Bajo una noche estrellada


cariño¿ocurre algo? – Zack se sorprendió al comprobar que Aeris no dejaba de sonreir. Estaban todos reunidos en la cena: los reyes, los príncipes y los invitados.

- No¿por qué?- preguntó Aeris sorprendida .

- Bueno,..no has dejado de sonreir desde que hemos empezado la cena

- ¿hay algo malo en eso?- la princesa aún sonreía

- no,...por supuesto que no. Es solo que supongo que tu alegría se debe a algún hecho en particular¿no?

- Puede- contestó la princesa maliciosamente al mismo tiempo que sonreía a Cloud. El chico se percató de ello y se dijo:

- " yo se a que se debe la alegría de tu novia"

Aeris y Cloud se encontraron delante de la gran puerta del palacio de la Ciudad Olvidada". Habían salido del palacio sin que nadie los viera y ahora ya estaban listos para partir. Los dos jóvenes atravesaron la Ciudad Olvidada, el bosque dormido(con la ayuda del arpa lunar de la princesa), hasta que finalmente llegaron a Ciudad Huesos. Una vez allí Cloud le dijo a la chica:

- princesa, ya casi hemos llegado. Tan solo nos falta salir de esta ciudad para que puedas ver una noche con estrellas.

- Estoy impaciente, cloud- contestó Aeris y sin esperar al muchacho, la chica abandonó Ciudad Huesos corriendo. Cloud la siguió.

Aeris quedó maravillada al verse envuelta en la oscuridad. Nunca había experimentado una sensación igual. El paisaje era tan distinto al del día. La chica miró el cielo, y al ver aquellos puntitos blancos, se dío la vuelta y le preguntó a Cloud:

- ¿estrellas verdad?
- Si, y aquella esfera es la luna.
- Es tan bonito.- la chica se sento en la hierba y Cloud hizo lo mismo. Ambos estuvieron mirando el firmamento estrellado durante mucho tiempo sin decir nada. Aquel ambiente era tan especial. Los dos solos, en mitad de la noche, bajo un cielo estrellado,...algo que Cloud recordaba, algo que el ya había vivido,..con otra persona.

- Cloud, gracias por haberme traído aquí, me encanta el cielo, las estrellas,..

- De nada,pero princesa¿por qué no le pides a Zack que venga contigo?

- No es buena idea, a Zack no le gustan éstas cosas supongo,..nunca me ha llevado a algún lugar especial,...puede que cambie cuando seamos marido y mujer.

- ¿ estás enamorada de él?- Cloud hizo la pregunta tan súbitamenet que la princesa no supo que contestar. Quería decir que sí, pero,...

- lo siento. Olvídalo princesa, no es de mi imcumbencia.- se disculpó Cloud al ver lo incómoda que Aeris se había sentido.

- No Cloud, no me importa. Es sólo que,..creo que sí, le quiero pero yo,..- Aeris se interrumpió.

- ¿Si?
- Peron no estoy segura de que él sienta lo mismo por mi- contestó la princesa rápidamente. Cloud sabía que eso no era lo que ella iba a decir en un principio peron no dijo nada. Decidió cambiar de tema.

- Princesa ¿ves las estrellas¿las cosntelaciones

- ¿Constelaciones?- Aeris no entendía el significado de aquella palabra.

- Grupos de estrellas- explicó Cloud
- Si,...es muy bonito.. nunca había oído hablar de ellas.

- ¿y de los meteoritos¿esas rocas que caen del espacio?son peligrosos si caen en la tierra.

- No ,no lo sabía Cloud.
De pronto Aeris vió algo en el cielo que la llamó la atencióm. Era algo que había atravesado el firmamento rápidamente.

- ¡Cloud¿qué era eso!- Aeris parecía asustada.

- ¿el que?- cloud no había visto nada y no entendía el temor de la princesa.

- ¡He visto algo que atravesaba el cielo y luego desaparecía¿ y si es un meteorito?

Cloud miró el firmamento y vió lo mismo que había visto la princesa. El chico comenzó a reir

-¿ Cloud¿qué es tan gracioso?

- princesa lo que has visto no es un meteorito sino una estrella fugaz- cloud continuaba riendo y Aeris lo miró un poco molesta pero luego sonrió. Era la primera vez que lo había visto reir.Estaba tan alegre,...

- y que es eso?
- Son estrellas que pasan velozmente, se dice que cuando se ve una estrella fugaz debes de pedir un deseo puesto que se hará realidad.

- Oh,...Cloud,..¿las estrellas mueren?quiero decir,...¿las esrellas acaban por desaparecer?

- Una cosa que he admirado siempre de las estrellas es que no pueden sustituirse unas a otras. Nunca puede saberse cuando una estrella ha muerto, pero se dice que con el paso del tiempo la estrella acabará por desaparecer . Y aunque eso sea verdad, en el lugar de aquella estrella quedará la misma luz que cuando existía. Ninguna otra estrella podrá sustituirla, ni en días ni en años. Esa estrella vivirá para siempre aunque haya desaparecido, puesto que cuando mires al cielo verás una luz. Y nunca puedes saber si esa luz es una estrella o simplemente el brillo que ha dejado la estrella para siempre. Con las personas no ocurre lo mismo. Una persona puede ser sustituida rápidamente, una persona puede ocupar el mismo lugar de otra. Pero no una estrella.- Cloud se quedó silencioso. Aeris no dijo nada. Aquellas palabras la habían emocionado.

- Cloud,..eso es bonito. Pero yo opino que no es cierto que una persona pueda reemplazar a otra.

- Supongo. Bueno, es tarde princesa, será mejor que volvamos al palacio.

- Si. Muchas gracias Cloud. Me ha encantado ésta pequeña escapada.

- De nada, princesa. Me alegra ver que te ha gustado ver el cielo.

- ¿Cloud?
- ¿Si?
- Llámame Aeris¿quieres?
Cloud miró a Aeris y sonrió.
- Aeris gracias por haber venido conmigo.
- De nada Cloud.
Aeris levantó la vista y miró a Cloud. El chico la estaba observando detenidamente. En ese momento los dos miraron al cielo,..y vieron una estrella fugaz. Ambos habían tenido la rapidez suficiente de pedir un deseo .Un deseo desde lo más profundo de sus corazones. Un deseo que quizás,..se cumpliría.

Zack no podía dormir. Había intentado por todos los medios descansar pero simplemente no podia. Decidió contemplar las vistas a través de su ventana. En ese momento vío a su prometida y al nuevo invitado entrando en el patio del palacio. Zack estaba sorprendido.¿qué hacía su prometida con aquel extranjero a aquellas altas horas de la noche? De pronto una rabia interior empezó a surgir y miró al muchacho rubio con rabia en sus ojos,...y temor en su corazón.

( continuará)