Todos los personajes de la serie de Ranma Niboun No Ichi pertenecen a la genial Rumiko Takahashi ninguno de los personajes me pertenece a mi aunque lo que diera por poder tener aunque sean los ojos de Inuyasha Ahaaa vv….aclarado esto aquí vamos.

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LUNA

por mimi chan

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Capitulo 2: Cuarto Creciente

Era el primer día de descanso de primavera, y toda la familia había decidido ir a un bonito paseo esa madrugada, (de madrugada únicamente a instigación de Ranma y una campaña. "no prometidas"… al menos no mas de una ;) toda la familia salio del doyo y fue rumbo a la montaña, llegaron por la tarde dejándose arrobar por la belleza que ya no se encuentra en el hogar. El viento tranquilo que corría a través de los altos pinos trayendo aromas de todos lados, el aroma a castañas, piñas, y hojas húmedas aun por la poca nieve que había quedado de ese invierno… todo un conjunto de aromas, sonidos y sensaciones poco usuales, lo suficientemente tentadoras y provocativas para cualquiera… después de ello la noche, esa noche de cuarto creciente, la luna apenas asomando un gajo de su totalidad, brillante en medio de las estrellas casi escondiéndose entre las copas de los árboles, tímida casi de que pudieran mirarla en el primer día que despertaba, alguien lo suficientemente seducido por esa imagen había desaparecido, después de levantar las casas de campaña, dos ojos azules comenzaron a buscarla.

Ella estaba sobre un alto pino, sin duda le habría costado mucho trabajo subir hasta allí, pensó él.

Akane estaba mirando absorta el cielo, no pudo remitirse, a ver ese espectáculo tan usual y al mismo tiempo tan poco común, la luna, la luna en cuarto creciente, el apenas gajo de la inmensa luna, el cielo se veía como un tuerto con un ojo somnoliento, como si lo tuviera casi cerrado, las estrellas como pecas blancas sobre su piel oscura. Como luciérnagas brillando inmóviles sobre un lago oscuro, perdido en el infinito, tan tranquilas y tan bellas, como deseaba ella ser a veces como esas estrellas, tan calmada y tan bella, al menos para él…

Tan abstraída estaba, que no noto que su guardián la había encontrado finalmente.

.- ¿que haces aquí? – dijo un poco molesto quitándose hojas de pino de el cabello – todo mundo anda buscándote allá abajo, están todos muy preocupados

.- Tú también – dijo con una sonrisa sin despegar su vista del cielo, por ello sin notar el obvio sonrojo de su prometido – solo subí a ver la luna, esta tan bonita esta noche.

.- Hoy? – dijo y noto apenas una porción mínima de toda la luna – pero si apenas y se ve

.- Por eso me gusta – lo volteo a ver – además, tú haces lo mismo desde el tejado del doyo, que te hace pensar que solo a ti te gusta verla.

.- Yo, no…

.- Olvídalo, no te estoy recriminado.

.- Ranma…. Akane… - se oyeron los gritos de Kasumi bajo el árbol.

.- Aquí estamos – grito de vuelta Akane – tranquila Kasumi.

Dentro de poco los gritos cesaron y ella levanto de nuevo la vista el cielo como hechizada.

.- sabes lo que parece?

.- Los cuernos de un buey

Akane no pudo reprimir una risa divertida por el cometario de Ranma, él la siguió solo un segundo después.

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.- Y donde esta esa niña?

.- Ah, esta muy bien, esta con Ranma en algún lugar, prefiero no saber donde.

.- A oscuras ellos dos solos¡¡que rico!

.- Nabiki no pienses cosas raras de nuestra hermana.

.- Yo solo decir Kasumi, al menos yo si tendría una rica noche.

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.- Bueno en realidad veo como una cuna – explico – lo vez, la luna aquí se ve como una cuna, por lo regular de casa se ve de pie – dijo marcando en el aire con su dedo la figura desde la frente de Ranma pasando pro su mejilla izquierda hasta su boca. Luego subió su mano al cielo y marco en el aire con dirección a ella, como si pudiera tocarla la figura – pero aquí se ve acostada – bajo sus manos aforrándolas al tronco y empezó a balancearse – si te mueves de un lado al otro – dijo y lo hizo – parece que la luna también lo hace, los bebes de la luna deben dormir muy bien allá arriba.

.- Tú estás loca – dijo ranma ante el extraño comentario de su prometida.

.- Por que?

.- Solo a ti se te ocurren locuras como esa, que iban a hacer niños allá en la luna, cubiertos por sus cascos de aire seguramente.

.- Si – dijo realmente divertida - no lo de los cascos, solo lo de los niños – miro soñadoramente las imagen de nuevo y dejo sus recuerdos salir por su boca – mamá decía que la luna no esta hecha de queso, si no de requesón, que se dejaban litros y litros de leche en el piso y se volvía todo requesón, le ponía azúcar y miel se volvía queso dulce, que los niños debían ir 3 días entes de nacer y alimentarse allí para nacer fuertes y poder vivir, y que los que no podían se quedaban todo el tiempo allá arriba que las mamas que debían irse podía pasar un tiempo allá arriba cuidando a los niños.

.- Es solo un cuento para crios Akane.

.- Y por que no, acaso tú me puedes probar que no hay queso allá arriba? - dijo y lo volteo a ver de nuevo.

Él se mantuvo callado, después de tono era cierto, no podía probarle que no había queso "allá arriba".

Ella miraba tan tranquila esa "Cuna" ese halito suave y misterioso de la luna creciente parecía haberse instalado en sus ojos, dándole un brillo mas especial a su mirada, de pronto cerro los ojos y respiro profundamente y alzo los brazos como si quisiera alcanzarla.

.- yo si que quiero un pedazo de ese queso dulce – se inclino hacia adelante y alzo aun mas los brazos, de pronto la rama empezó a crujir y se rompió.

.- Akane… - él estaba en una rama mas abajo y la atrapo en la caída y la recargo con él sobre la rama donde estaba, así quedo ella encima de él, con su rostro justo sobre su pecho en un extraño abrazo – tonta, pudiste caer y lastimarte.

.- No, tú estabas aquí – dijo escondiendo su rostro en su pecho, abrazo sus manos a su camisa roja – como siempre.

.- Boba, algún día no voy a estar, deberías tener mas cuidado.

.- No estés tan seguro de eso, Saotome.

El viento soplo regando el cabello de la chica sobre su pecho, llegando a rozar las puntas su cuello, el solo se recostó por completo en el árbol, se afianzo con las piernas y subió sus brazos por la espalda de Akane, haciendo una fuerte cadena sobre ella, recargo su barbilla en su cabeza y se dedico a absorber su perfume que olía a ella a un dulce esencia casi a leche y a hojas de pino.

.- Akane – sin pensarlo mucho apretó el abrazo que los tenía unidos y la sintió relajarse sobre el mismo.

.- Sshhhhh – dijo volteándolo a ver, aun en esa oscuridad su sonrisa lo iluminaba todo, volvió a su pecho y se recargo disfrutando del ritmo apresurado del corazón de su prometido y del calor de ese abrazo, intensificado como la única fuente de calor a su alrededor, por el viento frío de primavera – los niños – dijo dejando a su prometido confundido , pero no agrego mas, la vio recargada sobre su pecho y sintió el corazón de Akane, si su imaginación no lo engañaba, caminar mas lento, su instinto solo deseba disfrutar cuanto ella quisiera de su cercanía – el niño, en la cuna, se despertara si hacemos ruido – repitió ella – permanece callado…Ranma.

Así permanecieron juntos abrazados, sintiendo ella su propio corazón caminar mas lento y el de él mas rápido, "como es posible que el corazón pueda caminar rápido y lento por le mismo motivo", lleno sus pulmones con su aroma, como podía tener un aroma tan embriagante, ese aroma a hombre, niño y guerrero todos conjugados, como podía su calor hacerla estremecer cada vez que lo sentía, no lo entendía, quien era ese extraño que había llegado de chica para poner su mundo de cabeza, ese muchacho irascible, grosero, afeminado, pervertido… dulce, valiente, tenaz, que con una mirada podía elevar al cielo su corazón y con la misma podía destruir todo su mundo, quien era que poder tenía sobre ella…

Él sostenía en sus brazos esa frágil mujer, llena de matices siempre cambiantes, que podía ser dos polos contrarios y cambiar a uno de ellos en solo un instante, que podía calmar una tormenta con aun mirada y crearla en un grito, subirlo al cielo con su sonrisa y… con su mazo; dulce como al miel y amarga como veneno, pero ella era así, y así, con cada una de sus muchas virtudes y sus varios defectos ella podía volverlo loco, su sola cercanía ahora lo estaba ahogando en un mar de sensaciones, paz, ternura, cariño, necesidad am…

.- Akane, Ranma – se oyó bajo de ellos la voz de Kasumi – bajen ya, la cena se enfría.

Ninguno respondió y abajo Kasumi no esperaba que lo hicieran, esperaba que estuvieran en un "rico" momento como Nabiki había dicho, rió para sus adentros y se fue a atender a sus padres.

Arriba del árbol ambos no parecían querer moverse de su cómoda situación, pero sabían que debía, Ranma tomo la iniciativa

.- Akane – dijo despacio – estas despierta?

.- Si – dijo igual de despacio.

.- Es hora de bajar.

.- En serio – lo volteo a ver y vio la luna en él… el brillo de la luna en su mirada azul… la figura de la luna en su sonrisa gentil – se esta tan bien aquí arriba.

.- Lo se – dijo casi en un susurro.

.- Mmmmmm – dijo y soltó su camisa y subió sus manos a su cuello encadenándolas allí, todo el calor que guardaba su cuerpo camino como si la presión lo hubiera tenido detenido. – me ayudas a bajar?

.- Si, esta bien – dijo y rodeo su cintura con un brazo y con el otro comenzó a bajar, en minutos estaban los dos en el cielo… ello lo volteo a ver para agradecerle pero su mirada… la luna en su mirada la mantuvo callada

Caminaron al campamento y antes de llegar ella camino delante de él y lo volteo a ver, la mitad de su cuerpo se inclino adelante y lo miro con una sonrisa como si fuera una niña.

.- quizás algún día consiga un pedazo, veras lo dulce que sabe… sabes, Kasumi dice que quizás mamá esta allá arriba, ella era muy buena arrullando niños, seguro ella podría conseguirme un pedazo.

Camino delante de él y fue a donde sus hermanas su papá y tío Genma a intentar conseguir algo de comer si es que no o había devorado todo, su prometido como si en su casa estuvieran solo se sentó a su lado, intercambiando miradas tiernas toda la noche.

Esa noche casi al amanecer ella despertó y salio de la cabaña, la luna casi se escondía al horizonte detrás de las montañas mientras el sol despuntaba del otro lado anunciando un nuevo día, ella siguió su luna hasta que esta se escondió, sonrió para ella al saber que se había quedado guardada en otro lugar, que la vería de nuevo en sus ojos… ojos de cuarto creciente.

Fin cuarto creciente

24 de marzo de 2005

1:14 am.

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Nota de autor: bueno aquí esta el segundo espero y les este gustando solo díganmelo vale, nos vemos

por favor dejenme un review me encantaria saber si les gusto mi historia

shian shen Mimi chan