Capítulo 11. Un Sacrificio Requerido.
El viento arreciaba haciendo silbar las ramas de los árboles al pasar entre estas. El clima era frío y un tanto deprimente, cualquiera desearía que acabara ese día para dar paso al siguiente, un mejor día por delante. Sin embargo, no todos son de esa opinión pues mientras muchas personas se encuentran felices cerca de sus seres amados disfrutando cada instante, otros en cambio quisieran tener a su lado a ese ser amado, pues la tristeza y soledad les invade con fuerza. Caso de Eriol y Syaoran que ahora veían a lo lejos la silueta de una casa y conforme se acercaban, se lograba apreciar los magníficos jardines, grandes ventanales y de estilo europeo que adornaban la mansión que por la escasa luz proveniente del exterior se podía apreciar de manera tenebrosa y acogedora a la vez, poco más lejos se divisaba el hangar rodeado por vallas metálicas.
El jet aterrizaba tranquilamente sobre la pista aunque sus tripulantes en realidad estuvieran con el corazón hecho añicos y sus ánimos por los suelos pero a la vez muy apurados por bajar y encontrar al desquiciado que les ha hecho sufrir tanto. La escalerilla baja sin apuros y las luces automáticas de la pista muestra 2 siluetas que esperan a que la escalera este firme. Eriol da un salto y de entre los árboles cercanos logra ver una silueta, corre hacia ella seguido por Syaoran; al llegar logran ver a la dueña de la silueta, una cándida joven de cabellos rojizos y ojos escarlata con alas negras de mariposa.
E: Rubymoon ¡!
R: Eriol…- suspira de alivio- Me alegro encontrarte.
E: Y a mí ¡! Como escaparon ¿? Que paso ¿?
Sy: Sakura ¡!- grito de sorpresa al verla inconsciente sobre la espalda de Ker, corrió hacia ella y la tomo en brazos, inquieto lo miró.
K: Esta bien, sólo un poco débil.
E: Vamos entremos a la casa- dijo con seriedad.
Dentro de la estancia, los cuatro guardianes alrededor de los tres magos estaban parados reveían débiles, pálidos, un poco desaliñados y algo cansados, evidencia clara de lo que Eriol ya había imaginado.
Syaoran recostaba con delicadeza a Sakura sobre el sofá para después sentarse junto a ella y ver su bello y pálido rostro que contrastaba con la poca luz proveniente del exterior. Se podían apreciar las sombras de los objetos y aquellos que ocupaban la habitación. Algunas altas, otras angostas y muchas pequeñas que dejaban un pequeño brillo entre sí.
La amplia estancia de fino piso de roble sostenía 2 sillones blancos y 2 sofás alargados- uno más que el otro- del mismo color como perlas y en el centro una bella mesita de té de olmo de un fino y suave color café que a juego exquisito deleitaba la vista y que con solo mirar por sus cristales se observaba la bella alfombra malva sobre el que se posaba. En cada esquina del sofá se apreciaban dos bellas lámparas delicadas de cristal que ahora yacían apagadas haciendo que el resto de la estancia se perdiera en la oscuridad de la noche.
Nadie se había molestado de prender las luces, parecían tener la intención de mantener aquella oscuridad. Eriol quien se sentó sobre la mesa de té, miró a Yue y pasó a Rubymoon con atención deteniéndose en los pequeños detalles que marcaban la tortura en sus rostros y sobre todo en sus manos.
E: Y bien ¿?- dijo con serenidad- Qué ha sucedido ¿? Como lograron salir ¿?
Y: Tomoyo nos ayudó a salir- Eriol puso el entrecejo fruncido y al verlo continuó- sin embargo lo hizo sin tener la menor idea del por que.
E: Ya veo.
R: Eriol, te das cuenta de lo poderosa que es ¿?
E: Sí
R. Y aún así estas tranquilo ¿?
E: Qué quieres que haga ¿? Te dire lo mismo que le dije a Li- y este lo voltea a ver- No puedo hacer nada por el momento…
R: Pero…
Y: Se da cuenta de que si los dejamos salirse con la suya ellos podrían tomar ventaja de todo esto ¿?- dijo con firmeza.
E: Y que supones que haga? Luchar…- lo miro con burla- Sabes muy bien que es lo que menos quiero.
Y: Pero ellos ya empezaron ¡!
K: Eriol, aunque no quieras hacerlo, debes de… Tú mismo forzaste a Sakura cuando se trataba de cambiar las cartas. No veo como es que no quieras hacerlo ahora.
Sp: Es simple que no quiera hacerlo.
K: Por que lo dices ¿?
Sp: El daño que provoque no sólo sería para Aiden sino también para Tomoyo y hasta donde lo veo, no creo que quieras que eso pase o sí Eriol ¿?- ladeando su negra cabeza de pantera hacia el.
E: Spinel tiene razón, por estar compartiendo sus poderes con ella se crea un vínculo en el cual, cualquier daño que yo le haga a Aiden ella lo recibirá de igual manera pero no al contrario y aunque fuera así…- va hacia otro lado y entrelaza los dedos de sus manos que se encontraban sobre sus rodillas- Yo jamás sería capaz de hacerle daño. Ella es mi vida entera, jamás podría si quiera ponerle un dedo encima (claro esta en el sentido agresivo)- decía con tristeza.
S: Sya… Syaoran- musitó con los ojos entre abiertos.
Sy: Sakura – aspiró profundo- Como estas ¿?
S. Bien…- dijo abriendo los ojos- Mi amor…- mirándolo como si hubiese pasado una eternidad y posando su suave y algo fría mano sobre su mejilla.
Sy: suspira de alivio- Me alegro- le dijo con una cálida sonrisa y la veía con sus bellos ojos marrones.
S: voltea a ver a Eriol- Eriol debemos ayudar a Tomoyo…- quien se limitó a mirarla con seriedad- Ella todavía te recuerda ¡! Yo lo sé por que lo vi en sus ojos ¡!
Eriol se levanta con firmeza, se dirije a las ventanas cubiertas con una suave cortina de seda transparente que dejaba pasar los apenas luminosos rayos de luz provenientes de las lámparas exteriores.
E: Ella no me recuerda- dijo con frialdad- sólo recuerda una sombra, yo no soy nadie en absoluto dentro de su mente o su corazón- la voltea a ver y sus ojos mostraban la enorme tristeza que le invadía como una plaga y le devoraba el alma con fiereza que se pronunciaba aún mas por sus anteojos.
S: Eriol…
Sy: Que haremos ¿?
E: Debemos esperar, el vendrá por su carta. La necesita…
Sy: Se la vas a entregar así nada más ¿?
Eriol se limitó a darle una sonrisa pícara, alzo una ceja y volteó de nuevo hacia la ventana, dándole la espalda a sus impresionados amigos, que aún no terminaban por creer el comportamiento de su amigo. Eriol posó su brazo sobre el cristal de la ventana y se recargó con melancolía sobre el. Su mente se encontraba al mil buscando otra solución, repasando un plan que el estaba seguro que no fallaría pero que aún así era muy arriesgado, no había de otra, así tenía que ocurrir.
E: (…Si eso es lo que debo de hacer para poder recuperarte… Entonces no me queda de otra… Perdóname Tomoyo, pero es la única solución…)- aquella solución como el bien sabía era única y no podía hacer nada para evitarla o cambiarla, no había otra manera…
/"La belleza de tu mirada
solo se compara con la de una rosa, tan hermosa, tan misteriosa, tan
seductora,
hacen que los sentimientos mas ocultos de mi alma
afloren con cada respirar, desearía compartir una eternidad
contigo,
pero lo único que tengo son recuerdos tuyos que
estremecen mi corazón, y que se encierran en un sarcófago
de sentimientos
y sacrificios que a veces no son
correspondidos.\\\
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Dentro de la oscuridad se encontraban dos figuras una descansaba inerte sobre el piso mientras que la otra llora a pocos pasos de ella, sus sollozos poco a poco fueron callando, poco a poco conforme el hueco dentro de ella se cerraba. Fuera de aquel terrible dolor que sentía en el pecho se encontraba un pequeño recuerdo, aquel que no era posible borrar con magia solo con el tiempo. Tomoyo se levantó, se limpió las lágrimas con el torso de su mano y miro hacia donde yacía Dandelion, camino hacia ella y con un movimiento de su mano la hizo reincorporarse aun con los ojos cerrados pero después los abrió, miró de un lado al otro y algo preocupada le preguntó a Tomoyo.
D: En dónde están las esferas ¿? En dónde esta la maestra de las cartas ¿?
T: Acaban de morir- mintió- Y la luz que emanaban de su cuerpo se extinguió, aquí no hay nada ya.
D: Ya veo, pero en donde están los cuerpos ¿?
T: En donde se supone que deben de estar- señalando el piso.
D: puso su mano frente a ella y de esta salió una pequeña esfera dorada, que daba suficiente iluminación para observar los cuerpos que yacían hacia donde Tomoyo le había señalado- No soportaron nada, eran tan débiles… Se lo diré al amo Aiden.
T: De acuerdo, iré a cambiarme para la cena.
D: De acuerdo.
Ambas dejaron la habitación y en cuanto se cerró la puerta los cuerpos desaparecieron. Dandelion y Tomoyo caminaron por el corredor de mármol, subieron las escaleras de piedra y en el piso superior, donde la luz del atardecer que entraba por las ventanas era cada vez menos pero ya no era nublado, estaba tranquilo y la brisa se había calmado, evidencia clara de que dentro del corazón y la mente de Tomoyo la tempestad había cesado, o mas bien, había sido eliminada; una tomo un pasillo y la otra el otro. Dandelion llegó hasta el estudio de Aiden, quien se encontraba frente al fuego de la chimenea con aire de aburrimiento y al escuchar que se cerraba la puerta volteó a verla.
A: Que ocurre ¿?
D: Los guardianes y la maestra de las cartas están muertos- le dijo con frialdad.
A: Ya veo- sonríe con malicia- En donde esta Tomoyo ¿?
D: Fue a su habitación, se esta cambiando.
V: Amo- quien también junto con Inti se encontraban en la habitación- No creerá que ellos de verdad lo están o sí ¿?
A: Ellos ya no están aquí- lo que sorprendió a Dandelion, Inti y Volt que de inmediato se vieron unos a los otros.
D: Como que ya no están aquí ¿? Los acabo de ver, muertos sobre el piso- dijo con firmeza.
A: No, lo que tú viste fue sólo una ilusión.
D: Qué ¿? Pero quien…
A: Tomoyo
V: Como ¿?
A: De la única manera en que yo suponía que ella lo haría. Esperó a que saliéramos del cuarto y después durmió a Dandelion, deshizo las cadenas y las esferas dejándolos salir y por último- dijo con firmeza al ver que Volt trataba de decir algo- Creó un escudo que repele toda presencia mágica que se encuentre fuera del castillo, por lo que no pudimos sentir cuando se iban.
T: Y eso te pareció incorrecto ¿?- dijo de manera burlona desde la puerta de la habitación.
Tomoyo estaba ahí, recargada en el marco de la puerta, vestida con una blusa azul larga con mangas de bombilla, una mini falda negra sin bolsillos más que traseros y botas negras que se ataban con cuerdas hasta la mitad de la espinilla, su tupida melena iba amarrada en una coleta alta dejando ver perfectamente las bellas facciones de su rostro. Nadie se había percatado de que se encontraba ahí, ni siquiera de que habían abierto la puerta y su interrupción había ocasionado que todos se sobresaltasen y miraran hacia ella.
A: No- dijo de manera dulce- De hecho me pareció muy acertado- y sus guardianes lo vieron de nuevo atónitos.
T: le sonrió- Supongo que no estas muy contento con esta sorpresa.
A: Para nada, de hecho me complació mucho y también me parece muy impresionante- se para y camina hacia ella- Por que, a pesar de que tus poderes son en realidad míos- decía con aspereza- Supiste controlarlos muy bien (inclusive utilizaste un poder que yo no te di) eso quiere decir solamente…
T: Que soy mas poderosa que tú ¿?
A: Puede ser- sonriendo- Pero eres digna de ayudarme a terminar con la reencarnación de Clow y su amigos.
T: Y qué ¿? Desde un principio no pensabas incluirme ¿?- le dijo de manera altanera.
A: se acercó a ella, puso sus manos en las suaves mejillas de Tomoyo- Por supuesto, pero no sabía lo buena que eres…- la besó con algo de fuerza y la miró a los ojos.
T: No te vaya a dar una sorpresa…
A: Es eso una advertencia ¿?
Tomoyo se limitó a encogerse de hombros con una media sonrisa y una ceja alzada.
A: Bueno entonces creo que es hora de visitar a mi buen amigo Clow.
/"Eres un brillo de luz en
mi vida que me hace deslumbrar y sacar aquellos pensamientos que
viven en mi alma,
palabras que se elevan con la voz, que se
dispersan como un grito y que se mantienen como un juramento de amor
eterno hacia ti,
pensamientos donde solo estamos tú y yo
por siempre.
Solo tú sabes lo que siento, solo tú
sabes lo que oculta mi corazón, solo tú sabes la pasión
que siento por ti." \\\
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La mansión Hiragizawa se encontraba a oscuras, el silencio reinaba dentro y sus ocupantes solo podían sentirse apáticos y melancólicos, nadie hablaba sólo miraban hacia la ventana como esperando algo sucediese.
El cielo oscuro cuajado de estrellas y con una luna en cuarto creciente, las luces del exterior iluminaban con gracia todo lo que tocaban, dando una magia especial a aquel jardín. Las vallas del hangar brillaban opacas por el tiempo de estar cuidándolo. Los jardines que bien cuidados estaban dejaban ver a la oscuridad las bellas flores que se encontraban en él, así como los árboles que lucían cual pilar sostenía el cielo. (aaahhh que inspirada… ¬¬)
Todos tranquilos, dentro de la estancia estaban, recuperando fuerza los que habían sido lastimados y torturados, manteniendo su mente despejada todos para escuchar aquello que llegase a terminar con el encantador silencio de la noche y descansando, preparándose para la batalla que se acercaba, aquella que estaba próxima y que ya la sentían sobre ellos.
Entonces aquello que esperaban comenzaba, la tierra temblaba leve bajos sus pies, el viento comenzaba a soplar haciendo silbar a los árboles, el cielo tronaba y las luces del exterior poco a poco se apagaban. Al verlo todos se pusieron tensos al quedar sumergidos en la penumbra, al ya no tener ni un pequeño resplandor de luz que les proporcionara el exterior. De repente, la casa se quejó, crujía de manera sonora, como si alguien la estuviera presionando, la presencia de aquella persona se comenzaba a sentir con más fuerza dentro de la habitación, por todas partes y se percataron de que ya no era una sino cinco las que abordaban el lugar.
Sakura se abrazaba con fuerza de Syaoran y el trataba de protegerla de aquello, Yue, Rubymoon, Spinelsun y Cerberus buscaban con la mirada a los dueños de aquellas presencias, mientras que Eriol por su parte, cerró con fuerza las cortinas y suspiro.
E: Ya llegaron…
Al cerrarlas todo quedo de nuevo en silencio, uno que incomodaba nada más estar dentro de él, y las presencias se sentían cada vez más fuertes y más cercanas. Y de inmediato se sintieron aprisionados, haciendo que se acercaran uno a los otros, formando un círculo que se cerró con fuerza al sentirse atados; en efecto, estaban atados, inmóviles, por una cadena dorada que resplandecía en la oscuridad haciendo ver la nada, ya no se encontraban dentro de la sala de la mansión Hiragizawa, ni siquiera estaban ya en la mansión Hiragizawa y por un momento la oscuridad pareció absorberlos dejándolos perdidos y agobiados.
En seguida la luz reino de nuevo y en efecto, ya no se encontraban ni en la sala y mucho menos en la mansión Hiragizawa, el lugar a donde habían sido transportados era completamente diferente, el jardín rodeado por altos muros blancos a los que adornaban una hilera de flores blancas y en frente de ellas un canal, como apartándolas por una cerca; detrás de ellos estaban las puertas que conducían al interior de aquella mansión y justo frente a ellos estaba aquel montículo de piedra que era protegido por una cúpula blanca.
E: Estamos en…
A: Mi jardín- dijo quien de la nada apareció frente a Eriol y le sonrió.
Todos podían moverse de nuevo y al momento en que Aiden, quien portaba una larga capa azul marino con botones dorados, vestía una camisa blanca y un pantalón de vestir negro con zapatos negros, haciéndolo ver simplemente encantador (ya! no me maten lo que pasa es que el tipo es guapo ¬¬) sonreía y Eriol daba unos pasos hacia atrás, Dandelion, Inti- un tigre con alas de murciélago, Volt y Tomoyo aparecían frente a ellos.
A: Que pasa Clow ¿? Asustado ¿?- decía con burla.
E: Keh… Por que debería de estarlo ¿?
A: ríe- Tienes razón, después de todo son mas ustedes no ¿? Digo contando a tus, perdón sus cartas- señalando a Sakura- y sus guardianes, como podrías estar asustado, son muchos más que nosotros- sonríe con malicia.
E: Si pero ambos sabemos que el número en realidad no cuenta o sí ¿?
A: Tienes razón.
En ese momento Dandelion y Volt ponen sus manos juntas para después disparar una lluvia de esferas doradas, mientras que Inti abre el hocico y les lanzaba un rayo negro, todos estos chocando contra el escudo que Eriol había formado, quien tenía ya en su mano su báculo dorado con forma de sol en la punta mientras que Sakura ya tenía su báculo frente a ella y Syaoran tenía su espada en las manos, Aiden al verlos simplemente alzó una ceja, puso frente a él su puño y lo cerró con fuerza provocando que una fuerte descarga azotara sus cuerpos, haciéndolos gritar de dolor.
A: Sabes Clow, si llegas a utilizar tu escudo o si la señorita Kinomoto lo utiliza ten por seguro que volveré a lanzarles una descarga… Quedó claro ¿?- Eriol se limitó a mirarlo con frialdad- Por cierto, supongo que conoces a esta bella señorita…- tomando a Tomoyo por los hombros mientras que ella lo veía con indiferencia.
E:… No la metas a ella en esto ¡!
A: ríe- Pues déjame decirte que aunque yo no la quiera meter, ten por seguro que ella sí.
Tomoyo lo miró con una sonrisa y después saco una daga dorada que nada más sacudirla una vez se convirtió en un báculo con dos puntas semejándola a una montaña rodeada por cintas plateadas, provocando una reacción de sorpresa por parte de Eriol. Ambos se miraban con reto, ella con indiferencia y el desconcertado, no sabía que hacer, por lo que dio un paso hacia atrás pero en ese momento Dandelion, Inti y Volt volvieron a atacarlos y Yue, Cerberus, Rubymoon y Spinelsun les respodieron, haciendo que todos se elevasen. Sakura invocó la carta vuelo y tanto a ella como a Syaoran les crecieron alas en la espalda, volando junto con los demás quienes peleaban contra los otros 3. Eriol que no estaba seguro de que hacer, decidió subir a su báculo y volar pero Tomoyo lo siguió mientras que Aiden trataba de derribarlo lanzándole rayos por donde pasaba, Eriol los esquivaba con agilidad y volaba cada vez más rápido pero Tomoyo le comenzaba a lanzar ráfagas de viento y haciendo crecer montículos de tierra por donde pasaba, lo que le dificultaba un poco más su vuelo, puesto que debía esquivar 3 ataques en vez de uno.
Los guardianes de Aiden eran rápidos en sus ataques y rápidos en esquivar los de sus oponentes, Dandelion quien peleaba contra Sakura y Yue se las ingeniaba para engañarlos a ambos haciendo que casi se golpearan mutuamente; Volt quien peleaba contra Syaoran y Rubymoon lograba esquivar con habilidad las esferas escarlata que ella le mandaba mientras que con su espada Syaoran trataba de cortarlo; por su parte Inti quien peleaba contra Cerberus y Spinelsun se batían en duelo con fiereza, pues el podía resistir con facilidad ambos ataques mientras que cuando el los atacaba uno de ellos era golpeado con fuerza haciéndolo hacia atrás y él otro iba hacia Inti cuando este ya lo atacaba.
Entonces se escucho el grito de Sakura, Dandelion logró esquivar a Yue y golpear de lleno a Sakura con una de sus esferas, que Syaoran al escucharlo se distrajo y Volt aprovechó para golpearlo lanzado a Rubymoon contra el, chocando con fuerza y lanzándolos algo lejos, y Yue al ver esto le disparó una flecha que paso rozando su brazo pero que le costó caro pues Inti le disparó y lo derribó, mientras que Dandelion les disparó su mega esfera que al partirla Cerberus y Spinelsun recibieron fuertes descargas que los dejó bastante atolondrados.
Mientras que ellos trataban de derribarlos, Eriol buscaba una forma de hacer reaccionar a Tomoyo pero era inútil pues cada vez que giraba Aiden le lanzaba un rayo o Tomoyo desestabilizaba su báculo, en eso dio un giro pero Aiden lanzó hacia el agua y fuego en modo de cruz, Eriol logró esquivarlos a tiempo pero chocó contra un montículo de tierra que con rapidez se alzo, haciéndolo caer y casi chocando contra el piso de no ser por la carta flote de Sakura, quien a su vez recibía una fuerte descarga proveniente de una mini esfera que Volt le había lanzado. Y de inmediato, Tomoyo movió su mano y unas vainas cafes sujetaron a Eriol por sus pies haciéndolo caer pero recuperando su báculo al tiempo que volteaba pero Tomoyo ya lo veía de manera fría sosteniendo su báculo sobre el, apuntándole con el sobre su pecho.
El tiempo pareció detenerse por un momento pues se sintió derrumbado por el deseo de muerte al ver el rostro de Tomoyo, tan inexpresivo con los ojos fríos y apuntándole al pecho ahora con una lanza dorada. En eso se empezó a sentir frío y la tierra comenzó a temblar, Tomoyo tenía los ojos cerrados, estaba recordando lo que había pasado todo aquello que había bloqueado y al abrirlos, la tempestad empeoró mas sin embargo el temblor cesó.
Estaba furiosa al recordar todo aquello y quería acabar con él, terminarlo todo. Eriol vio su rostro y de inmediato lo comprendió.
E: Quieres matarme Tomoyo ¡! Pues hazlo ¡!... Que esperas ¡!- le dijo con exasperación- Termina de una buena vez por todas conmigo ¡! MATAME ¡!- jalándole la lanza hasta que chocó contra su pecho y sintió la puntita que se hundía en el- MALDITA SEA TOMOYO ¡! QUE NO ME QUIERES MATAR ¡! YA ME HAS MATADO EL CORAZÓN POR COMPLETO, AHORA MATA EL CUERPO DE ESTE PENDEJO QUE SE ENAMORÓ PROFUNDAMENTE Y QUE YA NO QUIERE VIVIR SIN TI ¡! MÁTAME ¡!- le decía con furia- QUE TU ERES LO MÁS IMPORTANTE Y LO QUE MÁS AMO EN ESTE MUNDO, POR ESO TU YA LO ESTÁS MATÁNDO ¡! HAZLO ¡!- le dijo, jalando un poco más la lanza- No… tú no fuiste la que mato mi corazón- fulmina con la mirada a Aiden y él solo le sonrié con malicia mientras lo mira encantado- fue él. Encargándose no sólo de robarme a mis amigos ¡! Sino tambieb se encargó de matar cada una de las malditas sensaciones de amor hacia mí, dejándome en agonía y yo ya estoy cansado ¡! TOMOYO TU YA NO ME AMAS PERO YO AÚN TE AMO Y LO SEGUIRÉ HACIENDO POR SIEMPRE… POR ESO TE PIDO QUE ME MATES ¡!
Tomoyo tembló un poco y dejó caer el báculo, cayendo ella también de rodillas y cubriéndose los ojos con las manos, triste y mustía, con voz trémula le dijo.
T: No puedo- sollozaba- No puedo…- alzo la mirada y sus ojos bañados en lágrimas lo miraron- No puedo matárte Erol, NO PUEDO ¡! POR QUE YO… POR QUE TE AMO ¡! TE AMO ERIOL ¡!- y como si algo dentro de ella se hubiera roto dejando ver aquel recuerdo tan amargo de nuevo, modificando las carass, modificando todo y mostrándole la verdad, estallando en lágrimas y Eriol abrazándola, ella le murmuró al oído: PERDÓNAME… PERDÓNAME POR CREER ESO, POR DUDAR DE TU AMOR, POR DUDAR DE MÍ MISMA PERO SOBRETODO, POR DUDAR DE TI. Se acurrucó en su pecho y se echo a llorar mientras que él sólo la abrazaba con fuerza.
Al ver esto, Aiden tomó su báculo que en la punta había una rayo que al final formaba un círculo alrededor de sí y en el centro mostraba un rombo, lo transformó en lanza y con furia la lanzó contra Eriol y Tomoyo quienes se encontraban arrodillados y abrazados.
Se escuchó el ruido de la lanza al cortar rápidamente el aire, cruzando el jardín y poco después , un golpe seco contra lo que había atravesado.
/"Moriré, pero jamás dejaré de amarte, porque el amor no termina cuando termina la vida..." \\\
Perdón por atrasarme se que dije que ayer pero he estado algo ocupada… cosas personales, demonios personales como me gusta llamarlos :P y algunos fastidios por parte de mis hermanos ¬¬ que se la hace. Espero les guste este chap, creo que ya esta mas claro lo de los sueños y el poema por cierto no es mío lo saque de una página llamada Gothic Soul, pienso que le viene muy bien a esta parte de la historia por eso lo puse, bueno muchas gracias por tu review Zashi18 y me alegro que te haya gustado el chap y si gracias me fue bien, mucha gente x pero así tuvo que ser :P, también gracias a todos los que lo leen pero no dejan review ;). Así que nos vemos en el siguiente chap, que por cierto es ya el último… :'( si es triste pero algun día debía de terminar bueno nos vemos, bye.