Ha pasado ya un mes y medio. Un mes y medio y no despierta. No está conciente de que cumplió finalmente su cometido. Dormido en un sueño profundo del cual no hay muchas esperanzas de que regrese.

Al principio, la atención del mundo se volvió hacia él. "Nos libró al fin de Aquel-que-no-debía-ser-nombrado". "Se fue para siempre, gracias a él". "Vivió cuando era niño y ahora se debate entre la vida y la muerte". Pero pronto, los comentarios heroicos se fueron tornando pesimistas y tristes al pasar de los días. Cuando al principio se afirmaba que estaba bien y camino a una pronta recuperación, dos semanas después ya declaraban su muerte, aún así siguiera vivo, en cierta forma.

Por que ¿qué tipo de vida es esa, la de estar dormido y no despertar? Los que nunca se interesaron realmente en él se dejaron convencer de que nunca despertaría, decepcionados. "Mató al que-no-debe-ser-nombrado y no puede despertar". Hasta llegaron a llamarlo farsante. Luego, los que lo habían conocido perdieron la fe. Pasara lo que pasara, no despertaba. Pronto, encargarse de la reconstrucción de la paz del mundo mágico se tornó más importante. Y entonces lo olvidaron. Cuando hubieron pasado los días, los realmente cercanos a él, sus amigos, no querían admitir que se habían rendido. Aquella llama no se apagaba, pero faltaba poco. Para cuando llegamos al mes, los únicos que permanecían firmes en su posición de creer en que despertaría eran los que lo habían conocido de verdad, los que lo habían querido de verdad. Sin embargo, al ver que no despertaba, poco a poco se fueron resignando como los que al fin aceptan la muerte de un ser querido. Al final, sólo tres seguían a su lado, fieles. Dos eran sus amigos, lo fueron desde el principio y lo serían hasta el final. Se lo habían prometido. La otra, la otra era probablemente la que más sufría con el sueño del héroe. Lo amaba, ella lo amaba y sabía que su amor era correspondido. Si tan solo despertara.

Ginny había decidido dejar el último año en Hogwarts, y al ver su convicción y dedicación, nadie se lo negó. Sin embargo, seguía en el castillo, ya que era en la enfermería donde lo tenían. Ron y Hermione no permitieron que se lo llevaran a San Mungo, el querría quedarse en Hogwarts, su hogar. Ginny pasaba junto a él desde la mañana hasta muy entrada la noche. Siempre vigilante. Con el pasar de los días, pedía algún libro para entretenerse, o al menos fingir entretenerse. Ella estaría junto a él pasara lo que pasara. Sin embargo, ahora que habían pasado los días, las semanas, su mente comenzaba a sugerirle la rendición, más su corazón la retenía. Nadie podía siquiera intentar convencerla de que no despertaría ya, eran desterrados de la enfermería y se les prohibía la entrada. Ginny no quería rendirse, pero las fuerzas le empezaban a fallar. Para cuando se acercaba la navidad, la pobre mujer estaba tan flaca, pálida y ojerosa que parecía un muerto viviente. Y así se sentía… Muerta en vida.

Poco a poco todo iba recuperando su normalidad en el mundo exterior, o eso decían las noticias de los diarios. Al principio, el pánico se logró apoderar de algunos, con mortífagos sueltos por ahí, buscando vengarse a como diera lugar, confundidos que afirmaban haber sido hechizados, victimas inocentes siendo acusadas y acusados fingiendo ser victimas. Con el tiempo se capturaron a todos los culpables. Muchos murieron en el camino, inocentes y culpables, cazadores y presas. Pero poco a poco, todo fue tomando un curso de calma después de la tormenta. Los escondidos y perseguidos salieron a la luz y los que se paseaban sin conciencia ni vergüenza fueron privados de su libertad. Poco a poco el mundo mágico obtuvo calma. Sin embargo, como en todas las historias, el héroe, al estar fuera de servicio, fue olvidado.

- Ginny¿qué novedades? –Preguntó Hermione al llegar a la enfermería a una de sus regulares visitas- ¿alguna señal del bello durmiente?

- Movió un dedo, una ceja y murmuró algo que sonaba como a "rana de chocolate" –contestó Ginny, algo aburrida.

- Vaya, al menos ya no solo murmura tu nombre¿cuántos dulces ya ha murmurado? –añadió Ron.

- ¿Contando las ranas y los de los sortilegios Weasley? unos diez –Dijo Ginny.

Los tres miraron a su amigo, y emitieron un suspiro.

- Te extrañamos, compañero –musitó Ron.

- Extraño que se ponga a fastidiar con sus teorías. –exclamó Hermione.

- Extraño que se moleste cuando nos peleamos. –dijo Ron.

- Y que se ponga paranoico. –añadió Ginny.

- Si… -dijeron los tres al unísono.

- Extraño todo de él –musitó Ginny, mirándolo desde la silla al pie de la cama, mientras se apoyaba en sus brazos sobre el respaldar de esta.

Un silencio se apoderó de ellos, tristes, mientras observaban a su amigo.

- Ginny –dijo Hermione finalmente, como no queriendo decir lo que iba a decir- No crees que… deberías comenzar a pensar en algo que hacer…

Ginny seguía mirando a Harry, aunque pestañeó por toda respuesta.

- Quiero decir… tarda tanto… no sabemos cuanto más tardará… -continuó Hermione- no puedes quedarte aquí toda la vida…

Ginny volteó a mirarla, tenía unas cuantas lágrimas luchando por salir de los ojos.

- ¿Acaso ya no creen que despierte? –preguntó seriamente. Estaba segura de que aquella era la opinión de ambos.

- No es eso, Ginny –contestó Ron- Harry se despertará, pero no sabemos cuando…

- No puedes seguir quedándote aquí, atada a este sitio. –Dijo Hermione- También tienes una vida que vivir… El quería que continuaras…

Ginny volvió la mirada al rostro inexpresivo de Harry. ¿Realmente querría que siguiera con su vida? Entonces vio en la mesa de noche al costado de la cama, la carta que él le había escrito antes de marcharse a enfrentar su destino. "Pero si no vuelvo, quiero que sepas que te querré siempre, desde donde esté, quiero que me perdones por dejarte, que te enamores de otro, que seas feliz, que tengas muchos hijos y que siempre me recuerdes con cariño."

- Si… -dijo ella- quizás tengan razón… -se dijo, apoyándose completamente sobre la sábana de lino blanco de la cama de Harry- quizás deba… -no pudo continuar. No quería afrontar la idea de andar afuera, viviendo su vida mientras él seguía ahí… su mirada se perdió en algún punto cerca de la mesa de noche, perdida en sus pensamientos sin realmente escuchar lo que le decían Ron y Hermione… de pronto soltó un grito ahogado.

- ¿Ginny qué de…? –exclamó Hermione, quien casi se cayó de la impresión. Ron dejó caer su mandíbula mientras sostenía a su novia.

La llama de la vela mágica que indicaba la cantidad de vida que le quedaba a Harry James Potter acababa de encenderse hasta lanzar una gran llama roja y se había consumido casi hasta apagarse en menos de un segundo. ¿Qué significaba aquello? Para suerte de todos, entró en ese momento la señora Pomfrey y al ver a los tres visitantes petrificados con las bocas abiertas, miró inmediatamente a la vela.

Aquella vela era fácil de interpretar, mientras mas fuerte fuera la llama, más vivo estaba el mago o bruja. Mientras más débil, menos vida. Si la llama se apagaba, el mago o bruja había fallecido…

OoOoOoOoOoO

Muchas voces podía oír. La cabeza le daba vueltas. Parecía que no había utilizado los oídos en mucho tiempo, el cerebro le iba tan lento que apenas si alcanzaba a saber que la gente estaba alborotada a su alrededor. No recordaba nada, qué había soñado ni que había estado haciendo antes de quedarse dormido. Y era agradable, quería seguir durmiendo. Una voz gritó desde el fondo de su cabeza. Gritó su nombre. La voz le era familiar… Ginny… Voldemort… batalla… muerte… de pronto su cerebro le empezó a traer imágenes, sonidos y recuerdos. Tenía que volver, tenía que salir de donde fuera que estaba. Había algo que tenía que hacer… o alguien a quien ver. Poco a poco, lentamente fue tomando conciencia de su propio cuerpo, su cerebro comenzó a emitir órdenes y poco a poco las conexiones nerviosas fueron recordando sus caminos. Entonces abrió los ojos. Todo estaba nublado. Las voces a su alrededor cesaron y entonces volvió a cerrar los ojos, la luz le estaba fastidiando la vista, al parecer no había usado los ojos en mucho tiempo. Volvió a abrirlos y lo que pudo ver fueron unas manchas borrosas lanzándose sobre él.

Volvió a parpadear. Una luz se encendió en la memoria. Conectó las palabras que se estaban repitiendo en su cerebro a las que no había podido encontrarles sentido "Ginny, Voldemort, muerte…" Sentía que lo tocaban y que lo movían de un lado a otro, pero aún seguía sin ver, si alguien le pusiera las gafas… Intentó estirar el brazo a ver si alcanzaba sus gafas para ver donde estaba. Sin embargo a sus neuronas les estaba costando trabajo llevar las órdenes a sus músculos… entonces las voces alrededor se hicieron más claras.

- ¡Harry¡Harry! –Dijo una voz- Harry, mírame…

- Sigue sin responder, -dijo otra voz- contactaré a los de San Mungo…

- ¡NO! –dijeron varias voces a la vez.

- Él va a responder… ¡Harry¡Harry, responde por favor! –Harry volvió a parpadear en busca de aclarar su vista.

- Harry, responde –dijo la voz de Ginny…

La voz de Ginny…

Ginny…

- ¿Ginny? –Dijo el joven, muy débilmente- ¿Ginny?

OoOoOoOoOoO El silencio se apoderó de la sala. OoOoOoOoOoO

- ¿Ha-Ha-Harry? –dijo Ginny, con los ojos llenos de lágrimas, no lo podía creer… estaba despertando, al fin estaba despertando- Harry –repitió con la voz temblorosa.

- Hola –contestó Harry- ¿qué pasó? –pero Ginny no quería escuchar más, había despertado y respondía, estaba vivo y ella volvía a estarlo…

OoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoOoO

Por supuesto, una vez conocida la noticia de que su héroe de todos los tiempos había despertado, la comunidad mágica inglesa volvió su atención al Chico-que-vivió-casi-muere-al-acabar-con-quien-tu-sabes-y-volvio-a-vivir. Homenajes, entrevistas a los medios, ofertas de trabajos, beneficios, charlas con algunos líderes políticos… Pero a Harry Potter no le importaba ninguno de ellos, lo único que le importaba era que estaba vivo, que había acabado con Lord Voldemort (aunque a Ron y hermione les costó convencerlo de que no debía salir corriendo a buscarlo cuando recordó qué había estado haciendo antes de caer casi muerto al suelo) y que volvía a estar rodeado de la gente que le importaba.

Y así fue como Harry volvió a salvarse de la muerte, venció a Lord Voldemort definitivamente y vivió feliz para siempre. Fin.

OK, si quieren saber como fue que sobrevivió… esto fue lo que entre Harry y el Profesor Dumbledore concluyeron.

El poder que Harry tenía y del cual carecía Lord Voldemort era simple y llanamente el amor. Precisamente, el encantamiento que su madre, Lily, había utilizado con Harry antes de morir le había proporcionado a Harry la protección necesaria para que el encantamiento rebotara en su frente y dejara casi sin vida a Voldemort. Lo poco de vida que pudo quedar en él fue conservado gracias a los experimentos que Tom Riddle había practicado muchos años atrás. Al Harry decidir hacer lo mismo, ofrecer su vida para que aquella protección pase a alguien más Harry estaba haciendo un sacrificio. La maldición mortal de Voldemort iba dirigida a Ginny, quien estaba metros detrás de Harry, mientras que Harry lanzó su hechizo directamente a Voldemort. Sin embargo, Harry se puso en medio para interceptar el rayo de Voldemort… y al haber realizado el mismo hechizo que su madre, el rayo rebotó con aún más fuerza de la inicial dándole a Voldemort justo después de la primera. El cuerpo de Voldemort cayó al suelo, sin gracia y sin vida. Harry cayó al suelo de frente. Tanto los que habían aparecido del lado de Harry, como los mortífagos que habían aparecido del lado de Voldemort estaban quietos y perplejos… Dos mujeres gritaron y lloraron corriendo cada una corriendo al lado de uno de los caídos. Bellatrix Lestrange no podía creer que su señor había caído y se negaba a dejarlo. Ginny Weasley se negaba a creer que su Harry había caído y se negaba a que la separen de él. La acción rápida de los aurores, los miembros de la orden del Fénix y Dumbledore lograron acorralar y capturar a varios de los mortífagos, criaturas y seguidores de Voldemort que no se había echado a la fuga aún. Dumbledore fue a examinar a Voldemort primero, una vez aturdida Bellatrix. Se inclinó hacia el cuerpo inerte del enemigo y lo examinó. Al no detectar rastro de magia alguno en aquel cuerpo, se levantó con lentitud y esbozó una pequeña y confidente sonrisa hacia el otro caído. "Lo lograste, Harry" musitó bajo el bigote. La noticia se extendió en aquel campo como la pólvora al viento, el señor 0oscuro, aquel que no debía ser nombrado, Voldemort había caído de una vez y para siempre. En medio de los gritos de júbilo y los de desesperación, el anciano profesor se dirigió hacia el otro caído, disminuyendo la sonrisa gradualmente al acercarse. Se agachó para revisarlo, mientras Ginny Weasley sollozaba a su costado, Hermione Granger trataba de consolarla mientras ella misma lloraba y Ronald Weasley intentaba consolar a ambas aunque no supiera bien como. Al examinarlo, el rostro del director de Hogwarts se ensombreció. "Llévenlo a Hogwarts" les dijo a los que estaban a su alrededor, "Llévenlo a la enfermería y espérenme, llevaré a alguien de San Mungo, y no dejen que nadie más lo vea ni lo lleve a ningún lado…"

Habiendo dejado en claro este punto, repito… Harry volvió a salvarse de la muerte, venció a Lord Voldemort definitivamente y vivió feliz para siempre. Ahora sí, Fin.

Epilogo

LiZzY- ¿I K paso Kn L Rsto, Lunis?

Lunis- Ya va, ya llego a esa parte…

El profesor Dumbledore desapareció del mundo un día soleado de primavera, aunque nadie sabe como ni por qué, Harry Potter insistía en que estaba tomándose unas largas y merecidas vacaciones en el caribe y que lo dejaran descansar en paz.

Tanto Draco como Lucius Malfoy fueron asesinados por los propios mortífagos unas semanas antes de que Potter venciera al señor oscuro. Narcisa Malfoy Black fue internada en el pabellón psiquiátrico de San Mungo cuando le comunicaron que su marido y su único hijo estaban muertos. Antes de morir, Draco Malfoy alcanzó a entender algo muy importante: Que quizás él sí estaba del lado equivocado, y que quizás Harry Potter tenía algo que los galeones ni el señor oscuro le podían dar…

Al verse en una celda de Azkaban y ser visitada por Remus Lupin, Neville Longbottom y Harry Potter, Bellatrix Lestrange decidió suicidarse. Las autoridades aún no consiguen averiguar como fue que un cuchillo de mantequilla untado con veneno llegó a manos de la mortífaga.

Peter Pettigrew pasó el resto de su vida en una celda de máxima seguridad en Azkaban, que para su desgracia resultó ser mucho tiempo. Solo vivió y solo murió en una celda con encantamientos anti-animagi.

Dolores Umbridge murió al interceptar accidentalmente una maldición en un ataque de mortífagos una semana antes de la caída de Lord Voldemort. Estaba intentando meterse a una batalla entre aurores del ministerio de primer año y mortífagos de bajo rango.

La Profesora McGonagall tomo cargo como directora de Hogwarts y, como idea del profesor Dumbledore antes de "irse de vacaciones", instituyeron el "Premio a la creatividad 'Merodeadores'" en honor a los alumnos más creativamente traviesos. Los primeros en recibir este premio fueron Fred y George Weasley, y algunos años más tarde, se los dieron a Matilda Windbag y Mark Evans.

LiZzY- ieeeea un premio pa mi matiii… y k paso kn los Weasley?

Lunis- er… bueno…

Bill se casó con Fleur Delacour en el 98 y tuvieron a su primer hijo Billius Alfred Weasley en el 99. Nombraron a Bill jefe de los desencantadores de Gringotts un par de años después. Llegaron a tener tres hijos porque Fleur convenció a Bill de no tener más. Charlie fundó un instituto de investigación de dragones en Inglaterra, del cual es co-socio y co-dueño con Hagrid. Cada año Hagrid lleva a los estudiantes de séptimo de Cuidado de Criaturas mágicas en un viaje de paseo a la reserva "Norberto". Percy nunca subió de Asistente júnior de los administradores de los "Sortilegios Weasley", aunque logró casarse con su novia del colegio, Penélope Clearwater, a la que encontró llevando a sus sobrinos a la tienda de los gemelos. Fred se casó con Angelina Jonson, luego de mucha lucha, y tuvo seis hijos (Arthur, Mark, George, Billius, Kate y Annie), mientras que George se casó con Katie Bell y tuvieron dos hijos: Katia y Fred. Ambos hermanos gemelos triunfaron con sus tiendas de bromas y pronto se extendieron a todo el mundo, como mínimo una sucursal en cada país que tuviera Ministerio de Magia. Tanto fue el éxito que incluso abrieron tiendas especiales "muggles".

Arthur Weasley fue responsable de la creación del departamento de Protección al muggle, del cual fue director hasta su muerte (muchos años después de ver a su primer bisnieto). Molly Weasley vivía llevando a su casa a sus nietos de visita, pues no le gustaba tener la casa vacía.

LiZzY- Eit! Eit¿I mi matti¿q paso dsps kn mi matti?

Lunis- ¿no se te escapa una, cierto?

Matilda y Mark se graduaron con honores del colegio Hogwarts de magia y hechicería y no se volvieron a ver en un par de años, hasta que transfirieron a cada uno a la central de sus centros de trabajo (adivinen) los Sortilegios Weasley. Pronto fueron ascendiendo posiciones y fue así como llegaron a ser administradores de la sede central cuando Fred y George tuvieron que encargarse de las demás sedes. Desde entonces no se separan por mucho tiempo. Jo Windbag subió entre los aurores de la Orden del Fénix hasta llegar a ser una de sus mejores instructoras.

Neville Longbottom ingresó atrabajar al colegio Hogwarts de magia y Hechicería como profesor de Herbología cuando la profesora Sprout se jubiló. Actualmente está saliendo con una muchacha que conoció en un congreso en Bélgica. Luna Lovegood fue la sucesora de su padre en "El Quisquilloso". Ella siguió buscando noticias "que le interesan a la gente" y vendió cantidades dragonarias de números cuando mostró una foto en donde ella y Hermione Granger encontraban a un Snorkack de cuerno arrugado.

Remus Lupin se volvió director de la academia de aurores especiales de la Orden del Fénix, la cual produjo aurores de calidad humana increíble. También reclutó a los mejores profesores de defensa contra las artes oscuras disponibles, incluyendo los ocasionales talleres prácticos de Harry Potter y la profesora de DCAO de Hogwarts. Tonks, la nueva profesora de DCAO (quien no tuvo problemas en varios años para enseñar) enseñó por varios años con las eventuales interrupciones propias de una mujer casada… casada con Remus Lupin. Tuvieron tres hijos que fueron metamorfomagos a los cuales les divertía confundir a su mamá y a su papá cambiándose de apariencia entre sí. Ninguno fue mordido. Remus Lupin encontró la cura para la licantropía algunos años más tarde con ayuda de una misteriosa bruja escondida en los bosques de Escocia.

LiZzy- ¿i ia vienen los que importan?

Lunis- ¡si ke si!

Ron y Hermione se demoraron un poco en casarse, ya que cada vez que se acercaba la fecha se ponían tan nerviosos que no podían evitar pelearse y cancelar o posponer la boda un par de meses. Cuando al final lo lograron, Hermione no tardó ni un mes en quedar embarazada y hasta ahora van cuatro pequeños y hay mellizos en camino: Michael, Frederick (Freddy), Jacob, Molly, y los nombres para los mellizos, hasta ahora, serán Jane y Ronald. Ron y Hermione dividen su tiempo entre casa y el trabajo, ambos se dedicaron a mejorar la academia de aurores del ministerio de magia.

Harry y Ginny se casaron apenas tuvieron oportunidad y en una ceremonia muy privada, tan privada que la prensa no se enteró hasta que Ginny estuvo embarazada. Ambos viven una vida relativamente tranquila con sus dos hijos, James y Lily, combinando con sus trabajos. Harry se encargó de organizar la Orden del Fénix como organización de apoyo para los aurores del ministerio, trabajando estrechamente con Ron y Hermione. También se encargó de dar algunas clases eventuales en Hogwarts y no paró hasta que la Profesora McGonagall le permitiera a Tonks incrementar las horas de DCAO para que incluyeran clases del ED. Ginny por su parte fue profesora en la academia de aurores de la Orden del Fénix. Ambos envejecieron juntos y murieron el mismo día muchos muchos años después.

Fin.


YAY! TERMINÉ! FIN! déjenme reviews a ver que les pareció! OH! estoy a punto de llorar... se acabó mi fic... oh!... bueno...

Los reviews serán contestados por correo electrónico... espero que les haya gustado.

Los quiere mucho

Lunis Lupin ;)


- ¿Remus¿Qué sucede? -preguntó Harry al verlo en la sala de estar de su casa en medio de la noche.

- Harry, es urgente, los necesitamos -dijo mirando a Ginny, quién venía bajando las escaleras con sigilo- ha habido un extraño accidente en Londres...

... y ahí vamos de nuevo...