DESPEDIDAS, BIENVENIDAS Y DISCUSIONES
Ginny, Draco, Lucius, Narcisa, Blaise, Katia y el resto de sirvientes con sus hijos estaban en el patio del castillo Malfoy para despedirse de Ginny. Ginny se iba despidiendo de todos.
Katia –dijo Ginny abrazándola
Señorita –dijo ella respondiendo al abrazo y con lagrimas en los ojos
Te voy a echar mucho de menos
Quiero que sepa que usted para mi es la mejor princesa que jamas hayamos tenido
Katia, gracias, tengo algo para ti – Ginny sacó un collar de una bolsa de seda
No puedo aceptarlo, yo...
No digas bobadas, además a ti te queda mucho mejor que a mi –le dijo mientras se lo ponía alrededor del cuello -¿ves?
Gracias –volvieron a abrazarse y Ginny fue hacia la reina. Horas antes habían estado hablando y ella le había dicho que le gustaría mucho que todo fuera diferente, hablaron durante mucho rato y Ginny ya sentía que la echaría de menos.
Señora –le dijo a la reina mientras hacia una reverencia, se sorprendió al ver como esta la rodeaba con sus brazos
Tu ya eres una hija para mi, y espero que vuelvas pronto
Ginny ya estaba llorando cuando llego junto Lucius.
Señor –dijo haciendo otra reverencia, Lucius sonrió
Te prometo que haré todo lo que esté en mi mano para que tu y mi hijo podáis estar juntos y ... –pero el discurso que había estado preparando fue interrumpido por un abrazo que le dio Ginny
Se que lo hará, gracias
ve a despedirte de el –le dijo Lucius señalando a Draco
Ginny asintió y fue hacia Draco, este estaba hablando con Blaise, porque era el que la iba a acompañar hasta la frontera de su reino. De todas formas, Draco estaba mirando a Ginny de reojo, no le quitaba la vista de encima, aunque quisiera, que no quería, no podía dejar de mirarla. Vio como se acercaba a el, Draco miro a Blasie, y este fue a preparar los caballos.
Ginny, voy a ir a por ti en cuanto pueda, te lo juro, e iré a verte como antes a los jardines –dijo con la voz quebrada y abrazándola.
No, debes tener cuidado, sobre todo ahora que mis padres me van a controlar mucho para que no me vuelva escapar, te escribiré siempre que pueda, y...
Shhh –dijo Draco besándola.
Te amo
Y yo a ti, Ginny en cuanto volvamos a estar juntos, ¿querrás casarte conmigo? –pregunto sacando un pequeño estuche del bolsillo, lo abrió y dejo ver un precioso anillo de brillantes
Claro que si –dijo Ginny con lagrimas en los ojos mientras Draco le ponía el anillo y la besaba
Te echare de menos
Pronto estaremos juntos –dijo Draco besándola por ultima vez y ayudándola a subir al caballo
Ginny lo miro desde el caballo
cuídala –le dijo Draco a Blaise
con mi vida, amigo –le contesto este
¿estáis lista, señorita? –le pregunto a Ginny
si. Adios Draco
adios, Vir
Blaise y Ginny salieron rápido sin mirar atrás, Ginny no podía, si lo hacía no seria capaz de irse. Draco se quedo parado en el lugar en el que estaba durante mucho tiempo, todo el castillo lo miraba, aunque no habían oído la conversación entre Ginny y Draco si habían visto el anillo y las lagrimas, todos estaban muy apenados por la marcha de Ginny, y nadie sabía por que era, porque Draco nunca dijo nada, al igual que sus padres que eran los únicos que sabían la verdad.
Blaise y Ginny cabalgaban en silencio, pero rápidamente. Blaise había intentado iniciar una conversación, pero Ginny solo le contestaba con monosílabos. Ya estaban a pocos kilómetros de la frontera cuando Ginny paró en seco.
A partir de aquí ya puedo ir sola, mi aldea no esta lejos –Draco no le había querido decir a Blaise quien era Ginny en realidad y le había dicho que ella era de un poblado muy cercano a la frontera con los Weasley.
Como queráis, es una pena
¿el que?
Que el reino pierda a una reina como vos, señora
Gracias
El rey no nos explico los motivos de vuestra partida –dijo interesado
Ya, bueno, se hace tarde, debo volver a casa –dijo Ginny evadiendo la pregunta.
Tened cuidado, por aquí se acercan muchos Weasley –en su tono había un gran desprecio.
Tendré cuidado, muchas gracias y adiós.
Adiós
Ginny cabalgó con rapidez durante unas horas hasta llegar a la capital, donde estaba el palacio. Se acercó a la puerta de la muralla donde un guardia la detuvo, Ginny llevaba la capucha echada sobre la cara y no se le veía el rostro.
me están esperando –dijo Ginny cabalgando decidida hacia el interior
si, y a mi también, no te fastidia
¿cómo dice?
Si eres otra de esas muchachas que se viene a hacerse pasar por la princesa permíteme que te diga que el rey ya esta suficientemente de mal humor, como para que aun encima vengas a darle la tarde.
Me temo que no vengo a hacerme pasar por nadie –dijo Ginny bajándose la capucha y dejando al guardia con cara de idiota
Lo siento, mileidy, pasad por favor –dijo haciendo una reverencia
De repente a Ginny la gente de su reino le parecía idiota. Bajo del caballo y fue andando hacia el castillo, su familia ya había recibido el aviso de que había llegado y todos corrían hacia ella con los brazos en alto, la chica se dio cuenta de que la habían echado de menos y haciendo un esfuerzo los abrazó a todos aguantando las ganas de gritarles.
ginny, mi amor, te hemos echado tanto de menos
que susto, Gin –le dijo Ron abrazándola.
Hemos preparado una gran cena, hija, todos están aquí
Que bien –dijo sin entusiasmo
Y después tu y yo tendremos una charla –le dijo su padre abrazándola.
Ven conmigo, Gin, vamos a vestirte
Ginny se quedo mirando su habitación, tampoco la había echado de menos,
Gin ¿por qué lo hiciste? –le pregunto Hermione soltando la pregunta que deseaba hacer desde que la había visto.
Yo..., no se necesitaba pensar, y algo de tiempo, y poner mis ideas en claro
¿y las has puesto?
No, me temo que ahora estoy mas liada que antes –(nunca mejor dicho a lo de liada)
Estas cambiada, no pareces la misma –le dijo Hermione tras un rato
Ya, es que pensar no me sienta bien, y tu ¿qué tal con Ron?
Sigue todo igual
Si te sirve de algo, esta enamorado de ti, solo que es tímido
Pues si a ti te sirve de algo, Harry esta coladito por ti, lo paso fatal, bueno como todos.
No quería preocuparos
Pues no lo conseguiste, y deberías de pensarte lo de Harry, no puedes odiar a los hombres eternamente
Si tu supieras –dijo en un susurro
Al cabo de un rato Ginny y Hermione bajaban por las escaleras, Ginny se fijo en como miraba Ron a Hermione, con la cara de bobo que ponía siempre eso si lo he echado de menos se dijo para si Harry avanzó rápido hacia ellay la agarró del brazo casi sin que esta se diera cuenta
te he echado de menos –le dijo Harry en el oído. Ginny sonrió forzosamente y se sentó en una gran mesa llena de todos los platos preferidos de Ginny. Todos en la mesa hablaban animadamente, y comían mucho, ella no prestó atención a la conversación hasta que el tema sobre el que estaban hablando giró inesperadamente y empezaron a hablar de la guerra
¿no creéis que la guerra ya ha durado bastante?, el reino de los Malfoy es muy fuerte, si no habéis conseguido nada en 7 años no creo que lo consigáis jamas –dijo Ginny dejando a todo el mundo callado
¿cómo?
Ya me has oído, padre, el reino de los Malfoy...
Hija, la guerra terminara cuando los Malfoy estén encerrados en nuestros calabozos
¿y tu crees que así se solucionara algo?
¿que te ocurre, Gin? –le pregunto Harry
no deberías meterte en esos asuntos –le dijo Ron
esos asuntos, como tu los llamas, están provocando la muerte de tu pueblo, Ronald. Y creo que ya va siendo hora de que firméis la paz y...
¿cómo puedes decir eso? Esos malditos mataron a mas de treinta ciudadanos desarmados de TU pueblo
nunca se pudo demostrar que fueran ellos –tanto Ginny como su padre estaban gritando de pie
¿qué mas pruebas necesitas?
Sus escudos los podía haber puesto cualquiera ¿nunca pensaste en eso? ¿nunca pensaste que tal vez alguien quisiera provocar una guerra? ¡esta guerra!, esta maldita guerra que no queréis parar.
¿cómo puedes decir que yo quiero parar la guerra?
Por favor, padre, pero si atacaste a tres pueblos de los Malfoy solo con la excusa de encontrarme
¿acaso me acusas de querer encontrarte? Siento quererte, hija
¿y para eso tienes que matarlos? Podrías haber detenido esta guerra hace mucho tiempo, pero tu lo único que quieres es el reino de los Malfoy ¿acaso empezaron alguna vez una batalla?, no siempre eres tu, TU, lo único que quieres es el poder que te daría su reino
¡¡PLAF!!
Ginny quedó alucinada al ver como la mano de su padre se estrellaba directamente en su mejilla. Ginny puso la mano en la mejilla dolorida
hija, lo siento, yo...- le dijo su padre balbuceando
detén esta guerra, o pederas algo mas –dijo Ginny saliendo de la sala.
Arthur volvió a sentarse a la mesa, donde todo el mundo estaba en silencio contemplando la escena. Hermione había estado a punto de levantarse para ir con Ginny, pero Harry la había detenido.
¿de que estabamos hablando? –preguntó Arthur a sus invitados olvidando lo que había pasado.
Ginny salió corriendo y no paró hasta llegar a su cuarto, se encerró en su habitación, hundió la cabeza en la almohada y gritó el nombre de Draco desesperada.
Bueno..., ya se han separado, pobrecitos, jejeje, espero que os haya gustado el caitulo, espero vuestras opiniones!!!
Ginny, Draco, Lucius, Narcisa, Blaise, Katia y el resto de sirvientes con sus hijos estaban en el patio del castillo Malfoy para despedirse de Ginny. Ginny se iba despidiendo de todos.
Katia –dijo Ginny abrazándola
Señorita –dijo ella respondiendo al abrazo y con lagrimas en los ojos
Te voy a echar mucho de menos
Quiero que sepa que usted para mi es la mejor princesa que jamas hayamos tenido
Katia, gracias, tengo algo para ti – Ginny sacó un collar de una bolsa de seda
No puedo aceptarlo, yo...
No digas bobadas, además a ti te queda mucho mejor que a mi –le dijo mientras se lo ponía alrededor del cuello -¿ves?
Gracias –volvieron a abrazarse y Ginny fue hacia la reina. Horas antes habían estado hablando y ella le había dicho que le gustaría mucho que todo fuera diferente, hablaron durante mucho rato y Ginny ya sentía que la echaría de menos.
Señora –le dijo a la reina mientras hacia una reverencia, se sorprendió al ver como esta la rodeaba con sus brazos
Tu ya eres una hija para mi, y espero que vuelvas pronto
Ginny ya estaba llorando cuando llego junto Lucius.
Señor –dijo haciendo otra reverencia, Lucius sonrió
Te prometo que haré todo lo que esté en mi mano para que tu y mi hijo podáis estar juntos y ... –pero el discurso que había estado preparando fue interrumpido por un abrazo que le dio Ginny
Se que lo hará, gracias
ve a despedirte de el –le dijo Lucius señalando a Draco
Ginny asintió y fue hacia Draco, este estaba hablando con Blaise, porque era el que la iba a acompañar hasta la frontera de su reino. De todas formas, Draco estaba mirando a Ginny de reojo, no le quitaba la vista de encima, aunque quisiera, que no quería, no podía dejar de mirarla. Vio como se acercaba a el, Draco miro a Blasie, y este fue a preparar los caballos.
Ginny, voy a ir a por ti en cuanto pueda, te lo juro, e iré a verte como antes a los jardines –dijo con la voz quebrada y abrazándola.
No, debes tener cuidado, sobre todo ahora que mis padres me van a controlar mucho para que no me vuelva escapar, te escribiré siempre que pueda, y...
Shhh –dijo Draco besándola.
Te amo
Y yo a ti, Ginny en cuanto volvamos a estar juntos, ¿querrás casarte conmigo? –pregunto sacando un pequeño estuche del bolsillo, lo abrió y dejo ver un precioso anillo de brillantes
Claro que si –dijo Ginny con lagrimas en los ojos mientras Draco le ponía el anillo y la besaba
Te echare de menos
Pronto estaremos juntos –dijo Draco besándola por ultima vez y ayudándola a subir al caballo
Ginny lo miro desde el caballo
cuídala –le dijo Draco a Blaise
con mi vida, amigo –le contesto este
¿estáis lista, señorita? –le pregunto a Ginny
si. Adios Draco
adios, Vir
Blaise y Ginny salieron rápido sin mirar atrás, Ginny no podía, si lo hacía no seria capaz de irse. Draco se quedo parado en el lugar en el que estaba durante mucho tiempo, todo el castillo lo miraba, aunque no habían oído la conversación entre Ginny y Draco si habían visto el anillo y las lagrimas, todos estaban muy apenados por la marcha de Ginny, y nadie sabía por que era, porque Draco nunca dijo nada, al igual que sus padres que eran los únicos que sabían la verdad.
Blaise y Ginny cabalgaban en silencio, pero rápidamente. Blaise había intentado iniciar una conversación, pero Ginny solo le contestaba con monosílabos. Ya estaban a pocos kilómetros de la frontera cuando Ginny paró en seco.
A partir de aquí ya puedo ir sola, mi aldea no esta lejos –Draco no le había querido decir a Blaise quien era Ginny en realidad y le había dicho que ella era de un poblado muy cercano a la frontera con los Weasley.
Como queráis, es una pena
¿el que?
Que el reino pierda a una reina como vos, señora
Gracias
El rey no nos explico los motivos de vuestra partida –dijo interesado
Ya, bueno, se hace tarde, debo volver a casa –dijo Ginny evadiendo la pregunta.
Tened cuidado, por aquí se acercan muchos Weasley –en su tono había un gran desprecio.
Tendré cuidado, muchas gracias y adiós.
Adiós
Ginny cabalgó con rapidez durante unas horas hasta llegar a la capital, donde estaba el palacio. Se acercó a la puerta de la muralla donde un guardia la detuvo, Ginny llevaba la capucha echada sobre la cara y no se le veía el rostro.
me están esperando –dijo Ginny cabalgando decidida hacia el interior
si, y a mi también, no te fastidia
¿cómo dice?
Si eres otra de esas muchachas que se viene a hacerse pasar por la princesa permíteme que te diga que el rey ya esta suficientemente de mal humor, como para que aun encima vengas a darle la tarde.
Me temo que no vengo a hacerme pasar por nadie –dijo Ginny bajándose la capucha y dejando al guardia con cara de idiota
Lo siento, mileidy, pasad por favor –dijo haciendo una reverencia
De repente a Ginny la gente de su reino le parecía idiota. Bajo del caballo y fue andando hacia el castillo, su familia ya había recibido el aviso de que había llegado y todos corrían hacia ella con los brazos en alto, la chica se dio cuenta de que la habían echado de menos y haciendo un esfuerzo los abrazó a todos aguantando las ganas de gritarles.
ginny, mi amor, te hemos echado tanto de menos
que susto, Gin –le dijo Ron abrazándola.
Hemos preparado una gran cena, hija, todos están aquí
Que bien –dijo sin entusiasmo
Y después tu y yo tendremos una charla –le dijo su padre abrazándola.
Ven conmigo, Gin, vamos a vestirte
Ginny se quedo mirando su habitación, tampoco la había echado de menos,
Gin ¿por qué lo hiciste? –le pregunto Hermione soltando la pregunta que deseaba hacer desde que la había visto.
Yo..., no se necesitaba pensar, y algo de tiempo, y poner mis ideas en claro
¿y las has puesto?
No, me temo que ahora estoy mas liada que antes –(nunca mejor dicho a lo de liada)
Estas cambiada, no pareces la misma –le dijo Hermione tras un rato
Ya, es que pensar no me sienta bien, y tu ¿qué tal con Ron?
Sigue todo igual
Si te sirve de algo, esta enamorado de ti, solo que es tímido
Pues si a ti te sirve de algo, Harry esta coladito por ti, lo paso fatal, bueno como todos.
No quería preocuparos
Pues no lo conseguiste, y deberías de pensarte lo de Harry, no puedes odiar a los hombres eternamente
Si tu supieras –dijo en un susurro
Al cabo de un rato Ginny y Hermione bajaban por las escaleras, Ginny se fijo en como miraba Ron a Hermione, con la cara de bobo que ponía siempre eso si lo he echado de menos se dijo para si Harry avanzó rápido hacia ellay la agarró del brazo casi sin que esta se diera cuenta
te he echado de menos –le dijo Harry en el oído. Ginny sonrió forzosamente y se sentó en una gran mesa llena de todos los platos preferidos de Ginny. Todos en la mesa hablaban animadamente, y comían mucho, ella no prestó atención a la conversación hasta que el tema sobre el que estaban hablando giró inesperadamente y empezaron a hablar de la guerra
¿no creéis que la guerra ya ha durado bastante?, el reino de los Malfoy es muy fuerte, si no habéis conseguido nada en 7 años no creo que lo consigáis jamas –dijo Ginny dejando a todo el mundo callado
¿cómo?
Ya me has oído, padre, el reino de los Malfoy...
Hija, la guerra terminara cuando los Malfoy estén encerrados en nuestros calabozos
¿y tu crees que así se solucionara algo?
¿que te ocurre, Gin? –le pregunto Harry
no deberías meterte en esos asuntos –le dijo Ron
esos asuntos, como tu los llamas, están provocando la muerte de tu pueblo, Ronald. Y creo que ya va siendo hora de que firméis la paz y...
¿cómo puedes decir eso? Esos malditos mataron a mas de treinta ciudadanos desarmados de TU pueblo
nunca se pudo demostrar que fueran ellos –tanto Ginny como su padre estaban gritando de pie
¿qué mas pruebas necesitas?
Sus escudos los podía haber puesto cualquiera ¿nunca pensaste en eso? ¿nunca pensaste que tal vez alguien quisiera provocar una guerra? ¡esta guerra!, esta maldita guerra que no queréis parar.
¿cómo puedes decir que yo quiero parar la guerra?
Por favor, padre, pero si atacaste a tres pueblos de los Malfoy solo con la excusa de encontrarme
¿acaso me acusas de querer encontrarte? Siento quererte, hija
¿y para eso tienes que matarlos? Podrías haber detenido esta guerra hace mucho tiempo, pero tu lo único que quieres es el reino de los Malfoy ¿acaso empezaron alguna vez una batalla?, no siempre eres tu, TU, lo único que quieres es el poder que te daría su reino
¡¡PLAF!!
Ginny quedó alucinada al ver como la mano de su padre se estrellaba directamente en su mejilla. Ginny puso la mano en la mejilla dolorida
hija, lo siento, yo...- le dijo su padre balbuceando
detén esta guerra, o pederas algo mas –dijo Ginny saliendo de la sala.
Arthur volvió a sentarse a la mesa, donde todo el mundo estaba en silencio contemplando la escena. Hermione había estado a punto de levantarse para ir con Ginny, pero Harry la había detenido.
¿de que estabamos hablando? –preguntó Arthur a sus invitados olvidando lo que había pasado.
Ginny salió corriendo y no paró hasta llegar a su cuarto, se encerró en su habitación, hundió la cabeza en la almohada y gritó el nombre de Draco desesperada.
Bueno..., ya se han separado, pobrecitos, jejeje, espero que os haya gustado el caitulo, espero vuestras opiniones!!!