Hola a todos! Ya se que he tardado mucho en subir este capítulo, pero es que he estado muy ocupada! Espero que me perdonéis. Y antes de que me matéis, os pongo el siguiente capítulo, espero que os guste! Ah! Y dejar reviews! Que esta vez solo me lo dejó Yare! Ah! Este capítulo se lo dedico a Yare! Ya que ha sido la única persona que me dejó reviews! Muchas gracias!


CAPITULO 3

Ya a la hora de la cena, nos fuimos los tres al Gran Comedor y nos sentamos en la mesa de Gryffindor. Todos estábamos comiendo y hablando, cuando vino una lechuza hacia Hermione. Ella, cuidadosamente cogió la carta que llevaba en la patita izquierda y la lechuza volvió a volar rápidamente hacia la ventana. Hermione, confusa, leyó la carta:

Querida Hermione:
¿Que tal estas? Yo bien, aunque últimamente hace mas frió de lo normal. Te escribo para preguntarte sobre como han sido tus vacaciones
y tu vuelta al curso. Yo también quería decirte que te echo mucho de menos y que deseo verte lo antes posible. Sé que eso no va a ser posible,
porque ahora con el colegio no se puede, pero es que tengo una cosa muy importante que decirte, y aunque por carta no seria lo correcto, te lo
tengo que contar porque ya no aguanto más.
Mira Hermione, sabes que he conocido a muchas chicas, y que muchas otras se han encaprichado por mí, pero yo a todas esas chicas no las quiero, no me han enamorado como lo hiciste tu. Por eso fui contigo al baile aquel¿lo recuerdas? Yo si, cada día de mi vida, recuerdo haber estado abrazado a ti. No quiero que nuestra amistad se acabe, pero me gustaría pedirte¿Quieres ser mi novia? No creo que la distancia sea un problema, porque si me dices que si, me iré hacia Gran Bretaña a vivir o si quieres te puedes venir a vivir aquí. Ya se que esto te habrá pillado de sorpresa pero no hace falta que contestes rápidamente, sino que cuando lo hayas pensado bien y estés segura de tu respuesta, me lo envías.
Muchos besos.
Te quiere Víctor.

En ese momento, se me cayo el mundo¿como puedo competir con Víctor Krum¿Como puedo hacer para que ella se fije en mi y rechace al otro¡Ay¡Que duro es el amor!
Durante toda la cena, estuve totalmente callado y triste. A parte que estaba un poquito nervioso por lo de Hermione y también porque sentía la mirada de los tres (Ginny, Hermione y Harry) encima mía. No pensaba decir nada ni tampoco tenia ganas. Cuando terminé de cenar, me levanté y con una tímida voz dije:
- Me voy a la cama.

De camino a la sala común, estuve pensando en la forma de declárame a Hermione en persona, ya que era la mejor solución que se me ocurría. Estuve pensando en unas cuantas situaciones para declararme, hasta que encontré la forma más romántica que se me ocurría. Sabía que no tenía nada que perder, ya que el no ya lo tenía. Aunque esperaba que nuestra amistad por esto no se terminara.
Cuando me quise dar cuenta, ya había entrado a la sala común y me había dirigido al dormitorio. Allí, me puse el pijama y me tumbé en la cama. Cuando mis ojos se estaban cerrando... entraron por la puerta un chico moreno con gafas y una chica pelirroja detrás. Eran Harry y Ginny que venían hablar conmigo. Como no tenía ganas de hablar, me hice el dormido, pero ya era demasiado tarde, porque ellos me habían visto mirarles al entrar.
- No te hagas el dormido, hermanito, que te conocemos.- dijo Ginny.
- ¿Qué?- dije mientras fingía un bostezo.
- Queremos hablar contigo sobre lo que ha ocurrido en la cena, Ron.- me dijo Harry.
- No hay nada que hablar, chicos, Víctor se ha declarado y lo más seguro que le elija a él.- contesté tristemente.
- Todo puede ocurrir, hermanito, pero tenéis las mismas oportunidades tanto él como tú. No te desanimes, que Hermione es muy buena chica.- me animó Ginny.
- Ya... si se que es buena chica y hará lo correcto. Pero no puedo dejar de pensar en que puedo pederla... - me desahogué- es que es la primera chica que me ha enamorado.
Hubo un incómodo silencio... hasta que Harry dijo:
- Ron, tienes que hacer algo, no te puedes quedar tirado en la cama siempre y estar deprimido. Tienes que actuar y ya.
- ¡Eso! Harry tiene razón. Tienes que hablar con ella lo antes posible y contarle todo lo que nos cuentas sobre lo que sientes por ella. Hazlo antes de que sea demasiado tarde. - me animó Ginny.
- Si, tenéis razón. Al venir para la sala común, estuve pensando unas cuantas formas de declararme, pero creo que ya he encontrado la mejor solución. - les conté.
- Muy bien, hermanito, pero ante todo díselo con cuidado y con ternura, que ella sienta que se lo dices de corazón y no para interponerte entre ellos dos. - me aconsejó Ginny.
- Muchas gracias, chicos.- les agradecí- pero ahora me voy a acostar que ya es tarde.
- De nada. Hasta mañana.- se despidió Ginny y se marchó de la habitación.
- De nada amigo, si necesitas algún consejo más... pídenoslo.- comentó Harry. Al día siguiente, yo me levanté muy temprano a pesar que era sábado, me duché con agua templadita y me vestí con ropa muggle (ya me estaba acomodando a llevar este tipo de ropa). A la hora del desayuno me bajé al Gran Comedor. Aun no habían llegado ni Harry, ni Ginny, ni mi querida Hermione. Me senté en un extremo de la mesa de Gryffindor y me dispuse a desayuna, cuando una chica castaña se sentó a mi lado. Yo me ruboricé, pero no se dio cuenta (o eso me hizo creer).
- Buenos días Ron. - me saludó Hermione dulcemente.
- Buenos días. - contesté tímidamente y la pregunté.- ¿Qué tienes pensado hacer este tarde?
- Pues...- empezó a balbucear. (Era la primera vez que la veía ponerse tan nerviosa delante mía)- pues tenía pensado... escribir a Víctor...
- ¡Ah! Pues entonces... nada.. era por si querías venirte conmigo a dar una vuelta por los alrededores del lago y eso... pero si tienes que hacer algo... pues nada... - la dije un poco triste.
- Oye... si quieres podemos quedar... la carta la puedo escribir por la noche... no corre mucha prisa... - se explicó Hermione.
- Vale, muchas gracias. Es que me gustaría hablar contigo. - me atreví a decir.- pues... a las 17:30 en la sala común.
- De acuerdo, a esa hora te veo.- contestó Hermione con una sonrisa.
Después de aquello, me levanté y me fui del Gran Comedor. Era hora de contarle lo que había pasado a mi amigo Harry y a mi hermanita Ginny. Así que inmediatamente me dirigí a la sala común. Allí me los encontré charlando animadamente junto con Seamus y Neville. A continuación, me acerqué y les saludé:
-¡Hola chicos!
- Hola Ron.- me saludaron al unísono.
- Oye, me perdonáis, es que tengo que hablar con Harry y con Ginny.- les dije con educación a Seamus y a Neville.
- Sí, por supuesto. Nosotros íbamos al desayunar. Hasta luego chicos.- dijo Seamus con una sonrisa.
- Hasta luego.- les contestamos.
Cuando Seamus y Neville salieron de la sala común, Harry me preguntó con gran interés:
- ¿Qué te ha pasado?
- Pues... estaba en el Gran Comedor desayunando.. cuando de pronto ha venido Hermione y...
- ¿Y...? - preguntó con gran curiosidad Ginny.
- Pues... estuvimos hablando y... hemos quedado esta tarde para hablar... - explicaba cuando Harry y Ginny me interrumpieron exclamando al unísono:
- ¡Qué bien!
En ese momento se acercaba Hermione por la espalda y preguntó:
- ¿Qué resulta tan bien?
- Pues.. eh...- balbuceaba Harry- que hoy sea Sábado y no tengamos clases...
- ¡Ah! Sí, es estupendo- dijo Hermione alegremente.- a por cierto Ron, no te olvides que esta tarde aquí a las 17:30. Te espero.
- De acuerdo.- asentí.


Espero que os haya gustado el fan fiction. Ahora la respuesta a los reviews, aunque mejor dicho al review!

Yare: muchas gracias por leer mi fan fiction y por estar entrando siempre a ver si lo actualizo! Me anima mucho que me dejéis reviews... pero en el capítulo 2 fuiste la única que me dejó uno! Pero en fin! Ah! Me encanta tu fan fiction! Síguelo pronto! Besos!