CHAPPY 5 – REENCUENTRO

Dedicado por completo a Tim Burton! Gracias por Edward Scissorhands!

- ¿Crees que estamos haciendo lo correcto Jack?

- Si Gibbs, dejamos al Perla aquí mismo, fuera de vista y avanzamos hasta el muelle. Es el lugar perfecto, tomemos el bote ahora.

Era medianoche en Port Royal, pero a lo lejos Jack pudo ver una silueta. La de un hombre cuidando el ingreso al pueblo, en el muelle. Era el mismo con el que se había encontrado una vez, no hace mucho tiempo.

- Esta ahí, igual que la otra vez, dijo pensando en voz alta, mirando hacia el muelle

- ¿Quién está, sin terminar de entender porque Jack siempre pensaba en voz alta.

- Ese hombre, el del muelle… es fácil persuadirlo, ya veras… ¡vamos¡afuera, ahora, le dijo a Gibbs saltando del bote

- Jack, creo que necesito ayuda para salir de aquí, dijo incapaz de saltar al muelle

Jack estaba haciendo un gran esfuerzo por sacar a Gibbs del bote cuando una voz lo interrumpió

- ¡Pero a quien tenemos aquí, grito el hombre desde el otro lado del muelle

- ¿eh¡ah¿me habla a mi, dijo jack volviéndose hacia el hombre en cuestión, olvidando por completo que intentaba sacar a Gibbs del bote, resignándolo a caer de espalda.

- Como le va, señor…. Smith si no me equivoco

- Si, claro… Smith, veo que aun nos entendemos usted y yo, dijo caminando hasta donde se encontraba el hombre, acompañado por el mismo niño de piel morena que lo acompañaba la otra vez.

- Ya sabe, si quiere seguir siendo el señor Smith debe… usted sabe…

- Ah si, solo le pido un momento, mi…. dijo mirando a Gibbs que con un gran esfuerzo intentaba salir del bote …compañero tiene algunos problemas, voy a… darle una mano. Gibbs! Afuera, ahora!

Una vez que Gibbs saltó del bote (con ayuda de Jack), este le reviso bruscamente los bolsillos. Una vez que encontró lo que buscaba caminó de regreso donde esperaba el hombre del muelle.

- Aquí esta, esta vez…. Cinco! Chelines, por amarrar el bote al muelle, termino con una sonrisa.

- Muy bien Señor Smith, Bienvenido a Port Royal!

- Vamos Gibbs!

- Cuando perdieron de vista al hombre, Jack tomo a Gibbs repentinamente del brazo para esconderse entre unos arbustos.

- Ahora préstame toda tu atención Gibbs, no es seguro este lugar para nosotros, te diré lo que haremos, antes que nada, irem…

- Aja! Con que otra vez por el pueblo Sparrow… pensaste que no podría verte detrás de estas "arbustitos", sin dudas eres el peor pirata que jamás haya visto…

- Comodoro, no sabía que usted fuera tan perspicaz… dijo colocándose de pie, veo que me ha extrañado, también yo a usted, por eso he vuelto, concluyó con una sonrisa.

- No mienta, no quiero imaginarme porque ustedes están de vuelta en este pueblo… no será por algo bueno, lo doy por seguro ¿Qué traman Sparrow?

- Es algo…. un asunto personal

En ese momento Gibbs no tuvo peor idea que golpear a Norrington con una piedra en la cabeza

- ¿Pero que…! Gibbs! Eso fue muy estúpido! Maldito necio, ahora corre! Vamos, solo sígueme

Gibbs trato de seguir el ritmo que llevaba Jack, pero luego de un rato sintió que sus piernas no le respondían y pudo sentir que alguien lo seguía por detrás, cuando quiso avisarle a Jack ya sería demasiado tarde.

- Muy bien Gibbs, ya se me ocurr…. dijo volviéndose a su compañero, quien repentinamente ya no estaba detrás

- ¿Pero que demonios, pensó esta vez en voz baja ¿Qué se supone que debo hacer ahora?... ¿Seguir el código? Si, siempre es bueno, las cosas siempre terminan bien de esa forma, entonces, sigo el código, dejo a Gibbs atrás y busco un lugar donde pasar lo que queda de la noche… pero donde seria bueno…. mmm… si, el lugar indicado…

A medida que se alejaba del lugar en donde perdió a Gibbs empezaron a escucharse voces que se tornaban en gritos así como también podía escuchar algunos disparos. Fue entonces que apuró la marcha y en un momento pudo ver frente a sus ojos una gran mansión, muy similar a la que Elizabeth le había hablado alguna vez, sin dudas esa era la casa de la muchacha, quien mas podía vivir en tanto lujo? Solo el gobernador y su hija.

Tan silenciosamente como su caminar le permitía, irrumpió en el jardín y pudo ver que una de las ventanas estaba acompañada por cortinas floreadas, sin dudas la habitación de una muchacha, sin dudas la de Elizabeth. Trepó por la enredadera en la pared, alcanzó el balcón, y dio golpecitos a la puerta de vidrio.

- ¿Elizabeth?

Elizabeth se encontraba despierta, por las noches su libro preferido le hacia perder el sueño. Por lo general durante el día no lograba concentrarse, ya que siempre alguien terminaba distrayéndola, o su padre le encargaba ir a alguna reunión social de alta alcurnia, así que la noche era el mejor momento, pero en ese momento algo la estremeció, creyó haber escuchado a alguien llamarla por su nombre, desde su balcón.

Muy despacio, juntando valor, salió de la cama, y al ver la sombra de alguien tras las cortinas, tomó un jarrón que se encontraba junto a su cama dispuesta a enfrentar a quien sea

- ¿Quién es y que buscas en mi casa!

- Demasiado valiente para ser una dama Elizabeth… eso me gusta

- ¿Quién eres, dijo cerca de reconocer la voz

- ¿Quién soy¿es que ya no te acuerdas de mi amor?

- ¿Jack, dijo casi con alegría

- Ya veo que me extrañaste, ahora ábreme la puerta, escuchas esos ruidos que vienen del pueblo? Creo les perturba mi presencia, ya sabes, no se acostumbran…

Elizabeth abrió la puerta, y después de tanto tiempo sin verlo, le urgió la necesidad de abrazarlo, pero supo controlarse, y solo le estrecho la mano

- ¿Solo me das la mano? Yo te he extrañado mas, mira, y le dio un beso en la mejilla

La calidez de los labios de Jack fue algo que la chica no se esperaba, y le hizo estremecerse, muchas cosas que no quería recordar desfilaron por su mente en ese momento

- ¿Qué te trae por aquí esta vez Jack, dijo tratando de dejar de lado aquello que la incomodaba

- Bueno, veras, busco un lugar donde pasar la noche…. Ya sabes, solo para dormir, dijo concluyendo con una sonrisa

- ¿A que te refieres?

Bueno, mañana por la mañana todo se habrá calmado, no mas disparos ni amenazas, creerán que me fui por donde vine, y podré terminar con mis planes en el pueblo sin molestar a nadie… o a casi…. nadie. Ahora solo necesito un lugar donde dormir, y creo que aquí es el lugar ideal.

- ¿Aquí?

- Si, sabes que no haré nada que no quieras, recuerdas porque te lo digo verdad?

- No recuerdo nada Jack, no quieras volver a lo mismo, no se porque siempre termino involucrada en tus problemas, sabes lo que sucedería si mi padre se enterara que te encubro en mi habitación?

- Solo dime si me ayudaras

- Ja a aack…

- ¿Eso es un si? Bien, ahora solo dime que lado de la cama me toca.

Para su desgracia Jack solo consiguió una almohada junto a la ventana, mientras que Elizabeth volvió a su cama con su libro pero luego de un rato de lectura se vio interrumpida cuando no supo tolerar la mirada de Jack

- ¿Qué miras Jack¿Qué tienes?

- Es solo que me preguntaba… ¿no te has casado aun con William?

- ¿Por qué preguntas?

- Seria lógico que el durmiera contigo si fuera tu esposo, amor, dijo colocándose de lado y descansando la cabeza sobre su mano

- Si, nos hemos casado, pero el dedica las noches a trabajar en la herrería

- ¿En serio? y no atiende los asuntos…. Tú sabes….

- Eso no es algo que te importe

- Elizabeth sabes que soy como un padre para ti, o mejor un tío, ya sabes, puedes hablar conmigo de eso que no puedes contarle a tu padre…

Era cierto, nunca tenía oportunidad de hablar de esto con nadie, y Jack parecía ser la persona indicada para estos temas, y hacia tiempo necesitaba contarle esto a alguien, de alguna forma necesitaba un consejo, aunque no fuera el mejor.

- Bueno Jack, dijo luego de titubearlo, estos meses han sido difíciles para mi, Will se aburre estado en el pueblo, todo lo que quiere es embarcase, partir para vivir aventuras como tu lo haces.

- Es lógico, el chico lo lleva en la sangre, se lo dije una vez… no quiso escucharme

- No quiere compartir mucho tiempo conmigo, no quiere acostumbrarse, el sabía que tarde o temprano ibas a volver, se uniría a tu grupo. No quiere extrañarme tanto…

- Es una suerte que me lo cuentes, Elizabeth… yo vengo a pedirle ayuda, vengo a proponerle un viaje, esa es la razón de mi paso por el pueblo

En el fondo Elizabeth estaba feliz por Will, ya que finalmente cumpliría su deseo de irse a navegar con Jack, en busca de aventuras y nuevos horizontes, pero por otro lado no quería perderlo, si Will se marchaba, las posibilidades de un regreso eran remotas… no volvería a verlo jamás. Entonces las opciones eran dos, dejarlo partir y esperar por el cada tarde en el muelle o marcharse junto a el y Jack, dejando detrás a la dama fina y respetable en la que se estaba convirtiendo. Cuando logro aclarar sus ideas, noto que Jack había estado hablando mientras ella se perdió en sus pensamientos..

- …. y así fue queGibbs le dio a Norrington en la cabeza y lo atraparon, me sospecho que esta en prisión.

- ¿Has arribado con Gibbs?

- Es lo que te he estado contando todo este rato Elizabeth

- Umm… perdón Jack, es que estaba pensando algo, creo que iré con ustedes…

- ¿Perdón?

- Quiero ir contigo y Will… ¿decías que precisabas ayuda, verdad? Nos ayudaste una vez, a tu forma, pero lo hiciste… pues bien, ahora te devolveremos el favor… ya sabes, quedaremos a mano.

- Quedar a mano… ¿eh? Me parece bien… pero estas segura, la vida en un barco es mas peligrosa, mas difícil y mas infame de lo que crees, deberás dejar de lado todos los lujos a los que estas acostumbrada…

- Lo sé Jack, significará un gran esfuerzo para mi al principio, pero lo tengo decidido, lo haré por Will.

- Muy bien entonces, partimos ahora, ya no escucho ruidos en el pueblo

- ¿Ahora?

- Si Elizabeth, solo lleva algo que consideres valioso para ti, nada más… tendrás tiempo de escribirle una carta a tu padre luego.

- Afuera, ahora, dijo dirigiéndose a la puerta que conduce al balcón

- Piensas saltar por el balcón?

- ¡Claro¿Por donde mas¿Quieres que nos vean? Aquí y ahora empiezan tus días como pirata Elizabeth, acostúmbrate a pasar inadvertida, dijo perdiéndose en la enredadera.

Muy bien, este capitulo va dedicado a quien sea que lolea ... si es que hay alguien del otro lado... ojala que si!

Salu2 y gracias por leer...