Capítulo 6:
Corrió con la toalla enrollada en su cuerpo a la habitación y abrió el armario con prisa, dando una mirada fugaz a los vestidos y preguntándose cual sería el adecuado para una reunión de media tarde en el comité de empresarios con carácter de informativo, esta sería la oportunidad de dar la despedida a Sesshoumaru y agradecerle su colaboración y además presentarles a su nueva asistente. El timbre sonó en el momento que acomodaba sus largos cabellos negros y caminando aprisa sintiendo el corazón acelerado, abrió la puerta para encontrarse frente a un rostro pálido pero ya conocido.
.Pasa Aska
La joven asistente entró al departamento mirando con curiosidad a su alrededor. Siguió a Kagome hasta la habitación mientras la chica terminaba de acomodar en algo sus cabellos frente al espejo y luego fue hasta el armario para sacar un abrigo. Aska concentró sus castaños ojos en algo brillante que yacía en la alfombra blanca y caminó hasta el para encontrarse una fina pulsera de oro con una pequeña placa. Antes que Kagome volteara ella la introdujo rápidamente en el bolsillo de su blaiser y sonrió.
.Lista- Dijo Kagome con una pequeña sonrisa.
Los empresarios la saludaron con cordialidad y ella sonrió a cada uno de ellos, suspiró con algo de nerviosismo y comenzó la reunión. Unos momentos más tarde la puerta de la oficina se abrió y un hombre elegantemente vestido, tnl alto y fornido que hizo a Aska mirarlo casi con algo de miedo, la mirada en sus ojos era distante pero tenía el mismo color de los del Sr. Inuyasha, aunque su cabello era claro y no oscuro como éste. El hombre saludó con voz profunda a los presentes y al dirigir su mirada hasta Kagome, que le sonrió con cordialidad, Aska hubiera jurado que su mirada ya no era tan gélida.
.Ella es mi asistente, Aska- Presentó la muchacha al ponerse de pie junto a su asistente. Aska estiró su mano pero él apenas la tocó.- Sesshoumaru, estaba a punto informarles de los cambios que habrá aquí. -El hombre se volteó hasta los hombres que rodeaban la larga mesa de juntas y que lo miraban con seriedad y preocupación.
.¿Es cierto, Señor Sesshoumaru lo que se dice¿Dimitirá?- Preguntó un hombre de edad, sin duda preocupado por el retiro del joven.
.Es cierto. Lamento tener que dejarlos pero debo volver a Inglaterra en un par de días más... no sé cuanto tiempo este allá, por eso no puedo asegurar mi regreso. Sin embargo, sé que este comité quedará en las excelentes manos de la Señorita Higurashi... confió en su inteligencia y desempeño.- Volteó para mirarla- si tienes algún problema, no dudes en pedirme ayuda.
Ella sonrió agradecida y no pudo evitar que sus ojos se llenaran de lágrimas.
.Te extrañaré. Fuiste muy útil... para todos. Te lo agradezco mucho.
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Recostado casi sobre la silla y los dedos de su mano derecha sobre sus labios, la miraba en silencio como ella se esmeraba en adornar la mesa, incluso había puesto un jarrón de cristal con rosas en botón que llenaban la habitación de fragancias silvestres. Kagome al fin se volvió y le sonrió.
.¿Listo?
.Claro.- Murmuró. Ella se alejó hacia la cocina y en unos instantes volvió con una bandeja con carne al horno adornada con algunas verduras.
.Lo he visto en un recetario. Espero que te guste.- Sonrió. Él sólo asintió débilmente. La verdad es que no estaba con todo el ánimo que hubiese deseado. Sabía que el fin de semana era para compartirlo sólo ellos dos pero en esta ocasión, no estaba de humor. Ella tomó el cuchillo y comenzó a partir algunas lonjas de carne, las cuales Inuyasha miró hipnotizado, imaginando que así estaba siendo partido su corazón, con tanta duda que lo embargaba.
.Tú dirás cuanto.- Preguntó la chica sacándolo de sus pensamientos. Él al fin se enderezó en la silla y puso la servilleta en su regazo.
.Sólo un poco, no tengo apetito.- Respondió apenas. Ella tragó saliva dolorosamente. Nada de lo que había hecho durante el día lo había complacido. Suspiró algo adolorida y dejó dos lonjas de carne en su plato. Ella hizo lo mismo con el suyo.
.¿No comerás más?- Preguntó Inuyasha cuando ella se sentó enfrente con la misma cantidad de comida que él.
.No, se me quitó el apetito.
Comieron en silencio y el aire que antes Inuyasha le parecía refrescante, silvestre aroma que expelían las rosas ya lo estaba asfixiando. El timbre sonó y ambos se levantaron para atender.
.Déjalo, iré yo.- Dijo Inuyasha. Kagome lo miró con tristeza mientras caminaba hasta la puerta.
.Perdón la hora... - Kagome arrugó el ceño, conocía esa voz.
.¿Aska?
La chica miró a Inuyasha sin poder evitar que su respiración se entrecortara. El joven la miraba interrogativo y antes que ella pudiera recordarle nuevamente quien era la figura de Kagome apareció tras su espalda.
.Señorita Higurashi- Dijo al fin.
.Ah, eres la asistente- Acotó Inuyasha al fin recordándola, haciéndose a un lado para que Kagome hablara con ella y él se fue a la mesa nuevamente.
.Pasa Aska, no te quedes en el pasillo.
La chica entró y miró a su alrededor. Vio la mesa preparada y a Inuyasha que comía sin muchos ánimos.
.Perdón por venir aquí señorita... - Intentó que su voz sonara fuerte y audible hasta el abogado, que aparentemente parecía no prestar atención.
.No te preocupes, dime ¿ha sucedió algo?
.Le traigo estos libros... un joven los fue a dejar a la empresa del comité.
Inuyasha dejó el tenedor a medio camino y se irguió, atento, Aska apenas sonrió, sabía que él la había escuchado.
.Gracias- Respondió Kagome.- no era necesario que para ésto tuvieras que venir hasta aquí.
.No es molestia señorita- Sonrió complacida, mientras le entregaba los libros en sus manos. Volteó para salir del departamento y Kagome al voltear hacia Inuyasha él ya no estaba. Extrañada lo buscó en el dormitorio, en donde lo encontró sentado al borde la cama, desabrochándose con rabia la camisa.
.¿Pasó algo¿estas... molesto?
Él la miró con furia pero no dijo nada. Kagome esperó pacientemente su respuesta pero luego él comenzó quitarse por completo la camisa y se levantó con rumbo al baño. Ella se quedó parada ahí, sin saber qué pensar. Jamás lo había visto tan molesto, y al parecer la causa era suya. Cuando él volvió venía solo con el pantalón del pijama y se acostó.
.¿Porqué no me dices lo que sucede?- Preguntó ya exasperada pero sintiendo que apenas podía hablar- Dime, qué he hecho para que me ignores de esa manera... ¿cometí una falta?
.Eso lo sabrás tú¿no?- Fue su ronca respuesta. Las lágrimas comenzaron a asomarse de los ojos de la chica.
.No sé... porqué dices eso... - Murmuró confundida, de pie frente a él, incapaz de moverse.
.¿Quién demonios es ese Houyo?
Ella lo miró asustada.
.¿Houyo?... es un compañero, de la universidad.
.Ya lo sé- La interrumpió bruscamente.- Me refiero a qué es tuyo!
Ella tragó saliva con dolor.
.¿Mío¿Cómo que qué es mío? Es mi compañero.- Respondió ofendida.
.¿Estudias con él?
Aquello parecía un interrogatorio.
.Claro.- Respondió más suavemente.
.¿Dónde?- La mirada de Inuyasha se clavó en sus ojos.
.¿Dónde?- Repitió Kagome sin entender.
.¿Dónde estudian?
.En la Universidad... en mi casa.
Inuyasha se levantó presuroso y Kagome se asustó por completo al ver su semblante de furia frente a ella.
.¿Estudian juntos y no me lo había dicho!- La sujetó por el brazo y ella se encogió como un animalito indefenso, lo miró con ojos asustados.
.Pero... qué tiene... - Musitó apenas y sin entender. Él la miró exasperado
.¿No te das cuenta? Creí que había confianza entre nosotros!
Ella intentó zafarse, por un momento el recuerdo de la vida junto a su madrastra, Lady Kagura se vino a su mente.
.Pero... de qué hablas! Porqué me tratas así! No he hecho nada malo, déjame!- Sollozó zafándose al fin de su mano y arrinconándose en una esquina, lo miró llorando, asustada.
.En una relación de pareja, Kagome, no debes ocultar nada.- Acotó el joven abogado, mirándola con dolor.
.Yo no he hecho nada malo,.. si no te conté que estudiaba con él... fue porque no lo encontré necesario...- Respondió, pasando de vez en cuanto la mano por las mejillas para quitar las lagrimas que caían silenciosamente por ellas. Hacía mucho tiempo que no lloraba, hacía mucho tiempo que no volvía a sentir aquel dolor tan terrible... jamás pensó que con Inuyasha todo volvería a gatillar de nuevo.
.No debiste ocultármelo.- Respondió Inuyasha sin más, mirándola con dureza. Kagome no respondió, se quedó en silencio sin atreverse a articular movimiento. – eso no se hace.
.Me reprendes como si fuera una niña- Reprochó Kagome.
.Tú no sabes cómo manejar una relación de pareja.
Ella lo miró desilusionada. Así que todo era por eso. Todo radicaba en su inexperiencia, en su tonta inocencia aún.
.Jamás creí que pudieras tratarme así... Houyo es mi compañero, nada más...
Salió de la habitación sin decir nada y luego de unos segundos regresó con pasos firmes y tiró un pedazo de papel sobre ella. Kagome lo miró turbada y tomó aquello queestaba en la alfombra.
.¿Seguirás diciéndome que es tu compañero?
No podía creerlo ¿porqué¿porqué había una fotografía del incidente en el estacionamiento de la facultad? Miró a Inuyasha aterrorizada ¿qué estaba él pensando?
.¿Cuánto tiempo me has mentido, Kagome?
.Esto fue... no es lo que imaginas... no lo es...
.Hay tantas cosas que estan en tu contra... - Murmuró Inuyasha sin ánimo de seguir discutiendo.
.Pero no es lo que crees!- Kagome se levantó llena de impotencia y arrugo la foto con su puño.- ¿desconfías de mi¿Porqué¿Porqué dudas de lo que te digo?
Las palabras de defensa de Kagome quedaron vagando en la habitación. Ella lo entendió. Asintió comprendiendo el mensaje. Ver a Inuyasha darle la espalda y acostarse ignorándola por completo la hizo mirar con detenimiento el armario.
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.Tome.- Aska le cedió una taza de té caliente el cual Kagome recibió con manos temblorosas.
.¿Puedes alcanzarme las vitaminas?- Preguntó con voz débil y el semblante totalmente pálido. No había asistido a la Universidad y había pasado la noche en su mansión.
.Claro.
Le entregó el pequeño frasco y Kagome sacó dos pequeñas pastillas que depositó en su taza y luego revolvió con lentitud.
.No luce muy bien- Dijo la asistente sentándose a un lado de la cama, mirándola.
.Me siento muy cansada- Respondió simplemente ella- puedes irte, encargarte del comité por favor, Aska... yo dormiré luego.
La joven se levantó y sonrió.
.Lo que usted diga.
Bebió su té poco a poco sin poder evitar que una lagrima nuevamente rodara por su mejilla ¿porqué había pasado esto? Parecía tan... absurdo todo y de pronto aquel sueño de amor se convertía en una pesadilla. El anochecer llegó y ella al fin se levantó caminando por la inmensidad del lugar. Miró con detenimiento como un auto negro se detenía frente a la casa y lo reconoció enseguida, era él. la sirvienta atendió y antes de que ella le informara de su vista él venía pisándole los talones.
.Déjanos solos.- Dijo el hombre mirando a Yuca. La chica se inclinó y salió rápidamente del lugar.
Precisamente ahora que tu ya te has ido
Me han dicho que has estado engañándome
¿Porqué de pronto tienes tantos enemigos?
¿Porqué tengo que andar, disculpándote?
.Qué quieres- Preguntó Kagome afirmándose en la pared.
.Quiero saber la verdad...
Si ellos estan mintiendo por favor, defiéndete
Yo sé que no lo harán pues dicen la verdad
Es una pena siempre seguirás doliéndome
Y culpable o no
Qué le puedo hacer ya
.Ya te lo la dije.
Miénteme como siempre, por favor miente
Necesito creerte, convénceme
Miénteme con un beso
Que parezca de amorNecesito quererte, culpable o no.
.Parece que todo esto es una excusa tuya...
.¿Crees que me quiero deshacer de ti?- Le preguntó Inuyasha, ofendido. Kagome suspiró apenas, encrispó los dedos al marco de la ventana para no caer.
.Ya no sé qué pensar... esto viene mal... desde hace tiempo... y tampoco te culpo... un hombre como tu... debe aburrirse con una mujer como yo...
No tengo ya derecho a reprocharte nada
Pues nada queda ya de ti, de mí y de ayer
Qué pena nuestra historia pudo ser fantástica
¿Y ahora dime mi amor
Quién te va defender?
.No es cierto! Te pedí muchas veces que te casaras conmigo... Aún no me das una buena excusa.
Kagome lo miró mordiéndose el labio.
.Déjame sola, me tratas como basura y no lo merezco, déjame, déjame.- Volteó y subió rápidamente las escaleras, cerrando la puerta de su habitación con violencia.
Continuará...
N/A: A la niña que me dejó un review diciendo que mi summary no tenía nada que ver con la historia porque había puesto "¿puede una relación destruirse de la nada?--- yo no escribí eso, lo que dice es "¿Puede una relación que parecía perfecta destruirse por completo? ... es obvio la diferencia...
Nos vemos.