Capítulo 3: "Esa puntualidad..."

Y unos días después, un sábado concretamente:

-no puedo creer que me hayáis hecho venir a mí también. –empezó el padre de Matt muy molesto mientras conducía el coche- Ya dije que no quiero saber nada de esto... –por el retrovisor se fija en su hijo mayor que estaba con la cabeza gacha algo culpable y a su lado su otro hijo revisando algo concentradamente. Ajustó el espejo para ver que era exactamente lo que revisaba (N.A: cosa que está prohibido hacer sobre la marcha) y se queda perplejo- Tk¿qué haces con esa cámara?

-pues verás papá, Tai y los demás quisieron ver esta divertida escena. Por eso me pidieron que lo grabase.

-pues menudos amigos. –en un murmullo algo fastidiado.

-oye Matt¿por qué no te quitas ese ridículo casco? No estás muy presentable con él, que digamos. –dijo su madre muy molesta viéndole con un casco, que si no fuera por eso, estaría muy bien arreglado.

-sí anda mamá. ¿Y ponerme a un blanco más fácil? Ya me llegó que tuviera que arreglarme y la humillación de la dichosa vecina amiguita tuya... ¡TK DEJA DE ENFOCARME DE UNA PUÑETERA VEZ! –observando como a su lado su hermano le enfocaba con una sonrisa en su cara.

-pero si eres el prota... –riéndose.

-¿QUIERES DEJARLO YA! –ya al borde de la paciencia

-Matt... Tk... –les advirtió su madre para que lo dejaran.

-es que tengo ganas de ver como logras salvar a tu doncella del tirano de tu "suegro". -riéndose con ganas

Aquello ya fue la gota que colmó el vaso y la paciencia de Matt llegó a un límite por lo que levantó la mano.

o.o.o.o.o

Mientras, en el restaurante, se encontraban una pareja con su hija estando nerviosa, y el padre que no le ayudaba mucho, pues miraba de vez en cuando su reloj algo impaciente.

-y aún por encima no es puntual. –dando toquecitos con la punta del pié todo furioso- Si las cosas fueran con Joe ya estaríamos con los entremeses. O quizás con el primer plato. Y lo que es más, seguro que no tendrá modales a la hora de comportarse en la mesa. Sora, de veras que me has decepcionado a la hora de escoger novio.

Sora bajó la cabeza algo deprimida por los comentarios de su padre. Intuía que no iba a salir tan bien como pensaba. Rezaba porque Matt diera lo mejor de sí mismo.

-pero¿quieres no solo calmarte sino callarte? –dijo ya harta Kurumi, la madre de Sora- A lo mejor hay algo que los retrasó. Y ya sabes que tienen que ir a buscar a la madre y al hermano. Y Sora, -viéndola en ese estado- tranquila, no te preocupes. -calmándola con dulzura.

-¿qué dices mamá? Estoy tranquila. -con una sonrisa muy amplia "mentira"- solo dime¿estoy suficientemente presentable? –apartándose un poco de ella para que la viera.

-claro hija. Estás guapísima. Verdad que sí, "cariño" –resaltando a medida que lo miraba duramente para que estuviera de acuerdo

-sí... -suspirando pesadamente mirando para otro lado. Pero en su interior pensaba en lo desilusionado de que ella se arreglara tanto para Ishida que para Kido como tanto deseaba.

-oye papá, por favor te lo pido, -mirándole con ruego- no intentes hacer que Matt quede mal en público. Estará muy nervioso y querrá que veas su auténtico yo. Que no es como piensas. Por favor, dale una oportunidad de conocerle mejor.

El padre miró a su hija de cómo le imploraba tanto por su chico. Si tenía una debilidad Haruhiko era que obedecía todo lo que su única hija le pedía.

-lo intentaré, -dijo con pesadez- pero no te prometo nada. –añadió de inmediato.

-entiendo. Voy un momento al lavabo. -para calmarse los nervios, de lo contrario la volvería loca.

Cuando el matrimonio Takenouchi quedó solo.

-no entiendo como puedes apoyarla. –dijo Haruhiko a su mujer algo indignado.

-es mi hija. Y tú eres su padre. Ella fue quien ideó lo de conocerle y a su familia sabiendo lo que pasaría. Así que procura no montar una escena, y sobre todo no menciones a Joe porque estás siendo pesado desde que Sora te contó que salía con Matt. -muy harta de su actitud de padre sobre protector.

-es que no quiero que sufra.

-del sufrimiento también se vive y te hace madurar¿no? Y dudo que Matt sea el tipo de chico que haga sufrir a una chica. Y además, Sora ya es lo suficientemente mayorcita como para saber lo que hace. Así que te vas a comportar por las buenas o dormirás esta noche en el sofá. -toda firme, haciéndole callar definitivamente.

Mientras en el servicio, Sora se lavaba las manos y se miró al espejo donde se reflejaba la tristeza y la preocupación en su cara.

-"Sora¿qué has hecho contigo¿Dónde está aquella chica segura de sí misma¿Por qué estás tan nerviosa? Te declaraste a Matt y él te aceptó, su hermano también te quiere, es más, te quiere y te adora como si fueras una hermana para él, su madre está de vuestra parte¿acaso tienes miedo de su padre? La verdad..."- ¡NO! -niega con la cabeza bruscamente- no ocurrirá nada. Debo estar tranquila por él.

Y antes de salir se arregló aquel conjunto de chaqueta roja, abierta por delante a juego con la falda volteada ni larga ni corta del mismo color que la chaqueta. Y también se estiró la camiseta rosa que le llegaba un poco más abajo de su cintura.

Aquel traje lo había comprado para la ocasión con la ayuda de Mimi y las otras chicas. De no ser por ellas, estaría indecisa sobre que ropa llevar cuando se presentara ante sus futuros "suegros".

Respiró hondo y finalmente salió del baño y pensando en lo suyo, chocó cuerpo a cuerpo con alguien.

CONTINUARÁ...