Capítulo 25. La boda de Moony y Nymph
Por fin es el uno de Abril-pensó Harry cuando oyó su despertador. Hoy iremos los Merodeadores y mis padres al castillo de Godric Gryffindor para preparar la boda-siguió pensando Harry Potter.
Al cabo de media hora después de que Harry Potter despertara a sus amigos todos se encontraban en la sala de los Merodeadores listos para viajar con sus varitas listas para hacer una buena decoración que hiciera justicia con la grandiosa boda que se celebraría en dos semanas.
-Venga chicos. Nos vamos-dijo Harry mientras abrazaba a sus compañeros para hacer posible la aparición de los cuatro Merodeadores en la puerta principal del castillo que Harry poseía gracias a la herencia de uno de los fundadores de Hogwarts.
Al instante siguiente de que ellos aparecieran también llegaron Nymphadora Tonks y Remus Lupin.
-Vayamos a dentro y empecemos a trabajar hasta la hora de la comida- propuso como no Hermione Granger.
-De acuerdo Galopadora creo que es lo mejor-le contestó Voladora.
Así que todos haciendo caso de Hermione entraron al castillo de Godric Gryffindor dispuestos a redecorar toda la casa con motivos de fiesta.
-Mopy-chilló Harry.
-Si amo Harry-dijo una elfina.
-Por favor prepararnos la comida que la serviremos en mi habitación-indicó el joven Potter.
-De acuerdo amo Harry-contestó la elfina Mopy.
-Gracias Mopy. Te puedes retirar-ordenó el niño-que-vivió.
-Chicos manos a la obra-dijo Ginny.
-Papá, he pensado que la boda la podríamos en el jardín porque sería mucho más practico y además dispondremos de un tiempo muy primaveral-le aconsejó Harry a su padre Remus Lupin.
-Quizá tengas razón, pero si llueve entre estas dos semanas o el mismo día de la boda todo se estropearía-indicó su madre, Nymphadora Tonks.
-Ya pensé en eso y he encontrado un hechizo que crea una cúpula impermeable alrededor de lo que tú quieras y que sólo se puede quitar si dices el contrahechizo y además he buscado un hechizo que regula el tiempo en un espacio limitado-explicó Harry.
-Eso es magnífico amor porque si ese día llueve podremos hacer que igualmente tengamos una buena temperatura-exclamó Ginny muy orgullosa de su novio.
Después de esto todos se dirigieron al jardín y decidieron que lo mejor sería hacer la boda cerca del lago y la comida un poco más alejada pero no en demasía.
-Papá, mamá necesito que vayáis a un centro comercial y compréis música para la boda y una buen equipo de música. Además comprar las flores que queréis que haya en la ceremonia y comprar unas cincuenta velas de color azul claro-explicó Harry.
-De acuerdo hijo-dijeron sus padres apareciéndose en el callejón Diagon.
Una vez se fueron Ron habló.
-Es el momento de hacer el trabajo para que ellos se lleven una buena sorpresa-exclamó Ronald Weasley muy entusiasmado con la idea.
-Haber chicos ahora nos tenemos que organizar. Yo crearé una mesa de invitados, la mesa principal, una silla a conjunto con las mesas y una silla de la ceremonia. Ginny, tendrás que multiplicar la mesa que yo crearé para que todos los invitados puedan sentarse-explicó el chico Potter.
-De acuerdo amor-respondió Ginny.
-Ron , tú multiplicarás las sillas de la comida y tú Hermione las sillas de la ceremonia-finalizó Harry.
-Está bien-respondieron los dos Merodeadores.
-Cuando acabemos con esto haremos entre todos el altar. Creo que disponemos de una hora más o menos antes de que lleguen mis padres así que manos a la obra-exclamó Harry Potter con una gran sonrisa mientras que ya había creado la silla de la ceremonia.
Después de diez minutos ya tenían todos los muebles necesarios y se dedicaron a colocarlos en su sitio.
Cuando llevaban ya cuarenta y cinco minutos sólo les quedaba el altar, que gracias a los poderes de Harry, la imaginación de Ginny y el trabajo en equipo de Hermione y Ron , se fabricó en apenas diez minutos.
La verdad es que después de esa hora de intenso trabajo de los chicos todo había quedado perfecto.
Justo al lado derecho del lago se encontraba un pequeño altar pintado con detalles azul claro y blanco. Todas las sillas que habían estaban recubiertas con una tela de terciopelo de color azul cielo a conjunto con el altar.
Para ir al lugar donde se celebraría el convite los Merodeadores habían construido un puente que hacia posible cruzar el lago.
El puente de madera de pino estaba barnizado y tenía todo el suelo forrado de pétalos de rosas azules y blancas y habían velas flotando de dichos colores bordeando el puente.
Cuando finalmente se acababa el puente te encontrabas con una hermosa carpa.
Al entrar en ella podías ver la mesa presidencial.
La mesa presidencial era rectangular y tenía un mantel que combinaba el color blanco con el color azul claro.
Las mesas de los invitados eran mesas de trece personas que tenía un mantel con la misma combinación que le de la mesa presidencial, pero la diferencia era que las mesas eran redondas.
Esta vez en ves de crear sillas habían creado pequeñas butacas con los mismos colores que habían en toda la decoración.
Remus John Lupin y Nymphadora Tonks llegaron al castillo de Godric Gryffindor al cabo de dos horas de haber marchado.
Llegaron con un equipo de música mágico que leía CD's muggles y una pila de CD's muggles y otra pila de música mágica. También habían comprado las velas y las flores.
Cuando estuvieron en el comedor se dieron cuenta de que todo estaba oscuro y que sólo se veían la luz de un montón de velas que iban desde la puerta del balcón hasta algún lugar del jardín.
-Vayamos Moony-le dijo cariñosamente Tonks.
-Sí Nymph-le contestó el licántropo.
Fueron siguiendo las velas y nada más que pisaron el primer espacio con el hechizo lo notaron porque todas las velas que los chicos habían puesto levitando en el cielo se encendieron mostrando así la preciosidad del recinto de la ceremonia que los Merodeadores habían creado para ellos.
-Esto es increíble-dijo Tonks.
-Es muy hermoso-dijo Remus a su vez.
-Mira Remsie hay un camino de velas por encima del lago.-le guió Tonks.
Aunque era de día los Merodeadores se las habían ingeniado para que todo pareciera oscuro con un par de hechizos en pársel.
Los prometidos fueron siguiendo el puente sorprendiéndose de la belleza con la que los Merodeadores habían decorado el lugar contando con sus colores preferidos el azul claro de Remus y el blanco de Tonks. Aunque muchos creían que era el rosa.
Cuando llegaron al lugar donde se celebraría el convite vieron que las flores y las velas que ellos habían comprado estaban allí colocadas y que el equipo de música estaba encendido.
En el equipo de música sonaba La Rosa de Los Vientos, una canción de Mägo de Oz que enterneció a todos y cuando acabó por fin salieron los Merodeadores que fueron recibidos con abrazos y miles de gracias por todo lo que habían hecho en apenas dos horas y además ahora tendrían lo que quedaba de fin de semana para disfrutar de ese hermoso y grandioso castillo.
-Harry, hijo, venir un momento que quedan unos detalles que se deben afinar antes del día de la boda-dijo Nymphadora Tonks.
Harry, Ginny, Ron y Hermione fueron a la sala de estar donde estaban sentados Remus Lupin y Nymphadora Tonks esperándolos con una taza de té cada uno.
-Que queréis afinar mamá?-cuestionó el niño-que-vivió impaciente por saber que se habían podido dejar.
-Sólo es que necesitaremos habitaciones separadas tu padre y yo para cambiarnos el día de la boda porque el novio no puede ver a la novia antes de que ella llegue al altar-explicó su madre de forma atropellada.
-Es cierto, pues bueno yo aconsejo que las mujeres vayáis a mi cuarto que es el más amplio para que dispongáis de todo el espacio necesario y, los hombres nos vestiremos en el cuarto que compartís tú y mi papá y así todo queda solucionado. Que os parece papás?-finalizó Harry Potter.
-A mí me parece una idea genial. No crees Nymph?-contestó el licántropo mientras agarraba la mano de su prometida.
-Sí, estoy de acuerdo-finalizó la novia de Moony.
Después de esa charla el fin de semana pasó muy deprisa y pronto volvieron a estar en Hogwarts.
Pero las dos semanas que faltaban para la boda pasaron muy deprisa y de seguida estuvieron preparados para marchar a la casa de Harry Potter, heredero legítimo de Godric Gryffindor.
El viernes, catorce de Abril por la noche Harry Potter, Ginny, Weasley, Ron Weasley, Hermione Granger, Remus Lupin y los profesores excepto el profesor Binns y Firenze abandonaron el castillo para dirigirse al castillo del ya mencionado niño-que-vivió para presenciar la ceremonia de Remus y Nymphadora.
A las diez de la noche ya estaban todos en la casa.
Todos se fueron pronto a dormir paa que al día siguiente todo saliera bien.
La boda sería a las seis de la tarda y después de eso irían a cenar a la carpa que los Merodeadores habían adaptado para celebrar el convite de la boda del licántropo y la metamórfaga.
Por fin el día llegó y ya eran las seis de la tarde. En el altar estaban Remus Lupin, vestido con un esmoquin negro muggle. Justo a su lado estaba Ron Weasley, uno de sus padrinos con un esmoquin blanco.
Justo en frente de Remus habían una mesa de mármol blanco y detrás se encontraba Albus Dumbledore quien llevaba una túnica azul oscuro y que sería el que llevaría acabo la ceremonia de unión de la pareja.
Cuando pasaban diez minutos de las seis se empezó a oír la marcha nupcial y todo el mundo se levantó para ver a la novia mientras se preguntaban quien sería la persona que la entraría al recinto de la ceremonia.
Pero nunca se esperaban ver una imagen tan hermosa.
La novia Nymphadora Tonks vestía un vestido muggle con una cola enorme. Justo a su lado agarrándola del brazo se encontraba su hijo adoptivo, Harry James Potter Evans. Harry vestía un esmoquin blanco igual al de Ron, iba sin sus gafas ya que no era miope gracias a los poderes curativos que había en su cuerpo y lucía su pelo negro revuelto totalmente descontrolado.
Los dos iban avanzando al ritmo de la música con dos sonrisas elegantes.
Mientras ellos iban caminando detrás iban las dos madrinas, Hermione Granger y Ginny Weasley que ayudaban a la novia con la inmensa cola de su hermoso vestido de novia. Hermione y Ginevra vestían vestido muggles de color azul cielo. Los vestidos eran largos hasta los pies y eran de tirantes. Las dos se cubrían los brazos con un chal de color azul oscuro y llevaban zapatos de tacón de este mismo color.
Hermione lucía el pelo liso y un pequeño recogido, en cambio Ginny había dejado su pelo rojizo suelto y se había hecho bucles por todo él excepto con el flequillo que lo había cogido con dos pequeñas flores.
Finalmente, la novia, el padrino y las madrina se situaron en el lugar que debían y la ceremonia comenzó.
-Buenas tardes Remus y Nymphadora y, buenas tardes a todos los presentes-empezó Albus Dumbledore. Hoy estamos aquí para unir en matrimonio a Remus John Lupin y a Nymphadora Tonks. Pero antes de empezar con la unión me han pedido que pregunte una cosa a una persona muy especial para ellos-advirtió el director de Hogwarts. Harry James Potter Evans aceptas este matrimonio con las consecuencias que conlleva-preguntó Albus Dumbledore muy serio pero totalmente sereno sabiendo la respuesta de dicho chico de cabellos morenos y hermosos ojos esmeraldas.
-Acepto este matrimonio en mis plenas facultades y sabiendo que de esta forma Nymphadora Tonks pasa a ser mi madre adoptiva ya que Remus Lupin es mi padre adoptivo-dijo Harry Potter sonriendo a todos los presentes que estaban en la sala.
-Bien ahora que ya tenemos la confirmación que los contrayentes querían hagamos la parte importante de la ceremonia. Remus John Lupin quieres a Nymphadora Tonks como tu esposa y prometes amarla y respetarla todos los días de tu vida hasta que la muerte os separe-preguntó solemnemente el director del colegio.
-Sí, quiero-contestó Moony totalmente seguro.
-Nymphadora Tonks quieres a Remus John Lupin como esposo y prometes amarlo y respetarlo todos los días hasta que la muerte os separe-cuestionó de nuevo Albus Dumbledore.
-Sí, quiero-respondió la metamórfaga con seguridad.
Después de esto Nymphadora Tonks y Remus John Lupin se pusieron las alianzas que brillaron un momento en sus manos en señal de unión.
-Dicho esto les declaro marido y mujer. Puedes besar a la novia-finalizó el director del colegio de Hogwarts.
Y así fue como una metamórfaga y un licántropo que tenían como hijo al único superviviente de la maldición asesina contrajeron matrimonio.
Después de esto tanto los novios como los invitados cruzaron el puente hasta llegar al convite donde cenaron unos deliciosos platos que los elfos doméstico habían cocinado para la hermosa ocasión.
Pero lo mejor de la fiesta llegó al final cuando los invitados se disponían a marcharse.
Los Merodeadores se acercaron a los novios y por detrás les engancharon un trozo de cinta aislante y al momento sintieron como un gancho bajo el ombligo y se dieron cuenta de que estaban utilizando un trasladador.
Cuando todo dejó de rodar se vieron en una suite de un hotel de cinco estrellas. En la suite había una cama de matrimonio enorme y en la mesita habían fresas y champán. Además había un jacuzzi y un lavabo enorme de mármol. También había una pequeña sala de estar con tele y equipo de música.
Cuando volvieron a mirar a la cama se dieron cuenta de que allí había una carta de los mismísimos Merodeadores.
" Queridos papá y mamá,
Los Merodeadores hemos decidido que no era justo que no tuvierais luna de miel y por tanto os hemos enviado a una suite de un hotel de Venecia.
Podéis estar tranquilos porque allí no hay ni mortífagos ni nada y espero que seáis hasta el día 21 de Abril que tendréis que volver. La cinta aislante que hay en vuestros trajes es el trasladador que os traerá de vuelta al castillo de Godric Gryffindor el día 21 de Abril a las diez de la noche. Allí estaremos los Merodeadores esperándoos.
Espero que os lo paséis muy bien y que disfrutéis de la hermosa cama que tiene la suite.
Besos de parte de los Merodeadores.
Harry James Potter Evans Lupin
Heredero de Godric Gryffindor"
Y tal como su hijo había dicho lo pasaron muy bien durante esa semana.
