CAPITULO CINCO
EL DESEO SE CUMPLE
Esa noche, tras curar su heridas, y bañarse para retirarse el desagradable olor de la sangre, todos van a la cama con la sensación de que pueden estar en paz. Algunos cambios se han operado… por ejemplo, Sango ahora no duerme abrazada a Miroku, sino que esta pegada como lapa a su hermano menor… mientras que el monje acepta resignado, no queriendo darle ningún disgusto a la madre de su hijo…
Kouga parece ansioso por que llegue la mañana para ir corriendo al lado de su lobita, y acompañarla en esa etapa tan difícil… alguien tiene que cazar y cuidarla, y nadie mejor que él!
Inuyasha se tiende junto a Kikyo, deseando en el alma poder acercarse a Ahome y abrazarla, y decirle lo que siente por ella… que ese infinito sentimiento se ha arraigado en su ser de tal modo que no sabe como vá a sobrevivir… sin hijos, sin destino.
Sesshoumaru y Ahome, libres de espíritu por primera vez, se abrazan y duermen juntos, completamente seguros de que el otro estará ahí al amanecer… en ellos ha crecido algo enorme… la amistad, la lealtad, la confianza es absoluta… ya no importa si alguien los observa, o si los juzgan.
Rin y Shippo duermen como lo que son, como pequeñuelos libres de toda maldad, felices y seguros, calentados por Kirara. Jaken ya se ha resignado a los cambios de su amo.
A la mañana siguiente, la sorpresa hace gritar a algunos…
Kikyo es humana de nuevo! Inuyasha despierta alertado por la tibieza del cuerpo que reposa junto a él… el aliento cálido de ella le hace reaccionar…
Kikyo vive!
-Ahome! ¿Que hiciste? –Inuyasha esta tan impresionado que su voz es apenas un susurro ahogado, Kikyo llora abiertamente al descubrirse humana de nuevo…
-Pedí que fueran felices juntos… ahora podrán hacer una familia normal… podrás tener hijos Inuyasha…
-¿Inu-Inu-yasha? –Kikyo y compañía le observan anonadados
-¿Qué…?
Inuyasha ha cambiado… sus orejas han desaparecido, para darle paso a unas mas humanas, casi idénticas a las de su medio hermano… unas delicadas y zizagueantes marcas púrpuras cruzan sus mejillas… es un youkai completo… y lleno de bondad…
Miroku observa interrogante e la señorita Ahome…
-¿Qué fue lo que deseó señorita Ahome?
-No te preocupes Miroku, ya lo irán notando…
Flashback:
-Entonces…
Ahome cierra los ojos, pidiendo su deseo con todo su corazón… todo el fervor que en su alma puede caber, que es bastante…
"Yo quiero…. Yo quiero que mis amigos sean felices… quiero que Kikyo sea humana y que su corazón se purifique… quiero que Inuyasha cumpla su anhelado sueño, para que proteja a los humanos de las criaturas malignas que queden… Quiero que sean felices… que alcancen sus mas puros sueños, que su estirpe no desaparezca de la faz de la tierra… deseo… deseo… que esta batalla permanezca en su memoria en tributo por las vidas perdidas, para que todos ellos conserven la lealtad y la confianza que alcanzaron durante este tiempo… que Los hermanos se acepten… se quieran… deseo paz en mi corazón…. Y deseo que desaparezcas del mundo, para que jamás vuelva a haber una batalla como ésta hasta los confines del tiempo.."
Después, la perla se deshace lentamente, en un delicado polvo nacarado que se esparce en los alrededores…
La perla ha desaparecido…
La amenaza ha muerto…
La luz que la rodea se extingue lentamente, pero antes de que desaparezca por completo, la grave y poderosa voz de Inu-no-Taisho reverbera en el silencio:
-Bien hecho, has elegido con sabiduría…
Ahome y compañía se encaminan por fin hacia la aldea de la anciana Kaede, que día y noche se ha mantenido rezando para que volvieran con bien. A medio camino, Kouga y los lobos se despiden para partir hacia las montañas… los abrazos y las palabras de aprecio se vuelven sumamente afectuosos… por fin, el grupo que tan fuertemente se había mantenido unido, se divide, al menos físicamente…
Cuando llegan, una gran fiesta se organiza para recibirles… Kaede les vuelve a atender sus heridas, que casi han desaparecido gracias a los poderes de Ahome.
Nuevamente, Sango se acerca a su amiga, para sostener una conversación peculiar…
-Ahome?
-¿Qué pasa, Sango?
-Quiero pedirte algo… un favor muy especial…
-Claro! Lo que quieras!
-Bueno, es que… quería pedirte que…
-Anda dímelo con confianza!
-Bueno, es que quería que te quedaras para cuando naciera mi bebé – la cara de Ahome es todo un poema – por que me sentiría mas segura si tú estuvieras aquí para recibirle…
-Sango…
-Por favor! Mira, yo sé que deseas partir, pero en verdad…
-La anciana Kaede y Kikyo están aquí… ellas pueden…
-NOOOO! Tú eres mi amiga! Confío en ti! Por favor!
-Esta bien, Sango, volveré a mi época, pero regresaré a tiempo para estar a tu lado cuando nazca el bebé… ¿te parece bien?
-Si! Muchas gracias!
Inuyasha y Kikyo sienten renacer la relación que creían marchita… ahora son una pareja de verdad, y se casan en la aldea, aprovechando los festejos. Rin y Kohaku inician una amistad muy profunda… o mas bien la retoman… aquella que inició cuando fue secuestrada y dejada bajo el cuidado del muchachito… que no fue capaz de matarla… todo indicaba que ellos serían pareja algún día…
Shippo se quedó con Kaede, que decidió cuidarle como a su hijo, en vista de que ella no los tenía.
Sesshoumaru pasó todo el tiempo que pudo pegado a Ahome… sabía que se iría, y también había tomado ya una decisión.
Ha llegado el momento de la despedida, es de día, y Kouga y su gente, Incluyendo a una floreciente Ayame, han llegado a la aldea con el fin de despedirse de Ahome… los hombres lobo se arrodillan frente a ella, quien se ruboriza profusamente ante esa muestra de respeto… los aldeanos imitan el ejemplo de los lobos… no todos los días tienen a la sacerdotisa mas grande del mundo entre ellos…Kikyo y Kaede se sientan y hacen una profunda reverencia en señal de respeto…
Inuyasha, y Sesshoumaru, los mas poderosos Youkais de la tierra, se le acercan, y le hacen una reverencia de respeto…
Inuyasha abraza a Ahome con gran cariño
-Ahome, muchas gracias por todo… gracias por esta oportunidad que me has dado… la aprovecharé al máximo…
Sesshoumaru, una vez que retira el efusivo abrazo de su hermano… la jala hacia sí, y le dá un profundo y amoroso beso… que se prolonga varios minutos ante los ojos divertidos de toda la audiencia…
-Nos volveremos a encontrar…
-Sí! Lo se!
- No lo olvides nunca… puedes contar conmigo… solo llámame
-Sesshoumaru, siempre serás el amor de mi vida…
-Yo… - El Taiyoukai la abraza de nuevo, deseando poder absorberla en la piel, para grabarse a fuego el aroma de ella, su calor…
Es hora
Ahome se arroja al pozo…
Cuando alza la vista, ser encuentra en su propia época, así que sale corriendo, feliz de la vida, para buscar a su madre y abrazar a toda su familia… hace tanto que no los ve!
Los encuentra a todos en casa, y les cuenta la historia de lo que ha pasado… entonces, una gran alegría se apodera de los corazones, y hacen una deliciosa cena para celebrar…
Ahome podrá volver a la escuela, al fin sana… ya verían que mentira inventar para encubrirse… lo importante es que estaba de vuelta, y su misión estaba terminada…
Seis meses después, Inuyasha va por Ahome a su tiempo… la sorpresa de ésta es superada por la noticia de que Sango ha entrado en trabajo de parto, y tiene que ir a ayudarla…
Después de prepararse con medicamentos, vendas, y todo lo necesario (además de un curso súper-rápido sobre el tema) saltan al pozo, donde la esperan, ansiosos, todo un ejército de personas… sus amigos, todos ellos, están allí…
Ahome entra a la cabaña donde Sango esta dando a luz… los gritos ahogados de su amiga la estremecen, pero cuando Sango la mira, y sonríe contotal confianza y amor, se olvida de todo, y toma su lugar frente a ella. Kikyo y Kaede la asisten…Ayame también esta ahí, presta para correr por mas agua, o lo que se necesite… Kikyo esta embarazada también, tiene pocos meses, pero ella presiente la vida nueva que se está formando… así que le sonríe con ternura…
-Se adelantó un poco, Ahome! – le comenta Kaede
-Sí, puedo verlo, pero estarán bien!
-Sujétate bien de mí, querida –Kikyo ahora es un mar de dulzura y amabilidad, se ha ganado el cariño de todos… hasta de Sesshoumaru, su respetado cuñado…
Fuera de la cabaña…
Alrededor de una fogata improvisada, un círculo se reúne para apoyar al monje que se encuentra a punto de colapsarse, pareciera que el que esta dando a luz es él… Kaede les ha mandado prepara un té para los nervios a todos ellos… a todos…
- Calma Miroku! Todo va a salir muy bien! Yo sé lo que te digo –Kouga hablaba mientras acunaba en brazos a dos bebés lobo, macho y hembra, mientras que Hinta sostenía y jugueteaba con un tercero (fueron trillizos, dos machos, y una hembra)
-Vamos Miroku! Tranquilízate, por que si no le vas a dar mucha lata a Ahome!- Esta vez Inuyasha trataba de librar la tensión acumulada, mientras rodea con un fuerte brazo al monje tembloroso - ¿Verdad hermano? – y eleva su taza de té como si deseara brindar por algo.
- Hm – Sesshoumaru estaba bastante entretenido con escuchar los forcejeos de la cabaña… el estado de Miroku se le hacía de lo más natural, así que no intentaba nada.
- Ya por favor! Si no te calmas, hermano, entonces me voy a enfermar de los nervios… es mi hermana la que se encuentra allí dentro! –Kohaku suda copiosamente, intentando aparentar valor, el cual no posee - todo tiene que salir bien, si la señorita Ahome está con ella! - dá un trago muy grueso a su té calmante…
- Padre –Rin se había acercado, junto con Shippo, en sus ojitos se trasluce una duda – quiero preguntarte algo…
-¿Qué cosa? – la seriedad de la niña atrae toda la atención, hasta Miroku se olvida de todo por oirla… Seshoumaru se lleva una taza de té a la boca
-Shippo y yo queremos saber algo… importante
-Dime… -El rostro del Gran Sesshoumaro a adoptado esa actitud altiva y lejana que le domina cada vez que un asunto de vida o muerte está por tratarse-
-¿Cómo se hacen los niños?... ¿Por donde salen? … pro que yo ví la panza de Sango-chan, pero no veo por donde pueda salir… y en que participan los papás para hacer a los bebés?... por que no se me ocurre que utilidad pueda tener el monje Miroku… o cualquier papá… solo que sea por que todos los niños necesitan un papá…
Apenas pronunciada la primera pregunta, Kohaku se atragantó… Miroku se petrificó…Inuyasha soltó su taza de te, poniendo cara de "es tu hija, es tu problema"… Kouga comenzó a carcajearse mientras escupía té por doquier… Hinta y Hakkaku se pusieron completamente rojos… Jaken se desmayó, como siempre… y Sesshoumaru, por primera vez en toda su grandiosa y perfectamente controlada vida, escupió su té, a punto de ahogarse con él, y miró con ojos desorbitados al par de niños que les habían robado la paz….
-¡¡¡¿¿¿Ves, te lo dije Rin! Cada vez que les preguntas eso a los adultos… PONEN CARA DE TONTOS! –Shippo se siente orgulloso de sí mismo
-AJAJAJAJAJAJAJJAJJAAJAJAJAJAJAJAJJAJAJAJAJAJAJA! AJAJAJAJJAJAJAJAJAJAJAJAJJAJAJ!
Una vez cumplido su tenebroso cometido, que no era más que torturarles, se alejaron riéndose sin parar, hasta llegar cerca de la cabaña…
En ese momento, sale Ahome…
-Monje Miroku?
-¿Qué? –Miroku se levanta como impulsado por resortes, y de un salto llega a donde Ahome - ¿Qué pasó?
-Pasa… tu esposa y tu hija te esperan…
-¿¿una niña?... ¡¡¡¡ UNA NIÑAAAA, ¡¡¡ TENGO UNA NIÑAAAAAA!
-Sí, Miroku, ya te oyeron hasta en mí época…
Miroku entró a saludar a su agotada pero bella mujer, y a conocer a su pequeñita, a la cual llamarían… Kagome…
Al día siguiente, después de despedirse nuevamente, Ahome parte a su época, esta vez, para no regresar más…
