Bueno…este capi me quedo bastante bueno, así que espero sus hermosas criticas constructivas y sus buenos deseos para que este fic, que ya esta llegando a su fin, acabe con la mejor alegría que su autora puede pedir…sin decir más, los dejo con el capi…YOGINNY

CAPITULO 23: EL DESPERTAR

La luz sobre sus ojos era de por más molesta, parecía tener unas cinco varitas conjurando Lumus directamente a los ojos, así que en un impulso manoteo al aire para que se vallan, pero nada paso. Le dolía la cabeza como si su cerebro quisiera salir a bailar zamba junto a ella y la pierna derecha le molestaba. Un olor a poción contra quemaduras, que recordaba de la niñez, le llego directamente causando que se mareara un poco. Abrió los ojos con cuidado y se encontró en una sala circular en la que ya antes había estado, era la enfermería del colegio. Estaba sola en una habitación con tres antorchas prendidas y la puerta entreabierta.

Se sentó sin cuidado en la cama y la vista se le nublo, los brazos que la habían impulsado a sentarse le fallaron y tembló todo su cuerpo, no pudo soportar la posición, así que se recostó nuevamente.

Detrás de la puerta parecía haber gente porque se veían sombras y de vez en cuando se escuchaba una voz, que no supo distinguir con facilidad. Tomo aire con fuerza y llamo con la voz más fuerte que podía, a quien fuera que estaba en la habitación continua.

-Hola…-dijo con un profundo dolor que le causaba hablar y se tomo la garganta, ya que la voz no le salía normalmente.- ¿Hola?...Alguien que conteste…-pero nadie contestaba, vio inmediatamente un vaso con agua junto a ella en la mesita de noche y lo tiro al piso causando que este se rompiera en muchos pedazos ocasionando un tremendo ruido que inundo toda la sala.

Inmediatamente la puerta se abrió y la enfermera entro a ver que había sido ese ruido, detrás suyo entro Collin con la mirada perdida. Ginny lo vio por un momento y recordó que hacia mucho que no lo veía, las lágrimas no se contuvieron y cayeron con furia.

-Señorita Weasley, me alegro que ya haya despertado…-dijo la enfermera con tristeza. Ginny no pudo evitar tener un mal presentimiento y miro a Collin que se mantenía parado junto a la enfermera sin decir palabra y esquivando la mirada de Ginny.

-¿Collin?-lo llamo, aun casi sin voz. El chico levanto la vista y le sonrió calidamente. Ginny tuvo la implorosa necesidad de un abrazo y Collin pareció leerle la mente se acerco junto a ella y la abrazo con fuerza sentándose en el borde de la cama.

-Te extrañamos, Gin-dijo el chico separándose del abrazo y sonriéndole alegre. Ginny no aguanto mucho separada y lo volvió a abrazar llorando con fuerza, Collin siempre había sido su apoyo y allí estaba una vez más, ayudándola.

-Gracias, Collin-le dijo entre hipidos El chico solo sonrió y le dio un beso en la mejilla. Ginny lo quedo mirando, se dio cuenta de lo calida que sonaba su respiración y de lo rico que olía su colonia. Collin se había quedado allí mirándola, con los ojos perdidos en algún lugar del rostro pecoso de su amiga, y la chica tuvo la impresión de que nunca nadie la querría como ese chico lo hacia.

-De nada, Ginny-le dijo el volviéndola a abrazar. Ginny se dejo llevar y se quedaron un rato en silencio. En ese momento la enfermera volvió a entrar con una poción.

-Tómela toda-le dijo mientras le entregaba un jarra con una poción viscosa dentro de la cual pudo distinguir un pelo que no quiso saber de que era-es para la pierna…con esto termina la secuencia y ya no le dolerá más, señor Creveey le encargo que la tome toda.

Collin asintió con la cabeza. Ginny espero que la enfermera se fuera y dio un largo sorbo a la poción, sabia a hígado con miel y le dieron muchísimas ganas de devolver, por lo que dejo la jarra junto a su cama.

-Te la terminas-le ordeno Collin volviéndole a dar la jarra. Ginny hizo pucherito, pero Collin la miro seriamente, así que sin decir más nada se la tomo toda.

-¡Uajjj, ¡que asco!-dijo la pelirroja sacándose un pelo de la punta de la lengua. Su voz estaba volviendo lentamente.

-Ginny…tenemos que hablar-dijo Collin con un tono demasiado serio que la asusto-…es sobre Britney…

-¿Qué le paso a Britney? Por favor, Collin, decime que esta bien…-dijo sollozando y llevándose las manos a la cara. Collin tomo las manos de la chica lentamente y la alejo de su rostro para poder verla a los ojos.

-Ahora esta mejor, pero fue golpeada por un hechizo de desarme y se golpeo las costillas…-explico Collin serio, pero sin miedo-esta en San Mungo, pero ya se va a poner mejor…

-¿Por qué la llevaron ahí? ¿Por qué no la dejaron aquí?-pregunto algo más tranquila.

-El profesor Dumbledore considero mejor que valla a San Mungo, porque el hechizo pudo haber golpeado sus pulmones también, y ya sabes que ella tiene asma…-le explico Collin lenta y pausadamente para que la pelirroja no estalle en lágrimas nuevamente, pero aun así no pudo evitarlo y Ginny comenzó a llorar en silencio, Collin solo la observo.

-Es mi culpa-dijo la pelirroja tristemente.

-No, Gin-le dijo Collin-fue culpa de todos por no notarlo…digo, somos tus amigos y nos enojamos lo que nos tratabas mal o no nos hablabas en vez de acercarnos a ver que te pasaba…

-Odio que siempre me pase esto a mí-dijo Ginny arrugando la sabana en su dedo índice-siempre la poseen a la misma idiota, o sea: yo.

Collin solo la miro tristemente y tomo el rostro de la pelirroja entre sus manos. La chica pudo contemplar su propio reflejo en los ojos miel de su amigo y le sonrió.

-El que tiene la culpa es otro-dijo el chico-ese es el innombrable, y el sabe que vos sos una persona buena y confiada…la persona más valiente y fuerte que conozco, sabe que cuando querés algo luchas hasta que lo conseguís y que amas con todo tu corazón, gin…yo no creo que lo hagan porque sos idiota, sino porque quizás sos más fuerte que muchos de los mortífagos que le ayudan.

Ginny lo miro por un tiempo tratando de ver si lo que decía era verdad y le sonrió alegremente. Collin se había quedado muy cerca de su rostro, una vez más, esta vez ella fue la que se perdió en su rostro.

-Te quiero mucho, Collin-le dijo con una cariñosa sonrisa, el chico sonrió y lentamente se fue acercando a su rostro hasta depositar un tierno beso en la mejilla de la chica, algo cerca de su boca.

-Yo también te quiero, Gin-dijo el castaño. En ese momento la puerta se volvió a abrir y tres cabezas pelirrojas hicieron su aparición. El señor y la señora Weasley junto a un Ron más despeinado de lo normal.

-Bueno, bueno-dijo el chico pelirrojo-¿Qué tenemos acá?-pregunto parándose junto a Collin y separándolo de Ginny con muy poca delicadeza.

-Ron…trata bien a Collin-le ordeno su madre severamente.

-Pero si no le hizo nada, Molly-dijo el señor Weasley sonando algo enojado por primera vez en mucho tiempo.

-Bueno Arthur-dijo su madre sin darle importancia-¿Cómo te sientes Ginny?

-Mejor mama…pero me gustaría saber que paso…-dijo la pelirroja acomodándose en el respaldo de la cama.- ¿Dónde esta Harry? ¿Y Hermione?

-Harry esta con Dumbledore-le informo Ron intentándose arreglar el pelo-y Hermione esta con la profesora McGonagall viendo que los Gryffindor pequeños estén bien.

-Pero ¿Qué paso?-pregunto nuevamente la chica.

-Bueno hija…-empezó su madre-lo que sabemos nosotros es que, no sabemos como, pero Voldemort logro que una bruja oscura entrara en tu cuerpo y que intentaste matar a Harry-dijo esquivando su mirada. Ginny vio como todos se ponían nerviosos, pero todo eso ella ya lo sabía.

-Ya lo sabia mama…-le explico a su madre-yo podía ver todo lo que pasaba, pero no podía hacer nada para impedirlo, estaba como atrapada…-dijo tristemente. Su madre la miro con lastima y le tomo una mano sentándose en la silla más próxima a la cama.

-Bueno…-intervino el señor Weasley-Harry dejo algo herido al que-no-debe-ser-nombrado…pero bueno, Harry también quedo herido…aunque ya esta bien-dijo rápidamente viendo la cara de susto de la pelirroja.

-Harry me contó que Dumbledore encontró su varita y se la dio, entonces el innombrable tiro un hechizo a Dumbledore que le fundió los pies en la tierra entonces no se podía mover –explico Ron moviendo exageradamente los brazos-entonces Harry le tiro un hechizo de desarme al maldito y…si perdón mama no vuelvo a maldecir más…-dijo el pelirrojo viendo la cara que ponía su madre-y el hechizo de Harry se mezclo con unas maldiciones imperdonables que le tiraban unos mortífagos a mi compañero y se fueron derecho al pecho de Vol-digo, el innombrable…

-¿En serio?-pregunto Ginny incrédula.

-Si, y parece que unos aurores lo intentaron aprisionar pero un mortífago más bajito que todos lo ayudo a escapar…-intervino Collin en la conversación.

-¿Y tu como sabes?-le pregunto Ron ofendido porque había interrumpido su relato. Collin solo se levanto de hombros.

-Pero algo del hechizo también golpeo a Harry, solo que la peor parte la llevo el-que-no-debe-ser-nombrado-dijo el señor Weasley.

Ginny suspiro aliviada y miro a Ron que seguía mirando feo a Collin que se hacia el tonto y miraba a cualquier parte.

-Basta Ron-le pidió Ginny-deja de mirar a Collin así…

-¿Así como?-pregunto el pelirrojo haciéndose el inocente. Ginny levanto una ceja amenazadoramente y Ron desvió la mirada del chico.

-¿Cómo esta Bill?-pregunto Ginny.

-Mejor hija…se va a recuperar por completo-dijo felizmente su madre. Ginny sonrió contenta y reprimió una lágrima que amenazaba con salir.

-Pero no me vas a negar que casi te besa…-dijo Ron de la nada señalando a Collin acosadoramente. Las orejas de Collin tomaron un color rojo furioso, el señor Weasley abrió la boca y la señora Weasley miro la sabana de la cama, repentinamente interesada en el bordado que tenia, Ginny, por su parte, sintió unas enormes ganas de ahorcar a su hermano.

Ginny tomo la sabana con fuerza y la aventó con ímpetu decidida a matar a Ron, pero en ese momento la puerta se abrió, y entro Hermione con una sonrisa en los labios y se aproximo a la cama. Tapo nuevamente a Ginny y le dio un abrazo.

-Me alegro mucho de verte Ginny-dijo la castaña cuando se acerco al oído de su amiga. Ginny en ese momento se sintió extremadamente culpable.

-Lo siento mucho Hermione-le dijo culpable. La castaña negó con la cabeza y se sentó a los pies de la cama de Ginny. Ginny comprendió que era mejor no tocar el tema nunca más.

La tarde paso volando. Su madre había tenido que callar a Ron con un hechizo silenciador así no hable con Collin que había comenzado a asustarse, ahora la cosa era al revés, Ron movía los labios, sabe Merlín, que insultos usaba hacia el chico, mientras Collin le hacia burla que no lo escuchaba, así estuvieron hasta que la señora Weasley se enojo y los corrió, Ginny pudo escuchar como Ron perseguía corriendo al chico de la cámara una ves que habían abandonado la habitación.

Hermione y su madre estuvieron hasta tarde haciéndole compañía, pero su padre se fue a ver a los gemelos que habían quedado a cargo de la casa y podían armar una fiesta si se quedaban más tiempo solos.

Durante todo ese tiempo la visitaron Neville y Luna, y la chica se la paso contando anécdotas de su cita con Neville que estaba rojo de la vergüenza, mientras a sus espaldas Hermione ponía los ojos en blanco a cada rato y su madre miraba a Luna como si estuviera loca. Más tarde pasaron Dean y Seamus con una caja de chocolates y Freddy Zimons que le trajo una rosa al mismo tiempo que quería comprar a su madre llamándola suegrita, cosa que hacia reír contenta a la señora Weasley mientras Ginny quería sacarlo de ahí de una patada.

Fue recién, bien entrada la noche, cuando las visitas cesaron y Ginny pudo dormir. Se recostó de costado dándole la espalda a la puerta y quedo profundamente dormida. No sabia cuanto tiempo había podido hacerlo, cuando escucho rechinar a la puerta detrás suyo y escucho un torpe andar que reconoció inmediatamente como el de Ron, además Hermione, que se quedo a cuidarla esa noche, llamo la atención del chico.

-Despacio Ron-le dijo la castaña-vas a despertarla-lo regaño con dureza.

-Perdón-dijo Ron con un tono de vos bastante alto, Hermione lo miro enojada-no es mi culpa que no arreglen estas puertas, les falta aceite…-dijo esto ultimo ya con la voz baja.

-¿Qué haces aquí, Ronald?-dijo Hermione perdiendo la paciencia.

-Vine a verte…-dijo Ron en un tono meloso que le provoco a Ginny ganas de salir corriendo-pero si tanto te molesta mi presencia…

-¡Ron!-lo llamo Hermione cuando el chico se estaba yendo. El pelirrojo se volvió y Ginny sintió que se apoyaba en su cama para agacharse a la misma altura que estaba Hermione, que estaba sentada en una silla.

-Ya sabía que no podías vivir sin mí-le dijo descaradamente el chico. Ginny abrió la boca y espero paciente a que Hermione lo golpeara en el centro de la nariz, pero eso nunca paso, Hermione no le pego y para colmo la escucho reír tontamente.

-Tenés razón-dijo la castaña, y ahora si que Ginny abrió la boca-Ya no puedo vivir si vos, Ronald-le dijo divertida.-Te amo, Ron-le dijo, y Ginny sintió ganas de vomitar, pero se quedo quieta al escuchar que Ron no respondía.

-¿Gracias?-escucho decir a Ron, y Ginny tuvo que contenerse para no reír.

-¡Ron!-le dijo Hermione indignada.

-Ya se, ya se…es en broma…yo también te amo, Mione-le dijo el divertido y riendo por lo bajo y ahora si escucho el golpe que Hermione le dio a su hermano. Entonces sintió como Hermione se paraba y pensó que seguro se estaría besando con su hermano y decidió no moverse hasta estar segura que sus "cuidadores" estén alejados y sus lenguas en sus respectivas bocas. ¡Por Merlín, pensó Ginny, no puede ir a hacer eso a otra parte…

-Ron-escucho a Hermione llamar a su pelirrojo hermano, cuando por fin parecía que iba a poder borrar la imagen de Hermione besando Ron de su mente-tengo algo que decirte-dijo la castaña.

-¿Si?-pregunto Ron medio dormido.

-Si-corroboro Hermione y Ginny quiso matarlos. Que le diga rápido así pueda dormir, pensó la pelirroja-Ya estoy lista para hacerlo…-dijo la chica y Ginny se revolvió en la cama mientras comenzaba a toser ruidosamente atragantándose con la noticia, pero ni Ron ni Hermione se dieron cuenta.

-¿Hacer que?-pregunto Ron distraído. Si… ¿hacer que, pensó Ginny agudizando el oído para escuchar la respuesta de Hermione.

-Ya sabes Ron…no seas tonto…-dijo Hermione y Ginny quiso darse vuelta para ver si no hablaban en silencio, moviendo los labios para que ella no escuchara.

-¡AH!-recordó Ron-bueno…cuando usted quiera yo estaré listo…-dijo Ron y entonces Ginny recordó todo.

Ginny se acerco por detrás de Ron y Hermione a su mesa, solo para ver que hacían y escucho entre asustada y entretenida la conversación de estos dos.

-…no Ronald…-le dijo Hermione divertida, pero susurrando.

-Yo no te estoy presionando… -le dijo el también hablando bajito.

-Ya se…pero yo tengo miedo…no estoy preparada todavía…me da miedo-le dijo mirándolo de costado con algo de timidez.

-Tranquila…sabes que te esperaría toda la vida ¿no?-le pregunto Ron mostrándole una enorme sonrisa.

-Si…ya lo se-le dijo Hermione. Ron entonces se acerco y le dio un beso en la mejilla. Ginny sonrió y acerco la cara entre la de ellos que no dejaban de mirarse.

Abrió los ojos como platos y trago saliva suavemente mientras intentaba pensar en conejitos rosas, en mariposas, en muñecas de juguete que encerraban a ovejitas en pequeñas casitas, pero la voz de Ron, que de repente le sonó a hombre, la saco de sus pensamientos.

-Podemos hacerlo mañana-dijo seguro de si mismo-¿Te parece como a las cinco?-le pregunto Ron. ¿Tiene horario y todo, pensó la pelirroja horrorizada.

-De acuerdo-dijo Hermione algo asustada-¿Nos encontramos en el campo de Quidditch directamente?-pregunto Hermione y Ginny sintió repentino asco por su deporte favorito. Hermione es una pervertida, mira que de todos los lugares en el mundo, ella quiere ir a hacer cochinadas en el campo de Quidditch…voy a tener que limpiar bien mis cosas cuando vuelva para allá, pensó Ginny tristemente.

-Bien-dijo Ron y entonces sintió que se daban un beso-Me pone muy contento que al fin vallamos a hacer esto…hace tiempo que tenia ganas de…

-Si, ya se Ron-lo interrumpió Hermione y Ginny pensó que Ron era como todos los hombres…

En ese momento la puerta de la enfermería se abrió y Ginny que quería, más bien necesitaba, que cambien de cuidadores, se hizo la que se despertaba y miro quien entraba por la puerta. El corazón le dio un vuelco cuando vio a Harry Potter parado en el marco de la puerta mirando con el ceño fruncido a Ron y Hermione besarse sin inhibiciones. Ginny sintió que si no se separaban ella los agarraria de los pelos y los tiraria para atrás.

-¿Así es como cuidan a Ginny?-pregunto Harry haciendo a los dos chicos alejarse ruborizados. Ginny por su parte soltó una risita.

-Eh… ¡Harry!-dijo Ron caminando hasta su amigo-…menos mal que estas aquí, necesito un favor…

-Si gracias por preocuparte por mi Ron, estoy bien…-le dijo el pelinegro.

-No seas desconsiderado Ron-le dijo Hermione detrás de él.

-Harry necesito que te quedes con Ginny, que Hermione y yo necesitamos privacidad-dijo el pelirrojo tomando se la mano a su novia y saliendo por la puerta con una Hermione sumamente roja y empujando a Harry dentro de la habitación. El silencio se hizo entonces.

Harry se acerco a la cama de la pelirroja y se sentó junto a ella con la espada apoyada en el respaldo de la cama. Ginny se corrió y le dio lugar así se ponga cómodo. El chico paso un brazo por sobre el hombro de Ginny y ella apoyo la cabeza en el hombro del pelinegro.

-¿Debería asustarme por la necesidad de privacidad de Ron y Hermione?-pregunto Harry y Ginny sonrió, tuvo el impulso de contestarle que si, pero seguro que Harry prefería no enterarse de ciertas cosas, que ella hubiera preferido no saber.

-Por ahora no-le dijo sin dejar de sonreír. Harry la abrazo más fuertemente y la atrajo contra si. Se quedaron así, abrazados y en silencio. Ginny sintiéndose más protegida que nunca, pero sabia que tenia que hablar, tenia que agradecerle a Harry por salvarle la vida nuevamente y también debía pedirle perdón por haber jugado con el, todavía estaba en su mente el recuerdo del beso a Malfoy, y no le gusto nada.

-Perdón-dijeron los dos al mismo tiempo y Ginny se ruborizo por la coincidencia.

-Yo soy la que tengo que pedir perdón, Harry-dijo ella-por haber dejado que Vol-Voldemort me atrape-dijo dejando a Harry más que sorprendido.

-No, Gin…yo te prometí cuidarte-dijo el-pero no pude hacerlo…perdóname vos a mi…

-Pero yo bese Malfoy, y me imagino lo mal que te debes haber sentido porque si vos besaras a mi peor enemiga yo me sentiría mal…-dijo Ginny, pero después lo pensó mejor-aunque si se lo que se siente, te vi besando a Cho…-Harry por un momento sonrió pero luego se puso serio nuevamente.

-Ginny…Cho fue un error…-dijo el chico, pero la pelirroja sacando fuerzas de no se donde lo tomo tímidamente del rostro y lo beso en la frente. Harry sonrió, aunque parecía un poco desilusionado, entonces Ginny aprovecho el momento y le dio un calido beso en los labios.

-Solo quería hacerte sufrir un poco-le dijo al ojiverde que sonrió divertido, y apoyo la cabeza en el hombro del chico volviendo a sonreír, esperando que esta vez ya nada le impida hacerlo diariamente.