Se que habeis dejado reviews pero aún no me deja leerlos ese es el motivo por el que si habeís preguntado algo no os puedo responder, supongo que preferis leer. Bueno muchas gracias a todos por dejarme vuestras opiniones, más aún a los que no suelen hacerlo ;)
CAPITULO 19
A pesar de todos los cambios y de la cantidad de tareas y trabajos que tenían que hacer cada día, la semana se pasó volando. El domingo Harry se levantó exhausto pensando en todo lo que aún le quedaba por terminar y con la presión de que al día siguiente él y Hermione tenían su primera clase espacial como profesores. Harry se sentía temeroso de no saber manejarlos aunque Hermione lo animaba a cada momento y se veía muy orgullosa de poder participar en ello.
La primera clase fue… "divertida" según dijeron los chicos, pero realmente resultó un desastre. Hermione y él se habían batido en duelo para mostrarles a los alumnos como debía de hacerse. Pero… Eso solo fue una pantomima de duelo. Si pensaban que representar un duelo entre ellos sería fácil, se equivocaron totalmente. Debían de haberlo ensayado, pero no lo hicieron. Resultado, llegado el momento de enfrentarse, bajo la mirada expectante de todos aquellos chiquillos, Harry se sentía más como un mono de feria que como un profesor. Y por otro lado allí estaba ella, tan seria, dispuesta a batirse con él como si de ello dependiese su vida. Cuando se inclinó para hacerle la reverencia no pudo evitar sonreírle. "¿Cómo iba a batirse en duelo con su amiga?"
Por un momento pensó que hechizo podía lanzar para mostrárselo a los chicos "Expeliarmus", "Tarantallegra"… "La varita de Hermione es temible"-pensó mientras miraba su cara de concentración- "Y ella también está evaluando que hechizo utilizar"-siguió pensando- "Tampoco quiero lastimarla…" Así que se decidió y dijo:
-¡PROTEGO!
Pero Hermione había decidido hacer lo mismo que él y, evidentemente el efecto de ambos hechizos protectores no se notó; dos rayos de luz chocaron en mitad de la sala y fue como si dos viejos amigos se saludasen, saltaron algunas chispas de colores y se acabó. Le dio la risa. Debían de haberlo preparado.
Harry paró un momento para explicarles a los chicos lo que había pasado y volvieron a intentarlo. Pero ésta vez fue peor, no logró concentrarse y, tras volver a saludarse, apuntó su varita hacia ella con su varita que temblaba en su mano a causa de la risa contenida. Simplemente no podía hacerlo. Hermione se enfadó y le espetó:
-¡Señor Potter! El duelo ha comenzado. Compórtese.
Pero fue la gota que colmó el vaso. Lo había llamado "Señor Potter" y realmente se veía muy molesta por su actitud. Pero no pudo evitarlo más tiempo y rompió a reír bajando su varita. Los chicos reían también divertidos por la situación y Harry observó que Hermione enrojecía de furia, intentó parar de reír pero le fue imposible. Lo siguiente que supo es que salió disparado hacia atrás, impulsado por la potencia del rayo plateado de Hermione y que la risa que ahora si que no podía parar, era dolorosa. Respiraba con dificultad y no podía moverse. "Rictusempra" ... ni siquiera lo había escuchado.
Hermione se hizo cargo de la situación, finalizó el hechizo y dijo unas palabras a los chicos; les aseguró que en la próxima clase comenzarían a practicar duelos entre ellos y dio por finalizada la clase. Mientras los chicos abandonaban el aula animados por esa clase, Hermione lo miraba enfurecida. Supuso que le echaría un gran rapapolvos por su comportamiento, pero fue peor. Se limitó a pasar por su lado sin mirarlo y no volvió a hablarle hasta dos días después. Ni siquiera le permitió disculparse en ese tiempo. Tenían que haber practicado.
Lo dicho, desastroso. Él, el "héroe" de los chicos como lo había llamado Dumbledore, vencido como un principiante con uno de los hechizos más tontos y fáciles de parar a su edad. Pero esperaba no tener que recibir ninguno más de una Hermione tan enfada, no sabía si lograría pararlo ni estando totalmente concentrado. Hermione cada día era más poderosa.
El único punto a favor… que los chicos se desinhibieron y al final de la clase ya parecían más confiados con ellos. No querían que los vieran como a profesores propiamente dichos; tenían que enseñarles, sí, pero pretendían ser algo más para ellos. Su falta de profesionalidad, al menos logró romper esa barrera alumno-profesor. Le costó reconciliarse con Hermione, pero se ganó la gracia de casi todos ellos.
Pero definitivamente, lo que más le había sorprendido de aquellos primeros días, fue la clase de runas. Tanto él como sus compañeros se quedaron admirados al ver a la que sería su profesora durante los dos primeros trimestres, ya que no era otra que Hermione. Neville, Luna y Ginny pensaron que sería divertido pero Harry supuso que sería muy dura con ellos, más después de su experiencia con las clases de duelo, y no se equivocó. Hermione les dijo que tenían seis meses para aprender todo lo que ella sabía y que tendrían que esforzarse mucho para en el tercer trimestre mantener el ritmo del profesor.
Pero todo lo que sabía Hermione sobre runas, era demasiado para ellos.
-¿Y yo porqué siempre estoy apartado?- se quejó Ron esa noche en la sala común.
-Tú tienes otras clases especiales, Ron. Y no puedes quejarte, ya tuviste dos veces a Lupín Nosotros ni siquiera pudimos saludarlo.
-Si eso está muy bien pero a pesar de estar aprendiendo muchas cosas nuevas no sé porqué no puedo seguir vuestro ritmo. Incluso Ginny y Neville tienen algunas clases de más con vosotros. NO ES L"GICO- chilló.
Harry y Hermione se miraron sin saber que decir, pero Harry pensó que, al menos lo de Neville era más lógico. Él podía haber sido el elegido en su lugar, tal vez Dumbledore también lo preparara para algo.