u.u ufff... que semana…

bueno, gracias por sus reviews, aca les dejo la continuación...

¡¡¡espero ke les guste! Y ¡sigan mandando reviews!

La extraña joven insiste...

¨por favor, Inuyasha... abrázame :con voz quebradiza, finalmente se pone a llorar: ¿qué acaso no ves que te necesito? ¡por favor! ¡no me hagas esto de nuevo::se apoya en el pecho del joven mitad demonio y sigue llorando:¨

Él, a pesar de que no sabe de qué rayos le está hablando la mujer, siente algo de lástima por la súplica.

Mueve apenas su mano derecha hacia arriba, y la apoya en la cabeza de la joven, que aún sigue llorando en su pecho...

Pero... inesperadamente, de a poco va perdiendo el control de su cuerpo... siente algo parecido a los efectos de la anestesia: no siente nada, y no puede moverse...

De repente, una luz extraña rodea a Inuyasha... la mujer se separa de él bruscamente y sonríe con malicia, mirándolo a los ojos: lo ha atrapado en un campo de energía... para eso era que se había apoyado en su pecho; necesitaba fabricar el campo a partir de los latidos de su corazón.

¨ ¡ngh::piensa, sin poder moverse por más que lo intente: ¡un campo de energía::A la mujer: q... quien... ¡¿quien carajo eres::trata de moverse una y otra vez en vano... lo único que puede hacer es gritar:¨

¨ ¿quién soy::sin dejar de sonreír: soy Ami, Inuyasha... :diciendo esto, su apariencia cambia... y resulta ser un zorro gigante, con una extraña espada que lleva escrita la palabra ¨hana¨ en Kanjis, en la parte superior del mango: ¡y tú eres un idiota que descuidó a la mujer que ama por ayudar a un extraño! ¨

El híbrido se desespera al oír esto; es lógico que se refiere a Kagome:

¨¡Kagome! ¿¡qué le has hecho!¨

El monstruo no contesta... sólo sonríe sin dejar de mirarlo...

¨¿¡qué le hiciste a Kagome? ¡vamos contesta, zorra de mierda!¨

la sonrisa de Ami desaparece al escuchar el insulto de Inuyasha...

¨¡Pero que perro insolente eres! ¡arghhh::está a punto de atacarlo, pero enseguida baja la guardia, tranquilizándose: mhj... no interesa... de todas formas, tú no puedes moverte; no tiene caso pelear con alguien que no puede moverse... jeh... lo siento, pero debo irme... hay una linda jovencita que me está esperando... gracias a tu descuido... :resaltando la última palabra, vuelve a sonreír y comienza a desaparecer lentamente:¨

¨¡No! ¡Espera::trata con todas sus fuerzas moverse, pero no lo logra, y la zorra finalmente desaparece: Infeliz... :pensando: Kagome... no puedo permitir que ese monstruo repugnante te toque... debo encontrar la forma de salir de aquí... :piensa un rato largo, hasta que le llaman la atención los latidos de su corazón; ya que son más pausados de lo normal (y late tan fuerte que puede oírlos): ¿mh? ¿qué significará esto? ¿tendrá algo que ver con..? ¨

La sombra que se había llevado a Kagome, la transportó a una pagoda, en donde misteriosamente fue amarrada con rayos de luz.

Una luz del mismo color del campo de energía que había inmovilizado a Inuyasha.

Sin poder moverse a pesar de múltiples intentos, la jovencita ni siquiera se preocupaba por ella misma... su mente estaba ocupada; temía por el joven híbrido que amaba... estaba segura de que a él también le había pasado algo... y estaba en lo cierto...

Volviendo a la mansión:

Luego de pensar qué relación podían tener su corazón con el campo de energía y finalmente descubrirlo, a Inuyasha se le ocurrió algo: Aumentar el ritmo de sus latidos con la respiración (no había otra forma, por que recuerden que no podía moverse), tal vez así podría lograr algo...

Pensando que no perdía nada intentándolo, comenzó a respirar lo más rápido que podía, sin lograr nada al principio. Pero, a pesar de que sentía que su cabeza iba a estallar por la presión, siguió insistiendo, hasta que sus pulsaciones aumentaron... sólo un poco, pero lo suficiente como para poder mover una mano...

Aunque de todas formas con eso no alcanzaba... por que al rato sus latidos volvieron a hacerse lentos... Tenía que encontrar una forma efectiva de aumentar las pulsaciones lo más rápido posible... para ir a rescatar a Kagome de aquella ¨zorra idiota¨ (según sus propias palabras)...

En la pagoda...

Ami desenvainó su espada, y la sujetó con las dos manos apuntando directo hacia el corazón de Kagome. El kanji de flor que tenía grabado (hana significa flor) en el mango, comenzó a despedir una luz extraña... era un poco más oscura que la del campo de energía, pero del mismo color...

Una vez que la luz invadió todo el recinto, el kanji fue rodeado por un cuadrado... era una puerta pequeñita, que se abrió sola, descubriendo una especie de agujero negro.

Este agujero no absorbía todo a su paso; sino que tenía una función mucho más específica: las almas de Kagome...

En un instante, el agujero negro le había quitado gran parte de sus almas, pero ella aún seguía consciente; luchando por no perder las que le quedaban... que ya eran muy pocas...

Jeh... espero ke no haya kedado muy tonta la historia... pero no se me ocurrió otra cosa para el campo de energía...

o.o igual , lo que sigue se pone bueno...

pero eso lo dirán ustedes cuando lo lean...