Capítulo 7
- "Hola preciosa…", escuchó Harry. Por un momento no supo quien estaba hablando, hasta que se vio a si mismo mover los labios.
- "Hola amor mío", respondió la Ginny de la memoria. La Ginny verdadera estaba en shock. No podía ser que ella hubiera dicho eso. Acaso estaba loca?
- "Estas… hermosa…mi vida", siguió la memoria, Harry le acomodó el cabello detrás de la oreja. Harry y Ginny se pusieron rojos como tomates. Harry no sabía que estaba pasando. Era una broma esto? Como era posible que no recordará nada de esto? Realmente había pasado?
- "Gracias por el cumplido, guapo…", contestó la Ginny de la memoria arreglándole el cabello al Harry de la memoria. La verdadera Ginny estaba tan roja como su propio cabello. No podía creerlo, seguramente era una broma. Ninguno de los demás hipnotizados había hecho algo así. Simplemente respondían a las preguntas del Hipnotizador. Ellos parecían hablar… Ginny sintió un escalofrío… como si se conocieran de hace mucho tiempo…
- "Siempre estaremos juntos, no es así?", dijo Harry sonriéndole.
- "Para siempre juntos…", contesto Ginny devolviéndole la sonrisa.
- "Para siempre…", dijo Harry en un susurro mientras la besaba en los labios.
- "Hasta después de la muerte…", dijo Harry apenas audible mientras se alejaba de ella.
Harry y Ginny no sabían que decir. Seguían muy rojos. Hermione tenía los ojos llorosos.
- "Pero… como? Quiero decir… que es esto?", preguntó Harry totalmente confundido cuando la memoria acabó.
- "Pero es que Harry, no lo entiendes?", contestó Hermione sonriente. "Ustedes dos se amaron en otra vida…", terminó de decir. Todos los que presentes guardaban silencio.
Para Harry fue como una revelación. A su mente llegaron todas aquellas imágenes sobre Ginny, su carácter, su humor, su inteligencia, su comprensión, su tristeza, su fortaleza… recordó todas las veces que Ginny lo había escuchado, comprendido, cuando le daba consejos, todo lo que ella hacía por él. Y él nunca le había dado nada a cambio. Se sintió culpable de pronto. Amaba a Ginny, ahora lo sabía.
Ginny estaba callada. Había visto todo como en un sueño. Harry y ella diciéndose que se amaban, no era posible. Habría sido realidad en otra vida? Miró a Harry. Descubrió confusión en sus ojos. Tristeza? Esos ojos verde parecían reflejar… ¿decepción?... Ginny lo comprendió de pronto todo: Harry nunca la amaría, al menos no en esta vida. Harry había esperado estar con Cho en la memoria, no había duda. Ahora estaba decepcionado de haber vivido un amor con Ginny en otra vida. ¿Por qué Harry no podía fijarse en ella? ¿Por qué ella no podía ser como Cho? Si Harry se fijara en ella, sería tan feliz, jamás lo dejaría de amar cada día más. Pero no… jamás sucedería tal cosa… Se dio cuenta de que todos la miraban. Debía parecer una tonta, ahí parada en medio de todos sin saber que decir, habiendo arruinado los sueños de Harry…
- "Lo siento mucho Harry, sé que querías estar con Cho…lo lamento tanto…", dijo Ginny al borde de las lágrimas. Salió de la sala común en medio de la confusión que reinaba e el ambiente.
Harry se quedó paralizado. No había asimilado lo que había dicho Ginny. Vio a Hermione y a Ron. Lo miraban expectantes igual que todo el mundo. Hermione parecía decepcionada. Es mas, parecía cansada.
- "No lo entiendes Harry,..", preguntó Hermione con tristeza. Harry no dijo nada. No podía comprender todo esto. "Ella te ama, Harry…", concluyó Hermione casi sin voz. Estaba a punto de llorar. Ginny había sufrido demasiado. Ron estaba atónito por lo que acababa de escuchar.
- "Que Ginny que?", dijo Harry intentando comprender. No era posible. ¿Ginny lo amaba? Simplemente no era posible. Ginny no se merecía a alguien como él. Ella era demasiado para él. El no valía nada.
- "Por eso está tan callada y triste últimamente…", dijo Hermione lentamente. Harry comprendió todo de pronto. ¿Acaso él era la causa de la tristeza de Ginny? Se sintió más culpable todavía. ¿Por su causa Ginny lloraba? No podía ser. Ginny merecía mucho más que él. El no era nadie para ella. Pero él la amaba. ¿Acaso había una oportunidad? La respuesta la halló en los ojos de Hermione. Debía ir con ella. Debía seguirla. Entonces no lo dudó ni un segundo. Salió corriendo a toda velocidad por el retrato de la sala en busca de Ginny. Sabía donde buscarla. Ginny debía estar en su lugar favorito, bajo el árbol cerca del lago.
Mucha gente en los pasillo se quedaba asombrada. Primero una chica pelirroja corriendo. Momentos después Harry Potter, el niño que vivió, siguiéndola como si el alcanzarla fuera a salvarle la vida.
Harry tenía razón. Encontró a Ginny bajo el árbol. Estaba llorando más que antes. Se acercó a ella. Ginny tenía los ojos empañados de lágrimas y no vio a Harry acercarse.
- "¿Gin,", preguntó Harry sentándose con Ginny.
Ella volteó a verlo. El se sintió inmensamente mal al saber que él era la causa de las lágrimas de Ginny.
- "Gin… yo… yo…", dijo Harry nervioso.
- "No me tengas lástima Harry… ya se me pasará esto", dijo Ginny intentando sonreír. ¿Por qué la había seguido? Que le quería decir? Acaso… no, era demasiado para ser verdad.
- "Gin… yo te amo", dijo finalmente Harry. Su voz sonó insegura, pero era por el hecho de estar confesando sus más profundos y puros sentimientos a esa persona que amaba.
- "Harry, por favor… no juegues conmigo… es lo único que te pido…", dijo Ginny sin poder creer lo que había oído.
- "Jugar contigo? Gin, no sería capaz de hacerte eso. Ginny, en verdad te amo… más que a nada en el mundo. No sé como fui tan ciego todo este tiempo para no darme cuenta de mis verdaderos sentimientos. No sé como no pude darme cuenta que contigo siempre es diferente a con cualquier otra persona. Contigo me siento completo, me siento seguro, siento que vale la pena vivir por alguien como tú, Ginny… porque te amo…", dijo Harry lentamente. Estaba confesando todos sus sentimientos. Pero aún así no podía expresar por completo todo lo que sentía por Ginny. El sentimiento era algo mucho mas grande que las palabras. Era amor puro.
Ginny no podía creer lo que estaba oyendo. Harry era sincero, le había revelado las palabras que ella había esperado escuchar durante tanto tiempo. Su sueño se estaba volviendo realidad.
- "Harry, yo nunca te dejé de amar, cada día te amaba más. Te amo cada día más", dijo Ginny en un susurro. Harry se acerco a ella. Se veían a los ojos y leían amor. Era tan mutuo el sentimiento que podían comprenderse mejor sin palabras. Estaban muy cerca uno del otro. Sus rostros se fueron acercando. Podían sentir el calor del otro en sus caras. Respiraban el mismo aire. Sus labios se buscaron hasta tocarse, primero lenta y suavemente, luego con firmeza, pasión y ternura, comunicando todo lo que sentían el uno por el otro. Harry sintió que por primera vez se sentía completo. Ginny lloraba de felicidad.
- "Lamento haberlo descubierto tan tarde, Gin, pero ahora seguiremos con el amor que fue cortado en nuestra otra vida", dijo Harry en un susurro.
- "Para siempre, Harry?", preguntó Ginny sonriendo.
- "Desde siempre y para siempre, Gin, hasta la eternidad".