Disclaimer: Como el 99'9999… de los autores de fanfiction dicen: Slam Dunk y sus personajes no me pertenecen, y si os estáis preguntando por el resto de autores, no se donde leí un fic que no lo decía así que…pues eso.
Sumario: Secuela de Atrapado. Ruhana. Un poco de MakiHana, y MakiKiyo (Me encanta esta pareja). También habrá menciones de otras parejas.
N/A: En esta historia el Bachillerato tiene 4 cursos. Pero de todas formas tantos cambios he hecho en la historia que uno más uno menos, no me viene de aquí. Y como nadie puede demandarme (o eso creo yo) pues hago lo que quiero. (Suena pretencioso¿¿verdad?).
CAPÍTULO 3
Mientras Kaede resolvía el misterio más grande del universo; Hanamichi miraba sorprendido las diferentes muecas que hacia su lindo zorrito: enfado (al pensar en las intenciones de Maki); curiosidad e incredulidad (al recordar el comportamiento del mono salvaje hacia el viejo y la incredulidad de pensar que alguien pueda interesarle semejante fósil); sonrisa estúpida de enamorado (al pensar en su adorado Hana-chan); otra vez sonrisa estúpida de enamorado por el mismo motivo; otra vez enfado por las intenciones del viejo y un poco apenado por el mono salvaje; y finamente, pero no por eso menos importante…la cara de zorro astuto maquiavélico que haría cagarse en los calzoncillos hasta el mismísimo Satanás, al tramar el plan OPPPAD, más fácil de entender como Operación Protección Propiedad Privada Aka. Do'aho.
Mejor será que no pregunte nada, da más miedo que todo un regimiento de Akagis cabreados y en plena forma. Pensó el pelirrojo con una gota de sudor en la cabeza.
Vamos Do'aho! Tu y yo tenemos un día por delante y por tu amigo no te preocupes…tengo una idea que no puede fallar. Dijo Kaede agarrando la mano del pelirrojo y llevándoselo de allí.
Eso es lo que más miedo me da! Murmuró Hanamichi.
¿Huh?
Nada! Nada! No me hagas caso. Ehehehehe! Rió de forma nerviosa Hanamichi.
Después de eso, Kaede ya se ocupó de no permitir que Hanamichi volviera a pensar en aquellos dos.
El día pasó tal y como el zorro de ojos azules lo había planeado. Durante el paseo por el parque Kaede tuvo oportunidad de darse el rollo con el Do'aho, fue una lástima que se encontraran en un lugar público. Pero se resignó, ya que más tarde podía recibir una buena recompensa. Aunque se molestó un poco cuando Hanamichi le ganó, en el uno contra uno.
Pero de todas formas aquello no importaba. Tenía la oportunidad de pasar con Hanamichi una noche a solas en su casa, y aunque le fuera la vida en ello no la iba a desaprovechar! (Sonrisa hentai y brillo en los ojos de la autora y Ru. Transpiración excesiva por parte de un pelirrojo mientras Ru le mira; cuando el zorro le da la espalda…Sonrisa súper hentai de la autora y del pelirrojo, acompañada, como no, de un brillo en los ojos aún más hentai)
N/A: Bien si con las pistas que os he dado aún no habéis adivinado que este capi tiene lemon…Mejor me callo no esta bien decir palabrotas, podría haber niños inocentes por ahí fuera. Perdón por la interrupción.
Llegaron a casa de Kaede ya entrada la noche. Mientras Kaede terminaba de arreglar todo, el pelirrojo se había recostado en el sofá, ya casi estaba contando chibi kitsunes haciendo Slam Dunks, cuando notó unos labios húmedos y tibios en su cuello, arrancándole un gemido.
Kaede! Susurró Hanamichi.
Venga Hana-chan, ya todo está listo. Dijo Kaede cogiendo la mano derecha de Hanamichi y llevándolo a la mesa, donde les esperaba un delicioso menú de comida mejicana (N/A: Perdonad mi falta de cultura en este aspecto, sobre todo tu Nian).
Después de cenar, Hana llevó a Kaede a su habitación, ya que, el zorrito decía que no se encontraba bien ¬¬º
Cuando Hanamichi ya había acostado a Kaede en la cama e iba a abrir la puerta para irse, unos brazos posesivos y fuertes le rodearon el torso, mientras una cabeza se colocaba en su hombro derecho. ¿Debo suponer que ya te has recuperado? Bromeó Hanamichi sin girarse. Su respuesta fueron unas leves mordidas en el lóbulo de su oreja.
Deseo con todas mis fuerzas tomarte, pero no lo haré si tú no quieres. Dijo Kaede casi susurrando.
Hanamichi se tensó un poco ante estás palabras. Confía en Kaede Kitsune para ir directamente al grano…y por no enterarse de nada. Pensó Hanamichi con una sonrisa.
Debería darte vergüenza Kitsune…
Kaede dio un paso atrás dolido y triste.
Mira que copiarme! Exclamó Hanamichi dándose la vuelta y mirando a Kaede con amor y deseo.
¿Quieres decir…que tu…que tu…Las palabras no le salían, y no tenía claro si era por la sorpresa y por el susto que momentos antes le había dado el pelirrojo.
Así es Kaede. Yo también quiero TOMARTE, o ¿acaso creías que iba a dejarte toda la diversión a ti? Preguntó Hanamichi con falsa inocencia y acercándose a Kaede, como un cazador a su presa.
Hanamichi empujó a Kaede encima la cama y se colocó encima de él, sentándose en a la altura de la ya evidente erección del moreno. Vaya! Parece que esto no te resulta del todo desagradable! Dijo al oído de Kaede, mientras rodaba sus caderas frotando la erección de Kaede. Haciendo que este arqueara su espalda.
Hanamichi rió pícaro ante la reacción del moreno, y empezó a besar, lamer y morder la garganta de Kaede, mientras le quitaba la ropa.
Kaede entre gemido y gemido desvestía a su adorado pelirrojo. No era tal y como lo había planeado, pero le excitaba mucho el comportamiento del pelirrojo.
En segundos los dos estaban completamente desnudos.
Hanamichi besaba con hambre cada sitio y cada rincón del cuerpo de Kaede, mientras sus manos torturaban los pezones de Kaede, y frotaba su sexo con el del moreno. Kaede sentía como segundo a segundo la sangre de su cuerpo se concentraba más y más en cierta parte de su anatomía, que en estos momentos ya empezaba a dolerle.
El pelirrojo, viendo el estado de su koi, sonrió, luego le dio un morreo a Kaede, que casi hace perder el sentido de la realidad al moreno. Después bajo su boca hasta el pene de Kaede, dejando un rastro de besos y pequeñas mordidas en aquella piel blanca que pedía a gritos ser comida.
Compadeciéndose de su pobre amante, Hanamichi, empezó al chupar y lamer el pene de Kaede, mientras una de sus manos jugaba con los testículos del zorro.
Ha…Hana…más…ah!...si…si paras…te…te mato! Consiguió por fin articular Kaede al borde de correrse allí mismo.
Hana dándose cuenta, empezó a chupar aquel dulce con más fervor. Kaede empujaba sus caderas hacia esa boca que lo estaba torturando, no de una manera que el no quisiera, todo debe decirse.
Con un grito, que se oyó en toda la casa, Kaede se corrió en la boca del pelirrojo. Mientras su respiración se normalizaba, notó como Hana lamía su abdomen (el de Kaede) y toda parte de su cuerpo que fue tocada por su esencia.
Ahora es mi turno, Kitsune. ¿Quieres seguir adelante? Preguntó Hana mirando directamente a los ojos de Kaede.
Sí. Respondió Kaede sonriendo y acercando a Hana para besarlo. Mientras se besaban, Kaede notó como un dedo se introducía en su ano dilatando su entrada. Arqueó un poco la espalda cuando sintió una punzada de dolor, luego a medida que se acostumbró al intruso, empezó a mover sus caderas contra ese dedo.
Hanamichi viendo que Kaede ya se había acostumbrado, introdujo un segundo dedo y luego un tercero. Mientras dilataba la entrada de Kaede, Hanamichi rozó varias veces la próstata del moreno. Haciendo de Kaede gritara y arqueara la espalda, pero esta vez de placer.
Cuando Hanamichi notó que Kaede estaba listo, hizo que el moreno se tumbara boca abajo. Y levantó las caderas del otro chico. Mientras besaba el cuello, los hombros y la espalda de Kaede, iba entrando en el cuerpo de este. Lo hacía poco a poco, para no dañarlo, aunque de todas formas no pudo evitar hacérselo, ya que para ambos era la primera vez.
Muévete de una vez! Ordenó Kaede impaciente cuando su cuerpo se acostumbró al pene del pelirrojo.
Hanamichi arqueó una ceja, pero de todos modos, obedeció encantado. Entraba y salía del cuerpo de Kaede lentamente y con suavidad.
Su mano derecha masturbaba con el mismo ritmo que sus envestidas, la erección del moreno. Mientras su brazo izquierdo rodeaba la cintura de Kaede.
A medida que pasaba el tiempo las envestidas eran más rápidas, fuertes y profundas. Hanamichi hizo que Kaede se apoyara al cabezal de la cama con las dos manos. Mientras hacía que su pecho se acoplara a la espalda de Kaede, rodeando en torso del moreno aún con el brazo izquierdo. Su mano derecha seguía masturbando a Kaede al mismo ritmo que sus envestidas.
Ahora sus cuerpos se movían a un ritmo frenético, casi salvaje. Kaede empujaba su trasero contra la pelvis del pelirrojo para hacer, si era posible, más profunda su unión. Con un grito ensordecedor, Hanamichi se vació en el interior de Kaede, y este se corrió en la mano del pelirrojo.
Kaede se dejó caer pesadamente sobre la cama, Hana lo hizo a su lado.
Kaede notaba como semen de Hana chorreaba por sus piernas, mientras miraba como el pelirrojo lamía y chupaba la mano con la que le había masturbado. Eso hacía que cierta parte de su cuerpo volviera a ponerse dura como una piedra.
Ahora me toca a mí! Pensó Kaede colocándose encima del pelirrojo y besándolo como si le fuese la vida en ello. Prepárate Do'aho. Ahora es mi turno. Dijo Kaede mordiendo el labio inferior de Hanamichi.
La respuesta de Hanamichi fue un lametazo a la mejilla izquierda del moreno.
Kaede tomando la acción del pelirrojo como una provocación, empezó a chupar y lamer una de las tetillas del pelirrojo, mientras con una mano torturaba la otra tetilla, y con la mano sobrante estimulaba el miembro del pelirrojo. Los gemidos de Hanamichi no se hicieron esperar, e inundaron aquella habitación. De vez en cuando se oía un grito ahogado, cuando Kaede mordía demasiado fuerte una de las tetillas.
Decidiendo que la parte superior del pelirrojo ya había tenido bastante atención, Kaede empezó a besar la parte interior de los muslos del pelirrojo, esto a Hanamichi le hubiera gustado más si no fuese porqué su pene dejó también de recibir atención. Cada vez estaba más excitado y su erección le dolía más por momentos.
Kaede disfrutaba de la imagen de Hanamichi, el pelirrojo estaba cubierto por una fina capa de sudor, tenía la boca abierta y los ojos cerrados. Las mejillas rojas por la excitación y por la frustración.
Kaede…por favor…Casi suplicó el pelirrojo.
El zorro esbozó una sonrisa de victoria y obedeció en cantado a la petición de Hanamichi. El moreno empezó a lamer suave y lentamente el pene de su novio, de la base a la punta, hasta que pudo probar el pre-semen del pelirrojo, luego chupó la erección de Hanamichi más rápidamente, mientras los dedos de su mano libre se ocupaban de preparar al pelirrojo.
Hanamichi ya casi no podía distinguir el dolor del placer y cuando los dedos de Kaede tocaron por tercera vez su próstata, no pudo evitar venirse en la boca de Kaede, quien bebió hasta la última gota.
Hanamichi sabía lo que venía ahora, así que intentó girarse boca a bajo, pero Kaede se lo impidió. Quiero ver tu cara, cariño. Quiero que cuando alcances la cima, me veas solo a mí. Susurró Kaede al oído del pelirrojo, estremeciendo a Hanamichi.
Kaede besó una vez más a su novio, y luego colocó las piernas del pelirrojo sobre sus hombros. Miró a Hanamichi, cuando este asintió, empezó a penetrarle con mucho cuidado.
Después de entrar por completo en el cuerpo de Hana, y asegurarse de que este se había acostumbrado a su tamaño. Kaede empezó a moverse.
Cada vez iba más rápido, los gemidos de ambos y sus respiraciones aceleradas y entrecortadas, eran la música que les acompañaba en aquella danza sensual.
Kaede se dio cuenta de que el pene del pelirrojo pedía atención y él estuvo encantado de dársela.
Momentos después Hanamichi se corría en la mano de Kaede, gritando a todo aquel que quisiera escuchar en nombre de su amante, el moreno envistió dos o tres veces más antes de llegar al orgasmo con un grito, luego de dejó caer en los brazos de Hanamichi, quien le recibió encantado.
Te amo Hanamichi. Dijo Kaede apoyando su cabeza en el pecho del pelirrojo.
Y yo a ti, mí querido kitsune. Susurró Hanamichi al oído del moreno, mientras acariciaba sus cabellos azabaches.
Do'aho, ni siquiera en un momento como este puedes dejar de lado tus motes. Se quejó Kaede, aunque una hermosa sonrisa se dibujaba en sus labios.
Los dos se adentraron en el mundo de los sueños en seguida y con una sonrisa de pura felicidad en sus labios.
A la mañana siguiente un moreno de ojos azules entro en su habitación, entonces se encontró con una imagen de lo más turbadora.
Coño! Exclamó, llevándose las manos a la boca inmediatamente después.
Pero fue demasiado tarde.
Continuará…
N/A: Ta-chan! Un capitulo con doble lemon, es la primera vez que escribo un fic en el que Hanamichi toma a su adorado Kitsune. Pero pensad que es lógico, su ex es el mayor hentai de toda Kanagawa, me atrevería a decir de todo Japón. Y el novio que tiene ahora tampoco se queda corto. No se si haré habrá más lemons en esta historia. Que os aproveche! Ahora si me disculpáis voy a tomarme una ducha bien fría. Nos leemos! By-By/
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