Capítulo II
Mientes tan bienQue te quedarás conmigo una vida entera
que contigo adiós inviernos sólo primavera
que las olas son de magia y no de agua salada
yo te creo todo y tú no me das nada, tú no me das nada
Que si sigo tu camino llegaré hasta el cielo
Tú me mientes en la cara y yo me vuelvo ciego
yo me trago tus palabras, tú juegas un juego
y me brilla el mundo cuando dices luego, cuando dices luego
Al día siguiente, Sakura despertó temprano y notó que Shaoran no estaba en la cama. Fue a bañarse, sé vistió y luego bajo a la cocina a prepararse el desayuno, pero Shaoran ya lo tenía listo y estaba esperándola para servir el café.
Buenos días. Saludo alegre la joven.
Buenos días.
Desayunaron, luego Sakura lavó las cosas junto a Kero. Rato más tarde salieron a caminar por el parque.
¿Te quedarás o solo viniste de vacaciones?. Preguntó Sakura.
Me quedaré. Solo él sabía que no era verdad, pero no quería entristecerla más de lo que ya estaba.
¡Que bien! Y dime, ¿Ya tienes casa o departamento?...
Sí. Mi madre me regaló un departamento hace algunos años.
Ah, ya veo... Dijo un poco desanimada.
Pero si quieres puedo ir a vivir contigo quizás te haría bien algo de compañía.
¿No te molesta?
Claro que no, ¿a ti sí?
¡No! Para nada... Me gustaría mucho que vivieras conmigo. Dijo sonrojándose.
Bien, entonces mañana mismo me mudo. Le dijo.
Y a mí nadie me preguntó mi opinión. Dijo haciéndose el ofendido Kero.
Lo siento Kero... ¿Te molestaría que Shaoran fuera a vivir con nosotros?
No. Así tendré a alguien a quien molestar. Dijo sonriente.
Shaoran y Sakura rieron. Siguieron caminando por el parque y comieron unos hot-dogs allí mismo a la hora del almuerzo. Fueron a todas partes a divertirse.
Por la noche, al llegar a la casa, había un mensaje en la contestadora. Sakura lo escuchó.
¡Hola! Habla Arisu, Shaoran. Espero que no estés con la niña esa... ¿Cómo se llamaba?... A sí, Sakura. Amor, te extraño mucho, quiero que vuelvas... Por favor cuando llegues llámame. Besos, tu prometida. Ari. ¡¡Ah! Disculpa por llamar a este número, pero como no te encontré en tu casa ni en tu celular revisé en tu agenda y encontré este, que no sé de quien sea, pero supongo que te darán el mensaje. Por cierto, te tengo una grandiosa sorpresa. Espero que te guste... Besos, ¡¡Te amo!.
Al escuchar esto, Sakura lo miró con odio.
Sakura... Te puedo explicar, yo...
¡Explicar! No tienes nada que explicar. ¡Eres un mentiroso Shaoran! ¿Quién es esa chica? ¿Eh? Ah sí... Tu prometida según ella. Diablos, no entiendo como pudiste mentirme tan descaradamente.
Pero Sakura...
No hay pero que valga Shaoran. Vete de mi casa. Silenciosas lágrimas corrían por sus mejillas.
Sakura, dejame explicarte.
¿Explicarme qué? ¿Que estabas comprometido? O quizás... Que me mentiste todo el tiempo desde que nos encontramos...
Pero Sakura, yo no quise, te juro, iba a decírtelo.
¿Cuándo? ¿Cuándo fuera el día de tu boda? ¡Vete Shaoran! No quiero volver a verte en mi vida.
Subió las escaleras corriend y se encerró e su cuarto. Kero bajó.
Oye mocoso ¿Qué le hiciste a Sakurita?. Dijo enfadado.
Pues... Yo... No le dije algo importante...
¿Por qué?
Miedo a que me rechazara... Supongo.
Pero... Yo preferiría mil veces más eso que a que me die por el resto de mi vida por mentirle. Le dijo Kero volviendo a subir.
Shaoran se quedó dubitativo un rato pensando qué hacer. Decidió que sería mejor dejarla sola, así que tomó su mochila y se marchó. Al llegar a su casa, encontró una desagradable sorpresa. Arisu estaba allí. Cuando lo vió, corrió, lo abrazó y besó. Shaoran se mantubo serio y sin decir nada hasta que ella lo dejó.
¿Pasa algo mi amor? ¿No te agrada verme aquí?. Dijo preocupada.
¿Qué haces aquí?
Pues... Te extrañaba mucho... No aguanto tres semanas sin verte, así que decidí venir.
Pues hiciste mal Arisu, y también hiciste mal en llamar a una casa que no sabías ni de quién era. Dijo enojado.
¿Por qué? ¿Te metí en problemas? Disculpame, yo no sabía...
Sí, es obvio que no sabías. Me arruinaste todo.
Lo lamento... No era mi intención...
Arisu, no debiste venir. No debiste llamar. ¿Por qué haces todo a tu antojo?
Pero Shaoran, yo...
No me expliques nada, no te quiero oir. Puedes dormir en mi cuarto, yo dormiré en el sofá.
Dichas esas últimas palabras, se fue al living y cerró las puertas corredizas para poder estar solo con sus pensamientos.
Ya bastante tarde Arisu apareció.
Buenas noches Shaoran...
Buenas noches. Dijo friamente sin mirarla.
Bien, ya era suficiente. No lo soportaba más.
¿Puedes decirme por qué estás tan enfadado?
Porque eres entrometida Arisu.
¿Por qué? ¿Qué hice mal?
¡¡¡Llamar a casa de Sakura!. Gritó furioso mirándola con desprecio.
¿Sakura? Conque estabas con ella eh...
Sí. ¿Algún problema?
¡¡Yo soy tu prometida! ¿Qué hacías con esa niña?
Arisu... Yo no te amo. Si eres mi prometida es porque así lo decidieron mis padres, pero no yo. Eh estado enamorado de Sakura desde el primer momento en que la vi, ¿Entiendes? Tú no me atraes... Déjame decirte que eres una chica muy hermosa, pero mi corazón ya tiene dueña.
Entonces... ¿Por qué aceptaste que te casarías conmigo?. Dijo llorando.
Porque hay que mantener el honor y el buen nombre de la familia. Dirijió su vista al suelo.
Ya veo. Debes casarte con la hija de una familia muy importante para poder mantener el buen nombre de tú familia. Está bien, muy bien. Buenas noches.
Arisu...
La chica cerró las puertas y se fue a dormir.
