CAPITULO 2 "La Fabrica"
HORAS MAS TARDE
CAFETERIA LOCAL
6 PM
La cafetería lucia casi desierta, desgraciadamente tenia mala fama, así es que casi nadie pasaba a comer algo ahí, en una mesa pegada a la ventana principal se encontraba un mujer de no más de 25 años, esperando a que le tomaran su orden. Ella parecía tener la mirada perdida en algún punto del edificio que se encontraba enfrente.
-le puedo tomar su orden? – una camarera se acerco con papel y pluma en mano.
-un café nada mas – le dijo sin voltear a verla
La camarera se dio media vuelta y se dirigió a la cocina, poco tiempo después regreso con una taza de café y la puso sobre la mesa.
-gracias – le contesto viéndola en esta ocasión, y justo cuando la camarera se iba a retirar le hizo una pregunta – usted sabe de quien es ese enorme edificio?
-claro que si – le contesto la camarera cruzando los brazos – todo el mundo sabe eso, es la fabrica del señor Willy Wonka, el más grande chocolatero que jamás haya existido.
-OH ya veo, entonces seguramente ha de tener a mucha gente empleada no es así? Digo.. Después de todo para poner a trabajar una fabrica se necesita de mucha mano de obra.
-bueno en un principio así era, pero un día el cerro, nadie vio a Willy Wonka por un tiempo pero de repente un día la fabrica volvió a funcionar.
-Entonces quien esta operando la fabrica – pregunto con curiosidad
-nadie lo sabe – y con esto la mesera se retiro
-interesante, esto es muy interesante – dijo al tiempo k le daba un pequeño sorbo a su taza de café – EW! Esto sabe horrible... ya veo porque nadie entra a comer aquí – dijo entre dientes mientras dejaba la taza en su lugar, y abría nuevamente el fólder que una noche antes le había sido entregado, observo con detenimiento las fotos, así como también el croquis del interior de la fabrica – debo digitalizar toda esta información para hoy en la noche – pensó y se paro, dejo el dinero sobre la mesa y salió de la cafetería, había trabajo que hacer y no había tiempo que perder.
PUERTAS PRINCIPALES
WONKA INC.
3 AM
La noche era fría aunque no tanto como la anterior, esta vez no había neblina y las estrellas se podían ver a simple vista, una noche verdaderamente hermosa, aunque no lo suficientemente buena para un crimen que estaba a punto de cometerse.
Una sombra ágilmente brincaba la barda de las Industrias Wonka siempre vigilando que su acto no fuera detectado por gente, cámaras, sistemas de seguridad etc.
Aterrizo hábilmente sin hacer el menor ruido, y rápidamente se escondió en las sombras que proyectaba aquella enorme fabrica, cuando se aseguro que todo estaba tranquilo y en orden, de su brazo saco una pantalla de cristal liquido, tecleo algunas datos en ella y pocos segundos después se oyó una voz computarizada que decía: "escaneando posibles sistemas de seguridad" después de un rápido escaneo la pantalla le indico: LIMPIO NO HAY SISTEMAS DE SEGURIDAD
-que le pasa a este tipo, será pan comido infiltrarme dentro de la fabrica – una vez que estaba segura que no había peligro que fuera descubierta camino tranquilamente hasta la entrada de la fabrica, saco una ganzúa y forzó la cerradura para que se abriera.
"Listo como quitarle un dulce a un niño" intentó abrir la puerta pero esta estaba trabada, parecía que no había sido abierta en años, después de un poco de esfuerzo logro abrirla, ella se metió y cerro de nueva cuenta la puerta detrás de ella. Cuando volteo a ver a su alrededor se dio cuenta que solo había un pasillo muy largo que carecía de buena iluminación, y una larga alfombra roja que se perdía en la distancia. Nuevamente ella saco su pantalla y rastreo si había algún tipo de forma viviente cerca, el resultado fue negativo. Camino por el pasillo que parecía no tener fin pero con forme seguía avanzando se dio cuenta que el pasillo sé hacia cada vez más pequeño, hasta que vio que una puerta muy pequeña, rápidamente saco de nuevo su ganzúa y forzó la cerradura, cuando paso por la puerta no podía creer lo que veían sus ojos.
