Wajajajajajajaja... se nota que no hay ni quien me saque de aquí XD ash pero no importa, igual y quiero escribir mis tonterías.

"..." diálogos

'...' pensamientos

(...) cuando me meta para decir alguna cosa

McMcMcMcMc cambio de escena

Ahora los datos del fic:

Titulo: Not gonna get us Ósea, soy fan de t.A.T.u y espero que nadie tenga un problema con eso ¬¬ me gustan sus canciones, no ellas XD

Genero: Shonen-ai y quizás yaoi (todavía busco valor para eso XD)

Parejas¡Kai y Ray! Aquí si no hay nada de triángulos o cuadrados amorosos y raros.

Disclaimer: Lo sabemos, Beyblade no es mío porque de ser así estaría censurado en muchos países e incluso prohibido.

Capitulo I: Yo...

"¡Ya cállate Rei!" -grito Kai, arrastrando prácticamente su maleta-.

"Que estemos perdidos no quiere decir que no me guste el lugar" -repuso el chino, con un puchero-.

"Recuérdame matarlo, voy a matar Takao apenas lo vea" -sobra decir que después de caminar cuatro horas entre la gente y aparentemente en círculos lo tenia completamente fuera de si-.

"También fue nuestra culpa, por no fijarnos en el vuelo" -trato de mediar el chino-.

"Pero... ¡Que imbécil te compra dos pasajes de avión a Taiwan cuando deberían ser a Japón?" -soltó el, gritando casi en la cara del chico de no ser porque no volteo a verlo-.

"Y me quieres decir... ¿Qué clase de imbéciles no se fijan en el vuelo ni en las llamadas y se suben al avión?" -para nada le había gustado la actitud del ruso, y solo por mero instinto contraataco, además el también ya estaba cansado-.

"¡Hmpf!" -se detuvo repentinamente... no recordaba haberse sentido tan frustrado ni enojado antes-.

"Ya Kai" -Rei recupero su serenidad, y se detuvo dejando su maleta en el suelo también- "Igual que tu estoy cansado, hartado, enojado, desesperado y frustrado... pero hay que verle el lado positivo a las cosas".

"¿Y cual es tu maldito lado positivo?" -refunfuño el, recuperando energías mientras que las personas pasaban a su alrededor-.

"Pudo habernos mandado a Egipto, o a Canadá ¡A África!" -trato de bromear, para ver si con eso el otro se relajaba un poco-.

"¿Me quieres decir que mi consuelo es pensar que pudo haber sido peor?" -arqueo una ceja, volteando a ver a Rei por primera vez en todo ese tiempo-.

"Exactamente" -sonrió, mirándolo con ternura-.

"Que tontería" -volteo hacia otra parte... no quería aceptarlo pero cada vez que le sonreía de ese modo lo dejaba anonado-.

"¿Y que haremos?... mira que yo no traigo ni un cinco" -suspiro derrotado- "Y no ha de faltar mucho para que anochezca".

"..." -el otro permaneció el silencio, tratando de pensar hasta que una idea le llego de golpe a la mente- "¿Recuerdas cuando perdimos el barco en Europa?"

"Si" -asintió el- "¿Qué con eso? También fuimos tontos ahí".

"No es eso... Se supone que en todas partes existe una sede de la BBA ¿No?" -a lo que el ojidorado asintió- "Y se supone que las sedes de la BBA son las embajadas para los beyluchadores" -a lo que el otro volvió a asentir- "¿Entonces porque estamos parados como idiotas en vez de irnos a buscar una de ellas?".

"¡Que buena idea Kai!" -el asiático al fin entendió- "Ni a mi se me habría ocurrido, y tal como nos sacaron de apuros aquella vez también pueden hacerlo en esta" -sonrió mostrando sus blanquecinos colmillos-.

"¡Hmpf!" -el otro tan solo se dio la vuelta y comenzó a caminar de nuevo-.

"Kai..." -lo llamo el chino-.

"¿Y ahora que demonios pasa?" -se detuvo, malhumorado de por si-.

"¿Sabes como llegar?" -pregunto un tanto divertido-.

"¿Eh?" -detuvo su paso sin decir nada más-.

"De acuerdo, entonces déjamelo a mi" -y Kai pensó que eso debió haber hecho desde que llegaron-.

Rei paro a algunas personas, hablando con ellas que según el gusto de Kai en un idioma muy raro pero que se oía tan bien en los labios del chino.

McMcMcMcMc McMcMcMcMc McMcMcMcMc McMcMcMcMc

Después de unas cuantas averiguaciones y casi de pararse a preguntar en cada esquina dieron con la dichosa sede que se supone les ayudaría. Como era de esperarse solo el pelinegro hablo con la mujer encargada del lugar.

"¿Y que te dijo?" -apenas pregunto al ver como el pelinegro se aceraba hacia el lugar en el que estaba sentado-.

"Dijo que nos conseguiría habitaciones en un hotel, y nos tendría listos unos pasajes de avión hacia Japón la próxima semana" -explico el, con toda la serenidad del mundo-.

"¿La próxima semana?" -Kai se paro de golpe-.

"Bu-bueno es que es lo mejor que pudieron hacer... no deberíamos quejarnos ya que nos darán hospedaje hasta entonces, Kai pudo ser peor" -sonrió nerviosamente ante la actitud que había tomado el ruso-.

"Si, pudieron habernos matado en el camino" -respondió sarcásticamente-.

"No, podríamos seguir perdidos" -sonrió cerrando sus doradas orbes-.

Kai solo bufo molesto por la situación, de hecho no quedaba nada mas por hacer, necesitaría estar loco para llamar a su abuelo o para pedir alguna cosa a nombre de los Hiwatari, no señor, no iba a hacer eso.

McMcMcMcMc McMcMcMcMc McMcMcMcMc McMcMcMcMc

Ahora descansaba ¡Al fin! Luego de tanto atrejeo lo único que necesitaba era un buen descanso, y nunca una cama común de un hotel se le había hecho tan cómoda. Sus manos estaban tras su nuca y los orbes rojizas permanecían cerradas mientras que su cuerpo ya se había relajado... ¡Jah! ningún entrenamiento bajo la nieve se comparaba con perderse tantas horas en un mar de gente, con un chino latoso y una maleta.

Sonrió ligeramente... porque solo hasta ahora caía en cuenta de la situación, estaba completamente solo con el ojos dorados, oh si, había estado muy ocupado quejándose y maldiciendo a Takao como para caer en cuenta de su suerte y de la dulce realidad... de hecho ya no estaba enojado con el nipones, quizás ¿agradecido?

Sea como fuese debía reconocer que Rei le había tenido mucho paciencia, y que el también le había tenido paciencia al chino, esa tarde había sido todo un reto, con trampas y obstáculos incluidos. Suspiro cuando el aroma a vainilla (ok, todo mundo dice que el chino huele a vainilla, así que lo dejaremos así ¬¬Uu) le llego gratamente a la nariz, y casi por inercia tuvo que abrir los ojos para buscar con la mirada por la habitación, y sus ojos no tardaron el toparse con la figura grácil del ojiambarino.

Sintió quedarse sin aliento cuando lo vio, cabello suelto y húmedo cayendo sobre su cuerpo, una toalla alrededor se su cuello y traía puestos unos pantalones chinos muy típicos de el, pero no por eso le quitaba el gusto de poder observar el dorso desnudo el neko por el cual algunos mechones negros caían también. Con la toalla que tenia sobre el cuello se encargaba de secar algunas partes mas de su cabello manteniendo a Rei distraído y ajeno a la mirada fascinada que le dirigía el bicolor.

Repentinamente dejo de ponerle atención a su cabello y volteo a ver a su compañero, y apenas Kai sintió la mirada dorada de Rei sobre si, volteo hacia otra parte haciéndose el disimulado.

"Deberías darte un baño" -sugirió- "Es tan refrescante y delicioso" -se sentó en la cama que le correspondía- "Te aseguro que te sentara bien".

"Hmpf" -se puso de pie yendo a buscar algunas cosas a su maleta de equipaje-.

La verdad no sabia si iba a darse ese dichoso baño porque realmente le apetecía o solamente porque el chino lo había dicho.

McMcMcMcMc McMcMcMcMc McMcMcMcMc McMcMcMcMc

Para cuando ya había tomado aquel duchazo realmente se sentía más liviano, como era de esperarse Rei había tenido razón. Se paso la blanca toalla por sus azules cabellos restregándolos en un intento de secar aquel cabello de dos tonalidades que poseía. Se puso una camiseta blanca ajustada, justo como las negras que solía usar antes.

Cuando salio del cuarto de baño se encontró al chino trenzando meticulosamente su cabello, y una camisa china holgada que cubría el cuerpo que le hubiese gustado poder disfrutar mas a la vista. Cuando el otro se dio cuenta de su presencia volteo a mirarlo y sonrió, como era tan costumbre suya.

"¿Y bien?" -espero-.

"No estuvo tan mal" -respondió Kai, era extraño pero desde hacia tiempo entre ellos no necesitan mayores palabras para entenderse-.

"Te lo dije" -sonrió victorioso y volvió a la tarea de trenzar lo que le restaba de su largo cabello-.

Sin más Kai también se fue a sentar a su cama, miro hacia el suelo y volteo a ver ligeramente hacia el chico frente a el que se veía tan tierno e inocente con el cuidado que le estaba poniendo a sus azabaches cabellos. Sonrió con algo de ternura y embeleso.

"¿Rei?" -lo llamo suavemente y causo un respingo por parte del chino al escuchar llamarlo de ese modo-.

"¿Si?" -arqueo una ceja, aun con el cabello entre sus manos-.

"Yo también" -contesto sencillamente el, bajando la vista-.

"¿Eh?... ¿De que hablas Kai?" -el chico se sintió confuso-.

"¿No lo recuerdas?" -el bicolor se puso de pie con seguridad, caminando apenas dos pasos y quedando frente al ojidorado quien subió su vista hacia el"-.

"¿Qué cosa?" -cada vez se sentía más desconcertado y en su brillante mirada dejaba notarlo-.

"Eres tan despistado" -dijo el bicolor, suavemente-.

Aquellos ojos dorados se abrieron enormemente cuando Kai se arrodillo frente a el, quedando a la misma altura que Rei, y con delicadeza que jamás creyó ver en el ojirojo, este coloco su mano sobre la mejilla del chico.

Sin duda alguna sintió estremecerse ante el contacto, algo que jamás antes creyó posible y que ahora lo estaba poniendo completamente tanto nervioso como sorprendido.

"Lo que dijiste antes... ya se que decirte... yo también" -dijo nuevamente Kai, cerrando los ojos y esperando-.

Rei parpadeo un par de veces antes de captar el mensaje... fue entonces cuando vaga y atropelladamente un recuerdo vino a su mente.

Si, ahora ya estaba claro... ya entendía lo que Kai estaba hablando. Hacia un mes al menos el se había armado de valor para confesar aquellos sentimientos que tan celosamente guardaba dentro de si, aquellos sentimientos que solo eran provocados por Kai, aquellos sentimientos que lo hacían amarlo con una necesidad venerante. Sin embargo Hiwatari no le había respondido en cambio le había pedido tiempo para poder decirle que era lo que sentía.

Y ahora... ¿Ya era ese tiempo?

"¿Kai?" -pregunto el, mirándolo fijamente-.

"No, déjalo así" -negó suavemente con la cabeza, aun con los ojos cerrados-.

Rei tan solo suspiro, llevando sus manos hasta la de Kai que aun la tenía sobre su mejilla, y las coloco delicadamente sobre ella.

El bicolor no tardo en abrir los ojos tranquilamente, para encontrarse con la intensidad de las orbes doradas del chino, que brillaban de una forma inusual pero que lo hacia verse mas hermoso aun. No se resistió más a la necesidad que tenia de sentirlo mas cerca de si, así que con cuidado deslizo aquella mano que tenia sobre su mejilla haciendo que Rei quitase las suyas tan solo para sentir como el ruso la colocaba en su nuca, deslizándose entre su cabello aun algo húmedo y fresco. Acerco su rostro al suyo y al fin y por primera vez sus labios pudieron rozarse, con delicadeza y timidez al principio.

Lentamente coloco sus brazos a los lados del chico frente a si, y termino por abrazarlo con soltura y delicadeza por el cuello. Kai no perdió tiempo y llevo su mano libre a la espalda del chino, mientras que con la que permanecía sobre su cabeza lo atrajo mas hacia el, para hacer de aquel beso un contacto menos efímero.

No tardo en querer ir mas allá de eso, y abrió lentamente la boca incitando a que el minino (de donde saque eso? o.O) hiciese lo mismo, pasando su lengua por los labios suaves y delicados del chino. Rei no pudo soportar mas tiempo ante aquellas caricias irresistibles y abrió lentamente la boca, siendo al instante invadido por el bicolor, en un contacto que lo tomo por sorpresa pero que fue tan anhelado y deleitante.

Ambos degustaron a completo placer la boca del otro, explorando meticulosamente y saboreando hasta lo más mínimo. Sus lenguas apenas si podían estar separadas el tiempo suficiente, la sensación que tenían tan solo con rozarlas ligeramente era algo tan desconocido, pero al mismo tiempo tan maravilloso y placentero que se sorprendieron del tiempo que habían permanecido sin conocer aquellas magnificas sensaciones.

Con delicadeza fueron separándose, queriendo disfrutar de la boca y de los labios del otro hasta el final. Cuando el último roce se hizo presente, abrieron los ojos casi a tiempos iguales.

Kai sonrió con ternura al ver la expresión de ángel que expresaba el rostro del chino. Aquellas orbes doradas como el sol brillando con tanta intensidad, mirándolo con tanta devoción que jamás creyó que alguien le dedicase, y esas mejillas tan tiernamente sonrojadas hacían imposible pensar que Rei no fuese la cosa mas hermosa y perfecta que hubiese visto en toda su vida, porque lo era.

De improvisto lo jalo hacia el haciendo que cayese de la cama, pero que fuese a dar a su pecho donde lo apreso firme y delicadamente entre sus brazos, para después recargar su mentón sobre el hombro del ojidorado.

Conmovido por el gesto, Rei también le abrazo de la misma manera, ladeo su cabeza y la recargo en el hombro del ruso, suspirando.

"¿Por qué?" -no pudo evitar preguntar suavemente, pues la curiosidad como buen gato lo estaba dominando-.

"Porque no había encontrado el momento" -respondió Hiwatari, apretando mas el cuerpo que tenia en sus brazos- "La primera vez me tomaste por sorpresa... después siempre nos interrumpían, luego te dormiste en el vuelo y al ultimo nos perdimos... no considere esos momentos los adecuados"-explico, susurrando con aquellas orbes rojizas entrecerradas-.

"Y... ¿Qué te hace pensar que este lo fue?" -sonrió al preguntar aquello-.

"Hmm... estas en mis brazos ¿O no?" -dijo el, en respuesta y separándose un poco para mirarlo- "Y así será de ahora en adelante".

Y sin mas, al quedar de frente volvió a besarlo, ahora con mas intensidad que antes, con desesperación como si de ello dependiese su vida y como si su existencia solo eso necesitase (cof, cof, intento de poesía barata).

Rei correspondió en todo lo que pudo, en todo lo que su bicolor se lo permitió ya que ese beso será voraz, y apenas si le daba tiempo a el de actuar, pero poco o nada importaba... así era Kai, tan arrebatador y dominante y no le molestaba en lo mas mínimo; después de todo el único sueño y la única sublime aspiración hacia la que estaba encausada su vida acababa de hacerse realidad, como si de una ilusión se tratase pero sabia que era real, el dulce sabor de la boca de Kai se lo decía.

Quizás después de todo... este era el mejor error que Takao había cometido en su vida ¡Y le estaba agradecido!

El bicolor bajo sus manos hacia la cintura del chino y lo abrazo pegándolo mas a su cuerpo con la necesidad de sentirlo cerca lo mas posible, mientras que aun compartían aquel exquisito beso casi arrodillados en el suelo, y ya sin prestarle atención al resto del mundo.

Continuara...

CcCcCcCcCcCcCcCcCcCcCcCcCcCcCcCcCcCcCcCcCcCcC

¿De donde carajos saque esto? Ay no se x.X es la una de la mañana y mi madre no llega... y como la estoy esperando me largue a escribir lo primero que se me vino en mente XD y fue este fanfic con una trama extraña que arme mientras me tomaba un vasito de agua fría y el caso es que luego de pensarlo me dije "¿Escribir fanfic retorcido, o no escribirlo?" y pues si lo escribí, como ya sabemos no soy buena con esto pero bueno... La practica hace la perfección XD

Por favor no pregunten ni por el titulo del fanfic ni por los títulos de los capítulos... realmente no tienen nada que ver con la trama, pero bueno ¬¬Uu

Y yo ya me voy, porque a parte de esperar a mi madre ay una ratota metida en mi casa y se suponía que tenia que ir a echarle veneno desde hacia horas, a ver si no me sale por ahí y me muerde y con mi mala suerte me pega la rabia o la peste bububica... y como ya es tarde y me caigo de sueño y solo estoy escribiendo mensadas mejor me retiro x.XUu nos vemos en el siguiente capitulo, si es que alguien quiere que continué esto.

Atte. Celen Marinaiden. "En el mundo solo hay victimas y victimarios... yo pertenezco al segundo grupo..."