Moshi Moshi!
Gomenne la tardanza por publicar la continuación de este fic, muchas gracias a las personas que me han dejado sus reviews y perdonenme la tardanza, creo que me demore demas ñ.ñ pero aquí la continuación.
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Capitulo 4: Te me vas
Autora: Kiyone Uesagi
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La gente se apiñaba en las calles buscando ver un poco del accidente que había ocurrido hace unos minutos...El calor se hacía insoportable por tanta gente que curiosa se acercaba al lugar, entre ellas un chico de cabellos plateados y azules...Sus ojos rubí buscaban observar aquel suceso...
-No, Takao, responde, por favor responde...
El chico de los ojos ocultos, con lágrimas amargas bañando sus mejillas y gritando desesperadamente, suplicaba al moreno que despertara de aquel sueño.
El cuerpo inerte se encontraba estampado en el cofre y el parabrisas, la sangre caía de gota en gota por sus sienes y demás cuerpo, sus ojos estaban cerrados... La gorra estaba en el suelo.
El dueño del coche había salido y con un celular buscaba llamar a una ambulancia, el moreno aun seguía con vida...
Alguien dijo que el amor
Es hacer un triple salto sin red
Hoy me tocó caer
Kai lograba abrirse paso entre la multitud y le sorprendió ver a un pequeño llorando...
-Oka-san, oka-san, es Takao, esta muy mal...
El pequeño se aferraba al ruedo del abrigo de su madre, mientras esta lo cargaba tratando de consolarle...
-Todo estará bien, pequeño...
Kai no daba crédito a las palabras del pequeño niño... "Takao esta muy mal"
Apresuró el paso, tratando de llegar lo más pronto hasta donde estaba el atropellado...
Un sentimiento de culpabilidad invadió el cuerpo del ruso-japonés mientras los ojos estaban nublándose, tal vez el niño estaba exagerando, había mucha gente y no alcanzaba a ver nada, la desesperación comenzaba a invadirlo al grado que comenzó a repartir empujones hasta abrirse total paso, mientras otros le veían fastidiadamente, como si esas miradas le acusaran de culpable del accidente...No podía creer lo que vio en ese instante, la cruel escena, Kenny suplicando a gritos que su amigo despertara, decaído, de cuclillas en el suelo, con las rodillas ensangrentadas por los fragmentos de vidrio que habían caído a la calle...
Y parece que el dolorHizo un tiro al blanco en mi corazón
Cuando dijiste adiós
No podía contenerse y corrió hasta donde estaba el cuerpo de Takao, sus ojos cerrados bañados en sangre, el conductor discutiendo acaloradamente con el oficial de tránsito, Kenny en el suelo llorando a mares por su amigo, el sonido lejano de las sirenas de la ambulancia...Todo era tan desesperante...
-Takao, Takao, soy Kai, por favor respóndeme! Que te ha pasado, Takao...
El chico bicolor también gritaba, estaba histérico, unos días antes había roto su corazón, ahora el estaba en esas condiciones...
Una chica de cabello castaño se acercó lentamente, ella también estaba enamorada de Takao, sus ojos estaban húmedos y su cara estaba pálida, se puso detrás de Kai, ella lo sabía todo, Takao lo amaba y el había roto su corazón...Ella estaba molesta pero no era momento para pensar en ello.
El ruido ensordecedor de la ambulancia se aproximaba hasta estar más cerca y detenerse, cuatro hombres de blanco descendieron del vehículo con una camilla color azul, acercándose a Takao, dándole auxilio...
-Necesitamos que alguien venga con él
-Yo iré.
Kai subió al vehículo después de los paramédicos, Takao estaba conectado al respirador artificial, iba en calidad de urgente, su estado era grave...
No quiero creer Que ya nunca te veré Me quedé sin ti, vaya forma de perderEl pasillo de urgencias ahora era como una pista de carreras cuando los doctores llevaban a terapia intensiva el inmóvil cuerpo de Takao, su ritmo cardiaco había disminuido, tal vez en algunas horas abandonara la vida...Era cuestión de horas, tal vez de minutos, si los doctores no se apresuraban, y detenían la hemorragia...
Kai solo podía ver aquella escena, esa triste y cruel escena, todo a traves de la niebla de sus ojos y el palpitar de su corazón. Una nube oscura, en la cual Takao trataba de darle la mano, para aferrarse a la vida, Kai se sentía ahora morir. Se sentó en la sala de espera sin saber que hacer, sin saber que decir.
Te me vas
Y no se que decir, ni como respirar
El aire ya esta demás,
Te me vas y el cielo por aquí se empieza a congelar
Tu amor se ha quedado atrás.
Las puertas del hospital se abrieron intempestivamente y dos chicas entraron, con sus ojos rasados en lágrimas, estaban desesperadas y respiraban agitadamente, al parecer, habían corrido después de enterarse de la noticia, dos chicas que el peliazul conocía muy bien. Se trataban de sus vecinas, una de ellas, de cabello largo y castaño oscuro, su tez blanca, Takao la llamaba Nan-chan, la otra, era mas bajita que Nan-chan, su cabello era un poco mas corto y tenia unos rayos amarillos, un poco llenita y de piel morena, se trataba de Ryoko, ambas eran primas. Y al parecer, querían bastante al morenito.
Nan-chan se acercó lentamente al mostrador, y habló con la enfermera que se encontraba ahí, su tono de voz era un poco mimoso, tratando de reconfortar a la joven en un lugar frío y lleno de dolor. Ryoko esperaba a un lado de Kai, sin hablar, solo esperaba que su prima volviera con buenas noticias.
-¿Estará bien?
Ryoko reaccionó al ver que su prima se acercó pero las lágrimas tanto de ellas como de él no se hicieron esperar al ver que Nan-chan negaba con la cabeza…
-El esta muy mal, lograron detener la hemorragia pero, su estado sigue grave, algunos huesos estan fracturados y tiene varias contusiones, podría ser que si sobrevive, podría perder la memoria.
Ryoko al oir las palabras salió corriendo adentrándose desesperadamente entre los pasillos del lugar, perseguida por su prima, ambas sin siquiera saber donde estaba el moreno ojiazul, solo chocando con algunos doctores y pacientes que caminaban tranquilamente. Hasta parar a una ventanilla que estaba impresa como el cuarto de terapia intensiva, y la primer camilla era la que sostenía el vegetativo cuerpo de Kinomiya. Entraron haciendo caso omiso del anuncio de no pasar sin un cubrebocas…Y desesperadas comenzaron a hablarle diciendole que querían que se quedara. La escena era desgarradora, un par de rostros enrojecidos, ojos hinchados por las lágrimas, y un chico en una camilla, su cuerpo lucía algunos moretones y unos rasguños, su cabeza y tórax estaban vendados, y su cara cubierta con una mascarilla de oxígeno. El verle así provoco la histeria de ambas, Ryoko se resguardó en un rincón y se dejó caer al piso viendo hacia donde estaba su prima al lado de Takao, y esa escena se difuminaba entre la niebla de sus ojos. No podía soportarlo mas, y se abrazó de sus propias piernas conteniendo el dolor.
-Taka-chan, por favor! DESPIERTA TAKA-CHAN te lo ruego por favor no nos dejes a los que te queremos.
Alguien dijo que soñar
Duele por que tienes que despertar y ahí esta la realidad
Y me empiezo a preguntar si alguien me puede decir
Que hacer para olvidar
No quiero creer que ya nunca te vere
Me quede sin ti vaya forma de perder…
En la sala, uno a uno iban llegando, algunos fans del moreno, permanecían fuera del hospital, con velas encendidas en las manos, como si aquella flama representara un trozo de vida que escapaba poco a poco de Takao. Algunos llevaban altoparlantes y echaban porras, unos llevaban mantas con el rostro de su campeón, rotuladas con mensajes de apoyo. Cada palabra, cada porra, cada vela encendida era una aguja clavandose en el pecho de Kai. Una noche. Solo una noche, y el día de mañana todo sería mejor. Hablaría con Joycee y se marcharía…dejaría una pensión y mandaría dinero para su supuesto hijo. Eso, eso haría, si Takao llegara a morir, jamás se lo perdonaría.
Ahora, frente a la puerta de terapia intensiva, Hitoshi recargado en la pared, apoyado de Hiromi, Hitoshi no lloraba, trataba de permanecer fuerte para dar apoyo a los demás. Los doctores sacaron casi a la fuerza a Nan-chan y a Ryoko, Hitoshi abrazaba a la chica de cabello castaño y la de baja estatura era atendida por una enfermera, puesto que había entrado en una depresión.
Un doctor preguntó si Hitoshi era de la familia y este asintió lentamente, minutos después estaba vestido con una bata color azul, una gorra para la cabeza y un cubre bocas, el doctor le dijo que pasara al cuarto y podía estar con su hermano, pero solo unos diez minutos. El mayor pasó, dejando a las chicas en el pasillo y cerró la puerta, Junto una silla a la cama y comenzó a hablarle a su oniichan, el ruido del aparato que media los latidos del corazón del moreno era estresante…
"Takao…Mi querido oniichan, todo esto es mi culpa…Mi culpa, si tan solo pudiera recuperar el tiempo pasado y haber sabido lo que te pasaba, si tan solo pudiera comprenderte mejor, es mi culpa, soy un mal hermano, te hubiera aconsejado al verte en ese estado, me lo hubieras dicho, no importaba lo que halla pasado, Takao no te vayas oniichan te quiero demasiado, fuera mucha gente reza por ti, mucha gente canta para ti, y sus voces estan quebradas por que quieren llorar, por ellos, y por la persona que espera en el pasillo, ella reza por ti y quiere que estes bien, ella me dijo que…que te ama, que nunca te lo dijo por temor a que la rechazaras, que ella sabía lo que tu sentias por otra persona, por esa persona vive. Por que llora por ti…"
Hitoshi apretaba una mano de su hermano. Su sorpresa fue enorme al desubrir que esa morena mano estaba aferrandose a la de él, y entre susurros, el nombre de Kai era mencionado.
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Bien, tardare un poco más en publicar puesto que en la casa ya no hay internet, gomen nasai por las personas que leen este fic, uju pero ya estoy actualizando varios fics, quien sabe que tome, o es que sera por que estoy de vacaciones y tengo mas tiempo de imaginar lo que hacer con estos lindos personajes, muchas gracias a las personas que siguen leyendo mis fics, te extraño un montonoonononononon mi Siyoh querida. X3 saludos al duraznito Hanna mys y a los crios, un mensaje para un gato vampiro: suki da yo, nekobat-kun sayonara nOn
