CAPITULO 18
Llegaban tarde. Era su primera clase especial y llegaban tarde. La profesora Guilmain se enojaría. Estaba cerrado. Llamó a la puerta, no se oía un solo ruido en la clase. La profesora abrió la puerta.
-¡Llegan tarde!- dijo con cara seria.
-Tuvimos que dejar a Hermione en la enfermería. No podrá asistir a su clase, profesora.
-¿Qué le pasó?- preguntó.
-El profesor Snape la hizo probar una poción- dijo Ron.
-¿Qué clase de poción?- preguntó interesada.
-Mortiserum- dijo Harry casi sin voz.
-Bien- continuó enarcando las cejas- Mañana estará recuperada. Pasad y sentaros.
A Harry le dio la impresión de que la profesora había puesto cara preocupada al oír el nombre de la poción, a pesar de afirmar que al día siguiente su amiga ya se encontraría recuperada. Entró en el aula y sólo entonces se dieron cuenta que estaba desierta. La única persona a parte de ellos estaba sentada en la primera banca. Cuando entraron los saludó.
-Hola, chicos. ¿Hermione está bien?
-¡¿Ginny!?- exclamó su hermano sorprendido.
-Eso parece, no te preocupes- respondió Harry aunque sin mucho convencimiento pensó Ginny.
-Bien y ahora que estamos todos. Bueno, falta la señorita Granger, mañana tendrá que ponerse al día… Durante ésta semana todas sus clase especiales serán conmigo, en éste aula. Van a aprender a aparecerse y desaparecerse- Ron y Ginny se miraron sorprendidos- Será algo muy importante para usted señorita Weasley, le quedan casi dos años para tener la edad apropiada para aprenderlo y también para obtener la licencia del Ministerio. Comprenderán que esto debe de ser un secreto entre nosotros y que no lo usaran más que en caso de emergencia extrema. ¿Está claro?
-Si profesora- contestaron Ron y Harry a la vez
-¿Ginny?
-Perdón profesora. Estaba pensando… ¿qué podemos contar como situación extrema?
-Podrán utilizar ésta capacidad si se ven envueltos en, digamos, una batalla como la del año anterior en el Ministerio, con todos aquellos mortífagos. En los duelos y guerras entre magos cada uno utiliza toda aquella capacidad que posea y pueda hacer que el contrincante salga perjudicado. Supongo que su pregunta se refería a eso ¿verdad Señorita Weasley?
-Si, gracias.
-Pues tendrá que ponerle mucho esfuerzo en conseguirlo, porque en su caso la edad le resultará muy limitante. Aparecerse, es parte de la magia antigua y es muy difícil de controlar a ciertas edades, al menos para la mayoría- dijo mientras que a Harry le pareció que lo miraba de reojo- Pero estoy segura de que lo conseguirá. Sus amigos la ayudarán estoy segura. ¡Confío en que todos lo logren en una semana!
Tras el almuerzo Harry se dirigió al despacho de la profesora Mc Gonagall. Quería comentarle lo que había pasado con Hermione.
-Pase, señor Potter, imaginaba que vendría a verme tarde o temprano.
-Entonces ya sabrá porqué quería verla- dijo muy serio
-Supongo que se trata de la señorita Granger.
-Profesora Mc Gonagall ¿cómo pueden permitir que Snape haga esas cosas?- preguntó desesperado.
-El profesor Snape, Potter- le corrigió- Y tiene todo el derecho de hacerlo, están ustedes en un nivel de EXTASIS, y ésa es su manera de hacerles aprender. Durante muchos años ha sido un buen método.
-Pero… ¿porqué mi poción? Me hizo responsable de lo que le ocurriera a Hermione- dijo apenado- Debí ser yo quién la tomara…- dijo casi sin voz al final.
-Si en el último momento el profesor Snape decidió cambiar a tu poción Potter, estoy segura que es porque pensó que estaba mejor hecha que la de la señorita Granger. Ésta poción es parte de la magia antigua, muy pocos logran su total perfección y, aunque peligrosa, es imprescindible que la aprendan Potter.
-Pero profesora. ¡Es Hermione! La mejor de la clase- le replicó.
-Sí, pero no es infalible.
-Pero yo…
-¡Ya basta!- le interrumpió- Deberías de confiar más en Snape Harry. A pesar de todo, no es la primera vez que te ayuda. Y ahora, tienes que volver a clase. La señorita Granger estará totalmente recuperada mañana. No tienes porqué preocuparte.
Harry abandonó el despacho de mal humor. Snape los trataba injustamente pero nadie parecía observarlo, al contrario, lo apoyaban. Se dirigió a su primera clase de runas. Allí se encontró con Neville, Ginny y Luna. Los cuatro esperaron ansioso la tardanza del profesor y acabaron charlando entre ellos por su ausencia. Definitivamente nadie se presentó y los cuatro se fueron extrañados al gran comedor al llegar la hora.
Tras la cena Harry visitó a Hermione en la enfermería, tenía que pasar la noche en observación, pero su amiga lo tranquilizó y le afirmó que se encontraba bien. No le dijo nada, pero realmente se había asustado mucho, por unos momentos, mientras la había sostenido en sus brazos y antes de comprobar su corazón, Harry había temido lo peor. Nunca se lo hubiera perdonado. Verla recuperada era un alivio.
Referencias: Fue Mahe quien me dio el nombre de la poción pues después de dos días no lograba hallar un nombre apropiado que me gustara. Se basó en el veritaserum evidentemente, pero tuve que contarle para que servía la poción, algo que quería reservarme como sorpresa también para ella. Pero parece que disfruta sabiendo trozos importantes de lo que ocurrirá en mi historia. La verdad yo con mi ansiedad no se como ella puede tener cierta información y no morir pensando qué ocurrirá (yo no puedo hacer eso con sus fics). Pero menos mal porque su ayuda me resulta inestimable. Comentar con ella en voz alta hace que la musa salga de muchos atolladeros y si no… la musa de Mahe hace el resto, como con el nombre de la poción. Os dije que Mahe había dicho mucho en este fic, y aún os queda por leer lo mejor que ella aportó. Pero… "para todo hay un tiempo" así que ese momento ya llegar
