Es como amor, pero no lo sé.
Sabe a besos mi almohada.
Madrugada, y él no esta.
Solitaria en mi cama,
Si él me ama por qué se va
-¿Qué fue todo eso?- preguntaba Harry.
La chica encogió los hombros; ni siquiera ella sabía.
-No lo sé. La sra. Pomfrey dijo que tenía una fiebre altísima, que estaba delirando… Así que, nada de que preocuparse.- fingió.
Aunque lo que le había dicho la enfermera era lo correcto, algo le hacía sentir una enorme incertidumbre. Había sentido tan real las palabras que él le decía, que estuvo a punto de decirle que ella también quería quedarse junto a él. "¿Por qué? ¿Por qué sentí la necesidad de decirle tal blasfemia?"
Estaba confundida; desde la primera vez que besó a Malfoy se juró que sería solo eso. Solo atracción física, una atracción que sentía desde hacía ya mucho tiempo. Pero cada día que pasaba, cada hora, cada minuto... Necesitaba estar con él, saber cómo estaba, qué sentía, con quién estaba. "Hermione, quítate esas ideas absurdas", se dijo. Era imposible llegar a sentir algo por él, más que mal, habían hecho un trato.
Flash Back
-Recuerda, Granger. Esto es un secreto entre tú y yo.- dijo al amanecer.
Hermione rodó los ojos. Estaba demás que se lo dijera; ella por nada del mundo se lo diría a nadie.
La luz del sol que acababa de amanecer se reflejaba en el rostro del chico. Sus ojos se veían diferentes: un brillo especial recorría cada centímetro, haciéndolos más hermosos que nunca. Su piel se veía más blanca: parecía un muerto en vida tan pálido, pero permitía ver cada milímetro de su rostro. Sus labios se veían más rojos: tan rojos que provocaba besarlos al solo sentir el aliento a menta.
-No tienes ni que decírmelo, Malfoy. ¿Acaso crees que es un orgullo para mí decir que hicimos el amor?- respondió mientras se volteaba.
Él la tomó por los hombros, forzándola a mirarlo a los ojos. La chica se sintió intimidada ante tal hermosura que emanaba Draco.
-Te equivocas, Granger, te equivocas. Nosotros no hicimos el amor…- la corrigió.
Hermione lo miró extrañada. "¿A no? ¿Y cómo lo llamas? ¿Deberes de premios anuales? ¿Jugar al gato? ¿Dominó?". Frunció el seño, esperando que él se lo aclarara.
-Nosotros tuvimos sexo… Eso.- le dijo, bajo la mirada de rareza de Hermione.
-¿Y se puede saber cuál es la diferencia, Malfoy?- le replicó aún perdiéndose en las grisáceas pupilas.
-Argh.- gruñó. –Está clara, Granger. ¡Me sorprende que la sabelotodo de Hogwarts no sepa algo tan simple! Sexo es el acto carnal, lo que tuvimos nosotros. Hacer el amor, implica lo espiritual, el alma… ¡Vamos! ¡El nombre lo dice todo!- se irritó. Para él no era nada fácil estar explicando algo que nunca había sentido… Amor
Hermione lo miró de lado; tenía razón. Nunca se le había ocurrido la diferencia, en realidad, nunca se le había ocurrido estar hablando de eso con Malfoy. ¡Y para qué decir lo que habían hecho! Si bien lo había imaginado un par de veces, nunca pensó que estaría en sus planes.
-Es por eso- continuó Draco alzando la ceja izquierda. -que si quieres seguir con esto, no debes implicar tus sentimientos. Porque tenlo claro, Granger, yo nunca llegaré a sentir nada por ti.-
Si bien la chica no sentía nada por él, le molestó la declaración que le había dicho.
-¡Ja! Me subestimas, Malfoy. Lo único que puedo sentir por ti es odio y desprecio.- replicó aún enfadada.
Draco soltó una risotada que enfureció más a la chica. Luego le agarró el mentón y le susurró al oído:
-Me alegra saberlo. Porque yo también solo siento eso, aunque, también me das asco, sangre sucia.-
Hermione sentía que le hervía la sangre. "¿Acaso no podía ser un poco más dócil al decir lo que sentía?". Pero aún así, no dejaría que él se quedara con la última palabra.
-Está bien, Malfoy. Me parece excelente que si seguimos con esto, queden claras las condiciones. Porque sería desagradable que un hurón como tú se enamorara de mí. Eres repugnan…- un beso de Malfoy la silenció. Por bastante rato en realidad.
Fin Flash Back
Es amor o no es amor,
no lo sé…
No sé si es amor, pero lo parece
Todo puede ser...
Con él soy feliz, pero vivo sin él.
Pero ahora todo se le hacía tan complicado… Sentía tanta necesidad de decirle que sí, que siempre se quedaría con él a pesar de que el mundo le diera la espalda.
Estaba hecha un mar de dudas. Sentía como un nudo comenzaba a tomar forma en su estómago, y que, poco a poco, subía hasta su garganta. Sacudió su cabeza tratando de desechar todo sentimiento y pensamiento que siempre tenían el mismo fin: Draco Malfoy
-¿Estará bien que lo haga?- le preguntó Harry.
Hermione alzó la vista, topándose con las pupilas verdosas de su mejor amigo.
-Sí, por supuesto.- respondió segura, aunque no tenía idea qué respondía.
Harry agachó un poco su cabeza, mirándola por encima de sus gafas.
-Hermione…- suspiró. -¡Ya estás pensando en él…!-
La chica lo miró fingiendo indignación, y le dedicó una seria mirada de reproche.
-No me mires así, sabes que acerté. Te dije "Dumbledore pretende contratar más elfos para la fiesta de Halloween". Y que tú me digas "Sí, por supuesto" no es normal.- le reprochó.
Ni siquiera eso le importaba en aquel momento. "¡Al diablo los elfos...!"
-Herms…- comenzó a hablarle nuevamente. –Creo que, por tu propio bien, no deberías ver más a Malfoy. Te está haciendo daño… No me mires así, lo sabes.- se defendió cuando la muchacha lo miraba con fiereza.
No sé si es amor, pero crece y crece
Tan por dentro de mí que se ve a flor de piel.
¡Qué curioso, siempre juntos,
él con nadie, yo con él.
Y se me escapa entre los dedos.
Medio ángel, medio cruel.
Sabía que su amigo tenía la razón. Pero le era imposible obedecerlo. Su mente le decía "Hermione, Harry tiene razón. No puedes sentir nada por él. No debes", mientras que su corazón lo contrariaba "Hermione ¿Por qué cada noche que no estás con él te sientes sola, triste? Siendo que estás rodeada de tus mejores amigas. ¿Por qué cuando no lo ves sientes como si estuvieras en una cápsula de cristal sola, triste? Siendo que Harry y Ron están a tu lado."
No podía negarlo más. Lo sabía. Lo sabía y lo sentía más fuerte de lo que jamás hubiese sentido. Amaba a Draco Malfoy. "¿Lo amo?". Sabía que sí, pero no quería admitirlo. No debía, no podía.
Se levantó depositando un beso en la frente de Harry, mientras él la cuestionaba…
-¿Dónde vas? No vayas a verlo. Herms, no vayas.-
-No te preocupes, Harry. No iré. Necesito pensar, estar sola, aclararme…-
Sin duda alguna esta noche aclararía bien qué sentía por ese ser tan frío y cruel, pero a la vez, tan dulce y tierno.
Eso es amor o no es amor
Yo no lo sé…
No sé si es amor, pero lo parece.
Y me temo que yo, estoy loca por él.
No sé si es amor, todo puede ser...
Es algo cálido, es algo íntimo.
