Todos fueron reunidos en el salón real. Nadie sabía lo que ocurría, pero acudieron interesados. Los invitados debían anunciar algo importante. Cuando estuvieron todos, fue Cloud quien tomó la palabra:
- " majestades, gracias por habernos acojido tan bien pero debemos regresar"
- " lo entendemos"- sonrió Ifalna, pero advirtió la cara de su hija: no parecía feliz.
- " y yo...voy"
Todos se giraron para ver quién había hablado. ¡ No podía ser, era la Princesa Aeris!Todos la miraron como si se hubiera vuelto loca.
- " ¿ Qué?- Zack no se lo creía.
- " quiero ayudar a detener a Sefirot"- prosiguió la joven.
- " eres una Princesa"- exclamó Gast.
-" por eso, es mi deber ayudar a mi pueblo...por favor...
Zack negó con la cabeza.
- " No".
Aeris miró suplicante a Tifa, Cloud,Cid y Shera. Sus ojos se posaron en Cloud.
- " por favor..."
Cloud se sentía incómodo, pero aún estaba furioso por lo de antes. Aeris había contado su secreto a Tifa...
-" lo siento"
Esas fueron sus palabras. Aeris le miró dolida...no quería su ayuda...porque la odiaba...
- " ¡ ya te lo dije Aeris, no vas a ningun sitio!- volvió a decir su prometido.
- " Si, hija..."- Ifalna asintió.
Aeris no replicó, tan solo echó a correr, llorando, hasta encerrarse en su habitación.
Aeris, hija- susurró la reina mirando preocupada a su marido.
-falna sabes que es lo correcto, no queremos que corra peligro
-Bueno, entonces¿ cúando nos vamos?- preguntó Tifa con aire inocente.
Todos los ojos se posaron en ella; Tifa sonrió y repitió la pregunta.
-Barret nos está esperando -prosiguió Tifa.
-Si- Cloud no parecía muy convencido. Estaba preocupado al ver que Aeris se había ido llorando.
-Entonces vamos - Tifa se despidió de todos con la mano y se dispuso a abandonar el palacio. Cid y Shera fueron tras ella, aunque no convencidos. El último era Cloud, iba a segurilos pero entonces se giró, y miró a los reyes:
-Ella ¿ estará bien?
-Cloud, ella es una Princesa,una Cetra importante, no puede acompañaros,lo entenderá - sonrió la reina al muchacho preocupado.
-No obstante,podríais decirla que¿siento mucho todo? En serio
-Claro, Cloud, se lo diremos.- contestó el rey.
-Si -contestó Zack.
-Bien, entonces nos vamos
-Ayudad al planeta y cuando lo hagais hecho volved y traernos las buenas noticias, estoy segura que a Aeris le alegrará
-Si, claro. Bueno,gracias de nuevo y hasta siempre.
Cloud echó un último vistazo a todos los reunidos , antes de abandonar el palacio real y dirigirse a donde le aguardaban sus compañeros. La nave estaba en perfectas condiciones para el despliegue. Con un último adiós, Cloud subió a bordo despidiéndose en silencio de aquel que había sido su hogar durante casi cuatro meses..
Aeris estaba sola, en su cuarto, llorando en silencio, se habían ido sin ella,la habían dejado sola, la habían ignorado por completo,recordó la fría mirada de Cloud y sus palabras y eso sólo provocó que más lágrimas resbalaran por sus mejillas.
"se fue sin despedirse,se ha ido para siempre y no quieren que yo ayude"
La chica no podía parar de llorar y pensar en lo que sería su futuro.
" me casaré con Zack , eso es mi futuro,casarme con alguien al que no quiero solo porque mis padres crean que sea lo mejor para mi"
Al fin lo había admitido. Que ella no quería a Zack,que ella nunca sería feliz a su lado
"¿ qué voy a hacer? - se desesperaba . soy una Cetra, una Princesa y me gustaría ayudar al planeta,siento que por primera vez en mi vida haría algo útil pero se han ido,me han dejado"
De nuevo el llanto se apoderó de ella, ésta vez más fuerte y continuo.Cuando hubo llorado tanto que ya no le quedaban más lágrimas, Aeris se secó el rostro con las manos y decidió dar una vuelta para despejarse. No quería que nadie la viera salir del palacio, no estaba de humor para hablar ni con sus padres ni con Zack ,solo quería dar un paseo.
-hace mucho que no veo a Budenhaguen - se dijo la chica . creo que iré a hacerle una visita
Animada al pensar en esto, la Princesa tuvo mucho cuidado en abandonar su casa sin ser vista. Una vez fuera, se preguntó qué estaría haciendo Cloud en esos momentos.
" hace tiempo que se ha ido" - apartó rápidamente éstos pensamientos de su mente y se dirigió a casa del viejo Budenhaguen. Para ello, tuvo primero que pasar al lado del lago de la ciudad , y después, pudo ver muchas casas, gente, voces
Al fin, apartada de las demás casas, pudo divisar la de Budenhaguen. Llamó a la puerta , no contestó nadie.
"extraño "- se dijo la chica. Siempre había estado en casa, ni una vez le había pasado llamar a la puerta y que no contestase.
-estará ¿ abierto? - Aeris intentó abrir la puerta, estaba abierta. Decidió entrar y esperarle dentro. Era la primera vez que entraba en su casa,era acojedora. Bastante pequeña pero acojedora. Aeris decidió sentarse en lo que parecía ser la sala de estar. Esperó durantes unos minutos y entonces algo la llamó la atención: había una estantería, con algunos libros..eran libros antiguos, pensó la joven. Se levantó de su sitio para examinarlos: los títulos no le eran familares -ahora que lo pienso, se dijo la chica, -en el palacio no hay casi libros,. La Princesa observó con curiosidad los títulos tan poco comunes de los libros: -Jénova: la crisis del cielo-, -os protectores del planeta-, - nómadas en el planeta-, -informes del Profesor Gast -, - la vida del planeta-y muchos otros más. Pero Aeris se fijó especialmente en el titulado: -Informes del Profesor Gast -.
"¿ acaso es una coincidencia que se llame como mi padre?"
La joven tomó el libro entre sus manos y lo examinó: no era un libro, más bien eran varias hojas , eran archivos que parecía un diario . Aeris lo abrió y comenzó a leer por la primera página:
La joven tomó el libro entre sus manos y lo examinó: no era un libro, más bien eran varias hojas , eran archivos que parecía un diario . Aeris lo abrió y comenzó a leer por la primera página:
-Se sabe que hace mucho tiempo, hace más de 1000 años, algo cayó del cielo cerca del continente norte, creando un gran cráter y una herida en el planeta-.
-Eso no lo sabía yo- , se dijo Aeris mientras continuaba leyendo .
-a lo que cayó del Cielo se le denominó Crisis del Cielo. Había herido al planeta pero se acercó a los habitantes del mismo y les contagió el virus que traía consigo: aquellos habitantes murieron, exceptuando unos pocos, entre ellos Ifalna Gainsborough .
A Aeris se le agrandaron los ojos. ¿ Ifalna, su madre?
-Ifalna Gainsborough sobrevivió, junto a otros pocos seres de su especie . Éstos consiguieron vencer a la Crisis del Cielo, encerrándola para siempre, aunque no consiguieron matarla. El planeta sintiéndose a salvo, decidió poner a dormir a unas Armas que previamente había construido para salvarse. A lo largo del tiempo, los habitantes del planeta fueron muriendo, y la única superviviente fue Ifalna Gainsborough, ya que era la más joven de los supervivientes.
Aeris leía y no entendia nada. Continuó su lectura, cada vez más interesada.
-Ifalna Gainsborough se convirtió en la útima de su especie; como he dicho antes; se sabe que años más tarde, a los veinti dos años, veinti tres, fue a vivir a una pequeña ciudad llamada Iciclos, situada en el Continente Norte.
- pero si ella no había salido nunca de aquí-se decía Aeris.
- Allí conocería a su marido, el Pofesor Gast, un famoso ciéntifico involucrado en el Proyecto Jénova . Oh, si, el Proyecto Jénova,aquello a lo que llamaron - la crisis del Cielo- algunos, otros lo llamaron Jénova. Lo devolvieron a la vida, no sabían lo que hacían,Gast fue responsable;bueno, yo también trabajaba con él, no puedo criticarlo mucho,mejor dicho, devolvimos a la vida a ese ser, creíamos que era lo mejor,pero lo único que hicimos fue crear una amenaza para el planeta. Si,y no nos bastó con eso, sino que a partir de aquella cosa ayudé a crear un monstruo,pobre niño, el pequeño Sefirot-
Aeris se sentía mareada. Cada vez estaba más confusa.
- si, Jénova fue liberada, querrá matar a todo el que se interponga en su camino, querrá gobernar,bueno, lo que iba diciendo era que Ifalna y el Profesor Gast se retiraron a vivir a Icilos. Yo me retiré a vivir a Costa del Sol, necesitaba olvidarme de Shinra, no quería saber más con ellos,aunque siempre seguí siendo amigo de Gast, si, era un buen hombre.
Ifalna y Gast hablaban mucho de la Crisis del Cielo, como me decían, me contaban que estaba preocupados de lo que podía llegarle a suceder al planeta,bueno, esos dos se enamoraron¡ lo veia venir! Y tuvieron una niña,si, la pequeña Aeris.
A Aeris por poco se le cae el libro de las manos. Estaba sudando;necesitaba saber más.
-oh, Aeris, la querían tanto sus padres;además, era especial. Ella era parte de Ifalna ,de su raza, y parte de mi raza, de la del Profesor Gast;recuerdo que un día me hicieron ir a su casa y me pidieron un favor;favor;un enorme favor;me dijeron que sentían que sus vidas acabarían pronto, yo les pregunté de qué estaban hablando y me rogaron que cuidase a su niña si algo les pasaba a ellos, que me hiciese responsable de Aeris;yo por supuesto, les di mi apoyo;me dijeron que cuidase bien de Aeris y que nunca supiera la verdad , que nunca supiera que ella era una Cetra.La última Cetra.
-¿ eh? - aquello desconcertó a Aeris por completo. ¿ De qué estaba hablando?
-me dijeron que por favor, apartara Aeris del mundo real que tuviera ua vida normal, que no supiera la verdad sobre su pasado , porque estaría en peligro. Quise saber de qué estaban hablando, Ifalna me explicó que como última Cetra, sería su misión quizás algun día la de salvar al planeta y que quizás sonaba egoísta pero ella no deseaba eso. Deseaba una vida normal y acepté, les dije que no sabía cómo pero les prometí que Aeris nunca sabría la verdad, que estaría siempre a salvo;esa misma noche los asesinó alguien;seguramente Shinra;está claro. Al día siguiente los encontré en la casa;fue duro;pero la niña estaba a salvo escondida donde me dijo Ifalna que lo estaría si sentía peligro.La tomé entre mis brazos.Aeris, la última Cetra, la última Anciana.Debía hacerme cargo de ella;a mi esposa no le importaría;dspues de todo, no teníamos hijos.Ahora si, nuestra pequeña hija Aeris. Mi esposa la tomó cariño nada más tomarla en brazos;protegerla;de Shinra.Protegerla de saber la verdad sobre su identidad y fue entonces cuando se nos ocurrió: si, era la solución. Crearíamos una Ciudad , una Ciudad Alejada de todo;la Ciudad Olvidada.-
Aeris no podía dar crédito a lo que estaba leyendo.
-si , viviríamos allí con Aeris, sería nuestra hija,llevaríamos a amigos y parientes para vivir con nosotros, seríamos una Ciudad Feliz. Aeris estaría segura;protegida.Decidi que esa era la solución. Mi esposa y yo tomamos la decisión de hacernos pasar por Cetras, todo seríamos Cetras y Aeris no tendría contacto nunca con el mundo exterior.Si eso sucedía , ella acabaría sabiendo la verdad, sabría que era la última Cetra y la que podría detener a Jénova;eso me lo dijo Ifalna. No sabía ella tampoco como, pero Aeris podría hacerlo,aunque quizás resultase herida, por eso no podia permitir que---bueno, el caso es que, incluso en la Ciudad Olvidada, existía el riesgo que al hacerse mayor, la niña intentase salir de la ciudad.De ahí la idea de hacernos pasar por los reyes de la Ciudad. Aunque, la verdad, es que ella si que es una auténtica Princesa;Ifalna lo dijo.No una Princesa humana, sino una Princesa Cetra porque el planeta lo había dicho asi: que sería la última de su especie y por lo tanto eso la convertía en -la Princesa Salvadora-, asi la llamaría el planeta.oh, si;los reyes;ella la Princesa;haríamos que se casase con un joven, con algun joven,quizás con Zack.Si, con Zack. Asi, como Princesa, más adelante reina, no podría abandonar nunca ésta ciudad, no podría herirse.Despues de todo, se lo prometí a sus padres: que ella no se haria daño nunca.-
Aeris estaba temblando, lo que acababa de descubrir la había dejado helada. Aún había algo más :
- y en cuanto a mi nombre, decidimos que en homenaje a Gast e Ifalna, mi esposa y yo tomaríamos sus nombres;mi esposa Heather, y yo Douglas.
Pd: Aeris siempre estará a salvo,nunca correrá el peligro de querer enfrentarse a Jénova;la queremos demasiado como para permitirlo, si fuera nuestra hija, no podríamos quererla más.
Douglas.
La joven estaba paralizada. Era todo una mentira,casi todo,ella era la última Cera, sus padres eran humanos, la Ciudad era un escenario, y su prometido,era todo falso. Falso.
- pero ahora sé la verdad -suspiró la joven - y aunque resulte herida,voy a destruir a Jénova,y a Sefirot-.
Con éstos pensamientos, la joven salió corriendo de la casa a velocidad increíble, llevándose el libro que guardaba tantos secretos, dispuesta a abandonar la Ciudad Olvidada ese mismo día.
(continuará)
