CAPITULO 10: LOS DIEZ ELEGIDOS
Los chicos elegidos viajaron hacia el Lucero de la Rosa. No pasó mucho tiempo hasta que llegaron a la zona oscura y se introdujeron a ella. Nara tuvo un poco de miedo al entrar, pues todavía no superaba su miedo a la oscuridad.
Después de varias horas de camino, los chicos volvieron a ser ellos mismos y descansar un rato de su largo camino.
-¿Estás bien, Kouichi?- preguntó Nara, al ver que el chico se estiraba ligeramente después de volver a ser él mismo.
-Ehh... sí- dijo Kouichi, sonriendo- no te preocupes...-
-Chicos, me muero de hambre- dijo Jumpei, tocándose el abdomen con ambas manos, y haciendo una mueca- voy a buscar algo de comer...-
-Te acompaño, Jumpei- dijo Tomoki alegremente- yo también tengo hambre...-
Una vez que los dos se fueron, Kouji se sentó junto a Ai, quien se había refugiado junto al tronco de un árbol.
-Oye, ¿estás cansada?- dijo Kouji. Ai alzó la mirada.
-Un poco- dijo ella. Kouji le sonrió. Tenía unos ojos color violeta tan hermosos.
Kouji miró a su alrededor. Izumi y Takuya estaban conversando de algo al parecer muy divertido, pues no paraban de reír. Kouichi y Nara estaban discutiendo de nuevo. Kouji sonrió de nuevo y se volvió hacia Ai.
-¿Puedo preguntarte algo?- dijo Kouji. Ai lo miró fijamente.
-Por supuesto- dijo ella.
-¿Qué fue lo que sucedió contigo anoche?- dijo Kouji- ¿acaso eres sonámbula, o tuviste una pesadilla?-
Ai sacudió la cabeza.
-Lo siento mucho, Kouji, pero no lo sé- dijo Ai tristemente- una voz me ordenó que saliera al lago, y por más que quise resistir no pude...-
-¿Y sabes de quien es esa voz?- preguntó Kouji.
-Creo que es Lucemon, Kouji- dijo Ai- creo que me controla para saber lo que hacen ustedes...-
"Lo mismo que nos dijo Ophanimon" pensó Kouji. Los ojos de Ai se llenaron de lágrimas.
-¿Porqué siguen llevándome con ustedes, Kouji?- dijo Ai- si es cierto lo que sospecho, yo soy el enemigo también... soy un peligro mientras viaje con ustedes... todo lo que veo, lo ve él también...-
Kouji sintió que su corazón se hacía pedazos al verla llorar así, además de unas verdaderas ganas de apretar el cuello de Lucemon por atreverse a hacerla sufrir de esa manera. Se acercó a ella y la abrazó con cariño, permitiendo que ella recargara su cabeza en el pecho de él. Luego Kouji recargó su cabeza en la de ella.
-No llores, Ai- dijo Kouji- todo fue una pesadilla y nada más... verás como no vuelve a pasar...-
-No es una pesadilla, Kouji- dijo Ai, sin atreverse a moverse ni separarse de Kouji, porque se sentía segura de esa manera- tengo miedo...-
-No tengas miedo- dijo Kouji- ya te lo dije una vez... mientras yo esté aquí, nadie se atreverá a lastimarte...-
Ai no respondió, pero Kouji estaba seguro de que se sentía mejor. Hubiera seguido así para siempre, pero escucharon algo entre los árboles. Había algo entre los arbustos. Inmediatamente Kouichi y Nara dejaron de discutir. Kouji y Ai se levantaron.
-¿Qué fue eso?- preguntó Nara.
-No lo sé- dijo Takuya- tal vez fueron Tomoki y Jumpei...-
-No lo creo- dijo Kouichi- esto está muy extraño- sacó su Digivice- solo para estar seguros...-
-¿Quién anda ahí?- demandó Izumi.
Los arbustos se movieron de nuevo, y tres chicos salieron de ellos.
-¡Kouji!¡Kouichi!- exclamaron los recién llegados- ¿también ustedes están aquí?-
Kouji los miró sorprendido. Eran tres chicos que conocía muy bien. El primero era muy alto, de cabellos castaños oscuros, casi negros. Los dos últimos eran de la misma estatura de los gemelos, uno rubio y uno pelinegro.
-Karou, Satoshi, Tooya- dijo Kouji, mirándolos alternadamente- ¿ustedes que hacen aquí?-
-Ojalá lo supiera- dijo Satoshi, encogiéndose de hombros- el otro día, cuando encendimos la televisión después de la práctica en tu casa, aparecimos aquí de pronto...-
-Sí, y nos encontramos los tres- dijo Tooya- varios de esos... digimon raros nos comenzaron a perseguir-
-Y huimos a esta región oscura- dijo Karou - porque nos pareció que aquí no nos seguirían...-
-Pues hay digimon en todas partes- dijo Kouji- aunque muchos aún temen entrar a la zona oscura...-
-¿Sabes de alguna manera de regresar a casa?- preguntó Satoshi.
-Conozco una- dijo Kouji, tras pensarlo por unos momentos- pero tienen que venir con nosotros...-
-¿Conoces una? ¿cuál?- preguntó Karou.
-Pues...- dijo Kouji, mirando de reojo a Ai, y luego a Kouichi. Este último sacudió ligeramente la cabeza- ya verán, partiremos tan pronto como Jumpei y Tomoki regresen, fueron a buscar algo de comer...-
-Ya volvimos, chicos- dijo Jumpei, volviendo con una bolsa llena de alimentos. El y Tomoki se detuvieron de pronto- ¿y ellos que...?-
-Nos acaban de encontrar- dijo Kouji, y se volvió al resto- son mis compañeros de la banda: Satoshi, Karou y Tooya. Chicos- continuó, volviéndose a sus tres compañeros de banda- ellos son Jumpei y Tomoki, creo que ya conocen a Takuya, Izumi y a mi hermano, porque vamos en el mismo grado... y a Nara también. Y ella es Ai-
-Hola, preciosa, gusto en conocerte- dijo Tooya, dirigiéndose a Ai, y haciendo hervir la sangre de Kouji, a pesar de que se trataba de uno de sus amigos. Ai se sonrojó visiblemente.
-¿Y quieres decirme que nos van a acompañar al Lu...?- comenzó Jumpei.
-¡A donde vamos!- exclamaron Kouji, Kouichi, Nara, Tomoki, Izumi y Takuya al mismo tiempo, para evitar que Jumpei metiera la pata.
-Bueno, eso- dijo Jumpei- pues yo no iré con ustedes si van ellos...-
-¿Y eso porqué?- dijo Kouichi, alzando una ceja.
-Porque si son sus amigos, deben de ser tan desagradables como tu hermano- dijo Jumpei- además, no podemos estar de niñeras cuidándolos... con Ai tenemos...-
Kouji frunció el entrecejo, y tanto Ai como Nara hicieron otro tanto. Los tres chicos iban a reclamar cuando hubo un fuerte estruendo.
-¿Qué rayos es eso?- dijo Kouichi.
Varios de los árboles cayeron al suelo, y un enorme digimon apareció. Un Monzaemon. Y no estaba solo. Detrás de él llegó un Icedevimon. El enorme oso y el demonio del hielo no se veían nada amistosos.
-Digievolucionemos- dijo Takuya, sacando su Digivice.
-¡Ataque de Corazones!- exclamó Monzaemon antes de que pudieran digievolucionar.
En su primer ataque atrapó en una burbuja roja a los gemelos y a Takuya, los cuales habían intentado proteger al resto. El Monzaemon atacó de nuevo, y esta vez atrapó a Izumi, Nara, Jumpei y Tomoki. Mientras esto sucedía, Ai y los tres amigos de Kouji miraban la escena sorprendidos.
-A ellos tres no, no nos sirven para nada- dijo Icedevimon cuando Monzaemon se preparaba para atacar de nuevo- esa chica pertenece al señor Lucemon y la llevaremos con nosotros, esos tres chicos no nos darán batalla...-
-¡No!- exclamó Kouji, tratando en vano de romper la burbuja en la que estaba atrapado, mirando a Ai aprehensivamente- ¡déjala...!-
-¡Déjalos!- dijo Takuya, también intentando librarse de la burbuja.
-Esos niños ya me cansaron- dijo Icedevimon- sé que Destynmon me ordenó llevárselos completos... pero congelados no harán tanto ruido...-
-No lo hagas...- dijo Ai, dando un paso adelante y estirando un brazo, como si quisiera detenerlo con su mano.
-Cierra la boca, mocosa- dijo Icedevimon- yo haré con ellos lo que me plazca...-
-No te dejaremos- dijo Tooya, lanzándole algunas de las manzanas que Tomoki y Jumpei habían recogido. Satoshi y Karou lo imitaron.
-¡Toma esto!- exclamó Satoshi.
-¡Ya basta!- bramó enfadado Icedevimon- Monzaemon, atácalos a ellos también...-
Los tres chicos se colocaron deliberadamente entre Ai y Monzaemon. De pronto, delante de ellos apareció un extraño brillo, y de él surgieron tres Divices. Satoshi tomó uno que era de color verde y marrón, Tooya tomó uno de color marrón y blanco, y Karou uno color gris y blanco.
-No puedo creerlo- dijo Kouichi al ver lo que sucedía.
-Y mira- dijo Tomoki, señalando hacia ellos., mientras los Spirits del Bosque, la Tierra y el Metal entraron a los tres Digivices.
-¿Qué rayos es esto?- dijo Satoshi, alzando una ceja y mirando extrañado el digivice. Sus dos compañeros hicieron lo mismo.
-¡Digievolucionen!- les dijo Takuya.
-Spirit Evolution- dijo Satoshi- ¡KIMON!-
-Spirit Evolution- dijo Tooya- ¡TSUCHIMON!-
-Spirit Evolution- dijo Karou- ¡HAGANEMON!-
-Es imposible- dijo Takuya- Kimon del bosque, Tsuchimon de la tierra y Haganemon del metal...-
-Pero...- dijo Jumpei- ¿y Arbormon, Grumblemon y Mercurymon?-
Ninguno de los tres se parecía a los antiguos digimon contra los que Takuya y los otros habían peleado antes. No tuvieron tiempo de pensar en ello.
-¡Lianas estranguladoras!- exclamó Kimon. Unas largas lianas emergieron de este digimon con forma de árbol, y atraparon al Monzaemon.
-¡Lluvia de rocas!- exclamó Tsuchimon. De la nada aparecieron rocas sobre el digimon enemigo y cayeron pesadamente sobre él.
-¡Discos de metal!- dijo Haganemon. El digimon lanzó un par de discos de acero que golpearon al Monzaemon.
Los tres nuevos digimon atacaron a Monzaemon, y lo vencieron fácilmente. Haganemon recogió su Digicode. Las burbujas se reventaron, liberando a los chicos, que aún estaban algo aturdidos.
-¡Bien hecho!- exclamó Kouji, una vez que pasó el efecto del ataque de Monzaemon y se puso de pie.
-No canten victoria tan pronto, niños- dijo el Icedevimon- a mí no me podrán vencer tan fácilmente... ¡Brisa congelante!-
Tomados por sorpresa, Kimon, Tsuchimon y Haganemon cayeron, y volvieron a ser Satoshi, Tooya y Karou.
-¿Ven?- dijo Icedevimon- estos elegidos son muy débiles... ahora que los diez están aquí todos vendrán conmigo al castillo del señor Destynmon-
-¡Nunca!- exclamó Nara.
-Así es, ellos no te acompañarán- dijo Ai- ni yo tampoco...-
-Tú perteneces al señor Lucemon, niña- dijo Icedevimon- tú y tus amigos vendrán conmigo aunque tenga que llevarlos en un cubo de hielo...-
Ai siguió mirándolo, desafiante. Icedevimon se enfureció y extendió su mano hacia ella.
-¡No te atrevas a tocarla!- exclamó Kouji, sacando su digivice- Spirit Evolution. ¡WOLFMON!-
-Spirit Evolution- exclamó Kouichi- ¡LÖWEMON!-
-¿Insisten en resistirse?- dijo Icedevimon- bien, ustedes dos serán los primeros congelados. ¡Brisa congelante!-
-No te saldrás con la tuya- dijo Wolfmon- prepárate a luchar contra el poder combinado de la luz y la oscuridad...-
-Te arrepentirás de habernos retado- dijo Löwemon.
-No les temo- dijo Icedevimon- ¡Brisa congelante!-
-¡Luz cegadora!- exclamó Wolfmon.
-¡Meteoro de la Oscuridad!- exclamó Löwemon.
Los ataques combinados dieron a Icedevimon, quien lanzó un alarido y su Digicode apareció. Wolfmon lo recogió, y los gemelos volvieron a su forma normal.
-¿Están bien, chicos?- preguntó Kouji, dirigiéndose a Satoshi y los otros dos.
Ellos asintieron sin decir nada. Hubo un par de minutos de silencio.
-¿Nos convertimos en un digimon?- dijo de pronto Tooya. Kouji puso los ojos en blanco.
-No tenemos tiempo para entrar en detalles- dijo Kouji- los sirvientes de Lucemon pueden estar cerca...les explicaremos todo en el camino...-
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-Bien, muy bien- dijo Destynmon- ya están completos los diez guerreros legendarios...-
-¿Y eso es bueno?- preguntó LordKnightmon.
-Por supuesto- dijo Destynmon.
-No entiendo- dijo LordKnightmon- ¿no crees que será más difícil atraparlos, ahora que ellos tienen todos los Spirits?-
-No tienen todos los Spirits, y aún no llegan con Ophanimon- dijo Destynmon- además, hay algo de lo que me percaté en la batalla de los chicos contra Icedevimon y Monzaemon...-
-¿Y eso que fue?- preguntó LordKnightmon, cansado de los acertijos en los que hablaba Destynmon- ¿y qué quisiste decir con eso de que no tienen todos los Spirits?
-Lo de los Spirits lo entenderás luego- dijo Destynmon- y lo que he notado es que el lobo solitario ya no lo es tanto, y menos cuando está con el bello ángel de la noche... creo que si les enviamos un último saludo las cosas mejorarán-
-¿Un último saludo?- dijo LordKnightmon.
-Ya verás a lo que me refiero- dijo Destynmon.
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-Ya casi llegamos- dijo Kazemon, visualizando desde lejos el brillo del Lucero de la Rosa.
Los tres amigos de Kouji se habían transformado a su forma bestia: Woodmon, Rockdigmon y Steelmon. Takuya se había convertido en Vitramon, y Tomoki iba aferrado a su espalda. Nara iba de nuevo sobre Kaiserleomon, y Ai viajaba profundamente dormida sobre la espalda de Kendogarurumon.
-Por fin, el Lucero de la Rosa- dijo Kaiserleomon.
-Se ve muy lindo desde aquí- dijo Nara- ¿qué hay abajo?-
-El castillo de Cherubimon- dijo Kaiserleomon- ahora que Cherubimon es bueno, supongo que será un hermoso lugar, lleno de luz...-
-Menos mal- dijo Nara- no me gusta mucho la oscuridad...-
Kaiserleomon no respondió.
-Bueno, sabes a lo que me refiero- dijo Nara, dándose cuenta de que tal vez había tocado una fibra sensible.
-Sí, no te preocupes- dijo Kaiserleomon.
-¿Y porqué te gusta a ti la oscuridad?- preguntó Nara.
-La oscuridad siempre ha formado parte de mí, Nara- dijo Kaiserleomon- antes, esa oscuridad se manifestaba como tristeza en mi corazón...-
-¿Y ahora?- preguntó Nara.
-Nostalgia, supongo- dijo Kaiserleomon- ¿porqué no te agrada la oscuridad?-
-Porque no me deja ver- dijo Nara, ruborizándose un poco.
-Tal vez eso sea cierto- dijo Kaiserleomon- pero también la luz puede cegar tu vista, Nara...-
-Tienes razón- dijo Nara, tras meditarlo unos segundos.
De pronto, todos se detuvieron, porque Ai comenzó a moverse violentamente, aún dormida sobre la espalda de Kendogarurumon. Éste se convirtió de nuevo en Kouji y la depositó en el suelo con cuidado.
-Ai, ¿qué te sucede?- dijo Kouji, notando que la chica respiraba agitadamente, como si tuviera una pesadilla.
-Se dirigen al Lucero de la Rosa...- dijo Ai, en una voz que no parecía la de ella- no puedo alcanzarlos en el Lucero de la Rosa... no lo permitiré, los detendré primero...-
-¡Ai!- exclamó Kouji, sacudiéndola al principio suavemente, luego con más fuerza para despertarla. Ella abrió los ojos y miró a su alrededor.
-Otra vez esa voz, Kouji- dijo Ai, aferrándose al brazo de Kouji.
-Ya, tranquila- dijo Kouji- fue solo un sueño...-
-No fue un sueño- dijo Ai- su voz aún resuena en mi cabeza... Kouji, viene por mí...-
-¿Quién viene por ti?- dijo Kouji, frunciendo el entrecejo.
-Es él- dijo Ai- es grande, fuerte y malvado...-
Kouji iba a volver a preguntar, pero un fuerte temblor sacudió la tierra, y un fuerte estruendo resonó. El menor de los gemelos sintió la mano de Ai apretar la suya.
-Es él, Kouji- dijo Ai- y viene por mí...-
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CONTINUARÁ...
A petición de Dany-kanuto-link, voy a contestar los reviews. Una disculpa si no lo hacía antes, pero en otra sección me sacaron una historia por contestar reviews.
Dany-kanuto-link: me da gusto que te haya agradado, estoy ahorita trabajando en el dibujo de Mizumon, la verdad soy malísima dibujando, así que seguí tu consejo. Aun no lo termino, pero cuando lo haga te lo mando. Y sí, la forma bestia aún no la presento pero es una sirena llamada Mermaidmon (como el digimon antiguo). Gracias por tu review.
Shady 10: muchas gracias por tu review
Ashiba Fujimiya: a presencia maligna te refieres un yami, como en yugioh? Porque yo tengo uno, se llama conciencia o Tashat, y es muy molesta... jeje bueno, procuraré describir más los personajes nuevos. Gracias por tu review.
Kawaiitsuki: bueno, no fue el que tú dijiste. No te preocupes, los amigos de Tomoki saldrán pronto también. ¡Gracias por tu review!
A los demás: Gracias por seguir leyendo, los reviews se agradecen mucho!
Abby L. / Nona
