cuerpo
-¿Cómo lo vas a hacer?
-No tengo la menor idea – mientras salía por la ventana atravesando el ya oscuro bosque mientras las palabras de Takashi resonaban en su mente – "Entonces eres soltero y vagabundo" "¿Tienes novia?" "¿Tenías planes?" ¿Qué se cree ese maldito? Seguro que Kagome o la anciana Khade o quien sea me pueda ayudar…
Al llegar a la aldea no vio a nadie conocido, solo a Kirara que estaba recostada junto a un árbol.
-Kirara… ayúdame ¿Dónde están los demás? – Kirara se transformó y le gruño – Hey ¿Qué no reconoces quién soy? Soy yo, Miroku – Lo vio detenidamente y luego empezó a caminar hasta donde la anciana Khade, Shippo, Kagome y Sango se bañaban. – Ay no puede ser… -Se acercó a donde ellas y logró ver a Inu Yasha a lo lejos que afilaba a colmillo de acero – 'No importa si me dicen de cosas, tengo que hablar con ellas' Hey… oigan ¿Alguien me puede ayudar? – Se acercaba cada vez más al estanque pero ellas como si nada – Hey ¡ALGUIEN QUE ME AYUDE! – Se puso en medio de ellas y no pasaba nada – Seguro que no me pueden ver
-Kagome-chan, el malvado de Inu Yasha me va a pegar si no estás para defenderme – Shippo zangoloteaba en el agua
-No lo creo, vas a estar bien, no te preocupes.
-Pero es un malvado
-Parece que te va a extrañar mucho Shippo y esa es su forma de pedirte que no te vallas – Sango intervino
-Mmm… a veces decimos muchas cosas a través de otras palabras – Khade
-Si, sobre todo los hombres – Kagome
-¿a qué te refieres? – Shippo
- A que no les gusta decir lo que en verdad sienten y casi los tienes que obligar ;) – Kagome
-¿Cómo a Inu Yasha? – Shippo
-Algo así ˆˆU
-Oye Kagome-chan ¿Qué es tuyo Inu Yasha? - Shippo
-Ahg… ¿no sintieron eso? - Kagome
-¿Qué? - Sango
-Un espíritu… aquí mismo – Kagome
-U… ¿un fantasma? – Shippo se escondió debajo del agua
-No, no sentí nada – Khade
-Ni yo… - Sango mientras salía del agua seguida por las demás
-Genial, no me pueden ver… pero Kirara si pudo… entonces Shippo e Inu Yasha si me pueden ver… - Miroku se acercó donde Shippo todavía estaba escondido – Shippo, tu si puedes verme, vamos, sal de ahí, soy yo, Miroku…
-Que… ¿Quién… quién anda a… ahí?
-Miroku… mírame…
-Waaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa
-Hey, no grites
-Oye ¿En verdad eres tú?
-Claro que soy yo
-Entonces dime algo que solo sepa Miroku…
-¿Cómo qué?
-Dime… jijiji… ¿Qué va a hacer él ahora que ya murió Naraku?
-Hay… insolente, sabes bien que todavía no decido…
-Órale, si eres tú
-¿Ya me puedes ayudar?
-¿Y qué quieres que haga?
-Que le digas a la anciana Khade que me ayude a recuperar mi cuerpo
-Entonces no estás muerto…
-No, solo se separó mi cuerpo de mi alma, mi cuerpo está en una casa en la que estaba trabajando, sigo respirando y todo, pero aquí está mi conciencia, sentimientos, inteligencia y demás, allá solo mis instintos primarios…
-Entonces… vamos
Shippo empezó a caminar, pero antes de llegar con Khade, Inu los vio.
-Shippo ¿Qué no te da miedo el espíritu que te sigue…?
-Ah no, es Miroku…pero descuida, es muy débil…
-Ya lo noté… muy apenas si se nota que existe
-¡¡OYE!! Necesito ayuda y rápido
-Bien, bien, vamos con las demás
-Gracias
Llegaron a la aldea donde estaban y de inmediato buscaron a la anciana para que ayudara al monje, pero Shippo se fue con Kagome porque tenía sueño XD
-Pues yo no veo nada - Khade
-Khade-baba… ahí está ¿Porqué no lo ves? - Inu
-Inu Yasha-sama, puedo ver espíritus poderosos y por lo que me dices, no creo que pasara algo así, ha de ser su imaginación… - Khade
-Pero Shippo también lo puede ver - Inu
-Pues entonces dile que se manifieste - Khade
-Anda Miroku, haz algo para que te vea – no ocurrió nada – Fhe… si no puedes hacer nada ya no es mi problema… eso te pasa por ser tan débil - Inu
-Inu Yasha-sama, déjate de bromas y ve a ver que esté bien Kagome – chan - Khade
-Fhe… -Inu
Salieron de donde estaba la anciana y fueron a donde se suponía que se quedarían para pasar la noche, pero encontraron dormidas a Kagome y Shippo, mientras Sango y Kirara dormían un poco más cerca.
-Lo ves, ya se durmieron… tendrás que esperar hasta mañana para que alguna de ellas te ayude, por mi parte ya me voy a dormir
-Está bien… gracias
-Fhe
Inu Yasha se acomodó en un lugar cercano a Kagome y cerró los ojos. Miroku estaba desesperado, no había quien lo ayudara y para colmo, nadie se había preocupado por saber donde estaba; Inu y Shippo estaban de sangrones y no lo ayudaron mucho que digamos. La desesperación comenzó a invadirlo y todavía no coordinaba bien los movimientos sin sus piernas. Entonces escuchó como Kirara ronroneaba cerca de Sango. Seguro que Kirara lo ayudaría así que se acercó a ellas y vio que no estaban dormidas si no que Sango le platicaba algo a Kirara casi con murmullos mientras ella le respondía con gemidos de gato. La curiosidad le ganó y decidió escuchar, después de todo ¿Qué le iba a hacer? ¿Golpearlo? Se encaminó a ellas y se puso justo en frente de Sango.
-Kirara… ojalá y Miroku esté bien, hace buen rato que se fue a la casa esa y se fue solo… espero que esté bien… - Kirara vio al monje entre los dos y trató de advertirle a Sango, pero ella ni en cuenta - ¿Te agrada él? – Kirara se empezaba a desesperar de que no la entendía – a mi si me agrada ¿sabes? Pero a veces es muy extraño… sólo sabe dar falsas esperanzas – Su cara se torno un poco triste – pero no importa, con algo de suerte, después de mañana no lo volveré a ver… - Kirara se acurrucó mas cerca de ella dándose por vencida - ¿Crees que si me atrevo a decirle que siento yo… me tome en serio? – Kirara maulló – tienes razón, solo es un monje pervertido… después de todo ¿Qué me puede ofrecer? … - Al escuchar esto Miroku también se entristeció y se alejó de ahí, no quería escuchar mas – yo no tengo mucho que darle, no tengo hogar ni familia… eso es algo que tenemos en común… pero él es un amante de la fisonomía femenina, eso es algo en lo que yo no lo puedo satisfacer, tengo tantas cicatrices… solo me toma como juego… - Kirara se levantó y le lamió una mejilla – tienes razón, no hay lucha perdida si no lo intentaste todo… yo lo he intentado, pero como no es todo, antes mañana de irnos le voy a decir… ¿Qué dices? – Ambas se incorporaron y cerraron los ojos
-Ahg!! ¡Ni ella me soporta! Tal vez es mejor quedarme así – Miroku se dirigía a toda velocidad a donde había dejado su cuerpo, y al entrar se encontró a Takashi
-Uh! Llegaste… veo que no pudiste regresar a tu cuerpo
-AAAAAAAAA!!! ¡Cállate!!!!!!!!!!!!!! ¿Cómo rayos me hiciste eso??? ¡¡Te voy a matar!!
-¿Cómo si soy un espíritu?
- Fhe -.-U
-¿Qué hiciste para regresar a tu cuerpo?
-Nada
-¿Nada? Buen intento… ¿o es que no quieres regresara a tu cuerpo? – Silencio – con que es eso… entonces para finalizar la fase para ser un espíritu tenemos que hacer que tu cuerpo muera
-¿Tenemos?
-Si, si no lo hace, vas a ser una lucecita que ni los gatos van a poder ver
-¿Y si lo hago que pasa?
-Serás poderoso, cualquiera podrá sentir tu presencia, harás destrozos a tu antojo…
-Así como tú…
-Exacto…
- Y… ¿Es reversible?
-Pero que dices, claro que no… pero por lo que veo no tienes nada que perder… y si no lo haces pronto, será cuestión de tiempo para que tu cuerpo muera de hambre o de sed…
Pasó la noche de un lado para otro del bosque para pensar lo que iba a hacer, Takashi tenía razón, no tenía nada que perder, sólo poseía un pasado que en su tiempo fue bueno, un presente y un futuro inciertos. El amanecer poco a poco se fue asomando, y en la aldea al parecer nadie tenía preocupación alguna por el monje.
-Sango… ¿A qué hora te vas a ir?
-Supongo que temprano, no tengo muchas cosas que empacar ˆˆU
-Tienes razón… ¿Sabes? Voy a extrañar verte siempre por aquí…
-También voy a extrañarlos… pero puedes ir a visitarme cuando puedas…
-Claro… pero… te noto algo triste…
-Es porque ya me había acostumbrado a la compañía de ustedes y ahora me voy yo sola con Kirara…
-Bueno…ˆˆ
Eran cerca de las diez de la mañana y Sango y Kirara se despedían, ellas eran las primeras del Inu Yasha – gumi que se separarían; después Kagome se iría a retomar sus clases y supuestamente Miroku se iba a ir a donde el viento lo llevara.
-Descuiden, estaremos bien…
-Vete con cuidado…
-Gracias Inu Yasha ˆˆ o.0
-Fhe… - dando un manotazo al aire y caminando hacia atrás
-Déjalo, ya sabes como es… - Kagome le dio un abrazo – Cuídala muy bien Kirara – mientras le acariciaba la cabeza
-Bueno, esto es todo… me voy
A lo lejos, desde el cielo, Miroku observaba la escena con cierta nostalgia. Podía notar la cara de ella con gran facilidad, se le veía una sonrisa pues por fin haría lo que siempre había querido, pero también refleja tristeza, seguramente por abandonar la vida con sus amigos.
-Tal vez si hubiera forjado un mejor futuro las cosas me hubieran salido mejor… pero que digo, por supuesto que me hubiera ido mejor, no hubiera estado solo cuando me separé de mi cuerpo, alguien me hubiera acompañado o probablemente ni siquiera hubiera entrado en esa casa… ahora mismo estuviera… despidiéndome de Sango – suspiró y volteó la vista al cielo – pero de nada serviría de todos modos… ella nunca me correspondería… no me quiere ¡Maldición! Sólo me estima, sólo le simpatizo… tal vez sea el momento de tomar las cosas en serio… de tomar una decisión… voy a convertirme totalmente en… - Volvió la mirada a donde estaban sus amigos – ¿Eh? ¿Ya se fue? Ni siquiera pude ver cuando se iba… - De pronto sintió una fuerte brisa pasando junto a él.
Era Sango que había partido montada en Kirara y pasaba muy cerca de donde el monje se encontraba. Estaba tan cerca de ella y a la vez era imposible siquiera que ella se diera cuenta de que él estaba ahí, solo la gatita en su forma natural le dirigió una mirada mientras se alejaba de él en el cielo.
-Te voy a extrañar mucho mi querida Sango…
Veía como se alejaba lentamente. Al poco tiempo sintió un fuerte dolor en el estómago, algo le había atravesado y sentía dolor, aunque era ya casi un espíritu. De la nada sintió un deseo inexplicable de averiguar que era lo que le había lastimado tanto y por otra parte la necesidad de volar tras la exterminadora, y así lo hizo, aunque con un poco de trabajo, pero logró alcanzarla.
Cuando logró llegar a donde estaban, en lo alto del cielo dirigiéndose a "Casa" pudo ver la verdadera expresión de la joven; era algo triste y en vez de ir con su habitual forma de montar a Kirara, tenía la cara hundida en el lomo de esta.
-¿Acaso ella está… llorando? – él se acercó un poquito mas para ver que era lo que en realidad tenía y efectivamente, tenía los ojos llenos de lágrimas – No puede ser… pero porque lo hace, creí que irse la haría feliz…
Entonces una lágrima solitaria escapó de su mejilla y saltó al abismo, pero en su caída la lágrima fue interceptada accidentalmente por Miroku, a quien al hacer contacto con su alma sintió de nuevo el dolor que lo había impulsado a ir con ella. ¿Qué pasaba? ¿Era posible que ella pudiera causarle ese tipo de daño? Se sintió débil y a la vez impotente de no poder calmar las lágrimas que caían casi como lluvia sobre él.
Sólo le quedaron fuerzas para regresar donde su cuerpo quedaba a punto de morir.
-Regresaste…
-Por un demonio cállate… no tengo ánimo
-Tú nunca tienes ánimo, eres un gruñón
-Bha
-¿Te pasó algo interesante?
-No, solo me duele todo
-¿Dolor? Pero se supone que no nos duele nada a nosotros, somos como aire, nada nos duele…
-Pues a mi si
-¿Cómo paso? –
Miroku no pudo mas, explotó
-¿SABES CUAL ES EL PROBLEMA? TODO, PARA EMPEZAR, MI VIDA ES UN DESASTRE, NO TENGO NADA DE LO QUE QUIERO ¿SABES QUÉ MAS? PERDÍ MI SENTIDO PARA VIVIR, NO SE QUE QUIERO, Y LO QUE QUIERO ME SALE MAL, Y PARA COLMO DE COLMOS ¡ELLA! ESTABA LLORANDO Y NO SE PORQUÉ
-Ella ¿Quién es ella?
-¿Eh? ¿Sango? Ella es… una amiga, PERO ESO QUE IMPORTA, NO LE INTERESO, NI SIQUIERA SE ESPERO PARA DESPEDIRSE DE MÍ, SÓLO SE FUE ¿SABES QUE ES ESO? NO LE INTERESO Y… Y… PERO MALDICIÓN, NO SE QUE ME PASA
-Si serás idiota, no te das cuenta del poder que tiene ella sobre ti, lo único que pasa es que tú quieres que ella te haga daño, por eso te lastimó verla partir…
-Pero ella no lo hizo, me lastiman sus lágrimas
-Es eso entonces, solo lo que a nosotros, digo, a nuestra clase de espíritus, que lo hicimos por decisión nuestra, sólo nos lastima lo que en vida es lo que emocionalmente te afecta y por lo que dices, esa amiga tuya te maneja como quiere…
-A MÍ NADIE ME MANEJA
-Cálmate… dime ¿Qué quieres? – Miroku si se calmó y luego abrió los ojos como platos y miró su cuerpo – Si quieres eso, ve por tu cuerpo
-Pero ¿Cómo?
-Jajaja… averígualo tú
-¿QUÉ TE PASA? TU ME METISTE EN ESTO Y AHORA ME AYUDAS…
-Si puedes alcanzarme jajaja –Takashi corrió de la habitación y Miroku se quedó solo
-¡AH!!!!! ¿Qué puedo hacer? Ese mendigo no me va a decir como, sólo quiere que lo acompañe alguien… veamos ¿Qué puedo hacer?
Levito cerca de su cuerpo, examinándolo detenidamente, hasta que después de veinte minutos logró ver su mano, donde solía estar la maldición, sellada con lo mismo que él pretendía echar al espíritu "maligno".
-Eso es ¡Sólo tengo que quitar eso de mi mano!
Nota: La cosa esa es uno de los papelitos rectangulares con letras raras que usan para sellar y cosas así, sólo que no recuerdo como se llaman S
-¿Pero cómo voy a hacer eso? Y antes de que me muera de hambre… veamos, necesito que alguien me ayude… ¿Pero quién? Ya se, voy con Shippo y que me lo quite él, después de todo, él si puede verme… - Salió lo más rápido que pudo a la aldea - ¿¡Dónde están!? – Entonces vio que no estaba la bicicleta de Kagome, de seguro que se había ido ya por sus exámenes y esas cosas – Maldición, seguro que se fueron al futuro… ya se… seguro que yo también puedo ir y que me ayuden ellos… - Voló al pozo y se introdujo en él - ¿Porqué no pasa nada?
-Si estarás idiota
-Takashi ¿Qué haces aquí? ¡Hijo de…
-Cálmate… de veras que eres idiota, nosotros no podemos atravesar ahí… tenemos que usar algo o a alguien como transporte… hey espera ¿Qué haces?
-Buscando a alguien que sí quiera ayudarme…
-Inténtalo, pero recuerda, ¡ningún humano puede verte!
-Déjame en paz
Por otra parte, Sango ya había llegado a su aldea y trataba de reconstruir su antigua casa para poder pasar tranquilamente un par de noches mientras decidía que iba a hacer primero.
Sus gestos parecían tristes, y no es para más, después de todo, aquel lugar le recordaba mucho a su madre y a su padre y sobretodo a su hermano, que había muerto ya, junto con Naraku y todos sus sirvientes. Esa había sido la única forma de eliminar de una vez por todas a ese desgraciado de ojos rojos.
FLASH BACK
-Kohaku ¡Detente! - Sango
-Destrúyelos a todos - Naraku
-Kohaku ¡Por Favor, Detente! - Sango
-Sango, aléjate, no está en sí, Naraku lo controla – Kagome
--Kohaku…
-Ahora KAZE NO KIZU!!
-KAZANA
Estaban a punto de destruir a Naraku, pero ese ser tan inteligente había puesto en contra de Sango a su propio hermano inutilizando sus ataques. Ningún hermano en sus casillas estaría dispuesto a matar a su familia, y ese era el caso de Sango, pero Kohaku no, era poseído y aún en contra de su joven voluntad intentaba aniquilar a su hermana mayor con la fuerza de un verdadero hombre.
Alzó su mano derecha y a punto de aniquilar por completo a su única familia viva sintió que algo se incrustaba en su espalda. Furioso alzó su mirada a la dueña de la flecha y se lanzó en contra de ella.
-Kagome ¡No!
Inu Yasha aventó al niño al otro extremo del bosque donde se encontraban y siguió en su intento por aniquilar a la gran araña que tenía a sus espaldas.
- Kohaku… hermano – Se montó en Kirara e intentó desarmar las patas de la forma de Naraku, pero pronto entendió que su hermano sólo era un instrumento más de él que le impedía seguir adelante, entendió también que su hermano no descansaba en paz y que su alma solo era un artefacto inútil ya en ese momento, tenía que hacer algo y rápido. De un salto llegó donde Kohaku intentaba matar a Shippo y con un solo movimiento lanzó su bumerang, al mismo tiempo que lágrimas salían de sus ojos cerrados.
-Sango-chan ¿Estás bien? – pero ella no contestó, estaba devastada, su único lazo de sangre estaba ahí muriendo y no quería ver eso. Shippo la abrazó de la pierna – Gracias
-Yo… yo no… no puedo ver esto
-¿Sango – sama? – Con tan sólo un vistazo Miroku entendió que era lo que pasaba, ella acababa de matar definitivamente a su hermano. La impotencia se hizo notar en todos, hasta que…
-KAZE NO NIKU!!!!!!!!
Naraku explotó en mil pedazos, esa era la oportunidad que todos buscaban, ahora sólo tenían que eliminar todos los restos, sin que ninguno se les escapara, cada uno de sus pedazos y cada uno de sus sirvientes, incluyendo a Kohaku.
-Miroku – sama ¡Rápido! ¿Qué esperas?
Él se había quedado en silencio mientras observaba a la exterminadora totalmente devastada con la mirada clavada en el suelo, de seguro no quería ver cuando su hermano fuera tragado. Pero él no podía hacer nada, solo le quedaba vengar a su familia y terminar con todo de una vez por todas.
-YAAA!! Reacciona
-Claro – Quitó el rosario de su puño y lo lanzó empezando por la cabeza de Naraku
Con sus últimas fuerzas Kohaku aún inconsciente se levantó y se acercó a su hermana
-Tango miedo
-Ko… Kohaku – Se vieron sólo un segundo
-Pe… perdóname – Sus ojos se volvieron de un solo color - AHHH!!!!! – se lanzó sobre ella
Justo antes de que la daga que Kohaku sostenía entre sus manos se clavara en el cuerpo de Sango, Kirara se interpuso y recibió la mayoría del golpe, cayendo al suelo junto con Kohaku que fue absorbido por el Kazana de Miroku.
Kagome terminaba de recoger los pedazos de la perla que habían salido del interior de Naraku e Inu Yasha destruía pequeños bichos que había por ahí.
FLASH BACK
-Espero que mi hermano esté bien, donde quiera que esté… - mientras acomodaba sus cosas para dormir… ¿Sabes algo Kirara? Di pudiera pedir un solo deseo pediría… no, mi hermano y mi familia murió y nada puede cambiarlo, así que pediría poder verme a mi con una nueva familia… -Sonrió para si misma –Desearía poder ver por lo menos por una vez a Miroku y decirle lo que esta mañana no pude… lo que hace tiempo le tuve que haber dicho… me gustaría ser tan valiente y decirte que te amo viéndote directamente a los ojos y tener la certeza de ser correspondida y sentir tus labios acariciando los míos, sin que nada mas importe en este mundo mas que tus manos acariciando mis mejillas, sintiendo tu cuerpo junto al mío…
Los quiero!!!! Gracias por mandarme reviews!!! me agradan ;) D
está mega jalado, yo lo se, pero aún así lo leen, me halagan, espero no defraudar a nadie.
Comentarios, ya saben a donde. D
