Hola a todos! Bueno soy Arashi Eiri, la hermanita de Kaissa-chan y vengo de parte suya a traerles un maravilloso capítulo más de esta historia tan buena
Kaissa-chan me pidió que pidiese disculpas por su retraso pero créanme que ella ha tenido muchísimas cosas que hacer y apenas y tiene tiempo de descansar lo suficiente u.u
Mientras ella les agradece a GRIS-KAG, HAWKANGELXD, PICASSO, CICEL, SARAH-ARTEMISA y a ALEJANDRA por sus hermosos reviews que siempre la animan a continuar n.n. Ah pero también le agradece a toda la gente que lee y que también, gracias a ellos sigue adelante con sus fics n.n
Ahora si pasemos al capi n.n
Disclaimer: Inu y Co no me pertenecen sino a la sensei Rumiko Takahashi, yo solo los tomé prestados para este fic y su entretención.
9. Mentiras?
El ambiente era lleno de dudas, la incertidumbre, la tristeza, el odio y la inseguridad estaban complementándose unas con otras….uniéndose en un solo sentimiento que nadie sabía como llamarle o quizá no se transformaba en uno si no mas bien lo parecía al ir cambiando a cada segundo.
Nadie se movía, nadie quería decir la primera palabra, no querían romper ese silencio pues sabían que quien lo hiciera desencadenaría una serie de hechos que no tendrían solución…mas no se puede evitar lo que el destino nos trae.
Su corazón y su mente no comprendían aquel cruel engaño, todas sus palabras dichas en aquella cena fueron tan solo eso…palabras, palabras simples que se las había llevado el viento, que se habían ido antes de poder llegar y que la esperanza que le dieron de seguridad solo había sido un mero engaño escondido tras la apariencia de la felicidad y seguridad…tras un rostro sereno y unos ojos que supieron expresar amor…
Pero todo era una actuación…ahora podía sentir el aroma de incienso, acaso eso lo había arreglado desde antes para que cuando llegara no pudiera sentir el aroma de aquel maldito sujeto que había vuelto a su vida solo para dañar otra ves, tan bien había planeado las cosas que ni siquiera él pudo darse cuenta como lo engañaba frente a sus narices?...su mente estaba confundida no sabía que pensar ni que decir, tenía ganas de matarlos pero algo lo impedía: el amor hacia Kagome había crecido incluso como para no hacerle daño en este tipo de situaciones en las cuales él jamás se esperó encontrar…
Su cuerpo estaba congelado, deseó que el tiempo se congelase también para poder esclarecer aquella situación, pero el reloj continuaba con su marcha y los segundos iban y morían sin cesar, uno tras otro, como una cadena que jamás se terminaría. Lo único que se escuchaba era el sonido del pequeño reloj, sus manecillas se movían independientes sin saber cual era la triste escena que estaba frente a ellas.
La miko intentaba hablar pero sus labios no podían emitir ningún sonido, mejor dicho no sabía que sonido emitir, no sabía como explicar, no sabía como actuar…no se esperó que Sesshoumaru volviera tan pronto y en ese momento su cabeza estaba completamente bloqueada, en blanco solo recibiendo las imágenes que sus ojos le proporcionaban sin mas pensamientos ni preguntas.
El hanyou hacía ademanes por no sonreír ante la expresión de dolor de su hermano, por fin le cobraba muchas cosas del pasado y además estaba logrando su objetivo, llenarlo de dudas, apartarlo finalmente de Kagome… sin embargo se mantuvo serio, con su mirada fija en él, con determinación y el brillo de la victoria de una batalla ganada…
.- Se…Sessho yo…esto…no…no es lo que tu piensas…déjame…déjame expli…-la miko no pudo seguir porque los ojos del Taiyuokai se pusieron fríos como el hielo y la interrumpió antes de que pudiera continuar con su vago intento por explicarse.
.- Me mentiste…jamás fuiste sincera conmigo… -su tono de voz era tan frío que sintió como su corazón volvía a partirse en pequeños pedazos, se estaba trizando de apoco mientras el tiempo corría veloz ante ellos-
.- Ie ie…eso no es verdad yo si te amo… -exclamó mientras se le acercaba pero este solo dio un paso hacia atrás y miró a Inu Yasha-
.- Que?...creíste que me iba a quedar en el Sengoku?...-respondió el hanyou dejándole en claro lo que él necesitaba saber. Si su hermano no se había quedado en el Sengoku eso quería decir que después de todo no había desaparecido totalmente de la vida de Kagome con ella le había dicho…otro engaño…otra mentira…
.- Inu Yasha!...Sessho por favor, no es lo que tu piensas yo no he estado con Inu Yasha, no tengo nada con él, es verdad que yo lo amaba pero ahora yo te a…Sessho! –el taiyuokai había dado media vuelta marchándose de aquel lugar a la velocidad que lo caracterizaba como el demonio que era, la miko no podía moverse ante el asombro, la persona que ella mas amaba se iba de su lado por un maldito capricho de alguien que sabía que de esa manera solo ganaría los sentimientos contrarios a los que deseaba encontrar…
.- Déjalo Kagome…no ves, el no confía en ti…si confiara y te amara tanto como dice te hubiese creído –murmuró el hanyou con un tono tan convincente que cualquiera hubiese caído en sus redes en aquel momento, pero Kagome era distinta, no era como cualquier mujer, eso se había comprobado muchas veces.
Sintió como la joven comenzaba a sollozar, sus ojos por unos momentos se ablandaron y su mente comenzó a pensar que sus planes no eran los correctos, que debía detenerse ir por Sesshoumaru y explicarle que todo era un capricho de él, que las mentiras fueron las dichas por sus labios y no por los de Kagome…pero su mente otra ves decía lo contrario y cometió por segunda vez el mismo error y le hizo mas caso a la mente que a su corazón.
.- Como pudiste…-exclamaba la joven entra amargas lágrimas- como pudiste hacer todo esto…
.- No tenía otra opción, necesitaba alejarlo de tu lado para poder…
.- Cállate! –le gritó dándole una cachetada mientras de sus achocolatados ojos solo salían lágrimas de cristal- otra ves estás arruinando mi felicidad! Acabas de alejar de mi lado con mentiras a la persona que amo!
El joven tenía la mano puesta en su mejilla, aún podía sentir el golpe y su mejilla se encontraba adolorida, la miró y pudo notar en sus ojos aquella frustración que sentía dentro de sí misma y el por unos instantes se sintió como el peor del mundo, el mas cobarde.
"Acaba de alejar de mi lado con mentiras….", era verdad, podría haberlo de mil y una forma pero había decidido la mentira…la mas cruel…la mas dolorosa…
.- Yo…
.- Desde…desde cuando eres así…en qué momento te transformaste en lo que eres ahora Inu Yasha…. –murmuró casi sin fuerzas la miko-
.- Desde que te alejaste de mi lado y supe que estabas con Sesshoumaru…no pude evitar sentir un odio inmenso hacia él por haberte conquistado, por tenerte a su lado, por poder acariciar y por ser el primero en besarte, me sentía…me odiaba a mi mismo, actué sin pensar, o mejor dicho pensé demasiado en mis actos con tal de verlo lejos de ti…es lo único que me importaba…
.- Pero me lastimaste…soy supuestamente la persona que mas amas y me lastimaste de la peor manera! Incluso menos doloroso hubiese sido que me mataras con tus propias manos!
.- No puedo echar pie atrás en lo que hice…y tampoco quiero hacerlo, por fin estás sola otra ves y puedo volver a conquistarte para que seamos felices, solo me tienes que dar otra oportunidad…-exclamaba el joven tomándola de los hombros-
La miko solo pudo apoyarse en su pecho buscando refugio, no sabía que hacer, necesitaba calmarse…el solo la abrazó contra su cuerpo esperando que ese fuera el inicio de poder lograr volver a tener a su amada con él…
Corría rápidamente por la ciudad sin ver donde ni como, no tenía dirección, no tenía lugar, no tenía nada mas que el vacío que lo acompañaba en aquel momento.
Se detuvo en la cima de un gran rascacielo mientras la brisa jugaba con su cabello y lo movía de acuerdo a su voluntad, el no se quejaba, no hacía nada, solo miraba hacia abajo donde pasaba la gente. La luna daba por su espalda y por lo mismo su rostro no se podía ver, sus ojos estaban cubiertos por sus cabellos y buscaban en algún lugar de la nada una respuesta para aquel engaño tan cruel…
Aún no entendía como es que una mujer como Kagome podía haber hecho algo así, o acaso eran mentiras de Inu Yasha, no lo sabía…pero de algo si estaba seguro es que no podía confiar en nadie…se sentía solo nuevamente, ni siquiera el recuerdo de Rin lo reconfortaba…pero al pensar en ella su corazón tomaba una chispa de alegría y entonces supo que hacer…
Su mente divagó por un momento entre pensamientos que iban y volvían desechándose continuamente hasta que por fin se decidió…era la mas triste decisión que podía haber tomado pero no tenía mas opciones….
Saltó del lugar donde estaba y con su olfato determinó el lugar donde se encontraba Rin, cuando llegó tocó la puerta y esperó.
.- Sesshoumaru que gusto de verte –sonrió la madre de Kagome al verlo- pasa algo te ves muy triste –murmuró en tono preocupado. Sesshoumaru no podía gritarle, esa señora era muy amable con él-
.- No es nada señora…vengo por Rin…-exclamó el con un tono plano-
.- La llamaré –entró por unos minutos y luego salió con Rin quien feliz de ver al yuokai salió a abrazarlo, aún quedaba alguien en quien podía confiar.
.- Señor Sesshoumaru que bueno que haya venido! nOn –exclamaba la niña-
.- Hola Rin…-sonrió el yuokai- nos vamos a ir…
.- Tan pronto?
.- SI…despídete de Souta…"porque no vamos a volver…"
.- Hai…Souta-kun! –gritaba la niña desde abajo, el joven salió por la ventana- ya tengo q irme!
.- Tan pronto?...Sesshoumaru déjala otro día mas…-pedía el niño-
.- No puedo…
.- Que lástima…en fin…nos vemos Rin-chan! nOn –decía Souta mientras agitaba una mano…
.- Nos vemos Souta-kun! –dcía la niña haciendo lo mismo-
Sesshoumaru tomó en brazos a la niña una ves ya mas alejados de la casa y se dirigió rápidamente al pozo, esperaba poder pasar a la época a la que el pertenecía, ante la mirada incrédula de la niña el taiyuokai saltó y una luz rosa-violeta comenzó a cubrir sus cuerpos tal como lo había hecho la primera ves cuando pasaron en sentido contrario.
Poco a poco se fue desvaneciendo y todo comenzó a quedar en una plena oscuridad, se escuchaba el canto de los grillos, el sonido de las hojas al contacto con el viento y se respiraba un aire que estaba exento de cualquier tipo de contaminación.
Rin miraba al yuokai buscando alguna respuesta en él, pero no podía descubrir mas que el rostro sereno que siempre había llevado durante sus viajes, lo único que tenía distinto eran sus ojos los cuales representaban distintos destellos de distintos sentimientos reunidos en su corazón.
Saltó fuera del pozo y se encontró frente a el un bosque frondoso que levantaba ante ellos sus ramas con respeto, miró hacia los lados, bajó a la niña y comenzó a caminar.
.- Sesshoumaru-sama…y Kagome?
.- Kagome no volverá con nosotros –exclamó mientras se internaba en el bosque teniendo el cuidado de no perder a aquella niña, la única humana que había sido y seguiría siendo siempre real con sus sentimientos, la única que no lo engañaría, la única que de verdad le tenía cariño, la única humana en la que podría confiar de ahora en adelante…
Qué tal? Apuesto a que les gusto verdad? n.n Bueno pues aquí tienen un pequeño adelanto de lo que Kaissa-chan les prepara para el siguiente cap n.n
"Trató de limpiar sus lágrimas con su mano pero la miko movió su rostro hacia un lado impidiéndole continuar con su tarea y al mismo tiempo dándole el peor sentimiento que el podía esperar aparte del odio: el desprecio y supuso que después también vendría la indiferencia…sabía que tendría que pagar un precio caro por sus actos pero esperaba y rogaba que el destino cambiara este rumbo tan sombrío y lleno de oscuridad que se aproximaba a pasos agigantados hacia el y hacia la miko…
.- Kagome…-dijo con una voz dulce tratando de acercarse pero solo logró que ella se alejara mas con una actitud de miedo al estar a su lado-"
Bueno eso es todo por hoy y Kaissa-chan estará esperando con mucho gusto sus comentarios así que no olviden dejar review! Y aún así ella les agradece de antemano a quienes sigan leyendo esta historia n.n
Kaissa-chan y yo los veremos pronto n.n
Matta ne!
