CAPITULO 17

No tardaron mucho en llegar a la ciudad en la que Ginny se había criado. La ciudad estaba decorada para la ocasión, y la mayoría de los habitantes estaban vestidos de gala, preparándose para ir a la boda que comenzaría en unos momentos. Caminaron en el carruaje hasta llegar al castillo, que se alzaba majestuosamente sobre la colina, con toda la ciudad a sus pies y con la larga muralla cercando todo el territorio, hacía apenas unos años esa muralla no había sido necesaria, pero al comenzar la guerra tuvo que construirse con toda la rapidez posible. A medida que se acercaban al castillo veían con más continuidad a hombres, mujeres y niños vestidos de gala corriendo de un lado para otro, mientras los sirvientes que trabajaban en el castillo iban corriendo de un lado para otro con toda clase de adornos en la mano. Ginny supuso que el día de su casi-boda con Harry todo eso habría ocurrido de la misma forma para ella.

La pelirroja miraba por una ventana y por la otra casi a la vez, tratando de no perderse detalle de todo lo que veía. Draco, que tenía a Jack entre sus brazos, miraba divertido a la chica, mientras esperaba con ansias a que el niño se despertara para poder jugar con él.

Cuando llegaron frente a la puerta del castillo y bajaron nadie reparó en su presencia, todo estaba patas arriba por la boda que empezaría en unas horas y nadie se daba cuenta de que la princesa acababa de llegar.

y bien? –preguntó Draco mirando con nerviosismo hacia todos lados, temiendo que de repente Harry o Ron salieran con la varita en alto dispuestos a matarle.

y bien que? –preguntó la pelirroja mirando para todos lados, buscando a alguien conocido al que saludar, pero cada vez que encontraba a alguien conocido este no reparaba en su presencia, sino que iban corriendo de un lado para otro.

que a donde vamos

eh… no lo se

como que no lo sabes? Es tu casa!

era mi casa… -recordó al pelirroja con cierta pena en sus palabras

Draco se quedó callado, había metido la pata. Además era mentira ahora su casa era otra. Miró hacia abajo al notar que Jack comenzaba a moverse entre sus manos, no pasó mucho hasta que el pequeño abrió sus grandes ojos negros y clavó la mirada en su padre, que comenzó a hacerle caras tratando de sacarle una sonrisa. Ginny se acercó a él y se apoyó contra el brazo de Draco, mientras le sonreía al niño, besó su cabecita y lo cogió en brazos. Draco le pasó el brazo por el hombro y juntos entraron en el castillo.

A la media hora comenzó la boda, Ginny no se había encontrado con nadie de su familia ni nadie que le dijera donde tenía que sentarse, así que entraron en el gran salón donde se celebraría la ceremonia. Con Jack entre los brazos Ginny miró hacia el altar, en el que su hermano, vestido con una túnica negra y moviéndose nerviosamente, esperaba la llegada de Hermione. Al poco rato apareció la novia, vestida con un traje blanco muggle, como ella siempre había querido casarse, por un momento se escucharon los murmullos de sorpresa al ver el traje de la novia, pero enseguida cesaron cuando comenzó a sonar la música y Hermione comenzó a caminar hacia el altar del brazo de Arthur y con la mirada fija en Ron.

Ambos dieron el si quiero después del largo discurso de Arthur, que era el que oficiaba la boda. La sala entera prorrumpió en aplausos y silbidos mientras Hermione y Ron se besaban y sonreían. Salieron al balcón del castillo y saludaron a toda la gente, que esperaba ansiosa el saludo del heredero y su nueva esposa. Ginny y Draco se quedaron rezagados, ese era el momento de Hermoine y Ron y no querían estropearlo por nada del mundo.

será mejor que bajemos al salón, allí será el baile y podremos saludarles –propuso Ginny a un cansado Draco, que odiaba las bodas y estaba harto de ir de un lugar a otro, aunque menos ganas tenía de enfrentarse a todo lo que le esperaba.

Bajaron las escaleras hasta llegar a la sala a la que se refería Ginny, pero antes de llegar algo les hizo detenerse.

ginny! –Hermione corrió hacia su amiga, que dejó a Jack en brazos de Draco para abrazar a Hermione en medio del hall, con toda su familia, amigos y demás ciudadanos mirando- siento no haberte saludado antes, Gils me dijo que habías llegado y tuve que empezar con la ceremonia, te estuve esperando, ya te dije que no me iba a casar sin saber que habías venido

enhorabuena Hermione, estas preciosa

Se separaron, pero solo para volver a abrazarse de nuevo. Draco, a unos pasos de ellos, tenía fuertemente sujeto a Jack, mientras observaba como todas las miradas estaban puestas en él. Arthur, Harry, Sirius… y todos los criados, y demás ciudadanos le miraban incrédulamente, la mayoría de ellos habían escuchado los rumores de que la princesa se había ido con un Malfoy, pero ninguno había llegado a creérselo, hasta este momento. Cuando Hermione y Ginny terminaron de abrazarse se acercaron hasta él, ya que Ginny quería enseñarle el bebé a Hermione y esta estaba deseando conocerle. Ron, que hasta ese momento no se había enterado muy bien de lo que estaba pasando, se acercó corriendo y al abrazar a Ginny ambos cayeron al suelo entre risas.

Hermione cogió a Jack en brazos y Draco se quedó en una posición bastante incómoda, sin saber lo que hacer o decir. ¿Por qué no se levantaba Ginny para darle conversación? Se sentía como un idiota

es igualito a ti –comentó Hermione mientras hacía reír a Jack.

a que si? –contestó Draco, contento de poder hablar con alguien

Ginny y Ron se levantaron y este último se acercó al bebé y lo miró sobre el hombro de Hermione

no te encanta, Ron? –preguntó esta como quien no quiere la cosa

ah no! Aun acabamos de casarnos, deja eso para luego! –respondió el chico aterrorizado

joo –se quejó la chica mientras le devolvía a Jack a Draco.

será mejor que entremos –opinó Ron señalando las puertas del salón, abiertas de par en par y dejando ver a toda la gente ya sentada en sus asientos, charlando y riendo.

Ginny y Draco siguieron a Ron y a Hermione, y se sentaron todos en una mesa redonda en el centro del salón. En la mesa también estaban sentados Arthur, Molly, y todos los hermanos de Ginny y sus respectivas esposas. Durante los primeros minutos Ginny fue saludando a sus hermanos y cuñadas. Harry, que también estaba en la mesa, no se levantó, al igual que Arthur, Ginny le dio un beso a su madre, que miraba sin parar al bebé. Se sentaron en la mesa y Hermione comenzó a hablar, evitando que se produjera un silencio incómodo. Ginny y Draco estaban sentados juntos y este estaba al lado de Ron. Jack, sentado en las piernas de Draco, jugaba con el tenedor de este como si fuera un avión, sonriendo y dejando ver las vacías encías, todavía sin dientes. Arthur variaba la mirada entre su hija, Draco y el bebé, no muy seguro de cómo debía mirarles. Molly le hacía caras al bebé, haciéndole reír. Ginny escuchaba atentamente las anécdotas de Hermione, mientras acariciaba la pierna de Draco debajo de la mesa. La comida pasó rápidamente, hubieron risas y no faltó conversación. Había mucha tensión pero parecía que Jack era el centro de atención, porque hasta Arthur sonrió al verle comer.

ya habla? –preguntó de repente la mujer de Charley, mientras este hacía formas con la servilleta para dársela a Jack, que se sentía genial siendo el centro de atención como demostraba su continua sonrisa.

no, al menos no demasiado, hablado con monosílabos –comentó Ginny

pero se le entiende bien, porque cuando quiere algo lo señala y llora –Draco habló por primera vez y al levantar la cabeza y ver que todas las miradas estaban puestas en él se sintió estúpido ¿es que pensaban que era mudo?

mucho cambio ser padre? –preguntó Bill con una sonrisa y sin hacer caso de la mirada de odio que le mandó su padre.

no… bueno, sí

Bill y Draco comenzaron a hablar, el primero le contó un par de trucos ya que tenía 2 hijos y sabía de sobra como cambiar pañales y demás, cosa con la que Draco todavía no se aclaraba demasiado. Ginny hablaba con las demás mujeres de la mesa, que estaban muy interesadas en saber cómo se vivía en el territorio de los Malfoy, ya que pensaban que sería el típico castillo de las pesadillas lleno de monstruos, serpientes, y toda clase de cosas horribles, no podían creer que fuera un lugar mucho más hermoso que el palacio de los Weasleys.

No pasó mucho tiempo hasta que las conversaciones se agotaron y el silencio reinó sobre la mesa, no así en el resto de la sala, en el que el bullicio de los cientos de presentes hacía que tuvieran que hablar alto para poder escucharse los unos a los otros.

y no pensáis casaros? –preguntó de repente Ron, con curiosidad

Ginny y Draco se miraron, un poco incómodos por la pregunta, claro que pensaban casarse, lo que pasa es que todavía no tenían fecha. Primero querían que todo esto se solucionara.

cuando todo esto se solucione –contestó Ginny, sonriéndole a Draco y acariciando la mejilla de Jack.

si a lo que estas esperando es a que yo lo consienta será mejor que dejes de esperar, porque no vas a contar con mi apoyo ni ahora ni nunca –Arthur habló por primera vez desde que se había sentado en la mesa. Todos le miraron y Jack le echó la lengua, provocando la risa de Draco, que se calló al momento, consciente de que no era el momento.

no creo que sea el momento para esto –dijo Ginny con voz dura y mirando con incredulidad a su padre.

acaso tendremos otro momento? Porque supongo y espero que cuando termine la boda os iréis y no volveréis.

Todo el mundo se quedó en silencio, esperando una contestación por parte de Ginny, pero esta solo atinó a levantarse.

descuida, en cuanto esto termine, volveré a MI casa, con MI familia –salió del salón a paso rápido, bajo la mirada de todo el mundo.

Draco se quedó sentado, con Jack sobre sus piernas no muy seguro de lo que tenía que hacer. Conocía a Ginny lo suficiente como para saber que ahora necesitaba estar sola, pero estar ahí solo, rodeado de esa gente, no le inspiraba demasiada confianza. Miró a Hermione, la única persona en la que confiaba de toda esa mesa, ella le hizo un gesto que le dio a entender que no se preocupara. Así que se concentró en hacer reír a Jack, esperando a que Ginny regresara.

Pasó un rato y Ginny no regresaba, Draco comenzó a preocuparse.

estará en el jardín –le dijo Hermione al ver que Draco estaba preocupado.

El chico asintió y se levantó con Jack, dirigiéndose hacia los jardines. Salió del castillo y recorrió todo el camino hasta los jardines. Jack comenzó a llorar y nada más escucharlo Ginny salió de entre los árboles en donde estaba sentada y corrió hacia donde estaban ellos. Cogió a Jack en brazos y comenzó a mecerlo hasta que se calló.

estas bien? –le preguntó Draco a Ginny mientras le acariciaba la mejilla, apartándole el pelo de la cara.

lo siento muchísimo, supuse que haría algo así pero… -Draco la abrazó con fuerza, entre ellos Jack bostezaba abrazado al cuerpo de su madre. Ginny besó a Draco- será mejor que subamos, no quiero arruinarle la boda a Hermione y a Ron.

Subieron hasta el salón, la gente seguía entretenida en lo suyo en la mesa de los novios Hermione hablaba con rapidez mientras golpeaba la mesa con el puño y miraba a Arthur, que estaba rojo de la vergüenza. Caminaron hacia el centro del salón, con la mirada de todos puestas en ellos. Y de repente algo ocurrió. Se escuchó una fuerte explosión, los cristales se rompieron en mil pedazos y salieron disparados. La luz se apagó. Una brisa de aire frío golpeó a todos los presentes. Ginny se agarró con fuerza al brazo de Draco y apretó con fuerza a Jack contra su pecho, mientras el niño comenzaba a llorar. Comenzaron los gritos al tiempo que se encendió una única luz. La gente seguía sentada en las mesas, y al parecer todo seguía normal.

ginny! Cuidado! –Ginny vio cómo toda su familia y los guardias y algunos invitados se ponían de pie y corrían hacia donde estaba ella.

Draco y ella, sorprendidos, se giraron y se encontraron de frente con 7 figuras encapuchadas que les apuntaban con la varita. Antes de que Draco pudiera sacar la suya para defender a su familia un rayo violeta se estrelló contra él, lanzándole hacia el otro lado del salón. Ginny soltó un grito y trató de caminar hacia atrás, pero uno de los hombres le agarró del brazo y la acercó a él mientras los demás hacían un círculo alrededor de ellos, lanzando maldiciones contra todos los que se acercaban. El Gran Salón se convirtió en un campo de batalla en el que ambas partes lanzaban hechizos unos contra otros, Draco no tardó en incorporarse a los ataques, buscando con la mirada a Ginny y a Jack, pero las figuras no dejaban ver lo que pasaba detrás de ellas. Los hombres desaparecieron en el aire. Ginny no estaba.

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Abrió los ojos y se encontró con la oscuridad más absoluta. Palpó el espacio, tratando de encontrar una pared o algo que le indicara donde estaba. ¿Dónde estaba Jack? En ese momento era lo primero que le importaba. Buscó al bebé por todas partes, pero no lo encontraba. Comenzó a llorar y a caminar desesperada, sin importarle si chocaba contra algo. Tiró varias cosas en su camino, y se hizo daño en la pierna y en el brazo. Lloraba con desesperación ¿Dónde estaba Jack? Por que no aparecía? Escuchó el sonido de una puerta al abrirse. Se quedó parada y en silencio. Su respiración era muy agitada y su cara estaba llena de lágrimas que no paraban de salir de sus ojos.

hola Virginia –no era la primera vez que escuchaba esa voz, le resultaba muy familiar, pero ahora no podía pensar en eso

donde esta mi hijo? –preguntó con desesperación, aunque trataba de sonar amenazadora

tranquila, esta bien.

donde!

descuida, te lo traeré ahora

Se encendió una luz en la habitación y Ginny abrió la boca y puso los ojos como platos al ver a quién tenía delante

Wood! –gritó roja de la ira y de la sorpresa.

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terminóoooooooooooooooooooo, odio poner a Wood de malo malote, pro es q no tenia a otro, con lo guapo q es en la peli! Jops, no me odieis! xDDD, no era harry, no me cae tan mal, aunq en este fic es un poco pardillo, pro pobrecillo, estaba enamorado, q se le va a hacer!. Muchas gracias por los rr! Gracias gracias gracias, mil gracias a: amsp14, Malfoy red-haired loved, Niv Riddle, Sara Meliss, fiosol, hannapotter, MBlack, Saiko Katsuka graciasssssssssssss

hasta el proximo capitulo!