Quizás sea que no tengo nada mejor que hacer con mi vida, y por eso ya volví a molestar con este "fanfic" XD aunque todos sabemos que es un desastre.
"..." diálogos
'...' pensamientos
(...) cuando yo diga algo
CcCcCcCcCcCc cambio de escena
Ahora los datos del fic:
Titulo: Una gota de lluvia. Hmmm... ¿No les gusta la lluvia? Porque yo la amo... independientemente si tiene que ver con el titulo o no ¬¬Uu
Genero: Shonen-ai, yaoi... ay ya para que les digo si lo saben.
Parejas: Pues todavía andamos en intentos de: Kai x Rei y Yuriy x Bryan.
Disclaimer: En serio creen que puedo estarme ganando algo por esto? No pierdan tiempo... ni demandarme vale la pena!
-.-.-. No tenemos ni una
deuda no hay pendientes,
no hace falta nada a cambio... .-.-.-
Capitulo V: Obsesión?...
Un escalofrió lo recorrió de pies a cabeza mientras caminaba, era temprano por la mañana y quizás salir no había sido una de sus mejores ideas, o al menos debió ponerse un abrigo mas confortante, pero ¿Desde cuando Kai Hiwatari rehuía del frió? que el recordase su cuerpo siempre había sido muy resistente a los climas. Bah no importaba, de todas formas ya estaba afuera. Oscilarían al menos las siete de la mañana pasadas y el maldito sol, si es que así se le podía llamar a lo que salía todos los días no se había hecho presente, aunque todo el lugar estaba en completa claridad.
La verdad necesitaba caminar, despejarse, intentar ordenar en algo las ideas que no dejaban descansar a su mente ni un solo instante, si, estaba desesperado pero no quería aceptarlo.
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Ay, pero que deliciosa parecía esta mañana, la sensación mas fría de lo normal le encantaba y quizás no le molestaba tanto porque iba bien abrigado, de lo contrario seguramente se estaría quejando ahora. En esas estaba cuando enfoco su vista hacia el frente y entonces lo vio. Se detuvo abruptamente sintiendo como su respiración se agitaba ante el hecho, tenia que el ser el, podría reconocerlo entre un mar de gente y sin fallar. Y ahí se quedo de pie sin saber que hacer exactamente... sin saber que pensar, o que sentir, sin embargo se armo de valor y olvidándose ya de cualquier dolor pasado y de cualquier herida que aun se encontrase abierta se encamino de nuevo, no señor el ya no iba a escapar ni menos ser el debilucho como a veces Bryan le decía que era.
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¿Y que haría? El estaba con Yuriy y definitivamente eso parecía que seria siempre... no podía exigirle nada a Rei y menos era alguien para celarle ¡Pero no podía evitarlo! Cielos, amaba al chino mas que a nada y el saber que tenia algo que ver con Bryan lo estaba matando, tanto de esa furia provocada por sus innegables celos como también por el dolor que eso significase. Si tan solo encontrase la oportunidad, la salida a todo aquello... pero no valía la pena pues aparentemente el chino ya no estaba interesado en el y no podía culparlo, había sido el quien lo había rechazado y el que no tuvo el valor de ir tras el cuando se había ido corriendo, en cambio Bryan, el si había estado con el todo el tiempo y mientras que Kai había escapado cobardemente al primer lugar que encontró, el pelilavanda se había quedado confortándolo seguramente.
¡Cielos! Ahora sentía que se merecía todo lo que le estaba pasando por ser tan idiota, y casi cede ante la idea de que quizás lo mejor para Rei seria quedarse con Kuznetzov, pero... ¡Se negaba rotundamente a ello! Primero muerto antes de aceptar aquello.
"Buenos días Kai" -saludo con su usual tono de voz-.
El interpelado detuvo su andar en seco al escuchar aquella voz... sintió un escalofrió recorrerle el cuerpo y este no era provocado por el frió de la mañana. Hablando del "Rei" de Roma.
"¿Qué pasa?" -pregunto Rei, deteniéndose al ver que el ruso bicolor lo hacia-.
"No, nada" -se apresuro a responder mientras luchaba por retomar el control de si mismo-.
"De acuerdo pero..." -la expresión del chico se volvió un tanto afligida- "No respondiste a mi saludo" -comento con tristeza inocente-.
¡Demonios! .¿Porque tenia que hacer eso? Se veía tan frágil e irresistible con esa expresión en el rostro.
"Bu-buenos días" -respondió torpemente el ojirojo- "¿Qué haces aquí?"
"..." -Rei sonrió con algo de tristeza ¿Es que Kai siempre tenia que ser tan seco e hiriente con sus preguntas?- "Voy camino a mi trabajo".
"¿Trabajo?" -arqueo una ceja-.
"Si" -sonrió, sin perder aquella radiante alegría que solamente lo hacia verse mas hermoso- "Trabajo en un restaurante... no creerás que el señor Dickenson me paga la estancia aquí ¿O si?".
"No" -negó el, sin saber que mas decir-.
"En fin" -se encamino de nuevo- "No es nada fácil permanecer en Rusia, mira que me sale caro" -bromeo-.
"¿Y de que trabajas?" -quiso saber el, alcanzándolo y caminando a su lado queriendo iniciar con una platica, aunque nunca antes había intentado algo como aquello-.
"De hacetodo" -respondió el, sonriendo mientras que volteaba a mirar al bicolor que estaba a su lado-.
"¿Hacetodo?" -pregunto desconcertado en un gesto que Rei adoro-.
"Si" -hizo una pausa, plasmo una sonrisa divertida en sus labios y miro hacia el frente- "Hazme esto, hazme aquello, has aquí, has allá" -respondió mientras que una risita monosilabica se ahogaba en su pecho- "Al principio solo trabajaba de mesero... y acabe de segundo cocinero, de cajero, de supervisor e incluso hasta me a tocado lavar los pisos" -esta vez rió, burlándose de si mismo-.
"No es que sepa mucho de estas cosas pero..." -frunció el seño en gesto gracioso- "¿No crees que te están explotando?".
"Para nada" -negó suavemente- "Me pagan lo justo y eso lo agradezco, de lo contrario desde hacia un tiempo hubiese tenido que regresar a China".
"¿Y porque te quedas?" -no quiso preguntarlo de aquella forma tan brusca y tan seca, pero no había podido evitarlo-.
Cuando le escucho decir aquello ciertamente le había lastimado, pero ignoro al instante la sensación, ya había sufrido lo suficiente como para venir a darle el placer a Hiwatari de verlo mal y por su culpa... Ay kami ¡Que horror! .¡Ya estaba sonando como Bryan! E interiormente se rió ante el hecho. Volteo hacia Kai, con una de esas hermosas sonrisas suyas.
"Quizás Rusia no sea mi hogar, pero me he acostumbrado al frió y he aprendido a quererlo, por mas que llegue a maltratarme por no estar preparado... pero ya comienzo a aclimatarme y ahora no me importa ya" -¿Por qué hacia dicho eso? sencillamente habían salido las palabras de su boca- "Quizás Rusia no sea el país mas hospitalario en el que he estado pero me acostumbro, y además no quiero irme todavía" -dijo para mirar de nuevo hacia el frente-.
Kai guardo silencio... sintió como si el chino acabase de golpearlo, porque mas que estar hablando de Rusia pareció que Kon estaba hablando de el, y se sintió miserable por la forma en la que Rei lo veía, y tenia todo el derecho del mundo para pensar así.
"Además" -prosiguió el chino- "No quiero dejar a Bryan todavía, lo extrañaría mucho" -dijo de lo mas inocente, sin saber el error que había cometido-.
Kai se detuvo bruscamente apenas si escucho el, apretó los puños y la expresión de su rostro se volvió completamente furiosa mientras que su mirada dilataba fuego puro. Rei también se detuvo, miro con sorpresa y desconcierto la mueca de furia que se había formado en las facciones del ruso ojicarmín.
"¿Kai?" -lo llamo con temor y preocupación por aquel extraño y brusco cambio-.
Hiwatari dirigió la furia de su mirada al chico frente a el y al observarlo apenas se desarmo por completo, los ojos dorados del chino bien abiertos y la mezcla de preocupación y asombro en su delicado rostro fueron suficientes para que el aplacase los bríos de enojo que lo habían atacado al escucharlo decir aquellas palabras. Pero ¿Qué podía hacer? Eso tan solo confirmaba sus sospechas... Rei, su adorado gatito no era mas tiempo suyo, no, ahora era de aquel odioso detestable ojilavanda y le gustase o no tenia que aceptarlo ¡No podía quejarse! Porque había sido el mismo quien había rechazado al pelinegro y no tenia derecho alguno a reclamar nada después de todo la culpa hacia sido solamente suya.
Si, se lo tenía merecido, bien merecido.
"Lo siento" -dijo, bajando la mirada-.
"¿Fue algo que dije?" -pregunto con aflicción el ojidorado-.
"No" -negó el, aunque en realidad el chino tenia toda la razón-.
"Entonces... ¿Qué te pasa?" -ensancho su mirada preocupada sobre el otro-.
"No es nada, en serio Rei" -subió de nuevo la vista y sonrió muy ligeramente lo que causo un sonrojo en las mejillas del chino, pero estaba tan ofuscado que ni siquiera lo noto-.
"Bueno ¿Me acompañas?" -se aventuro a preguntar- "A mi trabajo, es decir si no tienes cosas mejores que hacer, yo no quiero incomodar" -sin poder evitarlo comenzó a sentirse nervioso-.
"Hn" -asintió mientras comenzaban de nuevo a caminar, esta vez en silencio-.
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"Bryan por favor, dame ese cartón" -pidió bromeando el pelirrojo- "Te vas a acabar mi dotación diaria de calcio ¡Querrás que me rompa un hueso! -siguió divertido, al ver como el otro ruso casi se acababa la leche en un vaso que se había servido-.
"¿Solo uno? Rayos, yo esperaba al menos cinco" -rió al ver el puchero que hacia el otro- "Ya no llores y toma" -le extendió la caja la cual tomo el ojiazul-.
"¿Toma?" -repitió sosteniendo el cartón- "¡Pero si ya lo dejaste vació!"
"Uy que pena, no voy a poder vivir con la preocupación" -comento sarcásticamente agarrando el vaso lleno de leche que se había servido-.
"Porque... ¿Por qué tienes que ser tan...?" -el pelirrojo mostró un gesto molesto-.
"¿Tan que?" -lo incito a terminar-.
"Tan...tan... ¡Tu!".
"Uy perdona la ofensa, si quieres me vuelvo mas como Kai y todos contentos" -bufo, un tanto molesto, un tanto sarcástico-.
"No me refería a eso" -torció la boca el otro- "Aunque ya que hablamos de el... ¿Puedo confiarte algo?" -pregunto algo tímido, jugando con el tenedor de su desayuno-.
"Espera, no me digas" -puso una cara pensativa fingida- "¡Te decepciono en la cama! Ya decía yo que ese porte que se cargaba solo era una facha porque..." -pero fue interrumpido-.
"¡Bryan!" -grito el otro en completa indignación-.
"¿Qué?" -volteo a verlo inocentemente-.
"No es sobre eso estúpido".
"¿Y entonces sobre que cosa es idiota?".
"¿Y tienes que insultarme para preguntarme imbécil?"
"No lo se zopenco, tu me insultaste primero".
"¡Argh!" -desvió la mirada molesto hacia otra parte, mas al escuchar la risa del otro no pudo evitar unírsele-.
"Ya" -paro el pelilavanda- "Deja de comportarte como una niñita de secundaria y dime que pasa".
"Mira... tu sabes que siempre había estado interesado en Kai" -comenzó el, a lo que Bryan asintió tragándose su dolor- "Y ahora que ya lo logre... pues me siento feliz... pero no con la emoción y la intensidad que esperaba, no es como yo pensé que seria... no me siento como antes me sentía" -dejo caer los hombros derrotado-.
A ver, que alguien lo golpease porque pensaba que estaba soñando... ¿Había escuchado bien? .¿Yuriy le decía que no era enteramente feliz? Se preguntaba si el pelirrojo sabría la profundidad de sus palabras y el significado que encerraban, enfoco sus lavandas orbes sobre el chico que todavía se entretenía con un tenedor, esperando su respuesta.
"¿Te digo la verdad o seguimos siendo amigos?" -le pregunto con algo de sorna pero también sinceridad-.
"La verdad" -sentencio el ojiazul, de todas las personas que lo rodeaban Bryan era el único que lo conocía lo suficiente como para darle un dictamen completamente acertado-.
"Veamos si encuentro las palabras" -se llevo una mano hacia el mentón en gesto pensativo y se recargo completamente en la silla- "Normalmente siempre terminas deseando y queriendo algo cuando sabes que es imposible que sea tuyo, por lo tanto si llegas a obtener lo que tanto deseabas una vez que esta en tus manos te das cuenta de que solamente era el mero capricho porque estabas consiente de que no seria para ti" -tomo aire- "Ya sabes, como cuando niño desea el juguete mas llamativo y nuevo con desesperación y se aferra mas a el cuando sus padres se niegan a comprarlo, se encapricha con el deseo de obtenerlo y cuando lo hace... nota que realmente no era la gran cosa ni tampoco tan maravilloso como creyó, que sencillamente había sido un caprichito mas" -finalizo, sonriendo rara y extrañamente con sinceridad... se veía raro, pero sin duda cautivador-.
Yuriy le miro con los ojos bien abiertos, completamente asombrado de aquellas palabras por dos buenas razones: La primera es que Bryan jamás acostumbraba hablar de esa forma y nunca le había escuchado dar ese tipo de puntos de viste ni opiniones lo cual lo había dejado sorprendido, ahora que lo veía le hacia falta todavía mucho por conocer del pelilavanda. Y la segunda es que tenia completa razón con un sencillo ejemplo, no había cabida para ninguna duda... Bryan lo había dejado con la boca abierta el día de hoy.
"¿Y bien?" -arqueo una ceja- "Si quieres te doy mi versión rápida y te digo que estas obsesionado con el idiota de Hiwatari, porque el señor se las da siempre de perfecto e inalcanzable y era eso lo que te tenia como imbécil babeando tras de el, y ahora que ya es tuyo sencillamente te diste cuenta de que no era lo que querías" -dijo el, encogiéndose de hombros-.
"¿Tu crees?" -pregunto el, mirando a la mesa y sintiéndose terriblemente confundido-.
"Piensa lo que quieras" -repuso Bryan poniéndose de pie para retirarse- "Después de todo solo tu sabes que pasa contigo".
Yuriy tan solo se quedo absorto en aquellos pensamientos, pero sintió cuando el pelilavanda pasaba a su lado y lo escucho ¿cantar? volteo hacia el al instante-.
"No... no es amor... lo que tu sientes se llama obsesión..." -cantaba por lo bajo mientras llegaba hacia la puerta- "... una ilusión en tu pensamiento, que te hace hacer cosas..." -finalizo mientras salía de la habitación-.
El pelirrojo quedo envuelto por completo en sus cavilaciones, meditando cada palabra intercambiada con el otro ruso, cada suposición y comenzando a recordar todo lo vivido con Kai. Desde que de niños lo había conocido y como después del ultimo torneo le había desarrollado lo que el llamaba ¿Amor? pero... ¿Y si Bryan tenia razón? Le gustase o no, cuando se trataba de su persona, Bryan Kuznetzov siempre tenia la razón.
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Se quedo ahí junto a la puerta, recargado en la pared, con los brazos cruzados y los ojos cerrados, se quedo ahí por Yuriy y porque lo conocía sabia que no iba a tardar en salir a buscarlo para hablar con el. A veces el pelirrojo podía ser tan despistado que necesitaba ayuda para entender las cosas.
¡Por todos los cielos! Bryan solo había necesito escucharle decir aquellas palabras y mirar en lo profundo de sus ojos azules para darse cuenta de la realidad que no había podido identificar antes porque el pelirrojo estaba lejos, pero que ahora le había sido muy fácil, de descubrir.
Sonrió... como no recordaba haber sonreído antes. "La esperanza muere al ultimo" ¡Y esta esperanza todavía seguía viva!
'Es una obsesión' -pensó el pelilavanda, esperando pacientemente a que el otro saliese a buscarlo-.
Continuara...
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Ahora si me manche ¡No tengo vergüenza! XD miren que poner esa estúpida canción y todavía mas ¡Hacer que Bryan la cantase! hey ¿Pero que querían que hiciese? estaba escribiendo esa parte cuando mi biblioteca multimedia se paso al álbum de "Aventura" y comenzó a sonar la cancioncita de "Obsesión" y yo estaba escribiendo justamente la explicación de Bryan y cuando pase a lo siguiente ¡Que suena el corito ese! y entonces lo tome como señal divina caída del cielo e hice que Bryancito cantase semejante y burda canción XD bueno a mi me gusta todo tipo de música así que no se sorprendan de nada... además ya dijimos que es valido sacar la inspiración de donde sea ¡El chiste es tenerla! que cínica soy, como lo dije no tengo vergüenza ¬¬Uu
Bueno ya me callo y paso con los reviews lindos n.n
Kira-su
Asuka-chan
Akane Tsubame
Kakira Tsukikawa
Aniat Hikoui
Agumon girl
Charo Nakano
Y bien, eso es todo por hoy (insisto en que me escucho bien looney toon diciendo eso) ¡Nos vemos en siguiente capitulo! y gracias por leer n.n
Atte. Celen Marinaiden. "En el mundo solo hay victimas y victimarios... yo pertenezco al segundo grupo..."