Shadir, gracias por la crítica constructiva, jajajaja, realmente son pifias por escribir rápido, ¿por qué no tendré un poquito más de paciencia?. Soy un manojo de nervios. Pero es que tengo tan poco tiempo para escribir y tantas ganas de ir sacando a la luz lo que mi mente ha creado, que muhas veces no puedo permitirme el lujo de ir repasando linea a linea lo que escribo, por dar prioridad a la actualización. Pero espero en este capítulo no meter esos patones. La culpa la tiene el teléfono. De pronto estoy escribiendo, me llaman, me interrumpen y yo voy y meto unas pifias terribles, como la frase esa del... ¿como era? 'energía cortanto que cortó'. Realmente quería haber escrito 'energía cortante que decapitó'. Pero tu opción me gustó más, cercenó, suena bien ¿eh?. La muletilla 'entonces' se me ha escapado demasiadas veces parece, trataré de corregirlo. De nuevo gracias guapetona.
Saturno, gracias por decirme que no soy previsible, es lo que más me gusta: 'sorprenderos'. Por cierto, en la línea del tiempo normal han pasado 9 días tan sólo. Vegeta (padre) partió hacía 3 días atrás, lo cual indica que llegará al Planeta Tierra del año 757 del Dragón, dentro de unas cuantas horas más. Me alegra que te gustase la redacción de las peleas, yo en cambio pienso que podrían quedarme mejor aún. Hoy pensaba en la pelea de Bra y podría haberme recreado más en las expresiones de las caras, los pensamientos... aunque si voy tan detenidamente el fic será interminable, claro. Pero aquí veo que no se aburre la peña, porque las estadísticas me dice que tengo un grupo de lectoras fieles. La pena es que sólo unas poquitas me dejais reviews. A ver si se animan los demás y me dicen algo, porque me hace mucha ilusión. Comencé a escribir hace apenas 2 meses atrás, esto de los fanfic son cosa nueva para mi y me agrada mucho dedicar parte de mi tiempo a esta labor de escribir historias, pero sobre todo me agrada porque veo que encuentro gente que la aprecia con cariño y a la que le gusta leerlas tanto como a mi escribirlas. Besitos.
Shadowhao, gracias por esos triples wao, jeje, eres un sol, realmente confieso que me estoy documentando bastante acerca de la psicología de los adictos, de los síntomas, la forma de pensar que llegan a tener. La droga que elegí en principio, quise que fuera una de las peores, y buscando en la red di con la tal 'polvo de angel'. Sin embargo, rebuscando acerca del síndrome de abstinencia, di con una web que hablaba de las 'anfetaminas' . Es increible lo que pueden hacer esas porquerías. El extasis, las pastillitas estas de adelgazar... su dependencia llega a ser terrible, y los efectos son terribles a nivel neurológico. Realmente falta información de todo esto. Se dice que las drogas son malas, pero no se cuenta todo lo que llegan a hacer internamente, es terrible. Respecto al tema de la violación sigo profundizando un poco más en ese sentido. Te confieso que al principio del fic me surgió un gran miedo, y era no saber manejar en absoluto cuestiones tan difíciles. Joer, si yo ni siquiera me he emborrachado en mi vida, ¿cómo podría describir los sentimientos de alguien bajo los efectos de las drogas?. ¿Cómo podría describir los sentimientos y secuelas de alguien que ha sido torturada y violada?. Por suerte, la red es un centro interesante en el que se puede leer testimonios de víctimas, opiniones de expertos, etc. Fue difícil, pero quería crear un fic así, era un reto, y bueno, sigue siendo un reto, porque las escenas de batalla siempre me han costado mucho hacerlas y ya ves que ahora estoy inmersa en ellas. Bueno, no me enrollo más. Es bonito escribir, de verdad. Gracias por seguir mi historia, los 29 capítulos SEGUIDOS. WAO. Ahora yo te dedico un triple WAAOOOO.
Darth Maferius, GRACIAS, no sabes la ilusión que me hace recibir vuestros mensajes. Y más uno tan halagador, para alguien como yo, que sólo lleva escribiendo fics 2 meses. Estoy encantada de ver la aceptación que este fic está teniendo. Con respecto a los personajes, te confieso que antes de comenzarlo, yo tenía en mi mente muy cláramente la personalidad de cada uno de ellos. En cierto modo, me pongo en el pellejo de cada personaje imaginando, segun su caracter como reaccionarían ante distintas situaciones. Respecto a la actualización, ya ves que cada uno o dos días voy actualizando. Por cierto, he leido 'Lazos que unen', Escribes muy bien. Pero no te perdono que le pusieras otra hija a Vegeta, grrrrrrrrrrr grrrr grrrrrr jajaja ya, es broma, está muy interesante, te dejo Review en tu fic.
Capítulo 30: No me dí cuenta.
- Vegeta... - Susurró Bulma tristemente abriendo los ojos en medio de las montañas y observando como su guerrero se marchaba y era ya un pequeño punto luminoso en el cielo.
De pronto su ceño triste se iluminó, sus ojos brillaron, secó sus lágrimas apresuradamente, con una sonrisa hizo estallar una cápsula. Se trataba del aerocoche. Seguidamente hizo estallar otra cápsula que desveló un objeto con forma de baúl. Comenzó a rebuscar malhumoradamente... - Donde estará... vamoosss... - En el baúl parecía haber toda clase de chismes diversos. - Por fin, jajajaja, que inteligente soy. - Cerró la cápsula del baúl y subió al aerocoche con mirada decidida. - Es por allí. - Su mirada se fijó en el horizonte al arrancar el coche. Unos extraños símbolos aparecieron ante uno de sus ojos en color rojizo. El artilugio que había localizado era uno de los scuters que le dió Bra 'por si algún día lo necesitase'. Durante la estancia en la sala del Tiempo, Bulma lo había analizado detenidamente y después de entender su funcionamiento lo había guardado en el baúl de los chismes raros. Pero sí, ahora lo necesitaría... De nuevo Bra tenía toda la razón. - Vegeta, no te librarás de mi tan fácilmente. - Sonrió maliciosamente aumentando la velocidad en busca del ki del padre de su bebé.
Bulma sonrió feliz pensando en Bra, realmente haberle contado su futuro era algo tranquilizador. Además, tenía un bonito nombre. - El día que tenga una hija la llamaré Bra, ¿Pan Briefs? Naa, suena fatal, me da igual lo que piense Vegeta al respecto... cuando nazca nuestra hija la lla... - De pronto frenó en seco. - ¡No es posible!. - OoO. Su rostro se hizo azulado de pronto. - ¿En qué he estado pensando todo este tiempo?. Bra... ella es idéntica a mí, y bien mirada, tiene los ademanes de Vegeta, ella... ella tiene que ser nuestra hija futura. OoO DIOS MIO, ¿pero por qué no habrá querido decírmelo?. ¿Tan mala madre soy en el futuro que ni mi hija confía en mi?. Ella dijo que era amiga de mi hija, y yo le creí, supongo que en realidad la historia era tan increible... yo no asimilaba que una hija mía pudiera tener colita de mono... ni tampoco asimilaba que me enamoraría de Vegeta y tendría un hijo con él. Luego el embarazo me absorvía todos los pensamientos, y después el parto, luego... con el bebé a cuestas durante este més... no había tenido un sólo segundo para ponerme a pensar siquiera en estas cosas. Dios mío, soy una mala madre... ni siquiera la he reconocido. Es normal que nadie la reconociera, porque nadie sabía que ella venía del futuro. ¿Quién iba a creer algo así de todos modos?. Pero yo no tengo excusas... sabiendo que era del futuro, siendo tan inteligente como soy y viendo que era tan parecida a mi, por mucho que tuviera cola de mono, tenía que ser hija mía, SOY UNA IDIOTAAA. - Bulma golpeó el volante del coche con rabia. - Y sólo tiene 16 años. Pobrecita, mi niña... - Sus ojos se llenaron de lágrimas. - Ha pasado un año infernal entrenando rodeada de brutos y ahora... - Un sobresalto la sobrecogió pensando que algo malo le sucediera en la batalla. - Tengo que encontrar a Vegeta, tengo que decírselo, tiene que saber que es nuestra hija, ¡tiene que ayudarla!. - Bulma volvió a conducir aceleradamente aumentando la velocidad de su aerocoche alocadamente, siguiendo el ki de alguien que seguramente iba a sufrir un infarto de miocardio al saber que no sólo tenía un hijo, sino dos. O.o' y ¡con la mujer escandalosa! OoO.
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Mientras tanto...
- Arreglemos esto tú y yo - dijo Goku conciliadoramente ofreciendose a continuar la batalla.
- Bien, morirás, y después morirá ese engendro de Saiyajin híbrido - Gritó Ginew.
Goku avanzó decididamente hacia el Capitán de las Fuerzas especiales de Freezer. A diferencia de Reecom, el aspecto de este distaba mucho de parecer humano. Su piel era de color morada. Su estatura era enorme de unos 2 metros. Su cuerpo extremadamente musculoso, era proporcionado. En su cabeza, se destacaban dos cuernos negros que nacían de los lados. Carecía de pelo, y en su lugar, una piel arrugada y llena de venas conformaba su coronilla. Ambos se disponían a lidiar su combate.
Durante un minuto se observaron mutuamente esperando el primer movimiento del contrincante. Ninguno de los dos parecía moverse, pero en sus miradas fijas y en sus rostros se observaba una media sonrisa de satisfacción.
Por fin Ginew comenzó el ataque. La lucha cuerpo a cuerpo comenzó siendo favorable para el guerrero de piel morada, pero después de encajarle unos cuantos golpes a Goku, la cosa comenzó a ir tornando. Ahora estaba igualados ofreciendo un magnífico espectáculo de destreza y fuerza.
En la nave de Freezer...
- ¿Quién es ese luchador?. ¿Es un habitante de este planeta?. Su poder es superior al de los otros guerreros que le acompañan y su rostro me resulta familiar... se que lo he visto en otra ocasión... - los ojos de Freezer se estrecharon tratando de recordar - y su poder de pela es grande. Supera en 5000 unidades a Ginew. Mmmm. ¿Dónde te he visto antes?... - El tirano no dejaba de pensar en la cara tan familiar para él que tenía Goku. No en vano, él era el vivo retrato de su padre, Bardok. Pero Freezer aún no se había percatado de tal cosa.
A unos metros de la batalla de Goku y Ginew...
Bra se recuperó un poco de los golpes propiciados, rechazó tomar una habichuela senzu temiendo que pudiera ser valiosa a lo largo de la batalla. Sólo tenían 3 semillas mágicas y no podían ser desperdiciadas. Pero así no podía continuar, Reecom la había dejado muy malherida, de modo que tenía que llegar hasta la Corbeta y utilizar la cámara de regeneración. El problema era que no podía casi moverse.
- ¿Por qué no quieres tomar una semilla mágica? - Se quejó Raditz con irritación observando los esfuerzos fallidos de Bra por levantarse.
- Yo se por qué hago las cosas. Además hay una cámara de regeneración ¿no, pues voy a ir a la Corbeta y ... ahh - se puso de pié pero se volvió a caer, sólo que esta vez la tomó entre sus brazos Raditz.
- ¿Qué haces? - dijo entre dientes ella.
- Te llevaré a la cámara de regeneración, tu sóla no puedes hacerla funcionar. - razonó seriamente el guerrero.
- Esta bien. - suspiró ella dejando de protestar.
Durante el camino a la Corbeta Bra se aferró al pecho de Raditz. Se sentía tan miserable, tan deprimida por no haber podido vencer siquiera a ese mastodonte descerebrado. Había quedado en ridículo siendo salvada por los más débiles del grupo. Le salvaron la vida. Ni siquiera era mejor guerrera que ellos. Sus avances fueron pobrísimos durante este año... - "No, no debí haber sobrevivido aquel día, debería haber muerto, hubiera sido mejor para todos. O mejor aún, no debería haber nacido siquiera." - Ah, cómo deseaba beber un sorbo de su 'medicina' para calmar el sufrimiento. Pero delante de Raditz no haría tal cosa, no, ella no quedaría más indigna de lo que ya era. Bra se aferró más fuerte al guerrero como si quisiera con ese abrazo robarle un poco de esa fuerza que él siempre parecía tener detrás de ese muro infranqueable de tranquilidad, seguridad en sí mismo, sobriedad... Raditz, instintivamente, al notar su aferramiento, la abrazó también más firmemente rezando interiormente por alargar ese momento en el que ella quedaba rendida en sus brazos. Estaba obsesionado, la amaba de un modo tan intenso que llegaba a ser enfermizo, se acostaba pensando en sus intensos ojos azules, sus cabellos ondeando en la lucha, su cuerpo de figura estilizada y ágil... se levantaba pensando en ella, la había idealizado, había creado en su mente una Bra curada de las secuelas de la tortura, una Bra que un día le amaría y se entregaría a él sin reservas, soñaba con recorrer cada centímetro de su piel, muchas noches incluso había pensado aparecer en su habitación y seducirla despiadadamente, aparearla y realizar el ritual con ella... Así sería suya para siempre... pero sus ideas locas fueron desterradas de su mente enseguida, y relegadas a imaginaciones constantes. Sabía que actuando fríamente sólo ganaría su desprecio, y el no quería eso, quería que ella sintiera hacia él algo tan fuerte que la aturdiera el alma. Que pronunciara su nombre, que le admirase y lo desease tanto que sintiera quemarsele los labios. Tanto como él sentía cada noche quemárse los suyos recordando aquella vez que se besaron. Después de la batalla sería suya, no cedería hasta lograr su propósito. Tenía que ser su compañera. Toda su vida había deseado demostrar que era algo más que un guerrero de tercera clase, y allí estaba él, había logrado ser el Super saiyajin legendario. Ahora era el más fuerte, mucho más que el mismísimo Príncipe de los Saiyajins. Pero le faltaba algo más para ser completa su victoria sobre tantos años de humillaciones y desprecios. Le faltaba una compañera poderosa, tener como compañera a la guerrera más fuerte, la mejor hembra, la única hembra saiyajin sobre la faz del Universo. Con ella su descendencia sería la más fuerte. Bra, ella era el culmen de sus empeños, de sus desvelos y ansias, la protegería por encima de todo, era suya, no importa si ella no lo sabía aún, tampoco importa si ella no lo desease aún, ella lo desearía, ella lo amaría, ella sería su compañera, la madre de sus descendientes. De sus labios brotaron una nueva cita del 'Libro sagrado' de los Saiyajins.
-" Hijos de Vegetasei,
dondequiera que esteis,
¡Sentid su furia estallando!.
Su cuerpo se transformó en llamas,
de energía rodeado.
Qué terribles son sus ojos,
azules como dos rayos.
El más fuerte jamás nacido,
será el Super Saiyajin legendario.
Hijos de Vegetasei,
¡Sentid su grito desgarrado!.
Ya viene...
tormenta asolando.
Se acerca...
rugidos a su paso.
Está aquí...
piedras que tiemblan,
Ocaso.
Horror desatado.
Nadie puede hacerle frente,
todos saben que ha llegado...
El asesino de pueblos,
será por fin derrotado.
Hijos de Vegetasei,
dondequiera que esteis,
¡Sentid su fuerza!
¿Llegó la hora del tirano!. " -
Mientras tanto, Goku peleaba contra Ginew...
- No lo haces nada mal - Reconoció Ginew parando un poco a ver si lograba recobrar el aliento.
- Tu tampoco lo haces mal, no me gustaría tener que matarte, eres un buen guerrero. - La mirada de Goku era decidida, pero sus facciones se relajaron un tanto. Antes que atreverse a matarle, tenía que intentar hacer que se retractase en su error. Darle la oportunidad de cambiar.
- Gracias, pero tus halagos no harán que tenga piedad contigo. - Rió sonoramente.
- ¿Por qué habeis venido? - Siguió insistiendo.
- Hemos venido a destruir este insignificante planeta y a todos sus habitantes, pero antes tenemos permiso para entretenernos un poco. - Volvió a reir.
Goku frunció el ceño. Él no podía permitir tal cosa. - Óyeme, si te retractas ahora mismo de esas pretensiones y os marchais del planeta no sufrireis ninguna baja más, pero si te quedas, aunque no me agrade la idea, no tendré más remedio que matarte. - La advertencia fue firmemente expresada. La respuesta de Ginew marcaría su destino.
- JAJAJAJAJA - Esa fue su respuesta. - Qué manera más estúpida de pedir clemencia... retiro lo que dije antes, no eres más que jajajaja un gusano patético. Solicitaré a Lord Freezer que me permita aniquilar personalmente varias ciudades antes de que él mismo destruya el planeta por completo. JAJAJAJA -
Goku volvió a fruncir el ceño, esta vez no había vuelta atrás, destruiría a ese malvado.
En la Corbeta...
- ¿Qué haces? - Bra casi estaba desmayada por la paliza recibida anteriormente y por los efectos que sentía ante la necesidad de un poco de su dosis habitual.
- Te estoy quitando el traje para meterte dentro de la cámara de regeneración. - Contestó Raditz con su tono de voz inexpresivo.
- No te atrevas. - Gruñó ella inutilmente.
- Ya te he visto desnuda antes y no creo que puedas desvestirte sola. - Un nuevo razonamiento aplastantemente cierto.
- Hmmpp - Única respuesta posible.
- Bra... - Susurró en su oido. - Deja que te ayude, yo puedo hacer que lo que te atormenta el alma desaparezca por completo. - Sonaba tan embriagador...
- Nadie puede hacer tal cosa, estoy condenada, lo mejor sería morir luchando en esta batalla. - Aquellas palabras sonaban desgarradoras.
- Lo mejor sería destruir a nuestro enemigo, yo eliminaré tus tormentos interiores. - Afirmó mientras seguía desnudándola con duidado.
- Raditz, debes tener cuidado, no hables nada con Freezer, ¿escuchas?. No hables nada, sólo lucha contra él y mátale, pero no dejes que te enrede con sus palabras. Prométeme que acabarás con él. - La voz de Bra desvelaba tanta angustia.
- Te lo prometo, lo haré por tí y por nuestro pueblo, pero yo... también quiero pedirte algo. - Raditz la tomó entre sus brazos. Estaba complétamente desnuda. Con una de sus enormes manos sujetaba la cabeza de ella obligándola a mirarle directamente a esos ojos azabaches tan expresivos, y que ahora delataban desesperación.
- ¿Qué quieres de mi?. - Bra cerró los ojos incapaz de seguir sosteniéndole la mirada.
- Quiero... - Raditz apartó con una mano parte de su traje de combate a la altura del cuello y estrechó a Bra entre sus brazos de modo que sus labios quedasen a la altura de su cuello. - Muérdeme. - Bra dejó escapar un pequeño gemido con esta afirmación. - Yo no voy a morderte si tu no quieres, Bra, el día que eso suceda serás tú quien me lo pida como yo te lo pido hoy. Vamos, hazlo. - Bra no entendía por qué Raditz quería que ella hiciera algo tan salvaje.
- ¿Por qué me pides esto?. ¿Es un ritual en el combate? - Raditz la separó un poco. ¿De verdad no sabía que ese era el ritual de apareamiento?. ¿De verdad ella era tan inocente?. Sabía tantas cosas de Vegetasei y los saiyajins y no conocía algo tan básico...
- Es un ritual, si... me dará mas fuerza en la batalla. - El no sabía por qué mintió de esa manera, pero temía su rechazo, el quería pertenecerle, aunque ella aún no le perteneciera, era su adelanto de lo que vendría después. Se contendría, no la mordería, pero hoy comenzaría la primera fase de la unión que se consumaría después de la batalla. Bra estaba desconcertada.
- Pero... ¿Quieres que te muerda?. No lo entiendo, ¿qué quieres que haga?. - De nuevo esa inocencia tan abrumadora que excitó sobremanera al experimentado guerrero.
- Suavemente... coloca tus labios en mi cuello, déjate llevar por tu instinto... muérdeme y bebe un poco de mi sangre. Eso es todo... me dará la energía que necesito para destruir a Freezer. - Bra estaba demasiado aturdida como para cuestionar ese ritual. Quería ver destruido a Freezer. Si esta acción haría a Raditz más poderoso, ella lo haría.
- Lo haré, pero tú no me muerdas. - Advirtió ella ganando una pequeña risa entre dientes por parte de él.
- No, no te morderé, hasta el día en que tú me lo pidas. - Sin saberlo, aquella frase iba a ser una de las más dolorosas jamás pronunciadas por Raditz.
El guerrero volvió a abrazarla contra su cuello. Bra sintió su olor, embriagador... su piel, dura y firme, pero tan suave en esa zona de su cuerpo. Sus labios se posaron como un beso. Raditz mordió sus labios para evitar que sonara el gemido que interiormente había estallado en su interior. Bra clavó sus dientes aún sin atreverse a morderle - Hazlo. - Musitó él impacientemente rozándo la base de su cola casi instintivamente. Ella sintió una pulsión en su columna vertebral, una excitación repentina, su olor era más intenso aún. clavó sus dientes. Sintió el sabor metálico de la sangre en su boca. Raditz cerró los ojos y la abrazó más fuerte conteniéndose para evitar morderla también. Pero debía cumplir su promesa. No pudo evitar un gemido cuando sintió el instinto de Bra desatarse mientras se deleitaba mordiéndole. Ella sintió por primera vez una excitación recorrer su cuerpo por completo, una oleada de placer inundándola y sacudiendo sus sentidos. ¿Qué estaba haciendo?. ¿Qué clase de ritual era ese?. ¿De verdad era un ritual para darle más fuerza en la batalla?. ¿Por qué se sentía tan excitada?. Esas preguntas no tenían respuestas en esos momentos. Sus energías se gastaron rápidamente y se desmayó.
En la nave de Freezer...
- Ya se a quien se parece... es ese guerrero saiyajin... ¿Cómo era su nombre?. Ah, no recuerdo el nombre de ese pobre diablo, pero entonces... el guerrero que lucha contra Ginew... ¿es un Saiyajin?. ¿Cómo puede ser tan poderoso?. -
- Maestro, hemos localizado a Vegeta. - Informó Dodoria. - Está recogiendo unas extrañas bolas amarillas. No se qué pretende con eso. -
- Si las está recogiendo es porque deben tener bastante valor, y conociendo la mente totalmente centrada en la batalla de los saiyajins, estoy seguro de que de algún modo está reuniendo esos objetos para obtener más poder... Interesante... Dodoria, quiero que Zarbón y tú salgais al encuentro de Vegeta y averigüeis qué está tramando y qué poder tienen esas bolas. -
En la batalla...
Goku estaba dando una soberana paliza a Ginew. Pero en un descuido, el capitán, sintiéndose acorralado, paralizó con su mirada a Goku, realizando su mejor técnica. El intercambio de cuerpos.
Ahora Goku estaba en el cuerpo machacado a golpes de Ginew y el malvado esbirro estaba en el cuerpo fresco de Goku... ¿Quién podría hacerle frente ahora?
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