Ya lo sabe nada es mio… tal vez el chico de cabellos negros y rizados… pero el ya es de miky… uf que embrollo… en fin muerte al imperio y a la WB!

Por si acaso esto tiene un poco de slash demasiado leve… esta en cursiva por si alguien se quiere abstener a leer, no es fundamental para la historia…quiero decir q si no lo leen no se pierden de nada…en fin a leer

-¿QUE SIGNIFICA ESTO GINEVRA MOLLY WEASLEY?- la chica despertó sobresaltada, por la luz de la habitación ya era de día, Harry se estaba poniendo desesperadamente las gafas, la pelirroja no alcanzo a abrir los ojos completamente cuando una sombra que podría jurar que era su madre le arrojo el profeta a la cama, los dos chicos recogieron el periodico donde aparecía una foto en primera plana del Hospital Saint Clarence en medio de las llamas y un gran titular "Harry Potter el padre que vivió" y mas abajo "el niño que vivió no pierde el tiempo a contraído matrimonio con Ginevra Weasley, una hermosa bruja de 17 años hija de...al parecer todo iba perfecto en la vida de la feliz pareja por que aunque estemos en guerra Harry Potter tiene tiempo para el amor...el Matrimonio Potter logro escapar de ataque mortifago en un Hospital muggle cuando acudía a un chequeo para verificar el estado del bebe Potter" Harry suspiro hasta ahí llegaban sus intentos de mantener todo en secreto

-¿QUE SIGNIFICA ESTO? ¿COMO ES QUE ME TENGO QUE ENTERAR POR EL PERIODICO QUE MI UNICA HIJA ESTA EMBARAZADA?- la cara de la señora Weasley era siniestra, hasta Harry sintió que la piel se le erizaba, el chico de ojos verdes miro a Ginny y no pudo evitar sonreír es que la valiente y osada pelirroja que parecía no temerle a nadie ni nada estaba helada y su mandíbula temblaba ferozmente a la vez que sus hermosos ojos castaños brillaban de sobremanera...es que después de todo una madre es una madre-CONTESTAME GINEVRA- el nuevo grito de Molly saco a Harry de sus pensamientos y lo trajo a la realidad; recordó las palabras del medico "reposo absoluto"

-Molly esta es nuestra casa, nuestra habitación así que te suplico que te calmes, comprenderás que por el estado de Ginny no puede tener sobresaltos- la cara de la Sra. Weasley se ensombreció; recordó la maldición cruciatus que había recibido su pequeña...y su nieto –estoy calmada- bufo la señora Weasley dándose la vuelta para que no la vieran llorar y exclamando con una profunda voz de pena – es que siempre pensé que yo sería la primera persona que se enteraría...era mi pequeña- termino la señora Weasley en un sollozo tan estridente que hasta Harry se sintió culpable –mamá lo siento...era por nuestra seguridad- dijo la chica llevándose inconscientemente una mano al vientre – el sollozo de la señora Weasley aumento en intensidad después de esa declaración –desconfías de tu propia madre-

-fui yo Molly, lo siento - dijo al fin Harry –alguien de nuestro lado esta pasando información, por lo que queríamos mantener el secreto- Molly se escandalizo –yo nunca le hubiera dicho a nadie-

-lo sabemos, pero era mejor que nadie supiera al menos por un tiempo- la señora Weasley suspiro resignada –bueno al menos vas a permitirle un abrazo a tu madre, para felicitarte- la pelirroja asintió y se dejo envolver en sus calidos brazos, cuanto había necesitado de su apoyo durante este tiempo-a ti también te felicito cariño- antes de Harry pudiera oponer algún tipo de resistencia la señora Weasley lo abrazo fuertemente –pero si toda vía son unos niños, parece que fuera ayer cuando los acompañe a su primer día de clases- dijo la regordeta mujer con nostalgia –bueno Ginny creo que debes alimentarte bien, quiero que mi nieto sea fuerte y grande, voy por tu desayuno-

-¿Quién dice que será un chico?-pregunto la pequeña pelirroja frunciendo el ceño –de eso estoy segura, Palomides será un buen chico- dijo la Sra. Weasley cerrando la puerta de la habitación- Palomides- exclamó Ginny cuando Molly se marcho de la habitación-esta francamente demente si piensa que le voy a poner así a mi Galahad- Harry la observo divertido – Galahad?…a mi me gusta mas Palomides- dijo el chico con una amplia sonrisa en la cara con lo que la pelirroja respondió con un suave golpe en el pecho –con que esas?- dijo el pelinegro antes de atacarla con cosquillas –alto, alto- dijo la chica entre risas –el muggle dijo re po so- Harry se puso serio de repente –tienes razón Gin, estas bien?-

-no mucho-

-¿Qué sucede? ¿te sientes mal?- la chica hizo un mohín- si me duele aquí- dijo Ginny señalándose el cuello Ginny, Harry entendiendo lo que la pelirroja quería le empezó a besar el cuello lentamente –estas mejor ahora –susurro el pelinegro en su oído –no, aun no- dijo la chica, Harry continuo besándola recorriendo el camino del cuello hasta sus labios y cuando la pelirroja le cruzaba la cintura con una de sus piernas se detuvo –Ginny el medico- dijo el chico conteniendo la respiración -¿Qué medico?- dijo la chica mientras besaba apasionadamente los pectorales de Harry –re po so- termino el chico de ojos verdes en un gemido –maldición – bufo la pelirroja dejándose caer en la cama con la vista al techo –una semana.- dijo Harry en la misma posición de pronto una sonrisa apareció en la cara del chica –sabes pensé que sería peor-

-¿Qué? Esperar la semana?-

-no, lo de decirle a mamá…pensé que se lo tomaría peor-

-esta feliz Gin, es su primer nieto y es su única hija la que se lo va dar claro que esta feliz- dijo Harry al tiempo que le acariciaba lentamente la cabeza a la pelirroja –pero aunque este feliz, que ni se imagine que le voy a poner Palomides a mi primer hijo, primero muerta-

-bueno, Galahad tampoco es un bello nombre- dijo Harry mas para el que para Ginny - ¿no te gusta?- dijo Ginny con asombro –mmm tal vez para un perro o un caballo, quizás para una persona hace siglos atrás pero no para mi hijo- las pelirroja frunció el ceño no le gustaba que le llevaran la contra –si tienes una idea mejor dila-

-mmmm que te parece Stivens- dijo Harry sutilmente a lo que Ginny estalló en carcajadas – ¿Stivens? No puedes hablar enserio- dijo la chica afirmándose el estomago para evitar reírse, pero se detuvo al ver que Harry tenía en el rostro una mueca sepulcral - ¿por qué? ¿Qué tiene Stivens?- pregunto el pelinegro preparado a escuchar el argumento de la chica – mi hijo no tendrá un nombre tan estirado- dijo la chica tan seria como el

-¿estirado? Mmmm, tal vez- dijo Harry pensativo, Ginny lo abrazó fuertemente – amor por que no esperamos a que nazca y ver cara de que tiene- el chico d cabellos negro sonrió al pasar por su cabeza la imagen de la pelirroja con el pequeño en sus brazos –tienes razón Gin, esperemos al nacimiento- dijo el chico levantándose de la cama -¿ya te vas?-

-sip, tengo mucho que hacer- la chica se cruzó de brazos con una mueca triste –no es justo tu te marchas y yo me debo quedar en cama-

-Gin es una semana, luego volverás a reintegrarte, vamos ¿qué es una semana? Nada- dijo el pelinegro besándole la frente suavemente –quédate en la cama y no te muevas por nada del mundo-

-palabra de niña exploradora- dijo la pelirroja con una sonrisa

-mmm tú nunca has sido niña exploradora ¿verdad?- dijo el chico antes de desaparecer por la puerta del baño.

Bajaba rápidamente la escalera, estaba atrasado, tenía tantas cosas que hacer, pero le era inevitable quedarse un rato mas con Ginny, su Gin, esa pelirroja que le volvía loco y hacía que el resto del mundo careciera de importancia. El pelinegro entró a la cocina por una tasa de café su vicio habitual en esos tiempos, ni se inmutó cuando vio a varios miembros de la orden ahí reunidos, ni tampoco dijo nada cuando todas las miradas se dirigieron hacia el, después de todo no tenía tiempo para conversar, tampoco hizo el ademán de defenderse cuando Charlie se acercó peligrosamente hacia él con el periódico en la mano –NOS PUEDES EXPLICAR QUE ES LO QUE QUIERE DECIR EL PROFETA- Harry solo siguió echando el café a su taza sin prestar atención al pelirrojo, Charlie exasperado lo agarro de un brazo obligándolo a voltearse –no me toques- susurro el pelinegro con sus ojos inexpresivos y los labios tensos, Charlie lo soltó inmediatamente. Harry jamás se había dirigido hacia él de esa manera, así le hablaba a los mortifagos, a sus enemigos y era ahora que el pelirrojo entendía por que huían apenas el chico de la cicatriz llegaba, esos ojos eran de temer, parecían dos trozos de vidrio verde solamente la indiferencia se veía reflejados en ellos, Charlie se alejo un poco sin perder el temple altivo que tenía hace dos segundo, después de todo el Weasley era un Gryffindor – si ayer permití que me golpearas fue por que me lo merecía, pero no por eso dejare que te metas en mi vida, ni tu ni nadie me va a pedir explicaciones sobre lo que hago o dejo de hacer esta claro- dijo eso ultimo mirando a todos las personas que estaban en la cocina especialmente a los pelirrojos, Charlie iba a replicar pero en esos momentos entro la señora Weasley, que volvía de llevarle el desayuno a Ginny, junto con el profesor Dumbledore, la señora Weasley se puso seria al sentir la tensión en el ambiente en cambio Dumbledore hizo como si nada y entro a la cocina con una gran sonrisa

-Harry me enterado de todo felicitaciones- el pelinegro esbozo una sonrisa sincera, por mucho que peleara con el anciano director no podía dejar de quererlo como un abuelo, así que feliz respondió al abrazo que el Albus le ofrecía, el hecho de que Harry contara con el apoyo del director al parecer relajo el ambiente – así que un nuevo miembro en la familia- dijo alegre Fred –espero que tenga nuestro encanto- corroboró George – por su puesto que no, Palomides será un mago decente- Dijo Molly Lanzándole una de sus terribles miradas a los gemelos –Palomides! Estas loca que manera de desgraciarle la vida a ese pobre niño madre- la cocina irrumpió en carcajadas después la llegada de un niño en la familia Weasley siempre era un motivo de alegría.

El rubio entró molesto al despacho la bolsa muggle había tenido una caída y si el no tomaba acciones rápidas podría interferir en sus negocios, eso le pasaba por ampliar el mercado, lanzo el maletín al sillón, se disponía sentarse frente a su escritorio cuando la silla se volteo inesperadamente

-¿qué haces aquí? Quieres que me maten- dijo el rubio molesto –tranquilo Draco por su puesto que nadie me vio, necesitaba comunicarme contigo-

-y la red flú- el chico suspiro hastiado –vamos Draco sabes que puede estar intervenida- el pelinegro sonrío lo que hizo que Draco se relajara -¿comó esta Ginny?-

-bien, los dos están bien parece que mi hijo es fuerte- dijo Harry con una sonrisa –supongo que no has venido a comentarme la salud de tu familia- dijo el rubio con su sonrisa arrogante – por su puesto que no- Harry se puso serio de repente – he venido por dos cosas, la primera hay que eliminar a Zabini- el rubio abrió los ojos sorprendido, sabía de las sospechas para con el chico, pero nunca pensó que fueran ciertas, el confiaba en Zabini- estas seguro Harry, yo se que tal vez no es una buena persona, pero estoy seguro de que sus lealtades no están con el señor oscuro- el chico sonrió burlón

-da lo mismo donde estén sus lealtades, esta pasando información falsa, además sabe de Giselle y de ti, no puedo permitir que les pase nada, si Voldemort se entera de que son espías sería su fin- Draco sintió un escalofrío por su espalda odiaba verse en este tipos de dilemas, pero en fin eran gajes del oficio, nunca le habían dicho que ser espía era sencillo –hazlo pero tiene que ser pronto mañana tiene reunión con el señor tenebroso, si no le ha dicho nada mañana es seguro que lo hará- Harry asintió conforme

-Draco debo decirte algo- el rubio se puso serio no era normal que Harry se demorara tanto para darle una noticia –Tristán ha vuelto, ahora trabaja para Voldemort- el silencio cayó pesado como una loza sobre los dos magos, ambos sumidos en sus pensamientos respecto a lo que la noticia significaba

–es imposible, lo sabría por Nott me entero de cada reclutamiento, además si trabajara para el ya me hubiera delatado, es imposible Tristán no puede ser uno de ellos era nuestro amigo, era tu hermano, no nos traicionaría-

-mira Draco yo también tengo mis dudas no sabes cuanto lo he pensado pero nada me calza, por que Tristán nos iba a mentir, a nosotros que siempre hemos sido un trío, a Miky, además tu no lo viste, su cara sus ojos no era el mismo, mira hay que hacer todo lo posible por averiguar que ha pasado pero si estoy frente a él y tengo una varita en la mano no dudare en matarlo, no me puedo permitir dudar, Tristán del lado enemigo puede inclinar la balanza-El rubio asintió con pesar por mucho que quisiera al risueño chico y por mucho que dudara que ese joven alegre y de aspecto inocente que conocía hace años pudiera ser un mortifago, Harry no dejaba de tener razón, aunque fuera una pequeña posibilidad, solo el Hecho de que Tristán prestara su ayuda al señor tenebroso, podría significar el fin del mundo tal y cual lo conocían –lo último que quiero decirte, es mas bien un favor, anda este año a la fiesta que dará el ministerio- dijo el pelinegro suplicante –olvídalo Harry, no iré sabes que lo detesto- el pelinegro suspiro –Draco sabes que no te lo pediría si no fuera necesario, Blaise estará ahí y necesito que me informes de sus pasos, después de todo esta será su última noche- una tétrica sonrisa, que el rubio conocía muy bien se poso en los labios de Harry, Draco reconocía muy bien la sonrisa de batalla de su compañero.

El sujeto dormía tranquilamente, a pesar de estar gravemente herido, bajo la miradas sorprendidas y asustadas del resto de los demás mortifagos, el chico era joven no tenía mas de veinte años, sin contar que era nuevo y ya tenía a su mando todo un escuadrón, era poderoso claro por algo había soportado mas de una hora el cruciatus y después se había puesto de pie, es que el lord había estado furioso después de enterarse que tuvo a Harry Potter y a la traidora a la sangre que lo acompaña y que se hubieran escapado frente a sus narices, es que todos sabemos que el señor tenebroso no perdona – parece que al lord no le gusto el error del nuevo- murmuro uno de los encapuchados – al lord no le gusta las fallas de nadie- dijo el segundo sujeto acercándose lentamente al cuerpo que yacía en el suelo – pero si no es el niño bonito de Hogwarts- el sujeto tomo fuertemente los cabellos rizados del hombre herido – el engreído Ravenclaw, es que tu inteligencia no te permitió salvarte de esta- el muchacho bajo la túnica reconoció la afiebrada voz enseguida –Nott- dijo en un débil susurro levantado la cara para mirar directamente la mascara del mortifago –Sands, pero que diablos le pasó a tu afamada belleza- Nott no pudo dejar de sorprenderse al ver al, antaño, guapo chico que había ocupado sus mas eróticos sueños, después de Potter claro, consumido, marchito, miserable, ya nada parecía vivo en el, ni los presos que rescataban de Azkaban tenían ese aspecto acabado – es que Potter no te pudo defender- logro gesticular al fin con una sonrisa burlona en su rostro, es q ver a uno de sus mas grandes enemigos, por mas deseable que fuera, en esta situación no dejaba de ser sublime, una mano fría como la muerte rompió su sonrisa empujándolo contra la pared –no me vuelvas a tocar Nott, no lo vuelvas a hacer si es que aprecias tu vida- el castaño estaba sorprendido hace un rato el chico parecía casi muerto y ahora lo inmovilizaba con una fuerza sorprendente – no eres nadie para amenazar Sands, mírate estas desecho tal cual como una rata de alcantarilla debiera estar, tal como lo que eres… todos sabemos que clase de sangre corre por tus venas por que por muy Sands que seas tu padre era una squib y tu madre una asquerosa muggle, ya ni siquiera tienes a Potter cuidándote la espalda… a todo esto ¿qué dice el cara rajada ahora que estas de nuestro lado?- Nott sintió la fría mano de su adversario cerrarse en su cuello – yo creo que el que no esta para amenazas eres tú, solo es cosa de cerrar mi puño para acabar contigo, no te vuelvas a meter con mis padres –terminó el chico en un susurro capaz de congelar el Sahara, el castaño sintió un escalofrío casi erótico al ver esos ojos pardos que solo reflejaban hielo y hacían al pelinegro mas deseable a los ojos del chico de aspecto afiebrado – y sobre Potter solo esta viviendo un tiempo prestado- dijo Tristán soltando al fin al otro chico que respiro aliviado –ahora que somos compañeros, solo te diré que al señor oscuro no le agradan los errores, no vuelvas a dejar huir a Potter si no quieres volver a sufrir otro castigo como este, tienes suerte que el lord te haya perdonado- el chico de cabellos negros formo una mueca retorcida parecida a una sonrisa –no nos mezcles en la misma frase Nott, solo servimos al lord, pero jamás seremos compañeros-el castaño solo sonrió confiado –eso lo dices ahora, pero al final aquí todos necesitan mis favores si quieren sobrevivir, todos-

-lo puedo imaginar, sobre todo Pansy, tu fiel y amada esposa- Nott abrió los ojos sorprendido por un segundo antes de hacerlos disminuir a dos escrutadoras líneas – ¿Qué es lo que sabes bastardo?- preguntó el chico haciendo que sus palabras destilaran veneno –nada querido Teo, solo quería comentar contigo su feliz embarazo, me imagino que estarán contentos es su primer hijo, el primer hijo de los dos- Tristán pronuncio esa oración con la ironía fluyendo por cada uno de sus poros - ¿qué es lo que quieres decir?-

-ya te lo dije solo comentar lo feliz que se debe sentir un hombre, cuando la mujer que ama espera a su hijo- dijo el chico de cabellos negros marcando especialmente las ultimas dos palabras antes de marcharse dejando a un pensativo Nott.

Draco se paseaba entre la alegre gente de verdad estos acontecimientos le cansaban no entendía como esta gente podía ser tan frívola, afuera había una guerra cada día morían hombres y aquí en este lujoso salón la clase privilegiada de la comunidad mágica divirtiéndose a base de las contribuciones de los magos humildes y trabajadores. Los adinerados, los que finalmente tenían el poder económico para decidir el destino de los magos de Gran Bretaña... los que decidían enviar a la muerte a los aurores, los que decidían como los jóvenes aurores iban esta vez a entregar la vida si de frente, por detrás, de sorpresa... en fin los q decidían como se iba a utilizar la carne de cañón y mientras el resto arriesgaba la vida para proteger sus rastreros culos, no hallaban nada mejor que juntarse en un ostentoso baile para celebrar el principio del verano francamente estos riquillos eran de lo peor, una sonrisa irónica se poso en la cara del rubio... después de todo él era uno de ellos –Draco que sorpresa tenerte por aquí – dijo una señora robusta enfundada en lo que era una gran túnica fucsia con adornos de plata- hace tiempo que no te veíamos por estos lados querido, y veo que has vendo solo- dijo la dama alzando las cejas de manera sugerente – así es Eloise, he estado ocupado, ya sabes los negocios, aun así me he enterado de que tu esposo esta haciendo un gran trabajo, no me sorprendería q un día de estos ganáramos la guerra- dijo el rubio con una gran sonrisa, dirigiendo sus grises ojos hacia el ministro que trataba de captar desesperadamente la atención de su colega Francés que Había sido invitado a esas festividades – si querido, aunque entre nos esta situación de la guerra me tiene harta, imagínate hay una escasez, ni te cuento, no sabes lo que me costó conseguir la tela para mi túnica de hoy, la compre en el mercado negro, un ojo de la cara, todo por culpa de esta maldita guerra- Draco solo asintió, tratando que la perplejidad no se notara en su rostro.

– pensaba que no te gustaba esta clase de eventos- Pregunto una suave voz detrás del rubio, después que este había logrado escapar casi por milagro a la mirada acosadora de la esposa del ministro, Draco se volvió para encontrarse con Giselle, debía asumir que esta noche la joven bruja se veía mas resplandeciente que de costumbre, llevaba una túnica color verde agua que hacía juego con sus ojos, simple, tal vez demasiado, pero que definitivamente le quedaba encantadora y unas bellas flores decorando su corto cabello castaño –estas hermosa- le dijo el rubio a su ex-compañera de estudios –lo se- afirmo esta con seguridad, como solo una digna Slytherin lo sabe hacer, Draco solo sonrió –y tu ¿qué haces aquí? Siempre pensé que los Rylee no se llevaban muy bien con el ministerio- la chica sonrió ampliamente mostrando sus parejos y blancos dientes –vine con Blaise- Draco ya lo sabía no había perdido al chico de vista desde que este había llegado de mano con Giselle –parece que las cosas al fin van bien- la chica no logró evitar sonrojarse –no como crees, solo lo acompaño ya sabes "trabajo"- pero ese sonrojo había sido demasiado delatador para el rubio que sabía que el corazón de su amiga era lo mas parecido que conocía a un témpano de hielo, sintió un dolor en el pecho al imaginarse lo que iba a sentir a la mañana siguiente al enterarse de la muerte de Zabini, le dolió si bien Blaise no le importaba en absoluto debía reconocer que la fría y calculadora Giselle Rylee despertaba su simpatía, siempre pensó que su madre debió parecerse a Giselle en su juventud, pero el hecho de que sintiera algo por Blaise no era nada bueno podrían perder a una aliada si Harry hacía lo que tenía pensado

–y tú? tú si que no acostumbras a venir por estos lados- dijo la chica sacándolo de sus pensamientos –yo solo, ya sabes "trabajo"- Giselle solo le guiño un ojo de manera cómplice – no me sacas a bailar?- Draco sonrió ante lo descarada de la propuesta, Giselle era lo atípico de la alta sociedad mágica, probablemente por eso Zabini estaba enamorado de ella desde la escuela, ninguna otra chica en ese lugar iba a invitar a un hombre a bailar

– por su puesto- dijo el rubio tomando una mano de la delgada bruja para arrastrarla ala pista de baile, Draco La tomo por la cintura al tiempo que empezaba a sonar una lenta melodía, ella recostó la cabeza en el pecho del chico, Draco se incomodo por tal muestra de afecto, ya que por mucho que conociera a Giselle ella nunca se comportaba así con el, esas muestras de cariño no eran para las frías serpientes –¿que trama Harry?- le susurro despacio, Draco sonrió ese era el motivo de tanto cariño; información, era mejor así después de todo ese tipo de cosas le recordaban a cierta pelirroja-sabes cariño que eso no te lo puedo decir- dijo el rubio con una media sonrisa al tiempo que separaba a la chica de él para hacerla girar – se que no es nada bueno, se que se quiere reunir conmigo- susurro la castaña cuando volvió a estar cerca del chico –antes eso no te molestaba- sintió el cuerpo de Giselle tensarse bajo sus brazos, la chica lo miro a los ojos y Draco se sintió un ser despreciable, el dolor estaba presente en sus ojos verde agua que generalmente eran de hielo – lo siento- dijo al fin –no te preocupes yo estoy bien, me entere de lo del bebe, por mi que sean felices se lo merecen- Giselle trato de que la voz no se le quebrara al terminar

- estoy preocupada, se que Blaise no tiene mucho que ver con nosotros pero si el cae caemos todos no lo podemos permitir, el señor tenebroso lo tiene fichado mañana hay una reunión, Blaise cree que no pasara nada que el señor oscuro confía en el, pero yo tengo un mal presentimiento hace días no puedo dormir tengo miedo, no quiero que el lo mate no quiero morir- Draco y Giselle seguían danzando, la chica hablaba muy rápido en un susurro casi sin mover los labios y con una luminosa sonrisa en el rostro, solo el miedo se filtraba a través de su voz– tengo miedo Draco, dile que necesito su ayuda, el sabe donde buscarme- la música había dejado de sonar, Giselle y Draco se habían separado y ambos sonreían –no te preocupes- dijo el antes de conducir a la chica fuera de la pista.

Estaba francamente molesta, le encantaba trabajar en el ministerio, era un honor que se lo pidieran considerando que aun estaba en la academia, además podía enterarse de todo de primera mano, aun así era en momentos como este que odiaba su trabajo, odiaba las fiestas, odiaba la gente que iba a ellas un grupo de arribistas insensibles que la miraban de arriba a bajo por no llevar una túnica de ultima moda, pero definitivamente el sencillo vestido color arandano era lo único que su sueldo podía costear, definitivamente a la persona que mas odiaba era a Marietta, la pelirroja amiga de Chang, al parecer la chica aun no había olvidado el hechizo chivatus que Hermione le había lanzado en su quinto año, por lo que cada vez que podía se paseaba del brazo de uno de Los solteros de turno y le hacía sentir que ese no era su lugar –Hermione querida, al parecer las liquidaciones este año estuvieron mejor, casi no se nota que tu túnica es de la temporada pasada- dijo con una amable sonrisa mientras el chico que la acompañaba un castaño de cabellos rizados hacía de todo para contener la risa, ese había sido el saludo de la escuálida muchacha, Hermione se mordió la lengua después de todo ese no era su lugar, eso lo tenía claro y no era gracias a personas como Marietta si no que era todo lo que ese sitio significaba, además no podía darse el lujo de perder su trabajo por una riña escolar- ¿así lo crees Edgecombe?- pregunto una voz que arrastraba las palabras –pues yo pienso que tu casi puedes disimular que tienes cerebro, linda- termino el rubio platino- ante una visiblemente ofendida chica, al ver q el acompañante se abalanzaba con intenciones claras de golpearlo, Draco se paro con todo el desplante que su porte aristocrático se lo permitía y con una mirada de superioridad le dijo

-no querrás arruinar tu carrera antes de que halla comenzado, verdad, nadie golpea a un Malfoy y sale libre de esa- el castaño se detuvo en el acto y tomo a Marietta de un brazo mientras se alejaban rápidamente, aun se podía ver como la chica le discutía. Hermione que había estado aguantando la risa hasta ese momento, recupero la compostura – no necesito que me defiendas Malfoy- dijo la chica seria, por muy amigo que fuera de Harry ella no se fiaba del rubio mucho la había humillado en su vida como para creer que de la noche a la mañana era un buen chico, Draco la miro confuso, la acaba de defender de una de las chicas mas odiosas del ministerio y ni un solo gracias, pero sonrió después de todo verla ahí con su cabello liso y sedoso, seguramente había pasado toda la tarde alisándolo por que usualmente lo usaba en un moño bastante apretado que por lo menos le agregaba cinco años a su edad actual, aunque lo que había logrado quitándose el moño se esfumo cuando se puso ese vestido, lamentaba Reconocerlo pero Marietta tenía razón, esa túnica estaba bien pero para su abuela, esa chica no tenía idea del buen gusto que va claro que no tenía idea si andaba con Weasley no, definitivamente no tenía idea de lo que significaba la palabra gusto -¿qué me miras?- con esa frase lo saco de sus pensamientos –yo... yo solo deseaba saber si bailarías conmigo una pieza- Draco logro recuperar su porte arrogante y su sonrisa avasalladora para el final- no- dijo la chica simplemente y dirigió su copa a los labios – vamos estoy cansado de que la gente se me acerque a comentar lo de Harry y su bebe... además conozco a esta gente demasiado bien como para saber que la única persona que se te acercado esta noche es Marietta- Hermione se mordió los labios en un gesto que al rubio le pareció encantador, después de todo él tenía razón, siempre venía a estas fiestas con la intención de enterarse de algo importante, pero claramente solo venía a perder el tiempo, los eventos sociales del ministerio, solo eran para presumir que todo estaba bien y que las señoras de sociedad siguieran mostrando sus vestidos y su cristalería fina, además nadie se iba a acercar a una empleaducha a comentar algo y más si su sangre no era cien por ciento pura, no sabía por que se esforzaba tanto por conseguir una invitación si al final siempre terminaba igual apoyada en una pared bebiendo ponche sola – esta bien acepto- Dijo al fin la castaña –pero solo una pieza-

La noche caía luminosa sobre Londres, las estrellas al parecer habían escogido esa noche en particular para mostrar todo su esplendor, hacía meses, tal vez mas de un año, quizás dos que Harry no las miraba como lo estaba haciendo esa noche, que no las miraba con ira, como si ellas fueran las culpables del mal que rodeaba su vida, como si ellas escondieran el secreto que le impedía alcanzar la tranquilidad, las odiaba, cuando al fin su vida traía algo de calma estas se rebelaban cambiándolo todo nuevamente, el hecho que Tristán hubiera aparecido no era nada bueno, ya una vez se había llevado con el un trozo de su alma, no lo resistiría de nuevo o mas bien temía que Ginny o que Miky, no lo resistieran de nuevo, se Pasó las manos por la cara cansado, lo que iba a hacer no le gustaba nada, no era la primera vez que daba una mala noticia la peor de todas fue decirle a Ginny que ya no tenía padre, es que cuantas muertes tendrían que soportar antes que todo esto terminara. La brisa suave del verano le acarició el cabello lentamente, era inútil que siguiera perdiendo tiempo entre más rápido sucediera mejor, además el tiempo escaseaba debía reunirse con Draco para ir por Zabini.

La gran puerta de metal estaba abierta, era extraño podría entrar cualquiera, entró al gran galpón, el que antes estaba rebosante de cuadros sobre sus paredes de ladrillos rojizos, estaba vacío, las altas ventanas antes relucientes estaban ennegrecidas por la tierra y polvo, el lugar tampoco se veía muy aseado, pareciera que nadie viviera ahí resuelto subió por la escalera de caracol que conducía al altillo, el lugar no era mucho mejor que abajo, los atriles, pinturas y cuadros estaban desperdigados por el suelo, la loza se acumulaba en la pequeña cocina, por un momento creyó que el altillo había sido el lugar de una pelea pero se relajo al ver que en el colchón que estaba en el suelo había un bulto que se movía acompasadamente entre medio de las desordenadas mantas, el chico de ojos verdes se acerco lentamente y pudo distinguir los unos despeinados cabellos negros y unos hinchados y ojerosos ojos castaños que miraban el infinito, le dolió el pecho al verlos en otro tiempo habían sido hermosos y llenos de vida como los de Tristán –Miky- susurró pero la chica ni se inmuto seguía sumergida en la bruma, Harry se sentó lentamente en el colchón, el Grifo que dormía a un lado se despertó y le gruño fieramente –tranquilo Mordred soy yo Harry- al parecer eso le basto a la bestia por que se volvió a dormir tranquilamente, el pelinegro tomo a la chica en sus brazos y la atrajo hacia el, empezó a acariciarle lentamente el oscuro pelo, estaba delgada quizás hacía cuanto que no consumía alimento, se sentía culpable, Debió preocuparse mas por ella pero es que después de la desaparición de Tristán la búsqueda ocupo casi todo su tiempo, después la boda con Ginny y ahora el bebe, pero no tenía excusa Miky era su amiga la quería demasiado debió haberse preocupado por ella, un sollozo lleno de angustia lo saco de sus cavilaciones, Micaela había reaccionado para aferrarse al pecho de Harry y llorar amargamente.

La pelirroja se despertó suavemente al sentir unas grandes manos acariciándole lentamente el cabello, al instante supo que esas no eran las manos de Harry, su esposo tenía los dedos largos y finos y algo más suaves que el chico que le hacía cariño, ese chico era sin duda Charlie, podría reconocer sus dedos gruesos, nudosos y ásperos, debido a su trabajo, Ginny se volteo para encontrarse con sus gentiles ojos azules -¡Charlie!- exclamo contenta al tiempo que lo abrazaba fuertemente – aunque quiero que sepas que no te perdono por faltar a mi boda- el chico sonrió - lo siento pequeña, pero no he estado libre ni por un segundo, necesitamos a los dragones para enfrentar a Voldemort y ahora que Tristán no esta es todo mas difícil-

-pero te has hecho un tiempo para venir a vernos- pregunto la chica feliz, el pelirrojo se puso serio –no Ginny, me entere de tu secuestro por eso viene- la chica bufo –cuanto lo siento Charlie, de verdad siento haberte preocupado-

-sinceramente ahora estoy mas preocupado que antes... un bebe Gin en que rayos están pensando- la pelirroja se separo de su hermano y se puso seria

–yo sé que la guerra no es el mejor momento para traer un niño al mundo, pero este niño va a nacer y tendrá todo el amor de sus padres, Harry y yo lo protegeremos con nuestra vida si es necesario- la fuerza con que hablaba su pequeña hermana, la que él consideraba la más débil de la familia le sorprendió – pero Gin no te das cuenta de que ahora eres un Blanco mas fácil para el que no debe ser nombrado-

-Charlie he sido un blanco para Voldemort desde que tengo once años, no veo que mi embarazo cambie la situación ahora, y respecto a que si soy un blanco fácil o no, si el día de mañana me tocara enfrentarme a él créeme que no tendría oportunidad, embarazada o no el me mataría como una mosca, mi magia son trucos de feria al lado de la de él y lo he podido comprobar por mi misma mas de una vez, pero no por eso debo dejar de vivir mi vida y hacer todo lo posible para que la criatura que crece en mi vientre tenga un mañana y no cualquier mañana un mañana feliz, no te diré que no tengo miedo, todo lo contrario estoy aterrada hemos visto desaparecer a nuestros amigos, a magos mas poderosos que nosotros, a otros unirse al otro lado, hoy mismo no tenemos muchas posibilidades de ganar la guerra de hecho puedo afirmar que si estamos vivos nos es mas que por mera suerte, un capricho del destino, o tal vez agradecer que Voldemort aun le tema al niño que vivió y no se atreva a atacarlo de frente, por que cuando ese día llegue nuestra suerte será echada y nuestra condena firmada, por que todo dependerá de quien es mas poderoso y créeme que ruego todos los días por que ese hombre sea Harry, si definitivamente tengo pánico, no de morir, por que creo que lo que estamos en la lucha hemos asumido desde hace mucho que la muerte puede ser el costo de nuestras acciones, la elección que hacemos es luchar y el riesgo que corremos es la muerte, aunque tenemos claro que hay riesgos más terribles, pero eso no es lo que me aterra lo que me preocupa es traer un niño al mundo a sufrir, a que mi pequeño o pequeña sufra la infancia que tuvo Harry o que simplemente su vida se extinga antes de poder apreciar las maravilla de la vida, antes de alcanzar la felicidad, antes de que pueda ser un hombre o una mujer de bien – lagrimas silenciosas surgieron por los ojos castaños de Ginny – Charlie quiero que sepas que en ti confío como en nadie, eres mi hermano mayor y se que jamás harías nada que me lastimara, te quiero pedir un favor- el pelirrojo solo asintió lentamente estaba sorprendido de la mujer que le hablaba ya no era su hermana pequeña, ya no era la niña que tenía que defender del resto, era su compañera de lucha, era otro miembro de la orden, era su igual –Charlie, si el día de mañana a mí y a Harry nos pasa algo, no dudes en entregarle mi pequeño a Draco- Charlie la miro sorprendido –que dices Ginny a el... -

-se que se negaran, y que probablemente debas pelear con alguien para lograrlo, pero hazlo en el es el único que confiamos para que lo cuide, prométeme que se lo entregaras a él, júralo- Ginny sostenía sus manos con fuerza y la suplica bailaba en sus vidriosos ojos, frente esa visión al chico no le quedo mas que acceder a la petición –te lo juro- el chico acerco a su hermana y la abrazo con fuerza y los dos rompieron al llanto –yo también tengo miedo Ginny, tengo miedo, miedo de que mate a Emily que le hagan daño, que nos descubran... esta mal no deberíamos temer, deberíamos ser los valientes- la chica lo abrazo mas fuerte –no esta mal temer Charlie, el que es valiente no es por que jamás haya tenido miedo, el valiente es aquel que puede enfrentar sus temores y salir de pie- el chico solo reforzó el abrazo, ese fue el gesto que Ginny necesitaba para saber que su hermano le había entendido.

Uolas… para variar siento cantidad el retrazo pero en fin ya saben mi vida es una caja de sorpresas q no siempre son agradables ahora no actualizo hasta muchos muchos rr, por lo menos hasta los 25 espero q de verdad les guste y aquí contesto rr

Delaila: bueno aquí esta lo que pediste: la actualización.

Ely: gracias

Yamila: agradezco q leas mi fics, pero si no lo sabes yo actualizo cuando puedo no cuando quiero, estudio y para mi eso es mi prioridad… en fin no dedico mi vida a escribir fanfics, y si Tristán es el hermano de Harry, a través de un vinculo magico q espero explicar en la precuela en el próximo chap… espero q sea pronto.

Amatxo: aquí esta, lo prometido es deuda

Tabata. Muchas gracia y dejame decirte que tus fics tb me encanta asi q tu tambien continua pronto

Al resto solo mi enorme gratitud y no saben lo feliz q me hacen los rr, no por q sean un numero o una puntuación o una critica, es solo la satisfacción de q gente lee lo q uno escribe y al parecer le gusta… espero actualizar pronto.

Besos

Yo.