-como te sientes?-
-feliz, feliz como hacia tiempo no recordaba- con un hermoso vestido de fiesta, Akane bailaba como una colegiala en medio del gigantesco jardín de la mansión Tatewaki, Ranma solo menciono algunas palabras del padecer de Akane a Kuno para que este levantara un teléfono y empezara los preparativos de la mas fastuosa fiesta que haya organizado, (obviamente Ranma no nombro los detalles vampiricos de la enfermedad de Akane) era una gran fiesta, pero en ella no había capitanes de la industria, o ministros o políticos, solo gente común y corriente, comerciantes, oficinistas, medicos, floristas, abogados jóvenes, Kuno ordeno a su gente buscar y reunir a aquel ultimo curso, pocos faltaron, estaban Daizuke, Hiroshi, Yuca y una pobre Sayuri (con unos cuarenta kilos de mas), una Shampoo con una ya visible panza de futura madre, Ryoga en el celoso puesto de esposo, Nabiki paseaba por aquí o por allí como una estudiante crecida, encontrándose con viejas amigas, por allí andaba el entrañable Gozonkugi, con varios kilos de mas y una incipiente calva que sus artes mágicas parecían no detener, Ukyo del brazo de su esposo, un chino que sabia tanto de cocina como ella misma, en las mesas, previsoramente, lentamente se derretían helados, jarras transpiradas con jugos de todos los colores, bebidas espirituosas en varios tonos rojizos, dorados o claros, menta bailaba también con un muchacho rubio, alto y fuerte venido especialmente desde Finlandia, que le importo un bledo lo que le paso y que venia a reafirmar ese amor incipiente.
-me gustaría estar allí con ella-desde un oscuro balcón Kasumi miraba la fiesta
-oh, ya iras, pero me concedes algunas piezas antes?- hasta Rosete parecía contagiado del ambiente festivo, había traído a su enamorada por la puerta trasera, en una forma de decir, Kasumi solo cerro los ojos mientras su amante trepaba paredes y llegaba con ella a cococho hasta ese lugar perfecto para ver sin mirar y... bailar
-oye Shampoo, estas genial, cuanto?-
-seis meses ya- Ukyo charlaba con la amazona como las viejas amigas que eran, Nabiki con las inseparables Yu-Sa, por allí Daisuke se sorprendía de la sencillez de este Kuno
-y bien, cuando se te ocurrió esto?- Akane, seguía bailando pero ahora estrechamente abrazada de Ranma un lento, este le hablo casi al oído
-aquí verías que sigues siendo tan humana como el resto, crees que alguien se dio cuenta?-
-no, pero todo se sabe a la larga-
-haremos las maletas antes de que pregunten, nos estableceremos en otra ciudad, abriremos un consultorio privado, y seguirás cuidando niños y niñas, si?-
-tendré que dejar a los de aquí?-
-para conocer a otros, nada mas-
-quisiera creerte que todo sera tan fácil-
-no, no sera tan fácil, pero tampoco tan difícil, ahora, vamos a dar una vuelta?-
-veo que el ángel Tendo esta tan hermosa como la recuerdo-
-Kuno, gracias, se que hiciste esta fiesta por mi- le dio un tierno beso en la mejilla, el magnate sonrío
-preciosa Akane, eso paga esta y cien mas para ti, sed bienvenida cuando quieras, mi puerta estara siempre abierta para ti o tu prometido-
-que es de tu hermana?-
-oh, se caso con un actor y vive en California, dejad la en paz, jamas estuve tan tranquilo en mi vida- la risas de esas frases, el intermitente baile, las reuniones esporádicas pero continuas, el encuentro con Shampoo
-chica vampiro disfrutar su noche?-
-Shampoo, tu también viniste?-
-no podía faltar a esto, aun seguimos en Finlandia, así que mejor para descansar?-
-el niño, o es niña?-
-es una niña, todo normal, crece mas rápido que mi vientre, y patea como la hija de quien es- Ryoga se acerco por detrás a su esposa, saludo a Akane mientras abrazaba a Shampoo
-Akane, como estas?-
-bien, feliz, contenta, esas tres palabras no se me cruzaban en una oración hacia mucho-
-me alegro por ti pequeña-
-que tal todo en Groserperquien?-
-oh, genial, ahora solo anochece una hora al día, es muy divertido-
-y el viejo Dempsey?-
-mejor, al menos ahora puede tomar sol para su reúma...-
-quieres bajar y despedirte de Akane?-
-vamos, no se si podre hacerlo luego- Kasumi y Rosete se introdujeron en la mansión
Akane y Ranma seguían de aquí para alla repartiendo saludos, aunque la fiesta parecía mas bien una reunión de ex alumnos, de repente ambos se encontraron con
-Uchan?-
-Akane, vaya cuanto tiempo?- Akane, Ranma y Ukyo se quedaron mirando un poco incómodamente, la cocinera sonrío
-espero que los tres no estemos pensando en cosas que pasaron hace diez o doce años, vengan, les presento a Kon Fu Zion, mi esposo, ellos son Ranma Saotome y Akane Tendo- los saludos, las viejas historias, mantuvieron la conversación lejos de los recuerdos de cama
En otro lado, otra charla se llevaba
-estas bien pequeña?-
-si tio, eso creo- Shampoo y Ryoga la veían por primera vez desde aquel maldito día, Shampoo le tomo de la mano y casi llorando
-fue mi culpa, tuve que preverlo-
-tía... ni tu ni yo ni nadie sabia que estaba vivo, no busquemos mas culpables, no fue nuestra culpa-
-pero si yo hubiera estado allí...-
-... pudiste haber muerto, embarazada no tenias oportunidad, ahora lo se-
-y que sera de ti?-
-viviré-
-se que podrás, eres fuerte, y tienes un alma de bondad que te guiara hasta...- Ryoga se quedo callado súbitamente, Menta sonrío
-hasta que el destino me cobre el precio de la inmortalidad, todo llega a su final... esto es una fiesta, si nos ponemos filosoficos Ranma nos regañara, vamos con el grupo-
-Akane-
-Kasumi, viniste- las hermanas se abrazaron, Ranma se cruzo con Yuka y dejo a las hermanas hablar
-viniste con el?-
-como... crees, el sabe que no es bienvenido-
-entonces ve y dile que no fume sus puros, lo huelo de aquí-
-no vas a decirlo, no?-
-y descubrirme y a menta, sera una tregua, por esta noche-
-no te preocupes, no te molestara mas, ya no-
-te vas a ir con el verdad, se van a ir lejos de aquí Kasumi miro a su hermana
-como lo supiste?-
-si el te ama, y tu a el... es imposible que puedan estar juntos aquí con nosotros, nos debe demasiado, el lo sabe, tu lo sabes, Ranma lo sabe, menta lo sabe, y yo también-
-queríamos ocultarlo hasta ultimo momento-
-mientras no te lastime...-
-no lo hara, Akane, se que me ama-
-ten cuidado, te ofrecerá la inmortalidad, lo hara...-
-en ese caso soy yo quien debe decidir- Akane miro con tristeza a Kasumi
-creo que ya has decidido, solo recuerda, es un regalo envenenado-
-nadie dijo que yo quiera ese regalo-
-se lo que puedes hacer por amor, si pasa algo, recuerda que estare aquí siempre esperándote, el tiempo que sea necesario-
-oye, aun no nos despedimos, vamos, hay gente que quiero volver a ver-
xxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxx
la fiesta, termino, y luego de las promesas de repetirla el año próximo, faltaba aun para que el sol saliera, así que una abrazada Akane de Ranma volvían caminando lentamente hacia su casona junto a menta y Shampoo y Ryoga, Nabiki se había quedado charlando muy amistosamente con Kuno
-gran fiesta, Kuno siempre supo hacer estas cosas-
-ni que lo digas pchan, agendala el año que viene-
-tendremos que venir con la niñera-
-Oh Kasumi, se encargara de el, o ella, o ellos- hubo risas y algunos insultos, pero Akane sintió que algo no podía callarse mas
-Ranma, no creo que Kasumi este aquí-
-a que te refieres?-
-creo que ya deben estar partiendo-
-partiendo, Kasumi, con quien?-
-señorita Kasumi Tendo, verdad?-
-si-
-soy Walterio Guzman, el señor Luis Rosete me pidió que la espere unos minutos mas, desea una copa?- Kasumi miro al piloto del pequeño jet privado, sabia que Rosete tenia dinero de sobra para pagar un viaje a Brasil en uno de estos caros aviones, asintió, tomo la copa que le dejo el piloto en una mesa junto a un sobre, pero pasado un minuto noto como la puerta se cerro y el avión empezó a moverse, desesperada, miro por la ventana y lo vio, que la saludaba, en sus labio, noto como que le decía algo, entendió y corrió a la mesa, donde abrió la carta
-Querido amor
Lamento haberte mentido con respecto a esa ultima lección que debo enseñarle a tu hermana, mi hija.
Pero espero que cuando sepas que paso la prueba, su vida podrá seguir su curso tranquilamente como un arroyo. El piloto tiene ordenes de llevarte a una propiedad en Belén, Brasil, donde deberás esperar mi regreso, nada de lo que hagas o digas, lo hara cambiar su curso, te ruego me esperes, para cuando este allí, ambos tendremos la seguridad que Akane sobrevivirá a todo lo que el destino le cruce en su camino.
Con todo el amor de mi corazón que te pertenece a ti y solamente a ti
Luis Ángel Colombo de Rosete
Kasumi se sentó en su cómodo asiento, y estrujando la carta que humedecían sus lágrimas solo pronunciaba cuatro palabras
-dios, que sobrevivan, ambos-
