Hola a todos!

Esta vez no tardé tanto en seguir, espero que les guste el capítulo, que en lo personal a mí me gusta mucho.

Sin embargo, lamento informarles que no sé cuando voy a seguir. No creo volver a tardar tanto porque ya tengo casi terminado el capítulo, pero ya mañana entro a clases, y eso me absorbe mucho tiempo.

Tengo que recordarles que los personajes que reconocen pertenecen a JK Rowling. La canción de este capítulo se llama "No quiero ser más tu amigo" y pertenece al cantante Cesar Banana Pueyrredon.

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No quiero ser más tu amigo

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Sirius se fue en el Expreso rumbo a Londres a primera hora al día siguiente. Un traslador especial lo llevaría a Francia, donde podría recoger el cuerpo de su tío…

Marian había pasado la peor noche de su vida después de que la carta con la fatídica noticia llegara. Sirius se había abrazado a ella como un náufrago a una tabla. Nunca había visto a nadie llorar tan inconsolablemente, después de ver a su padre llorar por su madre en el hospital, y definitivamente nunca había tenido que consolar a alguien.

Había logrado alcanzar la carta y la había leído lentamente. Un nudo se había hecho en su garganta.

"Señor Black

Lamentamos sinceramente informarle que el día de hoy a las 18h se ha realizado un atentado por parte del movimiento a favor de la limpieza de la sangre contra el señor Alphard Carter. El atentado tuvo éxito, y resultó en la muerte del señor Carter y los dos aurores que trabajaban como sus guardaespaldas.

El gobierno francés le comunica su más sentido pésame. Es requerida su presencia en el país durante los días siguientes para resolver los asuntos pendientes de su tío.

Michelle Artigue, ministra de relaciones exteriores.

Roland Hower, ministro de seguridad nacional."

No sabía qué hacer ni qué decir. Simplemente devolvió el abrazo al chico y empezó a acariciarle el cabello con suavidad. Tenía que esperar a que se calmara un poco. Cuando sintió que los sollozos lo estremecían un poco menos se animó a hablar, con un tono de voz dulce y suave que nunca utilizaba.

Está bien Sirius… trata de tranquilizarte un poco…

Sintió al chico estremecerse y aferrarse con un poco más de fuerza. Vale, tal vez no eran las palabras indicadas.

Está bien… -la chica miró desesperadamente a su alrededor tratando de encontrar una idea de qué hacer. Si tan sólo se pudiera comunicar con los amigos de Sirius para que vinieran por él…

Finalmente Sirius se separó de ella lentamente con la cabeza agachada y el pelo cayendo a ambos lados de su cara, enmarcando los ojos azules totalmente enrojecidos. Tomó la carta de nuevo (que la chica había dejado en el suelo), la releyó y la hizo un puño para tirarla contra la pared. Luego, se levantó y con un acceso de ira golpeó la biblioteca con un puñetazo. El mueble se tambaleó y algunas cosas se cayeron.

¡Sirius, cálmate! –le gritó la Ravenclaw incorporándose también.

El chico cerró los puños y apoyó su rostro contra ellos.

Lo siento –dijo en voz baja - yo… -Sirius se descubrió el rostro mirándola sin encontrar palabras para continuar la frase.

No digas tonterías –dijo Marian todavía en aquel tono suave tan poco común en ella- todo está bien. Ten.

Hizo aparecer una jarra y luego salir de su varita un poco de agua. Sirius tomó la jarra despacio y dio un largo sorbo.

Dime –dijo Marian lentamente¿Tienes alguna forma de contactar a tus amigos desde aquí?

Tengo que ir a Francia, Andy está sola, y… -Sirius empezó a divagar sin ponerle atención.

Sirius. Ponme atención –la chica lo tomó de los hombros para verlo directo a los ojos- no vas a ir solo a la oficina de Dumbledore a esta hora. ¿Puedes contactar a tus amigos?

La chica rogó mentalmente porque la respuesta fuera afirmativa, sino ella misma lo acompañaría a buscar al director… ¿Qué más le quedaba?

El chico asintió sin entender aún muy bien, aturdido como estaba por la noticia. Sacó un pequeño espejo de su túnica. Marian lo tomó y se alejó del merodeador. Se aclaró la garganta y llamó en tono de mando pero lo más bajo posible.

¿Potter¿Lupin¿Pettigrew?

James, presa de uno de sus cuadros de insomnio durante toda esa semana tras el pleito con Lily, estaba despierto, así que vio la luz del espejo. Lo tomó y miró con asombro a la chica al otro lado.

¿Nowak?

¡Potter! Tienes que venir a la oficina.

¿Qué pasa?

Es Sirius. Recibió una carta de Francia y…

¿Alphard? –preguntó James con violencia y una mirada de terror. La chica asintió¿Muerto¡Vamos para allá de inmediato!

James había tirado el espejo y en menos de un minuto había despertado a Remus y Peter. Era arriesgado cruzar todo el colegio a esa hora sin capa y sin mapa, pero no dudaron en salir de inmediato.

Pocos momentos después James abrazaba a Sirius y salían juntos a buscar a Dumbledore, quien no más enterarse de la noticia se puso en contacto con el ministerio. Remus y Peter volvieron a la Sala Común a hacer las maletas de Sirius.

A las siete de la mañana el chico estaba listo para tomar el carruaje guiado por los thersthal que lo llevaría a Hosgmeade a tomar el expreso.

Sus amigos estaban a las afueras del castillo, junto con Lily y Arya, a quienes Remus les había informado a penas habían salido de su habitación la mañana siguiente. Sirius los abrazó a todos.

Sabes que si por mí fuera iría contigo para Francia en este momento.

James estaba furioso con Dumbledore, quien se había negado a dejarlo ir a Francia con su amigo. También él estaba muy afectado por lo sucedido, quería mucho a Alphard.

Lo sé –dijo Sirius – le daré a Andy un abrazo de tu parte.

James lo abrazó de nuevo y Sirius se dirigió hacia el carruaje. Dirigió su mirada una vez más hacia el castillo y se devolvió. Sus amigos se volvieron para ver a Marian, quien acababa de aparecer en la puerta del colegio. Sirius se acercó a ella.

Perdona el susto que te di – dijo Sirius mirando al suelo, algo avergonzado.

No importa.

El chico levantó la mirada hacia ella y súbitamente se adelantó y le dio un abrazo.

Gracias –le susurró al oído. Le dio un beso en la mejilla y se devolvió para subir al carruaje. Dijo adiós con la mano suavemente y los animales empezaron a avanzar rápidamente hacia Hosgmeade.

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A mediodía la ACLS tuvo una reunión con Dumbledore. Marian expuso con toda claridad la propuesta y una sonrisa de orgullo apareció en su rostro al terminar y ver la admiración en los ojos del director. Había quedado perfecto.

Dumbledore estaba muy satisfecho con la labor del grupo y así se los comunicó. La propuesta estaba lista para ser presentada y lo único que debían hacer era decidir en qué fecha se haría la manifestación. En quince días habría una reunión de los líderes de la comunidad mágica. Habían acordado planearlo todo para ese día, era poco tiempo, pero era una buena ocasión. Repasarían el plan a la semana con Dumbledore y si iba a podía lista el director daría los permisos del caso.

Al acabar la reunión James se despidió de Remus porque iba a ir al estadio de Quiddicth. Quería estar solo un rato y volar siempre ayudaba. Cuando James salió del salón, Lily lo siguió. Arya se quedó sola un momento.

¡Hey, Remus!

El licántropo se volvió para ver a la chica y sonreírle. Habían hablado poco esa semana, porque tras la discusión de James y Lily habían evitado sentarse juntos. Además, desde la conversación en la Torre las cosas habían estado un poco extrañas entre ellos. Sin embargo, eso a Remus no le molestaba porque sabía que no era a causa de su condición, aunque no sabía a qué se debía en realidad. ¿Empezara Arya a entender quién era la chica de la que él le había hablado?

Eso no importaba. Si ella lo llamaba, él estaba ahí para hablar con ella.

¿Qué sucede Arya?

¿Tienes algo que hacer?

No en realidad –mintió Remus pensando en las tareas por terminar.

¿Podemos hablar? Salgamos a los terrenos… no quiero volver a la Sala Común.

Claro.

Vamos.

Salieron juntos de la Torre, y caminaron en dirección a los terrenos del colegio.

Me pregunto cómo estará Sirius –dijo la chica – esto es muy duro para él.

Lo es –dijo Remus sintiendo una punzada de celos. Otra vez a hablar de Sirius… – pero en este momento debe estar mejor. Una vez con Andy encontrará la fortaleza para apoyarla a ella también.

Me habría gustado ir a Francia con él. No hay nadie allá más que su prima para apoyarlo y ella también debe estar muy afectada.

No te preocupes tanto. Sirius es más fuerte de lo que muchos piensan. Aunque a mí también me habría gustado ir.

¿De verdad estaba solo con Marian cuando recibió la noticia?

Sí – Remus estaba bastante a disgusto con la conversación.

Me pregunto que habrá hecho… no creo que sepa como reaccionar en algo así.

Lo hizo bastante bien – ya habían llegado a los terrenos del colegio. Empezaron a rodear el lago hasta llegar a un claro un poco apartado¿es de eso de lo que quieres hablar?

La chica bajó la cabeza.

No del todo. Sí quería saber cómo pensabas que estaba Sirius, pero hay otra cosa. Sólo se lo he dicho a Lily pero… Yo también recibí una carta anoche.

Remus vio la tristeza aparecer en la mirada de Arya.

¿Qué sucede? – le preguntó olvidando del todo que estaba empezando a molestarse. La tomó de la mano¿Estás bien? Dímelo, sabes que puedes confiar en mí.

Siempre he confiado en ti Remus –dijo Arya – bueno, aquí va… Recibí una carta de mamá. Natasha está enferma.

¿Qué tiene? –preguntó el chico preocupado. Natasha era la hermanita de meses de Arya.

No saben. –dijo Arya levantando la mirada hacia él – no saben si es grave o no. Ha tenido mucha fiebre y un extraño brote. Llora mucho y nada parece aliviarla. Hoy tenía una cita en el San Mungo para que la examinaran.

Probablemente no sea nada grave – le dijo Remus tratando de tranquilizarla- a veces los bebés dan esos sustos porque son tan pequeños que cualquier cosa parece inmensa en ellos…

Lo sé –dijo Arya – confío en que no sea nada, pero… toda mi familia está allá con ella. Me gustaría poder ir a verla, pero no puedo hacer nada, solo quedarme aquí sola esperando noticias de ellos.

Sus ojos se habían llenado de lágrimas. Remus la abrazó y la chica apoyó la cabeza en su hombro. Unas silenciosas lágrimas salieron de sus ojos mojando ligeramente la túnica del chico.

Todo estará bien Arya. Ya verás como tienes noticias de tu madre pronto. Sino hablaremos con Dumbledore, probablemente te deje ir a verla mañana…

Lo dudo… no dejó a James ir con Sirius…

Pero Arya, es que eso era salir del país, a uno donde no conoce a nadie más que personas amenazadas de muerte…

Sí… tienes razón. No podría soportar que algo le pasara a Natasha… es tan pequeña, tan frágil…

Shh… no va a pasarle nada…

Cuando Arya se hubo desahogado se separó de Remus y le dio un beso en la mejilla.

Gracias Remus. Eres el mejor amigo que he tenido. ¿Vamos al castillo?

Vamos –dijo el chico con algo de amargura que la chica no percibió, y si lo hizo, la ignoró.

Remus la miró de reojo mientras entraban al castillo en silencio. No creía poder resistirse más tiempo.

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Cuando estas deprimida, siempre vienes a mi,

y me cuentas de nuevo, qué te hace sufrir,

sé de tus penas, siempre confiaste en mi.

y ahí estoy si me llamas, cuando quieres hablar,

y te presto mi hombro, cuando quieres llorar,

tengo un secreto, no puedo esconderlo más...

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Lily siguió a James de lejos después de salir de la reunión de la ACLS. Después de su discusión no había querido hablar con él, y cuando había decidido que debía hacerlo, él nunca estaba disponible. Siempre estaba con Sirius, con Remus o con Pettigrew, o bien rodeado de fans. Pero esta vez estaba solo.

Lo vio entrar al estadio de Quiddicth, pero antes de poder decirle algo el chico tomó su escoba y empezó a volar. Lilian se sentó en la gradería a verlo. Era muy bueno volando.

James se sentía muy mal desde la mañana. Siempre se había llevado muy bien con Alphard y sabía que era todo para Sirius. Una vez muerto su tío, la única familia que en realidad tenía Sirius era Andrómeda. Alphard era para Sirius su verdadero padre. Sabía lo que era perder a un ser querido por culpa del movimiento. Sus padres…

Estaba pensando en ellos desde la mañana. La historia se repetía, pero Sirius no tenía unos abuelos que lo acogieran en su casa y le dieran amor… al menos no de sangre. Después de que su amigo había partido hacia Francia, James escribió una carta a sus abuelos comunicándoles lo ocurrido.

Recordó los gritos de su abuela cuando encontró los cuerpos de su padre. Recordaba a su abuelo sujetándolo con fuerza para que no saliera corriendo donde su abuela y viera los cuerpos de sus padres torturados, demacrados… muertos. Los periódicos, las noticias, las declaraciones despectivas de Uldin Snape…

James volaba en ese momento muy alto. Cerró los ojos y se dejó caer en un precioso Amago de Wronsky. Lily lanzó un grito ahogado, pero el merodeador se elevó a escasos centímetros del suelo.

La chica se dedicó a verlo volar por espacio de una o dos horas. No podía negar lo guapo que estaba con el cabello aún más alborotado por el viento y esa expresión de lucha interna que tenía cuando se esforzaba por hacer los movimientos cada vez mejor.

Finalmente el chico descendió y se dirigió a los vestidores a darse una ducha. Tenía clase de Encantamientos más tarde y luego tenía que hacer unas tareas… qué aburrido que era ser responsable. Tal vez Remus ya las había hecho en ese tiempo…

Lily esperó fuera de los vestidores. Cuando James salió la encontró de frente.

Lily. ¿Qué haces aquí? –preguntó el chico sin alterarse lo más mínimo.

Quería hablar contigo.

¿De verdad? – James arqueó una ceja – ¿se puede saber de qué?

James. – Lily lo miró con reproche, pero él siguió impasible. La chica resopló bajito, no se lo iba a poner fácil – sobre la discusión que tuvimos el otro día.

No veo qué tenemos que hablar sobre eso.

James, por favor… lamento como se dieron las cosas. Solamente necesito tiempo para aclararme. Créeme que no ha sido fácil para mí pasar de odiarte a… bueno, a lo que sea que sea esto.

El chico asintió.

Lo entiendo.

Pero… te fuiste tan enojado que yo…

Dijiste que querías tiempo –dijo James como si estuviera muy claro – y te hice caso. Te di tiempo y espacio para pensar y aclararte.

Pero también te dije que no quería perder tu amistad – reprochó la chica – y me has evadido todos estos días.

No te he evadido. Me he alejado de ti. Mira, si ocupas tiempo te daré todo el que necesites, pero lo siento, Lily, no puedo ser más tu amigo.

¿Qué?

No tiene sentido Lily. ¿Para qué voy a ser tu amigo? Es una tortura constante para mí y no soy sincero contigo en el proceso. No quiero ser más tu amigo. Quiero ser el chico al que amas y con el que quieras estar. Eso eres tú para mí. Si me dieras la oportunidad te daría lo mejor de mí siempre, de todo corazón. Te amo, y eso es todo lo que puedo darte.

Pero… ¡estos días hemos sido amigos¡muy buenos amigos!

Sí, porque te había prometido que eso iba a ser para ti. Lamento faltar a la promesa, pero… simplemente no puedo hacerlo más.

James le dio un beso en la mejilla y se fue dejándola sola en el estadio.

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No quiero ser tu amigo,

amigo nunca más, amigo para qué,

sinceramente amigo,

amigo nunca más, amigo para qué,

yo quiero ser tu amor, para siempre

y darte lo mejor, de todo corazón,

no quiero ser más tu amigo...

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Remus no había hecho la tarea todavía, así que esa noche los merodeadores se quedaron en su cuarto haciendo los deberes. Mientras tanto, James les contó lo que había sucedido con Lily esa tarde. Le habría gustado contárselo a Sirius primero, pero no iba a mandarle una lechuza con la historia a Francia. Sabía que a su amigo le gustaría enterarse de que había seguido su consejo, pero en estos momentos tenía que tener otras cosas en mente.

El licántropo se quedó algo pensativo ante las palabras de James, y cuando este le presionó Lupin le dijo que le parecía que había hecho lo correcto. Peter no parecía tan convencido, pero le dijo que si de verdad estaba enamorado de la pelirroja por irracional que sonara, había hecho bien.

Esa noche James pudo dormir un poco más, pero Remus no pegó ojo en toda la noche. ¿Debía el hacer lo mismo¿Decirle a Arya lo que sentía? Claro, ese no era el momento indicado, la chica estaba muy trastornada por lo de Natasha. Podía esperar a que tuviera noticias positivas de la bebé y luego hablar con ella. Pero tal vez tampoco sería el momento preciso.

¿Había un momento preciso para decírselo¿O simplemente lo estaba postergando? Sí, era eso. Lo estaba postergando y sabía porqué. No se atrevía a decirle a Arya que no quería ser solo su amigo, porque si la chica no le correspondía no sabía que pasaría después, y no quería alejarse de ella.

Pero si no le decía nada las cosas seguirían igual… no sabía si podría soportarlo y en lugar de encontrar el momento preciso estallaría y le diría todo en el momento menos indicado.

Finalmente se hizo un propósito. Hablaría con ella antes de la próxima luna llena.

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Tanto tiempo esperando, ya no puedo fingir,

no sé cómo decirte que estoy loco por ti,

quiero besarte, quiero que seas feliz,

que este juego termine, ya no hay más que decir,

que lo nuestro comience hoy un sueño sin fin,

no te sorprendas, me enamore de ti...

no quiero ser...

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Al día siguiente recibieron una nota de Sirius. Les decía que todo estaba bien. Andy estaba muy afectada pero su amiga, Sara Blackburn, había estado con ellos en todo momento. Esa noche se haría una ceremonia en Francia, y al día siguiente trasladarían el cuerpo de Alphard a Inglaterra y a mediodía lo enterrarían en la bóveda de los Carter en el cementerio mágico de Londres.

James, no bien terminaron de leer la nota, salió rumbo a la dirección para buscar a Dumbledore y decirle que con o sin su permiso pensaba ir al entierro. Claro que no dijo nada de eso, porque al entrar a la oficina el director le preguntó si ya sabía a qué hora debían ir a Londres al día siguiente.

Lily no había hablado con James de lo sucedido el día anterior, y por la actitud del chico supuso que no había cambiado de parecer y aquello de ser tan buenos amigos había terminado. Sin embargo, el chico se acercó a ella y Arya durante la hora de la cena.

Hola chicas. Tengo noticias sobre Sirius.

¿De verdad? – preguntó Arya rápidamente – ¿qué sucede?

Mañana traerán el cuerpo para realizar el entierro en Londres. Dumbledore va a ir y me ha dicho que espera que un grupo de amigos cercanos a Sirius nos acompañe. Sabe que podría llevar a medio colegio porque todas las chicas querrían ir para darle a Sirius un abrazo de condolencias, pero sabemos que no es lo más indicado…

Cuenta con nosotras –dijo Arya de inmediato, aunque mirando a Lily quien asintió. Desde que había hablado con Sirius en Lavodnas&Adevop su estima por el merodeador de ojos azules había aumentado considerablemente.

James les dedicó una encantadora sonrisa de agradecimiento y volvió al lado de Remus y Peter. Este último se estaba quejando de la mala nota que le había puesto Pate en su último ensayo de Defensa contra las Artes Oscuras y Remus le explicaba porqué estaba malo.

En ese momento una gran lechuza entró en el salón y se dirigió a Arya. La chica dejó caer el tenedor y abrió el sobre rápidamente. Remus también dejó de hablar y se quedó mirando a la chica.

Moony… ¡Moony! – lo llamó Peter – ¿los kappas qué?

Te lo explico ahora –dijo Remus distraídamente.

Arya leyó la carta rápidamente y luego abrazó a Lily. Remus no podía ver su rostro bien pues llevaba el cabello suelto. Inmediatamente después la vio salir rápidamente del comedor. Se levantó y la siguió rápidamente.

¡Moony! – lo llamó Peter – ¿pero qué le pasa a este chico hoy¡Todavía le faltaba la tableta de chocolate!

James rió al ver la expresión de Peter.

Mejor se la llevamos al cuarto – propuso James – nos lo agradecerá.

¿Pero qué le pasa? – repitió Peter – no será que en serio le gusta esa chiquilla ¿no?

James sonrió.

Por Merlín… es simpática y todo lo que quieran… ¡pero no para tanto!

¿Tanto? – preguntó James indiferente mientras guardaba unas tabletas de chocolate.

¡Ya lleva dos merodeadores en su cuenta¡Es la única con ese record!

James se rió de nuevo y se levantó.

Vamos Wormtail, yo te explicaré lo de los kappas.

El Gryffindor lo siguió inmediatamente, mientras James pensaba que en parte tenía razón: Arya era muy especial.

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Remus alcanzó a la chica en medio pasillo, rumbo a la lechucería. La tomó del brazo, pero cuando la chica se volvió no vio un rostro surcado de lágrimas, sino una gran sonrisa y una mirada radiante. La chica le tiró los brazos al cuello.

¡Está bien¡Natasha está bien! Es sólo una larinfanote-a-no-se-que-itis, dice mamá que el medimago les dijo que era una enfermedad muy corriente en niños en esta época del año y le mandaron unas pociones que hicieron efecto de inmediato.

Remus la abrazó aliviado de verdad.

¡No sabes como me alegro¡Te dije que no sería nada!

Tenías razón –dijo la chica separándose de él y tomándolo de la mano para seguir avanzando – acompáñame, voy a la lechucería a contestarle a mamá. ¿Me seguiste desde el comedor?

Sí – confesó el merodeador – me asustaste cuando saliste así de repente.

Gracias por preocuparte.

Sabes que todo sobre ti me preocupa.

Arya le dio un beso en la mejilla y siguieron subiendo hasta llegar a su destino. La chica escribió una larga nota llena de exclamaciones de alegría y besos y abrazos para su hermanita y su madre.

Remus se sentó a verla escribir. Estaba tan feliz en ese momento y se veía tan tranquila ahora que todo estaba bien…

De repente la chica levantó la mirada y se encontró con los penetrantes ojos dorados de Remus. Sonrió, por primera vez algo nerviosa ante la mirada del chico.

¿Qué pasa?

Nada. Es solo que… te ves muy linda.

La chica se ruborizó un poco y bajó la mirada a la carta que empezaba a enrollar para cerrarla.

Gracias – murmuró.

Remus tomó una lechuza y la ayudó a amarrar la carta a sus patas. Rozó la mano de la chica y la miró a los ojos de nuevo. Arya se sonrojó una vez más y dejó ir la lechuza que salió limpiamente hacia la clara noche.

Lo siento –dijo Remus – no quería incomodarte.

No es nada –dijo la chica dirigiéndose hacia la salida, pero Remus la llamó de nuevo.

¿Podemos hablar?

Arya sólo asintió y se volvió para mirarlo.

Mira, no sé si es el momento adecuado –dijo Remus empezando a caminar lentamente por toda la lechucería, algo nervioso- pero creo que llevo demasiado tiempo esperando a que lo sea y no sé si va a presentarse… pero ya no puedo fingirlo más.

Arya avanzó un poco hacia él. ¿Iba a decirle…?

No sé como decirte esto –dijo Remus dando la vuelta y caminando en dirección contraria – pero todos estos días de conocerte, la amistad que hemos tenido nos ha permitido conocernos y yo…

Se detuvo frente y la miró directo a los ojos.

No te sorprendas… me enamoré de ti.

Arya se tambaleó ligeramente. Se apoyó en una de las columnas.

¡Oh! –dijo débilmente.

Tú eras la chica de la que te hablé –dijo Remus que ahora que había empezado a hablar quería decirlo todo – no pude evitarlo, eres la chica más maravillosa que he conocido y cada minuto contigo me ha confirmado que es contigo con quien quiero estar. Estoy loco por ti Arya, haría cualquier cosa por ti porque todo lo que quiero es que seas feliz.

Se acercó a ella y la tomó de la mano. La chica levantó la mirada anonadada hacia él.

Sé que lo más probable es que no sientas lo mismo por mí –dijo Remus mirándola a los ojos – pero tenía que decírtelo. Tenía que acabar este juego… y saber si había una oportunidad para un nosotros.

Arya abrió la boca lentamente para decir algo, pero Remus negó con la cabeza.

No, no me respondas todavía. Quiero que te tomes tiempo para pensártelo. No quiero ser sólo tu amigo, pero si es todo lo que podemos ser, si es lo que necesitas de mí dímelo y así será. Es solo que tenía que intentarlo. ¿Lo entiendes verdad?

Arya asintió una vez más.

Piénsalo – repitió Remus antes de salir de la lechucería dejando a la chica sola con sus pensamientos. Llegó a la Torre de Gryffindor y subió directo a su habitación. En la sala común estaban los chicos, pero James impidió a Peter llamarle. Cuando llegó al cuarto y se tiró en la cama encontró un paquete algo mal envuelto. Lo abrió y sonrió. Era chocolate. Justo lo que necesitaba en ese momento.

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No quiero ser tu amigo,

amigo nunca más, amigo para qué,

sinceramente amigo,

amigo nunca más, amigo para qué,

yo quiero ser tu amor, para siempre

y darte lo mejor, de todo corazón,

no quiero ser más tu amigo...

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¿Qué les pareció? Espero con ansias sus comentarios, sobretodo de la declaración de Remus, me interesa saber qué les ha parecido. El próximo capítulo se llama "Si tú no estás aquí". Como se han dado cuenta la historia está en un momento un poco más triste y serio que el resto de los capítulos anteriores, pero lamento decirles que así tenía que ser. Después de todo parece que la vida de los merodeadores no fue color de rosa… en especial la de Sirius. Bueno, a continuación contesto sus reviews. Muchas gracias por ellos¡ya casi llegamos a los 200¡No lo puedo creer! Helen Black Potter: Jajajaja! Sí, ya sé que destilan un orgullo que raya en testarudez y un poco de idiotez a veces, pero estoy de acuerdo contigo. Que les cuesten las cosas para que las valoren. Nos vemos!

Aiosami: Me alegra que te guste la historia. No puedo ser muy mala con Remus… aunque sea extraño me cuesta más ser mala con él que con Sirius. Pues el título hacia referencia a los dos. Espero que te haya gustado y ahí estamos hablando. Bye.

Julieta Black Potter: Sí, ese era el capítulo donde la relación de Sirius y Marian daba un paso adelante que en una situación normal sería pequeño, pero en como va la relación entre estos puede ser muy importante. Marian no es un ogro… también sabe comportarse. Sí, Lily está siendo necia y algo tonta, pero todas podemos ser así alguna vez… Álgida: Hola! Que bien que te dejaran leer y que te haya gustado. Lily hará sufrir a James un poco más al parecer, pero es que el pobre James no sería el mismo sin una Lily como esta. Remus… ya viste que se aclaró. Rocio: Me alegra que te guste mi manera de escribir. Sí, las chicas están siendo un poco necias, pero en el siguiente chap se llevarán una sorprensa desagradable. Ya verás. Angie Crowe: Hola! A mí también me gusta como va la relación de Remus y Arya, porque ya hice sufrir mucho a la chica y me parece que Remus es el chico ideal para ella ahora. Espero que te haya gustado la declaración y no te haya parecido muy de repente, pero es que estaba al caer ya. Me alegra que te guste como va lo de Lily y James, y como Sirius avanza a pasito de tortuga en su relación con Marian. Trataré de leer tus one shot y hacerte un comentario detallado, pero mañana entro a clases, así que no puedo prometerte que sea rápido, pero lo haré, tranquila. Dazabeth: Hola! Me ha pasado eso de empezar a leer un chap y no entender nada por haberme perdido otro, pero lo bueno es que ya estás al día. Ya ves que James está haciendo algo parecido a lo que sugeriste, veremos que pasa. Sí, la situación con Marian era apropiada para la llegada de la fatídica noticia. Tal vez no se ha puesto más alegre todavía la historia, prometo que más adelante lo har� pero después de todo lo que leemos de Jk podemos asumir que los merodeadores no tuvieron una vida muy feliz que digamos…

Hermy: ¡Hola! Espero saber que te pareció la reacción de Marian, pero vamos, no podía reaccionar mal en una situación así. Ya viste que hubo un avance con Remus y Arya, espero tus comentarios. Otro abrazo para ti.

Violet Potter: Hola! Sí, pobre Sirius. Me alegra que te gustara a pesar de lo triste de esta parte. Besos y abrazos a ti también.

Dew Ro: Sí, ya me habría gustado ser Marian para consolarlo… ya veremos si ocurre algo para ver un cambio en Marian, aunque ya se está portando distinto que al inicio de la historia. Me alegra que te guste como voy.

Nadir-Blue: Me alegra que ya no te caiga mal Marian, eso no se oye todo el tiempo! La verdad es que Sirius ha puesto mucho de su parte, aunque yo también habría reaccionado como Marian a todo esto, pero la verdad es que la chica tiene sentimientos muy fuertes por él. Ya veremos como se resuelve. Ah, y estoy de acuerdo contigo, yo también me he portado así (de algún lado salió Marian…)

Whiteta Potter Evans: ¡Hola! Claro que me acuerdo, mi hermana no me deja olvidarlo y es mi favorito de los que estoy escribiendo ahora que terminé el más grande. Estoy de acuerdo contigo, Lily nada que reacciona… pero lo har� como todos sabemos… Claro que Remus es un encanto, más después de este capítulo.

Carol Lovegood: Hola! Me alegra que te fijaras en el detalle del cambio de Black a Sirius en Marian cuando lo ve de esa manera. Supuse que se llevarían una sorpresa al ver que seguí, esta vez ya no tarde tanto… Lo que pasa con Lily es simple. Tiene miedo. Puede ser algo tonta, pero es miedo lo que le impide seguir con esto.

FrandPBL: Me alegra que te gusten los fics. ¿No te has acostado a las 6 de la mañana por leer¡No puedo creerlo! Gracias…

Fabisa: Hola! Sí, era Alphard. Espero que te gustara como seguí. Nos vemos.

Saludos desde Costa Rica

Sara Fénix Black