Uno de ellos tenía que saber donde estaba Franz, así que Harry aún adormilado en su cama se colocó la banda elástica, sus gafas y se levantó algo pesado, dirigiéndole a sus compañeros de habitación una mirada de interpelación.
.-.Alguien ha visto ha Zoff?- preguntó
Todos en la habitación negaron con la cabeza mientras seguían abocados a sus funciones. Harry recorrió el lugar con la vista hasta dar con la cama perfectamente bien tendida del muchacho, a lo mejor había salido hace mucho porque tenía una clase temprano.
Rascándose la cabeza se dirigió hacia su armario y leyó lo que el día le tenía deparado.
Dos de la tarde y media del mismo día, Jueves, Harry asentía con fervor ante un Chelmno paciente, que le explicaba paso a paso y con mayor detalle los secretos y mañas de las dichosas Coordenadas que le habían pedido en vuelo.
.-.Entendiste?- preguntó finalmente el muchacho de los ojos celestes.
.-.Algo- admitió Harry con media sonrisa en el rostro, mientras sus ojos recorrían en mapa y los cálculos hechos en él a fin de entender.
.-.Es cuestión de práctica- dijo el muchacho mientras se ponía de pié- no hemos almorzado ¿Quieres que te traiga algo de Tante Tirana?-
.-.De quien?-
.-.De una señora... algo de comer-
.-.No tengo hambre-
Chelmno lo miró con la boca abierta al tiempo que soltaba una especie de gruñido.
.-.Alguien más que puede morir de inanición con Treblinka?- preguntó, sin poder comprender como alguien podía no querer comer luego de toda la mañana sin probar un solo bocado de nada- espera un rato aquí, voy a ver que tiene Tante para darme.
Por unos segundos, la mueca desesperada de Ron apareció en el rostro de Chelmno.
Tres muchachas suspiraron al verlos pasar.
Chelmno sonrió tímido.
.-.Admiradoras?- preguntó Harry con algo de sorna.
Como respuesta, un sonoro palmazo en la espalda. Potter sonrió, sintiendo el alivio de haber pasado de ser el protagonista de acciones como esas a ocupar el lugar de espectador.
Cuatro de la mañana del viernes y Harry se despertaba sobresaltado, tratando de enfocar un punto seguro en la habitación, pero sus ojos lo veían todo borroso. La inseguridad que el sueño le había traído aumentó y trató de tranquilizarse a base de su tacto, así que se derrumbó sobre su cama, sintiendo la suavidad de las sábanas en cada milímetro de su cuerpo... lentamente las respiraciones volvían a su ritmo y su cerebro comprendía que lo que acababa de pasar estaba convirtiéndose en un ritual.
.-.¿Cinco pergaminos para el lunes? Pero si ni siquiera tenemos clase ese día- lo había querido evitar, de verdad que sí, Harry había prometido ser un mejor estudiante en ese lugar, pero la primera tarea que le dejaban era de por sí un abuso: Un ensayo de 5 pergaminos sobre la posibilidad que tenían los muggles de descubrir la existencia del mundo mágico durante la quema de brujas de la edad media.
Chelmno sonrió a su lado.
.-. No te parece mucho?- preguntó Harry.
.-.Schwartzwald cuesta- asintió el muchacho y tras esperar unos prudentes segundos- ... nunca te habías quejado antes- agregó, con el ceño fruncido y una sonrisa formándosele en los labios.
Harry bajó la cabeza, avergonzado. Las palabras de Chelmno no habían sido de reproche, es más, las había notado amistosas... pero eran una prueba de que su Yo estaba volviendo y eso no podía ser bueno, porque entonces vendría acompañado de su extraña relación amorosa los problemas.
Seis veces había estado a punto de decirle Ron a Chelmno.
Por un lado, eso indicaba que su amistad esta progresando pero por el otro estaba tropezándose con la misma piedra una y otra vez sin tomarse la molestia de alejarla o de levantar el pié lo suficiente como para evitar el contratiempo. Una vez más se daba cuenta de que seguía dependiente de su pasado y sabía perfectamente que eso no era bueno.
.-.R.. Chelmno¿me pasas la sal?-
Siete.
Siete de la noche, la habitación de los chicos estaba vacía a excepción de Harry, quien sentado en su cama esperaba pacientemente a Zoff hacía ya hora y media. Sus ojos tenían la mirada fija en la puerta, a espera de cualquier movimiento o rasgo que se apareciera. Ya era el segundo día que pasaba sin verlo y estaba empezando a preocuparse.
Ocho libros abiertos ante él, dos tazas de chocolate caliente y el mal humor de pasar su primer fin de semana haciendo tarea. Por suerte estaba acompañado.
.-.Me tengo que ir- Chelmno se puso de pié, recogiendo sus pergaminos y guardándolos en su morral.
.-.Terminaste?- preguntó Harry, rompiendo su concentración.
.-.No, tengo cosas que hacer-
Potter asintió, pasándose una mano por el rostro y dándole un vistazo dramático a todo lo que tenía colocado en la mesa.
.-.Nos vemos luego?- preguntó el Schmahl, alejándose.
.-.No te preocupes, voy a estar aquí tooodo el día-
Nueve pergaminos arrugados en el piso, la mano de Harry jamás había sido buena para escribir y su mente no coordenaba las ideas de manera que pudieran salir fluidamente de su cerebro. De todas maneras tenía que seguir intentándolo, era su primer trabajo en Historia de la Magia y tenía que hacerlo bien.
.-.¿ "Diez maneras de despistar a su vecino muggle"?-
Harry tomó un libro bastante viejo entre sus manos y leyó el título escrito en el lomo con letras plateadas. Pestañeó un par de veces, estimando su nivel de utilidad para el ensayo que estaba haciendo y lo puso bajo su brazo izquierdo, junto con tantos otros que habían pasado la prueba de rigor.
A lo mejor era que estaba solo en un lugar perfectamente desconocido, pero jamás se había sentido tan cómodo investigando en una biblioteca.
No, era que se imaginaba el rostro de orgullo que Hermione habría puesto al verlo y eso lo animaba a seguir.
A once pasos de la mesa que el morocho ocupaba, tres personas se detuvieron.
.-...rmanos!- terminaba de exclamar una voz altisonante
.-.Baja la voz Balzec- pidió algo duramente la de una chica, medio susurrando- estamos en una biblioteca-
.-.Bueno hermanito, te dejamos-
.-.Hasta mañana- se despidió la muchacha.
.-.Hasta mañana- respondió Chelmno.
.-. Conquien estás estudiando?-
.-. Conun amigo, Treblinka-
.-.Ese que está durmiendo al frente?- preguntó el altisonante, señalando a la mesa de Harry, en la que este roncaba plácidamente con la cabeza enterrada entre los libros.
.-.Sí-
Doce, medianoche y Harry aún meditaba la respuesta para la pregunta uno de sus compañeros de dormitorio le había hecho: Si había tenido una buena semana en la nueva escuela.
Lo más seguro era que para ese momento el muchacho estaría bien dormido y que al día siguiente ni siquiera recordara la pregunta, pero a Harry eso le pareció motivo suficiente para ponerse a pensar muy bien en lo que había sucedido y como consecuencia se vio inundado de los recuerdos del conjunto de días que se sucedieron desde que dejó Hogwarts.
Su primera impresión de la respuesta era negativa, pero no podía ser tan cínico consigo mismo y negar que no había estado triste todo el tiempo, menos cuando él y Chelmno se habían hecho tan buenos amigos en tan poco tiempo.
Sonrió mientras se ponía de costado, dispuesto a dormir.
Sus ojos empezaron a picarle, los cerró lentamente y empezó a sentir como un manto de sopor lo cubría...
.-.JUCH!-
Potter abrió los ojos de inmediato, sentía que el grito había sido proferido a pocos metros de él.
.-.Tápate con la frazada- le dijo la voz adormilada de alguien a unas cuantas camas de distancia- así no vas a escuchar nada-
Harry asintió medio dormido, se apresuró a tapar su cabeza y cuando lo hizo ¡Oh Maravilla! Las risas, ruidos, gritos y etc desaparecieron por completo.
Eran aproximadamente las doce y media, oficialmente domingo, cuando Harry por fin encontró descanso.
HEY! He terminado el capi de hoy...
Creo q ya se han dado cuenta q es una especie de recuento d lo q ha pasado dsd el jueves hasta el sábado, se me ocurrió la idea y espero que haya funcionado.
Para este capítulo ya se entiende que Chelmno y Harry se han hecho amigos, al menos trato de mostrar un poco de su relación y de descubrir más aspectos del muchacho Schmahl ¿A ustedes q les parece él?
Ah! Estoy poniendo un poco d palabras en alemán (ojalá q mi diccionario este bien!) y se las aclaro:
Tante: Tía. En este caso nos referimos a Tante Tirana o Tía Tirana, que es la bruja proveedora de comida en Schwartzwald (xq aquí los elfos tienen la orden estricta d no alimentar a nadie fuera d las horas de desayuno, almuerzo y cena... a excepción d los q se ocupan de la fruta) cuya modalidad es bastante peculiar: los alumnos solamente reciben una unidad llamada "Cubierto" que puede ser cualquier pieza de comida, desde una pizza hasta chocolate caliente con galletitas, depende de la amabilidad con la que le pidas a Tante y el humor que trae consigo en el día.
Juch: VIVA! Ea!
Laura owl: Gracias x el review! Y ps sí, a mi tb me gusta más Hogwarts, pero Schwartzwald tiene su gracia, solo q como estamos conociendo la escuela al ritmo de Harry, compartimos su visión. MUCHAS GRACIAS X LEER! Y x tener tantas opiniones acerca d lo q pasa en el fic... d vdd me emociona saber q te has sumergido tanto. ¿Las clases de vuelo son una patada en el trasero verdad? Ejejejeje, yo tb me las imaginé crueles al momento de escribirlas. Con respecto a lo de Dumbledore, lamentablemente (para Harry) no piensa levantarle el castigo en muuuuuuuuuuuuuuuuuuucho. Muchos besotes
Ginger: Que bonito q viajaste! Y ps las cabinas son lo d menos, lo q importa es q el lugar era muy bonito y q estás de vuelta sin ningún daño. Ojalá q hayas disfrutado mucho y conocido tb! Yo me muero x irme de viaje.. pero no puedo ¬¬. Espero q no tengas ningún tropezón con el alemán q ponga y si algo sta mal me lo dices.. Un beso grande tb para tíiii
