Capítulo 2

Harry volvió a entrar al cuarto. Probablemente hoy lo recordara. Hoy si tendría que recuperarla. Rescataría a Ginny de esas tinieblas que la envolvían y que no la dejaban vivir.

- "¿Quién es usted?", escuchó la voz de Gin. Harry sintió un dolor en el pecho.

- "Soy tu nuevo asistente. Estaré hoy contigo para ayudarte…", respondió Harry con la misma respuesta que le daba todos los días.

Ginny se volvió a perder. Harry se sentó en la cama para darle de comer. No tardó mucho. Ginny estaba hambrienta como siempre. Tomó la bandeja para devolverla, y entonces, y solo hasta entonces, se dio cuenta de su propio desayuno. Tomo un pan rápidamente y lo engulló. No podía darse el lujo de perder más tiempo. Entonces advirtió una pequeña cajita musical un poco desgastada que estaba en la mesita de noche. Sus ojos fueron automáticamente hacia el cuello de Ginny. La llave que abría la caja colgaba de una cadena de su cuello. No pudo mirar más esto. Salió de la habitación rápidamente

Al entregar las bandejas. La bruja notó que Harry solo había tomado un pan. El único que tomaba todas las mañanas. Después esperó hasta escuchar la llamada de Harry para ayudar a Ginny.

Al volver al cuarto, Harry notó que Ginny estaba sentada en la cama. Se asomó por la puerta y llamó a la bruja para que ayudara a Ginny a vestirse. La bruja acudió al instante, como cada mañana, y el salió del cuarto.

- "Vamos preciosa, rápido porque hoy tendrás una visita importante", dijo sonriendo la bruja. Harry las esperaba afuera. Ginny le sonrió. Conforme avanzaba el día, parecía que Ginny recordaba cada vez un poco más.

- "Quien viene a verme?", preguntó Ginny. Ahora era más capaz de recordar mas cosas, pero no las suficientes. La bruja sabía que en esos momentos, Ginny no recordaba al supuesto médico ni al supuesto asistente.

- "Hoy viene alguien muy especial para ti", contestó la bruja como cada mañana.

- "A que hora vendrá?", preguntó Ginny. Ahora era capaz de llevar una conversación normal. Parecía que la luz del sol despejaba un poco su memoria. Pero como siempre, no lo suficiente…

- "Entrará al cuarto tan pronto como estés lista.", respondió la bruja con tristeza. ¿Cuánto tiempo podría seguir soportando esta tristeza? En verdad no podía creer que dos jóvenes estuvieran viviendo esa situación de tanto dolor.

La bruja salió de la habitación, señal de que Harry podía entrar. Ginny lucía muy hermosa. Eso era lo único fuera de rutina. Cada día, a Harry le parecía que estaba aún más hermosa que el día anterior. Dio un suspiro. Ginny volteó hacia él.

- "Hola, eres tu la persona especial?", preguntó Ginny un poco sorprendida.

- "Podría decirse que si, ¿esperabas a alguien mas?", preguntó Harry sonriendo con tristeza.

- "En realidad no, es simplemente que no sabía quien iba a entrar. Acaso te conozco?", preguntó Ginny. A Harry le dolió tanto, a pesar de que ya esperaba esa respuesta.

- "No, supongo que no me conoces…", respondió lentamente Harry. Sabía que de ahí en adelante, Ginny no olvidaría nada de lo que pasara en el día, pero al llegar la noche…al llegar la noche ella se dormiría para despertar al día siguiente y no recordar nada. Entonces todo comenzaría de nuevo. Pero podía ser que hoy no pasara eso. Podía ser que hoy por fin ella guardara esos recuerdos y los sacara al día siguiente. Debía aferrarse a esa esperanza.

- "Hoy te contaré una historia. Una vieja historia.", dijo Harry preparándose para contarle la historia que se sabía de memoria de tanto contarla.

- "Una historia, sobre que se trata?", preguntó Ginny mostrando entusiasmo.

- "Es una historia larga, sobre amor, esperanza, dolor, amistad…", dijo Harry recordando a

Ron y Hermione. Su voz se quebró. Tomó un sorbo de agua para disimular. Ginny lo miraba fijamente.

- "Esta historia comienza en una historia fantástica. Una historia sobre magia, que comienza en un castillo llamado Hogwarts…sobre un personaje llamado Ginny y sobre sus amigos Hermione, Ron y Harry", comenzó Harry dolorosamente.

Por mas de una hora le contó sobre su segundo año en Hogwarts, y por consiguiente, sobre el primer año de Ginny en Hogwarts. Le contó sobre la cámara secreta, cómo Ginny había sido hechizada por un personaje muy malo llamado Lord Voldemort, como sus amigos habían luchado por ella, y cómo Harry la había rescatado... en fin, le contó absolutamente todo. Ginny seguía la historia con mucho interés.

- "Esa Ginny debió ser una tonta para dejar que ese Lord Voldemort la engañara. En cambio, para Harry ella debió resultar muy importante para arriesgase a sí mismo.", dijo Ginny cuando Harry hizo una pausa. Harry ya sabía que Ginny hablaría en ese momento, pero era reconfortante escucharla, ya que generalmente no decía lo mismo todos los días. A veces decía Lord Voldemort era un ser deplorable por engañar a esa pobre niña, o que Ginny era una tonta… pero nunca lo había mencionado a él… hasta ahora. Claro que ella no sabía de quienes estaba hablando Harry. En realidad no sabía como se llamaba. Harry sintió un escalofrío. Sería posible? Acaso hoy sería posible que ella lo recordara? Miro a Ginny. Sabía que ya no hablaría más, por lo que siguió con la historia.

Durante horas le habló durante los siguientes años en Hogwarts, sobre como Harry se iba con los Weasley a pasar el verano, sobre como se hicieron muy amigos… pero nunca le mencionó sobre lo que el personaje de Ginny sentía por Harry. Era algo que no podía contar… era como quebrantar la privacidad de Ginny… y él la quería tanto… no podía hablar de eso…