CAPITULO 13
Ginny seguía sentada en la cama, y Hermione daba vueltas alrededor de la habitación, pensando sin parar en lo que podrían hacer, el asunto se había complicado bastante.
Un sonido la sacó de sus pensamientos.
-¿Qué ha sido eso? –preguntó Hermione mientras paraba quieta y miraba a Ginny, que se encogió de hombros.
Con rapidez Hermione se acercó a la ventana, y justo en ese momento el ruido volvió a repetirse, era como un aleteo. La muchacha abrió la ventana en el momento justo en que una pequeña bola, parecida a una snick, se colaba dentro de la habitación.
-¿Qué es eso? –pregunto Ginny mientras se levantaba y estiraba el brazo, para coger la bola que iba directamente hacia ella- ¡es de Draco!
-¿Cómo lo sabes? –pregunto Hermione mientras se acercaba a su amiga y se sentaba a su lado
-tiene el sello de los Malfoy –explicó Ginny mientras le enseñaba la serpiente enroscada que estaba dibujada en el centro de la pequeña bola
-debe estar abajo, iré a por el enseguida –se ofreció Hermione mientras salía de la habitación a paso rápido.
Ginny se quedó sentada otra vez, sin poder creer lo que le estaba pasando, iba a ser madre… y dentro de unas semanas estaría casada con Harry, la idea de la boda hizo que se le pusieran los pelos de punta, una sensación de náusea ascendió desde su estómago hasta su boca, y como respuesta se frotó suavemente el vientre, mientras sonreía inocentemente.
En ese momento la puerta se abrió de golpe, y Hermione apareció en la habitación con la cara toda coloreada de rojo.
-¡¿Dónde esta?! –pregunto Ginny mirando a todos lados y temiendo que lo hubieran encontrado
Entonces sintió como algo se acercaba a ella, pero no había nadie a donde ella miraba… donde antes no había mas que aire apareció de la nada la figura de un chico rubio, mientras una capa de invisibilidad resbalaba por su cuerpo hasta el suelo.
-¡al fin! –dijo Ginny mientras se lanzaba en brazos de Draco, que sonreía mientras abrazaba a la pelirroja, apretándola lo máximo posible contra su cuerpo.
-os dejaré solos –anunció Hermione mientras salía de la habitación, aunque no la escucharon.
En cuanto escucharon el sonido de la puerta se dieron cuenta de que estaban solos, y se besaron en silencio y profundamente, demostrándose el uno al otro las ganas que tenían de volver a verse, lo mucho que se habían extrañado, y lo mucho que se necesitaban. No podían parar, aunque lo intentaran era inútil, por mucho que se lo propusieran no podían separarse, aunque ellos tampoco querían hacerlo, pero tenían que hablar ¿que iban a hacer? ¿renunciar el uno al otro? ¡eso nunca!, además ahora había otro pequeño problema…
Ginny sentía como las manos de Draco acariciaban su piel, y se introducían entre su vestido para poder tocarla. Otra vez ese sentimiento inundó la mente y el cuerpo de Ginny. Olvidó quién era, donde estaba, lo que tenía que hacer… todo, ya solo estaba él, él y ella, juntos, solos. Su habitación nunca le había parecido un lugar tan hermoso. La respiración de ambos se aceleraba, su ropa volaba en medio del aire, sin hacer ruido caía sobre el suelo, sus cuerpos se unían cada vez más, con el único propósito de sentirse el uno al otro. No existía el resto del mundo, no había nadie más, ni guerra, ni obligaciones, ni nada de nada, solo ellos… ellos…
Entonces ginny lo sintió, Draco había entrado dentro de ella, otra vez estaban unidos, otra vez estaban juntos. Y ese era el lazo más fuerte que les unía, el que nadie podría romper. Su boca exhaló un suspiro de placer, que Draco amortiguó con un beso, mientras sus manos continuaban palpando su vientre, si el supiera lo que en realidad tocaba… lo que se ocultaba bajo la capa de piel… lo que Ginny le entregaría si todo salía bien. Una vez tras otra, cada vez más rápido, se sentían el uno al otro, sus respiraciones era lo único que se escuchaba en toda la habitación, las palabras de amor que se dedicaban mientras se unían una y otra vez. Las sonrisas que se formaban en sus labios, que no eran si no el reflejo de la alegría que sentían. Draco besaba a Ginny y la acariciaba mientras la hacía suya, como si fuera la primera vez.
Con un último suspiro Ginny dejó de sentirlo, pero él seguía a su lado, tocando su piel, se abrazaron con fuerza otra vez y cerraron los ojos un momento. Pero la alegría inicial de volver a estar juntos pasó al terror de ser descubiertos, ¿que pasaría si entrara alguien?, ambos parecían pensar lo mismo, porque se miraron con la misma cara de preocupación. Pero estaban tan cerca… ¿que importaba que los descubrieran?
-te he echado de menos –dijo Ginny mientras acariciaba la cara de Draco con su mano.
-y yo a ti –contestó el mientras hacía lo mismo que ella
Se acercaron todavía más, y Ginny apoyó su cabeza en el pecho del chico, bajo él, los latidos de su corazón sonaban desbocados.
Después de un rato en el que no hicieron más que mirarse ambos empezaron a vestirse, sin separarse demasiado, no fuera a ser…
-¿de donde sacaste la capa de invisibilidad? –pregunto Ginny al reparar en la capa, la cual colocó sobre la mesa.
-cuando fui al reino de Snape, él me la regaló, ahora estoy en paz también con él –informó a Ginny mientras se acercaba a ella por detrás y la abrazaba.
Reinos, guerras, paz… otra vez todo volvió a la mente de Ginny, lo que había pasado hacía un momento… ¿fue real o solo un sueño?, tenía que ser real, porque el olor de Draco le llegaba desde un lugar muy cercano, además unos brazos fuertes la envolvía. Cerró los ojos y trató de sumirse otra vez en el sueño, del cual no quería despertar.
-¿en que piensas tanto? –preguntó él, sorprendido por su silencio
-en lo maravilloso que sería poder estar así siempre –dijo ella mientras se giraba y le miraba a los ojos.
-pronto –prometió el con una sonrisa
Pero Ginny sabía que no, no podía seguir callando lo que sabía, había tratado de posponer ese momento, de retardar el momento de la partida de Draco, de poder disfrutar de él sin preocupaciones, pero había llegado el momento.
-Draco… el otro día, cuando estaba en casa de Harry
-Maldito Potter, por su bien que no se haya atrevido a tocarte
-escúchame un momento, le escuché hablar con Sirius… tienen un ejército, un ejército lo suficientemente grande como para atacar todo tu reino y destruirlo
La cara de Draco se ensombreció, un brillo de locura y desesperación cruzó su mirada, no podía ser cierto…
-pero los demás reinos se han negado a atacarte –dijo rápido Ginny
Eso era algo bueno, Potter tenía ya dos armas contra el, la vida de su pueblo y la de Ginny, y no estaba dispuesto a jugar con ninguna de las dos.
-entonces no hay de qué preocuparse ¿no? –su voz trató de eliminar el nerviosismo, quería disfrutar de ese momento con ella, quería volver a sentirla, daba igual que acabara de hacerlo, quería más, ¿nunca se cansaría?, estaba claro que no…
-pero… -ella se sentía culpable, y ni siquiera sabía de qué tenía culpa.
-ahora no pienses en eso, por favor, solo… -se acercó a ella y la besó en los labios, mientras sus manos volvían a desatar los nudos de su vestido, dándole a entender que la necesitaba- en nosotros.
-hay otra cosa –dijo ella mientras sentía las manso del chico suavemente alrededor de su cuerpo.
-¿que cosa? –preguntó él sin parar de besarla en el cuello y descendiendo lentamente
En ese momento un ruido en la puerta llamó la atención de ambos jóvenes, que se separaron al momento. Draco se escondió detrás de la cama en el momento justo en que la puerta se abría.
-¡Ron! –dijo Ginny entre asombrada y asustada, no pudo moverse de donde estaba, por el rabillo del ojo veía a Draco metiéndose con cuidado debajo de la cama.
-Ginn, ¿te encuentras bien? –preguntó su hermano, preocupado al ver las mejillas coloreadas de Ginny
-si… estoy bien, ¿que haces aquí?
En ese momento Hermione apareció corriendo histérica y entró en la habitación gritando:
-¡¡gin! Ron viene para aqu…. ¡¡ron!! Que gusto verte –saludó la chica con cara de situación al ver al pelirrojo en medio de la habitación
-lo mismo digo, Hermione, pero nos acabamos de ver en el salón
-ya.. ejeje, que cosas!
-esto… ¿Qué querías, Ron? –volvió a preguntar Ginny, deseosa de que todos se largaran de una vez.
Hermione entró en la habitación, con la mano en el pecho, la cara coloreada y la mirada perdida, buscando el lugar en el que estaba DRaco escondido. Se sentó en una silla, al lado del escritorio, y vio la capa invisible, con un rápido ademán la escondió debajo de la mesa.
-pues verás, gin, yo… quería pedirte disculpas –explicó Ron mientras se acariciaba la nuca
-¿Por qué?
-lo siento mucho, hermana… verás, padre y Harry estaban discutiendo la fecha de la boda, yo le dije a papa que debería cancelarla, y si no al menos posponerla, pero lo único que conseguí fue que la adelantaran…
-¡¿Qué?!, ¿Cuándo? –preguntó Ginny mientras respiraba el nerviosismo que provenía de debajo de su cama, donde Draco se estaba mordiendo la lengua para no bajar al salón y matar a Harry.
-… dentro de 4 días
-¡cuatro días! –gritó Ginny mientras se desplomaba en la cama, notó como el mareo inundaba su cuerpo, seguro que eso no era bueno para su salud
-lo siento, hermana, te juro que intenté… lo siento
-es igual, Ron, gracias de todas formas, ahora déjame sola, por favor
Ron miró a su hermana, a la que ya le resbalaban unas lágrimas por sus mejillas. Hermione agarró a Ron de un brazo y lo sacó de la habitación, consciente de que la única persona a la que necesitaba Ginny ya estaba con ella.
En cuanto la puerta de la habitación se cerró Draco salió de debajo de la cama y empezó a darle patadas a todo lo que se encontraba, si la boda fuera en unas semanas aún se podía inventar algo, pero ¡en cuatro días!, en ese tiempo apenas si podía ir a su reino y volver. Se giró y se encontró a Ginny en la cama, con la mirada perdida y el cuerpo temblando
-tranquila, todo se solucionará, te lo juro –trató de tranquilizarla mientras la rodeaba con sus brazos
-¡nada se solucionará! ¡nada tiene solución!, ¿Por qué? ¿Por qué no podemos irnos juntos?, voy a tener que casarme con un hombre que lejos de no querer odio, no voy a volver a verte, me van a alejar de mi familia y mis amigos, ¡por Merlín, Draco!, si ni siquiera me atrevo a decirte que estoy embarazada ¡¡nada tiene solución!!
Ginny se quedó en silencio, "glups" era el único pensamiento que cruzaba su mente, levantó la cabeza y se encontró con la mirada perdida de Draco, que se había quedado petrificado en el sitio. Tenía la mirada clavada en ella, pero sin embargo parecía que no la miraba, que miraba mucho más allá, pero a saber en donde. La chica le dio un golpecito a Draco en el brazo, pero el no reaccionó.
-¿draco? –preguntó ella con preocupación, tampoco era para ponerse así…
-¿Qué has dicho? –fue lo único que la voz débil del chico articuló
Ginny cogió aire y sonrió como quien no quiere la cosa.
-será mejor que te de un poco el aire –se levantó del lado de Draco con la intención de ir a abrir la ventana, pero la mano gélida del chico la detuvo agarrándola por el brazo
-¿de verdad? –preguntó, más al aire que a ella. Ginny solo atinó a asentir mientras veía como la mano del chico se acercaba a su vientre.
Con sumo cuidado, como si temiera que pudiera romperse, colocó su mano sobre la barriga de la chica, y empezó a acariciarla con mucha ternura. Ahora tenía algo más por lo que luchar… ahí dentro, dentro de la mujer que amaba, estaba su hijo. ¡su hijo!, que raro sonaba eso cuando salía de sus labios. Su hijo, de él y de Ginny… así ya sonaba mucho mejor. Miró hacia arriba y se encontró con unos ojos avellana inundados de lágrimas que lo miraban con la más maravillosa de las sonrisas.
-gracias –le dijo mientras se levantaba y la besaba en los labios, sin lugar a dudas, ese era el mejor regalo que le habían dado en toda su vida.
Ginny sonrió, y se lanzó a los brazos que Draco le tendía, como siempre había hecho.
-nos vamos –anunció Draco- recoge tus cosas, nos vamos.
-¿Qué? ¿A dónde?
-no lo se, lejos
-pero… eso es una locura, no podemos, qué dirá tu familia, la mía…
-Ginny, en este momento nada de eso me importa, vámonos, los tres…
-los tres –dijo con una sonrisa
-si, los tres –repitió él besando a Ginny en los labios.
Estuvo muy tentada a decir que sí, e irse con el a cualquier lugar, dejar el palacio, las comodidades, ¿que valía todo eso?, nada, y poder estar con el… pero no podía. Su padre ya atacó un pueblo de los Malfoy porque creía que Ginny había desaparecido por causa de ellos, por lo que no dudaría en volver a hacerlo. Además el supuesto secuestro sería la excusa perfecta para atacar el reino de los Malfoy. Le amaba, le amaba con locura, por eso no podía permitir que eso pasara.
-no, Draco, eso no podemos hacerlo y lo sabes…
EL chico, que ya estaba metiendo las cosas de Ginny en una maleta, se paró de repente ¿no quería irse con el?, ¿por que?
-gin..
-no
-por favor
-no
-no te puedo dejar aquí
-y yo no puedo dejar que te maten
-…. No me van a matar
-¿Cómo lo sabes?
-¿Qué propones?, y que sea algo razonable, porque no voy a renunciar ni a ti, ni al bebe, si tengo que pelear contra Potter lo haré, y si tengo que hacerlo contra tu padre, pues también, y si después tus hermanos también quieren…
-no lo se! ¡no se que hacer!
Se quedaron en silencio, el cual era roto por el sonido de la lluvia, que caía fina sobre el castillo, golpeando la ventana con un grácil sonido.
-acabo de tener una idea –manifestó Draco tras un momento
-¡¿Cuál?! –preguntó Ginny con alivio.
-ya lo verás –el tono de Draco sonaba preocupado- escucha, ahora debo volver, pero volveré, la boda es en cuatro días ¿no? –Ginny asintió- pues tu compórtate lo más normal posible, que no te noten nada
El sonido de la puerta volvió a interrumpirles, y Hermione se paró en el umbral
-será mejor que os vayáis –le dijo a Draco- hay mucho movimiento abajo y no creo que alguien tarde en subir a hablar con Ginny.
-bien… -dijo Draco
Hermone volvió a salir fuera mientras ellos se despedían
-¿que estás tramando? Espero que no sea nada peligroso, nos conocemos… -empezó Ginny mientras se dejaba abrazar por el rubio
-descuida, pronto estaremos juntos, te lo prometo. Cuídate, y cuida al bebe
-no te preocupes, de eso me encargo yo.
La besó profundamente, le acarició con suavidad la cara y el vientre y luego salió de la habitación a paso rápido, después de haber cogido la capa invisible
Cuando Draco se fue Ginny se lanzó en la cama, en la que momentos antes había sido tan feliz, aunque solo durante unos momentos, pero pronto todo se solucionaría, todo estaría bien en poco tiempo… no había de qué preocuparse… Draco sabía lo que hacía.
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Ya habían pasado 4 días. El ambiente en el castillo era increíblemente insufrible. Todo el que veía a Ginny se lanzaba a ella, haciéndole mil preguntas sobre las flores, la comida, la ropa, la decoración… a ella más de una vez le daban ganas de gritar que no se iba a casar, así que dejaran de hacer preguntas estúpidas. Pero se contenía bien. Hermoine ya estaba enterada de todo lo que había ocurrido entre ella y Draco la otra noche, así que ella era la encargada de solucionarlo todo en nombre de su amiga, que no quería oír ni de lejos la palabra "boda". Su madre también había estado muy pesadita, sobre todo con el vestido, Ginny solo asentía, total…., su padre y sus hermanos estaban entretenidos solucionando otros problemas, así que a penas prestaron atención a la boda. Bill y Charley no dejaban sola a Ginny ni un momento, preguntándole que tal se encontraba, porque sus mareos eran cada vez más continuos. Ella se disculpaba diciendo que eran los nervios. En esos 4 días había recibido 7 cartas de Draco, que él enviaba a Hermione, pues a ella no le revisaban el correo. Todas le decían lo mismo, que la quería y que no se preocupara, y que siguiera como si nada, de tantas veces que se lo dijo consiguió el efecto contrario al esperado, y Ginny se puso más nerviosa todavía ¿que demonios estaba tramando Draco?
El día de la boda había llegado, Ginny ya tenía el vestido puesto, pero no dejaba de mirar por la ventana, esperando la llegada de alguien o algo que la sacara de ahí, pero la ayuda no llegaba…
-Ginny, cielo –su madre apareció en la habitación- tenemos que irnos, ya va a empezar –su voz reflejaba la emoción que sentía
-voy –dijo ella, había tratado de retardar lo máximo posible ese momento, pero al fin había llegado.
Bajó las escaleras, su padre le esperaba al pie de estas, la besó en la mejilla
-estás preciosa –le dijo con orgullo, ella no contestó, de toda la gente que conocía jamás pensó que su padre pudiera llegar a amargarle la vida- vamos
Ginny avanzó del brazo de su padre hacia la Gran Sala, cuando se abrieron las puertas se encontró con la mitad del pueblo ahí, sentados en amplios bancos de madera que cubrían casi toda la estancia. Una alfombra roja señalaba el lugar hacia el altar, donde Harry y Sirius esperaban a Ginny. Esta cogió aire y comenzó a caminar. Las vidrieras de colores que estaban en la pared situada detrás del altar se iban agrandando a medida que Ginny se acercaba. Sus vivos colores, que irradiaban alegría, contrastaban con la tristeza en la que la pelirroja estaba sumida. En su mente no dejaba de repetirse la misma frase "Draco vendrá, vendrá", pero el no estaba ahí ¿Dónde se había metido? ¿la había abandonado?, no, eso era imposible… pensó en soltarse del brazo de su padre y echar a correr, ir lejos, a donde fuera… pero su padre, como si temiera que ocurriera justo lo que ella pensaba, la agarró con fuerza del brazo.
Llegó a donde estaba Harry, pero estaba tan sumida en sus pensamientos que a penas se dio cuenta, solo cuando el chico la cogió de la mano ella reaccionó y miró a su lado, donde Harry le sonreía orgullosa y victoriosamente. "¿Dónde estas, Draco?"
La ceremonia empezó, Ginny solo escuchaba el sonido de sus pensamientos, pero los demás estaban atentos a las palabras que el cura (¡¡¿tienen de estas cosas los brujos?? La verdad es q no tngo ni idea…) iba diciendo
-si, quiero –dijo Harry, el pulso de Ginny se aceleró, ¿¿¿¿Qué estaba haciendo????, pensó en echar a correr, miró a su alrededor, Hermoine la miraba con terror.
-virginia –llamó el cura- te toca
Al parecer Ginny ni había escuchado la frase, pero era obvio cual debería ser la respuesta, la pelirroja ya tenía el no rotundo en la lengua, dispuesto a gritarlo con todas sus fuerzas, pero…
-¿interrumpo? –preguntó una voz que la pelirroja conocía bien
-¡¿qué demonios estás haciendo aquí?! –la voz de Arthur Weasley hizo que todo el mundo se girara, mientras unos gritos de terror llenaban el lugar. Ginny y Harry se giraron a la vez, para encontrarse con un joven de ojos grises que los miraba intensamente.
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¡¡¡patapumchimpun!!! Se acabó el capitulo! Pensé que no lo iba a acabar en mi vida!, ya lo se! Soy una cerda por dejaros así!! Pero creedme, es mejor que corte ahora… bueno, espero que os haya gustado el chap y todas esas cosas. Es para compensar lo poco que salió draco en los otros… un beso a todas, y especialmente a las que os habéis molestado en mandarme rr. ¡¡muchas gracias!!, gracias a vosotras el fic sigue aquí, y avanzando, lentamente, pero avanzando.
Y ahora las contestaciones a los rr!!:
Amsp14: hola!! Ya… a mi tampoco me gusta poner a Harry de malo.. pero a alguien tenía que tocarle, pero descuida, haré como en las pelis americanas, no te preocupes. ¿este es d tus favoritos?, vaya, tu descuida, yo no dejo los fics, le d quien eres esta solo pospuesto, pero este no lo dejo, además es el primero que hice y le tengo mucho cariño, por eso el principio es tan horriblemente malo. Jeje, en eso tienes razón, el embarazo de Ginny no creo que traiga solo al bebé, a mi me da que también más de un ataque cardíaco. Bueno, un beso y espero que te haya gustado, hasta pronto!
Ivita black: hola! Pues aquí tienes la continuación, siento haber tardado tanto… pero es q estuve sin ordenador, y cuando por fin me lo arreglaron se me habían borrado todos los capítulos escritos. Pero descuida q el proximo chap lo pongo pronto. Un beso!
Andy-Wm: hola! Si, un pequeño Malfoy, o una pequeña Malfoy, nunca se sabe, o gemelos, vete tu a saber, o trillizos… bueno, si nos ponemos así el equipo de futboll al completo. Si! Ya viste que DRaco y Ginny se encontraron!! Y que encuentro!, si no fuera por las interrupciones… y las noticias. Bueno pues un beso y muchas gracias, espero que te haya gustado el chap!
SaraMeliss: hola!! Aquí tienes el capitulo. No tardo tanto en actualizar! Bueno… puede que un poquito.. pero este sí que va pronto, no te preocupes. Jeje, descuida que no me esconderé, ni te desconectaré ni nada de eso, a ver quien me recomienda si no los fics después. Bueno, un beso y hasta pronto!!
Malfoys red-haired lover: hola! Lo se.. se que tardo mucho en actualizar, y de verdad que trato de hacerlo lo antes posible, lo que pasa es que tengo muchas historias y no quiero dejar descolgada a ninguna, ademas entre los examenes y el ordenador estropeado.. lo siento, de veras que trataré de actualizar lo antes posible. Un beso y espero que te haya gustado el capitulo
Amelia: hola! Jeje, pues si, después del susto inicial DRaco recupera la compostura y se pone feliz de la noticia, aunque yo creo que aún tiene que asimilarlo bien. Jeje, en lo de que harry te cae mal creo que coincides con todo el mundo, incluso conmigo, a mi en los libros me cae bien, aunque me parece un poco… lento, no se, pero en este fic desde luego no esta en su mejor momento. Pero bueno, a ver que se puede hacer con ese personaje. Supongo que ahora ron ya te caera un poco mejor… pero bueno, hay que ver lo que pasa después. Ya, Zabini y Pansy son tontos de remate, yo tambien los odios, a Pansy siempre la pongo de mala en todos mis fics, y a Blaise según me de, pero normalmente tambien, no se por qué. Claro que no me aburriste con el rr! Al contrario, cuanto mas largo mas cosas tengo para contarte luego, el final de este chap pues ya lo viste, ahora falta ver el principio del siguiente, un beso y hasta pronto
Potty: hola! Ejje, si, harry es un sobón. Y si, se va a armar la gorda con lo que de que Ginny este embarazada, pero bueno… para eso hay que esperar al proximo capitulo, porque en este solo draco lo sabe. Cierto, tienes razón, estoy dejando un poco de lado a Zabini, pero descuida que dentro de unos chaps ya esta aquí de nuevo para dar un poco la paliza. Un beso y espero que te haya gustado el chap!
Saiko Katsuka: hola! Ya, harry es tonto, q se le va a hacer, necesitaba un personaje que molestara y el era el que estaba mas cerca, pobrecito, en el fondo no lo odio tanto… bueno, espeor que te haya gustado el capitulo, porque ha sido enteramente DRaco Ginny. Un beso y hasta pronto!
D Potter Black Lupin: hola! Si! Al fin llegó draco, ya faltaba…. Y como no, harry dando la paliza. Me alegro que te haya gustado el anterior, espero que este tambien, un beso y hasta pronto!
Daniela Lupin de Black: hola! Ya, que lindo, jej, espero que te haya gustado el chap! Un beso y hasta pronto!
Bueno, pues hasta aquí el capitulo, espero que os haya gustado, y todo eso. Un beso muy fuerte, y dentro de tres días vuelvo a empezar las clases, pero os prometo que sacaré el tiempo de debajo de las piedras, si hace falta, para continuarlo cuanto antes. De hecho voy a hacer el guión ya, y así luego solo tengo que escribirlo. un beso y hasta pronto!!
Eyyyyyyyyyyyyyyy, no te olvides el rr, porfa!