2.- Los más importantes:

Harry caminaba por los pasillos como un fantasma alcohólico, yendo de lado a lado, chocándose con las paredes y dando esa sensación de melancolía difícil de superar. No podía ni siquiera explicarse a sí mismo lo mal que se sentía y la pena enorme que albergaba el hecho de tener que ir a otra escuela de magia. Iba a dejar su vida en Hogwarts para desempeñarse como un mediocre más allá en... en el lugar a donde lo habían mandado. No podía ni recordar el nombre, su mente estaba llena de los recuerdos que tenía desde que había entrado al Castillo, cada cosa buena pasaba lentamente ante sus ojos, casa risa, cada burla...

.-.Harry-

Una vocecita tímida lo llamó por su nombre. Harry enfocó los ojos y se encontró con Ginny Weasley que venía hacia él... la pobre tenía el rostro lleno de heridas y su brazo derecho estaba sujeto por una tablilla.

.-.Deja de seguirnos!- Harry estaba empezando a exasperarse, se volvió hacia Ginny y la miró con furia- esto no es un asunto de los E.D. es un asunto mío. No quiero que te metas en problemas. ¿Entiendes?

.-.Me voy a meter en más problemas si me quedo en Hogwarts esperándote- la muchacha le devolvió la mirada

.-.Te puede pasar algo allá! Y Ni Ron, ni Hermione, ni yo necesitamos algo por que preocuparnos-

.-.No te das cuenta?- preguntó- quiero ir contigo.

.-.Esto no es cosa de querer. Por Dios, niña! Deja de ser tan caprichosa-

Eso fue una bofetada de parte de Harry.

.-.Estuve con ustedes el año pasado. Me defendí muy bien en el Ministerio... yo puedo estar por mí misma, te prometo que no voy a estorbar. Déjame ir con ustedes- sus ojos brillaban y su voz estaba colmada de emoción.

Harry no pudo negarse esa vez.

.-.Perdón- fue lo único que el muchacho pudo decir.

.-.No te preocupes, estas cosas pasan ¿O no? Lo importante es que ninguno.. ya sabes- Ginny se acercó aún más a Harry- te sientes bien?-

.-.No-

.-.Que pasó?-

.-.Me voy-

.-.Que?- Ginny lo miró fijamente a los ojos, mientras sentía que de los suyos brotaban lágrimas involuntarias- te vas a tu casa?-

.-.A otra escuela-

.-.A cual?-

.-.No quiero hablar de eso- Nada más cierto, de tan solo oírse decirlo le empezaron a picar los ojos y una bolita de pelos se atracó en su garganta

.-.Pero... Por qué?-

.-.Porque he sido la persona más estúpid..-

.-.No eso no es cierto. Dumbledore está en un error, él tiene que entender que tú no fuiste solo, nosotros te acompañamos... hasta te alentamos! Tú no tienes toda la culpa-

Harry asintió, podía pensar en miles de cosas, pero ese sencillamente no era el momento. Tenía que salir de ahí en media hora, tenía mucho que guardar y despedirse de las dos personas más importantes de su vida cosa que le iba a quitar mucho tiempo. Quería estar seguro de que sus amigos supieran cuanto los quería y que nunca se iba a olvidar de ellos... jamás.

.-.No te puedes ir- sollozó Ginny.

.-.Yo sé... pero algún día voy a volver- el muchacho se agachó hasta quedar a la altura de los ojos de la pelirroja- te lo juro.

.-.Te voy a extrañar no tienes idea de cuanto-

.-.Yo también. Cuídate mucho Ginny- inmediatamente después se dio la vuelta y emprendió una veloz carrera hasta la Sala Común.

Tenía que despedirse de sus amigos y si así de difícil había sido despedirse de Ginny, entonces no quería imaginar el tiempo ni las palabras que le costarían decirle adiós a Ron y Hermione.

No había nadie en los corredores y mucho menos en la Sala Común. Harry no se detuvo hasta llegar a la puerta de Hermione y una vez allí, dio tres toques.

.-.Hermione-

Iba a despedirse de ella primero, entre recuerdo y recuerdo se acababa de dar cuenta de que la querías más que lo que jamás había querido a una chica, más que a Ginny, incluso más que a Cho.

.-.Hermione- repitió, volviendo a tocar.

.-.Lárgate- le respondió la voz fría de su mejor amiga, tras la puerta.

.-.Que?-

.-.¿No te tienes que ir?-

.-.Puedes abrirme la puerta?-

.-.No-

.-.Hermione que te pas..?-

.-.Lárgate Potter! Ojalá que no vuelvas nunca!-

.-.Hermione abre la puerta!- ¿Qué le pasaba?

.-.NO! Noquiero verte, no quiero hablar contigo nunca más. Ojalá que teolvides de mi en esa escuela a la que vas y que nunca nos veamos-

.-.ABRE!- tenía que saber que había hecho que su mejor amiga le hable así.

.-. Seguro vas a hacer nuevos amigos muy pronto. Ya te enseñaron el lugar? te gusta?-

.-.De verdad quiero despedirme!-

.-. No me importa lo que quieras ¿No querías que me tranquilice. Pues bien, ahora estoy tranquila con el hecho de que te largues...Vete! te están esperando. ¿Por eso querías que me tranquilice?.. O era para guardar toda tu cólera y desahogarte con Ginny– la voz de Hermione se cortó, era un hecho que estaba llorando- Por eso quisiste que me tranquilice?.! Para que ella pueda defenderte? Seguramente ya terminaste de llorar y hasta venido a despedirte de la pobre estúpida Hermione... ¡YO QUERÍA DEFENDERTE!- sollozos furiosos de la castaña no la dejaron hablar

.-.Sabes que no quise de..-

.-.Estás perdiendo tu tiempo, lo digo en serio Harry. ¿No querías que me tranquilice?. Ya, ya está y no me importa si te vas o si te quedas o lo que hagas con tu cochina vida-

.-.Hermione..- por qué le estaba diciendo todo eso? Harry levantó una mano temblorosa hasta la perilla de la puerta. Hermione no podía estar hablando en serio, los dos se querían, eran los mejores amigos, él.. él la... la adoraba.

.-.Cuando te vayas mi vida va a volver a ser normal- fue lo último que le dijo.

Y fue suficiente para él. Se dejó caer en el suelo, abrumado por todo lo que acababa de hacer y dolido por lo que su mejor amiga le acababa de gritar. Sus manos hacían para atrás el abundante cabello que tenía ante la frente y sus ojos se resignaron a seguir fabricando lágrimas.

Era el peor día de su vida.

.-.No te preocupes, a mí también me gritó- le dijo una voz tras él.

.-.Potter no tuvo que levantar la vista para adivinar que Ron se estaba acomodando junto a él y pronto sintió una de sus manos sobre su hombro izquierdo. A pesar de toda la calidez que eso le producía, no era suficiente para dejar de sentirse mal.

.-.Mira- empezó el pelirrojo, en voz baja- no me importa que te vayas, porque yo sé que algún día vas a volver y por el tiempo que estés allá ni te preocupes... eres más que el mejor amigo que haya tenido jamás, eres como mi hermano- Ron soltó una risita, recordando- siempre le pregunto a mi mamá por qué no tuvo un Harry en lugar de una Ginny-

Harry rió levemente, aún llorando.

.-.Te voy a extrañar, pero eso se va a hacer fácil porque siempre voy a tener la idea de que vas a regresar atracada en mi cabeza. Ya sabes lo terco que soy y cuando me entra una algo a la cabeza ni un pensadero me lo quita-

.-.Harry levantó los ojos agradeciendo a su amigo desde el fondo de su corazón. Lo quería mucho, y ahora sentía que nunca se lo había demostrado... pero era la persona a la que más quería en todo el mundo.

.-.Gracias-

.-.Esto no se dice entre hombres- reinició Ron, estaba muy nervioso- pero... te quiero mucho, hermano. Mucho-

.-.También yo-

Esa amistad no había sido hecha para acabarse tan pronto, ambos lo sabían perfectamente; nadie más podía entenderlos con perfección excepto ellos mismos. ¿Cómo se podía uno despedir de alguien así?...


Harry caminaba al ritmo de Snape y de Lupin, acomodados en sus flancos; su maleta avanzaba mágicamente delante de ellos y los conducía a lo que fuera que lo sacaría de Hogwarts.

De pronto, sintió una comezón curiosa en el cuello, movió sus hombros tratando de quitarse la incomodidad, pero se detuvo... el sonido del aleteo de una lechuza se hacía cada vez más cercano.

En efecto, un animal iba hacia él y cuando lo tuvo frente a frente, le ofreció su pata, con un mensaje colgado en ella. Harry tomó el pergamino arrugado con los dedos temblorosos y lo extendió, tratando de plancharlo un poco contra su túnica.

Te voy a esperar para siempre.

Era la letra de Hermione.