Reitero mis agradecimientos, a todos quienes han dejado un review... son muy amables y gracias a ello me dan animos de continuar entregándoles mis capitulos.... aahhh y tambien agradezco a quienes no dejan reviews... digo.. al menos leen la historia ¬¬ jejejej UU' espero y se animen un dia de estos...

Continuo con mi fic... nuevamente aclarando que Inuyasha es de Rumiko T... idola!!!

Capítulo Anterior:

Buyo... eras tú... – murmuró decepcionada - Qué tanto haces en mi ventana!!... Ven acá – reprendió abriéndola un poco más para que el gato entrara... Se sentó en su cama, Buyo subió también y se sentó a su lado apoyándose en ella, como si la consolara, Ahome sonrió acariciándole la cabeza – Creo que es tiempo de que acepte la verdad... Inuyasha no regresará... jamás volveré a verlo...

Capitulo 6: Retorno a la época antigua... Un nuevo integrante...

Era una bella mañana de día sábado, el sol ya iluminaba el nuevo día brindando una exquisita tibieza al ambiente... Ahome salió de su casa, necesitaba respirar un poco de aire, su madre y su hermano, habían salido hace rato para hacer las compras y su abuelo estaba en algún lado, buscando alguna importante reliquia, herencia de sus antepasados...

Pasó frente al cobertizo que ocultaba en su interior el Pozo, desde que regresó, no había tenido las fuerzas suficientes de entrar en él... y ahora tampoco las tenía, así que continuó su camino.

A unos pasos, se encontró bajo la protectora sombra del gran árbol sagrado, sus ramas se mecían con suavidad, el roce de sus hojas parecían susurrarle palabras de consuelo... Sonrió, ese árbol tenía el extraordinario poder de llenar su alma de paz... Miró las viejas cicatrices, que permanecían intactas a pesar de los años... como para recordarle constantemente que fue en aquel lugar donde conoció a Inuyasha... Se acercó, estiró su mano para alcanzar aquel sitio exacto donde permaneció dormido, acarició las huellas que dejara su amado hanyou...

Un estremecimiento recorrió su cuerpo, por unos segundos logró percibir con claridad su presencia, la calidez que emanaba de él... A pesar de los años que los separaban... pudo sentirlo...

"Entiendo... No importa cuanto tiempo transcurra... o cuan alejados nos encontremos... tu esencia permanecerá viva en mi interior... siempre serás parte de mí, de mis más preciados recuerdos, de mi corazón y de mi alma..."... "Y ahora me queda claro, que no habría sido capaz de alejarme de ti... de ir en contra de mis sentimientos... Fue una cobardía imperdonable, tan siquiera pensarlo!!!... Pero las circunstancias jugaron en nuestra contra..." – pensó angustiada...

"Kikyo esta equivocada... mi nuevo poder... nunca llegará a ser maligno... porque su energía nace del amor...", una nueva lágrima asomó a sus ojos, y lentamente descendió por su mejilla, ya era una sensación conocida...

Algo detrás de ella, la inquietó, dio media vuelta, encontrándose como tantas otras veces con esos hermosos ojos dorados, allí estaba, parado fuera del cobertizo donde estaba el pozo... como si la aguardara, para partir juntos a la época antigua... No soportó seguir mirando esa amada silueta, la hería ilusionarse, para luego verlo desaparecer una y otra vez. Había sucedido tantas veces, que hasta llegó a pensar que estaba enloqueciendo...

Apoyó nuevamente su mano en el árbol y su frente en ella...

Mi querido Inuyasha...

Repentinamente a su espalda, sintió como era rodeada por unos fuertes brazos... y una sedosa voz varonil susurraba con ternura en su oído...

Perdóname... Ahome... – susurró, aprisionándola contra su pecho... y descansando su mejilla contra su oído. La joven sintió estremecer su cuerpo entero... Esta vez era real?... O sólo se trataba de una nueva artimaña de su mente, que actuaba con desmedida crueldad...

Dime... júrame... que no estoy soñando despierta... como tantas otras veces... Y que de verdad esta aquí... – suplicó con voz trémula

No estás soñando... Y creo... que yo tampoco... – dijo con ternura – Aunque por las dudas... permíteme comprobarlo... – pidió con voz ronca, dándola vuelta hacia él. Ahome creía que su corazón estallaría de felicidad y desesperación, a medida que el rostro de Inuyasha se acercaba al suyo con una endemoniada y maliciosa lentitud... Se irguió al encuentro de esos labios que tanto añoraba... Cuando al fin lograron reencontrarse, se fundieron en una delicada y dulce caricia... llena de amor, que poco a poco se hizo más intensa y apasionada, como si con ese beso sanaran, tantos días de interminable sufrimiento por su separación...

Cuando el beso concluyó Ahome se refugió en el pecho del hanyou...

Te extrañé tanto... pensé que jamás volvería a verte... – murmuró la sacerdotisa

Eso nunca pasará... No puedo permanecer lejos de ti... – dijo abrazándola con más fuerza – Aún si no merezco esa dicha... Ahome – la separó un poco mirándola a los ojos – Necesito que me perdones... A pesar de todo lo que ha sucedido, sigo comportándome como un imbécil!!!. Ni siquiera deberías dirigirme la palabra, después de todas las estupideces que dije!!!... – exclamó avergonzado

Inuyasha... siempre he comprendido tu mal carácter y tus celos desmedidos... a veces me siento halagada de que te preocupes así por mí, me hace pensar que soy importante para ti... Pero esa noche actuaste como un miserable, me sentí sumamente ofendida y herida, no imaginé que algo tan horrible pasara por tu cabeza... después de todo lo que había pasado... – explicó separándose de su abrazo, pero él se lo impidió

Ahome... eres lo más importante que tengo en el mundo... Y la sola idea de perderte me desquicia, me impide tomar las cosas con calma... No soporto pensar que otro hombre te toque, te mire!!... – dijo con enfado, luego cambió su expresión por angustia – Pero sobre todo... tengo miedo de... que... te des cuenta... que... un hombre mitad bestia... no es para ti... que cualquier hombre sería mejor... que yo... Un humano que te ofrezca una mejor vida... que lo que un estúpido híbrido como yo podría llegar a darte!!!... – concluyó apenado

Inuyasha... Quieres dejar de decir estupideces!!! – lo reprendió con los ojos iluminados por la furia, él la miró asustado – Es que no comprendes??!!... que no hay nadie en este mundo que me haga sentir como tú... o con quien desee estar más que contigo... no comprendes que eres vital para mi... – expresó emocionada a punto de llorar, lo abrazó con fuerza – No me interesa si eres demonio, humano, o ambas cosas, eso nunca hará cambiar mis sentimientos, sólo me importa que seas Inuyasha... mi Inuyasha... – susurró aprisionándolo con fuerza... Sintió un leve quejido y se separó mirándolo asustada – Inuyasha.. Qué te sucedió?

No te preocupes... no es nada... – la tranquilizó tocando su vientre herido y sentándose al pie del árbol sagrado...

Cómo que no es nada?... Dime que sucedió... – lo urgió

Cuando me fui esa noche, les dije a los muchachos que saldría por algunos días... Estaba muy molesto y lo único que quería era desquitarme, golpear todo lo que se me atravesara por el frente... – explicó algo avergonzado... – Acabé con muchos demonios... Un día pasé cerca de una aldea y sus habitantes me rogaron que acabara con unos seres malignos... Gracias a ti Ahome... ahora cuento con una pésima reputación – añadió gruño...

Gracias a mi??... A qué te refieres?...

Pues se ha corrido la voz de que una sacerdotisa y un hombre mitad bestia, se dedican a ayudar y proteger las regiones de los alrededores de un demonio peligroso... – contó con fingida indignación, ella soltó una riza de inocencia..

Y les ayudaste?? – preguntó alegre

Pues qué creías?!!! – gruñó – Si no les ayudaba, estaba seguro que serías capaz de matarme con tus malditos conjuros!!... – recalcó molesto... – Me tomó mas tiempo del que imagine para encontrar ese engendro y cuando lo conseguí... había una gran cantidad de ellos y tuve que luchar contra todos... al final logré acabarlos...

Eres muy valiente Inuyasha... pero sobre todo posees un corazón lleno de bondad... – comentó orgullosa, y le dio un tierno beso en la mejilla, provocando el enrojecimiento del hanyou

No digas tonterías!!!. Además sólo se trataba de débiles basuras... – balbuceó apenado...

Pero saliste herido de esa batalla... – dijo preocupada... – Será mejor que vayamos a mi casa para curarte esas heridas... – se puso de pie, seguida por el hanyou, luego se dirigieron a la casa de Ahome...

Rato después, terminó de curar la herida de Inuyasha. Su madre y su hermano, llegaron de hacer las compras, ambos atacaron a Inuyasha con preguntas, preocupados por su condición, uniéndose a ellos el abuelo. No hicieron mención de las semanas de depresión de Ahome... Pero querían asegurarse de que ella estuviera bien, lo que era muy obvio sólo con verla, sus ojos habían recuperado su alegre brillo, y su sonrisa volvía a ser fresca y transparente. Aceptaron la enorme importancia que tenía aquel hombre con orejas de perro, que tenía el poder de inundar de felicidad el corazón y la vida de Ahome... Con suma discreción y anunciando impostergables planes para esa noche, todos se excusaron y salieron de casa.

Pues supongo que tendré que preparar la cena... – comentó y sus ojos se iluminaron ante una gran idea...– Inuyasha, prepararé una cena muy especial... así que te pido permanezcas aquí y no espíes mi trabajo... Entendido?

Esta bien... – acepto de mala gana, mientras sostenía al pobre de Buyo de sus patas traseras -U

Muy bien... a trabajar!!! – exclamó animada...

Inuyasha esperó pacientemente, escuchando el continuo ir y venir de Ahome, los ocasionales golpes, maldiciones y exclamaciones provenientes de la cocina...

Ya está todo listo!!! – anunció alegre, Inuyasha la observó, notó que se había cambiado de ropa, se veía muy hermosa en ese vestido, realmente hermosa – Inuyasha... que te sucede...

Aahh???. Nada... no pasa nada... – balbuceó nervioso y sonrojado...

Ven... – lo llamó, él la siguió.

Entraron a un salón, una pequeña mesa baja, contenía los alimentos y la exquisita vajilla, al pie de ella colocó muchos cojines para que sirvieran de asientos, la pequeña chimenea estaba encendida, brindando su calor para la fría noche... iluminó el lugar sólo con velas de varios colores y tamaños, que le dieron un completo toque romántico al salón. Encendió un radio con una música suave y envolvente...

Te gusta? – preguntó sonrojada

Eeehhh. Sí, claro que sí – contestó, no estaba acostumbrado a ese estilo de comida... Pero ella había hecho un gran esfuerzo, así que debía cooperar...

Bien.. siéntate aquí.. – pidió lo tomó de la mano, guiándolo a su lugar, Inuyasha no pudo evitar sonrojarse por el contacto de la delicada mano.

La cena transcurrió tranquilamente, conversaron, rieron, se miraban con ternura y se sonrojaban ante cualquier accidental contacto...

Permanecieron sentados en el suelo, cerca de la chimenea, uno junto al otro...

Ahome, porqué decidiste regresar tan repentinamente a tu casa? – preguntó de pronto, sobresaltándola

Porque... tenía miedo... – confesó

Miedo??. De qué?

De no poder controlar mi poder espiritual, de que Naraku lograra por segunda vez controlar mi mente y... me ordenara lastimarte...

Acaso pensabas no volver Ahome? – preguntó mirándola a los ojos

Confieso que esa idea cruzó por mi mente, necesitaba alejarme para poder pensar y tomar una decisión definitiva – explicó

Eso quiere decir que tenías pensado no cumplir tu promesa... – dedujo triste...

Así es... no podía cumplir esa promesa... No si eso significaba arriesgar tu vida... Inuyasha... y eso nunca lo haré – dijo

Tonta!!!. Y tu pensaste que iba a dejar que cometieras esa estupidez? – preguntó indignado

No, imaginaba que no lo aceptarías... Eres demasiado necio... Y sobretodo muy autoritario y abusivo, para permitirme tomar mis propias decisiones... – comentó molesta

Tienes razón... Si tu idea es dejarme Ahome, pues comienza a olvidarte de semejante estupidez... – ordenó

Eres un mandón!!!. Pero déjame decirte que haré lo que yo quiera... no tengo porqué pedir tu permiso... – alegó con fingida indignación... levantándose y dándole la espalda despreciativa... Ya había tomado la decisión de no alejarse de él, pero tenía el siniestro agrado de hacerlo enojar... '

Ahome!!! – gruño amenazante... se incorporó y la tomó por los hombros obligándola a mirarlo – Sabes... que eres la mujer más cruel, insensata, fría y caprichosa que conozco?... Pero quieras o no... tú te quedarás conmigo... Te quedó claro?!!! – le ordenó

Ja!!. Y según tú... cómo pretendes obligarme?? – lo desafió... Un brillo malicioso iluminó las doradas pupilas del hanyou...

Ya deberías saber Ahome... que yo nunca rechazo un desafío... – murmuró amenazante, halándola hacia él para luego besarla apasionadamente... Ahome no pudo resistirse a esa caricia y devolvió su beso deleitándose con esas sensaciones que sólo él lograba despertar en ella...

La intensidad del beso lentamente fue incrementándose... las respiraciones de ambos eran agitadas, pero las sensaciones eran más fuertes que sus voluntades... se abrazaron nuevamente sus labios pedían, suplicaban por permanecer unidos... Ahome lo abrazó por el cuello, acercándolo, oprimiendo su cuerpo contra esos poderosos músculos, mientras que Inuyasha capturaba su cintura, necesitaba sentirla más cerca...

Ahome... hija!!!, ya estamos de regreso... – anunció la voz de su madre, en la entrada...

Ahome sintió caer un balde de agua fría sobre su cuerpo... empujó con todas sus fuerzas a Inuyasha... en una reacción involuntaria, provocada por el temor de que su familia la sorprendiera en tan comprometedora e íntima situación...

Bu.. bu.. enas... Noches... ma..má – tartamudeó ruborizada, soltando una risita nerviosa...

Amigo... qué haces ahí? – preguntó Souta con curiosidad e inocencia... oO

Inuyasha se encontraba de cabeza tras un sillón y lo único visible de él, eran sus pies suspendidos en el aire, tras el mismo sillón... --¡

Eeehh... nada... sólo buscaba algo... que se me cayó... – balbuceó nervioso... agradecido de que su extraña posición, ocultara el excesivo color rojo de su cara... OO

Al día siguiente, decidieron regresar a la época antigua, prepararon todo para el viaje, con especial preocupación de empacar una gran dotación de sopas instantáneas... Ahome se despidió de su familia, diciéndoles que volvería en algunos días... Mientras el abuelo comenzaba a investigar algunas nuevas enfermedades... para justificar su ausencia... UU¡

Se dirigieron al pozo, Ahome sonrió, mirando agradecida al árbol sagrado, ya que él le brindó nuevamente consuelo, y porque talvez haya sido el responsable y mudo testigo, de la reafirmación de su amor con Inuyasha... Él la miró extrañado...

Sucede algo malo? – preguntó

No... nada en lo absoluto... – contestó sonriéndole tiernamente...

Cuando salieron del pozo, Ahome suspiró contenta de estar de regreso, llenó de aquel aire puro sus pulmones, observando el bello paisaje natural y silvestre, ajeno aún a la frialdad del cemento y la tecnología. Se sentía muy contenta de estar de regreso, a pesar de todas las dificultades que había enfrentado allí, desde que atravesó el pozo... no pudo evitar considerar el Sengoku, como su segundo hogar... Después de todo su querido Inuyasha era parte de él...

Fueron recibidos... por unos ojos y bocas desmesuradamente abiertos por la conmoción... la verdad los cambios de humor de Inuyasha y Ahome, los mantenían mentalmente activos... y permanentemente confundidos.. -¡... Pero una vez que salieron del shock, expresaron su inmensa alegría, tanto por la reconciliación, como por estar todos reunidos nuevamente... Prefirieron no hacer preguntas, les bastaba con ver la felicidad y el amor... amor?... Sí... el amor que reinaba entre ellos...

La búsqueda de los fragmentos y la lucha para derrotar al demonio Naraku, se reanudaba... Y esta vez con nuevas y grandiosas energías, que continuarían fortaleciéndose gracias al poderoso lazo de amor y amistad que fluía entre todos ellos... un arma mucho más potente y eficaz que cualquiera utilizada por sus enemigos...

En otro lugar, comenzaba a suscitarse una cadena de situaciones, que muy pronto se enlazarían con el destino del grupo...

Corre pequeña... Huye lo más rápido y lejos que puedas... Huye!!! – suplicó la voz agonizante de una vieja mujer que yacía en el suelo cubierta de sangre... Antes de poder pronunciar otra palabra, una filosa y larga cuchilla, cercenó su garganta acallándola...

La pequeña niña, presenció la horripilante escena presa del pánico, vio con terror al individuo que exterminó a la mujer dirigirse hacia ella... "Huye!!!...", recordó las palabras.. y comenzó una frenética carrera por salvar su vida...

No importa cuanto corras... tu serás la siguiente!!! – advirtió con una desagradable risa... persiguiéndola...

La niña jadeaba, le era imposible correr más aprisa, miraba hacia atrás para asegurarse de que el monstruo no la siguiera, había corrido una larga distancia, a través del espeso bosque... sin embargo, vio que se acercaba, continuó corriendo, unas enormes y espinosos matorrales obstruyeron su camino... volvió a mirar atrás el monstruo estaba a pocos metros, le sonreía diabólicamente. La pequeña aterrada, se lanzó en medio de las agudas espinas, las cuales rasgaban y se incrustaban en su delicada piel, por lo que emitía lastimeros quejidos. Logró atravesar las matas y corrió nuevamente, pero cayó pesadamente al suelo al chocar contra algo... miró hacia arriba y se encontró con una penetrante y extrañada mirada... se asustó, era otro monstruo, pero esta vez trataba de una mujer...

Quién rayos eres?... – preguntó con sorpresa la yukai. Se agachó para verla más de cerca, notó que estaba muy lastimada... – Vaya!!.. Sólo se trata de una pequeña e indefensa niña humana... O talvez no... – añadió enigmática.

La niña la miró con grandes ojos, se percató que la yukai tenía una voz muy agradable, suave y melodiosa... sus bellos ojos eran verdes, profundos e intensos, cuya penetrante mirada destilaba misterio... sus cabellos eran muy largos y de color negro.

Qué haces sola en medio del bosque pequeña?... – indagó. Antes de que pudiera responder, una explosión destruyó completamente los espinosos matorrales y el monstruo que la seguía apareció tras ellas.

Logré alcanzarte pequeñita... – dijo burlón – Quién diablos eres tu? – preguntó mirando a la yukai – Será mejor que te alejes de mi presa... – ordenó amenazante. Sin inmutarse por su presencia, o mucho menos por sus palabras la joven yukai se irguió, observándolo fríamente...

Alejarme de tu presa?... Pero que individuo más desagradable... – dijo con voz helada. Bajó la mirada hacia la niña, dio unos pasos y la escudó con su cuerpo...

Acaso me desafías?... – preguntó en monstruo burlón... la yukai permaneció en silencio y sin expresión, eso lo enfureció, esgrimió su cuchilla dispuesto a atacarlas, la pequeña aterrada cubrió sus ojos con sus manos. La yukai con tranquilidad elevó su mano derecha, sobre su palma comenzó a emerger una luz de energía de un suave tono verdoso, haciéndose más grande, cuando el monstruo estaba a un par de metros ella lanzó la esfera de luz, que impacto con increíble poder en él, lanzándolo muy lejos y ante gritos desgarradores se desintegró completamente.

Debes tener más cuidado... el bosque puede ser peligroso para seres como tú... – aconsejó, luego se marchó dejándola sola en medio de la nada...

Inuyasha y los demás caminaban por un sendero, cuando percibió un leve olor a sangre, alertando a sus amigos, todos corrieron en dirección al lugar que irradiaba el aroma...

Inuyasha llegó primero, tropezándose con un pequeño bulto acurrucado dentro del tronco hueco de un gran árbol... lo sacó de su refugio, y miró impactado que se trataba solo de una niña pequeña... la acunó en sus brazos, comprobando que estuviera viva, estaba muy lastimada y sus ropas rasgadas... pero al menos aún respiraba.

La niña lentamente abrió los ojos, encontrándose con unos curiosos y preocupados dorados... luego su mirada se dirigió a sus extrañas orejas... recordó al monstruo que intentó matarla y lucho violentamente para liberarse del hanyou, estaba aterrada de que aquel ser, también quisiera hacerle daño... Inuyasha no sabía como reaccionar... no podía ejercer fuerza con ella, era muy pequeña y su estado era delicado... Afortunadamente y para su alivio, Ahome llegó a su lado y abrazó a la pequeña para tranquilizarla, brindándole la calidez y protección de sus suaves brazos maternales...

Tranquila... – susurró Ahome con dulzura, acariciando su cabeza – No te haremos daño... ya estas a salvo...

De inmediato la niña dejó de luchar, se acurrucó en ella, cerrando los ojos vencida por el agotamiento y debilidad...

Qué le habrá ocurrido?... – preguntó Ahome, con tristeza...

Seguramente fue atacada por algún monstruo... – dedujo...

Muchachos!!!... Qué pasó, encontraron algo?... – preguntó Miroku llegando con los demás.

Pero si es una niñita!!! – comentó Shippo mirándola de cerca...

Qué extraño... Al parecer estaba sola en el bosque.. – dijo Sango. Kirara, también se acerco a ella y acarició a la pequeña con su cabeza...

La pobrecita esta muy lastimada, debemos buscar un lugar más cómodo para poder curarla... – expresó con lástima...

La señorita Ahome tiene razón... debemos buscar un lugar para refugiarnos... y curar de sus heridas – dijo Miroku

Encontraron una vieja cabaña abandonada, no muy lejos de ahí, decidieron que por el momento y debido a la urgente situación, era lo mejor que encontrarían en los desolados alrededores...

Ahome se encargó de curar las heridas de la niña, que permanecía inconsciente a causa de la fiebre que comenzó a afectarla...

La noche transcurrió con lentitud. Ahome la atendió con gran dedicación, intentaba disminuir la temperatura colocando una y otra vez telas húmedas en la febril cabecita, y administrándole algunos medicamentos.

Inuyasha permanecía sentado cerca de ellas apoyado en colmillo de acero, parecía dormir, pero se encontraba muy alerta.

Ahome... descansa un poco... has cuidado de esa niña toda la noche... – pidió el hanyou, sin abrir los ojos.

No puedo... además la fiebre esta cediendo y no puedo arriesgarme a que vuelva a atacarla... – explicó continuando su labor.

Pero que necia eres!!! – replicó, dándose por vencido.

Estaba amaneciendo, cuando por fin la fiebre desapareció... Ahome se sintió aliviada, siendo vencida por el cansancio, se quedó dormida junto a la pequeña...

La niña lentamente abrió los ojos, mirando confundida a su alrededor, vio una joven que dormía apoyada en la cama, su presencia le resultó reconfortante y se sintió segura... Ahome abrió los ojos y notó la niña ya había despertado.

Ya despertaste... Qué alegría... – comentó sonriéndole – Cómo te sientes?

Bien... Pero... tengo... sed – dijo con timidez... Ahome le dio un poco de agua. Los demás también despertaron y vieron con alegría que la niña estaba mucho mejor.

Ya despertó!!! – dijo el zorrito con alegría

Si es verdad, que bueno que ya este mejor – comentó Sango contenta

Las medicinas y los cuidados de la señorita Ahome dieron sus frutos – dijo Miroku

Quién eres?... Quién te atacó?, Y qué hacías tu sola en el bosque?...– interrogó Inuyasha sin mucha delicadeza. La niña lo miró asustada, tanto por su aspecto, como por su rudeza.

Inuyasha... Abajo!!! – dijo Ahome – Eres un cabeza dura!!... No te das cuenta que la asustas!!!? – lo regaño.. Miroku, Sango y Shippo lo miraron con severidad y reprobación – No temas... a pesar de ser un tonto... es una buena persona... y no te hará daño... – explicó a la niña,

Ahome porque lo hiciste?!!!.. Y a quien le llamas cabeza dura y tonto!!! – replicó levantándose indignado.

Pues al único tonto que hay por aquí – contestó haciéndole un desprecio. La niña los miró con asombro, luego comenzó a reír... Los demás la miraron con curiosidad...

Ustedes son muy graciosos... – comentó entre risas... Todos rieron con ella, excepto Inuyasha quien sólo lanzó un Feh!!, dando media vuelta para ocultar un vergonzoso rubor...

Cómo te llamas... – preguntó Ahome, rato después

Me llamo Keiko... Kiyoshi- respondió

Que lindo nombre... yo me llamo Ahome... – dijo y luego presentó a los demás...

Te encontrabas tú sola en el bosque? – preguntó Sango

No... viajaba con algunas personas, pero fuimos atacados por un monstruo... él los mató a todos... – explicó sollozando

Acaso eran tus padres?... – preguntó Ahome

No... mis padres murieron hace mucho tiempo... viajaba con algunos comerciantes y una anciana sacerdotisa que me cuidaba. Ella me dijo que huyera... Yo corrí, pero me persiguió... pasé por unos matorrales de espinas, y choqué con alguien, el monstruo me alcanzó y quería matarme, pero la joven se lo impidió y lo mató... – concluyó

Quién lo mató? – preguntó Inuyasha

No lo sé, era una mujer demonio – respondió

Una mujer demonio?... – preguntó Miroku pensativo... – Y cómo era ella?...

Era muy bonita... y muy fuerte... no me dio miedo... – dijo con admiración

Dices que era muy bonita?... – murmuró el monje pensativo... – Uhmm, creo que sería interesante buscar a esa mujer demonio...

Que pervertido eres Miroku!!, no te importa que sea... siempre que sea bonita... – comentó Shippo reprobación

Ni se le ocurra descarado!!! – advirtió Sango, al tiempo que dejaba caer la punta de su boomerang sobre la cabeza del monje...

Pero que gente... tan mal pensada... – murmuró ofendido... con un gran chichón adornando su cabeza...

No te dijo su nombre? – indagó Ahome

No... después de matar al monstruo se fue...

Esto es muy extraño... qué interés pudo tener un yukai, para ayudar a una simple niña humana... – comentó el hanyou dudoso...

Qué quieres decir?... – preguntó la sacerdotisa

Normalmente los yukais sienten odio por los humanos, y al toparse con uno, simplemente los eliminan... Ya que para ellos son sólo una raza inferior, que no merecen consideraciones... – explicó

Si... tienes razón, pero no olvides que tu hermano Sesshomaru, protege a una niña humana... Eso quiere decir que no todos son tan terribles... – comentó

No sé que motivos pueda tener el idiota de Sesshomaru, para proteger a una humana... y no me importa averiguarlo... Pero creo que debemos investigar quien es esa mujer demonio, y si su aparición tiene algo que ver con el infeliz de Naraku...

Continuará...

Bueno hasta aca el capítulo 6... (el cap. 7 esta en proceso... )

Espero sus comentarios... buenos o malos O.O jejejejej

Le agradezco a mis mas fieles lectoras... Yelitza y Kagome-anti-Kikyo ustedes siempre tal lindas... me pone muy contenta que les guste lo que escribo... y les prometo poner el mejor esfuerzo y entregarles muchos otros capitulos... miren que la historia recien comienza... jejejejej... mi inspiración aún no se agota jajajaja... .

Negrita-San: gracias por tu review me alegra que te guste... y lo dejo en suspenso para que esperen con ganas el siguiente capitulo jejejejje .

Karina -chan: me alegra mucho que te gustara.. en serio... y no te hagas tanto problema con el review... despues de todo aca estas.. jejejej..... cuando tengas tiempo esperare tus comentarios... antes de eso ... sabre que continuas leyendo... y espero que te siga gustando .

Un beso.. hasta la próxima