Estamos de felicitación, ya tenemos más de 100 Reviews. GRACIAS AMIGOS Y AMIGAS.
Linna, siento mucho que suspendieras, pero como dicen por aquí, los cates son para los estudiantes. Ya verás como te pones las pilas y apruebas. Estoy segura de ello, vamos, que te envío un chorreón de energía positiva para que así sea. ANIMO. Al menos alguien se rió con el chiste de Raditz. Juas juas juas juas...
Shadir, Mira, bonita... te estás pasando ya... me estás empezando a molestar con esas posesividades... a ver si te enteras de que Raditz es... (viene Ameban y me da un golpe en la cabeza alegando a gritos MIOOOO). Es broma Ameban, jejejje. Ops. Uub la armó buena con sus despistes...
Bulma-chan. MENCION DE HONOR POR SER EL REVIEW NUMERO 100, y por leer mi último capítulo la primera. Esta chica es una fiera, de verdad, os lo juro a todos, queridos lectores. Bulma-Chan leyó mi capítulo 1 minuto después de subirloooooo y ya me hizo comentarios al respectoooo. Hiper velocidad lectora. Tremenda. KAO. El fic de la Madre de Vegeta comenzará cuando termine este fic. Seguro que te engancha... espero... U.o'
Shadow, mira que no reirte del chiste... la intención es lo que cuenta, pobrecito mi Raditz... El final os va a encantar... por lo menos yo estoy impaciente por escribirlo, porque es lo que más me gusta de toda la historia... jejeje
Saturno. Tu si no se muerden Goten y Bra no vives, jeje.
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Capítulo 41: El precio a pagar...
Eran las 7 de la mañana, Marron se levantó feliz y contenta. Esa mañana había quedado con su novio Uub para ir a pasar un bonito día en el campo. Krilin había salido unos días para visitar a unos amigos lejanos, mientras que C18 había optado por quedarse en casa con su hija. Las reuniones sociales, no eran su fuerte. Observó como su hija salía de casa canturreando despreocupadamente. C18 sabía que iba a ver a Uub. Realmente su hija estaba coladita por él. C18 sonrió un poco al ver a su única niña tan feliz después de años de desengaños amorosos.
Uub entró de nuevo en su habitación a comprobar como seguía Bra. Aún estaba dormida. La había acostado en su cama y él había dormido en el sofá. De pronto sonó el teléfono.
- ¿Si?. -
- Uub, es... terrible... - La voz angustiada entre lágrimas era desesperada y desgarradora. Se trataba del hermano de Mina.
- ¿Qué ha pasado?. - Preguntó con premura él.
- Mina... está muerta, mi hermana... ESTA MUERTA, MUERTAAAAAA. - Uub sintió que el corazón se le asolaba al ver a su mejor amigo sufrir de aquella manera. No pudieron hacer nada por Mina. Ella se escapó de la clínica y se inyectó una sobredosis. Su última llamada había sido para el maldito Amin. Duración: 5 minutos. ¿Qué le habría dicho ese bastardo para que ella decidiera suicidarse?. Ninguno de ellos podía saber eso.
- LE VOY A MATAR, TE JURO QUE MATARÉ A AMIN. LE MATAREEEEE. - Ahora la voz del hermano de Mina era terriblemente alterada. Uub no podía dejar que él arruinase su vida también. Amin estaba ya en comisaría, pagaría lo que hizo, le condenarían por traficar con drogas. Pero no era suficiente eso, realmente no era una pena suficiente. El debió decirle cosas terribles a Mina para que la chica acabara con su vida. Era responsable de su muerte también, y su hermano quería sangre. Venganza. Uub tenía que estar a su lado en esos momentos. La venganza nunca solucionó nada. Eso es algo que aprendió de Goku. Todos tienen la oportunidad de cambiar. Quizás Amin reformaría su vida. Matarle no solucionaría nada, y su amigo viviría en su alma con el peso de una muerte. Olvidandose de Marron y Bra, Uub salió volando por la ventana para encontrarse con su amigo.
Bra despertó al poco tiempo. Su cabeza iba a estallarle. No recordaba mucho de lo que había hecho la noche anterior. De pronto se estremeció. Estaba en una cama desconocida, estaba vestida, pero en un apartamento que no sabía de quien era. Trató de recordar algo, y se acordó de los besos de un chico. - Ahh, Dios mio, ¿Qué he hecho?. Soy una puta, ni siquiera se con quien he pasado la noche... no, no soy una puta, no... - Comenzó a llorar desconsoladamente mientras se echaba en la almohada ocultando su rostro avergonzado de la mirada invisible de su conciencia.
En ese momento Marron abrió la puerta del apartamento. Ella tenía llaves.
- ¿UUB? - La rubia gritó su nombre con una sonrisa en los labios.
Bra casi se muere de la impresión. Uub. Ese era el apartamento de Uub. Se sentó en la cama y vió la foto del chico abrazado a Marron en la mesita de noche. Bra les conocía de las fiestas que organizaba su madre en la La puerta de la habitación se abrió de pronto, haciendo que la sonrisa de Marron se transformase en un mar de lágrimas.
- ¿Bra?. ¿Qué haces aquí?. ¿Dónde está Uub?. - Bra se quedó boquibierta. No podía pensar con lucidez, era como si su mente fuera torpe para pensar algo inteligente que contestar. Su cara de miedo sólo hizo que Marron confirmase la sospecha de otra nueva infidelidad. Terminó con su anterior novio porque le fue infiel. Nunca pensó que Uub le fuera infiel, pero Bra estaba en su cama, la cual estaba deshecha... y Ubb no estaba por allí siquiera para desquitarse todo el coraje que sentía. así que Marron estalló de rabia y descargó sus palabras hirientes en Bra.
- ERES UNA CUALQUIERAAA. ¿Cómo te has atrevido a acostarte con mi novio?. Cuando se lo diga a tu padre os matará a ambos. Eres una malnacida, una puta baja y rastrera... poca cosa... inutil... - Bra sintió que aquellas palabras la desbordaban el alma. Su mente se perdió en los abismos de sus recuerdos más terribles mientras era verbalmente atacada por Zarbón y Dodoria. "inutil, puta...". De los ojos de la peliazul brotaron lágrimas. Era como si no estuviera en casa aún, como si su pesadilla continuase. Sentía que la rabia la inundaba. Su ki se elevó inmensamente, y de pronto lanzó una ráfaga mortal que alcanzó inesperadamente a Marron. El grito desgarrador de la chica, que salió disparada por la ventana hacia fuera del apartamento, desplomándose en la calle, 3 pisos más abajo, despertó de su pesadilla a Bra. Ella se acercó al agujero que había creado su ráfaga de ki. Tembló cuando vió a Marron envuelta en sangre, muerta sobre los escombros. Cerró los ojos llenos de lágrimas y voló a toda velocidad a casa. La había matado. Dios mío, su locura finalmente había ocasionado la muerte de alguien inocente. Era demasiado. Tenía que acabar con aquello. Se despediría por última vez de su familia y luego se quitaría la vida.
C18 sintió que el ki de su hija descendió drásticamente. Eso sólo podía significar una cosa... Cogió una habichuela mágica de reserva que siempre guardaba su marido en casa, y voló a toda velocidad en dirección hacia el débil ki. Encontró a un grupo de gente horrorizada tratando de aplicarle los primeros auxilios. Algunas personas llorando impresionados por la pena de ver a una chica tan joven y bonita al borde de la muerte. C18 apartó a todos de golpe y le dió a su hija la habichuela mágica. Marron recuperó el sentido y el agujero que tenía en el abdomen se cerró inmediatamente ante las miradas perplejas de la gente.
- Mamaaaaa. - Lloró Marron abrazándosele. - Ha sido Bra. -
- ¿Bra?. ¿La hija de Vegeta?. - C18 preguntó friamente.
- Si... - Siguió llorando ella.
- Marron, vete a casa de inmediato. - Marron la miró con ojos tristes. C18 la separó de ella y su voz se hizo más suave. - Vete a casa. - Su hija la obedeció y C18 voló hacia donde provenía el ki de Bra.
Bra llegó a su habitación. Deshizo de nuevo su trama con el repetidor de ki, y guardó sus pendientes ocultadores de ki en el bolsillo de su pantalón. Luego se sentó en el borde de su cama llorando desconsoladamente por la muerte de Marron. No obstante, sintió que el ki de ella volvía a elevarse. Sonrió un poco sabiendo que se había salvado, pero eso no cambiaría sus planes. Era peligrosa, perdía la cabeza y sus reacciones violentas podrían costarle la vida a alguien. Marron se debió salvar de milagro. De nuevo comenzó a llorar con desconsuelo sintiéndose incapaz de matarse a si misma, pero incapaz de pensar en otra salida.
Vegeta sintió un estremecimiento en su alma y subió a ver a su niña, sabiendo que algo no marchaba bien. Abrió la puerta. Bra estaba tendida en su cama llorando. Ni siquiera se percató de que él la observaba hasta que posó una mano suavemente en su espalda. Ella abrazó a su padre llorando como si fuera el último abrazo de sus vidas. Vegeta no dijo nada, sólo la tomó entre sus brazos y salió volando con ella. La llevó a un paraje hermoso, un bosque en la cima de unas montañas. Era un valle solitario, lleno de unas extrañas y hermosas flores blancas, con un precioso lago en el centro.
- Mira. - Vegeta descendió hasta el suelo lleno de flores. Bra sintió el aroma maravilloso, y abrió los ojos para mirar el lugar. Ella conocía ese sitio. Su padre la había llevado allí cuando era una damita de unos 6 años, y acudían de cuando en cuando a ese sitio para pasar un día de picnic exclusivo para Padre e hija. Era un sitio especial de ellos dos. Bra adoraba esos momentos. Tenía tan buenos recuerdos de aquellos días. Sus ojos se calmaron y su llanto cesó al pensar en todas las anécdotas que vivió. Caminó unos pasos y recogió una flor acercándola para olerla más intensamente. Corrió unos metros con los brazos extendidos y los ojos cerrados por el prado. Era fantástico. Vegeta sonrió un poco viendo como se alejaba corriendo por aquel lugar como hacía cada vez que iban. Se sintió aliviado al ver que había logrado reconfortarla. Pero la paz de ese momento especial fue rota por una voz amenazante.
- Bra. Vas a pagar por lo que le hiciste a mi hija. - Una bola de ki salió desparada hasta la peliazul incapaz de reacciona siquiera ante ella. Vegeta se adelantó y la sacó de la trayectoria.
- ¿Estás loca montón de chatarra?. - Rugió rabioso el príncipe aún sosteniendo a su hija. Bra recordó a Marron. Su ki.. si, estaba viva, su ki estaba bien de nuevo.
- Tu hija casi mata a la mía hace unos minutos atrás. Apártate. - Advirtió C18 con un ademán violento e impetuoso.
- Tus circuitos deben estar oxidados... mi hija no ha salido de casa. - Se burló Vegeta.
- Mis circuitos están perfectamente, pero tu como padre parece que tienes los sentidos oxidados. Tu hija atacó a la mía hace poco. Bra, ¿me tienes miedo?. ¿No eres tan valiente?. Lucha si te atreves y zanjemos esto. - C18 sabía que la niña era tan orgullosa como su padre y trató de hacerla morder el anzuelo.
Vegeta se percató de la estratagema y se puso delante de ella. - ¿Estás loca?. Te he dicho que mi hija no ha hecho semejante cosa. - C18 miró inquisitivamente a Bra.
- Al menos ten la valentía de no dejar en ridículo a tu padre. Te está defendiendo mientras que tu eres una impostora, una mentirosa...- Bra miró dolorosamente a su padre, confirmándole con aquella mirada que las acusaciones eran ciertas. Vegeta se congeló al saberlo.
- Acabemos con esto. - Bra se lanzó llorando hacia C18 en un acto más suicida que guerrero. La androide era mucho más poderosa que ella y no le costaría nada eliminarla en un segundo. Vegeta sin embargo no podía permitir aquello. C18 sonrió un poco preparando la bienvenida a Bra, pero su puño fue agarrado por la mano de Vegeta, que utilizo su hipervelocidad para sostener a su hija sujetándola con el brazo izquierdo, mientras que retenía el ataque de la madre de Marron.
- ¿Es este el orgullo del Príncipe delos Saiyajins?. Deja que se enfrente a mi. ¿De que tienes miedo?. - Gritó C18. - TIENE QUE PAGAR. - Vegeta contuvo su furia ante tan humillantes afirmaciones.
- ¿Y tú?. ¿Has pagado ya todo lo que hiciste?. - C18 se quedó confusa ante aquella pregunta. El ataque hacia su hija había sido peretrado acaso por una venganza hacia algo que ella hizo a la familia de Vegeta. Que C18 supiera no había hecho nada a aquella familia...
- ¿A qué te refieres?. - Preguntó por fin la androide.
- ¿Cuántas vidas eliminaste?. ¿Pagaste por el mal que hiciste?. - C18 no podía creer que le sacaran en cara lo que hizo cuando era malvada. Ella era ya un ser totalmente reformado. Es cierto que había hecho cosas horribles, pero todo eso había cambiado.
- Muy listo, quieres cambiar de conversación para que deje a tu hija escapar, pero no te servirá de nada. -
Bra se soltó del abrazo de su padre. - Lucharé contra ella, papá, lo merezco, debo pagar lo que hice, es verdad... casi la maté... soy horrible... pero no quería hacerlo... - Sollozó ella cerrando los puños. - Deja que luche contra C18. Es lo justo. Debo pagar lo que hice. -
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Mientras tanto...
Uub estaba con su amigo, había logrado calmarle. Le explicó que la venganza le convertiría en un ser despreciable como lo era Amin. Que debía marcar un ejemplo distinto. Tenía que creer en la vida, y en las personas, por muy despreciables que fueran. Cada cual cargaría con sus crímenes. Las personas malvadas acaban pagando el daño que hicieron tarde o temprano. De un modo o de otro, los crímenes se purgan, ya sean en esta vida o pudriendose en el desolador infierno. El hermano de Mina se consoló con aquellas afirmaciones. Si, la vida tenía una justicia propia más efectiva que la venganza.
De pronto Uub se dió cuenta de que había olvidado por completo a Marron, así que voló hasta donde estaba su ki, sin pararse siquiera en su agujereado apartamento. Marron estaba llorando en su habitación. Uub entró por la ventana.
- Marron lo siento, lo olvidé por completo... es que.. - Una bofetada cruzó su cara dejándole perplejo.
- ¿Cómo pudiste engañarme con ella?. - Gritó ella. - Yo te quería, confié en tí, eres un hipócrita, tu filosofía, tus palabras... todo era mentira... me engañaste con otra... TU AMIGA CASI ME MATÓ. - Gritó de nuevo mostrándole el vestido ensangrentado que había en un rincón de la habitación tirado.
Uub se quedó perplejo observando la escena. Entonces pensó que había dejado a Bra acostada en su cama. Marron debió de encontrarla allí y todo este lío se había formado por un malentendido.
- Marron, yo no te engañé con Bra. - Contestó Uub seriamente mirándola a los ojos. La chica de pelo rubio quiso volver a abofetearle, pero el tomó su mano suavemente. - ¿Dejarás que me explique?. - Marron asintió ansiosa por escuchar algo que le demostrase que todo había sido un malentendido.
Uub le contó lo que hizo la noche anterior y cómo encontró a Bra en casa de los malditos traficantes. Le explicó por qué la acostó en su cama y narró con lágrimas en los ojos la muerte de Mina, y su salida acelerada para ayudar a su amigo en aquellos terribles momentos. Marron le abrazó y se besaron. De pronto la chica rubia se percató de que su madre había ido a vengarse. La pareja salió a toda velocidad hasta donde se encontraban los kis de C18, Vegeta y Bra.
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En mostró a Trunks el dibujo de Goten. El tampoco sabía qué clase de símbolos eran aquellos, pero convino en decírselo a su padre a ver si averiguaban algo.
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En el valle...
- ALTOOO. - Las voces de Marron y Uub llamaron la atención de todos. Bra al verles sintió que su mundo se venía abajo. Si le decían a su padre más cosas horribles de ella, acabaría por odiarla. ¿Es que no podían dejarla morir sin mas?. ¿Debían atormentarla de aquella manera?.
- Mamá, ha sido un malentendido. Yo le dije a Bra algunas cosas muy feas y además no sabía que ella estaba e... - Uub le tapó la boca. No quería que Vegeta se desvocase. La situación ya era bastante tensa y los kis estaba demasiado alterados como para alterarlos más.
- Por favor, ha sido todo un malentendido, C18, yo amo a Marron y se lo que debió sentir, pero... - Sus explicaciones fueron cortadas por una suspicaz observación.
- ¿Y por qué mi hija fue atacada en tu apartamento?. ¿Qué hacía esa niñata allí, eh?. - Vegeta miró a su hija encontrando su mirada desgarrada. Uub y Marron se quedaron parados sin saber que hacer o decir. ¿Debían contar lo de Bra?.
Uub tomó la palabra. - Marrón, habla con tu madre. ¿Puedo hablar a solas con usted, Vegeta?. - Bra sintió que aquella pregunta la golpeaba interiormente como una daga.
C18 se apartó a regañadientes para escuchar lo que tenía que decirle su hija a solas, y Vegeta hizo lo mismo con Uub. Bra no se movió un ápice de donde estaba, sintiéndo como su mundo se derrumbaba poco a poco.
En cuanto Marron abrio la boca para hablar, en apenas dos frases, los ojos de C18 se abrieron en el asombro y se clavaron con expresión de lástima en Bra. Aquella mirada le dolió a la peliazul más que todo su odio anterior. Por su parte Uub dió más rodeos para contarle a Vegeta algo tan terrible.
- ¿Y bien?. - El príncipe nunca se caracterizó por la paciencia.
- Me temo que debo contarle algo muy penoso... - Pronunció serio y humilde.
- HABLA. - Gritó él sobresaltando a Bra, que les miraba con lágrimas en los ojos.
- Mi mejor amigo, tiene una hermana que es conocida de Bra... por desgracia Mina, falleció anoche... -
Uub comenzó a contarle cómo el hermano de Mina y él fueron a casa de los traficantes y encontraron a Bra allí. Omitió los detalles acerca del estado en que la encontró, si le dijo acerca de los pendientes ocultadores de ki. Con mucha dilomacia y tacto, le dejó caer que su hija había acudido allí por malas amistades y que la estaban conduciendo hacia el mundo de la droga... Vegeta abrió los ojos aterrado por aquel nuevo y horrible descubrimiento, casi sin poder creerlo. Sus ojos buscaron a su niña, tenía que aclarar todo aquello y ella debía responder con sinceridad y sin evasivas, pero Bra había desaparecido. Marron estaba con C18 hablando. El ki de Bra no estaba.
Uub notó lo mismo. - Son los pendientes... ella ha debido utilizarlos. - Alertó Uub.
Vegeta voló en busca de su hija con un dolor en el pecho que sólo podía significar que el alma de su niña estaba sufriendo enormemente.
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Unos kilómetros más lejos...
El teléfono movil de Bra sonó. Era Goten.
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Mientras tanto... en el Mas allá.
Kaito y Raditz trataban por séptima vez encontrar un rastro de Bra, pero no estaba ni en el cielo, ni en el infierno, ni en la Tierra, ni en ningún lugar del Universo... Ni en ningún portal interdimensional... - Esto es lo más extraño que he visto jamás... - Raditz cerró los ojos lleno de rabia recordando las palabras de Bra. "Cuando todo esto acaba desapareceré y no podrás seguirme allí donde yo voy..."
- Tienes que ENCONTRARLA. - Gritó sobresaltando a Kaito.
- Espera... es posible... hace muchos años vi algo parecido... puede ser... pero... es imposible... - El hombrecito regordete daba vueltas moviendo sus antenas perdido en sus pensamientos mientras que Raditz seguía sin entender nada de lo que farfullaba.
- ¿Quieres decirme qué pasa?. - Dijo tratando de contenerse.
- Creo que ha debido viajar en el tiempo, es la única explicación posible... - Ahora el Saiyajin quedó perplejo. Viajar en el tiempo...
- ¿Dónde?. ¿A que tiempo?. -
- Sólo hay un modo de averiguarlo, pero será arriesgado... - Dijo Kaito haciendo una mueca y sudando.
- Tendrías que entrar en un portal interdimensional en el que hay 3 puertas. Una de ellas pertenece al pasado. Otra al presente y otra al futuro. Detrás de cada puerta existe un guerrero guardián. El podría ayudarte a encontrarla, pero antes tendrás que derrotarle. Por otro lado, si lograses viajar en el tiempo, conseguirías revivir de nuevo. Lo malo es que jamás podrías volver a viajar en el tiempo y si te equivocas de puerta... Deberías saber al menos, si ella pertenece al pasado o al presente... -
Raditz comenzó a pensar detenidamente. Al pasado... no... aquella chica sabía muchas cosas hasta de su hermano, por otro lado era tan parecida a Bulma... pero aquella era la mujer de Vegeta... significaba eso que Bra era la hija futura del Príncipe. O.o' Algo le decía a Raditz que estaba en lo cierto... - Pertenece al futuro. Indícame donde están las puertas del tiempo, me enfrentaré a quien sea, y si es por volver al pasado, no te preocupes, que no tengo nada que perder... -
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