Capítulo 2
Tentaciones no me Sobran
Viernes por la tarde.
Rin está con Sesshoumaru tratando de entender la escritura de un estudiante, cada vez que levantaba la mirada, se encontraba extrañamente más cercana a él. En unas pocas semanas la distancia personal se había reducido a poco menos de dos milímetros. Rin se apartó aparatosamente cuando sintió que alguien abría la puerta.
-Disculpe profesor Youkai, Rin Ikegami está aquí?
Sesshoumaru, con toda su calma que lo caracteriza apuntó con el lápiz hacia la despistada estudiante que trataba de mantener el equilibrio.
-Sí, soy yo…
-Su madre llamó y le dejó un mensaje…
-Sí? Oh no!
Juro estaba tras la muchacha.
-Nee-chan!
Rin se llevó las manos a la cabeza.
-Juro!
-Prometo portarme bien…
-Youkai-sensee…
-Sí, está bien.
A la hora de marcharse. Rin llevaba a Juro, que se negaba a despertar en brazos.
-Hasta mañana, sensee.
-Ven, te llevaré a tu casa.
-Pero es que Juro…
-Tengo auto.
-Está bien.
En el auto.
-Sabes? Voy a ver a tu prima, quieres ir?
-A Kagome?
-Sí. Está interna, lo sabías?
-Sí… lo que pasa es que la familia, le dio la espalda…
-Por qué?
-Kagome es sólo un año mayor que yo. Son muy cerrados y no entienden que Kagome e Inuyasha se aman. Nada de lo que hagan los separará, y menos ahora que Kagome tendrá gemelos.
-Pero porqué se oponen tanto? Mi hermano y ella son felices, ella ya se graduó y mi hermano le prometió que iría a la universidad. Odio admitirlo, pero él es responsable.
-No lo sé.
-Y tú? Te encuentras en esa situación?
-Nah! Mi mamá era más joven que Kagome cuando conoció a mi papá. Digamos que Kagome es la misma historia, diferentes edades.
Entraron a la habitación de Kagome, y ambas se emocionaron al verse, Rin se le acercó y la abrazó.
-Rin! Qué bien te ves!
-Yo? Tu estás… qué grande!
-Son dos… Y ese es Juro?
-Sí.
Rin lo cargó a la altura de Kagome.
-Juro, recuerdas a Kagome?
-Sí. Vas a tener un bebé?
-Dos.
-Dos! Regálale uno a Rin!
Todos rieron ante la ocurrencia de Juro.
-Te prometo que para cuando tengas… 12 yo ya tendré uno mío…
-(Espero que sea mío también… Pero… en qué rayos estoy pensando! Es mi alumna!)
Rin sonreía y Sesshoumaru sentía cierta calidez en su pecho.
-(Si Sara pudiera leer la mente me mataría… yo fantaseando con una chiquilla…)
Inuyasha entró en la habitación y se sorprendió al ver tanto público.
-Sesshoumaru…
-Inuyasha…
-Inu, recuerdas a Rin?
-Sí, claro. Hola… ese es tu hermanito?
-Sí.
-Vaya! Pero qué grande está!
-Inu… me trajiste mi helado?
-Sí, aquí está.
Inuyasha le dio el helado y la besó en la mejilla.
-Y cuando das a luz?
-Pues creo que para el fin de mes…
-Qué bien!
-Te diré algo, los amo desde que lo supe, los adoro! Pero ya los quiero fuera de mí!
Todos rieron.
-No creas que es fácil estar dos meses acostada.
-Me lo imagino. Kami, mira la hora… me tengo que ir! Kagome, prometo volver pronto, pero ya se me hizo tarde…
-Te llevaré. Kagome, te ves encantadora, como siempre…
-Gracias.
Después de despedirse, Sesshoumaru llevó a Rin a su casa. Su madre estaba parada afuera y fue a su encuentro tan pronto la vio bajar del auto.
-Rin!
-Gomen, mamá…
-Dónde estabas? Casi llamo a tu padre!
Sesshoumaru bajó del auto.
-Disculpe señora Ikegami…
-Y usted es? Rin qué hacías en le auto de este hombre?
-Mamá!
-Yo soy el profesor Youkai, profesor de cálculos…
-Mamá, te dije que soy su asistente por las tardes.
-Pero es que te tardaste tanto… Y Juro…
Rin estaba roja de la vergüenza. Cargó a Juro y con una pequeña inclinación se despidió de Sesshoumaru.
-Shitsureshimasu, sensee…
Entró corriendo a la casa y se encerró en su habitación. Juro le tocaba la puerta para que lo dejara entrar.
-Nee-chan! Abre!
Rin le abrió la puerta y se sentó en su cama.
-Porqué nee-chan llora?
-No lo entenderías.
-Dime! Porqué nee-chan llora?
-Porque mamá me hizo pasar vergüenza.
-Vergüenza? Qué es eso? Se come?
Rin sonrió y lo besó en la frente.
-No, no se come… es cuando te sientes mal porque pasó algo que te hace ver mal.
-Si no se come no sirve. Así que porqué la tienes?
Rin rió, en parte, su hermanito tenía razón. La vergüenza no servía para nada.
-Nee-chan te ves más linda cuando ríes.
-Oye Juro, como que andas muy sabio de repente!
Rin lo cargó y le comenzó a hacer cosquillas, ambos reían. El padre de Rin se apoyó del umbral de la puerta.
-A mí no me parece que estés tan apenada.
-Papá!
Juro corrió a él, lo cargó y se sentó al lado de Rin.
-Cómo está mi niña?
-No sé, aquí no hay ninguna niña.
El padre rió.
-Me quieres decir qué pasó? La verdad.
-No me castigarás?
-Te perdonaré esta vez.
-Fuimos a ver a Kagome… a mi no me importa lo que su papá piense porque Kagome es mi prima, crecimos juntas y ella e Inuyasha se aman y…
-Rin, respira.
-En fin, diga lo que diga su familia, no dejaré de verla. Es como la hermana que nunca tuve… tu sabes lo que es papá, mamá y tu pasaron por lo mismo…
-Mira, el hecho de que hayas ido a ver a Kagome, no me molesta, pero sí que no le hayas a avisado a tu mamá…
-Pero no era para que me gritara frente al profesor…
-Y cómo la localizaste? Ryouga se niega darme el teléfono.
-Mi profesor es su cuñado, él me llevó al hospital…
-Hospital? Está bien?
-Sí. Lo que pasa es que son gemelos y ha tenido varias amenazas de parto prematuro. Dice que quizás para este fin de mes da a luz…
-Kami!
-Le podemos comprar un regalo? Verdad que sí?
-Yo no, pero tú sí.
-Porqué tu no?
-Mira, mi hermano es un caso aparte y no quiero romper la "armonía". Pero no veo ningún problema en que ustedes se vean.
-Gracias!
Rin lo abrazó y lo besó en la mejilla.
-Qué bien, porque le prometí ayudarla cuando los bebés nazcan.
-Sólo avisa la próxima vez que te vallas a tardar.
-En ese caso, necesitaré un celular, para poder llamarte no importa qué.
El padre de Rin rió.
-Está bien, te compraré un celular.
-Gracias!
-Prepárate para la cena…
-Papá. Rin me dijo que va a tener un bebé…
-Rin…
-Le dije que cuando cumpla 12. De aquí a ese entonces, si no lo hago, seré una solterona, sola y amargada.
El padre de Rin rió.
-Qué ocurrencias las tuyas.
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Sesshoumaru estaba en su apartamento, tenía un trago en las manos. Escuchó la puerta abrirse y no se inmutó. Una mujer de pelo negro, largo a media espalda y espectaculares curvas.
-Hola, cariño…
-Hola.
-Oye! Sé que eres frío, pero te pasaste!
-Quién te dio las llaves?
-Tu hermano…
Se sentó en sus piernas de frente a él y le quitó el trago de las manos, vio que estaba casi vacío y adivinó que no era el primero.
……………………………………………
-Sesshoumaru…
Sesshoumaru estaba sentado, sólo la sábana cubría su hombría, la mujer se acomodó a su lado.
-(No es igual… Kami, no sentí nada…)
-Sesshoumaru… estuviste genial…
-Sí?
-Increíble…
-Estoy cansado. Buenas noches.
XXXXXXXXXXXXX
El director entró en el aula de clases.
-Chicos, el director tiene un mensaje para ustedes.
El director vio la pizarra del aula llena de cálculos.
-Youkai… no cree que es demasiado?
-Es sólo un repaso.
-Bueno. Chicos, todo está listo para el paseo.
-Entonces iremos al mar?
-Sí…
Todos los alumnos armaron un escándalo.
-Calma! Se les entregará un consentimiento que deberán regresar firmados por sus padres. El que no lo traiga, no irá.
En la tarde, Rin estaba terminando de corregir su lote de exámenes.
-Profesor, se siente bien?
-Eh? Sí…
-No lo parece, no ha corregido más de dos exámenes.
-Creo que estoy demasiado cansado como para continuar. Vamos a dejarlo así por hoy.
-Está bien…
-Por cierto, felicidades.
-Ah? Por qué?
-Tu examen, 10 de 10.
-De verdad?
-Sí, esperabas menos?
-Pues no estaba segura si el ángulo estaba correcto… gracias.
Estaban saliendo del salón, cuando Rin resbaló. Juraba que se iba a partir el alma cuando cayera y cerró los ojos esperando lo peor, pero el golpe nunca llegó. A cambio sintió algo cálido y suave rodearla. Cuando abrió los ojos y se vio rodeada por aquellos fuertes y musculosos brazos y recostada en sus bien definidos pectorales, sintió desmayarse. Sesshoumaru vio aterrado cómo el color abandonaba su rostro y pensó que quizás sí se había golpeado.
-Rin! Rin! Pequeña…
Sesshoumaru la cargó y la llevó a la enfermería. Rin volvió en sí al no sentir más aquella calidez. Abrió los ojos para encontrarse con una profunda mirada ambarina que examinaba sus facciones casi idiotizado.
-Qué pena con usted, sensee!
Rin trató de levantarse, pero Sesshoumaru se lo impidió.
-Ya estoy bien…
-Estás segura?
-Sí… (Está comprobado, no hay nada mejor que despertar a tu lado).
-Te llevaré a tu casa…
Rin se levantó de golpe y sus frentes chocaron.
-OW!
-Ouch! Lo siento, sensee…
-Estás bien?
-Sí. Y usted?
-Yo… estoy- b-b…
Sesshoumaru se quedó idiotizado al verla directo a los ojos. Ninguno pudo moverse. El iba a decir algo y sin saber cómo ni por qué Rin lo besó. Sentía la sangre arder y apoderarse de su rostro y más al sentirlo responderle el beso y rodearla con sus brazos. Rompieron el beso y Sesshoumaru acarició sus mejillas con los ojos cerrados. Luego aterrizó en la realidad.
-Rin… Kami… sabes que esto no se puede repetir…
-Sólo dime si fue tan maravilloso para ti como para mí, y así mi vida dejará de ser tan patética sólo por un segundo.
-No hablamos de patéticos…
-Simplemente dime si sentiste volar y derretirte entre…
Rin tomó un poco de aire y se calmó.
-No se preocupe, profesor Youkai, nadie sabrá nunca…
Rin se sentó y trató de ponerse de pie, pero Sesshoumaru la besó, con cierto sentimiento de posesión.
-Sensee…
-Cuando estemos solos, llámame por mi nombre. Pero… no! Kami, esto es un error!
-Un error? Tú me besaste!
-Yo no te besé! Nos besamos… los dos…
-Quizás, sí, fue un error. Fue un error que yo me…
-No se puede…
-Qué me importa a mí lo que se pueda o no! Toda mi vida me la he pasado obedeciendo y haciendo lo que los demás dicen…
Sesshoumaru sonrió, era posible que su edad fuera corta. Pero fuera de eso, Rin era toda una mujer.
-Por qué sonríes como un idiota?
-Porque me vuelves loco… esto es lo que haremos. Esperaremos a que cumplas la mayoría de edad…
-Eso es en un mes.
-Entonces esperaremos un mes. Y si en un mes sientes lo mismo que sentiste hoy, pelearé por ti.
-Es una promesa?
-Sólo si sientes lo mismo que yo.
-Y qué es lo que sientes?
Sesshoumaru sonrió y la besó.
-Un mes?
-Un mes… además… hay cosas que debo atender y un mes es tiempo suficiente.
-Tienes novia?
-Pues tengo una relación…
-Entonces desde ahora te digo que no quiero nada contigo. No me pondré en el medio de nadie…
Sesshoumaru selló sus labios con un beso.
-Rin, sé lo que hago. De igual manera voy a romper con ella, conociéndote o sin conocerte.
-Y por qué no lo hiciste antes?
-Porque estaba de viaje y no soy tan patán como para cortarla por teléfono.
-No… no quiero…
-Pequeña, quiero que sepas que me tienes desde la primera vez que te vi. Con decirte que me vuelve loco la idea de verte todos los días y no poder hacer nada.
-Un mes…
-Dime cómo se supone que voy a vivir un mes sin volverte a besar?
-Me gustas desde que te vi… me sentí estúpida enamorándome de mi profesor…
-Si después de tu cumpleaños, seguimos así… pelearé por ti pequeña…
Rin asintió y Sesshoumaru la besó en la mejilla.
-Vamos, se te hace tarde.
Luego de dejarla en su casa, Sesshoumaru fue a su apartamento y se encontró con la mujer de la otra vez.
-Hola, cariño…
-Qué haces aquí? Creí haberte quitado las llaves…
-Sessh…
-No me digas así.
-Sesshoumaru, estás muy distanciado y yo…
-Te di un mes… Sara, esto no va a ninguna parte y creo que es mejor que terminemos…
-Qué?
-Lo siento, pero ya no siento lo mismo…
-P-pero…
-Lo siento…
Sara le soltó sonora cachetada y Sesshoumaru sintió como si se quitaba un peso de encima.
-Es mejor así… no quiero herirte…
-No quieres herirme? No quieres herirme!
-No, no quiero herirte, hacerte creer una cosa que no es. Esta es la verdad, esto es lo que hay ahora…
-Hay otra mujer, verdad?
-No, no hay nadie. Cuándo comencé a distanciarme? Tengo tres meses esperando que te cansaras de mí. No hay nadie más…
Sara lo besó, pero Sesshoumaru la tomó por los hombros.
-Sara… ya no… no sigas…
-Estúpido!
Volvió a abofetearlo antes de marcharse. Sesshoumaru se quedó sentado en la sala con un trago en las manos.
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Rin y Sesshoumaru estaban preparando las notas en el registro, cruzaban miradas y sonreían.
-Sensee…
-Rin…
-Sesshoumaru, ésta calificación está mal.
-Sí? Qué tiene?
-Le sobran puntos…
-Cómo que le sobra?
-Sí. Tiene como 5 puntos de más.
Rin se acercó a Sesshoumaru para mostrarle el examen y Sesshoumaru la haló por la cintura y la besó en el cuello.
-Cuánto tiempo falta?
-Dos semanas.
-Creo que me voy a morir.
-Yo también estoy así. Pero tú dijiste un mes…
-Sabes qué? Si nos descubren, me despiden y a ti te expulsan. De que me despidan, no me importa, pero que te expulsen…
-Tampoco me importa… pero mejor me sueltas.
-Porqué?
-Porque creo que escuché pasos.
Sesshoumaru la soltó casi de inmediato. Rin sonrió. Y se apartó de él, no sin antes darle un beso en la mejilla.
-Sabes algo? Cada vez que te tengo cerca, escucho una vocecita en mi cabeza que dice que todo está mal. Pero la verdad es que dejé de escuchar esa voz cuando le entregué la presidencia a Inuyasha.
Rin sonrió.
-Sabes qué? Le voy a preguntar a Inuyasha de tus novias. Creo que eso me ayudará a decidir…
-Si le preguntas a Inuyasha, le pregunto a Kagome sobre ti.
-Puedes preguntarle lo que quieras. Yo no tengo cola que me pisen.
-Yo tampoco. Cámbiale la calificación a ese examen.
-Sí, lo haré…
Hubo un silencio mientras corregían. Continuaban las miradas cómplices hasta que tocaron la puerta. Sesshoumaru volvió a sus papeles, y Rin fue a abrir la puerta. Un apuesto joven, compañero de clases de Rin.
-Ikegami-san…
-Shippo-kun, olvidaste algo?
-P-puedo hablar contigo?
Rin vio a Sesshoumaru que asintió con un ademán de sus manos. Rin y Shippo salieron del salón, pero Rin no cerró la puerta por completo.
-Pasa algo?
-I-Ikegami…
-Por favor, llámame Rin.
-Rin… quisiera saber si… quieres salir conmigo?
Al Sesshoumaru escuchar esto, rompió el lápiz que estaba utilizando. Al darse cuenta de esto, lo tiró a la basura y tomó otro. Rin afuera, no reaccionaba.
-Rin-chan…
-Eh? Ah!
-Saldrás conmigo?
-En una cita?
-Sí…
Sesshoumaru volvió a romper el lápiz.
-Está bien.
-Perfecto, qué tal el viernes?
-Er- no, yo te avisaré. Tengo que pedir permiso a mis padres. Pero veré si puedo para el viernes.
-Bien, hasta mañana…
Rin estaba paralizada a sentir los labios de Shippo sobre su mejilla. Shippo sonrió al verla sonrojada.
-Hasta mañana!
Shippo se alejó corriendo y con una gran sonrisa. Rin entró al aula para encontrarse con un Sesshoumaru rojo de la ira y verlo romper el séptimo lápiz.
-Pasa algo?
-Vas a salir con ese mequetrefe?
-Si acaso tú y yo tenemos algo, no se puede saber…
-Así que tendrás dos novios? Tú si puedes tener dos novios, pero yo no?
-Bueno, si tú quieres un NOVIO, eres libre de tenerlo.
-Pero yo quiero… Hey! Respeto a tus mayores.
Rin rió.
-La verdad, es que… bueno, antes de conocerte yo… bueno, pues Shippo me gusta mucho…
-No quiero saber nada.
Rin sonrió y lo beso en la mejilla.
-Estoy segura de lo que siento… pero debemos guardar apariencias. O no?
-Estás pasando demasiado tiempo conmigo. Ya hablas como yo. Y lo que me aterra es que tienes razón.
-Saldré con él…
-Si te toca, lo mato.
-Y eso por qué?
-Porque tú eres sólo mía.
Sesshoumaru la iba a besar cuando Rin se apartó rápidamente, justo a tiempo antes de que abrieran la puerta. Era el director.
-Youkai, lo llama su hermano. Dijo que encienda el celular.
Sesshoumaru buscó en su bolsillo y encendió el aparato, que apenas hizo entrar en servicio para que comenzara a sonar.
-Dime…
-Kagome está en labor de parto…
-Voy para allá…
Sesshoumaru cerró la llamada y se levantó de prisa.
-Ikegami, nos vamos.
-Qué pasó?
-Kagome está en labor de parto.
-Y por qué la joven debe acompañarlo?
-Porque su cuñada es mi prima.
Rin llamó a su papá y le dijo dónde estaría. Ya en el hospital esperaban deseosos las buenas nuevas. Inuyasha estaba en la sala de partos. El doctor le indicaba lo que iba a hacer y comenzó a hacer la incisión. En pocos minutos tenían al primer bebé fuera. Inuyasha sostenía su mano y la besaba en la frente.
-Es un varón!
-Es un varón, mi amor, tenemos un varón…
Aún a través de la mascarilla, se notaba la felicidad de Inuyasha, sus ojos brillaban de la emoción y de la alegría y más aún cuando lo escuchó llorar. Prueba fehaciente de su bienestar.
-Es una hembra!
La alegría de Inuyasha no pudo ser mayor, pero entonces no hubo llanto, sólo una decena de doctores alrededor de su pequeña hija.
-Inu… qué pasa?
-Es preciosa, mi amor… como tú…
-Porqué no llora?
-Todo está bien, mi amor… todo está bien…
La niña comenzó a llorar e Inuyasha lo hizo de la misma manera. Más tarde, le pasaron los bebés a Inuyasha que los cargó cerca de Kagome.
-Son hermosos, amor... qué nombre les pondremos?
-Akina… y Yusuke…
Inuyasha sonrió y los besó en la frente a cada uno.
-Akina y Yusuke Youkai… nuestros hijos…
Inuyasha aún se encontraba con Kagome en recuperación, cuando llevaron a los bebés a la sala de recién nacidos. Sesshoumaru los señaló a través del vidrio y la enfermera se los acercó. Rin se apoyó en su pecho para poder contener toda la emoción de ver a sus "sobrinitos". Sesshoumaru la abrazó y la besó en la sien.
Inuyasha besaba a Kagome sin darle descanso susurrándole cuánto la amaba.
-Te amo, mi amor, eres perfecta.
……………………
N/A: Qué tal? Espero que la espera haya valido la pena. Trataré de publicar mas seguido, pero es que ni se imaginan la cantidad de cosas que se me ocurren y claro esta, solo puedo elegir una.
Gracias a Ceci, por brindarme siempre su apoyo. (y por mantenerme despierta)
Lou, te prometo que a la próxima si te hago caso.
Mary, feliz cumpleaños, amiguis! Que la pases super bien!
Eli, grax por tus prácticos consejos :P quizás una de las ideas quem e diste las use aquí.
Michiyo, guiliana, Lig, Miram, IrIs-OdY, FENIXGIRL, Galatea 597, Aridna-chan, Saya, Cristy-girl, varina-saku, KaoZerganN, Keyg, Kagi35, Fabisa, Linli-chan, Dense, Inusesshogirl, y por último pero no en importancia, Syren888.
Bueno, me despido de ustedes con un gran beso y un abrazote y espero que les haya gustado el cap. Sean sinceras por favor. Quiro muchos reviews! A ver si me animo a seguir! (claro que lo hare, pero los reviews me inspiran).
Mizuho