*** Amor en tiempos de Guerra***
Lady-SilverMoon14
Cap. 9.- Intervención.
Shaoran cabalgaba con lentitud esa noche, no quería alejarse de la casa de los Kinomoto, pues ahí estaba Sakura, seguramente durmiendo apaciblemente, tan hermosa como siempre...
De pronto algo se le ocurrió, y dio media vuelta y comenzó a avanzar con mayor velocidad, ya era algo tarde así que debía darse prisa
Llegó hasta una gran mansión blanca, que era adornada por el amplio y verde jardín con altos y frondosos árboles
Bajó del caballo marrón y se dirigió hasta la entrada de aquella casa
-buenas noches señor-saludó un mayordomo
-buenas noches-contestó Shaoran nervioso, seguro el anciano se disponía ya a dormir- ¿se encontrará el señor de la casa?
-el Coronel no tiene mucho de haber subido con la señora Tomoyo a su alcoba- comentó el anciano-¿gusta que le llame?
-pero Li ¿que haces aquí tan tarde?-preguntó una voz desde las amplias escaleras
-Hiraguizawa...-susurró Shaoran aliviado de encontrarlo todavía despierto- necesito hablar con usted....
-oh pero pasa-dijo bajando los escalones- por favor Yugo, llévanos el té a la biblioteca y si Tomoyo despierta dile que estoy atendiendo al Capitán
-si señor-dijo dando una pequeña reverencia a los militares para luego retirarse de allí
Una vez Shaoran y Eriol entraran a la biblioteca se sentaron en los sillones rojos que estaban cerca del escritorio
-lo que me vas a decir, tiene que ser muy bueno como para que hayas venido a esta hora- Expresó el dueño de la casa.
-y lo es...-empezó pero fue interrumpido por el abrir la gran puerta una vez que Eriol dio la autorización al oírse un leve toque.
-buenas noches Li-dijo Tomoyo amablemente mientras tanto Eriol como Shaoran se levantaban de sus asientos
-oh querida-dijo Eriol abrazándola sutilmente- te resfriarás...
-no me pasará nada-le dijo esta dignamente pues llevaba sobre su camisón una delgada bata que le llagaba hasta los talones- ¿a que debemos su visita Li?
-ehhh...-miró un momento a Eriol quien asintió indicándole que sí podía hablar frente a la señora Hiraguizawa- yo venía a decirle a mi Coronel que...
-oh bueno-dijo pensando que importunaba- entonces me retiro.
-no señora, lo que sucede es que no esperaba verla esta noche-dijo Shaoran avergonzado- pero de todas formas tarde o temprano se enterará...-tomó respiración- yo le he propuesto matrimonio a Sakura
-¿¡de verdad!?-preguntó una efusiva Tomoyo- ¡creí que nunca se atrevería!
Shaoran estaba algo sonrojado.
-déjame recordarte querida, que éramos dos los que creíamos que este Capitán nunca le pediría a tu prima que se casaran-rió divertido Eriol ante las discusiones que formaron parte de las entretenidas conversaciones entre los recién casados.
Shaoran estaba más que morado.
-bueno, si me costó algo de trabajo-dijo mirando a la pareja- no estaba seguro si de preguntarle o no...
-hay que verlo por el lado positivo-comentó Eriol sonriendo- vamos a ser familia...
Por la nuca de Li, resbaló una pesada gota mientras una risita de Tomoyo salía de su boca roja
-¿y que lo hizo decidirse por fin?-preguntó una curiosa Hiraguizawa.
-bueno...-Shaoran quedó reflexivo un momento.
Flashback **************************************************************
Había llegado a la casa de los Kinomoto con tiempo de anticipación, pero no esperaba que su novia lo recibiera, pues ella le había dicho que saldría con su prima, quien próximamente se casaría con su Coronel, pero aún así se había adelantado, tenía enormes ansias de verle.
-buenas tardes Li-saludó Madame Suu entrando a la sala donde este esperaba el regreso de Sakura- ¿acaso no sabía de la salida de Sakura?
-si...-dijo sonrojado sin mirarla- pero he preferido estar aquí para cuando regrese...
-supongo que no tardará mucho-dijo Suu despreocupadamente- hace rato ya que se fue-miró lo apuesto que estaba Shaoran ese día, tan serio y a la vez su rostro risueño y el cabello alborotado- ¿sabe? He querido hablar con usted desde hace algún tiempo
Este comentario atrajo la vista de Li hacia la figura de la señora
-ya sabe que estoy a su disposición...-dijo Shaoran sin comprender que tema podrían tratar esa mujer y él
-se trata de Sakura...-dijo con un tono de angustia
-¿Sakura?-repitió mientras se levantaba- ¿sucede algo malo con ella?- preguntó preocupado por la persona amada
-bueno, ella y no sin razón tiene muchos pretendientes...
-¿que hay con eso?-le dijo no entendiendo lo que decía la mujer
-muchos la quieren para esposa-dijo sin rodeos mientras Li se sentaba, parecía que estaba reflexionando- y no sabe como ella desea dejar de ser tan asediada por esos hombres...
-por favor señora: hable claro-dijo repentinamente serio
-todos saben que ya tiene novio...-dijo colocándose detrás del militar mientras colocaba sus manos en los hombros de este y comenzaba a acariciarlos haciendo que el pobre hombre se estremeciera totalmente- pero aun así la buscan mucho y me ha comentado que no le gustaría que usted sufriera un disgusto al ver a uno de esos sujetos aquí, debería ver, es horrible, el máximo de hombres que han estado por día en busca de ella, han sido 6 ¡no hay día en que no vengan!
Shaoran solo guardó silencio, con una cara de pocos amigos que daba a entender que estaba molesto
Madame Suu lo único que hizo fue sonreír con satisfacción.
-por eso yo le recomiendo...-dijo en un susurro seductor cerca de su oreja- ...que le pida matrimonio, una vez casados ya nadie tendrá posibilidad...
Shaoran realmente no estaba pensando en lo que decía la mujer, los cortos cabellos de su nuca estaban erizados y su mirada parecía asustada.
Se alejó bruscamente de la señora haciendo que esta gruñera entre dientes.
-...yo...-comenzó totalmente sonrojado- ya había pensado en eso y se muy bien que si quiero casarme con Sakura-se puso más rojo- pero tal vez a ella le parezca muy pronto...
-creo que Sakura espera su propuesta con ansias-mintió Suu
-¿de verdad lo cree?-preguntó Shaoran ilusionado volteándose para mirarla
-si así es-dijo sin interés y viendo por la puerta para verificar que nadie hubiera oído la conversación que habían sostenido
Pronto se escuchó como la puerta principal de abría acompañada de unas risitas
-no le diga que usted ya sabe todo esto-dijo Suu mientras salía por el otro lado.
Shaoran tan solo asintió con la cabeza.
-hola Shaoran-sonrió Sakura entrando a la sala junto con Tomoyo.
-ho...hola- dijo sonrojado recordando la pequeña charla con Suu.
Los tres jóvenes se quedaron platicando...
Fin de Flashback********************************************************
Shaoran suspiró.
-le amo demasiado-contestó calmadamente- creo que esa es la única razón...
¡No le podía decir que estaba celoso de esos miles de hombres cerca de Sakura!
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Sakura estaba sobre su cama, acurrucada entre sus almohadas, cobijas y sábanas, tenía frío, pronto entrarían en invierno, por lo menos en tres meses...
Se levantó.
No podía dormir
Pensando en: ¿Shaoran?
Tal vez si estuviera pensando en Ran, pero no.... Estaba pensando en Shaoran Li
Se sonrojó levemente mientras se abrazaba y frotaba los brazos que estaban bajo su blanco camisón, mientras se asomaba por las largas cortinas.
Dentro de un mes compartiría una cama con ese sujeto, al que tan solo hacía dos meses no conocía, y ahora junto a él, planearía su vida Bueno: era un consuelo saber que en las noches de invierno, empezando por el de ese año, ya no pasaría más frío...
Ya no más....
Tal vez igual que como su padre con Madame Suu, la abrazaría y ella se acurrucaría más cerca del pecho de él.
Se volvió a sonrojar, sentía que se asaba. ¡Como podía pensar esas cosas si no lo amaba a él!
No se podía imaginar a ella misma durmiendo a lado de Li, era algo que le daba sensaciones calurosas y asfixiantes.
Abrió un poco la ventana dejando entrar helado viento que hizo que un escalofrío recorriera su cuerpo de pies a cabeza.
Cerró un momento los ojos y al abrirlos pudo ver unos ¿soldados? Que marchaban por calles cercanas, entre la oscuridad no notaba los uniformes, tan solo se veía como algunos marchan rápidamente y otros iban en carretas, veinte carretas cada una con 10 soldados por lo menos.
Y el uniforme que usaban no se parecía al de Shaoran o el señor Eriol.
Era rojo con negro y el Li era azul y crema.
Frotó sus ojos no creyendo lo que veía, pero estaban todos esos miles de hombres ahí, por un momento se asustó...
-Lo mejor será que se lo diga a Shaoran...-se susurró a si misma.
Cerró la ventana y las cortinas y se acomodó de nuevo en su lecho donde pronto se quedó dormida...
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Aoshi iba con cuidado de no hacer ruido, tenía una copia llave de la casa que pertenecía a Eriol Hiraguizawa.
Entró lento y silencioso para no despertar a nadie pues parecía que ya era algo tarde.
-Señor Aoshi-dijo el anciano encargado de la demás servidumbre, sobresaltando al joven. Pensó que, no encontraría a nadie despierto a esas horas.- el Coronel ha estado muy preocupado por que no regresaba...
-calma, ya estoy aquí-dijo en tono despreocupado- ¿mi hermano esta despierto todavía?
-si señor, le estaba esperando a usted después de recibir la visita del Capitán Li.
-ya veo...y... ¿dónde se supone que está?
-en la biblioteca con la señora Tomoyo-contestó el hombre mayor.
-bien, entonces si es que lo ves-dijo mientras caminaba a la puerta que conectaba con el resto de la casa desde esa cocina- dile que estoy durmiendo y soñando con hermosas aves ¿de acuerdo?- con un tono despreocupado alegre y sin que el sirviente de percatara (dado que estaba de espaldas a este), caminaba con una sonrisa complacida sobre su rostro.
-s...si señor-afirmó Yugo sin entender de lo que hablaba el sujeto Hiraguizawa- lo que usted diga...
-buenas noches Yugo-se despidió Aoshi con una sonrisa relajada.
-buenas noches, joven Aoshi...
El joven Hiraguizawa se lanzó sobre su cama mientras ya acostado quitaba con sus propios pies, los zapatos que le estorbaban.
Suspiró.
La pobre Katsumi debía estar muy asustada por el incidente con aquel maldito hombre...
¡¿Cómo se había atrevido ese sujeto a pretenderla?!
Frunció su mirada ante la escena que por suerte pudo evitar. Pero el sujeto con ella en sus brazos y forzándole a algo que ella no quería... Estrelló con rabia su puño sobre el lecho.
De pronto detuvo sus pensamientos.....
¡¿Por que estaba pensando en eso?!
¡Ninguna, pero lo que era, ninguna mujer le había interesado! ¡Jamás!
Era muy cierto que si había tenido novias, y que se podían contar con los dedos de una sola mano, pues era muy selectivo si de pareja se trataba.
Pero era muy extraño encontrarse a si mismo pensando en una chica a la que tan solo conocía dos meses atrás.
¿Cómo había logrado esa joven quitarle los pensamientos, su razonar?
No, no lo sabía y tampoco estaba muy interesado en enterarse...
Por que ese sentimiento le gustaba...
Ese sentir hacía Kirobe lo hacía extrañamente feliz y lo aturdía, lo sofocaba, lo embriagaba, le hacía pensar en tantas cosas hermosas....
Tan hermosas como ella, como la dulce Katsumi, tan amable y sobre todo tímida.
Le hacía latir rápidamente el corazón, cada vez que pensaba en ella...
En los brillantes y bellos ojos azules que le adornaban.
Era sorprendente como Eriol no se había fijado en ella y como él, Aoshi Hiraguizawa podía acercarse a ella, y quererla con la mirada.
-tal vez sea solo mi imaginación...-suspiró.
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La mañana estaba tranquila, sin ningún tipo de movimiento extraño....
-condenado Aoshi-decía Eriol entrando a la oficina de Li de mala gana.
Pues ya era su costumbre que al llegar lo primero que hacía era visitar al capitán.
-me pregunto que le habrá hecho como para que le llame así-dijo Shaoran sacando un papel de un cajón.
-se apareció en casa ya muy tarde-protestó el Coronel- y lo único que me manda a decir es: "estoy soñando con una hermosa ave"
-¿una hermosa ave?-preguntó confundido
-olvídelo Capitán-dijo sonriendo recordando súbitamente algo-¿preparando ya todo, Li?-preguntó pícaramente.
-más o menos-suspiró Shaoran- tengo que escribir a mi madre y mis hermanas, pero...
-si... esas hermanas que tienes-dijo reflexionando- ...yo también tendría miedo de que conocieran a Sakura, claro, si me casara con ella como lo harás tú
-veo que comprende el problema, pero eso no es lo que me preocupa...-dijo desdoblando la gran hoja de papel y dando a conocer que era un mapa del Continente Shining
-Corben...-dijo seriamente mirando el mapa- se me ha informado que últimamente hay más robos en las tierras de los agricultores de Azzarello y mira que todavía no pido el reporte a de las mías a ese Aoshi
-creo que deberíamos vigilar más los límites...-dijo Shaoran más a si mismo que a Eriol
-sabe que yo también, pero no tenemos autorización-dijo resignado- además tengo un presentimiento
-¿sobre que?-preguntó curioso Shaoran
-¿nunca ha tenido la sensación de que algo se avecina pero no sabes que es?- al ver que Shaoran asintió, continuó- ese es el sentimiento que me invade en estos momentos
-entiendo...
-ya no te atormentes más-le dijo Eriol recogiendo el mapa- mejor sueña despierto, más específicamente en la próxima señora Li.
El Capitán se sonrojó terriblemente.
-estaba pensando en traerme a vivir a Wei y tal vez mi prima Mei Ling se anime también, no quiero que Sakura se la pase sola en la casa-dijo Shaoran sin mirarlo.
-¿Mei Ling?-repitió Eriol- ¿no estaba enamorada de ti? ¿Por que la quieres traer a Ghibli?
-Hace mucho ya que eso quedó clarado-afirmó Shaoran- además ella antes me había pedido vivir una temporada aquí y creo que mejor oportunidad no hay.
-ahora te apoyo-dijo Eriol ocurriéndosele algo de pronto- ¿y cree que Wei podrá controlar toda la casa?
-¿a que se refiere?-dijo no comprendiendo
-digo que: ¿él solo podrá hace todas las tareas domésticas?
Shaoran lo pensó un poco, sabía muy bien que Wei ya no era muy joven.
-no...
-lo mejor será que contrates a algunos más, como lo tuve que hacer yo- sonrió Eriol recordando a su amada esposa.
-¿y donde se supone que conseguiré a todas esas personas?-exclamó espantado. Simplemente, no tenía experiencia en el particular tema.
-no lo sé-dijo dirigiéndose a la puerta-tengo mucho trabajo y quiero regresar temprano a donde Tomoyo, creo que irá a donde tu Sakura.
-yo iré terminando todos los pendientes- declaró el muy responsable Capitán.
-entonces vayamos juntos-dijo Eriol cruzando la puerta- nos vemos dentro de un rato.
-si-contestó simplemente para luego hundirse en todos los problemas de su trabajo.
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-¡vamos Sakura, te casarás!-trataba de animar la señora Hiraguizawa.
-eso ya lo sé Tomoyo-dijo con desanimo mientras se tiraba en el césped del amplio jardín.
-no sabes lo hermoso que es-dijo soñadoramente la hija de Sonomi- lo feliz que puedes ser....
-tal vez si me casara con Ran...-suspiró Sakura mirando el cielo azul, sus brazos estaban cruzados debajo de su cabeza, no le importaba si el vestido se estropeaba
-Sakura, si no quieres casarte con Li, díselo-regañó Tomoyo- pero creo que el joven Shaoran no tiene por que sufrir, lo sacrificarás a él también ¿no piensas acaso en tu prometido?- haciendo una pausa.- a ningún marido le hace gracia que su esposa piense en otro... o en todo caso, no le hará gracia a Li que, después de casados se de cuenta de lo infeliz que eres. Entonces, ocurrirá la desgracia: Serán ambos infelices y será muy tarde para arrepentimientos.
-Shaoran nunca sabrá de Ran-dijo sencillamente sin moverse de su lugar- no quiero lastimarle me sentiría muy mal.
Tomoyo quedó pensativa un momento, Sakura no había dicho nada de "sacrificarse por Ran" o en todo caso hablado de Madame Suu.
Había dicho que no quería lastimar a Li...
-¿estas segura que no sientes nada por Li?- confirmaba la señora Hiraguizawa.
-no como debería-contestó sin ánimo- es muy cierto que ya me acostumbre a su presencia en mi vida, pero no tengo un sentimiento para expresarle durante nuestro matrimonio...-dijo sonrojándose tremendamente y quedándose callada muy repentinamente.
El silencio duró un largo rato.
-¿hay algo que quieras decirme?- preguntó examinándola con cuidado.
De golpe Sakura se sentó aún más roja que antes.
-Tomoyo ¿que tal que....?-ahora se veía morada no podía continuar ante la vergüenza que le daba ese tema.
-¿que Sakura?
-...yo...-susurró mirando a su prima-...no creo poder demostrarle mi "amor"- dijo cubriéndose la cara con las manos.
-no te entiendo-dijo confundida.
-me refiero a....-realmente sentía que ardía- que no creo que le pueda dar hijos...
-¿cómo que no vas a poder?-preguntó extrañada, hasta entendió todo con claridad gracias a las palabras que antes había dicho- oh, Sakura...
-¡Tomoyo tengo tanto miedo!-dijo levantándose y abrazando a la señora Hiraguizawa
-pero Sakura, no tiene nada de malo-dijo riendo ligeramente- es lo más común del mundo y más en una pareja de casados.
Sakura no podía ponerse de un rojo más intenso.
-¿que tal que quedo encinta?-dijo mientras en su cara se veía un notable miedo.
-bueno, compensarás de algún modo la mentira que estas llevando a cabo desde hace dos meses...-dijo a modo de regaño.
-ay Tomoyo- se lamentaba la joven Kinomoto.
-vamos Sakura, no puede ser tan malo-dijo Tomoyo- además, él ya siendo tu esposo, tendrá todo el derecho de tomarte.
Ahora si que Sakura estaba más que morada, era un color que lo superaba.
-¡pero Tomoyo!-protestó escandalizada.
-Sakura, te lo repito: es lo más normal del mundo-dijo sonriendo para calmar a la chica de ojos verdes. En verdad, no podía darle mas ayuda a su amiga que ese ante tan íntimo tema. Era responsabilidad de la madre de la novia.
Pero Tomoyo pensaba con toda razón ¿Qué haría Madame Suu?
Pero Kinomoto no había quedado del todo convencida.
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-busco a Ran Azurite-dijo una voz femenina algo chillona y melosa.
Sobre actuando sus sentimientos por el sujeto.
-espere un momento, señorita-le dijo el sirviente haciéndola pasar.
-si-
El señor se retiró para llamar a patrón...
-parece que por fin me favorece la suerte-decía Ran examinando unos documentos que Hayoko Kobasashi le había llevado esa tarde, que ponto se convertiría en noche- tendré por lo menos 3 pedidos de 10 toneladas para la próxima temporada- pero de todas formas buscaré otro trabajo, necesito un poco más de dinero.
-bien, entonces esperemos que nada cambie con lo de la cosecha-dijo el otro hombre- ¿y ya has visto a Sakura?
-verdad, no te he contado...-dijo un toque de tristeza en su voz- ha dicho que ya no le intereso, que necesitaba dinero o algo así y que como yo no se lo podía dar, pues...
-te mandó a volar...-suspiró Hayoko- ...en serio: lo lamento mucho Ran
-pero no me voy a rendir a pesar de que ya tiene un novio rico
-creo que con más motivo necesitas renunciar a ella...-dijo no comprendiendo lo dicho por Ran.
-no Hayoko, yo quiero a Sakura...
Se oyó un leve golpe en la puerta.
-señor una señorita viene a buscarlo-dijo el mayordomo.
-tal vez sea Sakura-dijo Kobasashi.
-si es rubia y de ojos negros dile que no le puedo atender o que no estoy, invéntale cualquier cosa...-dijo sentándose en el sillón- pero que no pase.
-si señor-respondió obediente para luego salir de allí.
A Hayoko le salieron miles de signos de interrogación.
-hay una chica que desde hace poco tiempo me ha estado buscando-explicó Ran- pero no sé, no me cae en gracia...
El otro sujeto suspiró, su amigo era a veces muy quisquilloso con las mujeres.
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-vamos hermano-decía Aoshi tratando de convencerlo- solo se me hizo un poco tarde, no hice nada malo.
-ya deja ese tema-sonrió tranquilo- creo que tus motivos tendrás ¿no?
-así es-dijo también sonriendo, Eriol era muy comprensivo.
-¿y bien?-inquirió el Coronel-¿que me traes?
-malas noticias-dijo desanimado el joven Hiraguizawa- me temo que Corben ha entrado, tanto a tus terrenos como a los míos.
-¿por que piensas eso?-dijo recibiendo unos libros de anotaciones que le pasaba su hermano.
-si te fijas y recuerdas bien-empezó Aoshi- no has vendido a nadie ¿cierto?- al ver que su hermano asintió continuó:- y aquí falta un poco menos de la mitad de la mercancía que se dieron en esta temporada; y pienso que al estar nuestros terrenos tan cerca de la frontera, tal vez Corben sea el causante de todo esto.
-el gobierno y nosotros ya sabemos de los robos-dijo Eriol arrugando el ceño mientras leía el libro- y también nos hemos enterado que incluso en los terrenos que están en el centro de este país han sido incluso saqueados totalmente, de lo que no estamos seguros es que sea Corben el verdadero ladrón, pues ellos no tienen manera de acceso al centro, y por ahora el país no tiene permitido el paso de ningún individuo de esa nacionalidad...
-vamos: tú y yo sabemos de sobra que en este país lo que menos se da es el robo-agregó Aoshi mirándolo seriamente y su hermano a pesar de que el "pequeño" de su casa no usaba anteojos, podía ver con claridad su decisión- ¿pero entonces como es que los de Corben pueden hacer todo este daño? ¿Y sin que nadie los vea?
-Li y yo creemos que tal vez por las noches...
-es la única solución que también le veo-comentó analizando la hipótesis de su hermano mayor y el Capitán- me interesa mucho que me contactes con algún administrador de terrenos del centro, es necesario investigar por todos lados, yo que sé-dijo molestándose- necesitamos agarrar a Corben con las manos en la masa.
-me parece que los Kinomoto tienen terrenos en el centro-dijo Eriol pensándolo- su administrador es Yukito Tsukishiro, trataré de hablar con Fujitaka Kinomoto o Touya, el esposo de Kaho.
-¿Kaho?-le preguntó sorprendido- ¿Kaho Mitsuki? ¿La misma que vivía en el Continente Scuttle?
-exactamente-sonrió Eriol- Kaho Kinomoto.
-vaya ¿si que el tiempo pasa rápido, no?-agregó Aoshi- cuando salió de nuestro Continente nosotros a penas y teníamos 10 y 9 años...
-bueno, me tengo que ir a arreglar otros asuntos-dijo tomando su sombrero- esta vez no llegues muy tarde a casa ¿entendido?-dijo en tono burlón.
-¡ya te dije que no era mi intención!-reclamó.
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-¡¿cómo te atreves a no recibirme?!-vociferó entrando estrepitosamente a la biblioteca de Ran.
-como lo viste-contestó indiferente sin mirarla mientras Hayoko se quedaba sorprendido ante la belleza de la chica rubia y de como su amigo la podía despreciar.
-¡uyyy!
-si ya no quieres hacer corajes mejor sal de aquí-le dijo calmadamente Ran.
Soichiro salió a grandes zancadas más furiosa que antes.
-estás loco ¿cómo puedes no prestar atención a esa joven?-preguntó Hayoko.
-si es bella, pero no es de trato soportable, tiene la sangre muy pesada...
-entiendo...
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-buenas noches-saludó Shaoran una vez ya en la casa de los Kinomoto.
-hola Shaoran-sonrió tímidamente Sakura recordando la conversación con Tomoyo de esa tarde- ¿te ha ido bien?
-muy bien-dijo sutilmente besando la frente de la chica haciendo que se sonrojara- ¿la señora de mi Coronel sigue aquí verdad?
-si. Tomoyo esta en la sala esperando al señor Hiraguizawa-dijo mientras lo dirigía a la sala pero Li la detuvo del brazo mientras la atrapaba en sus brazos con notable cariño y Sakura se volvía roja .
-vayamos al jardín por favor-le susurró muy cerca de su rostro.
Sakura dudó un momento, pero luego asintió levemente con la cabeza y avanzó con él, tomada de su brazo.
El jardín se veía realmente hermoso, con las estrellas brillando sobre él, ambos se sentaron en la banquita que estaba delante de la bella fuente...
Uno a lado del otro.
Shaoran tomó las manos de Sakura entre las suyas, las besó con dulzura una y otra vez, mientras ella solo sentía algo así como un escalofrío, con la única diferencia de que era muy cálido....
Y él pronto la tenía de nuevo entre sus brazos.
-¿a ti como te fue hoy?-preguntó lentamente Li jugando con algunos cabellos castaños de la joven.
-estuve... charlando con Tomoyo...-dijo en un suspiro sintiendo una de las manos de Shaoran en su espalda, lo que la apretaba más contra él.
-me alegro...-susurró acercándose a los suaves labios de Sakura.
En un contacto tierno, cálido, simplemente encantador...
Y Shaoran la acurrucaba más y Sakura acarició con candidez el pecho del joven para luego colgarse en su cuello, pues ya no había espacio entre ella y su prometido.
Sakura respondía lentamente, con tranquilidad y un toque de pasión y aturdimiento.
Y es que no le desagradaba para nada que la besara...
Una vez se separaron para tomar aire, en el rostro apuesto de Li se podía apreciar una ligera sonrisa.
Y Shaoran besaba las mejillas sonrojadas de ella mientras esta se aferraba más al cuello de su acompañante.
La respiración cálida de Li hacía que las mejillas de Sakura ardieran y suspirara de todo el calor que sentía.
Kinomoto soltó una pequeña risita haciendo que Li sonriera aún más.
Se dirigió hasta estar a una mínima distancia de la oreja de Sakura y respiró con normalidad lo que causó que ella riera de nuevo.
...Era una risa que parecería risueña...
Y ahora Shaoran besaba el comienzo de su cuello, cerca de su oreja, Sakura no podía estar más nerviosa.
-ehhh...-dudó un momento en detenerlo- ¿hace frío verdad?
-algo...-suspiró el otro sin separarse y besando a ritmo tranquilo la piel del cuello de Sakura.
-...yo...-no sabía que más decir hasta que algo se le ocurrió- ¿sabes?... ayer por la noche vi a unos soldados...
-de guardia tal vez...-contesto con simpleza sin dejar su tarea de un lado.
-...pero no tenían el uniforme de Azzarello...-dijo con lo que finalmente Shaoran se separó de ella.
-¿cómo que no tenían el uniforme?-preguntó sospechando mientras todavía tenía tomada de la cintura a su prometida. Miró a sus ojos para notar la seguridad al declarar aquel evento. Pero se notaba su azoramiento ante sus caricias detenidas por la revelación de la joven.
-pues así como te lo digo-dijo tímidamente- además eran muchos...
-podrían ser de Corben...-pensó en voz alta mientras Sakura abría los ojos como platos.
-¿Co...Corben...?-dijo recordando un relato de Li hacía tiempo atrás- ¿el mismo al que detuviste?
Shaoran la miró y asintió despacio con la cabeza.
-¿viste a donde se dirigían?-le preguntó con delicadeza.
-iban hacia el sur...
-¿y no cargaban con nada?
-iban en carretas-contestó rápidamente- pero estaban cubiertas por mantas, lo siento. No pude ver que era lo que llevaban...
-no pasa nada...-dijo abrazándole con mayor fuerza, que le transmitían que tuviera confianza y tranquilidad, muchos sentimientos a la vez...- lo que me sorprende es que hayan atravesado la ciudad sin que nadie más los viera.
-yo me asomé por pura casualidad-dijo sonrojada- pero iban muy silenciosos y ya muy tarde, por lo que no había nadie más en las calles.
Shaoran simplemente suspiró. Tenía un oscuro, no lejos de la verdad y aturdidor presentimiento.
-entremos ¿si?-trató Sakura de animarlo- vamos con Tomoyo, creo que sigue esperando a su esposo en la sala-dijo tomándole de la mano y jalándole pero al ver que él no se movía continúo- anda vamos... tú mismo lo has dicho, no pasará nada y mucho menos algo malo, además hace frío y te podrías enfermar...
Al ver la insistencia de la joven se levantó y deposito un suave beso en los labios rojos de ella, admirándola, por que quería tranquilizarlo de algún modo.
-vamos...-dijo apretando más la mano de Sakura.
-...si...
Y ambos entraron a la gran mansión.
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-oh, señor Hiraguizawa-saludó Katsumi algo sorprendida al verlo sentado en una de las mesas- ¿desea ordenar?
-no, hoy no-dijo serenísimo Eriol- vengo a hablar con usted.
Kirobe se sonrojó mientras el Coronel le indicaba que se sentara.
-no tengo permitido eso...-dijo morada. Incluso miró atrás a donde su empleador contaba el dinero de ahí dirigió la mirada a la azulada del sujeto.
-si hay algún problema...-dijo sonriendo- yo he tenido la culpa por mi insistencia...
Katsumi asintió para nada convencida, pero aún así se sentó.
-¿usted sabe cocinar?-empezó Eriol.
A ella le extrañó tal pregunta, pero aun así le complació en respondérsela.
-si, por eso es que me han podido contratar aquí-sonrió tímidamente ante la mirada de Hiraguizawa- y ser contar y todo lo demás... por eso he sido adecuada- arrastrando ese ultimo detalle en su voz.- para el negocio...- mirando detrás donde se encontraba su empleador.
-y por tanto supongo que sabe hacer labores domésticas-continuó Eriol a lo que Kirobe asintió- ¿sabe? Tengo un amigo que esta próximo a casarse, pero no tiene al personal necesario para atender lo que será su hogar-le miró fijamente- me preguntaba si a usted no le interesaría salir de este lugar y trabajar con ese amigo mío...
-¿a quien se refiere?-preguntó curiosa.
-al Capitán Shaoran Li-contestó- con quien venía en mi feliz soltería.
-muchas felicidades por lo de su matrimonio-dijo bajando la cabeza un poco- me he enterado ayer por la noche...- "claro: los hombres de su estirpe, siempre se casan con señoritas de sociedad"- pensó la gentil Katsumi.
-¿en serio? ¿Y quien te lo dijo?-inquirió Eriol sospechando de cierta personita llamada Aoshi Hiraguizawa. Incluso personalizó un poco más el trato a la señorita.
-su...su hermano...-dijo azoradísima- ayer en la noche, él, muy amablemente me ayudó con un problema que tenía... – él no dejó que terminase de explicar.
-ah con que usted fue el motivo por lo que llegó tan noche-sonrió satisfecho- con razón dijo lo que dijo-rió divertido ante la cara morada de Katsumi.
-¿y que dijo?-preguntó interesada y no evitando sentir sus mejillas ardiendo.
-lo siento, es un secreto familiar-dijo felizmente y cambiando de tema agregó.-mañana vendré con el Capitán Li, le daré referencias y cosas así, mientras, usted pensará si quiere trabajar en la mansión Li-se levantó- píenselo bien, recibiría protección por parte del Capitán, un buen salario y para mi suerte, podré vigilar que le trate bien, ya que se casará con la prima de mi esposa. No le irá tan mal... en realidad, son muy buenas personas...- haciendo una pausa.- y alegrará a alguien de salir de este ambiente.- mirando a ambos lados del lugar.
El corazón de Katsumi estalló de felicidad ¡eso quería decir que tal vez frecuentaría la casa y lo vería! ¡Y también al joven Aoshi! Ahí se sonrojó un poco más al recordar el incidente con aquel hombre.
Si Aoshi Hiraguizawa, no hubiera pasado por ahí... ¡¡¡Que hubiera pasado!!! Pero esa noche anterior solo pensó en sus ojos azules, su voz hablándole con gentileza. De la nada, y sin percatarse de ello, se sonrojó aun más.
Eriol, despierto como era, presentía que pasaba en la mente de la joven.
-"Despierta Katsumi: Hombres de estirpe no se interesan en taberneras para algo serio. Mucho menos para muchachas de servicio... solo está siendo amable. Porque ambos son amables. Olvídate de lo que piensas."- pensando un instante en la dicha de poder ver al señor Aoshi, mas que de vez en cuando. Sacudió su cabeza para volver a la realidad. Y más aun cuando notó que el Coronel tosía ante el silencio, la cara y lo que imaginaba que la joven pensaba.
-yo si quiero trabajar ahí-asintió con mirada decidida.
-me alegro-sonrió Eriol complacido ante el hecho de que sus palabras hubieran dado resultado, y aunque eran muy ciertas, sabía que Kirobe aceptaría con mayor facilidad-entonces traeré a Li lo más pronto posible, como le digo si es posible, mañana mismo.
-está bien, señor-dijo sonrojándose ante la sonrisa de Hiraguizawa.
-me tengo que ir, Tomoyo debe estar preocupada por mi-rió Eriol ante la confesión que se hacía si mismo.
-le reitero mi felicitación-dijo con un deje de tristeza. Pero por alguna razón, ya no era tan desdichada que del momento que se enteró de su matrimonio.
-no tienes por que repetirlo-dijo él sonriendo pasivamente, sabiendo el sentimiento de la chica hacia él, era algo que le daba un poco de tristeza, por toda la desilusión que le estaba creando a la joven.
-ahora si me voy-dijo saliendo del bar.
-hasta luego, señor Hiraguizawa...-susurró desconsoladamente.
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-ay con ese Eriol-decía Tomoyo- ¿y no le dijo a donde iba?
-algo mencionó de buscar a una persona que me ayudaría-contestó Shaoran, que estaba sentado a lado de Sakura, con las manos de la chica entre las suyas.
-por cierto ¿vivirán en tu casa, Li?-preguntó Tomoyo tratando de sacar un tema de conversación.
-si, es una casa prácticamente nueva-sonrió Shaoran con algo de nostalgia- hace a penas dos años que la compré, y no hay nadie más que viva ahí, excepto yo.
-¿eso quiere decir que no tienes servidumbre?-le preguntó Sakura asombrada- ¿tú haces todo solo?
-si...-dijo sonrojado Shaoran ante la mirada de admiración que le daba Kinomoto.
-¡sorprendente!-se gritó Sakura impresionada.
-pero ya casados, contrataré a gente para que te atiendan...-le susurró mirándola con amor.
-ehhh...-Sakura lo miró y luego a Tomoyo que suspiraba-...muchas gracias...- dijo sonrojada.
-señorita, el señor Eriol Hiraguizawa acaba de llegar ¿le hago pasar?- preguntó Chen.
-¡claro que si!-afirmó Sakura.
Chen se retiró.
-vaya que hace frío-dijo Eriol sonriente mientras entraba a la sala.
Se dirigió hasta donde Sakura para besar su mano y luego hacía Tomoyo para besar sutilmente sus labios.
-espero no te enojes por llegar tan tarde-dijo Eriol sentándose a su lado- pero tenía que ayudar a Li con algunas cosas.
-¿a que te refieres?-inquirió Tomoyo.
-he conseguido a alguien que ayude a Wei-le sonrió Eriol a Shaoran.
-¿quién es Wei?-preguntó curiosa Sakura mirando a primero a Li y luego a Hiraguizawa.
-es quien cuido de mí, cuando yo era pequeño-le dijo Shaoran sonriendo- algo así como mi padre.
-¿tu padre?-preguntó confundida.
-es cierto, tú no lo sabes-dijo Li mirándola a los ojos- mi padre murió antes de que yo tuviera edad para recordarlo-entonces se notó la melancolía en sus ojos ambarinos.
-¡lo siento!-se dijo apenada Sakura- ¡no era mi intención traerte malos recuerdos!
-tranquila-le contestó- tengo a Wei que fue quien me educó-dijo con sencillez.
Sakura sonrió con timidez y sonrojo.
-tenemos que irnos, mi dulce Tomoyo-dijo ofreciéndole una mano notando que, se hacía tarde.
-esta bien-respondió esta mientras se levantaba y Shaoran también lo hizo.
-yo también me tengo que ir-le habló a la joven Kinomoto.
Sakura los acompañó hasta la puerta donde dio un beso a Shaoran mientras eran observados por la pareja de casados.
Tomoyo tan solo suspiró con resignación que fue notado por Eriol.
No entendía el comportamiento de su esposa.
-nos vemos mañana-se despidieron los tres jóvenes.
Eriol y Tomoyo se fueron a pie hacía la izquierda e iban abrazados.
Sakura tan solo se despidió con la mano y siguió con la vista a Shaoran quien se alejaba hacía la derecha montado en el cabello marrón.
...No sabía si podría mantener la mentira por más tiempo....
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Continuará...
Este capítulo va dedicado a mi amiga Crystal23 y espero que a todas las personas que leen este fic dejen sus r&r pronto, ¡¡¡por ahora estoy muy feliz por mi cumple!!! My Happy 15TH Birthday ¡estoy más vieja que hace un año! Jejeje ^^ en serio espero que este capi les guste por que la historia se me empieza a complicar y es cuando más disfrute hay jijiji ¬___¬
Espero que los que lo lean no me dejen sola TT y que dejen r&r creo que la historia se está tornando algo más "romántica" sin llegar a lo depravado, pero a este paso voy a tener que hacer un esfuerzo aun más grande para hacerlos más entretenidos debido al poco éxito que ha tenido, tampoco es como para llegar al millón de reviews o como se llamen pero la verdad es que ya me preocupe mucho...
¿Alguien tiene un consejo para que más personas lo lean? En serio sus ideas las necesito con desesperación, si son alguien con éxito en los fics como Crystal o Tsuki o Celina o Gaba o tienen fics nuevos y se saben algún secreto para atraer a los lectores ¡por fa! ¡Hablen! Bueno, no importa si no tienen fics
Les agradeceré eternamente ^^ bueno me voy
Los quiere
LADYSILVERMOON14
Lady-SilverMoon14
Cap. 9.- Intervención.
Shaoran cabalgaba con lentitud esa noche, no quería alejarse de la casa de los Kinomoto, pues ahí estaba Sakura, seguramente durmiendo apaciblemente, tan hermosa como siempre...
De pronto algo se le ocurrió, y dio media vuelta y comenzó a avanzar con mayor velocidad, ya era algo tarde así que debía darse prisa
Llegó hasta una gran mansión blanca, que era adornada por el amplio y verde jardín con altos y frondosos árboles
Bajó del caballo marrón y se dirigió hasta la entrada de aquella casa
-buenas noches señor-saludó un mayordomo
-buenas noches-contestó Shaoran nervioso, seguro el anciano se disponía ya a dormir- ¿se encontrará el señor de la casa?
-el Coronel no tiene mucho de haber subido con la señora Tomoyo a su alcoba- comentó el anciano-¿gusta que le llame?
-pero Li ¿que haces aquí tan tarde?-preguntó una voz desde las amplias escaleras
-Hiraguizawa...-susurró Shaoran aliviado de encontrarlo todavía despierto- necesito hablar con usted....
-oh pero pasa-dijo bajando los escalones- por favor Yugo, llévanos el té a la biblioteca y si Tomoyo despierta dile que estoy atendiendo al Capitán
-si señor-dijo dando una pequeña reverencia a los militares para luego retirarse de allí
Una vez Shaoran y Eriol entraran a la biblioteca se sentaron en los sillones rojos que estaban cerca del escritorio
-lo que me vas a decir, tiene que ser muy bueno como para que hayas venido a esta hora- Expresó el dueño de la casa.
-y lo es...-empezó pero fue interrumpido por el abrir la gran puerta una vez que Eriol dio la autorización al oírse un leve toque.
-buenas noches Li-dijo Tomoyo amablemente mientras tanto Eriol como Shaoran se levantaban de sus asientos
-oh querida-dijo Eriol abrazándola sutilmente- te resfriarás...
-no me pasará nada-le dijo esta dignamente pues llevaba sobre su camisón una delgada bata que le llagaba hasta los talones- ¿a que debemos su visita Li?
-ehhh...-miró un momento a Eriol quien asintió indicándole que sí podía hablar frente a la señora Hiraguizawa- yo venía a decirle a mi Coronel que...
-oh bueno-dijo pensando que importunaba- entonces me retiro.
-no señora, lo que sucede es que no esperaba verla esta noche-dijo Shaoran avergonzado- pero de todas formas tarde o temprano se enterará...-tomó respiración- yo le he propuesto matrimonio a Sakura
-¿¡de verdad!?-preguntó una efusiva Tomoyo- ¡creí que nunca se atrevería!
Shaoran estaba algo sonrojado.
-déjame recordarte querida, que éramos dos los que creíamos que este Capitán nunca le pediría a tu prima que se casaran-rió divertido Eriol ante las discusiones que formaron parte de las entretenidas conversaciones entre los recién casados.
Shaoran estaba más que morado.
-bueno, si me costó algo de trabajo-dijo mirando a la pareja- no estaba seguro si de preguntarle o no...
-hay que verlo por el lado positivo-comentó Eriol sonriendo- vamos a ser familia...
Por la nuca de Li, resbaló una pesada gota mientras una risita de Tomoyo salía de su boca roja
-¿y que lo hizo decidirse por fin?-preguntó una curiosa Hiraguizawa.
-bueno...-Shaoran quedó reflexivo un momento.
Flashback **************************************************************
Había llegado a la casa de los Kinomoto con tiempo de anticipación, pero no esperaba que su novia lo recibiera, pues ella le había dicho que saldría con su prima, quien próximamente se casaría con su Coronel, pero aún así se había adelantado, tenía enormes ansias de verle.
-buenas tardes Li-saludó Madame Suu entrando a la sala donde este esperaba el regreso de Sakura- ¿acaso no sabía de la salida de Sakura?
-si...-dijo sonrojado sin mirarla- pero he preferido estar aquí para cuando regrese...
-supongo que no tardará mucho-dijo Suu despreocupadamente- hace rato ya que se fue-miró lo apuesto que estaba Shaoran ese día, tan serio y a la vez su rostro risueño y el cabello alborotado- ¿sabe? He querido hablar con usted desde hace algún tiempo
Este comentario atrajo la vista de Li hacia la figura de la señora
-ya sabe que estoy a su disposición...-dijo Shaoran sin comprender que tema podrían tratar esa mujer y él
-se trata de Sakura...-dijo con un tono de angustia
-¿Sakura?-repitió mientras se levantaba- ¿sucede algo malo con ella?- preguntó preocupado por la persona amada
-bueno, ella y no sin razón tiene muchos pretendientes...
-¿que hay con eso?-le dijo no entendiendo lo que decía la mujer
-muchos la quieren para esposa-dijo sin rodeos mientras Li se sentaba, parecía que estaba reflexionando- y no sabe como ella desea dejar de ser tan asediada por esos hombres...
-por favor señora: hable claro-dijo repentinamente serio
-todos saben que ya tiene novio...-dijo colocándose detrás del militar mientras colocaba sus manos en los hombros de este y comenzaba a acariciarlos haciendo que el pobre hombre se estremeciera totalmente- pero aun así la buscan mucho y me ha comentado que no le gustaría que usted sufriera un disgusto al ver a uno de esos sujetos aquí, debería ver, es horrible, el máximo de hombres que han estado por día en busca de ella, han sido 6 ¡no hay día en que no vengan!
Shaoran solo guardó silencio, con una cara de pocos amigos que daba a entender que estaba molesto
Madame Suu lo único que hizo fue sonreír con satisfacción.
-por eso yo le recomiendo...-dijo en un susurro seductor cerca de su oreja- ...que le pida matrimonio, una vez casados ya nadie tendrá posibilidad...
Shaoran realmente no estaba pensando en lo que decía la mujer, los cortos cabellos de su nuca estaban erizados y su mirada parecía asustada.
Se alejó bruscamente de la señora haciendo que esta gruñera entre dientes.
-...yo...-comenzó totalmente sonrojado- ya había pensado en eso y se muy bien que si quiero casarme con Sakura-se puso más rojo- pero tal vez a ella le parezca muy pronto...
-creo que Sakura espera su propuesta con ansias-mintió Suu
-¿de verdad lo cree?-preguntó Shaoran ilusionado volteándose para mirarla
-si así es-dijo sin interés y viendo por la puerta para verificar que nadie hubiera oído la conversación que habían sostenido
Pronto se escuchó como la puerta principal de abría acompañada de unas risitas
-no le diga que usted ya sabe todo esto-dijo Suu mientras salía por el otro lado.
Shaoran tan solo asintió con la cabeza.
-hola Shaoran-sonrió Sakura entrando a la sala junto con Tomoyo.
-ho...hola- dijo sonrojado recordando la pequeña charla con Suu.
Los tres jóvenes se quedaron platicando...
Fin de Flashback********************************************************
Shaoran suspiró.
-le amo demasiado-contestó calmadamente- creo que esa es la única razón...
¡No le podía decir que estaba celoso de esos miles de hombres cerca de Sakura!
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Sakura estaba sobre su cama, acurrucada entre sus almohadas, cobijas y sábanas, tenía frío, pronto entrarían en invierno, por lo menos en tres meses...
Se levantó.
No podía dormir
Pensando en: ¿Shaoran?
Tal vez si estuviera pensando en Ran, pero no.... Estaba pensando en Shaoran Li
Se sonrojó levemente mientras se abrazaba y frotaba los brazos que estaban bajo su blanco camisón, mientras se asomaba por las largas cortinas.
Dentro de un mes compartiría una cama con ese sujeto, al que tan solo hacía dos meses no conocía, y ahora junto a él, planearía su vida Bueno: era un consuelo saber que en las noches de invierno, empezando por el de ese año, ya no pasaría más frío...
Ya no más....
Tal vez igual que como su padre con Madame Suu, la abrazaría y ella se acurrucaría más cerca del pecho de él.
Se volvió a sonrojar, sentía que se asaba. ¡Como podía pensar esas cosas si no lo amaba a él!
No se podía imaginar a ella misma durmiendo a lado de Li, era algo que le daba sensaciones calurosas y asfixiantes.
Abrió un poco la ventana dejando entrar helado viento que hizo que un escalofrío recorriera su cuerpo de pies a cabeza.
Cerró un momento los ojos y al abrirlos pudo ver unos ¿soldados? Que marchaban por calles cercanas, entre la oscuridad no notaba los uniformes, tan solo se veía como algunos marchan rápidamente y otros iban en carretas, veinte carretas cada una con 10 soldados por lo menos.
Y el uniforme que usaban no se parecía al de Shaoran o el señor Eriol.
Era rojo con negro y el Li era azul y crema.
Frotó sus ojos no creyendo lo que veía, pero estaban todos esos miles de hombres ahí, por un momento se asustó...
-Lo mejor será que se lo diga a Shaoran...-se susurró a si misma.
Cerró la ventana y las cortinas y se acomodó de nuevo en su lecho donde pronto se quedó dormida...
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Aoshi iba con cuidado de no hacer ruido, tenía una copia llave de la casa que pertenecía a Eriol Hiraguizawa.
Entró lento y silencioso para no despertar a nadie pues parecía que ya era algo tarde.
-Señor Aoshi-dijo el anciano encargado de la demás servidumbre, sobresaltando al joven. Pensó que, no encontraría a nadie despierto a esas horas.- el Coronel ha estado muy preocupado por que no regresaba...
-calma, ya estoy aquí-dijo en tono despreocupado- ¿mi hermano esta despierto todavía?
-si señor, le estaba esperando a usted después de recibir la visita del Capitán Li.
-ya veo...y... ¿dónde se supone que está?
-en la biblioteca con la señora Tomoyo-contestó el hombre mayor.
-bien, entonces si es que lo ves-dijo mientras caminaba a la puerta que conectaba con el resto de la casa desde esa cocina- dile que estoy durmiendo y soñando con hermosas aves ¿de acuerdo?- con un tono despreocupado alegre y sin que el sirviente de percatara (dado que estaba de espaldas a este), caminaba con una sonrisa complacida sobre su rostro.
-s...si señor-afirmó Yugo sin entender de lo que hablaba el sujeto Hiraguizawa- lo que usted diga...
-buenas noches Yugo-se despidió Aoshi con una sonrisa relajada.
-buenas noches, joven Aoshi...
El joven Hiraguizawa se lanzó sobre su cama mientras ya acostado quitaba con sus propios pies, los zapatos que le estorbaban.
Suspiró.
La pobre Katsumi debía estar muy asustada por el incidente con aquel maldito hombre...
¡¿Cómo se había atrevido ese sujeto a pretenderla?!
Frunció su mirada ante la escena que por suerte pudo evitar. Pero el sujeto con ella en sus brazos y forzándole a algo que ella no quería... Estrelló con rabia su puño sobre el lecho.
De pronto detuvo sus pensamientos.....
¡¿Por que estaba pensando en eso?!
¡Ninguna, pero lo que era, ninguna mujer le había interesado! ¡Jamás!
Era muy cierto que si había tenido novias, y que se podían contar con los dedos de una sola mano, pues era muy selectivo si de pareja se trataba.
Pero era muy extraño encontrarse a si mismo pensando en una chica a la que tan solo conocía dos meses atrás.
¿Cómo había logrado esa joven quitarle los pensamientos, su razonar?
No, no lo sabía y tampoco estaba muy interesado en enterarse...
Por que ese sentimiento le gustaba...
Ese sentir hacía Kirobe lo hacía extrañamente feliz y lo aturdía, lo sofocaba, lo embriagaba, le hacía pensar en tantas cosas hermosas....
Tan hermosas como ella, como la dulce Katsumi, tan amable y sobre todo tímida.
Le hacía latir rápidamente el corazón, cada vez que pensaba en ella...
En los brillantes y bellos ojos azules que le adornaban.
Era sorprendente como Eriol no se había fijado en ella y como él, Aoshi Hiraguizawa podía acercarse a ella, y quererla con la mirada.
-tal vez sea solo mi imaginación...-suspiró.
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La mañana estaba tranquila, sin ningún tipo de movimiento extraño....
-condenado Aoshi-decía Eriol entrando a la oficina de Li de mala gana.
Pues ya era su costumbre que al llegar lo primero que hacía era visitar al capitán.
-me pregunto que le habrá hecho como para que le llame así-dijo Shaoran sacando un papel de un cajón.
-se apareció en casa ya muy tarde-protestó el Coronel- y lo único que me manda a decir es: "estoy soñando con una hermosa ave"
-¿una hermosa ave?-preguntó confundido
-olvídelo Capitán-dijo sonriendo recordando súbitamente algo-¿preparando ya todo, Li?-preguntó pícaramente.
-más o menos-suspiró Shaoran- tengo que escribir a mi madre y mis hermanas, pero...
-si... esas hermanas que tienes-dijo reflexionando- ...yo también tendría miedo de que conocieran a Sakura, claro, si me casara con ella como lo harás tú
-veo que comprende el problema, pero eso no es lo que me preocupa...-dijo desdoblando la gran hoja de papel y dando a conocer que era un mapa del Continente Shining
-Corben...-dijo seriamente mirando el mapa- se me ha informado que últimamente hay más robos en las tierras de los agricultores de Azzarello y mira que todavía no pido el reporte a de las mías a ese Aoshi
-creo que deberíamos vigilar más los límites...-dijo Shaoran más a si mismo que a Eriol
-sabe que yo también, pero no tenemos autorización-dijo resignado- además tengo un presentimiento
-¿sobre que?-preguntó curioso Shaoran
-¿nunca ha tenido la sensación de que algo se avecina pero no sabes que es?- al ver que Shaoran asintió, continuó- ese es el sentimiento que me invade en estos momentos
-entiendo...
-ya no te atormentes más-le dijo Eriol recogiendo el mapa- mejor sueña despierto, más específicamente en la próxima señora Li.
El Capitán se sonrojó terriblemente.
-estaba pensando en traerme a vivir a Wei y tal vez mi prima Mei Ling se anime también, no quiero que Sakura se la pase sola en la casa-dijo Shaoran sin mirarlo.
-¿Mei Ling?-repitió Eriol- ¿no estaba enamorada de ti? ¿Por que la quieres traer a Ghibli?
-Hace mucho ya que eso quedó clarado-afirmó Shaoran- además ella antes me había pedido vivir una temporada aquí y creo que mejor oportunidad no hay.
-ahora te apoyo-dijo Eriol ocurriéndosele algo de pronto- ¿y cree que Wei podrá controlar toda la casa?
-¿a que se refiere?-dijo no comprendiendo
-digo que: ¿él solo podrá hace todas las tareas domésticas?
Shaoran lo pensó un poco, sabía muy bien que Wei ya no era muy joven.
-no...
-lo mejor será que contrates a algunos más, como lo tuve que hacer yo- sonrió Eriol recordando a su amada esposa.
-¿y donde se supone que conseguiré a todas esas personas?-exclamó espantado. Simplemente, no tenía experiencia en el particular tema.
-no lo sé-dijo dirigiéndose a la puerta-tengo mucho trabajo y quiero regresar temprano a donde Tomoyo, creo que irá a donde tu Sakura.
-yo iré terminando todos los pendientes- declaró el muy responsable Capitán.
-entonces vayamos juntos-dijo Eriol cruzando la puerta- nos vemos dentro de un rato.
-si-contestó simplemente para luego hundirse en todos los problemas de su trabajo.
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-¡vamos Sakura, te casarás!-trataba de animar la señora Hiraguizawa.
-eso ya lo sé Tomoyo-dijo con desanimo mientras se tiraba en el césped del amplio jardín.
-no sabes lo hermoso que es-dijo soñadoramente la hija de Sonomi- lo feliz que puedes ser....
-tal vez si me casara con Ran...-suspiró Sakura mirando el cielo azul, sus brazos estaban cruzados debajo de su cabeza, no le importaba si el vestido se estropeaba
-Sakura, si no quieres casarte con Li, díselo-regañó Tomoyo- pero creo que el joven Shaoran no tiene por que sufrir, lo sacrificarás a él también ¿no piensas acaso en tu prometido?- haciendo una pausa.- a ningún marido le hace gracia que su esposa piense en otro... o en todo caso, no le hará gracia a Li que, después de casados se de cuenta de lo infeliz que eres. Entonces, ocurrirá la desgracia: Serán ambos infelices y será muy tarde para arrepentimientos.
-Shaoran nunca sabrá de Ran-dijo sencillamente sin moverse de su lugar- no quiero lastimarle me sentiría muy mal.
Tomoyo quedó pensativa un momento, Sakura no había dicho nada de "sacrificarse por Ran" o en todo caso hablado de Madame Suu.
Había dicho que no quería lastimar a Li...
-¿estas segura que no sientes nada por Li?- confirmaba la señora Hiraguizawa.
-no como debería-contestó sin ánimo- es muy cierto que ya me acostumbre a su presencia en mi vida, pero no tengo un sentimiento para expresarle durante nuestro matrimonio...-dijo sonrojándose tremendamente y quedándose callada muy repentinamente.
El silencio duró un largo rato.
-¿hay algo que quieras decirme?- preguntó examinándola con cuidado.
De golpe Sakura se sentó aún más roja que antes.
-Tomoyo ¿que tal que....?-ahora se veía morada no podía continuar ante la vergüenza que le daba ese tema.
-¿que Sakura?
-...yo...-susurró mirando a su prima-...no creo poder demostrarle mi "amor"- dijo cubriéndose la cara con las manos.
-no te entiendo-dijo confundida.
-me refiero a....-realmente sentía que ardía- que no creo que le pueda dar hijos...
-¿cómo que no vas a poder?-preguntó extrañada, hasta entendió todo con claridad gracias a las palabras que antes había dicho- oh, Sakura...
-¡Tomoyo tengo tanto miedo!-dijo levantándose y abrazando a la señora Hiraguizawa
-pero Sakura, no tiene nada de malo-dijo riendo ligeramente- es lo más común del mundo y más en una pareja de casados.
Sakura no podía ponerse de un rojo más intenso.
-¿que tal que quedo encinta?-dijo mientras en su cara se veía un notable miedo.
-bueno, compensarás de algún modo la mentira que estas llevando a cabo desde hace dos meses...-dijo a modo de regaño.
-ay Tomoyo- se lamentaba la joven Kinomoto.
-vamos Sakura, no puede ser tan malo-dijo Tomoyo- además, él ya siendo tu esposo, tendrá todo el derecho de tomarte.
Ahora si que Sakura estaba más que morada, era un color que lo superaba.
-¡pero Tomoyo!-protestó escandalizada.
-Sakura, te lo repito: es lo más normal del mundo-dijo sonriendo para calmar a la chica de ojos verdes. En verdad, no podía darle mas ayuda a su amiga que ese ante tan íntimo tema. Era responsabilidad de la madre de la novia.
Pero Tomoyo pensaba con toda razón ¿Qué haría Madame Suu?
Pero Kinomoto no había quedado del todo convencida.
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-busco a Ran Azurite-dijo una voz femenina algo chillona y melosa.
Sobre actuando sus sentimientos por el sujeto.
-espere un momento, señorita-le dijo el sirviente haciéndola pasar.
-si-
El señor se retiró para llamar a patrón...
-parece que por fin me favorece la suerte-decía Ran examinando unos documentos que Hayoko Kobasashi le había llevado esa tarde, que ponto se convertiría en noche- tendré por lo menos 3 pedidos de 10 toneladas para la próxima temporada- pero de todas formas buscaré otro trabajo, necesito un poco más de dinero.
-bien, entonces esperemos que nada cambie con lo de la cosecha-dijo el otro hombre- ¿y ya has visto a Sakura?
-verdad, no te he contado...-dijo un toque de tristeza en su voz- ha dicho que ya no le intereso, que necesitaba dinero o algo así y que como yo no se lo podía dar, pues...
-te mandó a volar...-suspiró Hayoko- ...en serio: lo lamento mucho Ran
-pero no me voy a rendir a pesar de que ya tiene un novio rico
-creo que con más motivo necesitas renunciar a ella...-dijo no comprendiendo lo dicho por Ran.
-no Hayoko, yo quiero a Sakura...
Se oyó un leve golpe en la puerta.
-señor una señorita viene a buscarlo-dijo el mayordomo.
-tal vez sea Sakura-dijo Kobasashi.
-si es rubia y de ojos negros dile que no le puedo atender o que no estoy, invéntale cualquier cosa...-dijo sentándose en el sillón- pero que no pase.
-si señor-respondió obediente para luego salir de allí.
A Hayoko le salieron miles de signos de interrogación.
-hay una chica que desde hace poco tiempo me ha estado buscando-explicó Ran- pero no sé, no me cae en gracia...
El otro sujeto suspiró, su amigo era a veces muy quisquilloso con las mujeres.
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-vamos hermano-decía Aoshi tratando de convencerlo- solo se me hizo un poco tarde, no hice nada malo.
-ya deja ese tema-sonrió tranquilo- creo que tus motivos tendrás ¿no?
-así es-dijo también sonriendo, Eriol era muy comprensivo.
-¿y bien?-inquirió el Coronel-¿que me traes?
-malas noticias-dijo desanimado el joven Hiraguizawa- me temo que Corben ha entrado, tanto a tus terrenos como a los míos.
-¿por que piensas eso?-dijo recibiendo unos libros de anotaciones que le pasaba su hermano.
-si te fijas y recuerdas bien-empezó Aoshi- no has vendido a nadie ¿cierto?- al ver que su hermano asintió continuó:- y aquí falta un poco menos de la mitad de la mercancía que se dieron en esta temporada; y pienso que al estar nuestros terrenos tan cerca de la frontera, tal vez Corben sea el causante de todo esto.
-el gobierno y nosotros ya sabemos de los robos-dijo Eriol arrugando el ceño mientras leía el libro- y también nos hemos enterado que incluso en los terrenos que están en el centro de este país han sido incluso saqueados totalmente, de lo que no estamos seguros es que sea Corben el verdadero ladrón, pues ellos no tienen manera de acceso al centro, y por ahora el país no tiene permitido el paso de ningún individuo de esa nacionalidad...
-vamos: tú y yo sabemos de sobra que en este país lo que menos se da es el robo-agregó Aoshi mirándolo seriamente y su hermano a pesar de que el "pequeño" de su casa no usaba anteojos, podía ver con claridad su decisión- ¿pero entonces como es que los de Corben pueden hacer todo este daño? ¿Y sin que nadie los vea?
-Li y yo creemos que tal vez por las noches...
-es la única solución que también le veo-comentó analizando la hipótesis de su hermano mayor y el Capitán- me interesa mucho que me contactes con algún administrador de terrenos del centro, es necesario investigar por todos lados, yo que sé-dijo molestándose- necesitamos agarrar a Corben con las manos en la masa.
-me parece que los Kinomoto tienen terrenos en el centro-dijo Eriol pensándolo- su administrador es Yukito Tsukishiro, trataré de hablar con Fujitaka Kinomoto o Touya, el esposo de Kaho.
-¿Kaho?-le preguntó sorprendido- ¿Kaho Mitsuki? ¿La misma que vivía en el Continente Scuttle?
-exactamente-sonrió Eriol- Kaho Kinomoto.
-vaya ¿si que el tiempo pasa rápido, no?-agregó Aoshi- cuando salió de nuestro Continente nosotros a penas y teníamos 10 y 9 años...
-bueno, me tengo que ir a arreglar otros asuntos-dijo tomando su sombrero- esta vez no llegues muy tarde a casa ¿entendido?-dijo en tono burlón.
-¡ya te dije que no era mi intención!-reclamó.
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-¡¿cómo te atreves a no recibirme?!-vociferó entrando estrepitosamente a la biblioteca de Ran.
-como lo viste-contestó indiferente sin mirarla mientras Hayoko se quedaba sorprendido ante la belleza de la chica rubia y de como su amigo la podía despreciar.
-¡uyyy!
-si ya no quieres hacer corajes mejor sal de aquí-le dijo calmadamente Ran.
Soichiro salió a grandes zancadas más furiosa que antes.
-estás loco ¿cómo puedes no prestar atención a esa joven?-preguntó Hayoko.
-si es bella, pero no es de trato soportable, tiene la sangre muy pesada...
-entiendo...
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-buenas noches-saludó Shaoran una vez ya en la casa de los Kinomoto.
-hola Shaoran-sonrió tímidamente Sakura recordando la conversación con Tomoyo de esa tarde- ¿te ha ido bien?
-muy bien-dijo sutilmente besando la frente de la chica haciendo que se sonrojara- ¿la señora de mi Coronel sigue aquí verdad?
-si. Tomoyo esta en la sala esperando al señor Hiraguizawa-dijo mientras lo dirigía a la sala pero Li la detuvo del brazo mientras la atrapaba en sus brazos con notable cariño y Sakura se volvía roja .
-vayamos al jardín por favor-le susurró muy cerca de su rostro.
Sakura dudó un momento, pero luego asintió levemente con la cabeza y avanzó con él, tomada de su brazo.
El jardín se veía realmente hermoso, con las estrellas brillando sobre él, ambos se sentaron en la banquita que estaba delante de la bella fuente...
Uno a lado del otro.
Shaoran tomó las manos de Sakura entre las suyas, las besó con dulzura una y otra vez, mientras ella solo sentía algo así como un escalofrío, con la única diferencia de que era muy cálido....
Y él pronto la tenía de nuevo entre sus brazos.
-¿a ti como te fue hoy?-preguntó lentamente Li jugando con algunos cabellos castaños de la joven.
-estuve... charlando con Tomoyo...-dijo en un suspiro sintiendo una de las manos de Shaoran en su espalda, lo que la apretaba más contra él.
-me alegro...-susurró acercándose a los suaves labios de Sakura.
En un contacto tierno, cálido, simplemente encantador...
Y Shaoran la acurrucaba más y Sakura acarició con candidez el pecho del joven para luego colgarse en su cuello, pues ya no había espacio entre ella y su prometido.
Sakura respondía lentamente, con tranquilidad y un toque de pasión y aturdimiento.
Y es que no le desagradaba para nada que la besara...
Una vez se separaron para tomar aire, en el rostro apuesto de Li se podía apreciar una ligera sonrisa.
Y Shaoran besaba las mejillas sonrojadas de ella mientras esta se aferraba más al cuello de su acompañante.
La respiración cálida de Li hacía que las mejillas de Sakura ardieran y suspirara de todo el calor que sentía.
Kinomoto soltó una pequeña risita haciendo que Li sonriera aún más.
Se dirigió hasta estar a una mínima distancia de la oreja de Sakura y respiró con normalidad lo que causó que ella riera de nuevo.
...Era una risa que parecería risueña...
Y ahora Shaoran besaba el comienzo de su cuello, cerca de su oreja, Sakura no podía estar más nerviosa.
-ehhh...-dudó un momento en detenerlo- ¿hace frío verdad?
-algo...-suspiró el otro sin separarse y besando a ritmo tranquilo la piel del cuello de Sakura.
-...yo...-no sabía que más decir hasta que algo se le ocurrió- ¿sabes?... ayer por la noche vi a unos soldados...
-de guardia tal vez...-contesto con simpleza sin dejar su tarea de un lado.
-...pero no tenían el uniforme de Azzarello...-dijo con lo que finalmente Shaoran se separó de ella.
-¿cómo que no tenían el uniforme?-preguntó sospechando mientras todavía tenía tomada de la cintura a su prometida. Miró a sus ojos para notar la seguridad al declarar aquel evento. Pero se notaba su azoramiento ante sus caricias detenidas por la revelación de la joven.
-pues así como te lo digo-dijo tímidamente- además eran muchos...
-podrían ser de Corben...-pensó en voz alta mientras Sakura abría los ojos como platos.
-¿Co...Corben...?-dijo recordando un relato de Li hacía tiempo atrás- ¿el mismo al que detuviste?
Shaoran la miró y asintió despacio con la cabeza.
-¿viste a donde se dirigían?-le preguntó con delicadeza.
-iban hacia el sur...
-¿y no cargaban con nada?
-iban en carretas-contestó rápidamente- pero estaban cubiertas por mantas, lo siento. No pude ver que era lo que llevaban...
-no pasa nada...-dijo abrazándole con mayor fuerza, que le transmitían que tuviera confianza y tranquilidad, muchos sentimientos a la vez...- lo que me sorprende es que hayan atravesado la ciudad sin que nadie más los viera.
-yo me asomé por pura casualidad-dijo sonrojada- pero iban muy silenciosos y ya muy tarde, por lo que no había nadie más en las calles.
Shaoran simplemente suspiró. Tenía un oscuro, no lejos de la verdad y aturdidor presentimiento.
-entremos ¿si?-trató Sakura de animarlo- vamos con Tomoyo, creo que sigue esperando a su esposo en la sala-dijo tomándole de la mano y jalándole pero al ver que él no se movía continúo- anda vamos... tú mismo lo has dicho, no pasará nada y mucho menos algo malo, además hace frío y te podrías enfermar...
Al ver la insistencia de la joven se levantó y deposito un suave beso en los labios rojos de ella, admirándola, por que quería tranquilizarlo de algún modo.
-vamos...-dijo apretando más la mano de Sakura.
-...si...
Y ambos entraron a la gran mansión.
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-oh, señor Hiraguizawa-saludó Katsumi algo sorprendida al verlo sentado en una de las mesas- ¿desea ordenar?
-no, hoy no-dijo serenísimo Eriol- vengo a hablar con usted.
Kirobe se sonrojó mientras el Coronel le indicaba que se sentara.
-no tengo permitido eso...-dijo morada. Incluso miró atrás a donde su empleador contaba el dinero de ahí dirigió la mirada a la azulada del sujeto.
-si hay algún problema...-dijo sonriendo- yo he tenido la culpa por mi insistencia...
Katsumi asintió para nada convencida, pero aún así se sentó.
-¿usted sabe cocinar?-empezó Eriol.
A ella le extrañó tal pregunta, pero aun así le complació en respondérsela.
-si, por eso es que me han podido contratar aquí-sonrió tímidamente ante la mirada de Hiraguizawa- y ser contar y todo lo demás... por eso he sido adecuada- arrastrando ese ultimo detalle en su voz.- para el negocio...- mirando detrás donde se encontraba su empleador.
-y por tanto supongo que sabe hacer labores domésticas-continuó Eriol a lo que Kirobe asintió- ¿sabe? Tengo un amigo que esta próximo a casarse, pero no tiene al personal necesario para atender lo que será su hogar-le miró fijamente- me preguntaba si a usted no le interesaría salir de este lugar y trabajar con ese amigo mío...
-¿a quien se refiere?-preguntó curiosa.
-al Capitán Shaoran Li-contestó- con quien venía en mi feliz soltería.
-muchas felicidades por lo de su matrimonio-dijo bajando la cabeza un poco- me he enterado ayer por la noche...- "claro: los hombres de su estirpe, siempre se casan con señoritas de sociedad"- pensó la gentil Katsumi.
-¿en serio? ¿Y quien te lo dijo?-inquirió Eriol sospechando de cierta personita llamada Aoshi Hiraguizawa. Incluso personalizó un poco más el trato a la señorita.
-su...su hermano...-dijo azoradísima- ayer en la noche, él, muy amablemente me ayudó con un problema que tenía... – él no dejó que terminase de explicar.
-ah con que usted fue el motivo por lo que llegó tan noche-sonrió satisfecho- con razón dijo lo que dijo-rió divertido ante la cara morada de Katsumi.
-¿y que dijo?-preguntó interesada y no evitando sentir sus mejillas ardiendo.
-lo siento, es un secreto familiar-dijo felizmente y cambiando de tema agregó.-mañana vendré con el Capitán Li, le daré referencias y cosas así, mientras, usted pensará si quiere trabajar en la mansión Li-se levantó- píenselo bien, recibiría protección por parte del Capitán, un buen salario y para mi suerte, podré vigilar que le trate bien, ya que se casará con la prima de mi esposa. No le irá tan mal... en realidad, son muy buenas personas...- haciendo una pausa.- y alegrará a alguien de salir de este ambiente.- mirando a ambos lados del lugar.
El corazón de Katsumi estalló de felicidad ¡eso quería decir que tal vez frecuentaría la casa y lo vería! ¡Y también al joven Aoshi! Ahí se sonrojó un poco más al recordar el incidente con aquel hombre.
Si Aoshi Hiraguizawa, no hubiera pasado por ahí... ¡¡¡Que hubiera pasado!!! Pero esa noche anterior solo pensó en sus ojos azules, su voz hablándole con gentileza. De la nada, y sin percatarse de ello, se sonrojó aun más.
Eriol, despierto como era, presentía que pasaba en la mente de la joven.
-"Despierta Katsumi: Hombres de estirpe no se interesan en taberneras para algo serio. Mucho menos para muchachas de servicio... solo está siendo amable. Porque ambos son amables. Olvídate de lo que piensas."- pensando un instante en la dicha de poder ver al señor Aoshi, mas que de vez en cuando. Sacudió su cabeza para volver a la realidad. Y más aun cuando notó que el Coronel tosía ante el silencio, la cara y lo que imaginaba que la joven pensaba.
-yo si quiero trabajar ahí-asintió con mirada decidida.
-me alegro-sonrió Eriol complacido ante el hecho de que sus palabras hubieran dado resultado, y aunque eran muy ciertas, sabía que Kirobe aceptaría con mayor facilidad-entonces traeré a Li lo más pronto posible, como le digo si es posible, mañana mismo.
-está bien, señor-dijo sonrojándose ante la sonrisa de Hiraguizawa.
-me tengo que ir, Tomoyo debe estar preocupada por mi-rió Eriol ante la confesión que se hacía si mismo.
-le reitero mi felicitación-dijo con un deje de tristeza. Pero por alguna razón, ya no era tan desdichada que del momento que se enteró de su matrimonio.
-no tienes por que repetirlo-dijo él sonriendo pasivamente, sabiendo el sentimiento de la chica hacia él, era algo que le daba un poco de tristeza, por toda la desilusión que le estaba creando a la joven.
-ahora si me voy-dijo saliendo del bar.
-hasta luego, señor Hiraguizawa...-susurró desconsoladamente.
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-ay con ese Eriol-decía Tomoyo- ¿y no le dijo a donde iba?
-algo mencionó de buscar a una persona que me ayudaría-contestó Shaoran, que estaba sentado a lado de Sakura, con las manos de la chica entre las suyas.
-por cierto ¿vivirán en tu casa, Li?-preguntó Tomoyo tratando de sacar un tema de conversación.
-si, es una casa prácticamente nueva-sonrió Shaoran con algo de nostalgia- hace a penas dos años que la compré, y no hay nadie más que viva ahí, excepto yo.
-¿eso quiere decir que no tienes servidumbre?-le preguntó Sakura asombrada- ¿tú haces todo solo?
-si...-dijo sonrojado Shaoran ante la mirada de admiración que le daba Kinomoto.
-¡sorprendente!-se gritó Sakura impresionada.
-pero ya casados, contrataré a gente para que te atiendan...-le susurró mirándola con amor.
-ehhh...-Sakura lo miró y luego a Tomoyo que suspiraba-...muchas gracias...- dijo sonrojada.
-señorita, el señor Eriol Hiraguizawa acaba de llegar ¿le hago pasar?- preguntó Chen.
-¡claro que si!-afirmó Sakura.
Chen se retiró.
-vaya que hace frío-dijo Eriol sonriente mientras entraba a la sala.
Se dirigió hasta donde Sakura para besar su mano y luego hacía Tomoyo para besar sutilmente sus labios.
-espero no te enojes por llegar tan tarde-dijo Eriol sentándose a su lado- pero tenía que ayudar a Li con algunas cosas.
-¿a que te refieres?-inquirió Tomoyo.
-he conseguido a alguien que ayude a Wei-le sonrió Eriol a Shaoran.
-¿quién es Wei?-preguntó curiosa Sakura mirando a primero a Li y luego a Hiraguizawa.
-es quien cuido de mí, cuando yo era pequeño-le dijo Shaoran sonriendo- algo así como mi padre.
-¿tu padre?-preguntó confundida.
-es cierto, tú no lo sabes-dijo Li mirándola a los ojos- mi padre murió antes de que yo tuviera edad para recordarlo-entonces se notó la melancolía en sus ojos ambarinos.
-¡lo siento!-se dijo apenada Sakura- ¡no era mi intención traerte malos recuerdos!
-tranquila-le contestó- tengo a Wei que fue quien me educó-dijo con sencillez.
Sakura sonrió con timidez y sonrojo.
-tenemos que irnos, mi dulce Tomoyo-dijo ofreciéndole una mano notando que, se hacía tarde.
-esta bien-respondió esta mientras se levantaba y Shaoran también lo hizo.
-yo también me tengo que ir-le habló a la joven Kinomoto.
Sakura los acompañó hasta la puerta donde dio un beso a Shaoran mientras eran observados por la pareja de casados.
Tomoyo tan solo suspiró con resignación que fue notado por Eriol.
No entendía el comportamiento de su esposa.
-nos vemos mañana-se despidieron los tres jóvenes.
Eriol y Tomoyo se fueron a pie hacía la izquierda e iban abrazados.
Sakura tan solo se despidió con la mano y siguió con la vista a Shaoran quien se alejaba hacía la derecha montado en el cabello marrón.
...No sabía si podría mantener la mentira por más tiempo....
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Continuará...
Este capítulo va dedicado a mi amiga Crystal23 y espero que a todas las personas que leen este fic dejen sus r&r pronto, ¡¡¡por ahora estoy muy feliz por mi cumple!!! My Happy 15TH Birthday ¡estoy más vieja que hace un año! Jejeje ^^ en serio espero que este capi les guste por que la historia se me empieza a complicar y es cuando más disfrute hay jijiji ¬___¬
Espero que los que lo lean no me dejen sola TT y que dejen r&r creo que la historia se está tornando algo más "romántica" sin llegar a lo depravado, pero a este paso voy a tener que hacer un esfuerzo aun más grande para hacerlos más entretenidos debido al poco éxito que ha tenido, tampoco es como para llegar al millón de reviews o como se llamen pero la verdad es que ya me preocupe mucho...
¿Alguien tiene un consejo para que más personas lo lean? En serio sus ideas las necesito con desesperación, si son alguien con éxito en los fics como Crystal o Tsuki o Celina o Gaba o tienen fics nuevos y se saben algún secreto para atraer a los lectores ¡por fa! ¡Hablen! Bueno, no importa si no tienen fics
Les agradeceré eternamente ^^ bueno me voy
Los quiere
LADYSILVERMOON14
