Wnas, que tal estais? Espero que bien... Siento haber tardado tanto en sacar esta parte, pero he tenido varios problemas personales y me a sido imposible escribirlo antes. Lo siento a todos los que seguían este fic. Espero que el contenido del capitulo sea un buen soborno para que volváis a mandarme reviews! Aquí viene lo que os importa:

Ino se había ido. Se había ido corriendo y llorando. Sakura y Shikamaru se miraban ahora sonrojados, sin saber que decir. Todavía sentían el calor de sus manos, a pesar de haberlas separado hacía rato. Cuando Sakura sintió que no podía sostener más la mirada, miró al suelo, mucho mas roja que antes, y después miró hacia donde se había ido Ino.

.- "Ino... Porque has tenido que irte corriendo?"- Sakura era plenamente consciente de los sentimientos de la rubia hacia Shikamaru, y se maldecía por su torpeza ante el chico que le gustaba.- Ehh... Shikamaru. Voy a buscar a Ino para ver que le pasa., volveré dentro de poco ok?

Sakura comenzó a andar hasta que sintió una mano que le agarraba por la espalda, pero no oyó nada, sino que sintió que le apretaba un poco el hombro y notó como el chico de pelo negro se giró, yendo por donde habían venido. Sakura se giró entristecida, y vio como Shikamaru se alejaba poco a poco de allí, viendo ondear su coleta mal echa en el aire. Cuando por fin desapareció, Sakura tuvo que hacer un tremendo esfuerzo para no salir corriendo detrás de aquel hombre e ir a buscar a su mejor amiga. Salió corriendo, aguantándose ella misma las lágrimas por haber acabado la cosa de esa manera, cada uno por su lado.

Sakura buscó a Ino por una infinidad de sitios, pero sin resultado. Ya se había hecho tarde, así que desistió y encaminó sus pasos hacia su casa, arrastrando los pies y mirando al suelo, murmurando estupideces sobre su comportamiento. En mitad de su camino, un escalofrío recorrió su espalda cuando pasó por el lugar donde vio a Shikamaru hacía tan solo dos días, aquel lugar donde había comenzado a enamorarse de Shikamaru... Nunca supo que fue, pero una sentía una opresión en su cuerpo, un algo que la empujó a subir a aquel lugar.

.- Supongo que me vendría bien tranquilizarme un poco...Quien sabe, a lo mejor hasta Shikamaru esté allí, mirando a las nubes, esperando a que llegue para que estemos los dos juntos...- Sakura se paró y se llevó la mano a la frente, soltando un suspiro y una maldición.- Pero que leches estoy diciendo? En serio necesito poner mis ideas en su sitio pronto, sino comenzaré a desvariar dentro de poco...

Sakura llegó hasta arriba, y descubrió para su desdicha que el lugar estaba vacío. En el lugar donde estaba Shikamaru, ahora solo había unos pocos rayos de sol que se escapaban del abrazo de las montañas, antes de que la noche llegase. La pelirrosa se tumbó en el lugar especial de Shikamaru, y comenzó a cavilar sobre sus pensamientos, intentando ponerlos en orden, aunque sin mucho éxito, pues a cada momento le asaltaban más preguntas, y sino eran preguntas, le apabullaban las respuestas. Comenzaba a dudar de que su amor por Shikamaru no fuese más que una simple obsesión, un intento de borrar a Sasuke de su mente, y en su desespero había ido a fijarse en la primera persona que se le cruzó. Ella no creía en el amor a primera vista, y del destino hacía tiempo que desconfiaba, pero sin duda había algo en el chico del pelo largo que la había cautivado rápidamente. Y por Ino... Sakura se sentía triste de veras, pues a pesar de todos los problemas entre ellas, Sakura tenía a Ino en gran estima, y no le gustaba verla sufrir ni llorar. Se sentía miserable por haber hecho llorar a su amiga, ya que la rubia siempre supo los límites entre broma y molestia, y nunca gastaba bromas a Sakura más que lo necesario. Sin embargo Sakura se había pasado. Aquella vez fue demasiado lejos, aunque Ino tuviese una perspectiva equivocada de las cosas, ya que seguramente pensaría que ambos eran pareja, y que por eso la habían ido a buscar por la mañana, y por eso se habían cogido de la mano, para que ella, Sakura, demostrase a Sasuke que una nueva persona se había adueñado del corazón de la chica del pelo rosa, aunque no era eso por lo que le había dado la mano a Shikamaru...?.

En algún momento, el sueño venció a la chica sentada en el banco, y se quedó profundamente dormida, con una lágrima corriendo lentamente por su mejilla, como si a pesar de estar durmiendo, las penas que llevaba dentro aún siguiesen torturándola.

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Al día siguiente, cuando el sol ya estaba bien alto, un haz de luz llegó a la cara de Sakura, que abrió los ojos lentamente, pero sin moverse. Cuando se dio cuenta de donde estaba, se levanto poco a poco, parpadeando por la luz del sol que había en el lugar. Aun estaba metida en una atmósfera soporífera, pero sin duda reconocía el lugar donde estaba sentada. Era su propio cuarto.

.-"Como he llegado aquí...?"- Se extrañaba la kunoichi.

Se levantó con desgana, y se dio cuenta de que aun llevaba la misma ropa que llevaba el día anterior, así que su prioridad fue dirigirse a la ducha y cambiarse de ropa. Una vez limpia y vestida de nuevo, bajó al piso de abajo, donde vio a su madre, que miraba a su hija con una expresión misteriosa, mezcla entre diversión y confusión.

.-...Eh... Buenos días, mama- Le dijo Sakura, quien se había dado cuenta de la extraña mirada de su madre.

.-Buenos días, hija. Como te encuentras hoy?- La sonrisa de la madre se hizo un poco más pronunciada.

.-Mmm... Bien.- Sakura miró el reloj que había en el salón.- Es un poco tarde, pero voy a desayunar algo, vale?

.-Como quieras, pero luego recoges lo que ensucies...

.-Sí mama, como siempre.

Se dirigió a la cocina, dejando a su madre con su extraña expresión, y comenzó a prepararse un desayuno ligero, ya que no había mucha hambre a esa hora de la mañana. Simplemente se preparó un té verde, y sacó unas pastas de la despensa. Se sentó a la mesa y comenzó a desayunar, mientras miraba ensimismada por la ventana, preguntándose como habría llegado allí, ya que lo último que recordaba era haberse quedado dormida en el banco donde estuvo la tarde pasada, y si conseguiría ver hoy a Ino y a Shikamaru para solucionar toda la confusión ocurrida ayer. Cuando terminó su fugaz desayuno, recogió todo rápidamente, se fue a su cuarto, se arregló un poco el pelo y se dirigió hacia la puerta de la casa.

.-Mama, me voy! Volveré para la comida- Gritó Sakura para que su madre pudiese oírla.

.-Vale cariño. Por cierto, si ves al chico ese del pelo largo y el pendiente que te trajo ayer a casa, dale las gracias de mi parte.- La voz de la madre sonó bien cerca de la puerta de la casa.

Sakura se quedó a cuadros, paralizada, mientras su cerebro procesaba la información y buscaba las posibles personas que se ajustaban a esa descripción. De cierta manera, algo le parecía equivocado. Shikamaru había llevado a Sakura a casa? No podía ser... Sin perder más tiempo, salió de su casa. Su cerebro aun no funcionaba bien mientras intentaba asimilar los datos. En un intento de pensar( y porque sentía que las piernas le temblaban y no podía sostenerse en ellas), se fue a sentar en uno de los bancos que había cerca de su casa. Shikamaru la había llevado a casa... que podía significar eso? Porque no la despertó? La chuunin se quedó allí un buen rato, ensimismada, hasta que decidió que allí no hacía nada, así que se levantó y comenzó a andar a casa de Ino, dispuesta a solucionar lo que no pudo ayer. Comenzó a andar por las calles de Konoha en dirección a casa de Ino, con paso rápido. Esta vez no se detuvo y procuró no despistarse mientras pensaba en lo que le diría cuando la encontrase, y de tanta concentración llegó a su casa antes de lo que hubiese deseado.

.-" Ya que estoy aquí no me voy a volver no?"- Se dijo Sakura suspirando.

Fue hacia la puerta de la casa de Ino y pulsó el timbre. Pronto oyó unos pasos que se acercaban a la puerta, y abrieron la puerta. Ante Sakura estaba una señora de unos 32 años, rubia con el pelo corto y bastante guapa.

.-Hola, señora Yamanaka. Esta Ino?- Preguntó Sakura a la madre de su amiga.

.-Hola Sakura. No, no está. Se fue bien pronto esta mañana, dijo que tenía que hacer una misión, y no se cuando volvera...

.-Vaya... bueno, gracias señora Yamanaka, buenos días.- Sakura se despidió con un gesto y se alejó del lugar, algo deprimida.

.-"Si Ino está en una misión a saber cuando podré encontrarla... Entonces tendré que ir a buscar a Shikamaru."- Pensó Sakura, sonrojándose un poco ante la idea de ver a Shikamaru después de lo que hizo.

Así que Sakura volvió por donde había venido para dirigirse a casa de Shikamaru, mientras pensaba en qué podría decirle a él cuando le viese... Involuntariamente, se acarició la mano que había agarrado la de Shikamaru el día anterior. Aun recordaba el calor que desprendía su mano, recordaba como él también había sujetado su mano, sin oponer resistencia a pesar de lo precipitado que fue el momento... Y luego recordó cuando se fue, y redobló el pasó para llegar cuanto antes a hablar con él. Cuando llegó a la casa, casi ansiosa por hablar con él, se paró y respiró profundamente para calmare. Luego, con paso decidido, se acercó a la puerta y se dispuso a llamar, pero en el momento en el que su mano estaba a punto de tocar el timbre, la puerta se abrió, dejando ver a la madre de Shikamaru, sorprendida de ver a Sakura allí.

.-Hola...eh...Sakura?- Le dijo indecisa la señora Nara.

.-Si. Hola, señora Nara. Está Shikamaru en casa?- Preguntó la pelirrosa.

.-No...no está. Salió por la mañana a hacer unos encargos y apenas había llegado cuando salió de vuelta. No me dijo adonde fue.

.-Vaya..."Parece que hoy nadie está en casa...".- Sakura resopló- Entonces me voy, gracias. Buenos días.

.-Buenos días.

Sakura se alejó de la casa del chico de pelo largo, y se paró en mitad de la calle, llevándose una mano al cabello mientras erguía la cabeza para mirar al cielo. De repente se le ocurrió una cosa. Casi como accionada por un resorte, Sakura giró y comenzó a andar hacia el lugar donde Shikamaru solía mirar las nubes. Probablemente se encontraría allí.

.-"Eso espero, porque como no este ya no sabría por donde buscar..."- Sakura confiaba en que estuviese en ese lugar, porque sino tendría que buscarle por Konoha entera y esperar que lo encontrase de casualidad.

En poco tiempo llegó al lugar donde estuvo el día anterior, y miraba hacía arriba, intentando ver si había alguien allí, pero con nulo resultado. Así que comenzó a subir por la escalera que llevaba a esa especie de mirador. Al llegar al último escalón sintió que su corazón se paraba. Shikamaru estaba allí, pero no estaba solo. Una gran cabellera rubia estaba hablando con el chico del pelo negro. Sin previo aviso, la chica rubia se acercó al chico del pelo negro y le abrazó fuertemente, apoyando su cabeza contra su pecho. Sakura era capaz de ver como las lágrimas caían por el rostro de la mujer. Y para mayor sorpresa, el hombre también la abrazó, aunque visiblemente menos fuerte ni tan estrechamente. Sakura sintió que las piernas le comenzaban a fallar por segunda vez en el día, sentía como un aullido de dolor subía por su garganta, y notaba como sus ojos se nublaban por la húmeda presencia de las lágrimas. Pero simplemente continuó allí, observando como la pareja se abrazaba, sin ser capaz de moverse. Silenciosamente, intentó darse la vuelta, pero tuvo una visión que la atrapó en ese mismo lugar.

La cabeza de la rubia se había echado hacia atrás, mirando directamente a los ojos del chico, que a su vez mirándola a los ojos también. Entonces, lentamente, la chica cerró sus ojos y acercó su cabeza a la cabeza del hombre que estaba abrazando, besándolo en los labios amorosamente. Una chispa recorrió el cuerpo de Sakura, haciendo que se estremeciese. Sin pensarlo, se giró a toda prisa y salió corriendo de allí con el fin de apartar esa dolorosa visión de sus ojos. Sabía que la habían oído, pero no hizo ningún esfuerzo en volverse o siquiera dirigir una mirada hacia aquel maldito lugar. En cambio, sintió como unos ojos se le clavaban en la nuca, cosa que hizo que soltase aún mas lagrimas y se metiese en la calle más cercana que había en un intento por apartar esa sensación tan desagradable de su cuerpo. Siguió corriendo durante un tiempo, alejándose más y más de los dos ninjas que habían estado besándose. Cuando sintió que ya era la hora de parar, se fijó donde le habían llevado sus pies. Estaba en un parque, con un banco de arena y los juguetes típicos que hay en los parques para los niños. Para su sorpresa descubrió que era el mismo parque donde había estado hacía tan poco tiempo con Shikamaru y Naruto. Observando fijamente el lugar, Sakura encontró un lugar donde había hermosas flores en un círculo, junto a una pequeña encina. Se dirigió hacia ella, y apoyó su espalda en el tronco de el árbol mientras se dejaba caer, abatida por el peso de sus lágrimas. Aún estaba llorando, mirando con amargura a un punto indefinido entre el cielo y el horizonte, mientras su cabeza daba mil vueltas. Procuró de todas las formas posibles olvidar lo que acababa de ver, pero a pesar del esfuerzo que puso, no podía sacar la imagen de los ninjas besándose, como si se le hubiese quedado grabado a fuego en la retina. Con pesadumbre, puso los ojos en blanco y se tumbó completamente en el suelo, mientras hacía un esfuerzo en controlar sus lágrimas.

Que ironía, pensaba Sakura. Estaba en el mismo lugar donde había rechazado a su amigo, y ella ahora podía saborear el amargo sabor que en su momento probó Naruto. Sintió como el tiempo pasaba, pero no era consciente de ello. Antes de que se diese cuenta, el sol se comenzó a poner por el horizonte, justo exactamente enfrente de ella. Aquello hizo pensar a Sakura, que miraba el sol con tristeza.

.-Ojalá yo también pudiese desaparecer tan rápido como el sol... No sirvo para nada, ni para nadie. Quise creer que había encontrado un verdadero amor, pero cómo puedo saber lo que es el amor? Como pude ser tan ingenua? De verdad pude pensar que Shikamaru se enamoraría de mí en 4 días? Soy una estúpida... Siempre estoy sufriendo, y nunca aprendo de los errores... Tengo 18 años, pero sigo siendo como una estúpida cría de 6 años que aun cree en cuentos de hadas... Odio mi vida.

El sol se puso finalmente, dejando paso a la oscuridad de la noche. Aunque no le gustaba la idea, tenía que volver a casa. No podía quedarse allí todo la vida. Hubiese deseado que la tierra la tragase antes que volver a casa, pero no tenía elección, por lo que se levantó y con un paso lento comenzó a andar hacia su casa, arrastrando los pies y procurando evitar la casa de Shikamaru, que se encontraba en su camino...

Wno, aqui acaba el capitulo 5. Mil perdonespor haber tardado tanto en subirlo, se que no tiene excusa, solo espero no haber perdido a los buenos lectores que tube con los capitulos anteriores... Gracias por todos losreviews que me mandais y que me animan a seguir esta historia. Que sepais que esta historia, sin vosotros/as no valdría la pena, gracias! Espero poder subir pronto el siguiente, pero puede que tarde un poco debido a un viaje que tengo que hacer...