Bueno, aquí les traigo un nuevo cap.; lamento no haber avanzado antes pero me formatearon el compu Y recién me lo trajeron ayer.
Y me di cuenta que escribí en los otros capitulo el apellido de Sakuno como Ryusaki, siendo que se escribe Ryusaki, jaja.
Bueno, les recuerdo q los personajes no me pertenecen TT.
Capítulo 5: Un momento peculiar
Sakuno:(muy sonrojada) Ryoma…
Ryoma: Yo…yo…
No se habían dado cuenta, pero sus rostros estaban peligrosamente cerca, por lo que ambos tenían el corazón a casi explotar (latiendo muy rápido) y sus caras más rojas que un semáforo. Ryoma trataba de disimular con su gorro encima de la mayoría de su rostro, pero una brisa de la tarde le estaba haciendo en contra, llevándose la gorra lejos de su dueño. Sakuno seguía anonadada por la reacción del chico de los ojos de gato, porque de repente se ponía tan nervioso con ella cerca, acaso ella tenía alguna importancia en la mente del chico más frío del equipo de Seigaku, estas preguntas rondaban su mente, sin dejarla reaccionar a levantarse. Pero ellos no se habían dado cuenta de que no estaban solos. Ryoma segundos antes estaba en su mente, tratando de pensar que hacer en esta situación que lo mantenía demasiado en las nubes; pero al oír las voces de ciertas personas muy conocidas, todo cambio.
-Eiji: Vamos Ochibi, tu puedes!
-Momoshiro: Oh, que bello es ser joven.
-Eiji: Momoshiro, solo eres un año mayor.
Sakuno reaccionó rápidamente luego de la "escena" que había formado; salió corriendo hasta dejando la bolsa de las gaseosas, lo único que lograron percatar de la chica al irse era una torpeza muy nerviosa al caminar y un sonrojo muy notable. Ryoma estaba peor, al ver que sus sempai lo espiaban. Ryoma no sabía donde meter su rostro de vergüenza. Se levanto un poco torpe y fue en busca de su gorra que no había volado muy lejos del lugar, por lo menos a si, podía disimular y taparse el rostro.
-Momoshiro: Ryoma, como se te ocurre dejar ir a una chica?
-Ryoma: (en un modo muy frío, típico de él) Cállate…
-Eiji: Pero, si hacen una linda pareja.
-Momoshiro: Además no sabía que tenías algo con la nieta de Ryusaki-sensei, desde cuando?
-Eiji: Si Ochibi, desde cuando?
-Ryoma: Mejor me voy (se va lo más rápido posible)
-Momoshiro: (tratando de seguirlo) Pero Ryoma no nos dejes hablando solos.
-Eiji: (muy serio, raro de él) Momoshiro, déjalo, tiene que pensar.
-Momoshiro: Desde cuando eres tan serio?
-Eiji: Mira, si lo dejamos pensar, lo obligaremos a que nos lo diga mañana (sonriendo victorioso)
-Momoshiro: (con al típica gota en al cabeza) Nunca cambiarás…
Ryoma había caminado muy rápido al principio, por el temor de encontrase con otro alumno de Seigaku, no tenía ganas de hablar; pero disminuyo su marcha con la disminución de los rayos del sol. Ya no se veía ese bello atardecer, ahora ya estaba casi todo oscuro; todo estaba muy callado en el camino a casa. Ryoma estaba muy callado. Al entrar a su casa, Karupin salto a sus brazos, mas Ryoma no estaba pendiente de él. Cuando iba a subir a su habitación, su padre lo detuvo, como siempre.
-Nanjiroh Echizen: Oye, porque llegas tarde jovencito?
-Ryoma: Por nada
-Nanjiroh: No me digas que tuvistes una cita?
-Ryoma: (nervioso, recordando lo que había pasado) Eh…claro…que…no…papá…
-Nanjiroh: Entonces, porque te pones nervioso?
-Ryoma: Por nada. Mejor me voy.
-Nanjiroh: Ya es hora de que dejes de ser un niño y crezcas.
-Ryoma: (subiendo las escaleras) Aún soy joven…
Ryoma no sabía que estaba diciendo; él afirma que no lo interesa el tema, pero no puede dejar de pensar en Sakuno. Ahora su mente estaba más confundida que al comienzo; será que él la necesita, Ryoma Echizen nunca dependió de alguien, siempre trató de ser lo más independiente posible. Su vida era el tenis, pero desde que había oído esa declaración no había podido volver a tomar una raqueta sin ponerse nervioso; de pensar en ella.
Sakuno a duras penas había logrado llegar a su casa; pero se sentía feliz. Subió a su habitación y se tendió en su cama. Ella seguía nerviosa por lo que había ocurrido, pero lo que más le preocupaba era la extraña reacción de Ryoma; ella siempre pensó que en una situación así, el chico más frío de Seigaku, haría cualquier cosa para sacársela de encima, pero no, Ryoma se quedo mirándola con sus ojos de gato, pero no con sus ojos fríos e indiferentes de siempre, sino con unos ojos tan acogedores y alegres que ni siquiera ella pensó que existieran. Esa mirada fue para ella, solo para ella. Definitivamente Ryoma no estaba normal, pero, porque cambio su forma de ser en ese momento, acaso ella era algo importante para él, eran muchas preguntas sin respuesta que se formulaban en su mente; el problema era como resolverlas. Sakuno siempre pensó en que tal vez Ryoma podría pensar en ella, pero nunca estuvo segura; ahora sus pensamientos no la dejarían en paz, debía encontrar una forma de resolver este dilema.
La única forma de resolverlo era que él le digiera la verdad; fuera dura o no.
Ryoma ya estaba totalmente seguro; debía aclarar ciertos sentimientos que en este último tiempo estaban invadiendo su ser. La única forma de hacerlo era hablando con al causante; debía hablar con ella. Ryoma muy nervioso e indeciso tomo su teléfono y marco el número telefónico de Sakuno; esperando de que contestara ella, solo ella.
-Sakuno: Hola, quién es?
-Ryoma: Eh… Hola Sakuno…
-Sakuno: Ryoma? Eres tu?
-Ryoma: Si… eh, Sakuno…
-Sakuno: Si?
-Ryoma: Necesito hablar contigo, puedes mañana?
-Sakuno: Eh, si, claro…donde?
-Ryoma: Yo te voy a buscar…
-Sakuno: Me viene a buscar? (un poco indecisa) a que hora?
-Ryoma: Puedes a las 5 (pm)?
-Sakuno: Si, claro…
-Ryoma: Perfecto, eh… bye.
-Sakuno: Bye (y Sakuno cortó)
-Ryoma: (ya más tranquilizado) Buenas noches Sakuno.
-Sakuno: Buenas noches Ryoma.
Bueno, aquí esta el Cap. 5; espero que les guste; se acerca el final XD;xau.